Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Javier
Conde), Argentina, ed. Struhart & Ca, 1990.
II
En la portada inglesa del Leviatn se hace alusin al Libro de Job y no aparece un monstruo
marino sino un hombre gigantesco, majestuoso, compuesto de innumerables hombres pe-
queos, que tiene una espada en el brazo (temporal) derecho y un bculo episcopal en el
brazo (espiritual) el izquierdo. Ms que en sentido mtico, podra pensarse que el empleo de
la imagen del Leviatn por parte de Hobbes se ha de ver como un rasgo semiirnico litera-
rio, de buen humor ingls.
III
IV
La distincin entre organismo y mecanismo no se impone sino hasta fines del s. XVIII. En
Hobbes, mecanismo, organicismo y obra de arte, todo est implcito en la mquina como
producto de la suprema energa creadora del hombre. El Estado es visto como un instru-
mento tcnico neutral. Democracia liberal occidental y marxismo bolchevique coinciden en
considerar hoy al Estado como un aparato del que pueden servirse diversas formas polticas
debido a su neutralidad tcnica; neutralidad que es la racionalizacin tcnica en la esfera
poltico-administrativa.
Llegamos as al plano del positivismo jurdico, porque si bien el Estado legal positivista no
se forma hasta el s. XIX, Hobbes fue su precursor en el sentido que concibe al Estado como
un sistema de legalidad fundado en una asamblea constituyente. No se admite el derecho a
la resistencia porque sera absurdo un derecho a destruir el Estado. Tampoco existe la gue-
rra justa entre Estados. La guerra entre Estados no es justa ni injusta, sino un problema de
Estado. Tampoco los Estados son justos o injustos porque sera como pretender discriminar
entre mquinas justas e injustas.
El poder estatal tiene derecho a exigir una confesin expresa frente al cristianismo pero
deja libre de correccin la creencia interna, distinguindose as entre fuero interno y ex-
terno. Esta distincin se exacerbar en Spinoza. En Hobbes la libertad individual de con-
ciencias es slo una ltima reserva oculta en el trasfondo. El Estado absoluto puede exigirlo
todo pero slo externamente. Ahora la situacin se ha trastocado siendo la libertad de pen-
samiento el principio configurador, y el poder estatal una simple reserva. Se llega as a la
superioridad de lo interno sobre lo externo y, por consiguiente, de lo privado sobre lo
pblico.
VI