Revista Chilena de Derecho, vol. 34 N° 1, pp. 139 - 151 {2003}
COMENTARIOS DE JURISPRUDENCTA
|
Reforma de la Justicia Militar chilena a lalluz de las
consideraciones del fallo Palamara |
Sentencia Corte Interamericana de Derechos Humanos Palamaya Iribarne vs. Chile,
22 de noviembre de 2005
Regina Ingrid Diaz Tolosa
Abogada y Doctoranda en Derecho, Pontificia Universidad Catdlica de Chile
RESUMEN
En sentencia de 22 de noviembre de 2005 de la Corte Interampricana de Derechos
Humanos, Palamara vs. Chile, se condena al Estado de Chile almodificar la
normativa interna relacionada con la jurisdiccién penal militar. Este comentario
aborda el tema de la reforma pendiente, considerando tres asifectos: la
competencia material y personal de los Tribunales Militares, lajestructura y
composicién de los Tribunales Militares, y las garantias judicialps fundamentales
que se ven mermadas con la actual regulacién del proceso peripl militar. La reforma
a la Justicia Militar es urgente, sino Chile continuaria vulnerando el articulo 2° de la
Convencién Americana sobre Derechos Humanos, segtin el cua los Estados que la
han suscrito se comprometen a “adoptar con arreglo a sus progedimientos
constitucionales y a las disposiciones de esta Convencién, las thedidas legislativas 0
de otro cardcter que fueren necesarias para hacer efectivos talps derechos y
libertades”,
Palabras Clave: Justicia Militar, Caso Palamara, Convencién Americana sobre
Derechos Humanos, Tribunales Militares, Garantias judiciales.
ABSTRACT
In Human Rights
inal regulation
es on the necessary
jal competition of the
rts, and the
ent regulation of
lurgent, because
invention, which
A decision dated November 22nd, 2005 from the Inter-Ameri
Court, Palamara vs. Chile, condemned Chile to modify the intel
related to the penal military jurisdiction, This commentary foc
reform topic from three points of view: the material and perso|
Military Courts, the structure and composition of the Military Ci
judicial fundamental guarantees that meet reduced with the «
the penal military process. The reform to the Milltary Justice i
Chile would continue damaging the Human Rights American C
article 2° established that all States Parties undertake "to adogt, In accordance with
their constitutional processes and the provisions of this Converftion, such legislative
or other measures as may be necessary to give effect to thoselrights or freedoms”.
|
Keywords: Military Justice, Palamara Case, Human Rights Amgrican Convention,
Military Courts, Judicial Guarantees.Introducci6n'
La Corte Interamerica}
en el caso Palamara
demanda presentada, }
normativa interna relat
Al respecto, nos pare:
declaracién de respon
pensamiento y de ex
articulos 13 y 21 de l
adelante CADH), term
razonable, el ordenany
respecto a la legislaci
reparacién®,
|
Asi pues, en el presen!
de lado en esta oport
en materia de liberta
de la necesaria refor
consideraciones hecha}
1. Hechos del cai
de Justicia Milit
Los hechos expuestos}
libertad de expresién
publicacién del libro di
Inteligencia; la incaut
disco que contenia el
todo efectuado en la
eliminacién del texto f
que se encontraba en
los libros que se encod
De esta forma, nos pr
con la justicia militar,
Palamara Iribarne sie
desempefiaba como e
Justicia militar de tierd
delitos de incumplimi
haber escrito el menci
en prensa declaracion|
Asi pues, la CIDH tuv|
de la justicia militar cl
de expresién y del de
establecido“, a la Cot
invocados por las pre:
los comprendidos en |
contenidos en la dem:
ello conduce al esclar
internacionales por virtud de las actuaciones de sus érganos judiciales“
ja de Derechos Humanos (en adelante CIDH), dicta sentencia
sus Chile, el 22 de noviembre de 2005, acogiendo la
resolviendo, entre otros que el Estado debe modificar la
jonada con la jurisdiccién penal militar.
curioso que una causa que comienza con la demanda de
jabilidad del Estado de Chile por la violacién de {a libertad de
lesién y el derecho de propiedad, consagrados en los
IConvencién Americana sobre Derechos Humanos (en
ie con la condena al Estado de adecuar, en un plazo
lento juridico interno a los estandares internacionales
sobre jurisdiccién penal militar, como forma de
le comentario se explica por qué ello fue posible, y dejando
idad el anélisis de las consideraciones hechas por la Corte
\de expresién y derecho de propledad, se centra en el tema
de la justicia militar chilena, conf-ontando las
por la CIDH en la materia con doctrina nacional.
éPor qué permiten la revisién del Cédigo
2
n la demanda en los cuales se funda la violacién de la
el derecho a la propiedad, se refieren a la prohibicién de la
| sefior Humberto Palamara Iribarne, Etica y Servicios de
cidn de los ejemplares del libro, los originales del texto, un
xxto integro y la matriceria electroestatica de la publicacién,
de de la imprenta donde se publicaba el libro; asi como la
itegro del libro del disco duro de la computadora personal
| domicilio del sefior Palamara Iribarne, y a la incautacién de
itraban en dicho domicilio™.,
guntamos qué relacién pueden tener los hechos indicados
ues bien la cuestién esta en que el sefior Humberto
jo un oficial retirado de la Armada de Chile, el cual se
ipleado civil a contrata en la misma, fue procesado ante la
105 de paz el afio 1993, siendo condenado en 1994 por los,
to de deberes militares, de desobediencia y desacato, por
nado libro, haber intentado su publicacién y haber realizado
is al respecto, respectivamente,
la oportunidad en este caso de entrar a revisar la normativa
lena, pese a ser una demanda por la violacién de la libertad
cho de propiedad, pues conforme al precedente
e le esta permitido pronunciarse respecto a derechos
intas victimas o sus representantes aunque sean distintos de
demanda de la Comisién, si se atinen a los hechos
da, y asimismo pueden examinar procesos internos, si
imiento de si el Estado ha violado o no sus obligaciones
|
|
|
yf|
l
De esta forma, como los hechos relatados en la demanda, sireron a su vez para
procesar y condenar en Chile a don Humberto Palamara ante Ip jurisdiccién penal
militar de tiempos de paz, por los delitos de desobediencia, ingumplimiento de
deberes militares y desacato, el Tribunal reflexiona sobre los pfocesos nacionales
dirigidos en su contra, a propésito de la vulneracién del derecijo a ser ofdo por un
tribunal competente, independiente e imparcial; del serch fa proteccién
Judicial; y del derecho a la libertad personal y garantias juditiales™.,
2. Reforma de Ia Jus' ar cl
consideraciones del fallo Palamara
lena a la lud de las
Luego de un detenido estudio de los procesos militares seguidi's en contra del
sefior Palamara, la Corte es enfética al concluir la necesidad dq adecuar el derecho
interno a los esténdares internacionales en materia de jurisdicfién penal militar,
siendo posible indicar las siguientes materlas a modificar: la cdmpetencia material y
personal de los tribunales militares; su estructura y organizacipn, pues
comprometen la independencia e imparcialidad del juzgador; y el procedimiento
penal militar, pues vulnera garantias procesales fundamental
|
256. En cuanto a la necesidad de adecuar el ordenamiento jufidico interno a los
estdndares internacionales sobre jurisdiccién penal militar, la Gorte estima que en
caso de que el Estado considere necesaria la existencia de una) jurisdiccién penal
militar, esta debe limitarse solamente al conocimiento de delitps de funcién
cometidos por militares en servicio activo. Por lo tanto, el Estaflo debe establecer, a
través de su legislacién, limites a la competencia material y personal de los
tribunales militares, de forma tal que en ninguna circunstanciajun civil se vea
sometido a la jurisdiccién de los tribunales militares (supra péjfrs. 120 a 144). El
Estado deberd realizar las modificaciones normativas necesarigs en un plazo
razonable,
257. Ademés, en el Ambito de la jurisdiccién penal militar, os|fniembros de los
tribunales deben revestir las garantias de competencia, impartialidad e
Independencia Indicadas en los pérrafos 120 a 161 de la presehite Sentencia.
Asimismo, el Estado debe garantizar el debido proceso en la jurisdiccién penal
militar y la proteccién judicial respecto de las actuaciones de Is autoridades
militares, tal como se ha sefialado en los parrafos 162 a 189 dp este fallo"=™.
Accontinuacién se desarrolla cada una de las materias que reqiieren incluirse en la
Reforma de la Justicia Militar, complementando lo dicho por la|CIDH con doctrina
chilena atinente a esta tematica.
2.1, Competencia material y personal de los Tribunales Militargs
A juicio de la CIDH, la jurisdiccién penal militar chilena es amafisima en cuanto a su
competencia, tanto material como personal, lo cual no es acorgle con el articulo 8.1
de la CADH®®, que estatuye que “toda persona tiene derecho p ser ofda por un
Juez o tribunal competente”. Constituyendo ello ademas ~conforme a los articulos
1° y 2° de la Convencién- una vulneracién del deber general fe respetar los,
derechos, al no haber adoptado en esta materia disposiciones He derecho interno
acordes con el citado articulo. i
Conforme a las consideraciones de la CIDH, en un Estado demperatico de derecho
la jurisdiccién penal militar ha de tener un alcance restrictivo ¥ excepcional2, pues
se ha de considerar que el derecho penal en el ambito castrenge tiene el cardcter
de ultima ratio, por tanto los procesos penales deben constitulf el medio menoslesivo para que el Estatlo proteja los intereses de las Fuerzas Armadas. Por ello, en
caso que un Estado la
los principios y garanti
lonserve, esta debe ser minima y encontrarse inspirada en
ys que rigen el derecho penal moderno:
"124, La Corte ha establecido que toda persona tiene el derecho de ser juzgada por
un juez o tribunal comy
jetente, independiente e imparcial. En un Estado
democratic de derech® la jurisdiccién penal militar ha de tener un alcance
restrictivo y excepcion
especiales, vinculados
Por ello, solo se debe fl
su propia naturaleza a|
I y estar encaminada a la proteccién de intereses juridicos
-on las funciones que la ley asigna a las fuerzas militares.
izgar a militares por la comisién de delitos o faltas que por
fenten contra blenes juridicos propios del orden militar.
(..) 132. La Corte estiga que en las normas que definen Ia jurisdiccién penal militar
en Chile no se limita el
la naturaleza de los bi
estrictamente militare:
atentan contra dichos
pueden ser cometidos
de las particulares fun
Jurisdiccién penal milit
tendido a reducirse e i
lo conserve, este debe|
garantias que rigen el
(..) 134, Claramente fi
Iribarne no pusieron el
proteccién penal. Incl
que también tiene el
sefior Palamara Iriban
‘menos lesivo para qu
Como Io indicare el ju
lconocimiento de los tribunales militares a los delitos que por
es juridicos penales castrenses protegidos son
'y constituyen conductas graves cometidas por militares que
ienes juridicos. El Tribunal destaca que esos delitos solo
or los miembros de las instituciones castrenses en ocasién
jones de defensa y seguridad exterior de un Estado. La
ren los Estados democréticos, en tiempos de paz, ha
jcluso a desaparecer, por lo cual, en caso de que un Estado
er minimo y encontrarse inspirado en los principios y
jerecho penal moderno.
js conductas por las que fue condenado el sefior Palamara
peligro los bienes juridicos militares susceptibles de
0 la Corte entiende que, debido al cardcter de ultima ratio
echo penal en el mbito castrense, el sometimiento del
a los distintos procesos penales no constituia el medio
lel Estado protegiera los intereses de la Armada",
Sergio Garcia Ramirez, en su voto concurrente“, hoy es
acentuada la tendencid| a la reduccién, e inclusive a la desaparicién, del
enjuiciamiento militar.
més la tendencia rest
caso de guerra, pues
excepcional. En efecto}
ordinaria que rige sobtt
excepcién 0 suspensid
precisar quiénes son |
actiie con criterio resti
Asi, el juez Garcia, ind
consideraciones detert
realidad, un dato prof
los integrantes de las
que pertenecieron a la
dejado de hallarse en
del tema en litigio: del
relacionadas con el deg
castrense’®,
2.1.1. Competencia mi
Conforme a las consid
la jurisdiccién penal m|
n algunas legislaciones, en las que ha avanzado mucho
tiva de la jurisdiccién militar, esta se mantiene solo en el
Derecho militar es de carécter funcional y esencialmente
al estar ante una justicia especial, sustraida a la jurisdiccién
todas las personas, y por lo tante de frente a una
del régimen de igualdad, es necesario que a la hora de
justiciables y cual es la materia de la justicia militar se
ictivo, como ante todo supuesto de excepcién.
que “el fuero militar puede aplicarse en el espacio de dos
nantes e infranqueables: a) la subjetiva, que es, en
ional: sobre militares en servicio activo, lo cual excluye a
‘eservas”, a los “retirados” y a otras categorias de individuos
fuerzas armadas, a titulo de integrantes activos, pero han
isa situacién; y b) la material, conectada con la naturaleza
je tratarse de cuestiones directas e inmediatamente
jempefio militar, la funcién de las armas, la disciplina
terial
raciones de la CIDH, en un Estado democratico de derecho
itar ha de estar encaminada a la proteccién de interesesjuridicos especiales, vinculados con las funciones que la ley as}pna a las fuerzas
militares“, En otras palabras, los tribunales militares deben donocer solo aquellos
delitos que por la naturaleza de los bienes juridicos penales
son estrictamente militares y constituyen conductas graves co}
que atentan contra dichos bienes juridicos“®,
Como lo indica Jorge Mera, que mayoritariamente se juzgue al
trenses protegidos
etidas por militares
iviles y a militares
por delitos comunes, desnaturaliza la razén de ser esta justicid especializada, que
debiera ocuparse exclusivamente de los delitos propiamente ny
jlitares cometidos
por miembros de las Fuerzas Armadas"*, La justicia castrensd debe conocer de las
més graves infracciones a los deberes militares cometidas por|
iniformados y que
comprometen la eficacia de estas instituciones como érganos tBcnico-profesionales
especializados en la defensa de la seguridad exterior del Esta
tribunales militares no sean percibidos como una justicia de fu
existe para proteger a sus miembros o los intereses corporati
instituciones armada:
. Es preciso que los
ro, privilegiada, que
s de las
Por su parte, la CIDH sefiala que las normas penales militares|Hebieran establecer
claramente “cudles son las conductas delictivas tipicas en el ai
ito militar, deben
determinar la antijuridicidad de la conducta ilicita a través de |p descripcion de la
lesién o puesta en peligro de bienes juridicos militares graven
Justifique el ejercicio del poder punitivo militar, y especificar |
sancién. Las autoridades que ejercen la jurisdicclén penal mill
el principio de legalidad y, entre otras, constatar la existencia
inte atacados, que
correspondiente
r, al aplicar las
je todos los
normas penales militares e imputar el delito a un militar, rae deben regirse por
elementos constitutivos del tipo penal militar, asi como la exi
de causales de exclusién del delito"*»,
Nos parece acertada la opinién de Cea Cienfuegos, en relaciér]
penales del Cédigo de Justicia Militar deben adecuarse a las d
orientaciones actuales del Derecho Penal, a fin de que exista |
armonia entre la normativa especial castrense y la totalidad di
juridico penal,
|
|
2.1.2, Competencia personal
Por su parte, en el Ambito de la competencia personal, esta d
conocimiento de delitos de funcién cometidos por militares en|
manera tal, que en ninguna circunstancia un civil puede verse
jurisdiccién de los tribunales militares,
Esto se condice y va estrechamente relacionado con la compet
estos tribunales, pues si ellos existen solo para conocer los di
su propia naturaleza atentan contra bienes juridicos propios dt
estos "delitos solo pueden ser cometidos por los miembros de
castrenses en ocasién de las particulares funciones de defens
de un Estado
En este sentido, “las normas penales militares deben establect
ambigUedad quignes son militares, tinicos sujetos activos de I
militares",
En el presente caso en andlisis se consideré que una persona
jencia o inexistencia
Ja que los tipos
trinas y
debida coherencia y
| ordenamiento
be limitarse solo al
servicio activo, De
sometido a la
ncia material de
tos 0 faltas que por
I orden militar, ergo
jas instituciones
y seguridad exterior
claramente y sin
s delitos
ion el cardcter de
militar en retiro no podia ser juzgado por los tribunales militarps, pues los
empleados civiles a contrata no integran escalafén, trabajan
sectores de
renovacién anual de caracter contingente, no ocupan plazas co
jntempladas en lasleyes de planta, no soh parte de las dotaciones permanentes, pueden ser
extranjeros y sus cont}
"127. En el presente ¢
hecho controvertido ef
proceso de retiro de af
que dieron origen a log
empleados civiles ac
ejercieron la jurisdiccit
través de la interpreta
empleado civil a cont
jurisdiccién penal mil
i
128. Como ha queda
Armada de Chile en 1
de 1993 (supra parr.
persona con el cardct
militares. En el presei
acervo probatorio, los}
en sectores de renovat
contempladas en las |
pueden ser extranjeros
empleados civiles a c:
acuerdo a las necesid
sometidos a las sanci
militar"2®,
2.2, Estructura y com
|
De acuerdo a las cons}
de paz vulnera la imp:
conforme lo estatuye
que tienen estos Trib
2a de la Convencién,
Pacto.
mayor objetividad par
Judicial frente a los d
funcién judicial. Y, por
integrantes no tengan
alguna de las partes
En efecto, en toda mt
Asi pues, Ia estructural
vulnera la independent
concluyé la CIDH en of
servicio activo, estén
cadena de mando, su
idoneidad para ejercer
de inamovilidad y no
cargo de juez o fiscal
Por solo mencionar un
Marcial, compuesta po}
oficiales en servicio ac
fatos son de renovacién anual:
0, la calidad de militar de! sefior Palamara Iribarne es un
tre las partes, El Estado ha alegado ante la Corte que el
uel de la Armada concluyé con fecha posterior a los hechos
procesos penales y, al mismo tiempo, ha alegado que los
trata tienen la condicién de militares. Las autoridades que
n penal en el juzgamiento del sefior Palamara Iribarne, a
ion de diversas normas entendieron que este, como
ta, debia ser considerado militar a los efectos de la
(Supra parr. 63.70).
demostrado, el sefior Palamara Iribarne ingresé a la
172 y su retiro como militar se produjo a partir del 1 de enero
i3.1). En un caso anterior, la Corte consideré que una
de militar en retiro no podia ser juzgado por los tribunales
fe caso, también se toma en cuenta que, tal como surge del
mpleados civiles a contrata no integran escalafén, trabajan
én anual de cardcter contingente, no ocupan plazas
iyes de planta, no son parte de las dotaciones permanentes,
y sus contratos son de renovacién anual. Ademés, los
trata realizan un “empleo de carcter transitorio”, de
les de la institucién, por lo cual deberian encontrarse
1es propias de regimenes laborales y no al derecho penal
josicién de los Tribunales Militares en tiempo de paz
jeraciones de la CIDH, la justicia militar chilena de tiempos
cialidad e independencia que deben tener los tribunales,
dl articulo 8.1 de la CADH, por la estructura y composicién
ales, y de esta forma vulnera ademds las disposiciones 1a y
I tener normas internas que no respetan los derechos del
n se debe garantizar que el juzgador cuente con la
enfrentar el juicio. Asimismo, la independencia del Poder
’4s poderes estatales es esencial para el ejercicio de la
isu parte, “la imparcialidad del tribunal implica que sus
lun interés directo, una posicién tomada, una preferencia por
laue no se encuentren involucrados en la controversia*@2,
lorgénica de la justicia militar en Chile en tiempos de paz,
ia que los tribunales han de tener, pues conforme lo
neral, los integrantes de los tribunales “son militares en
lubordinados jerdrquicamente a los superiores a través de la
jombramiento no depende de su competencia profesional e
las funciones judiciales, no cuenten con garantias suficientes
seen una formacién juridica exigible para desempefiar el
2jemplo, la segunda instancia estd conformada por la Corte
‘cinco miembros, de entre los cuales tres de ellos son
ivo, por ende siguen al mando de sus comandantes yprecisan responder a ellos, Asi se vislumbra que la independencia del tribunal
esta amagada por existir una subordinacién jeraérquica militar}
Pues, como lo seffala Jaime Couso, los uniformados, naturalménte se inclinan a los
institutos armados, por su propia identificacién con los interes¢s institucionales, lo
que va en desmedro de los civiles que queden afectados con sbs decisiones, pues
estos jueces militares, incluso profesionalmente estan imposibfiitados de
independizarse de las expectativas y eventuales presiones de fus superiores
jerérquicos™),
En consecuencia, la reforma a la justicia militar debe necesaridmente considerar
reglas que independicen en forma objetiva, precisa y concretalfl actuar de los que
Integran tribunales militares. As{ pues, se han de reorganizar (ps tribunales
militares sobre la base de jueces letrados profesionales, inamqvibles, plenamente
incorporados al Poder Judicial, sin relacién administrativa ni fupcional con las
Fuerzas Armadas®.,
Por su parte, la imparcialidad se ve ademés afectada porque “gn el Fiscal se
concentran las funciones de investigar y juzgar. El Fiscal es el bncargado de emitir
el auto de procesamiento y realizar la acusacién fiscal a la qua responde el
acusado, de forma tal que las decisiones sobre la necesidad y legalidad de las
medidas probatorias y su valor para acreditar la comisién de Ua conducta delictiva
las realiza la misma persona",
Esta concentracién de las potestades de investigar, acusar y jizgar en un solo
sujeto jurisdiccional, es propio de un sistema inquisitivo, escrifo, formalista y de
prueba reglada, Por tanto, seria necesario reformar la justicia filitar siguiendo el
modelo acusatorio del proceso penal que actualmente rige a Iq jurisdiccién
ordinaria, luego de la reforma que entrara en vigencia el afio 4005. De otra forma,
ademés se vulnera la igualdad ante ia ley, no existiendo razérjalguna para que los
militares no tengan el mismo sistema de garantias que se aplia a los civiles en la
jurisdiccién penal ordinaria=, 1
En general, conforme lo destaca Marla Inés Horvitz, se supon@ la ausencia de
imparcialidad objetiva en el tribunal militar, cuando: a) se corponen dnicamente
por militares sin formacién juridica; b) se juzga a civiles que apmeten delitos
contemplados en las leyes penales militares; y c) se juzgan delitos comunes
cometidos por militares en contra de victimas civiles' Por tafto, consideramos
que la amplitud de la competencia de la jurisdiccién penal milifar chilena, también
incide en la imparcialidad de estos tribunales. i
i
2.3. Garantias judiciales fundamentales mermadas con la actupl regulacién del
proceso penal militar j
|
2.3.1, Debido proceso
La CIDH, ademas de analizar la competencia, Imparcialidad ¢ dependencia de los
Tribunales Militares chilenos, a propdsito de la causa Palamara versus Chile, estudia
las garantias procesales de publicidad y defensa del imputado} contempladas en el
articulo 8 de la CADH, en los procesos penales militares a los que fue sometido el
sefior Palamara Iribarne.
En efecto, una de las principales caracteristicas que debe reuniir el proceso penal
durante su sustanciacién es su cardcter de publico, constituyeipdo un elemento
esencial de las garantias judiciales. En la Convencién Americatja el articulo 8.5
establece que “[e]l proceso penal debe ser pliblico, salvo en Id que sea necesarioi
para preservar los inte
reses de la justicia”. Ello se garantiza a través de la
realizacién de una etapa oral en la que el acusado pueda tener inmediacién con el
Juez y las pruebas y qhie facilite el acceso al piiblico, lo cual no ocurre en la actual
regulacién de la justiqla militar chilena, pues se rige por un sistema inquisitivo, con
una etapa preliminar
que la referida normal
le imposibilita el ace
contra, lo cual le impi
dispuesto en el articu
Ademés, el ser el sui
un defensor consagra
solicitar diligencias pr
fundamentos de los
jumaria, secreta y escrita®"., Por tanto, la CIDH considera
va “es contraria al derecho de defensa de! imputado, ya que
efectivo al expediente y a las pruebas que se recaban en su
je defenderse adecuadamente, en contravencién de lo
8.2.c)"2,
rio Secreto afecta el derecho del imputado a ser asistido por
lo en el articulo 8.2.d) de la CADH, pues el defensor tiene que
batorias al fiscal sin tener conocimiento del sumario ni de los
‘gos formulados a su defendido. En otras palabras, la reala
de que el sumario oon screto es de por si contrario con el derecho a defensa del
imputado, pues impo:
defensa®®.
ibilita el acceso al expediente, impidiendo una adecuada
Por su parte, nos pardte acertada la opinién del juez Garcia Ramirez, en cuanto a
que el debido procesoles fundamental en un Estado de Derecho, pues provee a la
mejor defensa de los
lerechos fundamentales cuando se ven afectados o se,
encuentran en riesgo. | que el solo hecho de que el Tribunal no sea competente, no
sea imparcial 0 no se:
proceso, por tanto, la
tribunal, sin haber sid
de los procesos nacioriales, considerando sus deficiencias especifica:
Independiente implica una necesaria vulneracién al debido
IDH podria haberse limitado a establecer la inidoneidad de!
necesario calificar cada uno de los actos realizados dentro
lefensa,
patrocinio, prueba, roi rs0s, etcétera, pues incluso si estas actuaciones se
hubiesen realizado cot
en pie como verdader
como auténtica senter
con las atribuciones j
el mayor apego a la Convencién Americana, no se tendrian
is actos procesales ni la resolucién final adquiriria firmeza
ia, porque unas y otra carecerian del presupuesto sobre el
isdiccionales indispensables para conocer de cierta causa en
que se construye el ie un tribunal competente, esto es, un rgano dotado
funcién de la persona }
solo admite contadas
2.3.2. Proteccién judi
La Corte “ha estableci
la materia, y atento a la regla de igualdad ante la ley, que
rigurosas excepciones,
ial respecto a las actuaciones de las autoridades militares
lo que la salvaguarda de la persona frente al ejercicio
arbitrario del poder puiplico es el objetivo primordial de la proteccién internacional
de los derechos humai
jos. En este sentido, la inexistencia de recursos internos
efectivos coloca a una|persona en estado de indefensién"™™. Y bajo esta
Perspectiva, se ha sefiplado que para que el Estado cumpia con lo dispuesto en el
Citado articulo 25.1 della CADH “no basta con que los recursos existan
formalmente, sino es
persona la posibilidad
Breciso que sean efectivos, es decir, se debe brindar ala
jeal de interponer un recurso sencillo y répido que permita
alcanzar, en su caso, I proteccién judicial requerida ante la autoridad
competente”“*i),
En el caso analizado,
sefior Palamara interp
adversas y afectaban
revestian las garantia:
natural, por lo cual el
cualquier otro recurso
j
ta garantia se ve conculcada, pues todos los recursos que el
iso en contra de las decisiones militares que le fueron
is derechos, fueron resueltos por tribunales militares que no
\de imparcialidad e Independencia y no constituian el juez
stado violé el derecho a un recurso sencillo y rdpido 0 a
fectivo ante jueces o tribunales competentes:
i
|“185. La Corte ha sefialado en parrafos anteriores de la prese|
Estado no ha garantizado al sefior Palamara Iribarne su derecl
tribunales competentes, independientes e imparciales y no ha
garantias judiciales en los procesos a los que se vio sometido.!
Iribarne fue sustraido de la jurisdiccién ordinaria y privado de|
natural (supra parr. 161). Lo anterior trajo como consecuenci
recursos que este interpusiera en contra de las decisiones mil
adversas y afectaban sus derechos fueran resueltos por tribul
revestian las garantias de imparcialidad e independencia y no
natural, por lo cual el Estado violé el derecho a un recurso ser
cualquier otro recurso efectivo ante jueces o tribunales comp.
186. Esta situacién se vio agravada debido a que el Cédigo de}
solamente permite que sean apeladas muy pocas de las decis|
ite Sentencia que el
jo a ser juzgado por
espetado algunas
El sefior Palamara
er ofdo por el juez
que todos los
res que le fueron
les militares que no
constituian el juez
illo y rapido oa
fentes,
Pusticia Militar
nes que adoptan las
autoridades que ejercen Ia jurisdiccién penal militar que afectn derechos
fundamentales de los procesados. Por ello, el sefior Palamara
interponer recursos en contra de algunas de las decisiones adi
ribarne no pudo
ptadas por las
autoridades que ejercen la jurisdiccién penal militar que lo afeftaban, como por
ejemplo la denegatoria de acceder al sumario, dado que dichal
inapelable"®2,
Por otro lado, "el derecho de acceso a la justicia no se agota
procesos internos, sino este debe ademas asegurar, en temps
derecho de la presunta victima a obtener un control jurisdicc
determinar si los actos de las autoridades militares han sido ai
de los derechos y garantias minimas previstos en la CADH, as|
establecidos en su propia legistacién, to cual no es incompatib|
funciones que son propias de las autoridades militares"),
Al respecto, si bien, el articulo 20 de nuestra Constitucién Poll
recurso de proteccién para salvaguardar los derechos fundam|
personas ante la justicia ordinaria, en el presente caso ha qui
dicho recurso no resulta idéneo ni efectivo para proteger los
debido a que la Corte de Apelaciones de Punta Arenas, sin ev
producido las alegadas violaciones a los referidos derechos fu
considerd que la jurisdiccién militar era la competente para ci
por ello no podia pronunciarse al respecto, |
CONCLUSIONES
ldecisién era
nel trémite de
razonable, el
jpal que permita
joptados al amparo
como los
ip con el respeto a las
ica contempla el
intales de las
jado demostrado que
rechos conculcados,
juar si se habian
jamentales,
jocer el caso y que
1. La Justicia Militar chilena vulnera el deber general establecigo en la CADH de
respetar los derechos reconocidos en ella, pues no ha adecua
Justicia Militar y sus normas complementarias, a fin de hacerk
2. En virtud del fallo Palamara versus Chile, de 22 de novier|
encuentra en la necesidad y obligacién, si no quiere ser respo!
internacionalmente, de reformar la Justicia Militar, De esta fo
la mencionada sentencia, sino también dejard de contravenir
de la Convencién. |
3. Los puntos fundamentales a reformar dicen relacién con las|
el Cédigo de
is efectivos.
re de 2005, Chile se
isable
12 No solo respetaré
3 articulos 1° y 2°
siguientes materias:
competencia, independencia e imparcialidad de los tribunales jnilitares; estructura y
composicién de los tribunales militares; establecer un procedin
garantice y promueva el debido proceso.
iento que respete,4, En cuanto a la com|
Militar, en el plano pel
funcionarios militares
jurisdiccién penal cast
jetencia, por el caracter funcional y excepcional del Derecho
‘onal, solo debieran conocer de delitos cometidos por
\ctivos; y, en el Ambito material, los delitos militares deben
lense solo ha de conocer de delitos militares cometidos por
ser claramente code y diferenciados de los delitos comunes. Ergo, la
funcionarios activos d
contra de bienes jurid
circunstancia debiera
cometidos por militard
las Fuerzas Armadas en ejercicio de sus funciones, en
os de cardcter castrense; en tiempos de paz, bajo ninguna
zgar a civiles, y como contrapartida los delitos comunes
debieran ser conocidos por fa justicia ordinaria.
5, La estructura y composicién de los tribunales militares esté en directa relacién
con el establecimienta|de un procedimiento penal de tipo acusatorio. Pues, el solo
hecho de diversificar
sentenciar, nos garant
Tribunales.
6. Asimismo, este sist
pues los imputados te}
procesales, al ser un
7. Sin embargo, la au:
militares, por tener la
Militar, hace necesari
organica de la justicia
autonomia en el eferc
8. Es imperiosa la necg
también vulnera princf
distintas personas las funciones de investigar, juzgar y
iza de clerta forma la imparcialidad e Independencia de los
ma acusatorio contribuiria a garantizar el debido proceso,
\drén la posibilidad de hacer valer todos sus derechos
istema basado en la oralidad.
ncia de Independencia de los integrantes de los tribunales
alidad de oficiales del escalafén del Servicio de Justicia
luna reformulacién no solo procedimental, sino también
enal militar, donde se consagre en forma expresa una
io de sus funciones jurisdiccionales.
isidad de reformar la Justicia Militar, pues su estructura no
ios fundamentales de un Estado democratico, tales como la
solo no se adecua a pos rer Americana sobre Derechos Humanos, sino
igualdad ante la ley, yi
Notas
* Este comentario cort
aprobar el curso optat}
José Miguel Olivares,
la Pontificia Universid:
2006.
1 Palamara Iribarne vg|
| debido proceso.
ssponde a una versién revisada de! trabajo presentado para
/o Eficacia de la Jurisdiccién Internacional, dictado por el Dr.
jentro del Programa de Doctorado en Derecho impartido por
Catélica de Chile, en el primer semestre académico del afio
Chite (2005), parrafo 2, punto resolutivo 14: “14. El Estado
debe adecuar, en un plazo razonable, el ordenamiento juridico interno a los.
estdndares internacio
de que considere necet
limitarse solamente al
en servicio activo. Por}
legistactén, limites a la)
de forma tal que en ni
les sobre jurisdiccién penal militar, de forma tal que en caso
aria la existencia de una jurisdiccién penal militar, esta debe
onocimiento de delitos de funcién cometidos por militares
lo tanto, el Estado debe establecer, a través de su
lcompetencia material y personal de los tribunales militares,
guna circunstancia un civil se vea sometido a la jurisdiccién
de los tribunales penales militares, en los términos de los parrafos 256 y 257 de la
presente Sentencia’. |
|
2 Pérrafo 2. Para detalles vid. parrafos 63 y sigulentes,3 Vid. Hechos probados de la causa, especialmente parrafos
63.16, 63.17, 63.66, de la sentencia en comento. I
1, 63.4, 63.6,
4 Vid. v.g. pérrafo 142 Acosta Calderén vs. Ecuador (2005); { parrafo 88 Fermin
Ramirez vs. Guatemala (2005),
5 Pérrafo 120 del fallo,
6 Pérrafo 121 del fallo. |
7 Parrafos 145 a 161 del fallo, |
8 Parrafos 182 a 189 del fallo,
9 Parrafos 162 a 181, y 190 a 228 del fallo,
10 Parrafos 256 y 257 del fallo.
11 Asi pues, parrafo 135 de la sentencia en comento, “la ampfit
ud de la jurisdiccién
penal militar por la definicién de los delitos militares y la remigin a diversas leyes
que otorgan competencia a los tribunales militares, cabe resajfar que en Chile
dichos tribunales pueden conocer numerosos casos, debido odo" la calidad del
sujeto activo de los delitos militares es indiferente”; Cfr. parr
La jurisdiccién tan extensa que tienen los tribunales militares|
142 del fallo: "142.
n Chile que les
otorga facultades de fallar causas correspondientes a los tribupales civiles no es
acorde con el articulo 8.1 de la Convencién Americana”.
12 Cea (2002) p. 262, sefiala que la justicia militar en un Estqd
pretende cautelar determinados valores del émbito militar: digci
seguridad militar.
13 Pérrafos 124, 132 y 134 del fallo en comento.
jo de Derecho
iplina, jerarquia y
14 Puntos resolutivos 10-18 del voto concurrente del juez Sergio Garcia Ramirez.
15 Horvitz (2002) p. 147, Indica por ejemplo que en Alemania y Francia se ha
abolido totalmente la jurisdiccién penal militar en tiempos T
16 Punto resolutivo 12 del voto concurrente del juez Sergio
17 Pérrafo 124 del fallo en anillisis, ya transcrito.
rcia Ramirez.
18 Se puede afirmar que estos delitos deben contemplarse enjel Cédigo de Justicia
Militar, y no serian tales los delitos que las leyes especiales sqmeten al
conocimiento de los tribunales militares, ni delitos de nuestralfegisiacién penal
ordinaria 0 comin cometidos por militares. Cfr, Lopez (1995)_
19 Mera (2002) p. 7.
20 Mera (2002) p. 9. A
p. 87-95.
21 Parrafo 126 del fallo; Mera (2002) pp. 11-72, critica a part|r de un concepto
riguroso de delito militar, el catdlogo de los delitos contemplafos en el Cédigo de
Justicia Militar, planteando la supresién de la mayoria de ello:
Por no reunir lascaracteristicas de los qelitos militares propios, y por otra parte, la incorporacién de
otros tipos penales que si atentarian contra la seguridad exterior del Estado.
22 Cea (2002) p. 269,|
23 Pérrafo 256 del fallp, ya transcrito.
24 Pérrafo 132 del fallb.
25 Pérrafo 126 del fall
26 Parrafos 127 y 128)
27 Pérrafo 146 del fall.
28 Pérrafo 155 del fallp.
29 Vid. articulo 48 del]
idel fallo.
Codigo de Justicia Militar.
30 Cfr. Lopez (1995) p, 133.
31 Couso (2002) p. 78,
32 Couso (2002) p. 74}
33 Pérrafo 157 del fall.
34 Cir. Cea (2002) p. 2
35 Horvitz (2002) p. 1;
36 Como lo recuerda
sistema inquisitivo corl
proceso principalment
adjunta al expediente,
articipacién del impu
final de la investigacié
probatoria, la que,
término del plenario,
momento derecho aa
37 Pérrafo 170 del fallg.
38 Eva (2006) p. 163.]
0%.
64,
fa (2006) p. 162, en la justicia militar sigue rigiendo un
dos etapas caracteristicas: el sumario y el plenario, Es un
escrito en el que el fiscal realiza lz investigacién secreta que
EI sumario es secreto y restringe la posibilidad de
ido y la defensa, la cual solo puede intervenir al momento
, donde se abre el plenario y se puede solicitar una etapa
mbargo, no invalida lo ya adjuntado durante el sumario. Al
juez militar dicta sentencia, no existiendo en ningdn
iencia publica,
39 Cfr. puntos 1-18 dal voto concurrente del juez Sergio Garcia Ramirez.
40 Pérrafo 183 del fall
41 Parrafo 184 del falld.
en comento.
42 Parrafos 185 y 186 Hel fallo.
43 Pérrafo 188 del falld,|
44 Parrafo 187 del fallo; “187. El Tribunal toma en cuenta qug el articulo 20 de la
Constitucién Politica de Chile contempla el recurso de protecclbn para salvaguardar
los derechos fundamentales de las personas ante la justicia offinaria. Sin embargo,
en el presente caso, ha quedado demostrado que dicho recurgp interpuesto por la
esposa del sefior Palamara Iribarne a su favor y de su familiasupra parr. 63.36)
para proteger garantfas constitucionales a la integridad psiquifa, el derecho a
desarrollar cualquier actividad econémica, el derecho a la profiedad y el derecho de
autor, no resultd idéneo ni efectivo para proteger los derecho} del sefior Palamara
Iribarne, debido a que la Corte de Apelaciones de Punta Arend, sin evaluar si se
habian producido las alegadas violaciones a los referidos dereghos fundamentales,
consideré que la jurisdiccién militar era ta competente para cdnocer el caso y que
por ello no podia pronunciarse al respecto. Consecuentement4, el Estado no
garantizé “que la autoridad competente prevista por el sistemp legal del Estado
decidiera sobre los derechos de toda persona que interponga fal recurso”.
Bibliografia
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el siglo XXI” en: Mera, Jorge (editor): Hacia una reforma de Id justicia militar
(Santiago, Cuadernos de andlisis Juridico, serie publicaciones pspeciales 13, Escuela
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Jorge (editor): Hacia una reforma de la justicia militar (Santiago, Cuadernos de
anilisis Juridico, serie publicaciones especiales 13, Escuela de[Derecho Universidad
Diego Portales) pp. 147-180. i
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Mera, Jorge (2002): “La parte especial del derecho penal militgr chileno. Bases
programaticas para su reforma integral” en: Mera, Jorge (editpr): Hacia una
reforma de la justicia militar (Santiago, Cuadernos de andlisis Puridico, serie
publicaciones especiales 13, Escuela de Derecho Universidad Qiego Portales) pp.
11-72. '
Normas Citadas |
Cédigo de Justicia Militar
|
|
Decreto N° 873, Convencién Americana sobre Derechos Hume 10s, “Pacto de San
José de Costa Rica”, Diario Oficial, 5 de enero de 1991,Jurisprudencia Gitada
Acosta Calderén vs. Equador (2005): Corte Interamericara de Derechos Humanos,
24 de junio de 2005, $erie C No 129.
\
Fermin Ramirez vs. Glatemala (2005): Corte Interamericana de Derechos
Humanos, 20 de junialde 2005, Serie C No 126.
Palamara Iribarne vs. [Chile (2005): Corte Interamericana de Derechos Humanos,
22 de noviembre de 205, Serie C No 135