siempre preguntamos, y aunque la una signifca la negacin de la otra, ambas estn relacionadas
ambas trastocan la esencia misma de nuestra
existencia, y nos lanzan a una bsqueda que encuentra en la flosofa, o en la religin, las respuestas defnitivas: por qu vine al mundo si yo no eleg vivir?, y por qu he de morir si no quiero que eso ocurra? Pero entre estos dos hechos: vida y muerte, sta ltima es la que se reviste de mayor rigurosidad. Sabemos (porque nos han contado) y conocemos (porque lo hemos visto) que el hecho del nacimiento generalmente est acompaado de alegra, ternura, celebracin, aunque en casos muy raros esto no sea as. La muerte, es algo que en todo momento, nos inspira a pensar en nuestra vida . Si estuvisemos en la capacidad de encontrarle a la muerte un mejor signifcado, estoy segura que le encontraramos una nueva perspectiva para nuestra vivencia El pensar en la muerte propia y el de otras personas, ya sean familiares muy allegados, lejanos, la muerte de nuestros amigos y hasta de personas que no conocemos, nos producen un impacto profundo en nuestra propia vida,