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Identidad evangelica John Stott stot John ent evans un Hamad iad a inteeiad Ya ideldad. "ave = Bens Ales: Crters Unie 20 Mop ssc ISBN gp a506H5 701 1. Relig ang. hula co sta Tilo origna: angola Trath A Personal la for Uy. Integy Fifa £1999 John Sot © on Esones Caters nid, Boens Aires Quesnel depssto tqccstablecels Ley 1723, Nose permite repeduccin patel 0 ta {Taimasenamiens, lagu a rans ols trasfomacion de ‘stl, ep cule forma o por calqoet medi, ea cetonin ‘eclc, motiante etcapas, diillain tes tds. sn el poo prvi ect de ete Se afacin est pea por as eyes y 35.46 Lasts ics coresponden a taducion Nueva Version Internacional Except enlocavoren qu se induc espectcamene “Tada: Diana Govan Fa Corres de eat Adana Reso Disc Pato Otel Digramacon:Ayelen Hort ines Cetera Ud casera dea Commi Ite taco! de snes Evang (cr) en per de alas, Theme esun movimiento compuesto pa grupos estan que tan cunpily apa tos pars lamblen en a universe ye ‘und Masami en Certer Argentina, Berard de gaye 4 (072448) Cada ‘none de Buenos Ares, Argentina covesaaereuagetina cma Falcone Pn, A Araldo Mires 3, ess Mara, Lima, Pr “Tekon ax 43277 panecenipong, pomaginfnepcla.et pe ioral Limpar, Cll Almirante Grau 64 Sen Poo, aaa bg, 13 Pa, Boll. coordanpentnetbo blicaciones Andaml, As For, Stato s of66 Barcelona [xp nopublnoneandamiacom Impresen Colom, Pits Colombia Contenido Agradecimientos 1 Prefacio 7 Introduccién: Constantes evangélicas 0 ‘Tres aclaraciones Pundamentalismo y evangelismo ‘Tribus y dogmas evangélicos El evangeliotrintario Hapax y mallon Lecturas sugeridas 1. Larevelacidn de Dios 7 Revelacién Inspiracion Autoridad “Tres palabras mis Dos aclaraciones Lecturas sugeridas 2. Lacruz de Cristo B Nuestra reconeiliacién con Dios ‘Nuestro discipulado cotidiano ‘Nuestra mision y nuestro mensaje Lectura sugeridas 3. ELministerio del Espiritu Santo 99 Los comienzos cristianos La seguridad cristiana 1a santidad cristina La comunidad cristiana La misién cristiana Laesperanza crstiana Lecturas sugeridas Conclusidn: EI desafio de a fe evangélica wt El llamado la integridad evangélica El llamado a la estabilidad evangélica EL llamado a a verdad evangélica El llamado a la unidad evangélica Ellamado ala perseverancia evangélica Lecturas sugeridas Epilogo: La preeminencia de la humildad 45 Notas si Agradecimientos En primer lugar, le & toy especialmente agradecido a mi asis- tente, John Yates, por haberme sugerido este pequefi libro. El contenido del mismo deberia haber formado parte de una serie de ensayos cuyo titulo provisorio era Reflexiones. Como me estaba resultando dificil darle forma, ‘}Y" (como lo lamamos, hhabitualmente) me propuso escribir un pequefio libro sobre nuestra identidad evangélica como una publicacién aparte ‘Ademés, me hizo una serie de sugerencias que representaban l pensamiento de la generacién joven, alas cuales he prestado especial atencién, En segundo lugar, agradezco a Colin Duriez (ive de Gran Bretaha} y Andy Le Peau (ivp de Fstados Unidos de América) por sus consejos y el dnimo que me brindaron en todo ‘momento, Dedico un agradecimiento especial a mis amigos, Oliver Barclay; Timothy Dudley-Smith y David Wellspor ler el, primer borrador y por los numerosos cambios recomendados, -nuchos de los cuales he includ. Frances Whitehead se abocé a Ia noble tarea de convertir ‘mis garabatos en un escrito sin errores, Suelo decir que, en su ‘aso particular, la de correo electrénico significa: jenergia, cficiencia y entusiasmo! John Stott Prefacio ‘A nadie le gusta que lo etiqueten. Por lo general, los rétulos, {que otros nos pegan nos resultan desagradables. Su objetivo es, restringimnos, incluso aprisionarnos, dentro de un estereotipo bastante estrecho. Sin embargo, son dtiles para la identifica ci6n, y siempre alguien nos cuelga alguno si nos negamos a usatlo por cuenta propia, En el mundo cientifico las etiquetas son indispensables. Durante 250 ailosgeneraciones sucesivas de cientficos le hhan estado agradecidas al bidlogo sueco Linneo por haber dlesarrollado el sistema de clasficacién binomial. Sin embargo, la taxonomia teologica es considerablemente ‘mas compleja, aunque podeia intentarse, supongo. Por ejem= plo, gde qué forma me clasificarian? Tal vez, ‘género: cristiano, especie: evangéico, subespecie: anglicanel No obstante, al poco, tiempo la tarea se torna imposible, Clasificar organismos de acuerdo con su estructura demanda un alto grado de precisin, _mientras que rotular seres humanos conforme a sus ereencias, seria una tarea mucho mas flexible y fluids, Los mismos bidlogos se dividen en ‘integristas y ‘separa tistas segtin su tendencia a unir distintas formas ra tuna misma especie o a separarlas en varias, Las a ‘integra’ y ‘separar’ también ocurren dentro de la comunidad cristiana, Sin embargo, ambos procesos se tornan negatives cuando son llevados a extremos. Algunos cristianos acostum bran separarse hasta no constituit més una iglesia, sino una secta, Me recuerdan al predicador que describe Tom Sawyer, cuando dice que ‘reducia el grupo de los predestinados a una ‘compaiiia tan pequeria que no valia la pena salvarlos!* Otros incluyen a todos indiseriminadamente hasta que ya nadie resulta excluido. ‘Si evitamos ambos extremos, podemos reconocer que den- two del cristianisme existe una superposicién legitima entre las ccortientes catdlica, liberal y evangélica. Permitanme presentar ‘a manera de ilustracién dos ejemplos un tanto aipicos.. Michael Ramsey (arzobispo de Canterbury desde 1961 hasta 1974) se denominaba a si mismo un anglicano catélico, Sin embargo, estaba plenamente convencido del evangelio de la justficacién tinicamente por la fe, que constituye una creen- cia evangélica fundamental, como demostraré posteriormente. ‘Aun mas, afirmaba que durante los cincuenta afios trans- curridos entre 1889 y 1939 los ‘anglicanos tipicos' sostuvieron sin lugar a dudas las convieciones cardinales de la Reformat es dcr, que'lasalvacidn no es por obras, es solamente por gracia recibida a través de la fe, que nada puede afadirse a la media cidn de Cristo en la cruz, y que las Sagradas Escrituras son la autoridad suprema en el aspecto doctrinal” Mi segundo ejemplo proviene del libro de John Habgood (arzobispo de Yorkentre 1983 y 1995): Confessions ofa Conserva- tive Liberal [Confesiones de un conservador liberal] Elexpresa ue en su opinién un liberal ‘representa una apertura a la bis- queda de la verdad, la que creo es profundamente necesaria para la buena salud de la religidn. Se trata fundamentalmente dehonestidad’ Al mismo tiempo es honestidad "enraizada en lo ue Dios nos ha dado, tanto en la revelacin como en el mundo creado. De ahi, ‘conservador". Aunque John Habgood muchas veces les ha aplicado a los cristianos evangélics el epiteto algo rrado de biblistas, su bosquejo de la tension existente entre lo dado y lo abierto, la humildad y a honestidad,larevelacin yla tradicidn, ‘el corazén que cree yla mente critica” es algo con lo que, al menos en un principio, todos los evangélicos deberian estar de acuerdo, | Por consiguiente, procuro no olvidar en mi escrito que Jas tres escuelas de pensamiento cristiano (catdlica, liberal y evangélica) no siempre se excluyen mutuamente, y que a lo largo de sus divergencias existen puntos de convergencia. Mas au, nos regocijamos de quela gran mayora de cristianos con cuerden con las airmaciones de los Credos Apostiico y de Nicea, y que la gran mayoria de protestantes reafirmen muchas de las verdades dela Reforma. En otras palabras, no todas as constants evangélicas son distintivos evangéicos. AI mismo tiempo, existe algunas verdades histéricasy biblica que los cxistianosevangélicos siempre han enfatizadoy dels cuales se consideran (con modestia, espero) albaceas para el resto de la Ialesa Por qué razin lanzo al mercado sobresaturade de literatura cristina un pequeho libro como este? Los lectores tienen el derecho de esperar que los autores es conten sus razones para escribir. Se aa solamente de que suo de lo que yo creo que Juvenal denominé insanabilecacoethes sribendi (la incurable comez6n de escribit)? Espero que no. Al menos soy eonsciente de dos motivos En primer lugar, me duele profundamente la tendencia evangéica hacia I fragmentacién, Duranteel timo meio siglo el movimiento evangicobri- Lénico (como en otras partes también) ha crecido en nimero, Vida eclesistica,formacién académica y liderazgo, pero no en

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