Historia de la Medicina
Hipécrates y su vigencia en la medicina del Siglo XXI
Hipocrates and his presence in the medicine of the Century XXI
Juan Manuel Valladolid Alzamora'
RESUMEN
Presentamos una revisi6n dela literatura sobre los aportes mds importantes de HiipScrates ala Medicina, ya la
hhumanidad. Nacis en la isla de Cos, nos leg6 un vasto conocimiento médico que ha trascendido al presente
sigh, "La vida es breve, pero el ante es eterno", "La oportunidad es fugas; el experémento es peligroso y juagar es
peligroso", “Lo que cura a umo mata a otro", son algunos de los aforismos que mantienen su actualidad, ademis de
sulegado muy conocido sobre étia y juramento de losmédicos.
Palabras clave: Hipécrates, vigencia.
ABSTRACT
‘We present a revision of Literature about the most important contributions of Hipocrates to the medicine, and
the humanity, He was born in the island of Cos, bequeathed co the humanity a vast medical knowledge that has
extended to the present century. “The life is brief; the art, length; the occasion, fleeting; the experience,
deceptive; the judgment, dificult”, they are some ofthe aphorisms that maintain their present time, in addition
twtheirlegacy very knownabourethies and doctors oath.
Key words: Hipocrates, validity.
HIPOCRATES ¥ SU VIGENCIA EN LA.
MEDICINA DEL SIGLO XXI
Hipdcrates nacié aproximadamente en el aio 460 a
eC, enel siglo Vy vivi6 en Cos, isla griega, ubicada en
el mar Egeo, a corta distancia de las costas de Asia
Menor, en la misma latitud de Esparta. Fue contempors-
neo de Herodoto, Sécrates, Platén, Séfocles y Demécri-
to. Hipécrates conserv6 gratos recuerdos de suisla natal,
a la que tuvo siempre mucho carifio. Procedia de una
familia de médicos, insteuidos desde largo tiempo en las
pricticas de medicina, que trasmitfan sus conocimientos
de padres a hijos. En aquella época, poco adelantada en
cultura y conocimicntos, la profesién médica era muy
apreciada e inspiraba respeto y admiracién. Al parecer,
durante su juventud Hipdcrates visite Egipto, donde se
farniliatiz6 con los trabajos médicos que la tradicidn at
buyea Imhotep, Se inicié en el estudio de la medicina gra-
ciasa la iniciativa de su padre, quien asu vezera miembro
de una agrupacién de médicos que se habfan autodeno-
rminado "Los hijos de Esculapio", sociedad a a que Hipé-
crates pertenecié en su edad adulta, ‘Tanta fama logns
alcanzar HipSerates, que gobernantes como Perdicas de
Macedonia y Artajerjes I de Persia, iguraron entre sus
| Médico Cirujano, Especialsta en Anestesiologia. Macsta ct Anestesiologia. Dactorano en Educacion. Médico Asistente
Hospital Belén de Tayjilo, Profesor Principal Universidad Nacional de Teujlo Profesor Auxlar UniverskladPelvada Antenor
Orregode Trujillo Pe.
‘Acta Méd. Owreguiana Hampi Runa 71) 2007 | 47Juan Manuel Valladolid Alzamora
pacientes y, en el afio 430, Atenas mands por él para que
hiciera lo posible por detener el vance de la "gran peste"
En busca cle conocimientos y en su afin por perfeccionar
suarte viaj6 por las ciudades mas importantes del mundo
antiguo: Tesalia, Tracia, Delosy Atenas. En ellas busc6 la
manera de hacer amistad con los principales médicos, fli
sofos y pensadores. En Atenas conocié a Platén, y éste
dja constancia de su relacién al mencionarlo en algunas
dle sus obras y al calificarlo de "distinguido maestro de la
rmedicina", Murié en Larisa, Tesalia, en el siglo IV, 2377?
AdeC.
Los primerosantecesores de los médicos de los cuales
tenemos antecedentes son imagenes de hechiceros en
‘actos curativos encontradas en los Pirineos, en la caver-
nade la “Trois Frere”, la cual data de 15 000 aios antes de
Cristo, en plena edad de piedra, etapa en que el hombre
‘ya tilizaba el fuego, recolectaba frutas y eazaba mamuts
Lacultura griega, cuyos libros lbores estan alrededor del
afio 1 000 A.C,, época de la Odisea, la Tliada y la Guerra
de Troya, desarroll6 todas las posibilidades del Hombre y
nos legs las hases de nuestra civilizacién. Fueron los pri
‘meros en creer y confiar en el hombre. Thales predijo un
eclipse. Hubo historiadores como Herédoto, escultores
como Fidias, matemiticas como Pitigoras, geémetras
como Euclides, politicos y estadistas como Pericles, astré-
rnomos como Aristarco, que afirms en el 280 antes de
Cristo que la tierra giraba alrededor de un eje 0 Eratéste-
nes, que afitmaba que la Tierra era una circunferencia,
En el Teatro destacaron Séfocles y Esquilo, Fueron ade-
‘ns los creadores de las Olimpfadas y las ciudades - esta-
dos.Con 5 000a 20 000 ciudadanos.
Los griegos inician la era logica. Fueron los primeros
cen buscar una explic
n racional para los fenémenos
de la naturaleza y la enfermedad. Sus dioses, como Ate-
‘nea, diosa de la Sabiduria inspiraban su espiritu genial y
de lucha, Vencieron varias veces al poderoso enemigo
persa (Marathon, ete). Séfocles decfa “EL mundo esté
leno de maravillas, pero nada es tan maravilloso como el
ser humano”. Socrates también centr6 su pensamiento
enel hombre mismo "Solo sé que nada sé", “Conécete ati
mismo”, etc. En la antigua Grecia del Siglo V antes le
Cristo, Apolo era el Dios de la Salud. El pensamiento
médico del oréculo de Delfos y el culto a Esculapio, que
esel Dios de la Medicina Griega y Occidental, con su bas-
t6n envuelto por una serpiente, eran los paradigmas del
ims famoso de los sanatorios, el de Epidauro, con sti mag-
nifico teatro, salas de diversiones y de hidroterapia, que
tenia capacidad para 20 000 personas. Sus hijas eran
Panacea, diosa de la curacién de los males e Hygeia diosa
dela prevencién.
En la época de Hipéerates hacia mas de mil afios que
48 | Acta Méd, Orrin Hampi Rona 711) 2007
la cirugéa de Egipto se habia extendido por el mundo y la
costumbre de los médicos egipcios de embalsamar los
cadiveres les habfa permitido adquirir algunos conoci-
rmientos, aunque imperfectos, de anatomfa. Ellosextirpa-
ban tumores superficiales, curaban fracturas Gseas y las
operahan. Existia yael Antiguo Testamento Israelita, que
contenia conocimientos quiriingicos adquiridos de los
maestros egipcios;y se suturaban heridas, Hay datos feha-
cientes de que se habian operado casos de imperforacién
del ano y, hasta conocian y empleaban anestésicos débi-
les locales. Habia odontologos, y entre ellos, algunos Ile
igaban a poseer el arte de colocar pi
dentarias art
ciales. También existfan virtuosos que construfan piernas
de madera, Todos estos detalles nos hace suponer la exis
tencia de un gran progreso cientifico medico-quirirgico,
que data de muchos sglos anteriores nuestra era
Los griegos consideraban a los cirujanos como hom-
bres inteligentess el pueblo los tenfa por valientes. En la
Epoca de los héroes de Homero, e les concedian honores
alos que curaban a los lesionados y heridos. Los estudio-
sos nos han seftalado emo estaban estableciclas ls fami
lias de los Esculapius o Asclepiades -Dios de la Medicina,
addorado por los griegos mucho antes de la época de Hips
crates- y la formacién de escuelas médicas o sistemas de
curacién en las diversas regiones del pats griego. La carre1a de médico se hizo hereditaria en ciertas familias. Los
ue la ejercfan vivian juntos, formando reducidas comu-
nidades a las que acudfan los enfermos para ser tratados,
En estas comunidades se crearon escuelas, se archivaron
datos, se acumularon experiencias, y de generacién en
ggeneraci6n, se fueron trasmitiendo los conocimientos
adquitidos. Hipécrates emprendié viajes a distintos luga-
res, llevando su ciencia y su abnegacién al maximo.
Observé algunos easos de psicosisalcohélicas y puerpe-
rales, describiG la epilepsia y expuso algunas nociones
sobre a histeria, Reconoci6 los espasmos, sofecaciones y
otros fendmenos histéricos, y advirti6 que las lesiones del
cerebro podian producir amnesia y otras perturbaciones
sensoriales. Hizo medicina y cirugéa verdaderamente
cientificas, y a él le debemos muchos y muy acertados
conocimientos. HipScrates es, sin dudas, el genio mayor
de la medicina de todos los tiempos. En su obra Epide-
mias, libros I y IT, recogié las historias particulares de 42
enfermos cuyas descripciones abren las verdaderas puer-
tas de la clinica. Se trata de magistrales descripciones|
niicas que son el resultado de la observacién a la eabecera
del enfermo, en las que no hay nada de misticismo ni de
‘magia, se describe lo que se vey se palpa, y se toman medi-
das terapéuticas que responden a un pensamiento I6gico
razonado. Todo este saber médico, alejado de las especue
Taciones abstractas y encaminadas a la curacin del
enfermo, es verdadero arte clinico. Esta obra puede
decirse que dio nacimientoa la clinicaen la historia médi-
cadelahumanidad.
En la antigtiedad, la epilepsia era Hamada un “mal
sagrado”, porque era considerada producida por causas
sobrenaturales, y por tanto, consecuencia de una inter-
vencidn divina; pero Hipdcrates analizaba este aspectode
Ja forma siguiente: La epilepsia era considerada como
mal sagrado" porque se presentaba como un fenémeno
incomprensible y asombroso. Hay otrasenfermedades no
menos incomprensibles y asombrosas, como el sonambu-
lismo, y ciertas enfermedades febriles; por tanto, en este
aspecto, la epilepsia no es diferente de esas otras. Fue la
ignorancia de la causa la que llev6 a considerar a la epi
Jepsia como "mal sagrado”, Si fuera un "mal sagrado", los
que pretenden curarla con actos de magia son embuste-
105 eimpostores, yademds, estén en contradicciin consi-
go mismos, pues quieren curar con précticas humanas
males juzgados como divinos, pretendiendo ejercer
poder sobrelos dioses.
Enel tratado "Sobre lasaguas, vientos y lugares’, Hips:
crates plantea los lazos entre las enfermedades y el medio
ambiente. El hombre es visto en su conjunto, en el con-
texto de todas las coordenadas que constituyen el
ambiente en que vive: las estaciones y sus cambios
Hipcates y su vigenia en la mesicina de igo XX
influencias, los vientos tipicos en cada regién, las aguas
caracterfsticas de los lugares y sus propiedades, las pos
ciones de los lugares y el tipo de vida de los habitantes. El
pleno conocimiento de cada caso individual depende del
conocimiento del conjunto de todas esas coordenadas; lo
que significa que para comprender la parte, es preciso
comprendler el todo al que la parte pertenece. La natura
leza de los lugares y lo que los caracteriza incide sobre la
constitucisn y aspecto de los hombres, y por tanto, sobre
lasaludy las enfermedades. El médico que quiere curaral
enfermo debe conoceresasrelaciones.
in médica se le
En el campo de la ética de la profe
atribuye el célebre juramento que lleva su nombre, que se
convertiré mas adelante en una declaracién deontolégi-
catradicional en la practica médica, que obliga a quien lo
pronuncia, entre otras cosas, a “entrar en las casascon el
tinico fin de cuidar y curar a los enfermos”, “evitar toda
sospecha de haber abusado de la confianza de los pacien-
tes, en especial de las mujeres” y “mantener el secreto de
lo que crea que debe mantenerse reservado". Se conside-
ra a Hipécrates autor de una especie de enciclopedia
médica de la Antigiiedad constituida por varias decenas
de libros. En sus textos, que en general se aceptan como
pertenecientesa su escuela, se defiende la concepeisn de
Ia enfermedad como la consecuencia de un desequilibrio
centre los llamados humores Kquidos del cuerpo, es decit,
la sangre, la flema y la bilis amarilla o c6lera, y la bilis
negra 0 melancolia, teoria que desarrollarfa mas tarde
Galeno y que dominaria la medicina hasta la llustraci6n,
Para luchar contra estas afecciones, el corpus hipoctitico
recurre al cauterio o bisturt, propone el empleo de plan-
tas medicinales y recomienda aire puro y una alimenta-
cién sana y equilibrada. Entre las aportaciones de la medi
cina hipoctética destacan la consideracién del cuerpo
como un todo, el énfasis puesto en Ia realizacién de
observaciones minuciosas de los sintomas y la toma en
consideracién del historial cinico de los enfermos.
a llamada coleceién hipocrstica es un conjunto de
escritos de temstica médica que exponen tendencias
diversas. Estos escritos datan, por regla general, del
perfodo comprendido entre los aftos 450 y 350 a.C., y
constituyen la principal fuente a través de la cual es post
ble hoy hacerse una idea de las practicas y concepciones
rmédicas anteriores a la época alejandrina. En esta colec-
cién, la llamada “Antigua medicina” es uno de los trata-
dos mas antiguos y célebres y en él, sugiere el autos, entre
otras propuestas, investigar el origen del arte que practi-
«a, origen que halla en el deseo de ofrecer al ser humano
unrégimen de vida y, en especial, una forma de alimenta-
ign que se adapte de una manera completamente racio-
‘Aca Méd, Oteguiana Hampi Runa 7(1) 2007, | 49Juan Manuel Valladolid Alzamora
nal a la satisfaccién de sus necesidades mas inmediatas
Poreste motivo, considera por ejemplo el aprendizaje de
la correcta coccién de los alimentos como una primera
rmanifestacidn de la béisqueda de una existencia mejor.
Por otro lado, los textos de la coleccién hipocritica
demuestran que la pritctica de la observacién precisa no
ceraencl conjunto de la medicina griega una conquistade
la época clésica, sino que més bien constitufa una tradi-
ci6n solidamente afianzada en el pasado y que a media-
dos del siglo V habia alcanzado ya un notable nivel de
desarrollo
LOS ESCRITOS MEDICOS
En la coleccién hipocritica se encuentran libros de
texto escritos para la lectura exclusiva de los médicos,
consejos para el profano, conferencias para estudiantes,
informes sobre investigaciones y descubrimientos,histo-
tia elinica y ensayos escritos para los interesados en los
aspectos cientificos o filosoficos de la materia. Los cue
renta y dos cuadros clinicos que forman parte de la
Coleccién, constituyen los tinicos ejemplos de su clase en
todo el curso de los setecientos afios que siguieton a Hipé-
crates y son modelos de honradez al admieie que en el 60
% de los casos tratados, Ia enfermedad o el tratamiento
resultaron fatale,
Nada puede haber mas heterogéneo en la literatura
médica que la coleccién de tratados atribuidos a Hips-
crates. Se ha especulado que existieron varios mi
consunombre y que el verdadero escribidsolamente algu-
nto de los 87 volimenes de los que esté compuesta la
coleccién hipocritica, o llamada también Cuerpo Hipo-
critico, que pas6 a formar parte de la biblioteca de Ale-
jandria. Como fuera, sus trabajos einvestigaciones sivie-
ron de base para el desarrollo del arte de lamedicina a tra-
vés de los siglos. De los escritos de esta singular colec:
i6n, s6lo cuatro se atribuyen a la pluma de Hiipécrates:
Los Aforismos, el Pronéstico, ef Régimen para dolencias agu-
das y la monografia titulada Sobre heridas en la cabeza, el
resto de volimenes -indican los historiadores- fueron
esctitos por una diversidad de autores nacidos entre el
siglo quinto y el segundo a.C., y esto se deduce de la ire
gularidad en la calidad de forma y fondo de los mismo.
Un aforismo es una sentencia breve de valde: universal,
aplicada a una situacién conereta. Encierta en sf autor
dad, ensefianza, prestigio, y ritual. Tiene el pozo de una
sabiduria profunda, semejante a una mixima judicial 0
tun proverbio, porque pose mucho de saber popular ele
vado a la categorfa cientfica y literaria. La tradicin sos-
tiene que Hipserates compuso los “Aforismos” a edad
avanzada, como una especie de resumen de su vasta expe-
550 | Acta Méd, Oreguiana Hampi Runa 711) 2007
riencia, En los Aforismos, que sirvieron de texto obliga-
torio de estudio en todas las Escuelas de Medicina hasta
el siglo XIX, quedan pensamientos que jams podrén ser
rebatidos o superados. Dice por ejemplo: "La vida es breve,
pero el arte es eterno", "La oportunidad es fuga, el experi-
mento es peligroso y juzgar es peligroso", "Lo que curt a uno
mata otro". De ellosnos ocuparemos. continuacisn:
1) “Lavidaes breve, peroelartees eterno”, Auncuan-
do Ia genética ha logrado connotados avances, el tiempo
‘que permanece el hombre sobre la tierra sigue siendo limi:
tado. Nadie vive lo suficiente para desarrollar codas las
facetas de su proyecto vital profesional y humanistico. La
eternidad del arte, expresada en sus palabras, se refi
Ia inmortalidad del mismo. Leonardo Da Vinci, nos legs
su atte, y ain ahora podemos apreciarlo. Bethoven nos
dejé su misica para deleite de nuestros ofdos y Becquer
sus rimas y leyendas que conmueven los sentimientos
humanos todavia en el presente siglo. 2) “La ciencia
‘extensa” comprende la amplitud de conocimientos bési-
0, clinicos y técnicos, necesarios para la préctica y el
jercicio profesional del médico del presente siglo. Nadie
consigue ser experto en todas las diversas disciplinas
médicas, y las subespecialidades se convierten cada vez
més en la alternativa ante el vasto horizonte de las disci-
plinas médicas. 3) "La ocasion fuga2” semeja alas difciles
decisiones que los médicos debemos tomar en fracciones
de segundos, como es la reanimacidn eardiopulmonar, ka
intubaci6n endotraqueal, la sutura de vasos sangrantes,
cl tratamiento veloz de una angina de pecho o un infarto
de miocardio, etc.,4) “La experiencia insegura” se refiere
alos ertores y la oportunidad de corregirlos. No todos los
casos son iguales, y cada paciente debers ser tratado
como un ser diferente del otro, Un diagnsstico anatomo-
patol6gicodurante una operacién puede tener impor
tes implicaciones inmediatas para el paciente, para el
curso de su enfermedad y para su ulterior tratamiento. La
extensi6n dela cirugia puede depender de este di
coy pueden imbricarse problemas anestésicos y de mor-
bilidad quirdrgica, La sociedad tiene Ia idea preconcebi-
da de la ausencia de errores en todos los liagnésticos. La
‘clucacién en medicina durante el pregrado y la residen-
cia insite en evitat los errores. En la prictica daria hos-
pitalaria el mensaje es el mismo, los errores son inacepta-
bles. Se espera que seamos infalibles; sin embargo, los
ertores se producen. Los médicosaprenden prontoacon
vivir en el mundo real con fallos ocasionales. Puesto que
los errores existen debemos contar con ellos para comba-
tirlos 0 aminorarlos. Los errores dleberfan considerarse
como sintomas de un sistema imperfecto. En lugar de
ignorarlos o pretender que no existen, deberfan valorarse
como datos esenciales, como oportunidades paraimplancar sistemas que funcionen mejor en el cuidado de
los pacientes. Hipécrates nos hace recordar que somos
‘humanos al servicio de los humanos; por tanto, podemos
cerrar, pues, por mas experie esta suele
ue poseam
I juicio difiel” incluye la
variabilidad inter ¢ intraobservador, reproducibilidad,
aplicacién de criterios de expertos y clasificaciones de
consenso de los cuadros patol6gicos, La medicina requie-
re un proceso constante de refinamiento de los criterios
diagnésticos. En numerosos procesos los critetios diag
niésticos deben ser refinados. Esta labor debe ser perma-
nentey constante en Medicina.
ROL HISTORICO DE HIPOCRATES
Hipécrates afirms que..."la medicin es lamas noble de
‘oda las ates’. El maestro se mostraba violento cada vez
en, sobretodo un médico, se referia a las enfer-
como un "Castigo de dioses’. El ensayo "Sobre la
enfermedad sagrada’ (cpilepsia) esté en pugna directa con
Ia teoria que atribu‘a todas las doleneias ala voluntad dis-
crecional de los dioses, "Todas las enfermedades, afirma
el autos tienen sus causas naturales y aparecen por cau
sas externas al espititu y no se excepttian de la regla a la
epilepsia’, mal que la gente de entonces atributa a que
quien la padecfa, se encontraba posefdo por el demonio.an Manuel Valladolid Alramora
En su libro "El aire, el agua y los lugares" considerada una
cobra maestra atin en estos dias y que trata sobre lo que se
ha dado en lamar "defensa de lt ecologia’, se refiere a que
estos elementos, cuando se enc
-ntran corruptos, son
los causantes directos de las enfermedades, De la misma
manera lleg6ala conclusién de que un sistema apropiado
de alimentacisn y buenos hébitos de vida, son el labora-
torio que necesita el organismo para mantenerse en bue-
nas condiciones. No obstante, aceptaba la llamada doc-
trina humoral, muy en boga entonces entre los médicos
egos, que afirmaba que de la mezcla en el cuerpo huma-
no de los cuatro humores liquidos -frfo, caliente, seco y
hiimedo- depend el equilibrio del organismo y cual-
quier alteracién, exceso 0 deficiencia de ellos, causaba la
mala salud, el comportamiento anormal e incluso la muer-
te, Por tanto, "el deber del médico eva establecer yconservar
elequilbrio adecuado de los humores del cuerpo".
El Conpus Hipbocraticum constituye la primera colec-
cin de textos médicos eientificos del mundo antiguo. Se
puede establecer por conjetura que el nécleo originario
delacoleceién estuvo en la biblioteca de laescucladelos
asclepiadas de a isla de Cos. Esta biblioteca médica, crea-
cidn, propiedad y herencia de los miembros de la Escuela
Hipocrética, estaba llamada a conservarlasiddeas yladoc-
trina del maestro Hipscrates formando un repertorio
perenne y un instrumento tedrico de referencia, impres-
cindible para estudiantes y profesionales de la actividad
médica. Todo ello al margen de las ensefianzas orales y de
las técnicas terapéuticas transmitidas directamente por
cl maestio. Esta actividad médica estaba constituida
como oficio técnico ya la vez como arte y ciencia positiva
yaplicada, es decir, como téchne. El Corpus Hippocraticum
presenua escasos y rudimentarios conocimientos de ana-
tomfa ya que no practicaban la diseccién de cuerpos
humanos, seguramente por motivos religiosos y legales.
Su fsiologia se basa en la funci6n de fos humores. La
Medicina hipocrética es una ciencia incipiente, con un
esfuerzo metédico y sistemético por alcanzar la condi-
ci6n de una ciencia positiva. La medicina debe a laescue-
Is hipocritica dos contribuciones: La figura del médico
y la creacién de un método. El método se apoya en la
experiencia, se basa en la observacisn estricta, es decir
esti basada en principios objetivos y en una percep-
cin ajustada y minuciosa de la realidad. El médico se
ros presenta como sereno, eficaz, humano, observador,
diligente, prudente, sabio y al mismo tiempo deseoso de
aprender, igualmente vido para recibir y proporcionar
conocimientos, impasible, salvo cuando teme que st
saber fracase en la ayuda al enfermo, incorruptible y puro
‘en cuetpo y alma. Bste hombre es Hipécrates mismo Su
figura permanece alo largo dels siglos como simbolo del médi-
52 | Acta Méd, Orregulana Hampi Runa 711) 2007
coideal. En todaslas épocas esta imagen del mé&ico Hipo-
critic ha sido de incalculable valor para la profesién
médica. El método de la medicina hipoctat
en Ia experiencia, Elespfritu de las escritos hipocriticos
se apoya
con sus métodos y observaciones debe ser apreciado por
encima de su contenido, En ellos se contiene el proces
miento actual de anotacién cuidadosa de los datos, de
inferencia prudente a partir de los mismos, de cotejo de la
experiencia obtenida por varios métodos de varias fuen-
y la leccién clinica, Todo
esto nos es familiar. El méclico hipocréticy se atiene a la
tes, la recogida de casufsti
observacisn estricta. La enfermedad se concibe como un
fendmenonatural yse desechan las concepefones magica
ytedirgica,
Hipécrates se preocupé ademas por la “prestancia del
médico, pues a mayoria de la gente opina que quienes no
tienen su cuerpo en buenas condiciones no cuidan bien
de los ajenos”. Debe ser de “espiritu inteligente”, “muy
ordenado en su viv
en su reputacién, y su carécter deber ser “el de una perso-
nade bien, mostrandose serio y afectuoso con todos, pues
clser precipitado y efusivo suscita menosprecio, aunque
pueda ser muy ttil”. No parecer “soberbio e inhumano”,
Debe ser “Justo en cualquier trato, ya que la justia le
seri de gran ayuda. Pues las relaciones entre el médico y
suis pacientes no son algo de poca monta. Puestogue ellos
pues eso tiene magnificos efectos
mismos se ponen en las manos de los médicos, ya cual-
‘quiet hora frecuentan a mujeres, muchachas javenes, y
pasan junto a objetos de muchisimo valor. Por lo tanto,
han de conservar su control ante todo eso, Ast del
pues, estar dispuesto el médico en alma y cuerpo”,
La doctrina médica de los tratados hipocriticos
puede resumirse en los siguientes puntos: 1) Las enfer-
medades tienen un curso natural que el médico debe
conocer completamente, siendo ésta la relevancia det
pronéstico. 2) La enfermedad es causada por una altera-
ciGn de la composicién y balance de los constituyentes
del cuerpo. 3) La naturaleza trata de restablecer el balan-
cea través del calor innato que lleva ala “cocci6n” de los
hhumores crudos del cuerpo. 4) Hay dias criticos donde la
batalla entre la naturaleza y la enfermedad llegaa una eri
sis. La naturaleza puede ganar, en cuyo caso las materias
rrbidas son evacuadlas, o puede perder, en cuyo caso no
se llega a producir la "coccién" de los elementos y el
paciente muere. La evacuacién del residuo de la "coc-
cid’ se hace por las vias ordinarias como la orina, heces
ola expectoracién. Cuando la naturaleza no es capaz de
hacerlo por estas vias, ocurriran los abscesos o hinchazo-
nes en diferentes partes del cuerpo, incluyendo las arti-
culaciones.5) Todo lo que el médico puede hacer es darle
ala naturaleza toda la ayuda posible, dadas las escasasarmas terapéuticas disponibles para los griegos,limitadas
a purgantes y eméticos, fomentaciones y bafios, agua y
caldo de cebada, vino, hidromiel (miel y agua) y oximiel
(miel y vinagre), sangefas, régimen y reposo.
Hipdcrates también se refirié a las relaciones entre las
instituciones politicas y los gobiernos con el estado de
salud de la poblacién. Decfa que "las democracias pro-
mueven lasalud de las poblaciones ye despotismola afec~
ta", En su libro "Las Epilemias’, Hipécrates seftala que la
dscripeidn sistemética y ordenada de las enfermedades,
son los elementos en los que se basa Ia prictica médica,
Igualmente alert6 sobre la simplificacién excesiva de las
causas de las enfermedades, atribuyéndole La misma
causaa todos os.casos.
Sobre el pronéstico, Hipéerates decfa que es una sin-
tests del pasado, del presente y del futuro. Solamente con
Ia visiGn del pasado, el presente y el futuro del paciente,
es que el médico puede indicar la terapéutica correcta,
Finalmente, es vslidosefialar que con Hipécrates la Medi-
cina penetra en Ia era cientifica, al ver al hombre como
tuna unidad psicofisica en estrecha relacién con el medio
natutal, social y cultural concreto, Hipsicrates y su escue-
fa, no solo se imitaron a comenzar a dar ala Medicina el
estatuto teérico de ciencia, sino también consiguieron
del médico y la
jdentidad moral que debe earacterizarlo. En su juramen-
tose expresan ideas que podemos resumir asf: respeto por
sus profesores, discreciOn,fidelidad ala ética médica, con-
siderar al paciente en toda su dimensién humana como
con lucie: determinar la estatura éti
wun fin, un valor y ayudarlo en todo momento y nunca cau
sarle dati.
Hipocrates ys vigencia en la meicina del igo XX
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