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MONICIN DE ENTRADA
Buenos das a todos. Bienvenidos en este domingo del mes de
noviembre a la Fiesta del Seor!
Poco a poco nos vamos acercando al tiempo de Adviento. Todo
tiene un final; la vida de las plantas, la de los animales, la de los
alimentos y, por qu no recordarlo, tambin la de los seres
humanos.
Pero, Jess, a todos los que creemos y esperamos en l nos da
otra oportunidad despus de haber vivido en la tierra: nos ofrece
su Reino. Es decir; una vida eterna junto a Dios.
Quin nos recuerda todo esto? Pues, ni ms ni menos, que
nuestra Iglesia. Hoy tenemos un recuerdo especial por nuestra
Dicesis de Cartagena. La gran familia de todas nuestras
parroquias, comunidades y religiosos, presidida por nuestro
Obispo Don Jos Manuel. Hoy pediremos por ella y, adems,
seremos generosos para que no le falte lo imprescindible.
Iniciemos esta celebracin con alegra y dando gracias a Jess
por fiarse y confiar en nosotros.
OFRENDAS
1. Con este OVILLO DE LANA queremos representar, Seor,
la vida que no se acaba. Es difcil encontrar los dos extremos del
hilo. Pero sabemos, Seor, que con un poco de paciencia y de
cuidado, es posible dar con ellos. Que no olvidemos de buscar la
otra orilla en la que, T Seor, nos esperas.
2. Esta CARTULINA, CON LOS PROBLEMAS DE
NUESTRA SOCIEDAD, quiere reflejar nuestra preocupacin
como cristianos. Te los ofrecemos para que no vivamos de
espaldas a ellos.
3. Con estas FOTOGRAFAS de la Catedral de nuestra
Dicesis y de nuestro Obispo Don Jos Manuel te ofrecemos,
Seor, la alegra de pertenecer a nuestra Iglesia que camina en
Cartagena-Murcia.
4. El pan y el vino, Seor, simbolizan perfectamente el manjar
del cielo. Tu Cuerpo y tu Sangre derramada por la salvacin de
todos los hombres. Que nunca nos falten como fuerza en nuestro
caminar.
ORACIN FINAL
QUE LLEGUE TU DIA, SEOR.
Porque contigo, Seor, seremos ms felices.
Porque sin Ti, Seor, nos falta lo ms importante.
Porque a tu lado, lo que vemos, es nada muy poco.
QUE LLEGUE TU DIA, SEOR.
Porque nuestros problemas son muchos.
Porque a veces caemos en la desesperanza.
Porque no siempre vemos claro.
QUE LLEGUE TU DIA, SEOR.
Y que nos preparemos ya desde ahora.
Y que no olvidemos que somos peregrinos en la tierra.
Y que levantemos nuestros ojos para querer verte.
QUE LLEGUE TU DIA, SEOR.
Y, mientras tanto, seamos tus fieles amigos.
Y sigamos tus caminos.
Y escuchemos tus Palabras.
Y celebremos lo que T nos dejaste: la Eucarista.
Amn.