La posibilidad de prestar servicio es una de las bendiciones al ser miembro
de la Iglesia. Cuando somos bautizados, hacemos convenio de dar servicio (Mosah 18:8-10) Debemos dar de nuestros talentos, tiempo y medios para ayudar a satisfacer las necesidades fsicas y espirituales de los dems; hacer lo que hizo Nuestro Seor y llegar a ser como l. Los lderes del Sacerdocio delegan una responsabilidad poco despus de su bautismo a los miembros nuevos, ste llamamiento es una bendicin, no se recibe paga por hacerlo, es voluntario; somo sostenidos por la membresa y recibimos bendiciones especiales para ayudarnos a cumplir satisfactoriamente con la tarea que se nos ha encomendado. Todos los miembros poseen talentos y habilidades que nos pueden ayudar a edificar el Reino de Dios y la Iglesia debe aprovechar los. Trabajar aceptando el llamamiento y siendo diligentes en aprender y cumplir con nuestros deberes crece nuestra fe y desarrollamos nuevos talentos y aumentamos nuestra capacidad para servir recibiendo mayores bendiciones. El verdadero cristiano nace del amor que sentimos por nuestro Salvador y por aqullos que el Seor nos ha confiado para prestar ayuda. Cuando nos ayudamos servimos al Seor. Por medio del servicio aumentamos nuestra capacidad de amar y nos volvemos menos egostas.