Vous êtes sur la page 1sur 1

Tus ojos de almendra se llevaron el color de la maana,

prendieron en llamas el cielo,

convirtieron en paraso al infierno,

detuvieron el tiempo y cambiaron la direccin del viento.

A tus espaldas, de rodillas

Dios te vea boquiabierto.

Mientras te alejabas se apagaba el universo.

Vous aimerez peut-être aussi