LA FILOSOFIA DEL BHAGAVAD GITA por Swami Krishnananda CAPITULO XI Yoga de MeditaciénLA FILOSOFiA DEL BHAGAVAD GITA' por Swami Krishnananda ‘APITULO XI Yoga de Meditacién El Yoga de Meditacién es el tema del Sexto Capitulo del Bhagavad Gita —Dhyana Yoga- como es llamado. Hemos visto que para los fines de la meditacién, es necesario un lugar apropiado, libre de distracciones. El momento que elijamos para meditar también debe ser tal que no tenga de fondo ningiin compromiso o actividad que pueda distraer la atencién de la mente del objetivo de la meditacién. Un lugar adecuado, un tiempo adecuado -ambos son requisitos esenciales muy importantes. Pero més importante tal vez, que el lugar y el momento, es el estado de preparacién de la mente. La mente debe estar anhelosa de sentarse a meditar y no debe sentir ningiin tipo de obligacién, No nos sentamos a meditar simplemente porque en nuestra rutina diaria es el momento asignado para hacerlo; eso seria algo como almorzar sin tener hambre, solo porque el mediodia es el momento de almorzar. No es el momento, sino la necesidad lo que es importante, Si la mente no siente la necesidad de meditar, una simple prescripcién de lugar y tiempo no sera beneficioso. La mayor parte de la geiite siente dificultad en obtener cualquier clase de resultado satisfactorio, porque la mente no esta preparada. {Como se prepara la mente? Aqui surge la pregunta que debe ser respondida por cada uno, independientemente, desde el propio punto de vista. ;Por qué sentimos la necesidad de llevar el Yoga a la practica? Si no sentimos esa necesidad, no deberiamos recurtir al Yoga para nada. Por alguna raz6n hemos sentido dentro de nuestro corazn que el Yoga es una solucién para los problemas de la vida. Todo el mundo tiene dificultades y tensiones y nuestra consciencia de algin modo nos ha persuadido a aceptar que la panacea para todos los problemas de la vida es finalmente el Yoga. Hemos aceptado, por impulso propio, que al fin nadie puede ayudarnos, excepto ese gran principio que el Yoga considera como la ultérrima realidad de la vida. No nos dedicamos al Yoga de Meditacién solo porque alguien nos dijo de hacerlo, o porque algin libro lo ha elogiado; del mismo modo que no nos dirigimos al salon comedor para almorzar 0 cenar simplemente porque alguien nos pidid hacerlo, Sentimos que es necesario y por lo tanto, vamos. Ahora bien, esa necesidad que experimentamos hacia la * Traduccién al Castellano, Martha Castro, Capitulo sacado de internet, afio 2001préctica del Yoga debe ser genuina, La mente es una embustera. Siempre nos engafia de un momento a otro, porque no tiene una continuidad de disposiciones. Las inclinaciones de la mente cambian casi todos los dias. Y no es dificil para la mente quedar insatisfecha con las cosas. Y puede estar descontenta aun con lo que una vez consider algo muy necesario en su vida, No existe algo més dificil de comprender que nuestra propia mente. Nosotros mismos somos las grandes dificultades en la vida, Nuestra ‘mente, como una veleta, se mueve de un estado a otro. Entonces, mientras la mayoria de nosotros puede ser honesto y sincero al recurrir a la préctica del Yoga, también de algun modo estamos sujetos a los caprichos de la mente. “No me siento con ganas”, es lo que frecuentemente observamos. Pero, {por qué no tenemos ganas? {Qué ha pasado? Y solo diremos: “No sé que ha pasado”. Eso quiere decir que la mente no esta bajo nuestro control, Hasta la practica de Yoga puede ser una disposicién de la mente y no ser un convencimiento verdadero nacido de la comprensién —esto es importante de recordar. Asi como existen muchisimas disposiciones de la mente, también el Yoga puede ser una de ellas y hasta puede ser una decisin nada de fiar, ya que puede eclipsarse. Y los problemas que sentimos cuando nos sentamos a meditar se deben basicamente al descuido de la mente, en su raiz, aunque externamente parezca que ha aceptado la aventura, Muchas veces nosotros aceptamos cosas solo en la superficie, y en nuestra actitud basica no estamos preparados a aceptar todo. ‘Ahora bien, la aceptacién del Yoga deberia ser una actitud integra del buscador. No deberia ser solo una actitud superficial a la cual de algin modo se ha sometido en la situacién. Y, como el gran objetivo de la vida es la totalidad de Ia realidad, nuestra preparacién para su realizacién también deberia ser una totalidad de nuestra parte. Por Jo tanto, una disposicién de énimo y una aceptacién parcial no son satisfactorias donde nuestro objetivo es un factor tan importante en la vida como el Yoga. Todo esto ha sido mencionado de una manera concisa en distintas partes de los Capitulos del Bhagavad Gita, 1o que nos da un indicio en cuanto a por qué tenemos estados de dnimo variados y deseos contradictorios, lo cual nos resultaré sorprendente a nosotros mismos. La respuesta a esa pregunta del Sexto Capitulo es que muy a menudo tendemos a ser extremistas en nuestras actividades. No_somos sobrios y arménicos con nuestros compromisos, en nuestras relaciones. Cuando algo nos gusta, perdemos la cabeza, por asi decirlo, por eso qué gustamos. Es una actitud extrema de apego. Cuando algo no nos gusta, despreciamos totalmente ese algo, yendo asi hacia el otro extrem. Nos hemos dado cuenta que es muy dificil mantener un estado de Animo equilibrado; y que es facil ser un extremista mientras que es complicado ser una persona de sélida perspectiva. Ya bien comemos demasiado 0 no comemos para nada; ambas cosas son muy faciles. De pronto decimos: “No voy a comer; ayunaré durante una semana”. Pero controlar el apetito de modo que no afecte ni el cuerpo o la mente o incluso nuestras relaciones y actividades, es algo dificultoso. Mientras el Gita ha enfatizado el factor equilibrio en el Yoga, en un sentido trascendente no ha limitado ese equilibrio simplemente a 1a unién altima del Yo con el Absoluto. Una y otra vez en varias partes se nos indica que el Yoga como equilibrio debe ser adaptado en su aplicabilidad a cada nivel de la vida, incluso en nuestra cocina ybafio, en_nuestras relaciones sociales o vocacién personal, y cosas por el estilo. Aun cuando comemos y dormimos y en nuestros momentos de ocio debe existir_un equilibrio, y no deberia ser un estado de énimo extremo que nos induzca a comer y dormir demasiado, ni tampoco que nos abstenga completamente de las necesidades del cuerpo y la mente. Bl justo medio se supone que es a esencia de la actitud ética -e! justo medio y es tan-sitil como el grosor de un cabello; es una realidad imperceptible ‘| El orden de los factores de modo armonioso es una verdad imperceptible, no visible a los drganos de los sentidos. Pero tenemos que concebirlo en nuestra mente; con algin esfuerzo. El Yoga no es para quien come en demasia o no come nada; para quien duerme mucho 0 no duerme nada; trabaja en exceso o no trabaja; juega todo el tiempo 0 nunca lo hace, eteétera, Estas son afirmaciones comunes pero muy importantes, Los grandes Maestros del Yoga son personas normales, No son individuos extrafios, como de otro mundo, queriendo sobresalir. No existe la presuntuosidad en la practica del Yoga. No es ningéin modo anormal de vivir para distinguirse en el ambiente social, Cuando se es un verdadero Yogi, no se tiene para nada el aspecto de serlo. Cuando comienzamos a tener aspecto de ser un Yogi es porque hay algo antinatural en la préctica. Por qué debemos ‘parecer’? No hay necesidad de exhibicion, El comportamiento normal es una consecuencia natural que deriva de una comprensién de la totalidad de la vida, que es basicamente, el Yoga. Con esta preparacién de la mente hacia todas las cosas, de modo sano, uno debe sentarse a meditar en Ios puntos de la Realidad; el punto particular que debe ser élegido es el Ishta-Devata. Ya nos hemos referido antefiormiente & esta Divinidad, o Devata, Y nuestra absorci6n espiritual en ella con carifio, con amor y suma atencién, es nuestro Yoga con respecto a ella. La mente | est absolutamente firme cuando se halla en presencia de eso que inmensamente gusta_| Cuando estamos en posesion de algo de precioso valor, quedamos totalmente absortos y en estado de éxtasis, por asi decirlo, por su misma presencia, porque es la Divinidad que nos gusta y lo ‘nico que deseamos. Entonces es imposible para la mente en ese momento, pensar en algo mis E {Bxiste algo en el mundo que deseemos tanto que no podamos pensar en otra cosa en el momento de estar en su presencia? Aqui esta el significado de lo que se llama iniciacién enila técnica de meditacién. La eleccién del objetivo o el ideal de la meditacién es muy importante, Se realiza bajo la guia de un preceptor, un maestro, un superior, un Guru. La mayoria de nosotros no es capaz de elegir el ideal, nos movemos de un punto a off, hoy una cosa que esté bien y mafiana otra cosa. Una mente superior que ha pasado a través de ciertos niveles de desarrollo psicol6gico seria una buena guia para la gente que esta en los pasos iniciales; tal persona es un Guru 0 un maestro. Si ya se han superado algunas etapas a las cuales otros aiin no han llegado, se puede transmitir cuales son las cosas a las que hay que atenerse en el camino, La iniciacién en el Yoga es la introduccién de Ja mente a ese ideal o concepto particular del objetivo que puede comprometer totalmente la atencién, para que ello se vuelva la nica realidad para el (aia MWe practicante. La, rn enteramente solo en aquello de lo cual puede esperar todo lo que necesita, Si estamos seguros que algo va a satisfacer cada una de nuestras necesidades, sin dejar nada de lado, entonces no tendremos la necesidad depensar en algo mas, Pero surge una sospecha en la mente, Ia duda de que tal vez no sea fa tinica cosa que necesitemos en la vida, que haya otras cosas también que tengan la misma importancia, 0 por lo menos que de algin modo sean necesarias. Este seria otro modo de decir que no se ha elegido correctamente el ideal; que no se tiene fe en el objeto glorioso elegido como propésito de la meditacién. El [shia u objeto de meditacién, es Dios encarnado en esa forma particular, y si no se confia en Dios mismo, jen qué otra cosa se puede esperar creer? Existe un error fundamental en la misma eleccién del objeto, debido al cual la mente se distrae del punto clegido y pasa répidamente de ese objeto a otto, buscando aquel que necesita 0 solicita. En verdad, no sabe qué desea. La psicologia de la meditacién debe ser dominada antes de sentarse a meditar. El Ser Supremo esta presente en cada objeto. Dios esta en todas partes. Entonces para meditar, puede elegirse cualquier forma personal, 0 concepto, porque Dios esté presente afin alli, Pero lo que es importante no es Ia presencia de Dios en sentido tedrico; antes bien es reconocerla y aceptarla desde el propio corazén, para lo cual solo es necesario un poco de comprensién. La naturaleza omnipresente de Dios no exceptiia nada de su esfera y trascendencia y aquello que creemos que es lo mejor en nuestra vida puede ser considerado como nuestro objeto de meditacién. Todo puede ser un objeto adecuado, con tal que creamos en su idoneidad. resguardado_muy fir la_casa_carcelaria del cuerpo. Est4 tremendamente apegada a las cosas del mundo, Y ja existencia de la mente como una unidad aislada de pensamiiento, consiste en su deseo por la diversidad del fenmeno. Hacer que la mente deje de ser una unidad aislada seria dejar de pensar en los objetos particulates, aislados. La_concentracién_de_la_mente _en_cualquier__cosa_u_objeto_particular, er Re ee a. burbuja estallaria, El martilleo continuo de una sola idea en la mente hard que la mente se eleve, y nos despertemos como de un suefio_a una_nueva_inclinacion consciencia, La clevacion de la mente desde el fenomeno a Ia Realidad es algo como la salida de la mente del suefio al despertar. Existe una diferencia en eso que experimentamos, como si hubiera una diferencia entre el sofiar y el estar despiertos. Debemos saber con certeza que la meditacién pura es el estado en donde la mente no piensa en dos objetos 0 no. considera_dos ideas, Cuando la mente se mueve ‘de una idea a otra y fluye en una corriente de pensamientos, es seguro que nuestra meditacion no es perfecta y que el ‘objeto elegido no ha sido correctamente considerado. Aqui la nica solucién es recurrir al maestro, al Guru. Hay un error, Tenemos algunos deseos no satisfechos, Esto no significa que haya personas en el mundo sin ningiin deseo. Todos deseamos algo; si. Pero es deber del buscador en el camino espiritual sublimar sus deseos de un modo positive. Y eémo se subliman los impulsos es solo conocido por el maestro, porque no se tienen deseos uniformes; cada uno tiene un tipo particular de deseo y ese deseo particular debe ser abordado de modo que convenga a Ja condicion de la cual surgié. Por lo tanto no existe tal cosa como una iniciacién masiva. No podemos pararnos en la calle e iniciar a miles de personas juntas. Cada caso individual es igual a tun paciente tratado por un doctor. No se puede hacer un tratamiento masivo de 4enfermedades por medio de inyecciones 0 pastillas similares. Cada discipulo, cada alumno, es un punto tinieo por si mismo, y el Guru debe prestar especial atencién al estado de la mente o al estado del discipulo en cuestidn, desde el punto de vista del estado en el cual esa persona se encuentra, Cuando surge un problema serio, no podemos resolverlo nosotros mismos, al menos cuando aparentemente esta mas allé de nuestra comprensién. No podemos conocer el misterio de nuestros propios deseos, y los obstaculos en la meditaci6n son solo deseos que no han sido cumplidos. Ahora bien, el cumplimiento de los deseos no supone indulgencia en las satisfacciones, afin cuando algunos deseos deben ser satisfechos de una manera cuando es necesario adoptar ese método. Sino que por lo contrario, ellos deben ser absorbidos y disipados por otras técnicas seguidas en el Yoga. Todo esto es un tema que no se puede leer en los libros. Son secretos y aproximaciones esotéricas, y conectados con la idiosincrasia del individuo particular involucrado. De este modo, la preparacién para el Yoga, tal vez vaya a tomar mas tiempo que la concentracién real de la mente en el objeto elegido. No sirve de pronto decir: “Voy a meditar”. Ese no es el punto. Lo importante es, jestamos preparados? (Es posible para la mente aceptarlo totalmente, 0 estamos reprimiendo algunas necesidades y demandas de la mente enviéndolas al subconsciente, diciéndoles ‘no? cuando ellas piden? Si ese es el caso, debemos ser doblemente cuidadosos en nuestro emprendimiento. Cuando logramos comprendernos y comprender la naturaleza de nuestros deseos, satisfechos 0 no, la mente permanecera firme como Ja lama de una lampara en un ambiente donde no hay brisa. No hay vacilacién. ¥ tal actitud, tal estado de animo, es dificil para la mayoria de nosotros. El Bhagavad Gita en este punto nos dice que cuando la mente esta totalmente absorta de ese modo, sentiremos tal gozo, una satisfaccién tal, tanto placer que ain la peor tristeza de nuestra vida no podré hacer tambalear nuestra mente. La tristeza no existe para nada en ese momento. Todo luciré hermoso y seremos capaces de adaptarnos a cada bendita cosa de la vida. En ese momento, trabamos amistad con todo y todo se vuelve amigo nuestro. Quedamos separados de las fuentes de todo dolor y permanecemos independientes en un tinico sentido, en una magnifica expansién del ser, donde la causa de la tristeza, que es el ego, es superada hasta su maximo alcance, Pero, es incierto que se pueda alcanzar el objetivo de la vida en s6lo una vida, debido a las distintas dificultades y debilidades que son parte de la existencia corporal aqui. ;Puede alguien estar seguro de que el fin del Yoga, el propésito de la vida, puede ser realizado en s6lo una existencia, fisicamente? Una duda surge en Ia mente: ‘Es posible, 0 tal vez no lo sea para mi?’. Arjuna hizo la pregunta al gran Maestro. Supongan que hubiera un discipulo sincero que practica honestamente Yoga toda su vida y que sin embargo no realiza el objetivo del Yoga, y que su vida es troncada por la muerte no habiendo logrado el propésito supremo. {Qué pasa con esa persona? Imaginemos, hemos puesto lo mejor de nosotros en la préctica de la meditacién, en hacer Yoga. Si, maravilloso. A pesar de todos nuestros esfuerzos, no lo hemos logrado y forzados por el Karma que determina nuestra vida, abandonamos este cuerpo. Qué pasa entonces? {Cudl va a ser el destino de esa persona en la proxima existencia?, es la pregunta de Arjuna. La respuesta es muy satisfactoria y consoladora Krishna dice: “Quien realiza el bien en este mundo, ai en la menor medida, no caeréen la ruina”. Ese es el lado hermoso de! Karma, o ley de accién y reaccin. Si bien siempre nos asusta la palabra Karma como si fuera una cadena que nos ata, tendemos a olvidar su lado positive que también es capaz de favorecernos cuando lo seguimos en concordancia con su sistema operativo. Nuestros esfuerzos hacia la practica del Yoga son intentos dignos de elogio que hemos asumido en la vida —que tengamos éxito 0 no es otro tema, De hecho, el Yoga del Bhagavad Gita no tiene que ver con el éxito o el fracaso; estd basado en la actitud que adoptemos en nuestra vida, la sinceridad con la que la hemos asumido y el propésito honesto que nos impuls6. Dios valora nuestra hhonestidad y sinceridad y no el éxito posterior que se pueda o no esperar. Todas las condiciones estén en nosotros y no afuera. Una persona que deja el cuerpo antes de lograr la meta del Yoga, renaceri —pero bajo circunstancias favorables. Lo hara bajo aquellas condiciones en las cuales las primeras practicas podrén ser aceleradas, Naceré de nuevo en circunstancias donde ira encontrando coyunturas propicias a su alrededor que no obstruiran su practica. La memoria del pasado se hard presente a su manera, Esa memoria puede no siempre ser un proceder consciente de la mente. Muchos de nosotros no tenemos memoria de nuestras vidas anteriores, pero cada uno siente un impulso hacia un fin particular, si bien ese impulso no es inteligible en el nivel consciente de la mente. Ese anhelo profundo que sentimos dentro de nosotros es la fuerza de nuestras practicas y aspiraciones anteriores. La mente no es solo la manifestacién consciente de esa fuerza; ésta se halla profundamente inmovil en el subconsciente y muchos mas profundo en el inconsciente, y asi sucesivamente. Entonces, una persona que renace de este modo se siente empujada hacia la misma practica que no fue concluida en la vida anterior, y todo lo que la practica requiera le sera provisto por la misma ley de las cosas. Y no habra sufrimiento debido a las bendiciones derivadas de los méritos obtenidos anteriormente. Hemos sido muy sinceros y honestos en nuestros esfiuerzos hacia el Yoga, y eso nos sostendra, el Yoga no puede defraudamos. El Yoga es la madre mas amorosa de todas las madres del mundo. También el gran Maestro, Krishna, nos dice que se puede renacer como hijo de un Yogui, y, ,qué otra cosa puede ser una bendicién mayor que eso para un buscador espiritual? El temor a la destruccién o Ia pérdida del esfuerzo no existen. El Quinto Capitulo concluye diciendo que Dios es Amigo y Bienhechor de todos. Lograremos 1a paz de stro, Amigo, el Gnico Amigo y el mas verdadero de todos los amigos. Cuando nos volvemos 2 ET buszando ayuda, jcomo puede Hl abandonarnos, desampararmos y olvidrn03? Nosotros podemos olvidarnos de El pero El no puede olvidarse de nosotros, porque lo Real es mas poderoso que lo aparente 0 ilusorio. Nuestras confusiones son movimientos de la mente hacia las sombras y las no realidades. Pero cuando hay un movimiento sincero hacia la Realidad, aunque sin una correcta concepcién de ello, trabajaré a su propio modo de forma milagrosa. Los caminos a Dios son misteriosos en si mismos y por lo tanto, la sinceridad, en cualquier medida que la ejercitemos hacia Dios, cualquiera sea nuestro concepto de Dios, nos liberara en la vida futura. Y no simplemente eso, en esta misma vida nos liberara. Krishna dice que ni en este mundo ni en la vida futura habra afliccion para esa persona. Las dificultades son solo en el comienzo, cuando uno siente estar en el mismo infierno. Pero después, uno ve los rayosde la luz celestial brillando en el propio rostro. Todo es dificil y arduo y desagradable al comienzo. El Gita nos diré después que las cosas que finalmente son buenas parecen desagradables al principio, pero que luego nos depararén el fruto de una mayor satisfaccion, Los padecimientos en la vida, los suftimientos a lo largo del Yoga, son inevitables en cualquier tipo de practica espiritual. Cuando practicam: itacion estamos quitando los escombros de nuestra personalidad. Es como si barriéramos nuestro cuarto el cual no ha sido aseado por afios, sacando las telarafias, etcétera, Y cuando terminamos de limpiar, notamos que el polvo nubla nuestros ojos y que todo parece peor de lo que era antes. Pero al momento el polvo se disipa, desaparece completamente y nos senti ices. Asi, esos problemas y_dificultades, padecimientos y tristezas y dudas, las.agonias que aparecen en el curso de la préctica del ‘Yoga, son consecuencias inevitables de nuestro esfuuerzo al limpiar la mente de toda la suciedad depositada alli durante aiios y_encarnaciones, Pero un dia glorioso Tlegard, estaremos felices esperando la bienaventuranza que es sumamente divina. Quien cree en Dios y confia en Dios tomando refuugio en Dios, sera protegido por Dios. “El no Me perdera ni Yo lo dejaré”, dice el gran Maestro. Quien se ha refugiado en Dios jamas es abandonado por Dios en ninguna circunstancia, y el sosiego, el sostén y la MMuRKESIG do odo po seria los futos de la sinceriad y la honestidad. A lo que estamos Iamados es a ser honestos de corazon y a no tener en lo mas minimo una actitud dual. No estamos jugando con Dios, y no Lo estamos examinando ni esperamos nada de El con fines egoistas. Que esto quede claro en nosotros, y asi el flujo de Su Gracia descendera instanténeamente sobre nosotros, porque Dios es Omnipresente y Omniabarcante. “El ser armonizado por el Yoga ve morar a Atman en todos los seres y a todos los seres en Atman y a Atman ve por doquiera.” “Quien por doquiera Me ve y ve toda cosa en Mi, no perderé nunca en Mi el sostén ni Yo dejaré jamas de sostenerle.” “El yogui que afirmado en la Unidad Me adora residente en todos los seres, vive en Mi comoquiera que viva.” “Yogui perfecto es, joh Arjuna!, quien por la identidad de ‘Atman ve igualmente todas las cosas, ya placenteras, ya aflictivas.”