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Eduardo Novoa Monreal LOS RESQUICIOS LEGALES Un ejercicio de légica juridica © Baurdo Novos Mosel, 192 Tecra 81972 Istacén pads: Anion Tapes Caja de cordles (vita por des), 1946 © de eat etc Datos Var 180 Povidenia asia 151 Con 29, ono 2743172 Fax 2250261, Sting do Chile ISBN, 9567002.193 Diss: David Take Comps: Compatest La Inpreso por Abo S.A. cr cmer de aro de 1992 u, ut W. vt vu. vin. 1% XI inpice Prdlogo, La eloccién presidencal Las andanzas de la CIA, Ei fracaso de la pista BI Estatuto de garantas constitucionales yy sus omisiones Bloqueo del programa y busqueda de soluciones [Aparecen instrumentos juridicos eficaces La spicaciGn de los instrumentos juridicos La legitimidad de los resquicios legales Las vieisitudes de los resquicios legates Hasta dénde Heg6 la utiizaci6n de tos resquicios legales Balance final de los resquicios legles. Ulflogo: El general Pinochet reconece los reaquicis legales Apéadice 1. Vias legates para avanzar hacia el socilismo Apéindce Il, El diel camino de ta legalidad, u 9 2s 3 41 st 6t n " 95 107 us 131 PROLOGO Para el cileno de hoy poco significa la expresion “eesquicioslegales”. Algunos recondarin, tal vez en for sna imprecisa, que ella aparece en el gobiemo de la Uni ddad Popular, ejereido entre los aos 1970 a 1973, bajo la presidencia de Salvador Allende. Los mis le asignarén un ago seatido, algo genérico, de tet legal o de eguleyads {de mala clase, bien alejado de su real acepcisn hist6rca Pocos acertarin a asoeiarla con To que ella denot6 rea mente en su momento: hibil utilizacion de preceptos Iegales vilidos y vigentes aungue poco conocidos, dest nada a evitat el cerco legal que la oposicién de derecha prepard para frustar la aceiGn gubernativa del Presidente Allende, 'No obstante, de lo que se pede estar cierto es de ‘que los resquicios fegales, pese al tiempo trunscurrido desde que apareceron en el smbito juridico chileno, no han perdido st sentido definitorio para aquellos que los recuerdan: recursos sagaces y legiimos segrn algunos, pero también wampasinicuas en opinién de otros. ‘Las piginas que siguen se proponen dar a conocer, examinar, discutir y ealficar dichos resquicios legals, fon el fin primordial de que Tos lectores queden expaci- tados para formate jvicio propio acerea de ellos. ‘Comprendo gue este escarecimiento no va a tener scogida en muchos, prneipalmente en aquellos que, sin darse cuents, dejaron disponible a sus adversarios paiti- cos el mecanismo de los resquicios legales © en aquellos ave vieron amagida su posicién econémica por la splica- in de étos. Por ello es que esperamos vehementes cri fieas a este estudio, Ain no cesan los rencores que se desataron hace dos décadas ents los chilenos, en el perio- ‘do mis convulsive y dramitico de su historia. Con todo, ‘reo que el tiempo transcurido hab permitido serena? algunos fimos 0 abrir la mente de otros a juiclos mis, ‘equilibrados y ecusnines, que permitan evaiuar los he- ‘hos con objetvidad. Claro es que algunas de estas ertcas procurarin cesquivar Ia verdad de fondo y. veces, para eliza, in tentarin sostener que el ter daa Ia anon en un pais (Gupuestamente) reconciliado o que versa sobre wna aati- gualla que earece de todo interés actual. Pero no se re ‘yuelven aqui los rescoldos de un debate de trasnoche, Girgido a reencender odios ya superados ni tampoco se tesgrime “el hacha de bronce” con el fin de hacer “arqueo- Toga juridicn; sslo me anima el propsito de restablecer lo que ereo Ia verdad, tan multrstada por la pasiGn po: ie. Revonaciendo que es casi imposible que pudleran reproducitse lis circunstancias sociales y politicas que ‘originaron su apatcidn, un andlisis acerca de las eausas, haturaleza, emplea efectiva y consecucncias de Tos res: ‘uicios legales no es tempo perdido y podria ser stil para desentraitar esa verdad 0, a fo men, pars proporcionar antecedentes que ayuden a esclarecerla, Por daloroso que $a pr los chilenos el perfodo en que ellos aparecieron, vale Ia pend indagar lo que hubo realmente bajo esta de- nomination ‘Los resquicios egales,errineamente interprets, Consttuyen posiblemente uno de los més graves cargos ‘que pudieron levantarse en cootra del Presidente Allende {Ati as, qué poco pesan sien el oto platillo de Ia balan 24 colocamos lo que se hizo para implantar y sostener el régimen dictatorial que lo sucedi6! Mi tesis va a causar escozor entre quienes tanto clamaron en su época en conta de la utiliza de estos resquicios, aibuyendola a abusos 0 desviaciones de po: der del Presidente Allende, pretendidamente dirigidos contra opositores inermes. AT mismo tiempo, la sorpresa ‘va a invadir a las mentes menos cegadas, por Is. muy simple razén de que la decisién politica que origind su ‘empleo se hizo posible casi exclusivamentedebido al exor {e quienes omitieron derogarlos dentro del Estatuto de Garantias Coasttucionales impuesto a Allende por la di- iva deméerataeristana, Varits rzones me han convencido de la conve= niencia de escribir lo que sigue. Ante todo, la necesidad de explicar y esclarecer una discusién de importancia historca,incuida la reivindieacin de quienes aplicamos In tess que aqui se sustenta, En seguida, el ser éste un ‘aso conto a0 habel otro para mostar las relaciones € influencias invisibles que enrelazan ala peictica politica con la pritica juries, Este aspecto revise extraordina tio interés para'un conocimiento mis profundo del dere- cho y para la formaciga de os abogados. No ser la menor e clas exhibir c6mo una determinada herramiente jut ica, aprovechada imaginativamente, puede alcanzay re- sonancias inesperadas en el campo de una politica nacional de avanzada Deliberadamente uso un discurso y temninologéa sin tecnicismes, para que cuslquier chileso pueda com render lo que aqut se expres. ‘Una explicscion cabal y a fondo de fos resquicios legals pase necesariamente por una indagaciGn acerca de las circunstancias pottices en las que vivia el pais desde I eleceién de Salvador Allende como Presidente de la Repiblica, en 1970. Lo que Allende habia frecido a sus clectores y su inflexible determinacién de eumplir «todo tance su programa electoral, son factores directamente vinculados ala wilzacin de los resquicos legates. Pues, de otro mode, no era posible sbric paso atrnsformaciones profundas en a vida politica, econémica y social dt pais. En las condiciones politics del momento no habria hab do otra alterativa que afrontar un violento esalido so cial, Ageéguese a ello la unanimidad con que las méximas. autordades pablicas habfan declarado antes, y corabers ron después, ln plena validez juridica de los preceptos ‘comprendides en Ia denominacin de “resquicios legaes” [La posterior tacha de ilegitmided que vanamente se opus 46808, tene exclusiva origen —como se veri— en las conveniencias politicas de tan extraviados hermeneutas La determinacién con que la derecha eeondmica deciis hacer imposible «Allende un periodo presidencial ganado por voluntad popular y con ateglo a todas las exigencias constitucionales y legales, es oo facor que conduce,a comprender las inconsistentes objeciones que se alzaron por parte de los jurist de I oposicién conta la wtiliza- ida de los resquicios legaes. Interesa también dejar establecida la forma y cir- ccunstancias en que el gobiemo de Allende dio aplicacién 8 los resquiios Teales y los efectos inmediatos que esa puesta en prictca tuvo para Ia vida econdmice-social y Politica chilenas ‘Antes de Ia medianoche del 4 de setiembre de 1970, se sabia ya en todo Chile que Salvador Allende habit trivnfado en la elecciones presidenciales que tu vieron lugar ese di. Los 1,070,000 votos que obtivo en su favor (36,3% del total) hacfan imposible discutir los e6mputos. Es cierto que In distancia en yotos que lo = para de su mis cereano competider, Jorge Alessandr Rodriguez, no era grande; algo asf como 40,000 voros. TE solo hecho de no haber obtenido la mayoria absoluta de los votintes (ris de la mitad de los sufra- ios), ponie en sctivida el artculo 64 de la Constituci6n {de 1925, conforme al eval el Congreso Pleno debia clegit fal Presidente entre los eiudadanos que hubieren abrenido Tas dos mus altas mayors relaiva, esto es, entre Allen de y Alessinds ‘Los 50 dias que siguieron la eleccién desataron Jn ms grande tensin pablica que haya conocido la his toria institucional del pas, La derecha estaba convulsa y stertada. Nunca imaginé que su candidato fuera a obtener ‘menor mimero de votos que “el marxista" Allende. Sus cleus le haan asignad a Alestandet por lo menos 1a Frimera mayoriarelatva y es por ello que se habfa nega: {80 a apoyar In reforma consttucional propuesta por Tos parlamentarios Rafael Agustin Gumucio y Alberto Jerez x domdcraacrstanos, afin de que en el caso de que fingén candidato aleanzata la mayoria absolut, In elec: in fuera decid en una segunda vuelta por decision de toda la ciudadanta, entre los dos eandidatos con Ia mejor votacidn, Seria todo el cuerpo electoral el que directa- ‘mente optarfa entre uno de los que hubieran obteida las dos mis alts mayoris, La propuesta cays en el vacto; la serecha estaba segura del tiunfo ‘Ms alld fue la derecha ain. Cierta de que Jorge ‘Atessandri obtendria Ia victoria, empe26 a preparar los fnimos para dar por electo Presidente de ln Repiblica a ‘quien fograra la mis alta mayora relativa. En la prensa de J dias anteriores a Ia elecein In dirigenciasleseandrsta estuvo publicando un Hamativo desafio alos dems ca fidatos para que de antemano aceptaran tener por Pre- siden de la Repsblica ® quien obuivire a rs lta ma yporia relative, que es precisamente la que obtwo Allende. Para justifiear su oposicinabsoluta, exteriorizada después de ia eleccién, a que Allende obtuviere la Presi- cis legles. Cuando repararon en este olvido, al eabo de ‘asi un afio de profuse aplicacin de los resquicios legales por el Presidente Allende, no atinaron a otra cosa que a presenta, a fines de 1971, con la firma de los senadores Juan Hamilion y Renin Fuentcalba, un desatinado pro- {yeeto de reformat consitucional que reviiera esa aplica dn y que para el fotro la impidiese. Pero ya era tard. Nos enconiamnos, por ende, ante el hecho escueto de que el Partido Demserta Cristiano omits inclur en el Estatuto las disposiciones apropiadas para derogar o para hacer inaplicables los resquicios legales. Es aventurado sostener que sus diigentes desconosian esos resqucios, por la calidad juridica de quienes estudiaron la materia: por consiguient, habria que suponer que todo se debi6 a tin olvido, ‘La omisi6n de las materias econémicas no const tuy6 para los patidarios de Allende algo por lo que de bieran comprometer so gratitud. La imposicién del Estatuto de Garantias Constitacionales habit sida siempre apreciada por ellos como una exigeacia repudiable © in- justa Nuevamente una actitud demécratscristiana episddica i a acentuar enconos entre las dos corrientes polities chileas que podrian llegar a alirse para dar al pais un gobiemo estble. Oxra vex la izquierda chilena volveria'a distanciarse del Partido Demécrata Cristiano debido alas extremadas exigencias de éxte. En la épaca de la discusién y aprobacién dt Es. tatuto no habia comenaado aii mi colaboraciéa como sases0r juridico del Presidente Allende, En nada in us, por fonsiguiene, en el contenido de este cuerpo legal ebo reconocer, sf, que dicho Estatuo de Garan ” tias Consttucionales contents varias disposiciones bas- tante progresistas, especialmente en lo que ae reflere al derecho al trabajo, a una justa participacion en los bene- ficios, a la fcilidad para la asociaciGn sindical, al riesgo en el trabajo, a etenciGn médies, a euidado en la salud ar sanitario del patsy a las organizacio= nes sociales de base. Reconoeia a los chilenos, en térmi- nos generles, “el derecho a partciparactvamente en la vida social, cultural, civiea, politica y econémica eon el ‘objeto de lograr e! pleno desazollo dela persona humana Y su incorporacién efectiva a la comunidad nacional. El Estado deberd remover lot obstéculos que limiten, en el hecho, Ia Iibertad e igualmente de las personas y grupos, ¥ garantizaré y promoveré su acceso & todos los niveles 4e ia educacida y Ia cultura y alos servicios necesarios Para conseguir esos objetivos,.”. Imponia al Estado la ‘dopeidn “de todas las medidas que tendan @ la satisfac cidn de los derechos sociales, econémicas y cultrales necesarios para el libre desenvolvimento de la personal dad y de la dignidad huranas, para Ia protecciGn integral de 1a colectivided y para propender a una equiative redistribucin de la renta nacional", Como se ve, $e tata ’ba de preceptos amplios y bien estructurados que podian abrir paso a Ia elaboraci6n de tsisjuriicas apropiadas Para conducir una economia. Tado esto sin perjuicio de Importantes precisiones para una mejor aplicacién en materia de derechos humanos, de partidos politicos, iber- tad de opinién, educacin pablica y ota. La cireunstancia de que esto proviniera de un pro yecto demécratacristiano y, aun més, que se insertara en un Bstatuto de Garanias Constitucionales, que era mado como un vejamen inferido al eandidato dela izquierda 0, 8 Jo menos, como un intento de reduct las atibuciones Dresidencialesjustameate entonces, en momentos en ue a presencia tcaba aI iin, hizo que yo no los tera en coc, senda que puro se illaads para ‘eran stro vance ene edna socio ico del pale ie oe oral repaar en ello confieso wi calp, Esos textos, cull gue fur procedenia poderon sr mnpleads provechosanens en apoyo de los planes de folic de In iqueda,abieado paso 0 siviendo de seco suchas ideas propugnadas por el Presidente Allende, » cavtruto v BLOQUEO DEL PROGRAMA Y BUSQUEDA DE ‘SOLUCIONES BL 17 de diciembre de 1969, los paidos politicos de Ia inguierds, formada entonces por los partidos So- cialista, Comunista, Radical y Socialdemdécrata, el Mo- Vimiento de Accién Popular Unitaria (MAPU) y la Accign Popular Independiente, aprobaron en Santiago un Pro- rama Bisico de Gobierno que habta de servir como plataforma politica en la eloceién presidencial, Una vez ungido candidato por este sector, Salvador Allende hizo suyo este programa, EL espirta del Programa debe ser entendido de acuerdo con las ideas que predominaban en lus Fuerzas fe inquierda acerea de Ta stuacion del pats en esos mo. Los partidos que integraban esas fuerzas denun- cian en él la profunda crisis que vive el pas, la que se ‘manifieta en un estancamienio econémico y' social, en pobreza generalizada y en postergaciones de todo orden {ve Sutren obreres, campesinos y demas eapasexplotadas, Pero, el enfoque que hacen hacia el futuro es optimist Jos problemas chilenos pueden ser resueltos, porque el pais cuenta con grandes riquezas y potencilidades y exis: ten voluatad de trabajo y capacdad técnica y profesional Sin embargo, Ia solueiga no puede set lograda dentro de un sistema eapitalista dependiente, domninado a por el imperialism y por sectores burgueses ligados al capital extranjeo; tampoco puede ser obtenida mediante In aplicacion de recetas “reformistas” o “desarrllistas", como las aplicadas durante el gobierno demécratacristiano de Frei, las cuales demosiaron sa fracaso con su propia aplicacin. Para alcanzarla es indispensable legar a un reemplazo de la actual estructura econdmica por otra que termine con ef capital monopolista nacional y extanjero ¥ con el Inifundio, a fin de “iniciar la constrceién del Socialism El programa no se limita a hacer un andlisis de la siwacin econdmica de Chile y a proponer las medidas adecuadas para resolverla, sino que realiza un enfoque mplio que abarca ls planos econdmicos, politicos y s0- ciales. Con ello se reconoce la complejdad de las tareas que deben acometerse y que tenderin & “institucionalizar la via politica hacia el sociaismo" y lograrlo a partir de ruestra realidad presente, de sociedad agobiada por el atraso y la pobreza, propios dela dependencia y subde- sarrolo, romper con fos factors causintes del retardo y al mismo tiempo edificar una nueva estructura socio-eco- ‘némica capaz de proveer ala prosperided colectiva, El programa considera conflctiva Ia situacién s0- cial chilena y para zanjarla en favor de la fuereas popu Tares planted Ia necesidad de una movlizacién de éstas capaz de inlina en su favor la balanzahistrica Por ello sefiala que los cambios de estructura suponen “un taspaso del poder de 1s antiguos grupos dominantes a ls taba jadores, campesinado y seciores progesisas de las capas medias" Solamente cuando el pueblo arganizado adquiera €l control del poder politico y econémico, omindolo en sus manos y ejerciéndolo realy efectivament, sextn pos bles las transformaciones revolucionaras. Y esto supone ‘una “acca unitatia y combativa de la inmensa mayorie 2 e los chilenos”, que se decidan a resolver los problemas e las grandes mayors sociales. Para liberar a Chile de Is subordinacin al capital ‘extranjero se proponen medidas que traspasen ese capital 1 Estado ebileno, seguidas de un ceciente autofinancia- Imiento de ls correspondientes actividades y de la ijaci6n fe condiciones para las invesiones extranjeras que sub- Sistan como tales, Para terminar con el eapital monopo- Tista nacional y el latifundo, se esablecen una completa ‘suboedinacin del primero a Tos intereses nacionales y la Climinacién completa del segundo. Conjuntamente ha de Drocurase un crecimiento econdmico répido mediante el fesarrllo maximo de las fueraasproductivas y el 6ptimo aprovechamiento de los recursos humanos, naturales, fi rancieros y téenicos disponibles, El pivote central en torno del cal se obtendrin es- tos resultados y que permitirédesarollar una planificacin fecondmica de caricer ejecutivo, ser la adquisicign por {1 Estado de todos ls modios de produccién fundamenta Tes, ¥ el instrumento adecuado para lorar la transforma cin sera la constitucién de la Hamada Area de Propiedad Social - CConforme i estas ideas se propone la construccién de una “nueva economia”. Esta nueva economia supone la consttuciéa de t1esdreas econdmicas, una de las cuales —Ia que quedaré fen manos del Estado— seri 1a dominante; otra perm tir la subsistencia de propiedad privada sobre medios de produceién, y unt tecera dar cabida al Estado dentro de fas actividades econdmicas de ls panticulares. Se tata de las tes dreas de propiedad: propiedad socal, propiedad privada y propiedad mixta, El contol por el poeblo or ganizado del poder politico y econémico quedars ase- furado por la ereaign det dea estatal de la economia y “ por la planificacién general dels actividades econmicas. Las diferentes éreas se describen textualmente ‘como sigue rea de propiedad socal EL proceso de tansformaién de micsraeconomts Inia con wa police destinada « constitu un dea extatal dominant, formada or ls empresas gue a tualmente poste et Eso mas las empresas que se texpropien. Como primera medida se nacionaizarin gual igueras bien ue, come la gran minefa de br, hero saline y os, ese poder de caiales extanjers y de fos monopolios inernos. Ast, queda rn ine grand este sor deatividades macionalizads las siguientes: 1) La gran miner de eobe, site, yodo, hietTo y carbon miner 2) Bl sistema fnanlor del pas, en especial Ia banca privat y spurs 3) BI comer exterior 4) Las grandes empresas y monopoios de distsbuci: 5) Las monopolies indus etragico, 6) En general, aquelas actividades que tondicionan et ssaroll ceenmico socal dsp tales como I produccigny distribucién de enorgt elétia; el trae one Teroviaio, aéroo y morlimo; la comunia iones; Ia produceién, wetinaién y distribucin del Prusloo y Sub derivads,incuido el gas Hcusdos a siderarga, el cemento, la petrogunicay quimica pe sda, la ectlosa, ot paps. “Todas esas expopiaciones se har slempre con pena resguard del ites dl pequetio acionists, El érea de propiedad privada, sta rea compre aquellos sectors de It industria, a mine, la agvcutoray los servicios en qu perma nose vigente Ia fropiedad privada de los medios de producen Estas empesss en ximero serén la mayoria, Ast pot cjemplo en 1967, de las 30.500 industria (inluyendo Is indusraatesina, slo unas 150 eoneolban mo nopolicamene todos os mereidos, concentrindo Ia ayuda del Estado, el exit bancarioy explotndo al resto de los empresrios industries de ps vend oles cara a materia prima y compedndoesbartos sos prductos Las empresas que integran este sctor seein beneica as con la plniiacién general de a economfa nacio- rl, El Estado procures as aitenciag financiers eniea nocesaris alas empress de esta es, para que puedan cumplir con Ia importante funcin que desem tan en Ia economfa nacional, atediendo et nimero elas personas que trabojan en elas, como e} volun ea produccida que generan, ‘Ademis, se simpiiicarin fos sistemas de patenes, aranceles aduaneros, contibuciones y tnibutos para ‘estas empress y sles asegurard una adecuada yjusta omerilizacién de sus products En estas empresas sb debern garantzar los derechos 4e obreros y empleados a salaios y condiciones de trabajo juts. El respoto de estos derechos Seri caute- lado por ol Estado y 10s tabsfadores de la empresa respective, ‘Area mista Ete steor sorf miato porque so compondrt de em presas que combinen Ios capitals del Estado a los paicaares, Los pestanos 0 excitos conecidos por los onganis- mos de fomento «lat empresas de esta Area podria 4s serlo en calidad de apores para que e Estado sea socio 1 no acreedoy. Lo mismo ser vlido par los casos en ‘ue dichas empresas obtngan exits con el aval @ garaia del Estado 6 de sus instuciones" Basta conocer Ia exposiciéa precedente sobre el programa del Presidente Allende para captar que éste 20 pods ser levado a cabo mediante la utiizacén del bagae Juriico habitual de los hombres de derecho. Porque él Aaspiraba aun cambio profundo en la orgunizatién econ6: ‘mico-socil del patsy porque ese cambio debia tener sus primeras expresiones en el campo juridico-ecdndmico, endo que no estaban a la vista preceptos legales que permitesen ponerio en aplicacién La formacin del drea de propiedad social sign: ficaba ia necesdad de trasladat la propiedad de medios de produccidn fundamentales al Estado, El programa men- lonaba la nacionalizacién de las principales actividades ‘econdmicas, sendo que ese vocablo lo que él significa no encontraban lugar ente ss ideas juridicas ehilenas de la época. Tambicn se hablaba de expropiacién de empee- ss y del traspaso de medios de produccisn ala propiedad colectiva, mecanismas deseonocides por Ia mayor parte ‘de los juristas de esos momentos. Examinado el programa ala luz de los conocimientos jriicos entonces en bogs, odin aprecarse entre ambos un desajuste que parecta hacer imposible el empleo de dichos conocimientos para Ja ealizaign programdtica. En suma, los conceptos y vo- cabulario separaban a tales conocimientos del programa a tal exteemo que parecfa no haber lugar para la aplicacién prictica de éste ‘Lo dicho llevara los mis a sostenet que el pro grim de Allende sobrepasaba ampliamente los instru- ‘mentos juridicos disponibles, raz6n por ls cual no parecia 6 haber posibilidad de insertarlo dentro del ordenamiento Jjniico vigente, :Seria esta idea, de supuesta imprati- ‘abildad del programa, la que llev6 al Perdo Deméerata (Cristiano a no acuparse de lo econémico en la discusién el Estatuto de Garantas? 0 seria, tl ve, la idea de que tu programa —como tantas veces se habia Visto— era un Conjunto de offecimientos vanos © de meras proposicio- nes part el in electoral, pero que no habia dnimo efectivo de cumpli? Son posiilidades. ‘A lo anterior debia sumarse na situacion un tanto singular que se prodveta como resultado del juego de los preceptos constitucionales que regtan Ia producciéa legis- Tativa en la époce: ni el Presidente Allende podta imponer su eriterio al Congreso para obligar a éste a proporcionar- Te una legislacign apta para insoducir y consoidar los cambios que él persepufa, ni el Congreso Nacional, deatro {el cual tenfan mayoria Tos opositores de Allende, podi imponer el suyo a éste para restare al Ejecutivo las ati buciones con’ que coataba entonces, en cuanto fueren apropiadas para lograr esos cambios. Se trauba de un verdadero blaqueo ree(proco al que quedaban condenados Jos dos alos contrincantes de esa gran dispura politica: los poderes ejecutlvo y legislative. Consecuencia de lo anterior ¢s que Allende n0 podia esperar para el ejerccio efectivo de su gobierno, tras leyes que las que Ya estan vigentes al momento de su eleccién. En el fondo, para cumplir su programa no parecia tener otra posibilidad que los instrumentos juni 0s que gratuitamente quisiera proporcionarie el Congre- $0. Dada la situacion politica, sin embargo, el Congreso ro proporcionaria nada, a menos que por razones cir- teunstanciales —como ocurrié con Ia nacionalizacién del cobre— evestién que no podemos explicar aqut, le diera fpoyo parlamentario en algiin punto concrete ” ‘Tan singular situacién fue recogida por H Kissinger en sus Memorias, al comentat este atascamien. to producido entre los poderes constitacionales chilenos, ‘que a él le pareefa una solucidn pareial ante los avanzados proyectos legislativos de Allende, pues al raenos era Posible trancar toda nueva legislacién favorable a Ia iz quierda De este modo, Allende, que era el Presidente més ispuesto a implantar cambios, reformas y ‘transforma ciones fundamentales en la vida politica, economic y social de Chile, que haya sido elegido en et pals, debia tener dnicamente a as leyesexistentes, sin que le fuera posible obtener otras nuevas que fueren aps para llevar ‘cabo su plan de gobierno. La inquierda habia ganado la presidencit, pero se hallaba en inferioridad en las dos amas del Congreso, En estas condiciones su programa de gobierno pudo ser relegado al desvin de otros tantos Proyectos y promesas electorates no cumplidas, Pero estas Inereias y derotismos no ealzaban eon Allende EI dilema era simple para el Presidente recién sila expropiacisn referida “puede hacerse extensiva a todos los bienes 7 derechos: que componen el activo de ese establecimient, de cual- quier natursleza que sean”. La respuesta afimmativa se connuvo en el informe N? 889, de 15 de diciembre de 1970, también redactado por Guillermo Pumpin. Bastaba leer €l informe primitivo y el complementario, ambos de gran extensida y ampliamente informativos, para caer en ‘cuenta en lo razonado y completo de su discurso, tan diverso de Ios livianos informes recogidos en El Mercurio de 14 de agosto de 1971, emitides por las abogedos Alejandro Silva Basouitin y Juan Carlos Dir, los cuales edicaban atenciGn a s6lo unos pocos de los problemas ue proponian y solucionabaa los dictémenes del orga rismo antes citado. Comparando entre ellos ert Fill dis- ‘inguir ence lo que son opiniones jusdicas seit, fruto de tun razonado estudio, y otrs animadas por un esprit de lucha politica. EI informe del Consejo era, pues, muy completo abareaba todas las cuestiones juridieas eavuelis, in- cluyendo ain aquellas de cardeter secundario propuestas por fos juristas de El Mercurio, Por es0 es que ro necesito extenderme aqui sobre ellas y basta con uns remisién sgenérica a los dos informes de! Consejo de Defensa del Excado ‘Sin embargo, conviene recalear algunos de los mis ostensibles vicios de Ia argumentacién de Silva Bascunén, Afirmaba éste que en 1966 se autoriz al Presidente de [a Repdblica para “revisar y refundic” la legislacia sobre costos, precios y sbastecimientos, lo que se cumplié con el decreto N? 1379 de dicho afo. Segin Silva Bascuisn, los preceptos materia de discusion fueron dtados en ppugna coa el texto consttueional entonces vigente (art 10 NP 10). Para apoyar esta premisa, el polemista daba por | _ Sento que a aorizacin para revise na ey, otra “al legit, nlf lade Geogr nto Tepes Ea tela 7 del DL. 50 hala do deropde pore slo hecho de omitso ene texto refi, Sobre se cn. ‘co izoamint consu toda su te, Pa colo, entenda ue un texto refundido onina un nev tee legal ifeene, coy conformidad ton el txto cons Cina! debe ef vu a examnat or su pare, abogado Dorr desarollaba gran estuerao par mantener algo us nie habla pues en dade: go a expropiiciones a decrees oiiatan dereho ala compose Insmmancin Tes poe tos seoadod Lo eico bss para ender que no es nessa Los informes del Consejo levaban Tas fines aprobuorss‘unimes de ls abogidos consejeos que Aombramos eel capi aerion aa mines de ts imams hasihn pevesi de dscepar de on palo Uelinoie cel sepa posi de exropa aecones de uma sociedad sna eo todos consrren Is aproacisn deta expropasion Pouca alguc suport ue eos mismo del Cn (nt os Euis son "ban no menor de euro contocados dienes dl ae Sandrtmo) ern una opain improviser det deeksvo tema 0 gue inenan favre yarparar 7 Inionesteples pleads por un gobo de iit? ast qu hemos eaninago arguments de ul es buszaban apoyo en los exis leas posives ep cables analizaban a sibsistencs 9 vaidex de sts SSspoiions, Hubo otros qu con mms experiencia 7 asta rehyeronenrdars en dchos texto, qe et 1 au le habia ocuido a El Mercuri oparon port una lucha en el plano de los que Hamaroa los grandes principios jariivos en lugar de desce acudieron ladinamente a algo muy imponderable y etéreo tomo lo son “los prineipios bisicas sobre los cuss de feansa todo el sistema juridico chil . terio, sustentado por Julio Phitipi, et ataque iaciones industriales debia das texto de Ia ley pasitiva, expro ss de textos Te sabjan perdido), sno en el de Tos fundamentos eismos del ordenariento juitico v gente, Pero en este empedio tampoco tuvieron fortuna. No podia presentarse al DL. N? 320 como algo ente mentos del ordeas 0 lacidn cuyo sentido general pugaa con el derecho individualista que nutrié a tos grandes esdigos burgueses. nl como un ales (terren0 en stante mas arlio y difuso espegado de los f leno ni como una I eontraponta a los fines de I m. Para el exam pod = muchisino, porque sus limites Son rauy exte emos, en consecuencia, un estrecho resumen de & zumentos que pecan see posteriormente desarrollados ex forma may ampli. En primer lugar, de ningona manera ta inter ida a su leva podia violenear el espirita de los precepios cuesto bs con el propdsito preciso de introduce en Chile leyes con eanicter socialist: El que un goberaa & iz-quierda, elegido constitucionalmente, como et de Allende, utilizara peecepios dictados por un r ‘eclaraba “socialista", no romp: orizaba para disociae lew y espiria de la io, estaba en estricta concordaacia con los fines y el espltit de. esos preceptos cuando ellos fueron dictados. da, no se necesitaba ser un gean gud para arse evenig de que ala legislacisn chilena de comienzos de los setenta se Te habfan insoducido numerosas inno ones de avanzada, lo que haa que 1a in a de precepios legales de claro tint pr da como abiertamence contara al sistema, entre ras, las modifcaciones introducidas Cspecialmente en emaieria de ex- Tas eformas constitucionales para Ia nacionalizacin del cobre, entre lus cuales se halls incipios elisicas d tonomia de la voluntad y de p. mente individual, la a ds aminio por el Esodo sin payo de indemnizac et Et 571. Come ya al testo constiacional expli rormas destinidas 8 08 los de es, econdmicos y eulturales dol ser hursan Tibte desenvolvimiento de su personalidad y muneraciones suficientes y usta pacticipacis emover ios obsticulos que limitaran sales prosresos y de proclamar la ineorporacién de todos a a comunidad na- ional, enxe ogo. Por consiguiente, cuando Julio Philipp impugna- ba Jos resquicios legues acudiendo a los grandes princ. pios que informan el sstera jardin chileno,acusindome e “fraude a la ley", 0 bien desconocia los avances pro- ducidos en la legisacién nacional en los stimos aos © bien hacia Un examen tendenciosamente incompleto 0 descentrado del ordenamiemw jursico que 10s baregido, para allegar argumentos a su posicib, En muchas dscusionessobeeapticacin de esq cios legates durante el gobierno del Presidente Allende se tmezel6 un aspect que debe ser claramente sepando. Se trata de fa meuiscién © imervencidn de Indust, que ese gobierno aplis en miliples oporumnidades. Ext ema to consiero 2jano al de los resqucioslesales. porque se trai de medidas puramente transite, que no podlan servie para ks formacin de! sea de propiedad social y en las cuales hubo muchas veces una aplcacién desboe dada de las Facltades concedidas. No seré yo quien tome ami cargo la defonsa de las que se aplicaron desare- {glidamene, Preiero recordar que yo mismo denaacié al Ministero de Economia incomecciones cometiasen una ermpresa requisada a6 captruto 1 LAS VICISITUDES DE LOS RESQUICIOS LEGALES Como se ha visto, Ia discusi6n acerea de los res ‘uicios legsles comenzé temipranamente en el periodo residencial de Salvador Allende, pues ances del primer mes se habia preparado ya Ia primera expropiacisn, Esto explica que en los primeros tiempos el Partido Demécrata Cristiano no se alineara decidi alianza que sobrevendria al ao siguiente entce la derecha y la Democracia Cristiana, era entonces apenas una posi- bilidd. Esta es ta zaz6n por la cual ef Partido De Cristiano no pasticipé activamente en los debates de ese tiempo, corespondientes a los resquicios legales Mas adn. cuando la derecha preseats una acusa- ida constirucional en contra del Ministro de Economia Pedro Vuskovic, el 8 de setiembre de 1971, atrbuyéndole quebrantamiento de fa ley en la aplicacién de las medidas econdmicas del nuevo gobierno e incluyendo dentro de ese quebrantamiento la aplicacién del D.L. N? 520 y las expropiaciones logradas mediante ese decretorley, 1a Democracia Cristiana vots en favor del ministro acusado, lo que, en ciera forma, podria coasiderarse como una ‘opinin favorable hacia los resquicios legales. La posicidn de la Democracia Cristiana a este res- ecto no era ficil, porque en el perfodo presidencial pre- dente (el de Frei) el Gobierno habfa introducido algunas ‘los preceptos que Eonformaban Los cacién. lo que a habia intentado dae aba la el Consejo de tide Deméerat acer juridico Favor ios cuando suscribie rapitulo preveden ‘A miediados d ‘octubre de 1971, ao obstane, los ba y Jaa cristianos Renin F Hamilton, presestarun al Sensdo un proyecto de reforma const enicegada excl te a la ley ée [ produccién que odin incorporarse al rea soé I econerala y lespués del 14 d gu disposicida contraria (sobre cualquier inteno del Ejecutivo de est reas social y rointa de ls Allende, pra tl fin, fuculeaes | disponibles agp dos mos eure as po seni “4 iit el espacio con el que conta para poner en api de empezar a sna de gobierno qu ado por el pueblo, qu ‘quedado admitido en principio por la abrunna hhabida en su favor en el Congreso Pleno. El Preside leeto no habia tomid con la Democracia Cristiana or niso que el derivado del Estawto de Garantfas ubiere quedado obligido a abstenese. Era, por const tric el que el Presidente Allende no uviese est las imentos 0 protibiciones en el eercicio de sus b Hamilton-Fuen! precisa, Efeetabs ss hasta ba accion del proy forma con referiese a ks que se originaren Seria est ana manifestacign del temo Garauias Const ban del dees social y mista o que podian Fulks buena asesori, por fo que quedé de manifest s ‘dad € No pur hacerse mejor comentario respec tro de Ios temas eratados en este pro idad de ios actos juridieos cont sara dre social y mixta. Dentro de ui » régimen democrético con separacion de los mis altos poderes roca al Poder Judicial declara,en cada 3:0 ar- Rrclar, que un acro es nulo 0 no lo es. No serd el cons- tiuyemte el que pueda decidir sobre eso. Lo que puede hhacer el legislador es sefalar causales de nulidad 0 Ajar Grigencias genéricas que pueden determinaras; pero la Sxgioacion de si en cieras citcunstancias particuares y Soneretns bay lugar o no a una invalidacién de en acio furidico determinado, es materia de una sentenca jail orgoe requeTe de una indagacidn acerea de ta efectivi aaa de los hechos que la permiten y de Ia aplicablidad a stos de las normas legales generale, a forma de acremetida politica ciega y exiwerbada ‘con ln que fve levada a traitaciGn de tan rasco proyecto Ge reforma constitocional, twvo enorme influence La tgudizui6n de ia odiosidad politica y contibuyé decii- aevonte a fa estrechisima uniéa que en adelante snudaria fis Democracia Cristiana con fa derecha. "No me corresponde acer un examen cabal de este proyecto Hamnilton-Fuentealb, el que reibié muchas mo TTpeaciones 2 lo largo de su discusién parlamentara. Solo Quiet sefalar gue casi fodo su texto era un reconocl Srjento abierto de Ja Tegitimidad de los resquicis legals, puesto que era necesario Hegarhasia a una reforma Cons Bcfonal para poder dejarlos sin efecto. El hecko, antes Wo. de que Viniera a presentarse este proyecto & explica fast un afo de la asuncign de Allende a la prim sjstratura, ponia en evidencia que, hasta ese moment, fs Semocracia Castiana no habla encontrado graves reparos {que oponer «Tos resqucios legates. Ahora reién des- Sheena con su aplicacidn iniciaba una gestin diigida a Serogurlos, may desafortunada en su texto yen su OpOr- fanidad, pero que, en todo caso, implicaba resonacerles su existencia y valides anteriores. is a Dificilmente podia argir la Democracia Cristiana ‘que sus reparos eran graves y fundados. De otto modo UUfeoerta de explicacién su conducta anterior. Lo mejor fque podria devise a sv respesto es que en octubre de 1570 hubo un real olvido de sus representantes al no haber incluido a los resquicios legales en et Estatuto de Ga- rants Constitueionales. Y un olvido no ¢s algo que pue- da proponerse en un evdeo potiic tan serio como el que tentonces dominaba Ta vida nacional En todo caso, este proyecto Hamitton-Fuentealba rostrata en forme patente que los preceptos que Allende tenpled para extender fas éeeas social y mixta deta pro- piedad y de la economia, estaban en cabal vigenia y eran Blenamente vilidos, puesto que para desurios era preciso cudir i mas ni menos que al miés poderoso de les medios juridiooss una reforma consttucional ‘Ene tanto, el gobierno declaraba Ia expropiacion de varias indusrias textiles, an cuando la mayor parte de Si actividad, al parecer debido la presion de as fuereas Taborates, derivaba o la tilizacion de procedimientos ad mrinistratvos colaterales, como lo eran Ia intervencié de empresas y Ma requisicidn de elas El hecho real. sin embargo. fue que fos resquicios tegeles fueron aplicados en escase medida. Mienas habia thas de dos centenares de empresas intervenidas y requ ads, apenas unas pocas industras fueron expropiadas e to ee fos resquicios legales: La gran mayoria de Tas ia- corporaciones de empresas al drea de propiedad social (por lo que toca a su cuanta), fueron realizadas medianee Gplicacién de los mecanismos juridicos wradicionsles, prineipalmente la adguisiién de establecinienos através Be ta compra de sus aeciones por algin organismo esti fal Desaforrunadamente no se ocuparon mds los resqui- tos Iegales, los cuales ciertamente habrian permitido ‘ ‘ ‘ ‘ ‘ ‘ ‘ ‘ ‘ ‘ ‘ ‘ ‘ ensanchar y asettar debidamente medidas sélidimente fuandadas "A partir del inicio de 1972 empea6 a hacese senve una nueva dificulted en Ia formacign del érea social, que era el excesivo tanscurso del tiempo sin que seh Fiore lograco una legislacidn completa destinada a resol ver todos los problemas q destinadas a ello. TEI pensasiento del Gobierno pop conquistada la presidencia de 1a Reptbli posibilidad d Quicrda en el Esta suposicia se vio conte 7 el tan favorable resultado de las elect ses municipales de abril de 1971, Producido esto. prix una Fuerte pr lectorado nacio mma etapa habia de cumplirse ea marzo de 1973, fechs Fjada para las eleeciones generates parkamencaris aquiesda nadie dudaba que pa iste expresada por elder de lo Rosiriguee Grez, en mayode 1973. levis, seg el narxismea| as ate jones presiden sndri et $0 por cientO de los voIOs: por 50 £0 €8 po: Sine esperut sta 1976, debomos actuarakora'y Era un aro Hamamiento al golpe de Estado y ata cu Jectoral por pare era derecta La i n las préximas unto és ‘elebraran en leal confrontacién democritica’ Un triunfo de esa especie Te daria la posibilidad de introducic islaciéa chilena las reformas necesariss pare ‘Cumplimiente de su programa, piblicamente dado a cono- ter y diseutido en todos los planos politicos del p 2 Bxwafa paradoja: mientras In derecta buscabe tt srrales, [a izquler 0, esperaba un Sus ideas. Quienes se antic paban a pronosticar que la iaquierda cla Hemocritico y no adeiira a relizacin fara é¢ el tones (se hablaba incluso de que es de 19 fe hubeia presenciado cl p oral de las elecciones generales de 1993, Seria la dere tha la que. optando por un galpe de Estado, las impedirta estado viciadss % Wipwonive, @ 1L0 x HASTA DONDE LEGO LA UTILIZACION DE Los RESQUICIOS LEGALES Lo que se reclamaba de los resquicios legales era proporcionar los medios para incoducir ciertos avances Iniciales, ue al cabo de poco tiempo serian consolidedos por una legisliidn apropiads. Obviamente, ni el Presi- dente Allende ni sus coluboradores pensaron jams en los esquicios legules como forma juridica definitiva y completa; solamente estaban destinados 8 suplir la ave sencia temporal de esta for, Si esto era asf cuando recién empez6 la aplicacicn de los resquicios legates con tanto éxite y apoyo juriico, ‘con mayor razGn debia serlo cuando dos de Ins principales ‘organizaciones junidicas del pats: los eribunales de justicia y [a Contraloria, iniciaron ya en el afo 1972, un ataque Frontal e inmisericorde en contra de ellos, con Ia mira de Impedir el avance demacrdico de las ideas de izquierda. ‘Los magistrados del Poder Judicial y el Contralor General de la Repiblica, arastrados por su posicidn po- litica conservadora, abandonaron el papel neutal que Sus funciones les imponian y se valieson de éstas como de ‘amas destinadas al deseréaito de la funcidn gubernativa. NNo les imports contradecir los principios que ellos mis: ‘mos sustentaron antes en materia juridic, bajo regimenes politicos que satsfucfan sus tendencias ideoldgicas reac- ionarias; to nico que procuraban era colaborar en la @ tarea de oposicién politica que tena por iim fin exhibir oder Ejecutivo como vn tasgresor de lat ley, aunque 1 reero semido de ésta" Habian Gejado de ser jueces o alts Funcionarios encargados de Serr al pals y se hablan transformado en servles ep tonos de los politicos que resistian a las transformaciones, jes Toon a interpreter la ley, no como corressondis i la hermenéutica establecida, sino como me para ello debieran to hacerlo se jor conviniera a los partidos de oposicién 1 hubo otros altos organismos juric insospechables en lo relativo a su eficiencia téenics y a imparcialidad polt fantes decisiones gubemativas que imp: a de sus juicios, que confirm Tal fue el caso del Consejo de Defensa del Estadoyel cual cemitié concienzudos informes juridices que probaban la fbsoluta legalidad de medidas como la expropiacién de indusirias para constituir el Srea de pro como ta compra de ac ‘consumar la estatizacin bancaria. Tamb Tribunal Constitucional, suprema juris ada constitucionalmente de resolver Tos confliows que entce el Presidente de la Repablica y Ese alto Tribunal —integrado per cinco Tos cuales dos eran designadas por l Corte ts Re Suprema y los festantes por el Presid con acuerdo del Senado, lo que denci conocis de proporcidn abrumadora de sidente y no la mayor habia cumplido debi Tosios sus fllos, salvo uno, fueror ‘opositora del Congreso qu aplecables. jctados por unanini- 96 los Mi nistos de la Corte Supe Los aboyados sabemos muy disputa no basta con tenes Gecidit. No faltabin, respecio de los resqu ics; mis bien sobraban, pero Ia erca actitud de tibu: liicas iretrenahles, ite a transformar cada caso 4 Bplicacién de ellos en una discusign interminable y avanzada, Foe tanto la Corte Suprema ci ins terpeeraciones juridicns que ellos mismos habian forms Jado con fecha anterior a I n de Ios resquicios con el fin preciso de presentalos como desbordes ilegates del Ejecutivo “Todo esto conducia a fa aplicacién del mayo riimero posible de trbas para el empleo de ests normas juridicas. Y como los sistemas juridicos no han sido previstos para tensiones tan exicemas. en mis de una aportunida a punts 20 To ba en pugna topaban con obsticuls, esp is cuales no so podia penetra. Los conflictos Cone Suprema, los la amplia y muy te aque surgieroa en | Tants pasidn y vehemencia eran empleados ei elas buscar fa onacido por Ia ‘mejor interpretacin y aplicacin de las leyes, sino con el fin bastante mis menguado de hacer creer a Ia cpinién publica que el Presidente de la Repdblica atropellaba la Constiucién y hollaba el régimen jurdico, La firalidad indicads se transparentaba nitidamente en inaumerables piezas juridicas, fueran ellas sentencias, infornes 0 resoluciones provenientes de los tibunales @ de la Con- tealoria. Todo se dirigia consciemtemente a provecar el despresiigio del Presidente de la Repiblica, atibuyéndole pretendidas violaciones del marco legal, a sabiendas de {ue Ix violuciéa no habia existido, De To que se varaba cra de ir preparando un ambiente piblico que permitiera mis adelante lanzar en conera del Presidente Allence acu saciones politcas graves que condujeran a su depesicién como gobercante. La oposicién no Se andaba con ehicas; con apoyo rortexmericino avanzaba en su plan, dispuesta ‘crear apariencias que permitieran llegar al derrocamient fe Allende por In via de imputarle el quebrantamiento total del régimen de derecho. Es lo que se denomind “el _golpe blanco” ‘Como apéndice Uf de esta obra, aparece al final de estas piginas mi artculo ttulado “El dificil camino de la Tegalidad”, publicado en marzo de 1972 en la Revssa de la Universidad Técnica del Estado, N? 7, en el que pro- porcioné mis detalles acerca de esta inusual lucha, ‘AL concluit 1971 me di cuenta de los extremos @ ‘que podta conduc tan ampli y frontal antagonism en- tue las dos grandes corrientes de opinién en que se ha- bia dividido tan hondamente la opinién publica chilena. Resolvi exponetle al Presidente Allende mi opinién acerca de que habia llegndo a tomnarse inviable el esfueren para adelantar con éxito en el cumplimiento del programa del gobierno. apelundo & la utlizacién de los resquicis le ‘gules. No era posible mantener una via que cada vez des pertaba —ain cuando con muy malas razones— mayor resistencia de pare de un sector muy intluyente del pais Y que empezaba a significar para el gobierno un costo politico bastante alto, puesto. que, debido a una buena organizscién y a muy superiores medios de comunicaciéa de masas, el hombre comin no afiiado a la izquierta ‘empezaba a dar crédito a la propaganda de Ia derecha, ‘Me parecié que era necesurio abandonar las dis ccusiones de eardcterjurico y que habla de buscarse una Solucign que éts no proporcionabun, acudiendo a medi das de indole pitica. No me era « ‘que seria In lucha, Pero, por otra pa claramente que su propio asesor jus de mano la discusign legal. Y sami dirigentes de los partidos de inguierda. La ocasion piada beoté de mi arciculo “El ditieit camino de la Teg lidad”, al que acabo de hacer mencin. Ladiffeutad estaba fen abordar la materia de manera publica, sin que ese planteamiento se convietiera en una nueva ama para li ‘oposicién, Me parecié encontrar el justo téemino en dos frases de dicho arvfevlo en las que habia afirmado: “He- ‘mos mosirado hasta agus, en un enadeo objetivo y general is eseasas posibilidades que ¢l sistema juridico nacio- nal ofrece al plan de gol : no." y “el camino de tas rransformaciones revolucionarias directs queda impedido fen una gran medida y past a hacerse percepsDble cl peso opresiva de esa legalidad hurguesa, destinada a amparar Ya sostener su sistema social. A lo unterior debe agregarse {que eada vee va quedando mis cubiert, por su ualizacién rdwima, aquel campo que pecmiten 125 actuales dispo- siciones legales aprovechables como instrumentos. de transformacién, fuera de que —simultdneamente— 10 es- reaciones judiciles © de 1a Conwalori. La utlizacién méxima a que aludia esta dlkima frase era la del aprovechamiento jurdico y no la aplicacién més 0 ‘menos profusa de los resqu rs de ext fue escasa. En suma, estibames tocando fondo en el sprove: chamiento juriico de los resquicios legales, por lo q bia variarse la ruta. Claro esti que al pensarse en un fvevo rumbo, ahora sin carieterjuriico, mi consjo ya no era vilido, Ahora le wocaba a los politicos, Dicho anieulo se ditundié mucho; icios legales en caS0s conece- social chilena, I que, como dije, sin del dr me preocupé de que legara a manos de los dirgentes politicos de Pienso que ie, no obstane los eufemismas gidos por el ambiente de gran tensidn politica existent, pedria hat el sentido de esas frases, En el ba de que “El dificil camino de Ia legatidad” se habia ransformodo, ya a fines de 1971 fen un simple calle sin sada El recurso a ales pudo haber eiado isponible durante los pr es del nuevo gosieen. ado por la derroia pola y por el caso del plan montado por la CIA. para impedir el cese al pode 2 debiliade la de la posibilidad de utlizara aquellas vies, fo A fines de 1971 ta y habla avanzado mucho camino ea su alianza zon la Democracia Cristiana. Desde esta fe wversada de [a el Presidente Allende hal jantad de lucha xy con el tin de apoyar a los enemigos Je Allende, por parte de fos tibu 2, abandons hasta las aparencias 2 aplicaciGn imparcial de Ia ley. politicos det gob nales y de la Contalo ae Perdido ya todo pudor por parte de esos organis- mos encargados de aplicar la ley, la posiid del Gobier- ro de i2nuierda se debiliténotablemente, Porque si bien log marcos legals significan siempre un limite para las posibilidades de accién cit cambios profundos en una sociedad, al En toda cepios que impiden at gobierno y que sanci gobierno quedd privado echo de la proteccin ju a darte. De los cientos que ellos estaban oblig de atentados terrorists y de todo orden que perpet6 lz con resultados de bunales plegados a la subversiGn. El 3. iemposibilitago para a vada de la proveccisn qu 3 todo gobierno, Ea adelante, x fue quisier pod ansalva cont sus person tan inaudica ve En suma, al cefirse esrictamente al lo hizo— el Presidente Allende se sometié a todas las ella impone a los goberaantes, pero no tuo, en cambio, la retribucidn de verse defendido por al 2 oposicién sup apo juridieo imperante ador Allende al régimen de “Muy pocos conacen un episodio ba la adhesida de Sal hot Ante tanta maniobra obsiuctiva ccasiona Ep0°a que 2 por a0 laaccidn de los sibunales y del Contraor, el gobiemo, en lugar de denunciar al pais este planiticado sobrepasa-” ‘miento por aquéllos de sus atribuciones, como actos franeamente atenatorios en contra de la legilidad y como actusciones de manifiesto sentido subversive y, por ende, elictuosos, dio un nuevo paso que demuestra su empero or conservar Ja institucionalidad establecida, hasta el limite de sus posibilidades. A fines de 1972 el Ejezutivo solicits al Consejo de Defensa del Estado una férmul Juridica que le permisiera proseguir normalmente Is tarea ‘ubernaiiva. En informe N? 647, de 6 de diciemlre de 1972, enitide por dicho-consejo con la aprobacisn de la vunanimidad de sus intevranes, se indica que son escasf- simas lay formas que existen para resolver el problema, atendida Ia actirud de los wibunales y del Contralos. pues Ta tinieas viables habrian de requerir el consentimiento de las directivas empresarales, ya enteramente obstinadas en 3 propssito de hacer imposible al gobierno legitimo el ejercicio de sus faculades. No hay, por consiguiente, Fémmulas peactcables Esta consults juidica del gobierno de Allende es tuna demostracién det grado hasta el cust habian Uegado los «apiezos seudo juridicos opuestes por el Poder Ju- dicialy ef Contralor y de los sarificios que ese gobierno estuvo dispuesto a hacer para salvar a la democzaca chi- Jena, Todo ello sin coatar con que prueba la escruzulosa, voluntad gubernativa de ajustarse a las reglas juidicas pertinentes hasta el extremo posible. * La labor desarrollada por el gobierno de Allende para una transformacién de las estruccuras econemicas chilenas, constiuyé un esfuerzo gigantesco, st se le juzga por los resultados alcanzados y por los escasfsimos instru ‘meats de que disponis: Fue, precisamente, In sincendad. de este esfuerz0 lo que’ levants la decisién del gobierno 102 SSS ‘orteamericano y de Jos grupas pallticos y eeondmicos afectados de sobrepasar cualquier limite en la oposicién a aguél gobierno: Ea el hecho el gobierno popular avanas en el cumplimieato de su programs evendmico mucho mds alld de lo que habe podido imaginarse, considerando Ja falta de mayoria purlamentaria de apoyo. los estrechos lentes que conced et orden juridico burgués y Ia notoris escasez de cuadros éenicos y administrcivos apropiacos. En cambio, la izquierés fraeasé en su plan de ‘movilizar al pucbio hacia la conguista del poder, movi- Hizacién que debio gestase conjuntamente con aquella tarea y que, de haberse Hlevido a eso, habria propo cioaado el aparato de apoyo contra la furiosa reaccion de la burguesia. Una pacticipacidn re soste rida por ef pueblo, habria permisido ufrontar y anular ccomosiva actividad opositora planiticads, impulsa ‘costeada por fos EE.UU. El gobierno de Salvador Allende se puso a s{ mis mo ust Hite cefidsimo evando asuini6 el compromise inresticio de sujetarse exclusivumente a fos moldes ins- titucionales y-a Ia vias legales para slcanzar el logro de propésitos que eran de indole revolucionaria. Indudabie mente tiene este tltimo carictr obtener “un traspaso de! poder politico y econémico de los antigvos srupos dom nantes a los trabajndores, campesinos y seciores progre- sistas de las capas medias". "poner en préetieg un auevo piodelo de Estado, de economia y de sociedad”. “re templazar el modo de produccién copitalista mediante un cambio cualitativa de las reluciones de propiedad y uns redefinicin de las relaciones de produccién” y constuir “una nueva economia” orieatada hacia el socialismo. Debe agregarse que no cs suficiente, tampoco. isponer de preceptos legales que admivan, aunque lira tadimente, efectuar algunos cambios en las estructuras QATIWTITIIITI AAA ee eanee 03 econgmico-sociales, si los organisms juridicos encarga os de aplicarlos, especialmente los ibunales de justi fe hallan en poder de la resceida. Porque cuando éstos n que las tensiones sociales se extreman, defornarin 3 ¥ 10s aplicarin torci recto sentido de esos prece ddamente, con el fin de Hvar la declaracién del derecho ‘un punto mucho mis retmsado vigente, Un simple ralabarismo juriico pexmitirs a 1 donde la ley eseribe bianco, y con ello immpedix hecho que ésta pueda ser ui inad sote para avanzar hacia astancials del regimen no basta tener porjue deta serd nega, por las fuerzas popu! aprovechar el sistema leyal leap [a razsie jun La de es, astutos neserupulosas. Jamis sorin vencidos por fuerms de squierda que caigan en sus tampa 0 que ac \ees de ssanipular fat ios medios y los homaces upropiados, Zn virtd de una acvida concertada de les si anales y de la Coniralora, la exigencia de legaidad a la que fue sometido el gobiemo de Allende fue ent Grgonos pulicos fabian imp Ea tales con wa qu fe fa, La le abusiva de insalvabl lidad, ast disorsionada por la incerp anos que en Ia lucha politica se sumzban & 5S del gobiemo, se converia en un obs:éculo para el cumplimiento siquiera parcial del pro- sgrama de los partidos de izquierda co Impelsando los hechos en esta form, la oposicidn derechista-demderata crisiana se proponia hacer impos bie el gobierno del Presidente Allende, privero de toda salv Ly arrastraro hacia ace CCertamente que la derecha tuvo el propésito de paralizar nel cl gobierno de Allend (lo habia hecho y3 en 1891 mo de Balmaceda), para obtener que ste Lio que se ha expuesto contradice la tesis de po- 105 ¥ juristas que sostionen que la demooracia es una bier a cualquier cambio y que los regfmenes juri- Gicos liberales pemiten una evolucién de su contenido era -atnbios solamente pueden prosperar par es0s ca jos no resullan excesivamen ases dasninantes tereses mis esenciales. A tl punto podria iaverise la proposicid pues puede p ells, Jamis In periticin si mila 130, los mists politico y jurisas que alaban esas ventajas de las que conceden pacificameni seni los primeros en elabocar EL caPituto xt BALANCE FINAL DE LOS RESQUICIOS LEGALES Una breve sintesis de lo expuesto en las piginas recedeates serviri para poner una Ultima precision en el L. Los resquicios legiles fueron preceptos poco cconocidos, pero vigentes ¥ vilidos. No obstante, ellos fueron presentados con bastante éxito por los opositores al gobierno de Allende vomo precepios inexistenes, de- rogados 0 vicios0s, a los cuales ao era lito acudic. 2, Pese a los inauditos estuerzos de dicha oposi- cid para desprestigiarlos, nunca hubo una impugnacidn jrigica seria y fundada que pudiera esgrimirse en contra e ellos. Mieatras mis se les anaiz6 y examin6 por los ims altos cuerpos jaridicos del pais, mis de manifesto queds que eran textos disponibles y legitimameate apro- vectables para ls pasos iniciales del gobierno de Allende, 3. Cusnto funcionario u organismo piblico se ha ‘ccupado de ellos, ha debido admitir —sin apelacién po- sible— que las norms que Jos componen constituyeron reglis legales obligatorias det sistema juridico chileno. 4, Dichos resquicios fueron impugnados ance todo por razones de antagonismo politico’ y, posiblemente, ‘ambien por reaccién de amor propio de ios opositores = Allende, antes que por razones juridicas; pues tal oposi- ida a Allende organiz6 ef principal ataque en contra de éste en la impuracisn de que estaba quebrantand> grave mente el ordenaraiento jurdico nacional y el Exado de Gerecho, como manera de logra el derrocamiento final de Allende por vias extralegales, Este propésito fraas6 to si se le mira desde un punto de vista -uridico. 5, Cuando el Presidente Allende empezi a api carlos, ye en noviembre de 1970, ellos constieweron u soxpresa para los as ridicos de la derecha, p Tos conoeian. ‘6, El Partido Deméerata Cristiano adogté una 2c titudinicial por lo menos ambig dels cidn de los resquicios legales: primero los igno parecid aceptarlos y f 2 procuré eliminaios m iante un proyecto de reforna consticucional muy des aforunado, que condujo 2 una nororia acentuacin de la ura de las nal de la demos iscordia politica y qu los resquicios Le para desarollar el rea social ales propo 19 inicial apropia Boner en marcha las primera dealt freno desu progam. Deora mado Mbit $8p et. en ls que Is opsicigaexperaba Sop Por elo fron magniiesdosy wlleads profesine flees, do es acerca de que los or precepios legales vigentes y a época, ‘conformados dlidos, en el plano po: 108 litico no, se obcuvo igual reconocimiento. Es ésta, pro- bablemente, la azén por Ja cual muchos asocian a esos esquivios, ain hoy, con aplicaciones fraudulentas, fbusivas 0 distorsionadss de lz ley, asumiendo de este modo una apreciacida eit ivocada del pro- biema, 10, Anatizados juridicamente los resquicios Je verdadero carierer: medid fiseutibles por lo que Se ref ede las norms juridicas que las rpiads para ser uilizadas olvidadss, cconformaron y fen la forma en que lo hizo el Presidente Allende. uxtiLoco EL GENERAL PINOCHET RECONOCE Los RESQUICIOS LEGALES He concluido una explicacién rizonada de lo que fueron los llamados resquicios legales y he mostra el ‘enorme esfuerz0 aplicado por los adversarios politicos del Presidente Allende pura presentarlos como expresién senuina dela iregularidad jueidiea y del torcido eamino ue habria buscado Salvador Allende para realizar sus planes de gobierno, Comprendo, por ello, el asombro que tend que

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