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La catequesis es fundamental para la educación en la fe. Ser catequista requiere estar unido a Cristo a través de la oración y el testimonio de vida, para poder encender la fe en los demás. También requiere salir de uno mismo para encontrar a los demás en nombre de Cristo, especialmente a aquellos en la periferia. Los catequistas deben ser creativos y no tener miedo de llevar el evangelio a todos los lugares, confiando en que Cristo siempre los precede.
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muy buen elemento para aquellos que emprenden un trabajo para los educadores
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La Catequesis Es Un Pilar Maestro Para La Educación de La Fe
La catequesis es fundamental para la educación en la fe. Ser catequista requiere estar unido a Cristo a través de la oración y el testimonio de vida, para poder encender la fe en los demás. También requiere salir de uno mismo para encontrar a los demás en nombre de Cristo, especialmente a aquellos en la periferia. Los catequistas deben ser creativos y no tener miedo de llevar el evangelio a todos los lugares, confiando en que Cristo siempre los precede.
La catequesis es fundamental para la educación en la fe. Ser catequista requiere estar unido a Cristo a través de la oración y el testimonio de vida, para poder encender la fe en los demás. También requiere salir de uno mismo para encontrar a los demás en nombre de Cristo, especialmente a aquellos en la periferia. Los catequistas deben ser creativos y no tener miedo de llevar el evangelio a todos los lugares, confiando en que Cristo siempre los precede.
La catequesis es un pilar maestro para la educacin de la fe, y hacen falta
buenos catequistas. Pues es la mejor herencia que podemos dejar es la fe.
Educar en la fe es una bella aventura: construye la iglesia. ser catequista no trabajar como catequistas; uno trabaja como catequista porque le gusta la enseanza; ser catequista esta es la vocacin. Siendo catequista se gua con las palabras y con la vida. Significa dar testimonio de la fe. que l gente vea en tu vida el evangelio. No debemos olvidar que el swr catequista requiere de amor cada vez mas intenso a Cristo. Hablare de 3 cosas: 1. Caminar desde Cristo significa tener familiaridad con l, Jess insiste sobre esto a sus dicipulos: permanezcan en mi amor, permanezcan unidos a m, como el sarmiento esta unido a la vid. Si estamos unidos a l podemos dar fruto. Permanecer en Jess se trata de permanecer unidos a l, dentro de el, con el, hablando con l. Pues para un discpulo lo primero es estar con el maestro, escucharlo y aprender de l. El ser catequista no es un titulo, es una actitud, es estar con Jess, y es algo que dura toda la vida, se trata de estar en su presencia y no solo eso sino dejarse mirar por el, porque l nos mira, y eso, es una manera de rezar. La certeza de que el te mira es algo que supera por mucho al ttulo de catequista; esto mantiene encendido el fuego de la amistad con el seor, pues de verdad te mira, y mas aun, esta cerca de ti y te ama!. Siendo catequista hay algo que siempre debes tener muy claro en todo tu ser, si en nuestros corazones no est el calor de Dios, de su amor y de su ternura Cmo podramos nosotros, unos pobres pecadores, encender en los dems la llama de la fe, en el corazn de los dems? 2. Caminar desde Cristo, significa salir de si para ir al encuentro del otro, para lo cual tenemos que poner a Cristo en el centro de nuestra vida, puesto que entre mas te unes a Jess el se va convirtiendo en el centro de tu vida y te va haciendo salir de ti mismo. Este es el verdadero dinamismo del amor. Si permanecemos unidos a Cristo el nos har entrar en la dinmica del amor, y es ah donde hay verdadera vida, una verdadera vida en Cristo; uno se va abriendo mas al otro, y va saliendo se si para ir al encuentro con el otro en el nombre de Cristo. Esta es la tarea del catequista: salir constantemente de si, por amor, para dar testimonio de Jess y hablar de el. El corazn del catequista vive siempre este movimiento de unin con Jess y encuentro con el otro; si falta uno de estos dos movimientos, el catequista ya no late, ya no vive. El catequista es conciente de haber recibido un Don, el maravillso Don de la Fe, y lo da como Don a los otros. El catequista debe encontrarse ah en ese intercambio del Don. La naturaleza del kerigma es asi: es un Don que genera la misin, que empuja siempre mas alla de uno mismo. San Pablo deca: el amor de Cristo nos apremia que tambin puede interpretarse como un nos posee. El amor es algo que te atrae y luego
te enva a compartir ese mismo amor, aqu es donde se mueve el
corazn del cristiano, en especial el corazn del catequista. 3. Caminar desde cristo significa no tener miedo de ir con el alas periferias, es no tener miedo de salir de nuestros esquemas para seguir a dios, porque Dios siempre va mas all es decir mas all de nuestros esquemas que Dios no tiene miedo a las periferias, ah lo encontraras porque el siempre es fiel l es creativo. Un catequista qe no es creativo no se entiende catequista. La creatividad es como la columna vertebral del catequista. Dios es creativo no est encerrado por eso no es rgido, nos acoge sale a nuestro encuentro, nos comprende para ser fieles para ser creativos. Hay que saber cambiar para adecuarme a las circunstancias en las que tengo que anunciar el evangelio para permanecer con dios, hay que saber cmo salir y no tener miedo de hacerlo, si un catequista se deja vencer por el temor, si se queda imparable termina siendo una estatua en un museo y de esos hay muchos. Un catequista que se arriesga que se atreve a correr el riesgo de salir esos son los que preferira porque son los que sean prefiero una iglesia accidentada que una iglesia enferma. Jess dice: vayan, yo estoy con ustedes aqu esta nuestra belleza y nuestra fuerza esto quiere decir que si salimos a llevar su evangelio con amor, con verdadero espritu apostlico, con parresia el camina con nosotros nos procede ( en la biblia dice que el seor dice: yo soy como soy la flor del almendro porque es la primera que florece en primavera esta l siempre primero, el es primero ) Dios siempre nos procede cuando pensamos que vamos lejos a una extrema preferida y tal vez tenemos un poco de miedo. En realidad el ya est all, Jess nos espera en el corazn de aquel hermano. Tratemos de ser cada vez ms uno con l: sigmoslo, imitmoslo en su movimiento de amor, en su salir al encuentro del hombre y vamos abramos las puertas, tengamos la audacia de trazar nuevos caminos para el anuncio del evangelio.