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La esperanza causa en nosotros el deseo del cielo y de la posesión de Dios: “Esperar es tener
entre las manos cuanto esperas, confiado en Él; es oler la flor en lejanía y paladear el fruto con-
cebido”. Vivimos tiempos en que esta virtud está muy a la baja, pues solo se valora lo inmedia-
to, la ganancia a ojos vista; pero esperar y esperar en el Señor parece no tener sentido, y sin
embargo “vivir es esperar y gozar de lo que esperas”.
Y he aquí que la Eucaristía es un adelanto de los bienes del cielo, pues es el Pan bajado del
Cielo, Cristo el Pan de la Vida: “Yo soy el pan vivo bajado del cielo. Si uno come de este pan
vivirá para siempre; y el pan que yo le voy a dar, es mi carne para la vida del mundo... el que
come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna y yo le resucitaré en el último día” (Ju. 6, 51
y 54) En la Eucaristía pueden colmarse nuestros deseos de Dios y nuestras ansias de vida
eterna.
Además la Eucaristía fortalece nuestra esperanza, despierta el deseo de Dios y contiene en sí
todas las promesas de Salvación. Mientras se celebre la Misa y la Hostia Santa se mantenga en
nuestros Sagrarios, Dios habita entre nosotros, nos mira y nos anima a seguir esperando con la
seguridad y el gozo de tenerle ya.
Y como el ejemplo vale más que las palabras mismas os voy a trascribir el testimonio del
Cardenal Nguyen van Thuan, vietnamita, encarcelado durante trece años y nueve de ellos en
aislamiento total. Él encontró en la Eucaristía la fuente de esperanza y la fuerza para seguir espe-
rando:
“He pasado nueve años aislado. Durante ese tiempo celebro la misa todos los días hacia las
tres de la tarde, la hora en que Jesús estaba agonizando en la cruz. Estoy solo, puedo cantar mi
misa como quiera, en latín, francés, vietnamita... Llevo siempre conmigo la bolsita que contie-
ne el Santísimo Sacramento: “Tú en mí, y yo en Ti”. Han sido las misas más bellas de mi vida.
Por la noche, entre las nueve y las diez, realizo una hora de adoración... A pesar del ruido del
altavoz que dura desde las cinco de la mañana hasta las once y media de la noche. Siento una
singular paz de espíritu y de corazón, el gozo y la serenidad de la compañía de Jesús, de María
y de José”. “Sí, la Eucaristía es prenda y fuente de esperanza. Señor, ahora soy feliz de aceptar
todo de tus manos: Todas las tristezas, los sufrimientos, las angustias, hasta mi misma muerte.
Amén”.
Antonio Aranda Calvo
Núm. 1.008 BOLETÍN EUCARÍSTICO 3
Un ser vivo. Al ver a Cristo Resucitado por primera vez, los Apóstoles
dudaron, se llenaron de temor; creyeron ver un fantasma. Dudaron, sin acor-
darse de las palabras que el Señor les había hablado: “Al tercer día resucitaré”.
La Resurrección. La Presencia Real Sacramental de Cristo en la
Eucaristía más que signo, es manifestación de su Resurrección. Es Cristo vivo
que se nos da como alimento - “Quien come mi carne, y bebe mi sangre,
tiene vida eterna y yo lo resucitaré en el último día” (Juan 6,54)-, porque al
“comerlo” nos está dando ya su “vida eterna”. “Quien como este pan vivirá
eternamente” (Juan 6,58).
Para confortar la fe de los Apóstoles, Jesucristo les dijo que le dieran
de comer. Un fantasma no come, y aunque el cuerpo glorioso tampoco nece-
sita ningún alimento, les pidió pan para que le reconocieran como un ser
vivo. Santo Tomás necesitó ver y palpar las llagas en el costado y en las manos
de Jesús; y sólo después confesó su fe.
- “Señor mío, y Dios mío”-
Así el cristiano ante la Eucaristía ha de exclamar: “-Señor,
¡Auméntame la Fe!”
La Resurrección es la “más verdadera Verdad”, la Verdad más plena
de contenido. Cristo dijo de sí mismo: “Yo soy el Camino, la Verdad, la
Vida”.
Al encarnarse es ya Camino; al resucitar, manifiesta la plenitud de ser
Verdad; al hacerse Eucaristía, alimento que nos acompaña a lo largo de nues-
4 BOLETÍN EUCARÍSTICO Núm. 1.008
tra vida, nos descubre que es la Vida, Vida Eterna. Vida que nos adelanta y,
a la vez, siembra en nosotros la Vida Eterna.
“Resurrección”. Es ya la palabra de vida eterna. Cristo en la
Eucaristía, Cristo Resucitado en la Palabra Eterna que vive en medio de
nosotros. Ninguna Verdad más verdadera.
Ante la Eucaristía; adorando, aprendemos a “escuchar” también el
latir del Corazón de Cristo que anhela “que todos los hombres se salven y lle-
guen al conocimiento de la Verdad”. Que le conozcan.
La Fe nos llega por la palabra oída. Ante el Sagrario, es la misma
Palabra quien habla; la misma Palabra de Dios a Quien oímos. La Eucaristía
es Cristo Resucitado, y por tanto Vida Eterna. El Cielo es Cristo. Y en la
Eucaristía es el mismo Cristo que viene a convertirnos a nosotros en su cielo.
Fe en la Resurrección que no se asienta ni en la imaginación, ni en el
sentimiento, ni en la emoción. Fe que toma posesión del centro de nuestra
alma, y nos mueve a exclamar, con María Magdalena: “Rabbuni; Maestro”.
Hace ya siglos que los cristianos encendemos una lámpara, una vela,
para anunciar que Cristo está en el Sagrario. Una lámpara que no permiti-
mos que se apague nunca, que se vea claramente apenas entra en el templo,
y nos ayude a llegar al encuentro con Cristo.
La Fe viva en nuestro corazón, en nuestra inteligencia, es la mejor
lámpara que Cristo tiene en la tierra; la lámpara que transmite más, y mejor,
la luz de su Presencia.
CUESTIONARIO ____________________________________
F e Fi r m e
Al hablar de la fe, nos situamos en el centro de la diana y en el mismo corazón
de nuestra piedad cristiana. Porque como sea nuestra fe, así será nuestra con-
ducta como discípulos de Jesús. El adorador es una persona de fe y de ella pro-
cura vivir. Necesitamos una fe bien cimentada que no se confunda jamás con
sentimentalismos pasajeros. Fe como virtud sobrenatural infusa. Fe viva demos-
trada con obras que arde e ilumina, que orienta y unifica todas las facultades del
hombre en una actitud compacta. La fe es el secreto oculto -y a la vez radiante-
de las almas grandes. No podemos rezar el Credo como se lee un catálogo a un
listín de direcciones.
Los símbolos de la fe más antiguos son dos: El símbolo apostólico que se reza-
ba en la celebración del bautismo de la Iglesia de Roma, y el símbolo niceno-
constantinopolitano que es fruto de los dos primeros Concilios Ecuménicos de
Nicea (año 325) y de Constantinopla (año 581), común a todas las grandes igle-
sias de Oriente y Occidente. En el primer artículo profesamos la verdad más
fundamental: “Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la
Tierra.” Esta profesión de fe en Dios lleva consigo conocer su grandeza y majes-
tad; vivir en acción de gracias; confiar siempre en Él, incluso en la adversidad;
la dignidad y la verdadera grandeza de todos los hombres creados a imagen de
Dios, y usar rectamente de las cosas creadas por Él (C Compendio del CIC, nn.
34, 35, 42).
La fe era la primera condición que Jesús exigía para realizar sus milagros.
Recordamos al padre del muchacho epiléptico a quien el Señor le reprochó sua-
vemente su falta de fe. Su respuesta fue tan sencilla como humilde: “Yo creo.
Ayúdame a creer más”. Cuando los discípulos preguntan al Maestro por qué
ellos no han podido curarlo escuchan estas palabras correctivas: “Por vuestra
poca fe. Os aseguro que si tuvieseis fe, como un grano de mostaza diríais a este
monte: Vete de aquí allá, y se trasladaría. Nada os sería imposible
(Mt 17, 14-20)
El adorador nocturno necesita temple especial de fe forjada en la prueba si
quiere perseverar. La sociedad moderna padece una alguna crisis de valores, de
6 BOLETÍN EUCARÍSTICO Núm. 1.008
IDEARIO ESPIRITUAL
DE LA ADORACIÓN NOCTURNA ESPAÑOLA
Nota:
Se ruega a los Jefes de Noche o Secretarios, que una vez terminado el coloquio del tema
de reflexión, tengan tiempo para dar lectura al Iderario de la Adoración.
E L A ÑO L IT U R GI C O 2 0 1 0
C A L EN DA RI O D EL MES DE FEB RERO
C i cl o C
OR EM O S PO R N U E S T RO S H E RM A N OS D IF U N T OS
“ Yo soy la resurrección y la vida: El que cree en mí, aunque haya muerto vivirá, y el que
está vivo y cree en mí, no morirá para siempre” (Jn. 11,25-26).
En este mes por el alma de: Francisco García Martínez, adorador veterano de la Sección de
Villacarrillo.
A este y a cuantos hermanos en la Adoración Nocturna nos han precedido en la señal de la
fe, dales Señor, el descanso eterno.
Y brille para ellos la luz perpetua.
Descansen en paz Amén.
10 BOLETÍN EUCARÍSTICO Núm. 1.008
ANDÚJAR
LA SECCIÓN DECANA DE LA DIÓCESIS, ANDÚJAR,
CUMPLE EL CXXV ANIVERSARIO DE SU FUNDACIÓN
L U E S CO (a.n.v.c.e.f.)
Núm. 1.008 BOLETÍN EUCARÍSTICO 11
CUARESMA
UN CAMINO HACIA LA PASCUA
I. CUARENTA DÍAS DE TRABAJO (1)
1. Cuaresma significa “cuarenta” y se aplica a los 40 días de intensa pre-
paración a la fiesta de PASCUA.
2. Jesús se retiró durante 40 días. Moisés aguardó 40 días antes de subir
al Sinaí. Elías caminó durante 40 días hacia el Hored. Y la marcha de los judíos
por el desierto duró 40 días.
3. “40” es, pues, un número simbólico que expresa: “espera”,
“preparación” intensa de algo importantísimo que, para nosotros, es la Pascua.
4. No se entiende la Cuaresma si no es en función de la Pascua.
Marzo 1917
Ha sido nombrado Jefe de Turno de San Tarsicio de nuestra Sección,
D. Manuel Espejo, en sustitución de D. José Mesa Sánchez.
Enero 1919
Por el Sr. Director Espiritual de esta Sección, en uso de las facultades que le
atribuye el artículo 3º del Reglamento de los Turnos de San Tarsicio de la
Adoración Nocturna Española, ha sido nombrado Vicedirector Espiritual de los
Tarsicios de nuestra Sección el Rvdo. P. Antolín Hernández, C.M.F.
Febrero 1924
En el Boletín Eucarístico del mes de julio del año 1924, escribe un extenso
artículo el Presidente, Montuno Morente al referirse al Tuno de Tarsicios, dice
así: “... Y a esas Secciones que tienen Turnos de Tarsicios ¡Mi felicitación más cordial
y entusiasta! Y a la que no la tienen ¡Mi ruego fervorosísimo de que imiten a las otras!
Ha que adueñarse de la niñez para llevarla a Cristo, que ha de ser su Luz, su Guía
en el día de mañana... Y esos Turnos de tarsicianos son, además, los planteles de futu-
ros adoradores nocturnos, que nutrirán mañana nuestra filas y continuarán nuestra
historia y sostendrán nuestras Secciones. ¡Que importancia tiene el Turno de
Tarsicios!
Enero 1929
En la junta general de enero el Presidente manifiesta: “El Turno de tarsicios -
como sabéis- está en vía de restauración, después de tres años en que llevaba suspenso.
14 BOLETÍN EUCARÍSTICO Núm. 1.008
Enero 1930
El Presidente, Vicente Montuno Morente en la junta general manifiesta:
“Se llevó a cabo la Restauración de la Sección de Tarsicios, con gran número de
pequeños adoradores y la colaboración valiosísima de varios ejemplares sacerdotes y
maestros, que aportaron a esta Sección a más de su activo trabajo personal, su celo
apostólico y conocimiento práctico de la niñez. Suspenso está ahora el funciona-
miento de ese Tuno, a causa, primero de las obras realizadas en San Clemente -
donde los tarsicios se reunían- y a la necesidad de ahora, de hacer una selección entre
ellos para escoger los más constantes, los más fervorosos, los más formalitos, y reorga-
nizar con esto como núcleo básico y ejemplar, el Turno.
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(1) En el año 1943 fue proclamado Obispo de Palma de Mallorca y luego Obispo
de Almería, hasta su jubilación.
Núm. 1.008 BOLETÍN EUCARÍSTICO 15
VIGILIA EN LAS SECCIONES DE LA DIÓCESIS EN
EL MES DE FEBRERO 2010
ANDÚJAR: LINARES:
Ane: Primer Viernes, 5.
Primer Turno: Lunes, 1. MANCHA REAL:
Segundo Turno: Miércoles, 10. Ane: Último Jueves, 25.
Anfe: Jueves, 11. Anfe: Último Jueves, 25.
ARJONA: MARMOLEJO:
Ane: Tercer Sábado, 20. Último viernes, 26.
Anfe: Tercer Jueves, 18. MARTOS:
ARJONILLA: Último sábado, 27.
Segundo Viernes, 12. MENGÍBAR:
BAEZA: Tercer viernes, 19.
Turno San Pablo: Primer Viernes, 5. NOALEJO:
Turno S.I. Catedral: Último Sábado, 22. Ane: Último Viernes, 26.
Tarsicios: Tercer Sábado, 20. Anfe: Último Viernes, 26.
BAILEN: Tarsicios: Primer Viernes, 5.
Último Jueves, 25. ORCERA:
BAÑOS DE LA ENCINA: Tercer Sábado, 20.
Último Sábado, 27. PORCUNA:
BEAS DE SEGURA: Primer Viernes, 5.
Último Sábado, 27. SABIOTE:
Tarsicios: Primer Domingo, 7. Tercer Sábado, 20.
BEDMAR: Tarsicios: Segundo Sábado, 13.
Tercer Jueves, 18. TORREDELCAMPO:
CARCHELEJO: Tercer Sábado, 20.
Tercer Viernes, 19. TORREPEROGIL:
HUELMA: Último Sábado, 27.
Ane: Último Sábado, 27. Jóvenes: Segundo Sábado, 13.
Anfe: Último Viernes, 26. ÚBEDA:
Tarsicios: Último Viernes, 26. Primer Turno: Segundo Viernes, 12.
IBROS: Segundo Turno: Primer Viernes, 5.
Último Viernes, 26. Tercer Turno: Tercer Viernes, 19.
JAMILENA: Cuarto Turno: (Juvenil) Cuarto Viernes, 26.
Último Sábado, 27. Quinto Turno: (Jubilados) Primer Sábado, 6.
JÓDAR: Sexto Turno: Último Sábado, 27.
Tercer Sábado, 20. Anfe: Cuarto Jueves, 25.
Tarsicios: Cuarto Sábado, 27 VILLACARRILLO
LA CAROLINA: Ane: Tercer Sábado, 20.
Último Sábado, 27. Anfe: Último Viernes, 26.
A d o ra d o s e a e l S a nt í s im o A v e M a rí a P u r í s i ma
S a c r am e nt o
Sr. D.: