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Revista Chilena de Derecho, vol. 34 N° 1, pp. 139 - 151 {2003} COMENTARIOS DE JURISPRUDENCTA | Reforma de la Justicia Militar chilena a lalluz de las consideraciones del fallo Palamara | Sentencia Corte Interamericana de Derechos Humanos Palamaya Iribarne vs. Chile, 22 de noviembre de 2005 Regina Ingrid Diaz Tolosa Abogada y Doctoranda en Derecho, Pontificia Universidad Catdlica de Chile RESUMEN En sentencia de 22 de noviembre de 2005 de la Corte Interampricana de Derechos Humanos, Palamara vs. Chile, se condena al Estado de Chile almodificar la normativa interna relacionada con la jurisdiccién penal militar. Este comentario aborda el tema de la reforma pendiente, considerando tres asifectos: la competencia material y personal de los Tribunales Militares, lajestructura y composicién de los Tribunales Militares, y las garantias judicialps fundamentales que se ven mermadas con la actual regulacién del proceso peripl militar. La reforma a la Justicia Militar es urgente, sino Chile continuaria vulnerando el articulo 2° de la Convencién Americana sobre Derechos Humanos, segtin el cua los Estados que la han suscrito se comprometen a “adoptar con arreglo a sus progedimientos constitucionales y a las disposiciones de esta Convencién, las thedidas legislativas 0 de otro cardcter que fueren necesarias para hacer efectivos talps derechos y libertades”, Palabras Clave: Justicia Militar, Caso Palamara, Convencién Americana sobre Derechos Humanos, Tribunales Militares, Garantias judiciales. ABSTRACT In Human Rights inal regulation es on the necessary jal competition of the rts, and the ent regulation of lurgent, because invention, which A decision dated November 22nd, 2005 from the Inter-Ameri Court, Palamara vs. Chile, condemned Chile to modify the intel related to the penal military jurisdiction, This commentary foc reform topic from three points of view: the material and perso| Military Courts, the structure and composition of the Military Ci judicial fundamental guarantees that meet reduced with the « the penal military process. The reform to the Milltary Justice i Chile would continue damaging the Human Rights American C article 2° established that all States Parties undertake "to adogt, In accordance with their constitutional processes and the provisions of this Converftion, such legislative or other measures as may be necessary to give effect to thoselrights or freedoms”. | Keywords: Military Justice, Palamara Case, Human Rights Amgrican Convention, Military Courts, Judicial Guarantees. Introducci6n' La Corte Interamerica} en el caso Palamara demanda presentada, } normativa interna relat Al respecto, nos pare: declaracién de respon pensamiento y de ex articulos 13 y 21 de l adelante CADH), term razonable, el ordenany respecto a la legislaci reparacién®, | Asi pues, en el presen! de lado en esta oport en materia de liberta de la necesaria refor consideraciones hecha} 1. Hechos del cai de Justicia Milit Los hechos expuestos} libertad de expresién publicacién del libro di Inteligencia; la incaut disco que contenia el todo efectuado en la eliminacién del texto f que se encontraba en los libros que se encod De esta forma, nos pr con la justicia militar, Palamara Iribarne sie desempefiaba como e Justicia militar de tierd delitos de incumplimi haber escrito el menci en prensa declaracion| Asi pues, la CIDH tuv| de la justicia militar cl de expresién y del de establecido“, a la Cot invocados por las pre: los comprendidos en | contenidos en la dem: ello conduce al esclar internacionales por virtud de las actuaciones de sus érganos judiciales“ ja de Derechos Humanos (en adelante CIDH), dicta sentencia sus Chile, el 22 de noviembre de 2005, acogiendo la resolviendo, entre otros que el Estado debe modificar la jonada con la jurisdiccién penal militar. curioso que una causa que comienza con la demanda de jabilidad del Estado de Chile por la violacién de {a libertad de lesién y el derecho de propiedad, consagrados en los IConvencién Americana sobre Derechos Humanos (en ie con la condena al Estado de adecuar, en un plazo lento juridico interno a los estandares internacionales sobre jurisdiccién penal militar, como forma de le comentario se explica por qué ello fue posible, y dejando idad el anélisis de las consideraciones hechas por la Corte \de expresién y derecho de propledad, se centra en el tema de la justicia militar chilena, conf-ontando las por la CIDH en la materia con doctrina nacional. éPor qué permiten la revisién del Cédigo 2 n la demanda en los cuales se funda la violacién de la el derecho a la propiedad, se refieren a la prohibicién de la | sefior Humberto Palamara Iribarne, Etica y Servicios de cidn de los ejemplares del libro, los originales del texto, un xxto integro y la matriceria electroestatica de la publicacién, de de la imprenta donde se publicaba el libro; asi como la itegro del libro del disco duro de la computadora personal | domicilio del sefior Palamara Iribarne, y a la incautacién de itraban en dicho domicilio™., guntamos qué relacién pueden tener los hechos indicados ues bien la cuestién esta en que el sefior Humberto jo un oficial retirado de la Armada de Chile, el cual se ipleado civil a contrata en la misma, fue procesado ante la 105 de paz el afio 1993, siendo condenado en 1994 por los, to de deberes militares, de desobediencia y desacato, por nado libro, haber intentado su publicacién y haber realizado is al respecto, respectivamente, la oportunidad en este caso de entrar a revisar la normativa lena, pese a ser una demanda por la violacién de la libertad cho de propiedad, pues conforme al precedente e le esta permitido pronunciarse respecto a derechos intas victimas o sus representantes aunque sean distintos de demanda de la Comisién, si se atinen a los hechos da, y asimismo pueden examinar procesos internos, si imiento de si el Estado ha violado o no sus obligaciones | | | yf | l De esta forma, como los hechos relatados en la demanda, sireron a su vez para procesar y condenar en Chile a don Humberto Palamara ante Ip jurisdiccién penal militar de tiempos de paz, por los delitos de desobediencia, ingumplimiento de deberes militares y desacato, el Tribunal reflexiona sobre los pfocesos nacionales dirigidos en su contra, a propésito de la vulneracién del derecijo a ser ofdo por un tribunal competente, independiente e imparcial; del serch fa proteccién Judicial; y del derecho a la libertad personal y garantias juditiales™., 2. Reforma de Ia Jus' ar cl consideraciones del fallo Palamara lena a la lud de las Luego de un detenido estudio de los procesos militares seguidi's en contra del sefior Palamara, la Corte es enfética al concluir la necesidad dq adecuar el derecho interno a los esténdares internacionales en materia de jurisdicfién penal militar, siendo posible indicar las siguientes materlas a modificar: la cdmpetencia material y personal de los tribunales militares; su estructura y organizacipn, pues comprometen la independencia e imparcialidad del juzgador; y el procedimiento penal militar, pues vulnera garantias procesales fundamental | 256. En cuanto a la necesidad de adecuar el ordenamiento jufidico interno a los estdndares internacionales sobre jurisdiccién penal militar, la Gorte estima que en caso de que el Estado considere necesaria la existencia de una) jurisdiccién penal militar, esta debe limitarse solamente al conocimiento de delitps de funcién cometidos por militares en servicio activo. Por lo tanto, el Estaflo debe establecer, a través de su legislacién, limites a la competencia material y personal de los tribunales militares, de forma tal que en ninguna circunstanciajun civil se vea sometido a la jurisdiccién de los tribunales militares (supra péjfrs. 120 a 144). El Estado deberd realizar las modificaciones normativas necesarigs en un plazo razonable, 257. Ademés, en el Ambito de la jurisdiccién penal militar, os|fniembros de los tribunales deben revestir las garantias de competencia, impartialidad e Independencia Indicadas en los pérrafos 120 a 161 de la presehite Sentencia. Asimismo, el Estado debe garantizar el debido proceso en la jurisdiccién penal militar y la proteccién judicial respecto de las actuaciones de Is autoridades militares, tal como se ha sefialado en los parrafos 162 a 189 dp este fallo"=™. Accontinuacién se desarrolla cada una de las materias que reqiieren incluirse en la Reforma de la Justicia Militar, complementando lo dicho por la|CIDH con doctrina chilena atinente a esta tematica. 2.1, Competencia material y personal de los Tribunales Militargs A juicio de la CIDH, la jurisdiccién penal militar chilena es amafisima en cuanto a su competencia, tanto material como personal, lo cual no es acorgle con el articulo 8.1 de la CADH®®, que estatuye que “toda persona tiene derecho p ser ofda por un Juez o tribunal competente”. Constituyendo ello ademas ~conforme a los articulos 1° y 2° de la Convencién- una vulneracién del deber general fe respetar los, derechos, al no haber adoptado en esta materia disposiciones He derecho interno acordes con el citado articulo. i Conforme a las consideraciones de la CIDH, en un Estado demperatico de derecho la jurisdiccién penal militar ha de tener un alcance restrictivo ¥ excepcional2, pues se ha de considerar que el derecho penal en el ambito castrenge tiene el cardcter de ultima ratio, por tanto los procesos penales deben constitulf el medio menos lesivo para que el Estatlo proteja los intereses de las Fuerzas Armadas. Por ello, en caso que un Estado la los principios y garanti lonserve, esta debe ser minima y encontrarse inspirada en ys que rigen el derecho penal moderno: "124, La Corte ha establecido que toda persona tiene el derecho de ser juzgada por un juez o tribunal comy jetente, independiente e imparcial. En un Estado democratic de derech® la jurisdiccién penal militar ha de tener un alcance restrictivo y excepcion especiales, vinculados Por ello, solo se debe fl su propia naturaleza a| I y estar encaminada a la proteccién de intereses juridicos -on las funciones que la ley asigna a las fuerzas militares. izgar a militares por la comisién de delitos o faltas que por fenten contra blenes juridicos propios del orden militar. (..) 132. La Corte estiga que en las normas que definen Ia jurisdiccién penal militar en Chile no se limita el la naturaleza de los bi estrictamente militare: atentan contra dichos pueden ser cometidos de las particulares fun Jurisdiccién penal milit tendido a reducirse e i lo conserve, este debe| garantias que rigen el (..) 134, Claramente fi Iribarne no pusieron el proteccién penal. Incl que también tiene el sefior Palamara Iriban ‘menos lesivo para qu Como Io indicare el ju lconocimiento de los tribunales militares a los delitos que por es juridicos penales castrenses protegidos son 'y constituyen conductas graves cometidas por militares que ienes juridicos. El Tribunal destaca que esos delitos solo or los miembros de las instituciones castrenses en ocasién jones de defensa y seguridad exterior de un Estado. La ren los Estados democréticos, en tiempos de paz, ha jcluso a desaparecer, por lo cual, en caso de que un Estado er minimo y encontrarse inspirado en los principios y jerecho penal moderno. js conductas por las que fue condenado el sefior Palamara peligro los bienes juridicos militares susceptibles de 0 la Corte entiende que, debido al cardcter de ultima ratio echo penal en el mbito castrense, el sometimiento del a los distintos procesos penales no constituia el medio lel Estado protegiera los intereses de la Armada", Sergio Garcia Ramirez, en su voto concurrente“, hoy es acentuada la tendencid| a la reduccién, e inclusive a la desaparicién, del enjuiciamiento militar. més la tendencia rest caso de guerra, pues excepcional. En efecto} ordinaria que rige sobtt excepcién 0 suspensid precisar quiénes son | actiie con criterio resti Asi, el juez Garcia, ind consideraciones detert realidad, un dato prof los integrantes de las que pertenecieron a la dejado de hallarse en del tema en litigio: del relacionadas con el deg castrense’®, 2.1.1. Competencia mi Conforme a las consid la jurisdiccién penal m| n algunas legislaciones, en las que ha avanzado mucho tiva de la jurisdiccién militar, esta se mantiene solo en el Derecho militar es de carécter funcional y esencialmente al estar ante una justicia especial, sustraida a la jurisdiccién todas las personas, y por lo tante de frente a una del régimen de igualdad, es necesario que a la hora de justiciables y cual es la materia de la justicia militar se ictivo, como ante todo supuesto de excepcién. que “el fuero militar puede aplicarse en el espacio de dos nantes e infranqueables: a) la subjetiva, que es, en ional: sobre militares en servicio activo, lo cual excluye a ‘eservas”, a los “retirados” y a otras categorias de individuos fuerzas armadas, a titulo de integrantes activos, pero han isa situacién; y b) la material, conectada con la naturaleza je tratarse de cuestiones directas e inmediatamente jempefio militar, la funcién de las armas, la disciplina terial raciones de la CIDH, en un Estado democratico de derecho itar ha de estar encaminada a la proteccién de intereses juridicos especiales, vinculados con las funciones que la ley as}pna a las fuerzas militares“, En otras palabras, los tribunales militares deben donocer solo aquellos delitos que por la naturaleza de los bienes juridicos penales son estrictamente militares y constituyen conductas graves co} que atentan contra dichos bienes juridicos“®, Como lo indica Jorge Mera, que mayoritariamente se juzgue al trenses protegidos etidas por militares iviles y a militares por delitos comunes, desnaturaliza la razén de ser esta justicid especializada, que debiera ocuparse exclusivamente de los delitos propiamente ny jlitares cometidos por miembros de las Fuerzas Armadas"*, La justicia castrensd debe conocer de las més graves infracciones a los deberes militares cometidas por| iniformados y que comprometen la eficacia de estas instituciones como érganos tBcnico-profesionales especializados en la defensa de la seguridad exterior del Esta tribunales militares no sean percibidos como una justicia de fu existe para proteger a sus miembros o los intereses corporati instituciones armada: . Es preciso que los ro, privilegiada, que s de las Por su parte, la CIDH sefiala que las normas penales militares|Hebieran establecer claramente “cudles son las conductas delictivas tipicas en el ai ito militar, deben determinar la antijuridicidad de la conducta ilicita a través de |p descripcion de la lesién o puesta en peligro de bienes juridicos militares graven Justifique el ejercicio del poder punitivo militar, y especificar | sancién. Las autoridades que ejercen la jurisdicclén penal mill el principio de legalidad y, entre otras, constatar la existencia inte atacados, que correspondiente r, al aplicar las je todos los normas penales militares e imputar el delito a un militar, rae deben regirse por elementos constitutivos del tipo penal militar, asi como la exi de causales de exclusién del delito"*», Nos parece acertada la opinién de Cea Cienfuegos, en relaciér] penales del Cédigo de Justicia Militar deben adecuarse a las d orientaciones actuales del Derecho Penal, a fin de que exista | armonia entre la normativa especial castrense y la totalidad di juridico penal, | | 2.1.2, Competencia personal Por su parte, en el Ambito de la competencia personal, esta d conocimiento de delitos de funcién cometidos por militares en| manera tal, que en ninguna circunstancia un civil puede verse jurisdiccién de los tribunales militares, Esto se condice y va estrechamente relacionado con la compet estos tribunales, pues si ellos existen solo para conocer los di su propia naturaleza atentan contra bienes juridicos propios dt estos "delitos solo pueden ser cometidos por los miembros de castrenses en ocasién de las particulares funciones de defens de un Estado En este sentido, “las normas penales militares deben establect ambigUedad quignes son militares, tinicos sujetos activos de I militares", En el presente caso en andlisis se consideré que una persona jencia o inexistencia Ja que los tipos trinas y debida coherencia y | ordenamiento be limitarse solo al servicio activo, De sometido a la ncia material de tos 0 faltas que por I orden militar, ergo jas instituciones y seguridad exterior claramente y sin s delitos ion el cardcter de militar en retiro no podia ser juzgado por los tribunales militarps, pues los empleados civiles a contrata no integran escalafén, trabajan sectores de renovacién anual de caracter contingente, no ocupan plazas co jntempladas en las leyes de planta, no soh parte de las dotaciones permanentes, pueden ser extranjeros y sus cont} "127. En el presente ¢ hecho controvertido ef proceso de retiro de af que dieron origen a log empleados civiles ac ejercieron la jurisdiccit través de la interpreta empleado civil a cont jurisdiccién penal mil i 128. Como ha queda Armada de Chile en 1 de 1993 (supra parr. persona con el cardct militares. En el presei acervo probatorio, los} en sectores de renovat contempladas en las | pueden ser extranjeros empleados civiles a c: acuerdo a las necesid sometidos a las sanci militar"2®, 2.2, Estructura y com | De acuerdo a las cons} de paz vulnera la imp: conforme lo estatuye que tienen estos Trib 2a de la Convencién, Pacto. mayor objetividad par Judicial frente a los d funcién judicial. Y, por integrantes no tengan alguna de las partes En efecto, en toda mt Asi pues, Ia estructural vulnera la independent concluyé la CIDH en of servicio activo, estén cadena de mando, su idoneidad para ejercer de inamovilidad y no cargo de juez o fiscal Por solo mencionar un Marcial, compuesta po} oficiales en servicio ac fatos son de renovacién anual: 0, la calidad de militar de! sefior Palamara Iribarne es un tre las partes, El Estado ha alegado ante la Corte que el uel de la Armada concluyé con fecha posterior a los hechos procesos penales y, al mismo tiempo, ha alegado que los trata tienen la condicién de militares. Las autoridades que n penal en el juzgamiento del sefior Palamara Iribarne, a ion de diversas normas entendieron que este, como ta, debia ser considerado militar a los efectos de la (Supra parr. 63.70). demostrado, el sefior Palamara Iribarne ingresé a la 172 y su retiro como militar se produjo a partir del 1 de enero i3.1). En un caso anterior, la Corte consideré que una de militar en retiro no podia ser juzgado por los tribunales fe caso, también se toma en cuenta que, tal como surge del mpleados civiles a contrata no integran escalafén, trabajan én anual de cardcter contingente, no ocupan plazas iyes de planta, no son parte de las dotaciones permanentes, y sus contratos son de renovacién anual. Ademés, los trata realizan un “empleo de carcter transitorio”, de les de la institucién, por lo cual deberian encontrarse 1es propias de regimenes laborales y no al derecho penal josicién de los Tribunales Militares en tiempo de paz jeraciones de la CIDH, la justicia militar chilena de tiempos cialidad e independencia que deben tener los tribunales, dl articulo 8.1 de la CADH, por la estructura y composicién ales, y de esta forma vulnera ademds las disposiciones 1a y I tener normas internas que no respetan los derechos del n se debe garantizar que el juzgador cuente con la enfrentar el juicio. Asimismo, la independencia del Poder ’4s poderes estatales es esencial para el ejercicio de la isu parte, “la imparcialidad del tribunal implica que sus lun interés directo, una posicién tomada, una preferencia por laue no se encuentren involucrados en la controversia*@2, lorgénica de la justicia militar en Chile en tiempos de paz, ia que los tribunales han de tener, pues conforme lo neral, los integrantes de los tribunales “son militares en lubordinados jerdrquicamente a los superiores a través de la jombramiento no depende de su competencia profesional e las funciones judiciales, no cuenten con garantias suficientes seen una formacién juridica exigible para desempefiar el 2jemplo, la segunda instancia estd conformada por la Corte ‘cinco miembros, de entre los cuales tres de ellos son ivo, por ende siguen al mando de sus comandantes y precisan responder a ellos, Asi se vislumbra que la independencia del tribunal esta amagada por existir una subordinacién jeraérquica militar} Pues, como lo seffala Jaime Couso, los uniformados, naturalménte se inclinan a los institutos armados, por su propia identificacién con los interes¢s institucionales, lo que va en desmedro de los civiles que queden afectados con sbs decisiones, pues estos jueces militares, incluso profesionalmente estan imposibfiitados de independizarse de las expectativas y eventuales presiones de fus superiores jerérquicos™), En consecuencia, la reforma a la justicia militar debe necesaridmente considerar reglas que independicen en forma objetiva, precisa y concretalfl actuar de los que Integran tribunales militares. As{ pues, se han de reorganizar (ps tribunales militares sobre la base de jueces letrados profesionales, inamqvibles, plenamente incorporados al Poder Judicial, sin relacién administrativa ni fupcional con las Fuerzas Armadas®., Por su parte, la imparcialidad se ve ademés afectada porque “gn el Fiscal se concentran las funciones de investigar y juzgar. El Fiscal es el bncargado de emitir el auto de procesamiento y realizar la acusacién fiscal a la qua responde el acusado, de forma tal que las decisiones sobre la necesidad y legalidad de las medidas probatorias y su valor para acreditar la comisién de Ua conducta delictiva las realiza la misma persona", Esta concentracién de las potestades de investigar, acusar y jizgar en un solo sujeto jurisdiccional, es propio de un sistema inquisitivo, escrifo, formalista y de prueba reglada, Por tanto, seria necesario reformar la justicia filitar siguiendo el modelo acusatorio del proceso penal que actualmente rige a Iq jurisdiccién ordinaria, luego de la reforma que entrara en vigencia el afio 4005. De otra forma, ademés se vulnera la igualdad ante ia ley, no existiendo razérjalguna para que los militares no tengan el mismo sistema de garantias que se aplia a los civiles en la jurisdiccién penal ordinaria=, 1 En general, conforme lo destaca Marla Inés Horvitz, se supon@ la ausencia de imparcialidad objetiva en el tribunal militar, cuando: a) se corponen dnicamente por militares sin formacién juridica; b) se juzga a civiles que apmeten delitos contemplados en las leyes penales militares; y c) se juzgan delitos comunes cometidos por militares en contra de victimas civiles' Por tafto, consideramos que la amplitud de la competencia de la jurisdiccién penal milifar chilena, también incide en la imparcialidad de estos tribunales. i i 2.3. Garantias judiciales fundamentales mermadas con la actupl regulacién del proceso penal militar j | 2.3.1, Debido proceso La CIDH, ademas de analizar la competencia, Imparcialidad ¢ dependencia de los Tribunales Militares chilenos, a propdsito de la causa Palamara versus Chile, estudia las garantias procesales de publicidad y defensa del imputado} contempladas en el articulo 8 de la CADH, en los procesos penales militares a los que fue sometido el sefior Palamara Iribarne. En efecto, una de las principales caracteristicas que debe reuniir el proceso penal durante su sustanciacién es su cardcter de publico, constituyeipdo un elemento esencial de las garantias judiciales. En la Convencién Americatja el articulo 8.5 establece que “[e]l proceso penal debe ser pliblico, salvo en Id que sea necesario i para preservar los inte reses de la justicia”. Ello se garantiza a través de la realizacién de una etapa oral en la que el acusado pueda tener inmediacién con el Juez y las pruebas y qhie facilite el acceso al piiblico, lo cual no ocurre en la actual regulacién de la justiqla militar chilena, pues se rige por un sistema inquisitivo, con una etapa preliminar que la referida normal le imposibilita el ace contra, lo cual le impi dispuesto en el articu Ademés, el ser el sui un defensor consagra solicitar diligencias pr fundamentos de los jumaria, secreta y escrita®"., Por tanto, la CIDH considera va “es contraria al derecho de defensa de! imputado, ya que efectivo al expediente y a las pruebas que se recaban en su je defenderse adecuadamente, en contravencién de lo 8.2.c)"2, rio Secreto afecta el derecho del imputado a ser asistido por lo en el articulo 8.2.d) de la CADH, pues el defensor tiene que batorias al fiscal sin tener conocimiento del sumario ni de los ‘gos formulados a su defendido. En otras palabras, la reala de que el sumario oon screto es de por si contrario con el derecho a defensa del imputado, pues impo: defensa®®. ibilita el acceso al expediente, impidiendo una adecuada Por su parte, nos pardte acertada la opinién del juez Garcia Ramirez, en cuanto a que el debido procesoles fundamental en un Estado de Derecho, pues provee a la mejor defensa de los lerechos fundamentales cuando se ven afectados o se, encuentran en riesgo. | que el solo hecho de que el Tribunal no sea competente, no sea imparcial 0 no se: proceso, por tanto, la tribunal, sin haber sid de los procesos nacioriales, considerando sus deficiencias especifica: Independiente implica una necesaria vulneracién al debido IDH podria haberse limitado a establecer la inidoneidad de! necesario calificar cada uno de los actos realizados dentro lefensa, patrocinio, prueba, roi rs0s, etcétera, pues incluso si estas actuaciones se hubiesen realizado cot en pie como verdader como auténtica senter con las atribuciones j el mayor apego a la Convencién Americana, no se tendrian is actos procesales ni la resolucién final adquiriria firmeza ia, porque unas y otra carecerian del presupuesto sobre el isdiccionales indispensables para conocer de cierta causa en que se construye el ie un tribunal competente, esto es, un rgano dotado funcién de la persona } solo admite contadas 2.3.2. Proteccién judi La Corte “ha estableci la materia, y atento a la regla de igualdad ante la ley, que rigurosas excepciones, ial respecto a las actuaciones de las autoridades militares lo que la salvaguarda de la persona frente al ejercicio arbitrario del poder puiplico es el objetivo primordial de la proteccién internacional de los derechos humai jos. En este sentido, la inexistencia de recursos internos efectivos coloca a una|persona en estado de indefensién"™™. Y bajo esta Perspectiva, se ha sefiplado que para que el Estado cumpia con lo dispuesto en el Citado articulo 25.1 della CADH “no basta con que los recursos existan formalmente, sino es persona la posibilidad Breciso que sean efectivos, es decir, se debe brindar ala jeal de interponer un recurso sencillo y répido que permita alcanzar, en su caso, I proteccién judicial requerida ante la autoridad competente”“*i), En el caso analizado, sefior Palamara interp adversas y afectaban revestian las garantia: natural, por lo cual el cualquier otro recurso j ta garantia se ve conculcada, pues todos los recursos que el iso en contra de las decisiones militares que le fueron is derechos, fueron resueltos por tribunales militares que no \de imparcialidad e Independencia y no constituian el juez stado violé el derecho a un recurso sencillo y rdpido 0 a fectivo ante jueces o tribunales competentes: i | “185. La Corte ha sefialado en parrafos anteriores de la prese| Estado no ha garantizado al sefior Palamara Iribarne su derecl tribunales competentes, independientes e imparciales y no ha garantias judiciales en los procesos a los que se vio sometido.! Iribarne fue sustraido de la jurisdiccién ordinaria y privado de| natural (supra parr. 161). Lo anterior trajo como consecuenci recursos que este interpusiera en contra de las decisiones mil adversas y afectaban sus derechos fueran resueltos por tribul revestian las garantias de imparcialidad e independencia y no natural, por lo cual el Estado violé el derecho a un recurso ser cualquier otro recurso efectivo ante jueces o tribunales comp. 186. Esta situacién se vio agravada debido a que el Cédigo de} solamente permite que sean apeladas muy pocas de las decis| ite Sentencia que el jo a ser juzgado por espetado algunas El sefior Palamara er ofdo por el juez que todos los res que le fueron les militares que no constituian el juez illo y rapido oa fentes, Pusticia Militar nes que adoptan las autoridades que ejercen Ia jurisdiccién penal militar que afectn derechos fundamentales de los procesados. Por ello, el sefior Palamara interponer recursos en contra de algunas de las decisiones adi ribarne no pudo ptadas por las autoridades que ejercen la jurisdiccién penal militar que lo afeftaban, como por ejemplo la denegatoria de acceder al sumario, dado que dichal inapelable"®2, Por otro lado, "el derecho de acceso a la justicia no se agota procesos internos, sino este debe ademas asegurar, en temps derecho de la presunta victima a obtener un control jurisdicc determinar si los actos de las autoridades militares han sido ai de los derechos y garantias minimas previstos en la CADH, as| establecidos en su propia legistacién, to cual no es incompatib| funciones que son propias de las autoridades militares"), Al respecto, si bien, el articulo 20 de nuestra Constitucién Poll recurso de proteccién para salvaguardar los derechos fundam| personas ante la justicia ordinaria, en el presente caso ha qui dicho recurso no resulta idéneo ni efectivo para proteger los debido a que la Corte de Apelaciones de Punta Arenas, sin ev producido las alegadas violaciones a los referidos derechos fu considerd que la jurisdiccién militar era la competente para ci por ello no podia pronunciarse al respecto, | CONCLUSIONES ldecisién era nel trémite de razonable, el jpal que permita joptados al amparo como los ip con el respeto a las ica contempla el intales de las jado demostrado que rechos conculcados, juar si se habian jamentales, jocer el caso y que 1. La Justicia Militar chilena vulnera el deber general establecigo en la CADH de respetar los derechos reconocidos en ella, pues no ha adecua Justicia Militar y sus normas complementarias, a fin de hacerk 2. En virtud del fallo Palamara versus Chile, de 22 de novier| encuentra en la necesidad y obligacién, si no quiere ser respo! internacionalmente, de reformar la Justicia Militar, De esta fo la mencionada sentencia, sino también dejard de contravenir de la Convencién. | 3. Los puntos fundamentales a reformar dicen relacién con las| el Cédigo de is efectivos. re de 2005, Chile se isable 12 No solo respetaré 3 articulos 1° y 2° siguientes materias: competencia, independencia e imparcialidad de los tribunales jnilitares; estructura y composicién de los tribunales militares; establecer un procedin garantice y promueva el debido proceso. iento que respete, 4, En cuanto a la com| Militar, en el plano pel funcionarios militares jurisdiccién penal cast jetencia, por el caracter funcional y excepcional del Derecho ‘onal, solo debieran conocer de delitos cometidos por \ctivos; y, en el Ambito material, los delitos militares deben lense solo ha de conocer de delitos militares cometidos por ser claramente code y diferenciados de los delitos comunes. Ergo, la funcionarios activos d contra de bienes jurid circunstancia debiera cometidos por militard las Fuerzas Armadas en ejercicio de sus funciones, en os de cardcter castrense; en tiempos de paz, bajo ninguna zgar a civiles, y como contrapartida los delitos comunes debieran ser conocidos por fa justicia ordinaria. 5, La estructura y composicién de los tribunales militares esté en directa relacién con el establecimienta|de un procedimiento penal de tipo acusatorio. Pues, el solo hecho de diversificar sentenciar, nos garant Tribunales. 6. Asimismo, este sist pues los imputados te} procesales, al ser un 7. Sin embargo, la au: militares, por tener la Militar, hace necesari organica de la justicia autonomia en el eferc 8. Es imperiosa la necg también vulnera princf distintas personas las funciones de investigar, juzgar y iza de clerta forma la imparcialidad e Independencia de los ma acusatorio contribuiria a garantizar el debido proceso, \drén la posibilidad de hacer valer todos sus derechos istema basado en la oralidad. ncia de Independencia de los integrantes de los tribunales alidad de oficiales del escalafén del Servicio de Justicia luna reformulacién no solo procedimental, sino también enal militar, donde se consagre en forma expresa una io de sus funciones jurisdiccionales. isidad de reformar la Justicia Militar, pues su estructura no ios fundamentales de un Estado democratico, tales como la solo no se adecua a pos rer Americana sobre Derechos Humanos, sino igualdad ante la ley, yi Notas * Este comentario cort aprobar el curso optat} José Miguel Olivares, la Pontificia Universid: 2006. 1 Palamara Iribarne vg| | debido proceso. ssponde a una versién revisada de! trabajo presentado para /o Eficacia de la Jurisdiccién Internacional, dictado por el Dr. jentro del Programa de Doctorado en Derecho impartido por Catélica de Chile, en el primer semestre académico del afio Chite (2005), parrafo 2, punto resolutivo 14: “14. El Estado debe adecuar, en un plazo razonable, el ordenamiento juridico interno a los. estdndares internacio de que considere necet limitarse solamente al en servicio activo. Por} legistactén, limites a la) de forma tal que en ni les sobre jurisdiccién penal militar, de forma tal que en caso aria la existencia de una jurisdiccién penal militar, esta debe onocimiento de delitos de funcién cometidos por militares lo tanto, el Estado debe establecer, a través de su lcompetencia material y personal de los tribunales militares, guna circunstancia un civil se vea sometido a la jurisdiccién de los tribunales penales militares, en los términos de los parrafos 256 y 257 de la presente Sentencia’. | | 2 Pérrafo 2. Para detalles vid. parrafos 63 y sigulentes, 3 Vid. Hechos probados de la causa, especialmente parrafos 63.16, 63.17, 63.66, de la sentencia en comento. I 1, 63.4, 63.6, 4 Vid. v.g. pérrafo 142 Acosta Calderén vs. Ecuador (2005); { parrafo 88 Fermin Ramirez vs. Guatemala (2005), 5 Pérrafo 120 del fallo, 6 Pérrafo 121 del fallo. | 7 Parrafos 145 a 161 del fallo, | 8 Parrafos 182 a 189 del fallo, 9 Parrafos 162 a 181, y 190 a 228 del fallo, 10 Parrafos 256 y 257 del fallo. 11 Asi pues, parrafo 135 de la sentencia en comento, “la ampfit ud de la jurisdiccién penal militar por la definicién de los delitos militares y la remigin a diversas leyes que otorgan competencia a los tribunales militares, cabe resajfar que en Chile dichos tribunales pueden conocer numerosos casos, debido odo" la calidad del sujeto activo de los delitos militares es indiferente”; Cfr. parr La jurisdiccién tan extensa que tienen los tribunales militares| 142 del fallo: "142. n Chile que les otorga facultades de fallar causas correspondientes a los tribupales civiles no es acorde con el articulo 8.1 de la Convencién Americana”. 12 Cea (2002) p. 262, sefiala que la justicia militar en un Estqd pretende cautelar determinados valores del émbito militar: digci seguridad militar. 13 Pérrafos 124, 132 y 134 del fallo en comento. jo de Derecho iplina, jerarquia y 14 Puntos resolutivos 10-18 del voto concurrente del juez Sergio Garcia Ramirez. 15 Horvitz (2002) p. 147, Indica por ejemplo que en Alemania y Francia se ha abolido totalmente la jurisdiccién penal militar en tiempos T 16 Punto resolutivo 12 del voto concurrente del juez Sergio 17 Pérrafo 124 del fallo en anillisis, ya transcrito. rcia Ramirez. 18 Se puede afirmar que estos delitos deben contemplarse enjel Cédigo de Justicia Militar, y no serian tales los delitos que las leyes especiales sqmeten al conocimiento de los tribunales militares, ni delitos de nuestralfegisiacién penal ordinaria 0 comin cometidos por militares. Cfr, Lopez (1995)_ 19 Mera (2002) p. 7. 20 Mera (2002) p. 9. A p. 87-95. 21 Parrafo 126 del fallo; Mera (2002) pp. 11-72, critica a part|r de un concepto riguroso de delito militar, el catdlogo de los delitos contemplafos en el Cédigo de Justicia Militar, planteando la supresién de la mayoria de ello: Por no reunir las caracteristicas de los qelitos militares propios, y por otra parte, la incorporacién de otros tipos penales que si atentarian contra la seguridad exterior del Estado. 22 Cea (2002) p. 269,| 23 Pérrafo 256 del fallp, ya transcrito. 24 Pérrafo 132 del fallb. 25 Pérrafo 126 del fall 26 Parrafos 127 y 128) 27 Pérrafo 146 del fall. 28 Pérrafo 155 del fallp. 29 Vid. articulo 48 del] idel fallo. Codigo de Justicia Militar. 30 Cfr. Lopez (1995) p, 133. 31 Couso (2002) p. 78, 32 Couso (2002) p. 74} 33 Pérrafo 157 del fall. 34 Cir. Cea (2002) p. 2 35 Horvitz (2002) p. 1; 36 Como lo recuerda sistema inquisitivo corl proceso principalment adjunta al expediente, articipacién del impu final de la investigacié probatoria, la que, término del plenario, momento derecho aa 37 Pérrafo 170 del fallg. 38 Eva (2006) p. 163.] 0%. 64, fa (2006) p. 162, en la justicia militar sigue rigiendo un dos etapas caracteristicas: el sumario y el plenario, Es un escrito en el que el fiscal realiza lz investigacién secreta que EI sumario es secreto y restringe la posibilidad de ido y la defensa, la cual solo puede intervenir al momento , donde se abre el plenario y se puede solicitar una etapa mbargo, no invalida lo ya adjuntado durante el sumario. Al juez militar dicta sentencia, no existiendo en ningdn iencia publica, 39 Cfr. puntos 1-18 dal voto concurrente del juez Sergio Garcia Ramirez. 40 Pérrafo 183 del fall 41 Parrafo 184 del falld. en comento. 42 Parrafos 185 y 186 Hel fallo. 43 Pérrafo 188 del falld, | 44 Parrafo 187 del fallo; “187. El Tribunal toma en cuenta qug el articulo 20 de la Constitucién Politica de Chile contempla el recurso de protecclbn para salvaguardar los derechos fundamentales de las personas ante la justicia offinaria. Sin embargo, en el presente caso, ha quedado demostrado que dicho recurgp interpuesto por la esposa del sefior Palamara Iribarne a su favor y de su familiasupra parr. 63.36) para proteger garantfas constitucionales a la integridad psiquifa, el derecho a desarrollar cualquier actividad econémica, el derecho a la profiedad y el derecho de autor, no resultd idéneo ni efectivo para proteger los derecho} del sefior Palamara Iribarne, debido a que la Corte de Apelaciones de Punta Arend, sin evaluar si se habian producido las alegadas violaciones a los referidos dereghos fundamentales, consideré que la jurisdiccién militar era ta competente para cdnocer el caso y que por ello no podia pronunciarse al respecto. Consecuentement4, el Estado no garantizé “que la autoridad competente prevista por el sistemp legal del Estado decidiera sobre los derechos de toda persona que interponga fal recurso”. Bibliografia Cea Cienfuegos, Sergio (2002): “Algunas ideas de una justici militar en Chile para el siglo XXI” en: Mera, Jorge (editor): Hacia una reforma de Id justicia militar (Santiago, Cuadernos de andlisis Juridico, serie publicaciones pspeciales 13, Escuela de Derecho Universidad Diego Portales) pp. 261-272. politico-criminal” en: Mera, Jorge (editor): Hacia una reformalfie la justicia militar (Santiago, Cuadernos de analisis Juridico, serie publicaciones pspeciales 13, Escuela de Derecho Universidad Diego Portales) pp. 73-145. Couso Salas, Jaime (2002): “Competencia de la justicia oma Una perspectiva Eva Parada, Maria José (2006): “Chile ante el Sistema Interarericano: el caso Palamara”, Anuario de Derechos Humanos n° 2: pp. 157-164. Horvitz Lennon, Maria Inés (2002): “Panorama sobre la compattencia y la organizacién de los tribunales militares en tiempos de paz en #igunos paises latinoamericanos. 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' Normas Citadas | Cédigo de Justicia Militar | | Decreto N° 873, Convencién Americana sobre Derechos Hume 10s, “Pacto de San José de Costa Rica”, Diario Oficial, 5 de enero de 1991, Jurisprudencia Gitada Acosta Calderén vs. Equador (2005): Corte Interamericara de Derechos Humanos, 24 de junio de 2005, $erie C No 129. \ Fermin Ramirez vs. Glatemala (2005): Corte Interamericana de Derechos Humanos, 20 de junialde 2005, Serie C No 126. Palamara Iribarne vs. [Chile (2005): Corte Interamericana de Derechos Humanos, 22 de noviembre de 205, Serie C No 135

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