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| 4 cofins OGITRO DE GOPIADO pacdesign:barkd PROFSSON ¢ Macveae YHVOLO APOITE s.: QUGRO DG CROAT : 2s CHNTADERCOLINSER@ED 2251) Gonzalo Celorio Ensayo de Contraconquista TUsQuETs EL barroco en el Nuevo Mundo, arte de contraconquista «La fetta es eldsica y el mar es barroco». Con es- ta referencia ala imagen de algin ertico que cienta- mente se excedié en la generalizacién, José Lezama Lima abre el capitulo dedicado a «La Cusiosidad ba- rroce» de st libro La expresin americana para dejar asentado que el término barroco ha ampliado enor- _memente su especiro semintico: abarca por igual, di- ce, «los ejercicios loyolistas, la pintura de Rembrandt y-el Greco, las fiestas de Rubens y el aseetismo de Felipe de Champagne, la fuga bachiana[..}, la mate- iética de Leibnitz, la étiea de Spinoza. No es de extraiar, entonces, que bajo su signo se acojan las ins insolitas metaforas: alguna vez. le of a Fernando Benitez decir, con su contundente claridad pedagogi «a, que el Popocatépetl era clisico mientras que el xtacethuatl era barroco. ¥ Alejo Carpentier, por su "Jos Lezama Lima a expt american, Fon de Coles Beansnica, Mexico, 198. (Ten fie. 15 parte, tras sostener que enuestro arte siempre fe ba- rroco: desde la espléndida escultura precolombina y el de los c6dices, hasta In mejor novelistica actual de América»? Hega a hablar de «imulatas barrocas en ge- tio y figura y de «barroquismos teliticosy en la in démita goografia americana, Esta amplitud referencial del término barroco nos cexige hacer, asf sea someramente, una revisi6n del cconcepto, para precisar su significacién y determinar su pertineneia al aplicatlo a ciertas manifestaciones de Ia cultura y las letras iberoamericanas que ban si do consideradas como barrocas © neobarrocss, Hay que empezar por decir que los diversos es- tuddios dedicados a la estética barroca no presentan entre sf discrepancias considerables en lo que a las caracteristicas formales de tal estilo se refiere, Por lo sgeneral, coineiden en atribuirle, como propios, algu- nos rasgos tales como Ia exuberaneia, el artficio, cl contraste (luz y sombra, belleza y fealdad, ilusion y desengafio, la ensi6n dramstica, el dinamismo, ia ‘exageraci6n, In sensualidad, la distorsién, etcétera, Precisamente porque hay una aceptacién genera- Tizada de Ia pertinencia de estas cuatidades pueden producirse metdforas tan aecesibles como las de Car- pentier, Benftez y Lezama Lima. Sin embargo, estas caracteristicas formales no constituyen por sf msm 2 Alejo Carpentier, «Problemstca ata den novela ispanor 1H. Carl (compiadores). Fond de Calla Beonmicn México, 1094. Tea fee}. VoL pat 6 luna estética especies, pues ni son privativas del es- tilo barvoco ai dan cuenta, aun suponiendo que el i Yentario fuea exhaustivo, de su eseneia. Habrfa que ‘determwinar entonces el sistema 0 e6digo en el que es- tos elementes a Jos que hemos aludido adquieren su valor, esto es su condicién barroca, Y es en este pun- {0 relativo a o que podriamos Hamar a estructura del arte barroco donde se registran posturas ideoldgicas diferentes e incluso opuestas. La divergencia mas notable tiene que ver precisa- mente con elcardeter estructural o no del barroco con relaci6n al arte clisico, pues tal estilo no ha escapado la tradiciér secular de subordinat los movimientos estéticos al clascismo, que se ha impuesto como pa- radigma del arte occidental. Una importante eortien- te de opiniér, que va de los preceplistas neoelésicos hhasta Benedetto Croce, pasando pot todo el siglo XIX, vio en el bartoco un sinénimo de mal gusto en tanto {que se alejata de los arquetipos elisicos que signs- ton el Renacimiento, De esta actitud participaron, aunque con matices singulares, algunos pensadores dol siglo xx, como Marcel Batallon, Ludwig Plandl, Guillermo Diaz-Plaja, Américo Casteo, Este sltimo, por ejemplo, define el barroco como un paréntesis ‘malogrado e inmaduro entre el Renacimiento y la Hustracién, esto es como una desviacién en el recto ‘camino del clasicismo, Desde que se iniciaron a fi- nales del siglo x1x los estudios especializados so- bre el barroco, este movimiento fue explicado como luna exaltaci6n de los modelos renacentistas. Algunos n

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