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Juanito estaba sentado en el borde de su cama, cuando su mama decidi entrar, llevaba consigo
un vaso de leche con unas galletas de chocolate, al ver a Juanito sentado en su cama con la mirada
perdida, la mama dejo el vaso y las galletas en la comoda y se dirigi a abrazar a su hijo,
-Juanito dime Qu es lo que te pasa cario? Juanito con lgrimas en los ojos volteo a ver a su
madre.
Sin embargo, Juanito tena que ir a la escuela, por lo que su mama lo ayudo para cambiarse de
ropa y vestirse.
Al salir Juanito llevaba consigo el lunch que le haba preparado su mam en la noche anterior, con
paso apresurado se dirigi al carro de su mama.
Ya una vez en la escuela su mama le dio un beso en la frente, personndolo para que le fuera bien
en este da.
Juanito ingreso a su saln de clase, tomo asiento, el ruido se escuchaba en todo el saln, se
acurruco en su asiento y observo el alimento que su madre le haba preparado la noche anterior,
una rica torta de huevo con un tetrapack de jugo de uva.
Pasaron las horas en el saln de clase hasta que la campana del receso son, todos los nios
salieron gritando y empujndose para llegar primero al patio.
Juanito se sent en su banca favorita, saco su lunch de la mochila, para proceder a comer, en eso
se acercan tres nios, uno de ellos era el malandro de la escuela, todos en la misma le teman
porque era mucho ms alto que los nios de sexto ao.
-Dame tu almuerzo se ve muy rico-. Dijo uno de ellos. Deberas de saber que siempre nos debes
de dar tu comida es tan deliciosa-. Dijo el otro.
El chico ms alto solo dedico a ver y levanto uno de sus puos, lo cerro y asesto un golpe en la cara
del nio, Juanito cay al suelo y todos los dems gritaron pelea, pelea.
Juanito estaba en el piso cuando una chica se acerc, era una nia de sexto ao que encaro al
brabucn debera de darte vergenza, Juanito no te ha hecho nada ni nadie de nosotros, todos los
nios alrededor comenzaron a gritar squenlo hasta que el brabucn escapo.
La nia le extendi la mano a Juanito, para levantarlo del piso, no te preocupes Juanito estamos
todos juntos para ayudarnos aqu.
Juanito regreso a casa con una sonrisa de oreja a oreja, al llegar a su cuarto tomo su diario y
escribi.