El documento discute la relación entre la Iglesia y la Gran Tribulación. Presenta siete razones bíblicas por las cuales cree que la Iglesia no pasará por la tribulación: 1) No hay mención específica de la Iglesia en conexión con la tribulación, 2) Apocalipsis trata principalmente de la tribulación después de la Iglesia, 3) La promesa a Tiatira implica el rapto antes de la tribulación, 4) La promesa a Filadelfia implica que la Iglesia será guardada de la tribulación
El documento discute la relación entre la Iglesia y la Gran Tribulación. Presenta siete razones bíblicas por las cuales cree que la Iglesia no pasará por la tribulación: 1) No hay mención específica de la Iglesia en conexión con la tribulación, 2) Apocalipsis trata principalmente de la tribulación después de la Iglesia, 3) La promesa a Tiatira implica el rapto antes de la tribulación, 4) La promesa a Filadelfia implica que la Iglesia será guardada de la tribulación
El documento discute la relación entre la Iglesia y la Gran Tribulación. Presenta siete razones bíblicas por las cuales cree que la Iglesia no pasará por la tribulación: 1) No hay mención específica de la Iglesia en conexión con la tribulación, 2) Apocalipsis trata principalmente de la tribulación después de la Iglesia, 3) La promesa a Tiatira implica el rapto antes de la tribulación, 4) La promesa a Filadelfia implica que la Iglesia será guardada de la tribulación
El Destino de la Iglesia. La Iglesia en relacin con la tribulacin.
El propsito de la redencin de Dios para su Iglesia y para el mundo se est
moviendo hacia una meta definida y predestinada. Las Escrituras revelan que aquellos que han muerto con una real salvacin por la fe en el Seor Jesucristo, sern levantados de entre los muertos, y juntamente con los creyentes que estn viviendo al fin de la dispensacin, sern levantados arriba a encontrar al Seor en el aire, cuando suene la trompeta de Dios (1Tes.4:13,17; 1Cor.15:51,57). El Seor Jess mismo en su conversacin con Marta al tiempo de la muerte de Lzaro, hace clara la distincin, que no es siempre bien comprendida en estos versos (Jn.11:25,26). Para aquellos que han muerto en El, El es la resurreccin, el poder que les levantar del reino de la muerte; para aquellos que vivan hasta su venida, l es la vida, la energa suficiente para cambiar en un abrir y cerrar de ojos sus cuerpos limitados a unos glorificados.
En el A.T. hay dos notables incidentes de hombres trasladados de esta tierra
inmediatamente al cielo, Enoc antes del diluvio (Gn.5:24; Heb.11:5) y Elas (2Rey.2:11). En Lc.9:28-31 est el registro de un ensayo representativo en miniatura de la gloria de Cristo cuando l ha de venir y dar las clases que han de participar en esa gloria. En el monte de la Transfiguracin, juntamente con Cristo, cuya deidad esencial vislumbr a travs de su humanidad en aquella ocasin, fueron vistos Moiss y Elas. Moiss era representante de aquellos que haban muerto y Elas de aquellos que no probaron la muerte. Ambos siendo partcipes del mismo destino. El tiempo del rapto es un asunto de ltima hora para los creyentes. Muchos ensean que la Iglesia ha de ser levantada antes de la tribulacin, otros que los creyentes pasarn por la tribulacin. Algunas de las malas interpretaciones concernientes al retorno del Seor y eventos relacionados esclarecidas si referimos el hecho de que estrictamente hablando, el rapto no es la Segunda Venida, la Segunda Venida es la visible, local y corporal aparicin de Cristo en las nubes, cuando El regrese a esta tierra y asiente su pie en el monte de los Olivos, del cual El ascendi (Hech.1:11, 12;Mat.24:30; Zac.14:4). Esta es su manifestacin en poder y grande gloria a Israel y las naciones de la tierra. El rapto, as llamado, es el llamado por Cristo de los creyentes vivos y muertos a su presencia en el cielo (1Tes.4:13-18).
Entre el rapto y la revelacin de Cristo desde el cielo hay un intervalo de 7 aos,
durante los cuales la Iglesia es juzgada para recompensa, y las bodas del Cordero tienen lugar en el cielo, mientras, sobre la tierra reina el Anticristo y la gran tribulacin est en curso. (Vea Zacaras 14:5; Col.3:4; 1Tes.3:13; Jud.14; Mat.24:27-30 para enseanza en cuanto a la revelacin de Cristo desde el cielo). Si el Seor ha de venir con sus santos como relata Apoc.19:8,14; Primero, ha tenido que juntarlos a todos con El, y como nosotros vamos a reinar y gobernar con El en la tierra, nuestro lugar durante la era milenial debe habernos sido asignado antes de la revelacin. El rapto antes de la tribulacin es ciertamente lgico y razonable. (El tema de la tribulacin ser discutido en el prximo captulo).
Vamos a considerar algunas razones en las Escrituras por las cuales creemos que la Iglesia no pasar por la gran tribulacin.
PRIMERO: buscamos en vano a travs de la Palabra por una mencin
especfica de la Iglesia en conexin con la tribulacin. Israel est all identificada, las naciones tambin estn, y as estn tambin los individuos impos, pero no la Iglesia como el cuerpo de verdaderos creyentes.
SEGUNDO: el libro de Apocalipsis trata principalmente de los siete aos de
esta dispensacin, la septuagsima semana de Daniel (Dan.9:27). Despus de haber registrado en el captulo primero su visin del Cristo crucificado y en los captulos 2 y 3 de las siete iglesias, las cuales representan nuestra unidad sptima, la entera dispensacin de la Iglesia, desde Pentecosts hasta el rapto, Juan empieza a relatar en el captulo lo que ser despus de esto literalmente, despus de estas cosas; esto es, despus del perodo de la Iglesia. Los captulos 6-19 de Apocalipsis presentan el perodo de la tribulacin. El punto importante en esto es, que no se hace mencin de la iglesia despus del captulo 4, ni directamente ni en representacin. En el captulo 4, vemos los ancianos sentados en tronos alrededor del trono de Dios, que son representantes de la Iglesia levantada, recompensada y reinando.
TERCERO: la promesa a Tiatira (Apoc.2.28). Y dar la estrella de la
maana. En Apocalipsis 22:16, Cristo habla de S mismo como la estrella resplandeciente de la maana. Esta promesa para el vencedor parece referirse al aspecto de la recompensa de Cristo consistente en traernos a la presencia del Seor antes del establecimiento del reino. Si alguien desea ver la estrella de la maana, debe levantarse temprano, porque sta aparece en la hora ms oscura de la noche antes de empezar a amanecer. La salida del Sol de Justicia (Mal.4:1-2), es una promesa distinta a Israel de la Venida de Cristo en todo el resplandor de su gloria resplandeciente sobre ellos pasadas las tribulaciones de Jacob. Cuando amanezca el da milenial, la estrella de la maana habr aparecido y los santos habrn sido congregados secretamente en la presencia del Seor, para luego venir con El a participar en la administracin del reino, el cual ser introducido por la salida del Sol de Justicia.
CUARTO: la promesa a Filadelfia, la Iglesia del amor fraternal, la verdadera
Iglesia de los ltimos das porque has guardado la palabra de mi paciencia, yo tambin te guardar de la hora de la tentacin que ha de venir en todo el mundo, para probar a los que moran en la tierra (Apoc.3:10). No sabemos a que ms se refiere la hora de la tentacin(probando, afligiendo), de alcance universal, sino a la tribulacin que con tanta frecuencia es mostrada en la Escritura. El lenguaje de la promesa aqu en el griego es claro y especfico. Es literalmente Yo le guardar fuera y no Yo les guardar en, o Yo les guardar a travs. Nosotros sabemos la importancia de un anuncio mantngase fuera. Este es el significado.
QUINTO: el tiempo de la tribulacin es un tiempo de juicio, un tiempo
de ira, sobre el mundo impo y la Iglesia apstata, y de un Israel descarriado. El ms horrible de estos juicios es las copas(Apoc.16). Note el lenguaje usado en Apoc.15:1; 16:1,19; plagas consumada la ira de Dios copas de ira de Dios vino del furor de su ira. La seguridad de Dios para con los suyos es que ellos no vendrn a condenacin (juicio) (Jn.5:24) que Dios no nos ha elegido para ira (1Tes.5:9); que nosotros seremos salvados de la ira por El (Cristo) (Romanos 5:9); que el creyente es librado de la ira que vendr (1Tes 1:10).
SEXTO: la tribulacin, mientras que afecta toda la tierra, es especialmente
mencionada en relacin con Israel (Jer 30:4-9; Dan.12:1; Mat.24:15,21).
SPTIMO: la promesa a la Iglesia concerniente a su recogida por el Seor, es
sin seal y sin tiempo. Varias seales y medidas cronolgicas son distintivamente aplicables a Israel semanas; tiempo, tiempos y la mitad de un tiempo; 42 meses; 1260 das; 2300 das, etc; pero los tales no son registrados en conexin con la Iglesia y su destino. Una de las razones por las cuales nosotros creemos que el libro de Apocalipsis es en su mayora concerniente al perodo de la tribulacin son las seales judas, simbolismos y medidas cronolgicas que all aparecen. Mucho, mucho ms puede ser dicho en relacin a este aspecto de verdad dispensacional; Podemos decir en conclusin a este tema particular que la enseanza tpica del A.T. da nfasis al punto de vista de que la Iglesia no pasar por la tribulacin.
Nuestro Seor, en Lc.17:26-30 declara la analoga entre los das de No en el
tiempo del diluvio y los das de Lot cuando Dios destruy a Sodoma y Gomorra. Enoc ha sido siempre mirado como un tipo de los santos elevados. Cundo fue el traslado en relacin al diluvio? antes, durante despus?. Seguramente que antes. El juicio de Dios sobre las ciudades del valle no cay hasta que el justo Lot haba salido. Si, Dios pens bastante antes de comprometer a Lot. El seguramente favorecer a sus verdaderos santos de los ltimos das cuando visite con retribucin a los impos al terminar esta dispensacin. Ms enseanza es vista en A.T. en Jos, un reconocido tipo de Cristo, el cual se cas con Asenath (Gn.41:45), una esposa gentil, durante el tiempo de rechazo de sus hermanos y antes de la gran hambre. Cristo se casa con su novia, en su mayora gentil, durante el tiempo de su rechazo por Israel, sus hermanos, y antes de la tribulacin.