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FUNDACIÓN ÉTICA Y ECONOMÍA

LA ETNICIDAD EN LA
CONSTITUCIÓN DE
BOLIVIA
Ensayo Político
WALTER JAVIER ARRÁZOLA MENDIVIL
15/01/2010

Santa Cruz – Bolivia


2

INDICE

Introducción …………………………………………………………………………………………………. 3
1. La Asamblea Constituyente y el proceso de aprobación de la Constitución de Bolivia ……… 4
2. Estructura dogmática e ideológica de la nueva Constitución de Bolivia ……………………….. 12
3. El preámbulo: la ideologización de la Constitución ……………………………………………… 16
4. Que dice la Constitución ……………………………………………………………………………… 19
5. La construcción de un Estado Etnicista …………………………………………………………… 23
Conclusiones ………………………………………………………………………………………………… 34
BIBLIOGRAFÍA GENERAL ………………………………………………………………………………… 35
3

Introducción

Este primer capítulo del trabajo de investigación esta divido en cinco partes: 1) el
proceso de la Constituyente y su aprobación; 2) la estructura dogmática e
ideológica de la nueva Constitución; 3) un análisis del preámbulo o la
ideologización de la Constitución; 4) reseña de la Constitución en sus aspectos
más importantes de la parte dogmática y orgánica; y 5) por último, como
desenlace de todos los temas anteriores terminamos en la construcción de un
Estado Etnicista 1.

Para ello se analizan los discursos y planteamientos de los actores políticos más
importantes, que han promovido la reforma constitucional, comparando la
incorporación de sus discursos políticos en el proyecto de constitución aprobado
en el seno de la Asamblea Constituyente y posteriormente con las modificaciones
en el Congreso de la República.

Proceso constituyente con carencia de legalidad y poca legitimidad de una parte


de la población étnica de Bolivia, pero que tuvo un resultado concreto: la
aprobación de una constitución; la que fue refrendada por un referéndum
constitucional y dejo en el pasado todo vestigio de ilegitimidad o violencia política.

Ese fue el proceso de consolidación y aprobación de la constitución.


Luego nos abocamos a estudiar, una norma constitucional desde la perspectiva
formal y material, válida y legítima, desde el punto de vista de quienes detentan el
poder estatal actual y fueron sus promotores.

Mostrando la construcción discursiva, ideológica y simbólica, que fue aprobada en


un proyecto político que busca “la construcción hegemónica del poder” a través de
la Constitución.

Se ha detallado, los niveles de discriminación que se hacen en nombre de la


etnicidad, dando más derechos a unos ciudadanos que a otros, rompiendo el
principio ético, democrático liberal de igualdad ante la ley.

1
Con fines metodológicos hemos significado en este trabajo a “las naciones y pueblos indígenas-originarios-
campesinos" como grupos étnicos. Cuando hablamos de etnicidad estamos hablando del concepto
constitucional “indígena-originario-campesino”.
4

1. La Asamblea Constituyente y el proceso de aprobación de la


Constitución de Bolivia

Bolivia ha vivido momentos turbulentos en distintas etapas de su historia política y


social, se vuelve a repetir la historia donde los bolivianos hoy más que nunca
necesitaban un pacto social que los ayude a solucionar sus problemas y presiones
internas de distintos sectores y grupos de interés; “una suerte de drama crónico
vinculado a su estabilidad y siempre da la sensación de que está al borde del
abismo” 2, ese temor obligó al poder político a convocar una Asamblea
Constituyente.

La discriminación, la falta de igualdad en las oportunidades, la corrupción pública,


un sistema de partidos políticos cerrado y decadente, el clientelismo político, la
falta de gobernabilidad y paz social, como la falta de transparencia misma del
Estado, fueron los detonantes para que se busquen mecanismos desesperados de
cambio.

Estos hechos psicosociales son los que nos explican porque “los bolivianos en su
mayoría estén de acuerdo a una convocatoria a la Asamblea Constituyente” 3,
pensando en que los problemas estructurales del país se solucionarían y
mejorarían su condición de vida con la convocatoria a ella.
Bolivia se encuentra en una crisis de Estado y de gobernabilidad, ya sea
interpretada desde la dimensión de “inestabilidad de cambio de régimen, de
cambio de gobierno, como consecuencia de un reto violento en la inestabilidad y/o
como un reto pacífico.” 4

En realidad, esa fue la percepción que dieron los distintos discursos de los actores
políticos a la ciudadanía, cada uno desde su perspectiva e interés de alcanzar el
poder político y capitalizar el apoyo de la misma. Se idealizó una reforma a la
Constitución por medio de una Asamblea Constituyente. A pesar de haber sido
reformada la Constitución en 1994 y en el 2004, con aspectos positivos para una
mayor participación e inclusión de la sociedad civil, tanto en el control del poder
público como en la participación del mismo.

2
LIZARABURU, Javier. Carlos Mesa y la Bolivia de Morales Entrevista al ex presidente de Bolivia, Carlos D.
Mesa [en línea]. BBC Mundo, 12 de octubre del 2006 [ref. de 20 junio 2010]. Disponible en Web:
<http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/latin_america/newsid_6045000/6045438.stm>
3
Encuesta de percepción ciudadana sobre la Asamblea Constituyente [en línea]. Organización no
gubernamental OCADEM & PE, 14 al 30 de mayo del 2006 [ref. de 20 junio 2010]. Disponible en Web:
<http://www.ocadem.com/pdf/Encuesta%20de%20Percepcion%20Ciudadana%20sobre%20la%20Asamblea
%20Constituyente.pdf>.
4
ALCANTARA S., Manuel. Gobernabilidad, crisis y cambio. Ed. Fondo de Cultura Económica. Mexico, 1995,
Pág 27.
5

En el 2002 se había concertado una reforma constitucional 5 y estaba introducida


en el Congreso de la Nación para su tratamiento y promulgación.

Para los distintos actores políticos, regionales y de presión del país, los cambios
que tenia la ley de necesidad de reforma a la constitución, no eran lo suficientes
para una “verdadera reforma estructural” que el país necesitaba. Las expectativas
ciudadanas y los proyectos de construcción hegemónica política eran mucho más
grandes que las reformas realizadas.

Teniendo como resultado, luego de distintas presiones sociales al Congreso de la


República, la modificación a la Constitución el 2004 que proporcionaría las puertas
“legales” para la convocatoria a una Asamblea Constituyente 6, “la legitimidad la
tenía el pueblo movilizado”. Fue una “tensión dialéctica entre la reforma […] y la
ruptura […], que caracterizó la transición política […], acabo resolviéndose, sino
desde una lógica jurídica formal, si en el terreno de la práctica y en el de su
contenido material, a favor de la segunda […] una ruptura pactada.” 7

Desde este momento empieza a romperse el orden institucional en Bolivia, con


una “ruptura pactada”, como un mecanismo para buscar paz y equilibrio a corto
plazo ¿Acierto o desacierto? Lo sabremos cuando comprendamos y analicemos a
los distintos actores políticos, sus intereses y estrategias individuales para la toma
del poder y la construcción de sus discursos para conseguir el mismo.

“La política no es sino la lucha por el poder” 8 y eso es lo que se busco en la


convocatoria a la Asamblea Constituyente.

“El poder político, como todo poder, puede ser conocido, observado,
explicado y valorado sólo en lo que concierne a sus manifestaciones y
resultados. Sabemos, o creemos saber, lo que el poder hace, pero no
podemos definir su substancia y su esencia.” 9

5
Entre Gonzalo Sanchez de Lozada y Tuto Quiroga, presidente entrante y saliente de Bolivia. En: MESA,
Carlos D. Presidencia Sitiada. Memorias de mi gobierno. Ed. Plural. La Paz, Bolivia, 2008, Pag. 157.
6
En el 2003 renuncia el presidente de Bolivia Gonzalo Sanchez de Lozada, en plena crisis política e
institucional de Bolivia, y se plantea fuertemente la necesidad de una reforma Constitucional como un
mecanismo de salida a la crisis. Se hace la “reforma pactada” rompiendo el procedimiento constitucional y
rigidez de la reforma a la misma. En ese sentido, se implementa la figura de la Asamblea Constituyente en la
Constitución en su artículo 4 “el pueblo delibera y gobierna por medio de sus representantes y mediante la
Asamblea Constituyente (…)”, en la reforma a la Constitución del 13 de abril del 2004, Ley N° 2650.
7
RUIPÉREZ, Javier. Proceso Constituyente, soberanía y autodeterminación. Ed. Biblioteca Nueva, Madrid,
España, 2003. Pág 18.
8
LOEWENSTEIN, Karl. Teoría de la constitución. Ed. Ariel, Madrid, España, 1965-1986. Pág 23.
9
LOEWENSTEIN, Karl. Teoría de … op., cit., pág. 25
6

Una sociedad en crisis tiene dos vías para solucionar sus problemas, una forma es
por la vía pacífica, con consensos, pactos y dialogo, y la otra por la violencia o la
imposición. Institucionalmente uno habla de la reforma y el otro de la revolución o
la desinstitucionalización.

Todos los actores políticos hacían referencia a estas dos formas, en busca de
construir su proyecto para la toma del poder, incluso mezclándolas a su favor en
métodos y estrategias discursivas: dialogo-violencia, pacto-imposición, reforma-
revolución, asamblea constituyente originaria-derivada, en una especie de
dialéctica discursiva que tenía como objetivo fijar posiciones frente a lo que se
venía o se pretendiera conseguir. La síntesis debería ser el “pacto social”, por
cualquiera de las dos vías, en nuevo proyecto “societal” de Estado expresado en
la Constitución, como lo describen los clásicos.

Es ahí donde, surge la construcción de los discursos políticos para implementar o


llevar a cabo una Asamblea Constituyente en Bolivia.

“Los discursos políticos tienen por tanto la capacidad de producir productos


políticos, acontecimientos políticos, sujetos políticos, acciones políticas:
pero nunca de manera arbitraria, sino sobre el campo de posibilidades
estructurales heredado por el discurso, por las características del propio
campo político y las cualidades de las organización social.
En términos estrictos no hay palabras ni conceptos neutros, su significado
es un determinado volumen de poder social obtenido por el desplazamiento
de otros poderes acumulados en otros signos, y que además sirve
directamente a la perpetuación, ampliación o transformación de poderes” 10,
escribió en el 2001 Álvaro García Linera, uno de los principales ideólogos
del indigenismo en Bolivia 11.

El candidato a la presidencia Juan Evo Morales Ayma, gana las elecciones


presidenciales el 18 de diciembre del 2005, al frente del Movimiento al Socialismo
(MAS), por mayoría absoluta de un 53,7% de votación a nivel nacional 12 y asume
la presidencia el 22 de enero del 2006.
Su discurso en la asunción al poder --y posteriores-- hacen referencia al cambio;
del primer indígena en la presidencia; la descolonización del Estado y el

10
GARCIA, Álvaro; y otros. PLURIVERSO: Teoría política boliviana, en ¿Qué es la Democracia? Ed. Muela del
Diablo, La Paz, Bolivia, 2001. Pág.79.
11
actual vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia; en el pasado, miembro e ideólogo del Ejercito
Guerrillero Tupac Katari - EGTK.
12
Corte Nacional de Bolivia [en línea], [ref. de 20 junio 2010]. Disponible en Web: <http://www.cne.org.bo>
7

desmoronamiento de una estructura colonial racista, opresora y excluyente de los


indígenas y oprimidos; da a conocer las dos Bolivia, una india y otra europea; la
reivindicación de unas culturas oprimidas por los valores occidentales y el
capitalismo 13. En resumen plantea un etnonacionalismo y propone un Estado
Plurinacional

Pero el discurso ¿Necesita la unidad de todos los pueblos indígenas o culturas del
país? ¿Entorno a que cultura o pueblo indígena se debe construir su proyecto
político?

El 6 de marzo del mismo año, aprueba la ley N° 3364, “ley especial de


convocatoria a la Asamblea Constituyente” donde después de varias
negociaciones y presiones de la oposición, se concluye que esta Constituyente es
de carácter derivada, reformadora y de ningún modo originaria, soberana,
fundacional, desde el punto de vista estrictamente doctrinal.

En esta ley también se fija que los artículos a modificarse de la Constitución deben
ser aprobados y tener el consenso de dos terceras partes (2/3) de los miembros
de la Asamblea Constituyente presentes, sea en su aprobación en la estación en
grande o en detalle. La constituyente debería duran no más de un año de
funcionamiento desde su instalación.

El gobierno había apostado en la ley de convocatoria al sistema electoral de


mayorías, que la oposición no tuvo en cuenta, distorsionando la representación de
minorías que el sistema electoral proporcional brinda --y que tradicionalmente en
Bolivia se aplica desde la instauración de la democracia--, con el objetivo de
conseguir los dos tercios de la asamblea y aprobar la nueva reforma sin necesidad
de la oposición.

El 2 de julio del 2006 se celebró las elecciones de los asambleístas, se eligieron


255 integrantes de la Asamblea Constituyente y el 6 de agosto se la instaló en la
ciudad de Sucre, departamento de Chuquisaca.
El partido de Morales el MAS obtuvo una mayoría absoluta de escaño, pero no
alcanzó –ni con sus aliados-- los dos tercios suficientes y necesarios para aprobar
la futura constitución. Necesitaba pactar con otras fuerzas políticas opositoras
para consolidar el proyecto político que estaba llevando a cabo.

Sin embargo la directiva de la Asamblea Constituyente, presidida por la mayoría


simple del MAS con poco margen para conseguir los 2/3, en su reglamento de

13
Estos conceptos discursivos ya fueron expresados por varios escritores, ideólogos y políticos del
indigenismo desde la década del 60, y no tenían mayor trascendencia en el escenario político nacional hasta
el proceso y consolidación de la asunción de Evo Morales al poder, entre el 2001 y 2005.
8

debates se declara como una Asamblea originaria y plenipotenciaria,


contraviniendo lo que decía la ley de convocatoria; además de cambiar el
reglamento interno de debates para que las decisiones se aprueben por mayoría
absoluta, es decir 128 votos, en vez de los dos tercios, o 170 votos, como lo
indicaba la ley de convocatoria aprobada por el Gobierno de Morales. En ese
sentido el primero de septiembre del 2006 varios partidos opositores abandonan
la Asamblea ante la imposición del MAS y la contravención a la ley de
convocatoria.

Es bueno aclarar que todos estos hechos suceden en el país entre medios de
“hechos políticos de violencia” y presión generalizada, tanto de los oficialistas
como de los opositores, unos en busca de consolidar sus espacios ganados y los
otros de impotencia para recuperar los perdidos.

La Asamblea Constituyente funcionó nueve meses sin debatir ni redactar algún


artículo de la nueva Constitución, pues estaba atollada en su reglamento interno
de debate; los constituyentes del MAS y sus aliados debatían entre ellos, en sí se
deberían aprobar por mayoría simple y no por dos tercios de los asambleístas las
modificaciones la Constitución.

Se estaba por vencer el plazo de un año de la Asamblea, sin que esta redacte un
solo artículo de la Constitución. Urge para el gobierno de Morales ampliarla a
través de una ley, puesto que ya se estaba analizando en el plano académico y
corrientes jurídicas, que esta no se podría ampliar ya que había fenecido su
mandato; o que la Asamblea fue elegida por un año no más; o que se debería
convocar a otra asamblea para recomponer las fuerzas políticas.

El gobierno ejerce nuevamente presión y violencia política, moviliza masas, cerca


el congreso, y logra entre otras cosas la aprobación de la ley N° 3728, de
ampliación para la Asamblea Constituyente del 4 de agosto de 2007, donde se
crea un nuevo mecanismo para la aprobación de los artículos que no logren el
consenso para los 2/3 en su aprobación en detalle.

De tal manera, deberán enviar al Congreso los informes de mayoría y minoría, de


aquellos artículos que no tengan consenso, para que estos sean puestos en
consideración a través de un referéndum constitucional y el voto dirima los
mismos; en donde “el Congreso de la República no podrá modificar el texto de los
artículos a ser sometidos” 14, según prescribe la propia ley.

14
Artículo 4 de la Ley N° 3728
9

Una vez realizado el referéndum, el Congreso remitirá los resultados a la


Asamblea para que voten por 2/3 el total de la Constitución y se realice un nuevo
referéndum constitucional, ya no de los artículos sino de toda la Constitución.

Procedimiento bastante engorroso y complicado, que en los hechos no se sabe


con certeza que resultado hubiera tenido el llevarlo a cabalidad.

Las dos posiciones, entre los partidarios de Morales y los opositores, lo que
pretendían era ganar tiempo y espacio, los consensos eran imposibles por las
visiones ideológicas, políticas, económicas y culturales que se contraponían.
Tal era la desconfianza y el miedo de la oposición, por los hechos de violencia y
persecución hacia ellos, que en esta ley se norma en la disposición final segunda,
que:
“el Ministerio de Gobierno tiene la responsabilidad de garantizar la
integridad física de los Constituyentes, así como el libre ingreso al hemiciclo
y las comisiones que integran la Asamblea.
En caso de existir riesgo de agresiones o actos de violencia que pongan en
peligro la integridad física de los Constituyentes, que impidan su libre
acceso al hemiciclo, la presidencia en coordinación con los miembros de la
Directiva, suspenderá la Sesión hasta que existan las condiciones de
seguridad necesarias que garanticen el acceso de quienes se encuentran
impedidos de ingresar a los recintos de la Asamblea Constituyente.”

Finalmente, el entre el 23 y 24 de noviembre del 2007, luego de más de tres


meses de paralización de la Asamblea, fue aprobada la Constitución en su
estación en grande por el Movimiento al Socialismo (MAS) y otros partidos y
grupos políticos afines, sin la presencia física de la oposición, en una liceo militar
de la ciudad de Sucre --al haber sido esta trasladada de su sede original, el Teatro
Gran Mariscal, exprofesamente por la directiva de la Asamblea-- custodiada por un
fuerte guardia policial y militar, en medio de disturbios que dejaron tres muertos y
300 heridos.

“Se aprueban los informes de las 21 comisiones del cónclave, tras una
rápida lectura del índice y los capítulos de la Constitución, sin detallarse el
texto, la mayoría oficialista vota a mano alzada”. 15 La Constitución se
aprobó en grande “con el voto favorable de 136 de 138 constituyentes
presentes. Faltaban 117 legisladores de la oposición” 16.

15
IBAIBARRIAGA, Mercedes. EL MUNDO, periódico de España [en línea]. 13 de diciembre del 2007 [ref. de
10 de junio 2010]. Disponible en Web:
<http://www.elmundo.es/elmundo/2007/11/25/internacional/1195963770.html >
16
EL PAIS, periódico de España [en línea]. 25 de noviembre del 2007 [ref. de 10 de junio 2010]. Disponible
en Web:
10

La Asamblea Constituyente fue trasladada nuevamente, esta vez a la ciudad del


departamento de Oruro, sin notificar a los Asambleístas opositores. Es decir, de un
departamento a otro departamento, electoralmente afín al presidente Evo Morales
y de donde es oriundo 17.

El recinto también estaba reguardado por militares y policías, además de los


“movimientos sociales” afines al gobierno, quienes impedían que cualquier
opositor pueda ingresar a los recintos. El 9 de diciembre del 2007 en Oruro se
aprueba en detalle la nueva Constitución, en una sesión de casi 17 horas
continuas de la Asamblea, en una sola lectura, sin debates.

“La aprobación en detalle fue avalada por 164 asambleístas presentes de


los 255 asambleístas constituyentes, cumpliendo con ello con los dos
tercios de los presentes.” 18

Los mecanismos y acontecimientos hasta aquí descritos no fueron los más


idóneos para consolidar un verdadero pacto social entre ciudadanos de un Estado
o haber generado los espacios suficientes de debates y entendimiento, para una
“ruptura pactada” de un viejo Estado y orden para la construcción de uno nuevo.
Esta constitución aprobada en grande y en detalla, fue enviada al Congreso de
Bolivia.

El 20 de octubre del 2008 llegan miles de “indígenas-campesinos-originarios”


para presionar a los parlamentarios un acuerdo nacional a petición del presidente
de la República de Bolivia, Juan Evo Morales Ayma. Oficialistas y opositores
alcanzan un acuerdo entre medio de presión y violencia política en las afueras del
Congreso, para realizar un referéndum sobre la nueva Constitución el 25 de enero
de 2009 y adelantar las elecciones generales al 6 de diciembre de ese año.

El Congreso Nacional modifica varios artículos de la Constitución aprobada en


Oruro, dando una supuesta legitimidad de todo el proceso explicado
anteriormente, contraviniendo la ley de ampliación a la Asamblea Constituyente
que fue aprobada --también bajo presión— por el propio Morales.
Como resultado la nueva Constitución Política del Estado de Bolivia fue aprobada
el 25 de enero del 2009 en un referéndum popular con un 62% de aprobación.

<http://www.elpais.com/articulo/internacional/Asamblea/boliviana/aprueba/Constitucion/impulsada/Evo/
Morales/elpepuint/20071125elpepuint_1/Tes>
17
Bolivia esta divida en nueve Departamentos desde la creación de la república.
18
LA VANGUARDIA, periódico de España [en línea]. 9 de diciembre del 2007 [ref. de 10 de junio 2010].
Disponible en Web:
<http://www.lavanguardia.es/premium/publica/publica?COMPID=53416529276&ID_PAGINA=22088&ID_F
ORMATO=9&turbourl=false>
11

Este proceso se muestra al mundo como un proceso constituyente pacífico,


revolucionario, integrador, reivindicador de las clases excluidas, y que solucionará
los problemas internos políticos, sociales, económicos, como las diferencias
culturales-regionales y étnicas que tienen los bolivianos.

La Asamblea Constituyente lejos de ser verdaderamente democrática e incluyente,


ha sido todo lo contrario; lejos de tener una legitimación política nacional fue
aprobada mediante presión y violencia política, incumplimiento de normas legales,
resoluciones judiciales, en su convocatoria y en el proceso mismo de su
aprobación.
12

2. Estructura dogmática e ideológica de la nueva Constitución de Bolivia

Debemos empezar estableciendo que “toda sociedad donde la garantía de los


derechos no está asegurada ni determinada la separación de poderes no tiene
constitución”. 19

Locke afirma que “el único modo de que alguien se priva de sí mismo de su
libertad individual y se somete a las ataduras de la sociedad civil, es
mediante un acuerdo con otros hombres, según el cual todos se unen en
forma de comunidad, a fin de convivir los unos con los otros de una manera
confortable, segura y pacífica, disfrutando sin riego de sus propiedades
respectivas y mejor protegidos frente a quienes no forman parte de dicha
comunidad” 20.

Este es el objetivo de lo que una constitución debe garantizar al dar una


ciudadanía e igualdad ante la ley en la comunidad o el Estado.

La nueva Constitución Política de Bolivia, acaba con el concepto de república


democrática y tiende a consolidar un régimen con fuertes rasgos totalitario e
ideológico, sin control ni contra peso en las distintas estructuras públicas de los
poderes del Estado, es diferenciadora de la ciudadanía, en etnias y clase sociales;
pretende romper con los paradigmas y los valores universales occidentales del
liberalismo político y económico, que rigen en el mundo y la civilización actual,
para implementar otros paradigmas y conceptos políticos e ideológicos no
universales; a través de la consolidación de un “Estado Democrático Unitario
Social Plurinacional Comunitario” como se establece en el artículo primero de la
nueva norma constitucional, que no es otra cosa que un Estado Etnicista o la
construcción de un etnonacionalismo en Bolivia.

“La etnicidad es un concepto que surge en algunos contextos históricos y


sociales como una identidad frente al “Otro”, especialmente cuando se
siente amenazada en su calidad de identidad, por lo tanto, puede ser usado
como un arma política y de manipulación, especialmente en los estados
pluriétnicos, como Bolivia […] La estructura estatal siempre contiene un
grupo étnico dominante que suprime a los otros. Las relaciones interétnicas
jamás son iguales, en consecuencia puede funcionar como una fuerza
integrante o desintegrante, dependiendo de los contextos e intereses dados
en el momento.” 21

19
Artículo 16 de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, 26 de agosto de 1789.
20
Citado por: BLANCO V., Roberto. El valor de la Constitución. Ed. Alianza, año (?), pág. 49.
21
SZABO, Henriette E. Diccionario de la Antropología boliviana. Ed. Henriette Eva Szabó, Santa Cruz, Bolivia,
2008.
13

Ante esto surgen varias teorías que justifican la multiculturalidad, la diferenciación


y la discriminación positiva, otros postulan la pluriculturalidad, los estados
multinacionales o como en Bolivia la construcción de un Estado plurinacional.

Los límites conceptuales de estas teorías deben ser, o por lo general son, hasta
tanto y en cuanto en nombre de la diferenciación cultural o étnica, o nacional,
empiecen a construirse un discurso político etnonacionalista, que a su vez
construye una ideología, y se consolidan como una doctrina y esta termina en la
institucionalización de una diferenciación racial o étnica, para discriminar o
segregar racialmente, culturalmente o simbólicamente; es decir, pasa de lo
simbólico o imaginario, de lo informal, a una consolidación institucional a través de
su legitimación en normas y estructuras jurídicas formales como es una
constitución.

El etnonacionalismo no solo se ha ideologizado sino “juridizado” en la constitución,


y con ello legitimado la coacción y el uso de la fuerza para aplicar la acción estatal
en la “construcción hegemónica ascendente” 22 del poder de lo indígena o etnias
dominantes frente a lo no indígena o étnico, según la constitución.

El objetivo de esta investigación es describir cómo se han conseguido esos


conceptos y materializados en la nueva constitución. Conceptos tales como
¿Etnicidad? ¿Civilización? ¿Diferenciación? ¿Igualdad? ¿Cultura? Y si estos
deben estar necesariamente contrapuestos entre los derechos identitarios, étnicos
y culturales, de los derechos fundaméntelas del hombre o de la civilización
occidental.

A partir de un analizar la totalidad del proyecto de Constitución aprobado en


grande y detalle por la Asamblea Constituyente, y las modificaciones que se
realizaron en el Congreso, las justificaciones ideológicas y teóricas, de los
intelectuales indigenistas y de los constituyente del MAS, se podrá comprender lo
que quiere conseguir en esencia el “legislador constituyente” con el nuevo Estado
Plurinacional en Bolivia.

En el trasfondo, la constitución de Bolivia, tiene como objetivos cercenar las


libertades políticas, económicas y culturales, en nombre de una plurinacionalidad,
en beneficios de estas naciones étnicas pero en detrimentos de aquellos grupos
de personas que no se autoidentiquen como tal.

22
GARCIA L., Álvaro. Empate catastrófico y punto de bifurcación. [en línea]. junio del 2008 [ref. de 10 de
junio 2010]. En: Crítica y emancipación : Revistan latinoamericana de Ciencias Sociales. Año 1, no. 1 (jun.
2008- ). Buenos Aires : CLACSO, 2008- . – ISSN 1999-8104. Disponible en Web:
<http://bibliotecavirtual.clacso.org.ar/ar/libros/secret/CyE/cye2S1a.pdf>
14

La constitución de Bolivia busca centralizar todo el poder en la figura de la máxima


autoridad del Estado, limitar el control y equilibrios de los poderes establecidos en
el nuevo orden jurídico, ejercer un Capitalismo de Estado que limite la propiedad
privada, y exista la dominación de un grupo social y/o étnico sobre otro, utilizando
estos conceptos de diferenciación como un mecanismo para lograrlo.

La explicación de la construcción del nuevo Estado, se encuentra en el preámbulo


de la misma, pero también lo describe en sus escritos Álvaro García Linera.

“En este sentido, el indio no es una raza y tampoco una cultura; pero la
dominación colonial sistemáticamente busco racializar al indio, pues de
alguna manera se tiene que delimitar a la población tributaria y
subordinada, con lo que de facto se estableció una etnificación de la
explotación. Tenemos entonces, en todo ello, tres procesos
interconectados. El primero la conquista, que delimita dominantes y
dominados como un hecho resultante de la confrontación de fuerzas de
aparatos políticos estatales. En segundo lugar, la colonia que delimita los
espacios de la división del trabajo y los poderes culturales, administrativos y
económicos, a partir de una identificación geográfica, cultural, somática y
racial del colonizado. Y, por último, la legitimación y naturalización del
orden de dominación a partir de esta jerarquización culturalista, espacial y
racial del orden social.

La República de Bolivia se fundó dejando en pie estas estructuras


coloniales que consagraban prestigio, propiedad y poder en función del
color de la piel, del apellido, el idioma y el linaje.” 23
Por tanto, “la ciudadanía no es tanto una producción de derechos como una
herencia familiar; por lo que se puede hablar de la existencia de un tipo de
ciudadanía de tipo patrimonial.

La ciudadanía patrimonial de un Estado oligárquico, más que una


responsabilidad pública es un compromiso de lealtad de casta; es por sobre
todo, la exhibición de los blasones familiares, de la pureza de sangre”. 24

Esta es la explicación para entender el Estado con herencia colonial que plantea
un discurso de reivindicación étnica indigenista, en muchos autores e intelectuales
bolivianos indigenistas con sus variaciones más o menos parecidas.

Podremos estar de acuerdo o no con el análisis y el método científico utilizado


para describir la marginación y discriminación de los pueblos indígenas en la

23
GARCIA L, Álvaro. Estado Multinacional. Ed. Malatesta, La Paz, Bolivia, 2005. Pág. 13
24
GARCIA L, Álvaro. Estado Multi…op., cit., pág. 15
15

historia de Bolivia, que por lo general se los hace entorno al Aymara 25; pero esta
descripción y explicación es válida para entender la realidad vista por parte de los
ideólogos de la Constitución. Nos sirve para demostrar que lo único que se ha
pretendido hacer en Bolivia a través de la Asamblea Constituyente es cambiar la
posición de los actores o agentes; es decir de dominantes y dominados, de
explotadores y explotados, entre racistas y los receptores de las acciones racistas,
entre discriminadores y discriminados. Su paradigma no es la igualdad, aunque se
intente llegar a ella.

Ahí es donde está el error de construcción argumentativa. En donde “la


construcción de las etnicidades, la representación de los movimientos indígenas y
el impactos de estos procesos en la formulación de retóricas nacionales” está
dada para construir un discurso político, una ideología y una doctrina. En otras
palabras ingresan a racializar la política por medio del etnocentrismo, como un
proyecto de asunción al poder a través de un etnonacionalismo, con sustento
ideológico.

“La tradición política occidental se ha ocupado muy poco por estas cuestiones.
La mayor parte de las comunidades políticas organizadas de la historia han
sido multiétnicas, un testamento de la ubicuidad de la conquista y el comercio a
la larga distancia en los asuntos humanos. Sin embargo, la mayoría de los
especialistas en teoría política han utilizado un modelo idealizado de la polis en
la que los conciudadanos comparten unos ancestros, un lenguaje y una cultura
comunes. Aun cuando los propios especialistas vivieron en imperios
plurilingües que gobernaban numerosos grupos étnicos y lingüísticos,
escribieron a menudo, como si las ciudades-Estados culturalmente
homogéneas de la antigua Grecia proporcionasen el modelo esencial o
estándar de una comunidad política.” 26

25
Para analizar este punto, en torno a la aymaridad, se puede consultar: ALVIZURI, Verushka. La
construcción de la aymaridad. Una historia de la etnicidad en Bolivia (1952-2006). Ed. El País, Santa Cruz,
Bolivia, 2009.
26
KYMLICKA, Will. Ciudadanía Multicultural. Ed. Paidós, Barcelona, España, 2006. Pág. 14.
16

3. El preámbulo: la ideologización de la Constitución

El preámbulo de la constitución tiene un valor jurídico ya que describe la base de


la constitución a nivel ético, político, moral y religioso. Puede definirse como una
declaración solemne de los propósitos del constituyente que se expresa en los
valores, principios y necesidades de un pueblo, el cual será los paradigmas
superiores que servirán como una visión de futuro y desarrollo sociocultural, como
de base fundamental de interpretación de la misma norma.
Que nos índica el preámbulo 27 de la Constitución de Bolivia:

“En tiempos inmemoriales se erigieron montañas, se desplazaron ríos, se formaron


lagos. Nuestra amazonia, nuestro chaco, nuestro altiplano y nuestros llanos y
valles se cubrieron de verdores y flores. Poblamos esta sagrada Madre Tierra con
rostros diferentes, y comprendimos desde entonces la pluralidad vigente de todas
las cosas y nuestra diversidad como seres y culturas. Así conformamos nuestros
pueblos, y jamás comprendimos el racismo hasta que lo sufrimos desde los
funestos tiempos de la colonia.

El pueblo boliviano, de composición plural, desde la profundidad de la historia,


inspirado en las luchas del pasado, en la sublevación indígena anticolonial, en la
independencia, en las luchas populares de liberación, en las marchas indígenas,
sociales y sindicales, en las guerras del agua y de octubre, en las luchas por la
tierra y territorio, y con la memoria de nuestros mártires, construimos un nuevo
Estado.

Un Estado basado en el respeto e igualdad entre todos, con principios de


soberanía, dignidad, complementariedad, solidaridad, armonía y equidad en la
distribución y redistribución del producto social, donde predomine la búsqueda del
vivir bien; con respeto a la pluralidad económica, social, jurídica, política y cultural
de los habitantes de esta tierra; en convivencia colectiva con acceso al agua,
trabajo, educación, salud y vivienda para todos.

Dejamos en el pasado el Estado colonial, republicano y neoliberal. Asumimos el


reto histórico de construir colectivamente el Estado Unitario Social de Derecho
Plurinacional Comunitario, que integra y articula los propósitos de avanzar hacia
una Bolivia democrática, productiva, portadora e inspiradora de la paz,
comprometida con el desarrollo integral y con la libre determinación de los
pueblos.

Nosotros, mujeres y hombres, a través de la Asamblea Constituyente y con el


poder originario del pueblo, manifestamos nuestro compromiso con la unidad e
integridad del país.
Cumpliendo el mandato de nuestros pueblos, con la fortaleza de nuestra
Pachamama y gracias a Dios, refundamos Bolivia.
27
las cursivas son nuestras
17

Honor y gloria a los mártires de la gesta constituyente y liberadora, que han hecho
posible esta nueva historia.”

En este preámbulo se define la construcción del mito etnonaciolista indígena, en


base a una sociedad multinacional indígena y a un sincretismo religioso entre la
Pachamana y el Dios cristiano.

¿La Pachamama o madre tierra representa a todos los pueblos indígenas de


Bolivia o solo a unos cuantos? ¿Dios pertenece a los mestizos y los herederos del
colonialismo? ¿Cómo será la diferenciación entre quienes son indígenas o
pertenezcan a una “nación originaria” que estén antes de la colonia, y los que no
provengan de ninguna? ¿Será por el biotipo, la autoidentificación o el nivel de
ingreso o escala social?

¿Busca dejar la cultura occidental al negar la república y el neoliberalismo? ¿La


cultura ancestral de todos los pueblos indígenas es la que debe regir? ¿O
solamente la de algún pueblo indígena que será el ordenador de la cultura o
valores generales en Bolivia?

¿Sustituimos unos paradigmas por otros? ¿Cuáles son estos paradigmas?


Muchas preguntas, de las cuales algunas pueden ser respondidas desde lo que
prescribe y se interpreta en la misma constitución; otras quedan en una
explicación metafísica, como son los paradigmas ancestrales de la sabiduría de
los pueblos indígenas –distintos, distantes y diversos en Bolivia-- y de sus usos y
costumbres, que tiene el mismo orden que los paradigmas occidentales de la
democracia y la libertad individual –según la misma constitución--, que el
preámbulo a su vez los mezcla pero también los rechaza. Paradigmas que no se
pueden explicar entres sí sino es excluyendo el uno del otro.

¿Puede existir una cultura universal o una ciudadanía multicultural, que nos
permita convivir en paz y armonía respetando nuestras diferencias, valores e
ideologías?

La respuesta, es si; si estos conceptos y definiciones no se traspasan para que


sirvan en la construcción ascendente del poder, en torno a un proyecto político
claramente étnico nacionalista --del indigenismo-- y segregador, en desmedros de
otras identidades. Es decir, que utilicemos los conceptos de etnicidad,
multiculturalidad o multinanciones, con el objetivo inverso, para negar a otros su
identidad y sus valores culturales propios y solo para conseguir el dominio
simbólico y material de las estructuras de poder en un Estado.

Lo más peligroso es que al tener esta discrecionalidad de interpretación


constitucional y de justicia en nombre de “usos y costumbres” de las etnicidades
18

reconocidas en la constitución, se deja un vació jurídico para cumplir los mismos


preceptos que ella misma se establece, para que la interpretación pueda o no ser
realizada por el detentador del poder y no por las mismas etnicidades.

“La historia nos demuestra que la sociedad humana ha tratado siempre de


regirse por normas impersonales y desintencionadas. El imperio del
Derecho es, ante todo: la sustitución de la voluntad arbitraria y personal,
caprichosa e inestable, de hombres que gobiernan a su antojo, por la
autoridad a la ley, cuyas normas abstractas generales y permanentes
excluye toda arbitrariedad directamente intencionada”. 28

¿La constitución de Bolivia cumple o da certidumbre de este precepto?

“El problema es que en nombre del relativismo cultural y de la crítica a ‘la


razón occidental’, a veces se corre el riesgo de desechar los aspectos
emancipadores de esa ‘modernidad occidental’ que es cuestionada.
En Bolivia, la ideología postcolonial también ha llevado a legitimar mitos
sociales. Uno de ellos consiste en pensar que vivimos en un proceso de
‘recuperación de nuestra sabiduría ancestral’ ora destruida por la empresa
colonial, ora destruida por el capitalismo y la modernidad occidental. A decir
verdad muchas de las ‘restauraciones culturales’ son en realidad
construcciones intelectuales recientes, financiada con dinero de la
cooperación internacional”. 29

28
SANCHEZ VIAMONTE, Carlos. Manual de Derecho Constitucional. Ed. Kapelusz, Buenos Aires, Argentina,
año (‘). Pág. 6.
29
ALVIZURI, Verushka. La construcción de la aymaridad. Una historia de la etnicidad en Bolivia (1952-2006).
Ed. El País, Santa Cruz, Bolivia, 2009. Pág. 188.
19

4. Que dice la Constitución

La constitución aprobada en Bolivia tiene 411 artículos y 10 disposiciones


transitorias de los cuales son 60 artículos y 2 disposiciones transitorias los que
prescriben los derechos de las etnicidades en Bolivia.

El 15% de los Artículos redactados otorgan derechos, regulan, o mencionan a “las


naciones y pueblos indígenas-originarios-campesinos" o la etnicidad 30 como un
valor diferenciador o agregador a la ciudadanía en Bolivia.

“El principio de igualdad, principal concepto del sistema democrático de la


democracia liberal y del estado social y democrático de derecho, informa
toda constitución. Desde el preámbulo, en que si indica que el Estado
boliviano está basado en el respeto e igualdad entre todos, a lo largo del
texto se hace referencia a un Estado sustentado en el valor de la igualdad
(la constitución hace referencia 26 veces sobre la igualdad). Asimismo, es
fin y función esencial del Estado, construir una sociedad sin discriminación,
por lo que prohíbe y sanciona toda forma de discriminación que menoscabe
el reconocimiento, goce o ejercicio, en condiciones de igualdad, de los
derechos de la persona.
Sin embargo, como concepto antagónico al principio de igualdad y de no
discriminación, contiene disposiciones claramente racistas al otorgar
privilegios constitucionales en atención a consideraciones de orden étnico
que, en contraposición al concepto de igualdad, destaca, mas bien, la
diferencia racial.” 31

Detallaremos algunos artículos para su análisis, que están en la parte dogmática y


orgánica de la Constitución, que se comparará con él proyectos oficial aprobado
por la Asamblea Constituyente de Bolivia --en grande y detalle— y con el texto que
fue modificado en el Congreso Nacional y posteriormente enviado a referéndum
constituyente; así se podrá analizar las diferencias e interpretar lo que el legislador
constituyente quiso construir con ello.

30
Con fines metodológicos hemos significado en este trabajo a “las naciones y pueblos indígenas-originarios-
campesinos" como grupos étnicos. Cuando hablamos de etnicidad estamos hablando del concepto
constitucional “indígena-originario-campesino”.
31
URENDA, J. Carlos. El Estado cotoblepas. Las contradicciones destructivas del Estado boliviano. Ed. El País,
Santa Cruz, Bolivia, 2009. Pág. 9 y 10.
20

Constitución aprobada por la Asamblea Constitución modificada en el Congreso y


Constituyente aprobada en Referéndum Constitucional

Artículo 3. El pueblo boliviano está conformado por la Artículo 3. La nación boliviana está conformada por la totalidad de las
totalidad de las bolivianas y los bolivianos pertenecientes a bolivianas y los bolivianos, las naciones y pueblos indígena originario
las áreas urbanas de diferentes clases sociales, a las campesinos, y las comunidades interculturales y afrobolivianas que en
naciones y pueblos indígena originario campesinos, y a las conjunto constituyen el pueblo boliviano.
comunidades interculturales y afrobolivianas.
Artículo 11. I. El Estado adopta para su gobierno la forma Artículo 11. I. La República de Bolivia adopta para su gobierno la
democrática participativa, representativa y comunitaria, con forma democrática participativa, representativa y comunitaria, con
equivalencia de condiciones entre hombres y mujeres. II. equivalencia de condiciones entre hombres y mujeres. II. La
La democracia se ejerce de las siguientes formas, que democracia se ejerce de las siguientes formas, que serán
serán desarrolladas por la ley: 1. Directa y participativa, desarrolladas por la ley: 1. Directa y participativa, por medio del
por medio del referendo, la iniciativa legislativa ciudadana, referendo, la iniciativa legislativa ciudadana, la revocatoria de mandato,
la revocatoria de mandato, la asamblea, el cabildo y la la asamblea, el cabildo y la consulta previa.. Las asambleas y cabildos
consulta previa, entre otros. Las asambleas y cabildos tendrán carácter deliberativo conforme a Ley. 2. Representativa, por
tendrán carácter deliberativo. 2. Representativa, por medio medio de la elección de representantes por voto universal, directo y
de la elección de representantes por voto universal, directo secreto, conforme a Ley. 3. Comunitaria, por medio de la elección,
y secreto, entre otros. 3. Comunitaria, por medio de la designación o nominación de autoridades y representantes por normas
elección, designación o nominación de autoridades y y procedimientos propios de las naciones y pueblos indígena originario
representantes por normas y procedimientos propios de las campesinos, entre otros, conforme a Ley .
naciones y pueblos indígena originario campesinos, entre
otros.
Artículo 192. La jurisdicción indígena originario Artículo 191. I. La jurisdicción indígena originario campesina se
campesina conocerá todo tipo de relaciones jurídicas, así fundamenta en un vínculo particular de las personas que son
como actos y hechos que vulneren bienes jurídicos miembros de la respectiva nación o pueblo indígena originario
realizados dentro del ámbito territorial indígena originario
campesino. II. La jurisdicción indígena originario campesina se ejerce
campesino. La jurisdicción indígena originario campesina en los siguientes ámbitos de vigencia personal, material y territorial: 1.
decidirá en forma definitiva. Sus decisiones no podrán serEstán sujetos a esta jurisdicción los miembros de la nación o pueblo
revisadas por la jurisdicción ordinaria ni por la indígena originario campesino, sea que actúen como actores o
agroambiental y ejecutará sus resoluciones en forma demandado, denunciantes o querellantes, denunciados o imputados,
directa. recurrentes o recurridos. 2. Esta jurisdicción conoce los asuntos
indígena originario campesinos de conformidad a lo establecido en una
Ley de Deslinde Jurisdiccional. 3. Esta jurisdicción se aplica a las
relaciones y hechos jurídicos que se realizan o cuyos efectos se
producen dentro de la jurisdicción de un pueblo indígena originario
campesino.
Artículo 297. El gobierno de los territorios indígena Artículo 296. El gobierno de las autonomías indígena originario
originario campesinos se ejercerá a través de sus propias campesinas se ejercerá a través de sus propias normas y formas de
normas y formas de organización, con la denominación organización, con la denominación que corresponda a cada pueblo,
que corresponda a cada pueblo, nación o comunidad. nación o comunidad, establecidas en sus estatutos y en sujeción a la
Constitución y a la Ley.
DISPOSICIONES TRANSITORIAS Décima. El requisito de hablar al menos dos idiomas oficiales para el
desempeño de funciones públicas determinado en el Artículo 235. 7
será de aplicación progresiva de acuerdo a Ley.

En el artículo 3 de la constitución aprobada por la Asamblea Constituyente delimita


a la nación solamente a los pueblos indígenas originarios campesinos y diferencia
a los ciudadanos en clase sociales. Esto fue remediado en la modificación del
Congreso, aunque sigue vigente la categorización de la ciudadanía entre los que
pertenezcan o no a una etnia.
21

Por otro lado, se delimita nuevamente el concepto de nación en el artículo 30, que
dice:

“I. Es nación y pueblo indígena originario campesino toda la colectividad


humana que comparta identidad cultural, idioma, tradición histórica,
instituciones, territorialidad y cosmovisión, cuya existencia es anterior a la
invasión colonial española”.

Habiendo una contradicción con ello entre el artículo 3 y el 30, puesto que uno
delimita a la nación como todos los bolivianos y la otra solo a las etnias. Y éste
último entra en contradicción, a su vez, con el artículo 32 que dice:

“El pueblo afroboliviano goza, en todo lo que corresponda, de los derechos


económicos, sociales, políticos y culturales reconocidos en la Constitución
para las naciones y pueblos indígena originario campesinos”.

Siendo que esta comunidad de personas tiene existencia posterior a la colonia y


provienen de África, como lo indica la unión de estas dos palabras: afro-boliviano.
El artículo 11 en la constitución modificada por el congreso, reincorpora el término
república en la constitución, contradiciendo al preámbulo de la misma que dice
“Dejamos en el pasado el Estado colonial, republicano y neoliberal”.

La palabra república se repite ocho veces en toda la constitución sin contar el


preámbulo. Esto se debe entender como un mecanismo usado por los ideólogos
de esta constitución para negociar y aprobar su constitución en el congreso,
tratando de conseguir la menor cantidad posible de modificaciones de fondo del
texto constitucional en el congreso. Que de hecho, revisado artículo por artículo no
existen mucha diferencia entre los que pretendió el legislador constituyente o los
impulsores de este proyecto y quienes modificaron en el congreso la constitución.

En el artículo 192 de la constitución de la Asamblea Constituyente se modifica al


número 193 en el Congreso, esto por efectos de estilos y concordancias en las
modificaciones que se hicieron. El artículo 193 detalla de mejor manera para quien
se aplica la justicia comunitaria, como las competencias, la jurisdicción y su ámbito
de aplicación. En este sentido se mejoró y consolido constitucionalmente la justicia
comunitaria y no se dejo en la ambigüedad como estaba en el artículo modificado,
aunque se debe compatibilizar la justicia ordinaria y comunitaria a través de una
ley de deslinde jurisdiccional, que tendrá que acogerse a los preceptos mínimos ya
normados en este artículo.

El artículo 296 de la constitución modificada en el congreso, aumenta la regulación


del gobierno de los territorios étnicos a través de una ley. Sin embargo, en toda la
constitución ya se tienen prescritos varios artículos que le favorecen y le dan
22

amplitud al aplicar y poner en práctica sus usos y costumbres como naciones y


pueblos indígenas originarios campesinos.

Se aumenta en la constitución modificada en el congreso una disposición


transitoria, la decima que prorroga la obligatoriedad de aprender un idioma étnico
aparte del castellano, como lenguas oficiales del Estado Plurinacional, para poder
ejercer un cargo público. Esto se puede entender puesto que la constitución se
aprobó en referéndum el 26 de enero del 2009 y las elecciones generales para la
presidencia y para la asamblea legislativa eran en diciembre del mismo año, y se
podría estar contraviniendo la propia constitución; o en su caso, los candidatos
quedarían inhabilitados sino dominaran una lengua étnica.
23

5. La construcción de un Estado Etnicista

La construcción de un Estado Etnicista en Bolivia tiene su fundamento y se basa


en lo que define la constitución como etnias. Por ello debemos entender o
comprender que es lo que significa el concepto del término “Indígena Originario
Campesinos” 32.

Este término no tiene un sustento antropológico, sociológico ni histórico de larga


data --ahora con la constitución si tiene un sustento jurídico-- por ser un
compuesto de tres palabras distintas en su significado léxico e interpretación
política. Eso sí, representa una connotación ideológica. Este concepto de
“indígena originario campesino” pretende estar por encima del principio universal
de igualdad, otorgando más derechos y facultades a unos ciudadanos sobre otros.

La Constitución de Bolivia establece que sólo son Naciones y Pueblos aquellos


que descienden de habitantes “originarios” antes de la conquista española. La
construcción de otras identidades societales en los procesos históricos de los
últimos 500 años, como el mestizaje y la misma historia poscolonial, no tiene valor
alguno, en esta lógica constitucional.

A este hecho se le ha dado el sustento jurídico ideológico-político-sociológico en la


conformación de un Estado Plurinacional Comunitario.
Bolivia está conformada territorialmente por 9 Departamentos, constituidos
muchos de ellos antes del nacimiento de la misma república, con identidades
culturales propias, con historias propias de la conquista y de la emancipación
española.

Bolivia es un mosaico de multiculturalidad, sobre todo mestiza. Actualmente


existen poco más de 10 millones de habitantes, con 37 pueblos indígenas --si
incorporamos a los afrobolivianos en esta categorización. La mediana estadística
es de poco más de mil habitantes por pueblo indígena o etnia, que la Constitución
tiene catalogadas como nación (Ver Mapa 33 y Cuadro 1).

32
GACETA OFICIAL DE BOLIVIA. Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia. Ley N° 3942 del 21
de octubre del 2008. Año XLVIII, La Paz, Bolivia 24 de octubre del 2008. Pág.10, artículo 3.
33
ETNOS. Centro de Discipulado [en línea] [ref. de 20 junio 2010]. Disponible en Web: <
http://www.etnos.org/html/mapa_de_bolivia.html>
24
25

Etnia o Grupo Habitantes


Amazonía
1 Afroboliviano 22.000
2 Araona 112
3 Ayoreo 1.701
4 Baure 976
5 Canichana 420
6 Cavineño 1.677
7 Cayubaba 645
8 Chacobo 501 Cuadro 1
9 Chim an 8.528 2006: Fuente y elaboración:
10 Chiquitano 184.248 EX -MINISTERIOS DEASUNTOSINDIGENASYPUEBLOS
11 Es e Ejja 939 ORIGINARIOS (MAIPO)
12 Guaras ugwe 31 http://www.amazonia.bo/
13 Guarayo 9.863
14 Itonam a 2.940
15 Joaquiniano 3.145
16 Lecos 2.763
17 Machineri 155
18 Maropa 4.498
19 Moré 101
20 Mos etén 1.601
21 Movida 10.152
22 Moxeño 76.073
23 Nahua s /d
24 Pacahuara 25
25 Sirionó 308
26 Tacana 7.056
27 Torom ona s /d
28 Yam inahua 188
29 Yuqui 220
30 Yuracare 2.755
Total 343.621
Chaco
32 Guaraní 133.393
33 Tapiete 63
34 Weenhayek 2.020
Total 135.476
Andes
35 Aym ara 2.098.317
36 Quechua 2.556.277
37 Uru 2.383
Total 4.656.977

TOTAL 5.136.054
26

Analizando estos datos se observa que sólo existen dos pueblos indígenas
numerosos en Bolivia: los Aymaras y Quechuas provenientes del altiplano u
Occidente de Bolivia (Departamentos de La Paz, Oruro, Potosí, Chuquisaca y
Cochabamba –estos dos últimos son valles).

Estos pueblos indígenas o etnias Aymara y Quechua representan el 91% de los


indígenas del país. El restante 9% se encuentra en el Oriente y Sur de Bolivia, con
casi 500 mil indígenas, que están distribuidos en 34 etnias oriundas de tierras
bajas (Departamentos de Pando, Beni, Santa Cruz y Tarija).

El porcentaje de indígenas en Bolivia no está relacionado con un biotipo genético


determinado, sino que es más bien una identificación con una cultura a la que se
desea pertenecer. Por ello en la constitución cuando describe en su artículo 21
que “las bolivianas y bolivianos tiene los siguientes derechos: 1. A la
autoidentificación cultural”.

Este un mecanismo para forzar a los ciudadanos a la autoidentificaión si con ello


pueden beneficiarse con más derechos, reconocimiento o la construcción de un
nueva escala social o estatus dentro de una comunidad política. De tal manera,
con este precepto se otorgan más derechos a quienes se autoidentifquen por una
u otra cultura étnica; que a su vez, se constituirá en una mayoría o minoría étnica
dentro de los datos estadísticos que maneje el Estado Plurinacional.

“No hay datos serios que demuestren que Bolivia es mayoritariamente


indígena y originaria. El único documento que respalda esta afirmación es el
cuestionado Censo de Población y Vivienda realizado el 2001, que
concluye: el 62% de los bolivianos se autoidentifica como indígena. Este
estudio no ofreció a los bolivianos la alternativa de autoidentificarse como
mestizos, lo que sí hizo un estudio particular realizado cinco años más
tarde, llegando a la conclusión de que el 64% de los bolivianos se declara
mestizo. En Auditoría de la Democracia, Informe Boliviano 2006, señala que
el 64% de los bolivianos se declararon mestizos o cholos, 19% indígenas u
originarios, 11% blancos y 0,55% negros. 4,28% respondió ninguno”. 34

Genéticamente es imposible demostrar la pureza racial o étnica, los procesos


históricos y la civilización ha creado un mundo mestizo, una “ciudadanía
multicultural”. 35

34
SELIGSON, Mitchel y otros. Auditoria de la Democracia, Informe 2006. [en línea]. 2006 [ref. de 10 de junio
2010]. Disponible en Web:
<http://sitemason.vanderbilt.edu/files/jFo6U8/Bolivia_Audtoria_de_la_Democracia__2006_v14d.pdf >
35
KYMLICKA, Will. Ciudadanía Multicultural. Ed. Paidós, Barcelona, España, 1996.
27

Pero la pregunta fundamental que nos debemos hacer es: ¿Quienes son
realmente las minorías étnicas o pueblos indígenas en Bolivia? ¿Los indígenas
son mayorías o minorías en Bolivia? En base a las respuestas de estas preguntas
es que se deberían hacer las políticas de igualación o afirmación positiva para la
implementación de políticas públicas, pero no para ejercer una ciudadanía política
diferenciada y diferenciadora.

“Repitamos una vez más, con Magnus Mörner (1969), que no puede haber
cálculo científico oficial sobre la base de matrices preformadas de conjuntos
de individuos indios; no hay más que cálculos ideológicos y políticos. He ahí
el por qué la obtención de resultados tan diferentes de un cálculo a otro en
una misma área geográfica, y he ahí el porqué los ‘debates agresivos’
(Teitelbaun & Winter, 2001: 237) que dichos cálculos genera y seguirán
generando.” 36

Con estos datos se puede evidencia que el etnicismo en Bolivia es un proyecto de


“construcción hegemónica ascendente” de poder (LINERA, 2008:26) que utiliza el
término indígena para sustentar discursivamente e ideológicamente la
implementación de un Estado etnonacionalista y socialista, que sustituya la ficción
de lucha de clases y del proletariado por las luchas de reivindicación étnicas,
hablando de una “clase social oprimida” por la conquista española y la democracia
liberal.

Fausto Reinaga uno de los intelectuales fundadores del indianismo, citado por
ALVIZURI, sugiere que la ‘lucha de razas’ en Bolivia es un tema transversal a la
sociedad boliviana, con más capacidad de movilización que el argumento de la
‘lucha de clases’”. 37

Los conceptos Indígenas y campesinos, los dos originarios, con un mismo valor
semántico en la Constitución, que deben reconstituir los usos y costumbres como
expresión de libertades colectivas y no individuales, para la implementación de un
derecho y una economía comunaria o comunitarista.

¿Qué campesino puede catalogarse como indígena o cual originario puede ser
también campesino? O ¿Cómo se puede ser los tres a la vez? O ¿Solamente uno
a la vez?

36
AZEBEDO, Valérie y SALAZAR-SOLER, Carmen (Editoras). LAVAUD, Jean-Pierre. El regreso de lo indígena.
En: Contar a los indígenas (Bolivia, México, Estados Unidos) Lima, Perú, 2001. Pág. 66-77.
37
ALVIZURI, Verushka. La construcción de la aymaridad. Una historia de la etnicidad en Bolivia (1952-2006).
Ed. El País, Santa Cruz, Bolivia, 2009. Pág. 120.
28

Lo que una sociedad necesita es una comunidad de ciudadanos, de ciudadanos


multiculturales; y la diferenciación de ciudadanía que hace la constitución crea
desigualdad, privilegios y segregación.

“Una comunidad de ciudadanos supone la aceptación de distintas


identidades (étnicas, religiosas, nacionales, de minorías, sexuales, etc.) en
un plano de igualdad como requisito para que éstas desarrollen sus
proyectos individuales y colectivamente.
Que las diversas identidades reconozcan la cultura ciudadana, que implica
el respeto de los otros distintos y de su funcionamiento como identidades
particulares.
Que cada grupo reconozca a los otros en tanto ciudadanos con iguales
derechos y obligaciones, con los cuales, en conjunto, deben construir un
nosotros, que es la nación. (SCHNNAPER: 1994)” 38

La construcción conceptual de indígena originario campesino es política e


ideológica, y busca consolidar la toma del poder territorial a través de las
comunidades indígenas o territorios ancestrales, que le pertenecían a ellos antes
de la colonia, quedando relegados a las áreas urbanas los mestizos o “indígenas
culturalmente absorbidos por la cultura occidental”.

Muchos de los pueblos indígenas en Bolivia, sobre todo los del oriente de Bolivia
eran nómadas que provienen, incluso, de otros países vecinos. Y en el occidente
de Bolivia pertenecen los Aymaras y Quechuas a la misma cultura de sus vecinos,
rompiendo también sus propios límites territoriales.

Los indigenistas en Bolivia, por lo general, obvian la definición de cholo o mestizo


en sus construcciones teóricas, o los descalifican para poder construir su
etnonacionalismo; o los consideran como “indígenas culturalmente absorbidos por
la cultura occidental” o por el estado colonial.
Se ha creado constitucionalmente una especie de “ghettos políticos” donde
estarán los mestizos, con una legislación y tribunales de justicia, con jurisdicción
distinta, derechos distintos y economía distinta a los indígenas originarios
campesinos.

¿Como se consolidará en la realidad este “proceso de cambio” y la instauración


del Estado Plurinacional? No lo sabemos pero ésta escrito en la constitución el
cómo se deberá hacer.

Por tanto, Bolivia ha constitucionalizado la categorización de la ciudadanía.

38
INFORME NACIONAL DE DESARROLLO HUMANO, 2004. Interculturalismo y Globalización. La Bolivia
Posible. Ed. PNUD, La Paz, Bolivia, 2004. Pág. 101.
29

El mestizaje en Bolivia, que es la esencia de América Latina, quedará reducido por


el hecho que la autoidentificación cultural simbólica “indígena originario
campesino” dará más beneficios, que no pertenecer a una etnia o pueblo indígena.

“Más bien, contrariamente se debe lograr “un equilibrio entre el pluralismo


indispensable, respetuoso y la admisión leal de las diferencias. Bolivia
puede gestionar sus identidades internas sin tener que desaparecer en la
unidad, y la solución para ello parece ser la gestión democrática de sus
diferencias.
De allí que la comunidad de ciudadanos se la Nación, aunque ya no puede
basarse, como históricamente ha ocurrido, en su pura identificación con el
Estado, ni tampoco puede comprenderse como una suerte de ‘esencia’
propia de una identidad que alberga, y se considera superior a otras
identidades. La comunidad de ciudadanos es así una construcción colectiva
que reconoce y permite el ejercicio simultáneo de los derechos individuales
y colectivos de las personas.” 39

El ser indígena será un mecanismo de acenso social y económico, en


contraposición al pasado colonial, que daba esos privilegios al criollo (blanco) o
mestizo, en la interpretación del indigenismo propiciada por el actual
vicepresidente de Bolivia Alvaro García Linera. Es una especie de revanchismo
cultural y económico frente al mestizo opresor y el “Estado Colonial y
Caudillista.” 40

Ideológicamente, el proyecto de Constitución ha elaborado un concepto que


sustituye la lucha de clases marxista por la lucha de razas o culturas étnicas, que
habrían sido “oprimidos y expropiados” de los excedentes económicos por 500
años, inclusive en la era republicana, continuación de la colonización y explotación
del indígena.

Esta definición étnica es creada y moldeada para conseguir la hegemonía del


poder, fusionando la connotación de originarios y campesinos, para constituir en
Bolivia una identidad simbólica de identificación de clase y sobre todo
partidaria/política, que recaerá en quien ostente el poder y hubiera construido este
etnonacinalismo.

Los indígenas originarios campesinos o naciones étnicas tendrán una


representación corporativa de manera directa en las candidaturas para el

39
INFORME NACIONAL DE DESARROLLO HUMANO, 2004. Interculturalismo y Globalización. La Bolivia
Posible. Ed. PNUD, La Paz, Bolivia, 2004. Pág. 103.
40
GARCIA, Álvaro. El Estado Multi…op., cit., Pág. 14
30

Congreso del Estado Plurinacional, puesto que serán elegidos a través de sus
usos y costumbres en circunscripciones especiales, distorsionando el concepto de
un hombre un voto. Nuevamente cuestiona el valor ético de igualdad.

Tendrán una representación directa en varias instituciones y/u órganos del Estado,
como ser el Tribunal Constitucional y el Consejo Electoral Plurinacional. Es decir,
quienes sean considerados por el Estado Plurinacional como indígenas originarios
campesinos tendrán dichos privilegios y gozarán de derechos especiales.

Para conseguir que esta constitución pase de ser meramente formal a


materializarla necesitan consolidar el territorio indígena originario campesino. Por
eso es importante indigenizar Bolivia, independientemente del número de
ciudadanos pertenecientes a una etnia. Para esto la constitución ha
institucionalizado las Autonomías Indígenas, en contra posición de las Autonomías
Departamentales 41, con competencias –las indígenas-- incluso de tipo federal,
regidas a través de sus usos y costumbres, que ocuparán más del 70% del
territorio nacional.

La implementación de las autonomías indígenas, y la interpretación de letra


muerta de la Constitución, destruirá los límites territoriales de los Departamentos,
construcción histórica de los pueblos mestizos desde la colonia y anteriores a la
creación de la república, con identidades societales y culturas propias.

Las Autonomías Indígenas Originarias Campesinas y junto con otro tipo de


autonomía como las Regionales tienen mayores competencias, que las
Autonomías de los Departamentos que en su mayoría y en las ciudades capitales
está conformada por cholos 42 y mestizos, que la constitución denomina
comunidades interculturales.

Las Autonomías Indígenas, como ya se mencionó, tendrán justicia propia y tuición


soberana sobre los recursos naturales renovables y no renovables. El objetivo de
la implementación de las Autonomías Indígenas Originarias Campesinas es la
destrucción de los Departamentos, su historia, sus símbolos y culturas, para ser
sustituidas por las del nuevo Estado Etnicista.

El problema de esta reterritorilización, o sobre posición, es que se puede instaurar


un proceso de “neocolonización” y aculturización interno, donde la etnia dominante
en Bolivia o en la que recae la construcción del etnonacionalismo, pretenda

41
Iguales a las Comunidades Autónomas de España o las Regiones en Italia.
42
Catalogación que se hace a la mescla de indígena con mestizo, criollo o descendiente de europeos con
indigena, en el occidente de Bolivia.
31

imponer su cultura o requerir los territorios de las otras comunidades indígenas o


mestizas en beneficio propio.

“El paradigma boliviano de construcción nacional, nación única y cultura


única, privilegia pues una visión ‘la aymarocentrica’”. 43

La constitución reglamenta el sistema económico tendiente a consolidar una


economía comunitaria o colectivista entre los indígenas. Si bien la Constitución
establece la protección a la propiedad privada, no es menos cierto que plantea un
Capitalismo de Estado y un estatismo centralizador y planificador de la economía.

El peligro de todo esto es que se puede convertir en una dialéctica del racismo,
donde se plantea una lucha anticolonial y antirracista, para imponer un
neocolonialismo y la institucionalización de una discriminación racial o un racismo
difuso, simbólico, o radicalizado, que pueda terminar en acciones racistas
legitimadas por el Estado etnonacionalista.

El objetivo de indigenizar el discurso y anular los conceptos de cholo en el


occidente de Bolivia, viene dado puesto que al indígena se lo ha catalogado como
una clase social baja y marginal. Mientras que el cholo y el mestizo pueden
construir espacios de acumulación de capital o acomodo social. Aunque muchos
de estos, sigan siendo discriminados o marginados, desde su condición
económica o conlleven prejuicios por ser cholos, esta categoría no sirve para la
ideologización de una lucha de clases. El indígena sí.

Sin embargo, la ventaja que se tiene en la construcción del discurso indigenista al


“invisibilisar al cholo” o “silenciar el termino cholo” 44 que este al ser discriminado --
por los mestizos, los blancos o los descendientes europeos del Estado colonial, de
los conquistadores-- se podrá muy fácilmente autoidentificarse con sus ancestros
y rasgos propios de sus predecesores indígenas. Que ahora, el Estado
Plurinacional no solo le garantizará una condición económica de ascenso, sino
más bien política y de poder, frente “al otro” que no pertenezca a una etnia.

43
ALVIZURI, Verushka. La construcción de la aymaridad. Una historia de la etnicidad en Bolivia (1952-2006).
Ed. El País, Santa Cruz, Bolivia, 2009. Pág. 73.
44
Los intelectuales indigenistas de Bolivia, como Xavier Albo entre otros, los sustituyen por Aymara Urbano,
que le devolvía al inmigrante aculturado y empobrecido de la urbe, dignidad cultural. Citado por: ALVIZURI,
pág. 106.
32

“El pluralismo cultural a diferencia del multiculturalismo, no fabrica ni


promueve las diferencias, al contrario, tiene por meta lograr la paz
intercultural y por eso rehúye la hostilidad entre distinto”. 45

Satori también aclara las aguas al distinguir entre política de reconocimiento y


acción afirmativa. La meta de la primera es producir y acrecentar las diferencias.
En esa ruta, genera privilegios para los miembros de un grupo étnico, alienta la
discriminación y, al hacerlo, acrecienta los conflictos sociales. No ocurre lo mismo
con la llamada “acción afirmativa”. Con ella, se establece un trato desigual, pero
con el fin de igualar a los ciudadanos, es decir, de integrarlos eficazmente a una
comunidad. (INFORME PNUD, 2004:111)

Paradójicamente --a lo que explica Sartori-- se ha racializado la política en Bolivia,


en base a un discurso, una doctrina, una historia, una cultura, que ha pasado a ser
una ideología, institucionalizada en un Estado étnico constitucionalizado.

“El racismo apenas se dan entre culturas que no se comunican entre sí, ni
entre grupos que no se yuxtaponen ni siquiera parcialmente en el seno del
conjuntos en los que el encuentro se salda necesariamente con relaciones
de inferiorización.

Cuando el racismo es débil, fragmentado, las dos lógicas (del racismo:


racismo discriminador y acción social, por una parte, y racismo
diferencialista y acción histórica por otra) fundamentalmente aparecen a
menudo disociadas entre sí, y no es raro que sólo esté verdaderamente
presente una de ellas; por el contrario, cuando el racismo alcanza el nivel
político, tiende a la fusión, lo que significa también la presencia conjunta de
ambas lógicas, por contradictorias que pudieran parecer […].

Lo esencial es aquí que el racismo no aparece ya común elemento de


movilización individual, ni como orientación de las conductas de unos
agentes en el mercado, sino como un significado central sostenido por una
fuerza política, por movimientos o partidos que acceden al poder del Estado
[…]. Este salto de un racismo difuso a una acción política, cuando se
produce, puede hacer algo más que prolongar determinadas tendencias
espontáneas y genera una dinámica nueva, una radicalización del racismo,
una extensión o una generalización del mismo […]

El racismo de la segregación, cuando ésta alcanzando el nivel político,


adquiere a los ojos del actor una legitimidad que facilita la toma de
conciencia del mismo; instrumento, pero también perversión de las
45
SARTORI, Giovani. La sociedad multiétnica. Ed. Paídos, Madrid, Espña, 2001. Pág (?).
33

relaciones de dominación, asociado a ventajas colectivas –soñadas o


reales--, anclando en las instituciones, el racismo de la discriminación
aparece informado por las exigencias sociales, conflictos, fenómenos de
movilidad ascendente o, sobre todo, descendente […]

Finalmente, a partir del momento en que, de una manera u otra, la violencia


racista es reconocida, aceptada e instrumentada por el poder del Estado, se
franquea un nuevo escalón […]

Pero si por una parte aparece vinculado a la acción social, y por otra a la
acción histórica, el racismo presenta características específicas que nos
impiden equipararlos directamente a la una y la otra, tiene sus lógicas
propias […] que en los casos extremos son susceptibles en desembocar en
proyectos políticos”. 46

De ser así, el racismo esta inoculado en las estructuras institucionales de la nueva


constitución en Bolivia. Como dice WIEVIORKA ya no se habla de inferiores o
superiores, sino de distintos, ni mejores ni peores, sólo de diferentes. 47 (INFORME
PNUD, 2004:117).

46
WIEVIORKA, Michel. El Espacio del Racismo. Ed. Paidos, Barcelona, España, 1992. Págs. 122, 152, 153, 166,
180.
47
WIEVIORKA, Michel. El Racismo, una introducción. Ed. Plural, La Paz, Bolivia, 2002. Pág. 26.
34

Conclusiones

A manera de observación final del análisis histórico y jurídico, de la nueva


Constitución de Bolivia se establece que existen diferencias entre los ciudadanos
de acuerdo a su condición étnica, otorgando derechos a unos y otros de acuerdo
a esa condición.

Por tanto, el etnicismo puede constituirse como elemento disociador y


discriminatorio en la aplicación de la nueva Constitución al otorgar más derechos a
unos ciudadanos frente a otros, creando una institucionalidad estatal diferenciada
para quienes se aplicarán políticas estatales constitucionalizadas e
institucionalizadas de discriminación; constituyéndose en una discriminación étnica
para quienes no pertenecen o no se autoidentifiquen con una de ellas.

Los nuevos paradigmas etnocentristas, valores y conceptos jurídicos e


institucionales creados, han sido creados como un mecanismo ideológico para “la
construcción hegemónica ascendente” del poder en base a una cultura étnica
dominante, que en este caso sería la Aymara, como ordenador del nuevo orden
institucional Estatal. Se ha creado un Estado etnoncacionalista en nombre la
pluralidad de naciones.

Las consecuencias del etnocentrismo en Bolivia es que ha institucionalizado un


racismo de la segregación y de discriminación, y ha alcanzando el nivel político en
la consolidación del proyecto de poder expresado en una Constitución.

Es bueno recordar lo que dice la declaración de la Convención Internacional


sobre la eliminación de todas las formas de discriminación:
“toda doctrina de superioridad basas en la diferenciación racial es
científicamente falsa, moralmente condenable y socialmente injusta y
peligrosa, y de que nada en la teoría o en la práctica permite justificar, en
ninguna parte, la discriminación racial” y “que la discriminación entre seres
humanos por motivos de raza, color u origen étnico constituye en un
obstáculo a las relaciones amistosas y pacíficas entre las naciones y puede
perturbar la paz y la seguridad entre los pueblos, así como la convivencia
de las personas dentro de un mismo Estado” .
35

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