Vous êtes sur la page 1sur 9

PROTOCOLO DE PROTECCIÓN A VÍCTIMAS Y TESTIGOS DE LA LEY

975 DE 2005

El COMITÉ DE COOORDINACIÓN INTERINSTITUCIONAL DE JUSTICIA Y


PAZ

CONSIDERANDO:

CONSIDERACIONES JURIDICAS Y JURISPRUDENCIALES


(Elaborado por Defensoría del Pueblo)

En los siguientes párrafos se enuncian los postulados generales sobre las


obligaciones del Estado para adoptar medidas y acciones necesarias
encaminadas a proteger los derechos humanos de toda la población, y en
particular, de los sujetos y grupos de población incondiciones de especial
estado de indefensión y vulnerabilidad como las víctimas y testigos en el
marco de la ley de justicia y paz.

En tal sentido y de acuerdo con el inciso segundo del artículo 2º de la


Constitución Política “Las autoridades de la República están instituidas para
proteger a todas las personas residentes en Colombia, en su vida, honra,
bienes, creencias y demás derechos y libertades, y para asegurar el
cumplimiento de los deberes sociales del Estado y de los particulares.”

En materia de jurisprudencia, la Corte Constitucional ha señalado que “la


seguridad personal, en el contexto colombiano, es un derecho fundamental
de los individuos. Con base en él, pueden exigir, en determinadas
condiciones, medidas específicas de protección de parte de las autoridades,
con el objetivo de prevenir la materialización de cierto tipo de riesgos
extraordinarios contra su vida o integridad personal, que no tienen el deber
jurídico de soportar, y que las autoridades pueden conjurar o mitigar.

Con respecto, al tema de protección de las víctimas y testigos en el marco


de la ley 975 de 2005, el artículo 38 señala que los funcionarios a los que se
refiere esta ley deberán adoptar “las medidas adecuadas y todas las
acciones pertinentes para proteger la seguridad, el bienestar físico y
psicológico, la dignidad y la vida privada de las víctimas y los testigos…”,
teniendo en cuenta los factores de edad, género, salud, la índole del delito,
en particular cuando este entrañe violencia sexual, irrespeto a la igualdad
de género o violencia contra niños y niñas.

Igualmente, enuncia en el inciso 4 del artículo 15 que le corresponde a la


Fiscalía General de la Nación velar “por la protección de las víctimas, los
testigos y los peritos que pretenda presentar en el juicio.”

Acerca de las responsabilidades que le asiste a las entidades en materia de


protección, el artículo 218 de la Constitución Nacional prevé que es fin
primordial de la Policía Nacional, el mantenimiento de las condiciones
necesarias para el ejercicio de los derechos y libertades públicas, y para
asegurar que los habitantes de Colombia convivan en paz.

En cuanto a la Fiscalía General de la Nación, la Ley 418 de 1997, modificada


y prorrogada por las leyes 548 de 1999, 782, de 2002 y 1106 de 2006
establece en su artículo 67 la creación con cargo al Estado y bajo la
dirección y coordinación de la Fiscalía General de la Nación, “el Programa de
Protección a Testigos, Víctimas, Intervinientes en el proceso y Funcionarios
de la Fiscalía, mediante el cual se les otorgará protección integral y
asistencia social, lo mismo que a sus familiares hasta el cuarto grado de
consanguinidad, segundo de afinidad, primero civil y al cónyuge, compañera
o compañero permanente, cuando se encuentren en riesgo de sufrir
agresión o que sus vidas corran peligro por causa o con ocasión de la
intervención en un proceso penal”.

Con respecto a la Dirección de Derechos Humanos del Ministerio del Interior


y de Justicia, la citada ley señala en su artículo 81, refiriéndose al Programa
de Protección que “El Gobierno Nacional pondrá en funcionamiento un
programa de protección a personas, que se encuentren en situación de
riesgo inminente contra su vida, integridad, seguridad o libertad, por causas
relacionadas con la violencia política o ideológica, o con el conflicto armado
interno…”

Teniendo en cuenta las obligaciones establecidas tanto por la Constitución


Nacional como las citadas normas el Gobierno Nacional, mediante el
Decreto 3570 de 2007, crea el Programa de Protección para Víctimas y
Testigos de la Ley 975 de 200, cuyo objeto es “salvaguardar la vida,
integridad, libertad y seguridad de la población que se encuentre en
situación de amenaza o riesgo como consecuencia directa de su
participación en calidad de víctima o testigo del proceso de Justicia y Paz”.

En dicho decreto se definen los principios, las instancias de coordinación


interinstitucional y las entidades responsables para la adopción y
aplicación de las medidas de protección.

Igualmente, en el numeral 1 del artículo 10 del decreto 3391 de 2006,


instituye como una de las funciones del Subcomité de Protección de
Víctimas y Testigos “elaborar el Protocolo de Protección a víctimas y
Testigos en el marco de la ley 975 de 2005 de 2005 y someterlo a
aprobación del Comité Interinstitucional de Justicia y Paz.”

Así mismo, el artículo 8 del decreto 3570 de 2007 dispone como una de las
funciones del Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo el aplicar el protocolo
de Protección a Víctimas y Testigos en el marco de la ley 975 de 2005,
aprobado por el Comité Interinstitucional para la Justicia y la Paz creado por
el Decreto 3391 de 2006.

1. CONOCIMIENTO DE LAS AMENAZAS A VÍCTIMAS Y TESTIGOS


EN EL MARCO DE LA LEY 975 DE 2005

Cuando las personas que manifiesten la condición de víctimas de grupos


armados organizados al margen de la ley, sujetos a la ley 975 de 2005,
pongan en conocimiento, de manera directa, o por cualquier medio idóneo,
ante cualquier autoridad, amenazas o situaciones de riesgo derivadas o
relacionadas con su participación en el proceso de Justicia y Paz o para
impedirla, el servidor público que las atienda dará aviso EN FORMA
INMEDIATA al Comandante de Estación de Policía del lugar donde está
ubicado el solicitante de protección. En las ciudades capitales de
departamento, se remitirá la petición de protección al Comandante de
Policía de Departamento.

A la par con el trámite anterior, el servidor diligenciará el formato de


registro de hechos atribuibles a Grupos Armados al margen de la Ley, el
cual será remitido a la Unidad Nacional Para la Justicia y la Paz de la Fiscalía
General de la Nación.

En aquellos eventos en que el Comandante de Estación de Policía, o el


Comandante de Departamento reciban más de una petición de protección
referida a la misma persona, enviará oficio informando que el procedimiento
de protección establecido en este protocolo se inició con el primer aviso
presentado por la entidad o persona que haya presentado la solicitud de
protección.

2. DILIGENCIAMIENTO DE DENUNCIA PENAL

El Comandante de Estación de Policía o Departamento diligenciará EN


FORMA INMEDIATA, en el formato diseñado para el efecto, la denuncia que
formule la presunta víctima o testigo sobre el particular, la cual debe
permitir posteriormente al Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo adoptar
las decisiones pertinentes.

En todos los eventos, El Comandante de Estación de Policía enviará copia de


la denuncia a la Dirección Seccional de Fiscalías competente para adelantar
la correspondiente investigación, de lo cual se informará expresamente a la
víctima.

3. ASISTENCIA INICIAL

Cuando el Comandante de Estación de Policía o Departamento que conozca


el caso advierta que la situación de riesgo de la víctima amerita
implementar asistencia inicial para proteger su seguridad personal o su
vida, iniciará la ejecución de la Asistencia Inicial EN UN TÉRMINO NO
SUPERIOR A 36 HORAS, la cual tendrá como DURACIÓN MÁXIMA QUINCE
DÍAS y no será prorrogable. Para esta decisión se indagará la situación de
riesgo manifestada por la víctima bajo la gravedad del juramento,
debiéndose considerar el hecho de que estando fuera de la zona de riesgo,
la persona no cuenta con los recursos económicos necesarios para su
subsistencia, hasta tanto el Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo decida
de fondo el caso.

La Policía Nacional, representada por el Comandante de Estación de Policía


o Departamento, deberá garantizar la seguridad del titular y su núcleo
familiar, durante el tiempo que dure la Asistencia Inicial dispuesta, o cuando
esta no se autorice, durante el término de la evaluación de amenaza y
riesgo

Cuando se disponga la Asistencia Inicial, el Comandante de Policía a cargo


remitirá simultáneamente el caso a la Secretaría Técnica del Grupo Técnico
de Evaluación de Riesgo para que ésta libre la misión de trabajo ordenando
la evaluación de amenaza y riesgo

Las autoridades locales, brindarán la colaboración que la Policía Nacional


requiera para el cumplimiento de lo dispuesto en este protocolo. (La
Procuraduría considera que se debe indicar cuáles son las autoridades y
cuál sería su responsabilidad, ya que el Decreto 3570 no hace mención a
autoridades de ámbito local)

El Ministerio Público verificará el cumplimiento de los términos dispuestos


en el Decreto 3570 de 2007 y hará un seguimiento especial a la actuación
de todas las autoridades concernidas en el procedimiento establecido en el
presente protocolo.

La Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación deberán apoyar, en el


ámbito de sus funciones legales, las gestiones necesarias para el trámite
inmediato y eficaz de la Asistencia Inicial.

4. TRÁMITE DEL REQUERIMIENTO DE PROTECCIÓN

En todos los casos el Comandante de Estación de Policía o de Departamento


que conozca de la presunta situación de riesgo o amenaza en que se
encuentra la persona solicitante de protección remitirá a la Secretaría
Técnica del Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo que corresponda de
acuerdo a su competencia territorial, copia de la denuncia y la información
obtenida relacionada con el asunto, señalando si en el caso se dispuso o no
la Asistencia Inicial. La Secretaría Técnica del Grupo Técnico de Evaluación
de Riesgo a cargo librará la respectiva misión de trabajo para evaluar la
situación de amenaza y riesgo.

5. ARCHIVO

La Secretaría Técnica del Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo abrirá un


expediente por cada una de las personas que soliciten protección al
Programa, el cual contendrá toda la información relacionada con el caso.

6. EVALUACIÓN DE AMENAZA Y RIESGO

Recibida la denuncia penal y los documentos anexos de la Estación o


Departamento de Policía que conoció de la situación reportada por la
presunta víctima o testigo, la Secretaría del Grupo Técnico de Evaluación de
Riesgo de la ciudad que corresponda librará de manera inmediata la misión
de trabajo al funcionario del equipo investigativo que corresponda por
reparto equitativo entre el Departamento Administrativo de Seguridad -DAS,
Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación para que en el TÉRMINO
MÁXIMO DE QUINCE (15) DÍAS efectúe la evaluación del caso específico, de
acuerdo con los parámetros establecidos en este protocolo y en el manual
de procedimiento de evaluación de amenaza y riesgo que para el efecto
apruebe el Subcomité de Protección, cuyo resultado se consignará en el
formato establecido.

El informe relacionado con la evaluación del caso deberá especificar lo


siguiente:

1. El nivel de riesgo que soporta el evaluado.


2. Si el caso es competencia del Programa de Protección de Víctimas y
Testigos en el marco de la Ley 975 de 2005, para lo cual tendrá en
cuenta la existencia o no del nexo causal entre las amenazas o el
riesgo sufrido por el evaluado y su condición de víctima o testigo
dentro del proceso especial de Justicia y Paz.

3. Potencial agresor del evaluado y la zona identificada como de mayor


riesgo para su vida.

4. Si se requiere de alguna medida de protección especial de aquellas


consagradas en el artículo 22 del decreto 3570 de 2007.

5. Las personas que además del evaluado deben ser beneficiarias de la


medida de protección que se recomiende, teniendo en cuenta que en
todos los casos se debe verificar su parentesco y que el riesgo
soportado, se derive de la participación del titular en el proceso
especial de Justicia y Paz.

6. Aceptación expresa de la presunta víctima o testigo de las medidas


de protección que ofrece el Programa disponga a su favor.

7. GRUPO TÉCNICO DE EVALUACIÓN DE RIESGO

El Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo funcionará en la ciudad de


Bogotá, y tendrá seccionales en las ciudades que a continuación se
relacionan, cada una de ellas con su comprensión territorial:

Barranquilla, su comprensión territorial será los departamentos de Atlántico,


Guajira, Bolívar, Cesar, Sucre, Córdoba y Magdalena

Medellín, su comprensión territorial será los departamentos de Antioquia,


Caldas, Chocó, Quindio y Risaralda.

El Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo ubicado en la ciudad de Bogotá


conocerá los casos que se presenten en el Distrito Capital y en los
departamentos de Huila, Boyacá, Tolima, Arauca, Casanare, Caquetá,
Amazonas, Vichada, Vaupés, Guainía, San Andrés, Meta, Santander, Norte
de Santander, Cauca, Nariño, Putumayo, Valle del Cauca y Cundinamarca.

Los Grupos Técnicos de Evaluación de Riesgo Seccionales cumplirán las


funciones señaladas en los numerales 2 y 3 del artículo 8º del Decreto 3570
de 2007 en su circunscripción territorial, se sujetarán al reglamento
aprobado por el Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo de Bogotá y
remitirá a éste informes mensuales que permitan consolidar el informe que
se debe entregar mensualmente al Director del Programa de Protección.

8. VALORACIÓN DE LA EVALUACIÓN DE AMENAZA Y RIESGO

Una vez recibido el informe de evaluación de amenaza y riesgo, el Grupo


Técnico de Evaluación de Riesgo lo analizará DE MANERA INMEDIATA y si
procede alguna medida protectiva, la autorizará e indicará la entidad
responsable de su aplicación y su duración, de acuerdo con lo previsto en el
Decreto 3570 de 2007.
Si la evaluación de amenaza y riesgo determina que las amenazas
investigadas no son de competencia del Programa de Protección creado
dentro del marco de la Ley 975 de 2005, remitirá lo actuado a la autoridad
competente con la mayor brevedad posible.

Para esos efectos tendrá en cuenta, entre otras, las competencias


establecidas por la Ley 418 de 1997 y los Decretos No. 2816 de 2006 y 978
de 2000 para el Programa de Protección de Derechos Humanos del
Ministerio del Interior y de Justicia, y la Ley 418 de 1997 para el Programa
de Protección a Testigos, Víctimas e Intervinientes en el Proceso Penal de la
Fiscalía General de la Nación, o en su defecto la competencia asignada a la
Policía Nacional en el Decreto 1355 de 1970.

Las decisiones del Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo serán


consignadas en un acta suscrita por todos sus integrantes.

Una vez finalizada la sesión del Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo, la


Secretaría Técnica remitirá al Director del Programa de Protección de
Justicia y Paz, o su delegado, copia del acta de la sesión cumplida, con base
en la cual éste notificará la decisión adoptada al titular, notificación que se
hará de conformidad con la ley, debiéndose anotar que contra la decisión
adoptada proceden los recursos de reposición y apelación y los términos
con que cuenta para interponerlos.

Una vez notificado el interesado, el Director del Programa elaborará acta en


la que conste la fecha de la notificación, momento a partir del cual
empiezan a correr los términos para interponer los recursos a que haya
lugar.

De igual forma, la Dirección del Programa de Protección comunicará la


Decisión,
1. A la entidad que debe ejecutar la medida,
2. Al peticionario de la protección cuando sea diferente al titular, a
quien sólo se informará sobre la respuesta positiva o negativa, sin
especificar otro detalle.
3. A la Policía Nacional para informarle el término de finalización de la
asistencia inicial y la autoridad que en adelante tendrá a su cargo la
protección de la víctima o testigo.

9. ELABORACIÓN Y SUSCRIPCION DEL ACTA DE COMPROMISOS

El Director del Programa de Protección de Víctimas y Testigos de Justicia y


Paz, una vez reciba la comunicación del Grupo Técnico de Evaluación de
Riesgo en la que se informa la decisión adoptada, elaborará el acta de
compromiso que debe suscribir la persona objeto de protección, la cual
debe contener lo siguiente:

1. Medida de protección que se ha ordenado


2. Duración de la medida de protección
3. Obligaciones de la persona amparada con el Programa de Protección
4. Aceptación de la medida y de las obligaciones impuestas

El acta deberá ser suscrita por el Director del Programa y por el beneficiario
de la medida de protección, de acuerdo con las especificaciones que para el
efecto establezca el Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo.

Una vez se suscriba el acta de compromisos con la víctima o testigo, la


Dirección Ejecutiva del Programa informará al respecto a los responsables
de los demás programas de protección que funcionan en el país con el
propósito de evitar que la misma persona reciba idéntico beneficio de más
de uno de ellos.

Transcurridos los términos fijados por la interposición de recursos, y de no


haberse interpuesto alguno, el Director del Programa elaborará constancia
en tal sentido, constancia con la cual se entenderá que la decisión adoptada
por el Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo queda en firme.

10. APLICACIÓN DE LAS MEDIDAS

La entidad encargada de la aplicación de la medida de protección dispuesta


por el Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo, una vez reciba la
comunicación correspondiente y el acta de compromiso que le enviará la
Dirección del Programa, iniciará de inmediato su ejecución.

Para el efecto, el Comandante de Estación de Policía responsable de la


Asistencia Inicial, elaborará acta, que debe firmar el beneficiario de dicha
medida, en la que conste hasta que fecha se otorgó la Asistencia Inicial, a
qué entidad se le transfiere la responsabilidad de su cuidado, la situación
física de la víctima o testigo protegido, y toda situación propia de la persona
que se considere relevante.

En cualquier etapa de la ejecución de la medida de protección, el testigo o


la presunta víctima, podrá manifestar por escrito ante la Dirección del
Programa su voluntad consciente de retirarse del mismo, en constancia de
ello se elaborará por esa dependencia un acta de aceptación de renuncia,
momento a partir del cual cesará toda actuación que esté en curso por
parte del Programa.

11. SEGUIMIENTO A LA EJECUCIÓN DE LAS MEDIDAS DE PROTECCIÓN

El Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo ordenará al equipo investigativo


encargado de las evaluaciones de amenaza y riesgo del Departamento
Administrativo de Seguridad -DAS, la Policía Nacional o la Fiscalía General
de la Nación, 30 días antes de finalizar la medida autorizada por el
Programa de Protección, el seguimiento o revisión de las medidas
dispuestas, para lo cual observarán el formato que para tal efecto expedirá
y aprobará el Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo.

Con base en los resultados del seguimiento se podrán ajustar o finalizar las
medidas de protección ordenadas, lo cual se comunicará a la entidad a
cargo de la medida de protección. En la adopción de esta decisión se
tendrán en cuenta, entre otros, los siguientes criterios:

Resultado de la reevaluación de amenaza y riesgo


Existencia de nuevos hechos que repercuten directamente en el nivel de
riesgo del beneficiario.
Verificación de uso indebido de la medida asignada, o incumplimiento de las
obligaciones adquiridas por el beneficiario en el acta de compromiso.

Para efectos de la revisión de los casos la Secretaría Técnica del Grupo


Técnico de Evaluación de Riesgo librará y asignará las misiones de trabajo
necesarias, de manera equitativa entre el Departamento Administrativo de
Seguridad -DAS, Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación

12. RESERVA

El servidor público que tenga conocimiento de las medidas de protección


ejecutadas en el marco del Decreto 3570 de 2007, o haya intervenido en
cualquiera de las etapas fijadas en el presente protocolo, tendrá la
obligación de mantener en reserva la identidad de los beneficiarios, la
decisión adoptada y las medidas implementadas.

13. IMPUGNACIÓN DE LAS DECISIONES DEL GRUPO TÉCNICO DE


EVALUACIÓN DE RIESGO

Contra las decisiones del Grupo Técnico de Evaluación de Riesgo que


decidan de fondo toda petición de protección, procederán los recursos de
reposición y el de apelación. El de reposición será resuelto por el Grupo
Técnico de Evaluación de Riesgo y el de apelación por el Subcomité de
Protección.

Los recursos de reposición o de apelación podrán ser interpuestos por la


presunta víctima o testigo que solicita protección, debiendo ser presentados
por escrito ante la Dirección del Programa, en la diligencia de notificación
personal, o dentro de los cinco días siguientes a ella, o a la desfijación del
edicto, según el caso.

Inmediatamente la Dirección del Programa tenga conocimiento de la


interposición de un recurso informará al Grupo técnico de Evaluación de
Riesgo o al Subcomité de Protección, según corresponda, para la decisión
del recurso interpuesto.

El recurso de apelación podrá interponerse directamente, o como


subsidiario del de reposición.

Los recursos deberán reunir los siguientes requisitos:

Interponerse dentro del plazo legal, personalmente y por escrito por el


interesado o su representante o apoderado debidamente constituido, y
sustentarse con expresión concreta de los motivos de inconformidad.

El recurrente podrá desistir de los recursos, directamente o mediante


apoderado expresamente autorizado para ello.

Los recursos de reposición y de apelación deberán resolverse de plano, a no


ser que al interponer este último se haya solicitado la práctica de pruebas, o
que el encargado de decidir el recurso considere necesario la práctica de
alguna, caso en el cual señalará para ello un término no mayor de quince
días, debiéndose indicar, con toda exactitud, el día en que vence el término
probatorio.
Concluido el término para practicar pruebas, el Subcomité de Protección
deberá proferir la decisión definitiva, esta se motivará en sus aspectos de
hecho y de derecho. La decisión resolverá todas las cuestiones que hayan
sido planteadas y las que aparezcan con motivo del recurso.

La decisión del Subcomité de Protección de Protección de Víctimas y


Testigos se comunicará al titular y a la Dirección del Programa para que le
de el trámite que corresponda.

En todos los casos en que la víctima o el testigo interpongan recursos,


habiéndose dispuesto a su favor la Asistencia Inicial, o habiéndose iniciado
la ejecución de alguna de las medidas de protección dispuestas en el
Decreto 3570 de 2007, se suspenderán los términos de dichas medidas
hasta tanto se resuelva el recurso impetrado.

Vous aimerez peut-être aussi