Radio Alicante luce platino
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La actual Cadena SER cumple 75 años de rigor y calidad en las ondas
Los alicantinos están de
celebración. Radio
Alicante, la que hoy se
conoce como Cadena SER,
celebra su esperado
aniversario con diversos
actos conmemorativos. Sus
«hijas pequeñas», los 40
Principales, Cadena Dial
y M80 Radio, también se
suman a una fiesta que se
extiende durante 2008.
M. ABELLÁN / R. CORNEJO
La historia de la cadena emblemática
de la radio alicantina comenzó su via-
je a principios de la década de los
treinta. El 5 de febrero de 1933, en un
piso de la calle Pablo Iglesias, se inició
una nueva era para el ocio. Dicho in-
mueble acogía unos aparatos tecnoló-
gicos inauditos para la época, con un
departamento técnico y un estudio
desde donde se comenzó a emitir. Así
nacía EAJ 31 Radio Alicante.
A la inauguración acudió el fundador
de la emisora, Juan Valero Campoma-
nes, junto al alcalde de Alicante, el re-
publicano Lorenzo Carbonell. El Go-
bierno estuvo representado en este ac-
to por el director general de Comuni-
caciones que, en nombre del presiden-
te de la República, declaró inaugurada
Radio Alicante. En el discurso, el al-
calde, sabedor de la importancia que
podía tener este medio en la sociedad,
aprovechó su locución para animar a
los ciudadanos a colaborar económi-
camente en el sostenimiento de la emi-
sora.
Las primeras voces que los alicantinos
oyeron a través de estas ondas no podí-
an ser desconocidas. Por eso Lolita
Latorre y Pepe Moreno, famosos acto-
res locales de teatro, fueron los elegi-
dos para estrenar los micrófonos de
Radio Alicante. Antecesores de voces
míticas como Benjamín Llorens o Vi-
cente Hipólito.
La programación tenía una clara pro-
tagonista: la música. Radio Alicante,
que no emitía las 24 horas del día, ofre-
cía a los alicantinos música de cámara,
conciertos de las principales bandas de
la ciudad -bien desde el estudio, el Te-
atro Monumental (que en la actualidad
ya no existe) o el Principal. Las emi-
siones continuaban con discos dedica-
dos o entrevistas a personajes relevan-
tes.
LALOS
AFICIÓN OPINADE COMUNICACIÓN OPINAN
MEDIOS
NATXO LARA, DIRECTOR
INFORMATIVOS C9 ALICANTE
«Sobrevivo
informativamente
gracias a Radio
Alicante»
Cristina Almeida visita los estudios de Radio Alicante en 1986 /CEDIDA
Durante la guerra transcurrió un perío-
do de silencio para la emisora. Este os-
curo episodio de la vida española fue
un paso atrás para Radio Alicante. La
cadena, como tantas otras, se convirtió
en aparato del Régimen. Tras este tris-
En sus inicios, el Lolita Latorre y Pepe
entretenimiento era Moreno fueron las
el protagonista primeras voces
te capítulo, reapareció en 1945 como
Radio Alicante Cadena SER. Su pri-
mer director fue el histórico Gassent.
A partir de ese momento, la cadena la-
braría una historia de prestigio en el
campo de la comunicación. La radio
JUAN R. GIL, DIRECTOR
INFORMACION
«Es un referente de
tolerancia y de rigor
a la hora de abordar
la actualidad»
ha sido el referente del medio más po-
pular que hay actualmente, la televi-
sión. Ésta ha copiado de su hermana
mayor los formatos con más audien-
cia. Concursos como «Lo toma o lo
deja» con los inolvidables Joaquín
Prat, Bobby Deglané y Joaquín Soler
Serrano; seriales tan carismáticos co-
mo «La saga de los Porretas» con las
aventuras y desventuras del abuelo Se-
guis y su nuera Candelaria son ejem-
plos que dejaron huella en los oyentes
TERESA COBO, DELEGADA
LA VERDAD ALICANTE
«La Cadena SER es
mi primera fuente
de información
cada mañana»
Martes, 3 de junio, 2008 U N I V E R SI D A D M IG U E L H E R N Á N D E Z
alicantinos. Sin dejar de lado el depor-
te con un programa que en la actuali-
dad se sigue emitiendo, como es Ca-
rrusel Deportivo.
En 1977, la Cadena SER alcanzó su
verdadera seña de identidad: el amor
por la información. En esa fecha, Ra-
dio Alicante dejó de conectar con Ra-
dio Nacional de España para dar el
«parte» de noticias y creó así su propio
informativo. Desde entonces, la emi-
sora se convirtió en un modelo para los
amantes de la radio. Setenta y cinco
años después, Radio Alicante continúa
su andadura ahora en la calle Calderón
de la Barca, con unos estudios que en
poco o nada se asemejan a los inicia-
les. Los años 30 quedaron atrás, la ciu-
dad siguió creciendo y, con ella, la ma-
gia de las ondas hertzianas.
JOSÉ SOTO, DELEGADO
LAS PROVINCIAS ALICANTE
«Ha sido una
referencia en mis
años de estudios
y en mi trabajo»
ACTOS
Celebración
en cadena
Cumplir 75 años merece una
conmemoración. O varias. Y
Radio Alicante lo hace durante
todo el 2008. La emisora no
quería soplar las velas el 5 de
febrero y terminar ahí la fiesta.
El próximo verano habrá un
gran espectáculo de música
dance en el Postiguet.
Posteriormente, se editará un
libro con muestra sonora y
audiovisual de la radio
nacional con un apartado
relevante para Alicante, y
también se publicará una
revista sobre el 75 aniversario
de la emisora. Pero este
cumpleaños no sólo viene
acompañado de celebraciones.
Las instalaciones de la emisora
serán remodeladas. Aunque
Radio Alicante cuenta con
equipos de última generación,
su espacio es escaso para su
importancia. Por eso, la
Cadena SER de Alicante
aumentará de tamaño sus
estudios. Todo lo anterior está
por llegar, pero el haber festero
cuenta ya con el programa «La
Ventana», que se emitió el
pasado 9 de mayo desde el
MARQ con todo el equipo de
Gemma Nierga. La ocasión fue
la ideal, celebrar setenta y
cinco años de una cadena ya
clásica como Radio Alicante.
El público alicantino respondió
y acudió con gran interés a ver
cómo la periodista conducía un
programa referente en la radio
española. Como invitados
ilustres estuvieron el escritor
Javier Cercas y la deportista
alicantina Isabel Fernández.
Las celebraciones no han
querido dejar fuera al aparato
institucional. Por eso, «La
Ventana» invitó al presidente
de la Diputación de Alicante,
José Joaquín Ripoll, que habló
sobre la importancia que tiene
y ha tenido la cadena en la
historia de la ciudad. Por tanto,
las celebraciones no han hecho
más que empezar.
JOSÉ REQUENA, JEFE
INFORMATIVOS ONDA CERO
«Estos 75 años
muestran su gran
importancia en
Alicante»
U N I VE R S I D AD MI G U E L H E R N Á N D E Z
El locutor Vicente Hipólito, en el estudio central de Radio Alicante Cadena SER durante un pausa de «Hoy por Hoy» /L. C.
El director de «Hoy por
hoy» dice adiós a los mi-
crófonos de Radio Alican-
te después de medio siglo.
El periodista recuerda con
nostalgia sus comienzos
con 15 años, cuando se
concentraba en eliminar
su acento extremeño. Aho-
ra, es un referente en el
Periodismo y en la histo-
ria de Alicante, su ciudad
L. CALVO / R. G. SIRVENT
¿Cómo está viviendo el 75 aniver-
sario de Radio Alicante?
Como si fuera el 74, pero hemos teni-
do la presencia de programas como
«La Ventana», de Gemma Nierga, y
siempre es una satisfacción contar
con estos compañeros. Seguramente,
tendremos otros programas de la SER
a lo largo del año.
Usted empezó en 1958. ¿Ha cam-
biado mucho la radio en estos
años?
El tema estrella hoy, además de los
magazines, es la información. Antes
no había de ningún tipo, era una cen-
sura implacable. Cuando yo empecé,
la radio daba noticias de las fiestas,
como la elección de belleas, pero na-
da más. Recuerdo que el primer pro-
grama que se hacía en España que tra-
taba de abrir un poco la puerta, algo
muy peligroso, fue «Hora 25». Había
veces que recibía advertencias del
Gobierno y no tenía más remedio que
volver atrás.
¿Cuál ha sido la importancia de la
Cadena SER en España?
Es la emisora más potente y más com-
prometida con el ciudadano, que
presta grandes servicios a la sociedad.
¿Cómo vivió el inicio de la demo-
cracia en Alicante?
Con mucha ilusión. Por aquel enton-
ces tenía un programa por la tarde
donde la gente intervenía. Estaban
emocionados con la victoria de los
socialistas, pero tenían miedo porque
no sabían lo que iba a pasar en ese
momento.
¿Qué aportó a la ciudad Lassaletta,
primer alcalde tras la dictadura?
Martes, 3 de junio, 2008
«La radio
El locutor Vicente Hipólito se retira
tras 50 años en la profesión
es mi vida»
Se tenía que haber empeñado más en
hacer una ciudad mejor y menos en
asuntos que no eran decisivos. Hizo
bastantes cosas, pero podría haber he-
cho muchas más.
¿Ángel Luna?
Le faltó salir a la calle, tocar a los ciu-
dadanos. Era un «piquito de oro».
También podría haber aportado más.
Le cogió gusto a la Alcaldía cuando le
quedaban seis meses.
¿Y Díaz Alperi?
«Me encanta este
oficio, no me acabo
de creer que vaya
a dejarlo ya»
Ha batido todos los récords. ¿Qué tie-
ne? Habría que preguntárselo a la
gente que le ha votado.
¿Le ha afectado algún cambio en la
Alcaldía?
No. El que es alcalde lo es porque lo
ha elegido el ciudadano. Una cuestión
está clarísima: la de los números.
¿Qué significa para usted tener una
avenida con su nombre en Alican-
te?
Una satisfacción enorme y un agrade-
cimiento infinito, sobre todo por có-
mo fue. Yo tenía un programa, «Ali-
cante, barrio a barrio» donde la gente
enviaba propuestas para mejorar la
ciudad. Gracias a este espacio, por
ejemplo, se contruyó el polideportivo
de Carolinas. Por acciones como és-
tas, los vecinos presentaron firmas al
Ayuntamiento para solicitar una ave-
nida con mi nombre y todos los gru-
pos políticos estuvieron a favor.
Y hablando de actualidad, ¿se ne-
cesita un trasvase o se puede vivir
con las desaladoras?
Estoy a favor de aquello que solvente
el problema. Las desaladoras son el
«Tener una avenida
con mi nombre en
Alicante es una
satisfacción enorme»
futuro, pero también está bien que nos
llegue agua del Ebro, del Ródano o de
donde sea.
¿Es partidario de que se abra toda
la ciudad para construir el TRAM?
Me sabe mal porque tiene incomodi-
dades, pero estoy a favor ya que de la
época de Alperi quizá sea lo mejor.
No me gusta cómo están dejando el
Bulevar del Pla, pero es algo necesa-
rio.
Alicante: turismo y playa. ¿Hay es-
pacio para la cultura?
Se están haciendo cosas interesantes.
Existe una oferta amplia como el
MARQ o el MUBAG.
¿Está a favor de que un emblema
de la ciudad como la «cara del mo-
ro» se tape para restaurar el Bena-
cantil?
Sí, tiene 180 grietas. ¡Hay que salvar-
lo!
¿Qué le parece que se desarrollen
proyectos como la Volvo Ocean
RACE mientras el resto de la ciu-
dad está descuidada?
Me parece bien que Alicante sea una
referencia náutica, pero hay que estar
en lo grande y en lo pequeño.
Y ahora que se retira, ¿cuáles son
sus planes de futuro?
No lo sé. Voy a estar trabajando aquí
hasta el último día como si no fuera a
llegar nunca el adiós definitivo. Me
encanta este oficio, es mi vida. No
me acabo de creer que vaya a dejarlo
ya.
¿La televisión nunca le ha tentado?
No. He hecho algunas cosas en Canal
9 y en Localia, pero no.
Tras 50 años, ¿qué es lo que más
echará de menos?
Los programas en los que tienes que
contar cosas a la gente porque ha pa-
sado algo en la ciudad. Todos esos te-
mas que hacen que nuestro trabajo
sea un servicio público. Y también
los momentos maravillosos en los
que conoces a mucha gente.
¿Qué le ha aportado Radio Alican-
te?
Todo. Cuando entré aquí, con contra-
to de aprendiz, era un chaval de 15
años que estudiaba bachiller por la
noche.
Después de tantos años, ¿los prota-
gonistas se convierten en amigos?
Me llevo muy bien con todo el mun-
do. El respeto no hay que perderlo.
Es una cuestión que siempre he teni-
do en cuenta.
Si pudiera volver atrás, ¿repetiría
su trayectoria profesional?
Por supuesto. Llegué aquí con 15
años porque tenía que trabajar en al-
gún sitio y me enamoré. La magia de
la radio me conquistó.
¿Cuáles serán sus últimas palabras
en la radio?
Las de siempre, que un día las escu-
ché, me gustaron y me quedé con
ellas. «Háganme el favor de ser feli-
ces».
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Un 2008
de fiesta
Radio Ali-
cante Cadena
SER está de
celebración.
Este año
cumple su 75
aniversario y
los actos no
cesan. Even- Carolina
tos que de- Pascual
muestran que
la emisora Periodista
perdura en el
tiempo, a pe-
sar de todas
las revolucio-
nes que la
profesión de periodista viene
experimentando. Y ya son mu-
chos años. Y no sólo resiste tem-
porada tras temporada los cam-
bios de una sociedad dinámica,
no, el viejo oficio de contar las
cosas –junto al de entretener–
sobrevive. Por ahora, nadie ha
conseguido noquear al verdade-
ro gigante de la comunicación
inmediata. Internet crece a un
ritmo vertiginoso, pero aún así,
con la radio nadie puede. ¿Por
qué? Obvio: la radio es algo
más. Es una compañera en la vi-
da. Cómplice de los enfados fru-
to de los atascos circulatorios,
partícipe de los despertares me-
nos plácidos, colega en las no-
ches de insomnio, un apoyo en
largas jornadas laborales… Una
amiga.
Sin embargo, el cielo destila en
ocasiones tintes menos poéti-
cos. Con o sin motivos, el Perio-
dismo vive, cómo no, una crisis
de identidad. Un trance más in-
herente a esta profesión. Pero, a
pesar del conflicto y de los pro-
blemas asociados, Radio Ali-
cante está de fiesta, y la ciudad,
por extensión, también. El 5 de
febrero de 1933, en plena II Re-
pública, un céntrico vial (la ac-
tual calle Pablo Iglesias) alber-
gó los primeros estudios de emi-
sión. Así, la cadena comenzó a
formar parte de la historia de
Alicante. Nació con la demo-
cracia, aunque disfrutó poco de
esta forma de gobierno. Pronto,
demasiado, le atrapó el Régi-
men, y así sufrió su peor época.
Contempló, por ejemplo, cómo
el último vestigio republicano
huía del país, aunque no pudo
contarlo. Décadas después re-
cuperó la libertad, y con ella su
signo de identidad. Hace apenas
un decenio fue testigo de la peor
inundación sufrida en la ciudad.
Y ahora es protagonista de su
propio aniversario. Y Alicante,
claro, no es ajena a esta celebra-
ción. Los actos, como se mani-
fiesta en cada ocasión, son un
éxito de afluencia. La gente
quiere radio, y lo demuestra.
Durante estos años, multitud de
nombres han dejado su huella
en los micrófonos de Radio Ali-
cante. Los fieles recuerdan a
Raúl Álvarez Antón o Maribel
Berna. Los más noveles nom-
bran a Gabi Martínez o Carlos
Arcaya. Y todos, a Vicente Hi-
pólito. Historia viva de Radio
Alicante que este año, tras cum-
plir cincuenta en la emisora, de-
ja la profesión. Se jubila. El ve-
terano locutor, de sangre cace-
reña y corazón alicantino, con-
sidera a la radio «su vida». Un
pensamiento que no le pertene-
ce, muchos lo comparten. ¡Tan-
tos aducen lo mismo!