UNICIENCIA 13 pp. 73-79 1996 BASES ECOLOGICAS PARA EL MANEJO FORESTAL SOSTENIBLE ! INTRODUCCION Una de las caracteristicas més importantes de los bosques tropicales es su gran complejidad. Esta se refleja no solamente en el gran nimero de especies por unidad de érea, en comparacién con los bosques de zonas templadas, sino también en la enorme diversidad de estructuras de los dirboles y plantas, la gran variedad en la forma y el tamafio de las hojas, la diversidad de estratos de la vegetacién en el bosque y la variabilidad de composicién en e808 estratos, entre otros. A nivel fisiol6gico de las plantas, también se presenta mucha diversidad. Las diferentes tasas de crecimiento y los variados re- querimientos de luz delas diversas especies sondos ejemplos concretos. Esta gama tan amplia de espe- cies, estructurag, requerimicntos fisiol6gicos, for- mas y tasas de crecimiento dentro de los bosques tropicales es hisicamente la principal causa de la complejidad de su manejo. La ecologta forestal esté orientada a estu- diar y conocer las caracteristicas de cada una de Tas especies del bosque © plantacién por separado (autoccologia), como también del conjunto Ilama- do bosque (sinecologia), junto con las relaciones existentes entre las diferentes especies y estas con su medio ambiente. Pero la ecologia forestal tam- bign ofrece informacién necesaria acerca del bos- que y las plantaciones para poder disefiar, con base en ella, los diferentes tratamientos. Bsto dltimo es la silvicultura, Se la define como «el manejo cien- tificode los bosques para la continua produccién de. bienes y servicios» (BAKER 1950) 0 «la aplica- ciénde los conocimientos de la ecologia forestal al cuidado del bosque» (HAWLEY y SMITH 1982). Adelaida Chaverri Polini Escuela de Ciencias Ambientales Universidad Nacional, 86-3000 Heredia, Casta Rica Hoy dia sabemos que la ecologia forestal y lasilviculturade bosques tropicales presentan dife- rencias con las de zonas templadas, aunque la mayor parte de los principios son semejantes. Por esta raz6n, cuando se intent6 introducir, sin cam- bios, la silvicutura de bosques templados a las zonas tropicales, se presentaron problemas de tipo ecol6gico y silvicultural, Aunque los primeros es- fuerzos hacia el establecimiento formal de la cultura tropical empezaron en la India en el siglo XIX, con el botdnico alemén BRANDIS, quien escribi6 el primer plan de manejo para teca y establecié el sistema silvicultural «taungya» (LAMPRECHT 1990), no fue sino hasta muchos afios después que nacié la preocupacién general entre ecdlogos y silvicultores para manejar los bosques tropicales por medio de sistemas més idéneosal altamentediversoy complejo ecasistema tropical. Para disefiar un sistema silvicultural, que conlleve a un manejo forestal sostenible, tendria- ‘mos que partir de una Tista extensa de caracterfsti- cas, requerimientos y relaciones de las especies y del bosque. Sin embargo, los conocimientos en las ciencias forestales, generados a través de experien- ciasen bosques tropicales, noshan dado indicadores sobre los aspectos bésicos que deben tenerse en cuenta para poder Ilevara cabo un adecuado mane- jo forestal, basado en la regeneracién natural (ver cuadro 1), IT Kesumen de fa ponencia presemtada.en In Mesa Redon- a, organizada por la Oxganizacién de Estudios Tropi- cales(OET) parala ComisiGnde Asuntos Agropecuarios ¥y Recursos Naturales y 1a Comisién Especial para el Medio Ambiente de la Asamblea Legislativa. 24 de noviembre de 1994, 3‘Adolaida Chaverri. Bases ecoldgicas para el manejo forestal sostenible ~eraduray ap sayzedse op sods (saquatpuad ‘seyso.y ‘sou -fureo) ofooenxa ey ap epensape uorsvoytue|g, (epidutp epyeo ‘seuno‘sofqea) ounusu ouep ap seoTu99) 2p os, “ower ~D00UE [e soUDU aIUDUTEID31] oLuoTITEYSOAOIdY anbsog [2 B2a1109 A souaaof seus ‘afe|o} 2p Uoroeiodiooursy, sajouault SONUEIp ap Ependape UOIIeZTNA, “ROLNSUIRIP UOTONGUNSIP TENNIS op UNTOUALULPAL “earyiooy sod sonpratput saivaroyjns ap uprousruepy somruy ap eysasoa v ap spndsop openoaya oqtarumypoxordy sejuenoayy 090d saisadsa ap uproealestoD “sopyes soouon & sofara sof0qrp sounde ‘«soavja» satoadso op uptowasasi0;) “soroadso se] SepO1 U9 UorOUAITEY “opeorour [2 ua sepeidaoe (sayquiopew ou £ sajqeropeu) sojeiosoutod saizedsa ap ore uaunjo “opeorour jo uo sepeidaoe (salqeiapem ou & soqgesopeu) seyetozetu0a sotsadsa ap ore O19LUNN, “ovorueyooacide Jap o3any ‘epyeo ve sesuaxioud ou sapoads anbsog jap uptoesadnaa1 2p ype o upexapour pepisede ronsHoy, pepfousdouroy wizar “SopEpYRUE sorey9 ap winpiade 2] Yoo uarorjouag as anb sarsadsy “epnioaut f 2p PULOy ua RoLIBUIeIp UpronqunsiC] “jeanted ugioerauadoy epensopy Ipsasof ojuaqumysasoxdo 7” sopepuawosas soodoqose sowedsy rorsosof ns bps sojqoasep sappjoiauios sopsadsy porsasof vspiu vy ua sjqoasop soa}89]009 swoysyia}oosn.) 2|qqU2}80s jeqSaL10) ofsuewL Jo wxed seopBopo99 saseg “TL oapen, 14En la siguiente discusi6n se da énfasis al manejo para aprovechar la madera, debido a que este recurso es ef que mayor impacto ocasiona al ambiente (comparado con la extracci6n de plantas ornarentales, bejucos, semillaso animales decaza). Sin embargo, para cualquier uso de los bienes y servicios provenientes del bosque, se debe tener en cuenta un marco de referencia similar. CARACTERISTICAS ECOLOGICAS DE- SEABLES EN LA MASA FORESTAL PARA. UN ADECUADO MANEJO FORESTAL En primer lugar, vale lapenaaclarar quehoy fa prevalece Ja idea, entre ecdlogos forestales y silvicultores, que cualquier bosque puede ser ma- nejado, aunque los rendimientos sean muy bajos 0 muy variados, 0 los ciclos de corta muy distancia- dos temporalments, Sin embargo, existen algunas caracteristicas deseables, tanto ecolbgicas como, dasométricas, propias de la masa forestal, que faci- litan el manejo forestal. A continuacién se discuten, las més importantes Un primer rasgo se refiere a la existencia de una regeneracién natural adecuada, es decir, que el bosque posea una cantidad suficiente, viable y de buena forma de arbolitos de diferentes edades que, sustituirin efectivamente a los drboles maduros, tanto en el caso de un aprovechamiento forestal, como demuerte natural. En algunos bosques donde no se encuentra suficiente tegeneracién natural en un momento dado, se puede fomentar su aparicién, por medio de tratamientosal bosque. Lamayoriade los tratamientos implican aperturas del dosel (es- trato superior del bosque}. Sin embargo, debe te- nerse en cuenta que aunque muchas especies pue- denbeneficiarse en sirdesarrollo poraperturasen el dosel y, por tanto, por una mayor cantidad de luz, existen otras especies que se desarrollan mejor en condiciones de baja luminosidad através detoda su vida. Laregeneracign natural se ha clasificado de diferentes maneras. Muchos autores han llamado regeneracién natural a todos los drboles y arbolitos cuyo didmetro alaaltura del pecho (d}es menor que 10 em, Estos individuos, a su vez, reciben diferen- tes nombres, dependiendo de su tamaito: brinzales, latizales bajos y latizales altos. Hoy en dia en UNICIENGIA, nuestro pais y en general en América tropical, se icluye dentro del término de regeneracién natural todos los individuos cuyo d sea inferior al diéme- tro minimode corta, que en Costa Ricaes de 60cm. En este segundo caso, la regeneraci6n natural tam- bign incluye a los fustales (rboles mayores de 10 cm. d), cuyos didmetros se encuentren entre 10 y 59 cm. Se efectiian muestreos diagnésticos de la regeneracién natural en los bosques para compro- barsilaregeneracién natural esadecuada. Paraello se calcula el porcentaje de cuadriculas que contie- nen brinzales, latizales bajos, latizales altos y fustales. Se han establecido porcentajes minimos de presencia de estas plintulas como medida para ‘garantizar una adecuada regeneracién, Ademés de considerar la cantidad de rege- neracién natural, también se toma en cuenta 1a calidad de estos individuos: si son deseables (si la especie es maderable, si su forma es adecuada) 0 no, y su potencialidad para crecer. En este segundo punto se desea asegurar que el arbolito tenga sufi- ciente espacio por encima de él para crecer, que la iluminacién natacal que recibe sea suficiente, que no tenga bejucos que le impidan o perjudiquen su crecimiento. En este sentido, existen metodologias para determinar o estimar la cantidad de luz recibi- da, por medio de instrumentos 6pticos 0 sensores electrénicos, o més ficilmente, por medio de la observacién del niimero y la posicién de las copas de los Arboles que se presentan por encima de los arbolitos considerados. Otra caracteristica de un bosque muy rela- cionada con la primera, recomendable para poten- ciar su manejo forestal en relacién con la produc- cién de madera, es la forma de la distribuciGn diamétrica de la masa forestal. Los bosques tropi cales, que suelen ser disceténeos (de diferentes edades), muestran normalmente una distribucién diamétrica en forma de 5 invertida. Esta distribu- cidn asegura la viabilidad de las poblaciones de las diferentes especies en los bosques heterogéneos opicales, ya que refleja una gran cantidad de brinzales y latizales, que de forma paulatina reem- plazan una menor cantidad de fustales y un niimero relativamente bajo de drboles grandes. En general, ‘el manejo forestal de bosques maduros, basado en 18‘Adsiaida Chaverr Bases ecolégicas para el manejo forestal sostenibie laregeneracién natural, busca mantener esta forma deladistribuciéndiamétrica, atin después del apro- vechamiento. Con el fin de lograrlo, se concentra la extraccién forestal en los drboles de mayores did- metros, actividad que se leva a cabo en varias operaciones. Sin embargo, los bosques m4s o me- ‘nos coeténeos (de la misma edad), como los secun- darios, muestran una distribucién semejante a una curva normal y suclen manejarse mediante otros sistemas. Para que las diversas especies que se desean manejar en un bosque tengam un crecimiento ade- cuado, después de un aprovechamiento forestal, debe asegurarse que sean favorecidas por la apertu- ra parcial del dosel del bosque. Dicho de otra manera, las especies deben mostrar una mayor tasa de crecimiento, a rafz de la apertura del dosel, del consecuente aumento en fuminosidad dentro del bosque y de la eliminaci6n parcial de Ia competen- cia radical en el suelo, condiciones originadas por los tratamientos silviculturales y por el aprovecha- miento forestal en sf, Esta caracterfstica de cada especie, que se refiere a sus requerimientos de luz, se denomina «temperamento». Un cierto nimero de especies forestales, con temperamento un tanto helidfito (planta que requicre de mucha luz para su desarrollo), © semiheliéfita en alguna etapa de su crecimiento, se verdn favorecidas por la apertura, del dosel y la entrada de mayor cantidad de luz. De hecho, un porcentaje alto de las especies del bosque muy hdmedo tropical crecen adecuadamente en claros creados en forma natural dentro del bosque. Sin embargo, para las especies esciéfitas totales (las que requieren crecer bajo dosel durante todesu ciclo de vida) 0 para las esci6fitas parciales (las que requicren de sombra durante parte de su desarrollo) deberd mantenerse las condiciones de poca Iumi- nosidad dentro del bosque. Esto se puede lograr cuando se planifica y ejecuta un manejo a nivel de pequeiios bloques de Arboles, que presentan un mismo (0 similar) temperamento, En relacién con el punto anterior, otra caracteristica que facilita el manejo es Ia homogeneidad de especies (llamada también homogencidad florfstica). Es més fécil manejar un bosque homogéneo porque los ctecimientos y tem- peramentos de las especies son més similares, Sin ‘embargo, no solamente bosques homogéneos pue- 6 denser manejados. Cuando el bosque presenta mas bien una hetcrogeneidad floristica, se puede recu- rir al manejo de pequeitos bloques de arboles de temperamento similar, como se mencioné anterior- mente, 0 por Gltimo, a un sistema silvicultural selectivo, que tome en cuenta inclusive a los érbo- les individuales. Sin embargo, para estos bosques heierogéneos de numerosas especies deseables, tanto desde el punto de vista ecoldgico come eco- némico, se procura un manejo policiclico (varias operaciones de aprovechamiento de la masa fores- tal comercial), en vez de uno monocfclico (una sola operacién de aprovechamiento de la masa forestal comercial). La modalidad policiclica representa una manera de mantener diversas condiciones am- bientales (luz, humedad, temperatura) dentro del bosque, para asegurar en lo posible la presencia de una comunidad que mantenga la biodiversidad original del bosque. Ademds, el bosque debe tener la capacidad de recuperarse de los daiios ocasionados por un aprovechamiento forestal controlado, Dichode otra ‘manera, el dafio ocasionado porel aprovechamien- to forestal debe ser tal que le permita al bosque recuperarse en el corto 0 mediano plazo. En la actualidad, se toman diferentes medidas, algunas de las cualesmencionaremos, para minimizar estos affos. Desde el punto de vista comercial, el bosque susceptible al manejo debe presentarun volumeno biomasa suficiente de especies maderables 0 utili- zables, Este concepto, igual al del parrafo anterior, involucra de muevo el factor tiempo. De hecho puede argumentarse que dado un perfodo suficien- temente largo de tiempo entre las intervenciones silviculturales, précticamente todo bosque presen- tard un volumen susceptible de ser extraido en un aprovechamiento forestal, Ademds, a Io anterior hay que aftadir que la cantidad de especies «nue- vas» (que no se utilizaban antes en el mercado) de. los bosques tropicales va en aumento afio con affo, dada la creciente dificultad de encontrar drboles de las especies valiosas tradicionales de maderas duras. Finalmente, se espera que los aprovecha- mientos selectivos 0 de otro tipo no traigan como consecuencia posterior una tasa de caida dedrboles algo mayor que Ia natural en el bosque. Esta cafdase explica, por ejemplo, por el impacto mayor de} viento sobre los arboles restantes, en especial sobre aquellos en las oriltas de los claros, Iuego de que algunos de sus vecinos han sido extraidos ASPECTOS ECOLOGICOS NECESARIOS DE CONSIDERAR EN LA PLANIFICACION DEL APROVECHAMIENTO FORESTAL, Para poder garantizar un mfnimo dafio a la masa forestal durante un aprovechamiento, debe considerarse una serie de aspectos, tanto técnicos como ecolégicos. Entre los primeros, que no se considerarén aquf en detalle, estan: el uso del equipo necesario, como cufias (para dirigir Ia caida de los arboles) y cables (con el fin de evitar fa Hegada de la maquinaria a cada uno de los troncos, Jo cual ocasiona mucho dafio a la regeneraci6n y a Jos suelos), la planificacisn de la direccién de caida de los drboles, la planificacién de la red de carninos principales y de las trochas de arrastre, la adecuada capacitacién de los obreros y otros. Entre los aspectos ecolégicos, se detallan a continuacién los més importantes. El aprovecha- miento dentro del manejo forestal sostenible debe contar con una visi6n ecolégica, ademas de la comercial y latécnica, Todo aprovechamiento debe considerar la mantencién en el bosque de todas las especies (aunque no siempre con la misma densi- dad), ya que cada una cumple con alguna fancién ecolégica en el bosque. Algunas especies, no nece- sariamente comerciales, pueden ofrecer habitat 0 alimento a especies faunisticas que a su vez son polinizadoras 0 dispersoras de semillas de las espe cies forestales comerciales deseables. Otras espe- cies, quiz4s no bien conocidas hoy dfa, podran ser fuente futura de compuestos orgénicos medicina- les o podrén llevar a cabo alguna funcién ecolégica estratégica, alin desconocida, dentro del bosque. Las especies que tienen una funcién impor- tante dentro de un ecosistema, en ofrecer alimento © albergue a una serie de otras especies, y cuya desaparicién significaria el rompimiento de cade. nas © redes alimentarias y, por, ende, cambios sustanciales en el ecosistema, se denominan espe- cies «claves» (PAINE 1966, 1969). Especial cuida- do debers darse al mantenimiento de estas especies enelbosque, y aque los tratamientossilviculturales UNICIENCIA no repercutan negativamente sobre su desarrollo, En el caso de que las especies claves sean plantas esci6fitas, una posible medida que se debe conside- tar es la apertura de claros attificiales (para el aprovechamiento forestal) muy pequefios, en los sectores donde se localiza la especie. Debe consi- derarse también Ja permanencia en el bosque de algunos drboles viejos 0 troncos cafdos que oftez- can un habitat adecuado a distintas especies de la fauna. Las especies poco comunes deben conser varse en el bosque. La conservacién de la biodiversidad del bosque es también de suma im- portancizen ef manejo forestal sostenible. Como se mencion6, estas especies raras pueden contener un potencial de uso insospechable para un futuro. Se debe igualmente considerar efectuar los aprovechamientos forestales teniendo en cuenta la fenologfa de las especies, en especial, la fenologia de la produccién de frutos. Se sugiere asegurarse que la produccién de frutos continde su ritmo de modo similar, 0 a lo sumo, se incremente en su frecuencia y cantidad, y que el aprovechamiento forestal no se efectie sino hasta después de la cosecha; de otro modo, se estaria poniendo en peligro la pérdida de las especies en el bosque. ‘Otro aspecto que se debe tener en cuenta se relaciona con la ecologia de las poblaciones de especies en el bosque. Como es conocido, algunas especies de drboles comerciales presentan normal- mente una densidad muy baja dentro del bosque, €., uno © dos individuos por hectérea. En estos casos, efectuar un aprovechamiento que disminuya de modo sustancial esta densidad puede implicar la imposibilidad de que sus polinizadores encuentren alos diferentes individuos y que la especie también esaparezca del bosque. Ademés del nvimero de individuos de una especie, debe existir un nimero adecuado de arboles de cada sexo, en el caso de especies divicas (ie., cade drbal contiene tinica- mente flores de un solo sexo), conel fin de asegurar una adecuada reproduecién de la especie, ‘También se sugiere que la planificacién del aprovechamiento considere la mantenciGn de la misma distribuci6n diamétrica existente en el bos- que, la cual serd en la mayorfa de fos casos de 7‘Fielaida Chavern. Bases ecolagicas para el manejo forestal sostonible bosques heterogéneos disceténeos, la de una J invertida. Esto por cuanto el aprayechamiento es- tara baséndose en las condiciones naturales ecoligicas de la masa forestal, tales como la rege neracién natural, 1a mortalidad, el temperamento de las especies y vtras, lo cual significa trabajar con la dindmica del bosque, en vez de ir en contra de ella, Todo aprovechamiento forestal debe efec- tuarse de manera tan integral como sea posible de os productos que se extraen, mientras que a la vez se debe dejar los productos no utilizables para que su pudricidn se realice en el bosque. Es decir, se debe planificar la utilizacién no solamente de la madera de aserrio, sino también de las productos de didimetros menores, tales como, postes y lefias y de otros productos que se extraen (e.g., plantas orna- mentales). Sin embargo, a la vezes de suma impor- tancia que parte de la biomasa del aprovec! to, en especial las ramas, las hojas y la corteza permanezcan en el bosque para disminuir la salida de nutrimentos del ecosistema. Algunos estudios (e.g., WARING y SCHLESINGER 1985) han de- mostrado que la mayor parte de los cationes impor- {antes en la nutricién de las plantas se alojan en las, hojas, ramas jvenes y cortezas de los Arboles, y que la madera en sf, esta compuesta por carbono, hidrdgeno, oxigeno y nitrdgeno, todos ciementos, que Tas plantas pueden fijar por medio del proceso dela fotosfntesis y de los microorganismos fijadores de nitrogeno relacionados con las plantas, La des- composicién de dichos residuos en el bosque ase- gura la continuidad dela fertilidad natural del suelo forestal, InveStigaciones adicionales en un futuro han de indicar lacantidad y calidad de los residuos que deben dejarse en el bosque para mantenerdicha fertilidad. mien- Ademas, el volumen de madera aprovecha- ble nunca debe ser mayor al incremento por unidad de drea y de tiempo de ese bosque. De hecho, como norma de seguridad, podria ser ligeramente menor a este. Considerando que se siguen todas las nor- mas ecoldgicas esbozadas en este documento (y algunas otras no especificadas), la duracién de los ciclos de corta variaré dependiendo de tos incre- ‘mentos, pero también de la rentabilidad financiera.. Teéricamente, si un bosque crece a una tasa de 3 metros cttbicos por hectirea por aio, se podré aprovechar una cantidad de madera algo menor a esta por hectairea y por afio, o poco menos de 6 m3/ hivaito cada dos afios, 0 poco menos de 15 m'/hal afio cada 5 anes. La frecuencia de los ciclosde corta dependeré especialmente del grado de reposicién del bosque, en madera y en recuperaci6n ambien- tal, después de cada intervencisn y de Ia rentabili- dad de cada operacién de aprovechamiento. EN SINTESIS En general, el manejo forestal sostenible de un bosque tropical es un asunto complejo. El bos- que tropical es un ecosistema que presenta gran diversidad, y las investigaciones y’ experiencias deben continuarse, con el fin de conocerlo mejor. Sin embargo, la madera y los demas bienes y servicios del bosque son un recurso renovable, si el manejo se Ilevaacabo adecuadamente. Ademas de los aspectos téenicos y econémicos que de forma normal se toman en cuenta en un aprovechamiento forestal, es necesario enfatizar muy especialmente Ios aspectos ecoldgicos. Desde luego, debe darse la suficiente atencién tambign a los aspectos sociales, Si contamos con bosques con potencialidad. para producir madera y otros bienes y servicios, si paseemos las bases ecolégicas para el manejo fo- restal, sicontamos con investigaciones y experien- cias silviculturales por parte del sector forestal, si estamosen capacidad de efectuar una planificacién cuidadosadel aprovechamiento forestal, si conoce- mos las técnicas adecuadas para la extracci6n fo- restal y contamos con personal calificado que pue- dalevara cabo correctamente las diferentes opera- ciones, podemos Hegar a mancjar en forma sostenible ¢ integral el recurso bosque. AGRADECIMIENTOS ‘Se agradece a los ingenieros forestales Mariclos Alfaro y Wilberth Jiménez y a un lector anénimo sus comentarios y sugerencias al presente documento.REFERENCIAS Baker, FS, 1950. The principles of silviculture. McGraw-Hill, New York, Hawley, R.C.y DM. Smith, 1982, Silvieulturapréctica, Omegn, Barcelona. 544 pp. Lamprecht,H. 1990. Silvicultraea os répicos. GTZ, Bsehbom, ‘Alemania, 335 pp. UNICIENCIA Paine, R.T. 1966, Food web complexity and species diversity ‘American Natoralist 100:65-75, Paine, R-T. 1969, A note on trophic complexity and community stability. American Naturalist 0465-75. Waring, RH, y W.H. Schlesinger. 1985. Forest ecosystems: concepts and management. Academic Press, London. 340 pp.