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COLOCADOS A fm ELINCOMODO! AMIGO DESTALIN WASHINGTON ee) eye sli a , a Reon Pree, et Ms SUL, mn 3 a y Pd @T) | )=|8)(= rs Fl SU POLEMICA ACUSACION A LOS CONQUISTADORES DE AMERICA éPOR QUE CAYERON? DE LAS PIRAMIDES DE EGIPTO A LAS TORRES GEMELAS MARCEL BORRAS NORIA PRIMS ORIOL PLA BRUNA CUSf yeciatde LUISA GAVASA 'TERELE PAVEZ FERNANDO ESTESO JUAN DIEGO del director de PAN NEGRO AGUSTI VILLARONGA una produccién de ISONA PASSOLA En el trasfondo de una guerra, estallan las pasiones. Sra TaITY ARAN AVIDLY SUYNIe rn ad fe rt a eran) 3 DELAS CASAS ee ad Pela Ry Peete ect eet ei od Ce ea) CCEA ok Roo Pune ee rd ee Franpioecsvai IPN = \ Es 64 FACLOSESTRUCTURALES EVuipeentut esse somet esas ARTICULOS “Colocados” Universidad Complrense de Madi El hombre que sabia demasiado que. Pero cuando el geor Tleg6 al poder, quiso olvid do vineulo con su anti Tost ey period, Historias mente por ¢ stridor y periods, Rosalind Franklin Fue la mujer queno gané el bel por la estructura cerlo tanto com Crick o Wilkins 1, periods, SECCIONES 08) Primera plana CAMBIO DEPAREJA? Estados Unidos se ha acereado a Taiwan ola China comunista cen funcién de sus intereses. 6. Pca Rey, periods. 12| En breve 16| Enel foco 20| Lugares -Porelojo de una aguja. GENOCIDIOOLVIDADO = Veldsques desaparecid. Elde los armenios fue el primer 22| Correo -Mihermano el Che. sgenocidio del siglo xx, cuando . nisiquierala palabraexistia. 86 Agenda 96| Cine Turquia todavia niega el horror. Joris historiador y periods. 90| Libros 98| Foto con historia . = BlerendeLenin. YOLLEGUE PRIMERO 18! Anécdotas -Laguerraalemana. Los exploradores y los polos. 48-48, 50.5 54,59, 62. ads Cacia Crditosfotogrticos: Ac Agencia de Fotogai:p, 2.4 AGE Fotstock Archivo Foti pS 25,34, 3 PRISMA Parner Acadénico Peeacones haztece WIESE Grupo Planeta ap 4 IV ENCUENTRO PLANETA RESPONSABLE Foro de referencia de empresas y expertos comprometidos con la mejora del planeta a través de la innovacién, la sostenibilidad y la RSC Barcelona, 27 de Febrero 2017 Aula Magna-Campus Norte, IESE Business School @ planetaresponsable.com ‘wy #PlanetaResponsable Gacciona Gat ECOALF ethic “abertis 'AVAS Nestlé §SIGNUS TOYOTA Mv “Mugao (e)95°47-au ORTA EXCLUSIVA . _ 12 REVISTAS POR a ae wis a i aL VAT OEE Le H} ig Ee i JUL CER erat += | ismapublicaciones.com es co mtt_—<_ “ ETON DIRECTORA lel Moxie REDACTORA JEFEEno Reet REDACOON Fan M Hoyos MAQUETAGON Sena anova, Mecaes Saran la Pes (ec) DISERO Fer ick (2008) ==— POLEMICO 8054 Baceora === ALEGATO vwamaepiecorescon Ee ciate ian «la préctica ala teoria. Asi construyé su alegato en defensa de los indios PRESIDENTA Lave ilcsLxa Bartolomé de Las Casas. El frale dominico denuncié las excesos de los espa DIRECTOR GENERAL Aer eds Comat foles en América desde su experiencia directa. En sus primeros tempos como DIRECTOR FACTORIA PRIMA Sorin . : iia wacacia rete ie ae buscador de oro habia abservado aquellas abusos. Mas tarde, como evange. Dit EVENTOS YPATHDOHOS co aad aad sv contra els. Su eres contra los conqutadoes fe ton fespovsna.e EDTA ne Fro vehement que la historia rs conservacra lo comer en uno de los inepradores dela Deacon a TE et leyenda nase, Ors en cmba,cnsieran a Las Casas in pone de bomen oc derechos humanos. El debate sigue casi cinco siglosdespts Agnes res Sibinla defers napa del rund inigenalo converte enun roe delat haa Cote rt su rayeciora muestra contedcones roi dun foe desu temp, Ena 7a de os descubrivientos, Bartolomé de Las Cass eco a foo el ve ye revo Sete, ‘murda Esa sin de primera manole peri conce cerca os abuses contra os ceomment viene ratios arercane. Sr embarga, su pesariento pamaneci apegado ala takin es iaamnale coléstica que domind la Edad Media. Sus soflamas contra soldados, encomenderos y conse nena Imercaderes rozarnel nati, mientras excp alos scesvs manarcasy svi can ah a rd cn fdeidad aiden cstano frente als credospagaros No ostante, como aa en as Sinninghe paginas de est nimero Bernat Herne, uno de sus mejores bidgrafos, el domiico Pecoed tle (eaters “gané la batalla de la opin publica coetdneat. te 565 WO 850 Con su testo dave a Brevarectn de destruc delas nas, etcada al rnc hens Feie tuo Fle I Las Casas pretend concn alarnoarla des aritraedaes coors cerrtidas polos conquistadors. Aqua br, qu tna fiaatra he geo dentro y (BLB7E*-FIEG, ISSN OO-ZTA, OL fuera de nuestras fronteras, puso en aviso a la Corona, que, si oe bienestalect unas medidas proectores paral poblcn in Gress tere eos {gena, tuvo siempre presentes los intereses derivados de aquella — ee fuente de riqueza que suponian los nuevos dominios. eeeeenee penton Shnmetwahis ext sete = = ae uel Margarit drctora Para opinar sobre la revista puedes escribir a redaccionhyv@histor PorTaDA Fay Bone Sigmnosen (EJ historinida Table pone en GG teeto0kconistorayvida CS RD oes 2 cinio PRIMERA PLANA LAPRESIDENTA de Tin Ti poteléfonocan Tumpel pasado 2 wer, Fable hoe ¢CAMBIO DE PAREJA? Como presidente electo, Trump sorprendié al mundo al establecer contacto con Taiwan, y no con China. Pero EE. UU. siempre se ha acercado a unou otro actor asiatico en funcién de sus intereses. ¢Cual ha sido la evolucién? GONZALOTOCAREY, PERIODISTA Ieierre de esta edicién, la pren: sa mundial divulgaba la noti- cia de que, a petici6n del pre sidente chino, Xi Jinping, el cestadounidense Donald Trump aceptaba resperarel principio de una sola China, Pero lo cierto es que, desde el mo ‘mento en que supo que iba a ocupar la Casa Blanca, Trump ha golpeado a Pekin donde més leduele:en susrelaciones con ‘Taiwan y en sus ambiciones expansionis tasen el mar del Sur de China. Los dos asuntos estn totalmente ligados, por supuesto. China necesita asumir que su dominio de Taiwan es cuestién de tiem: poantes de desplegar toda la potencia de suarmaday controlar islas més distantes. Lasoberania de esos diminutos erritorios estratégicos (por su posicién geogréficaen las vias de paso del comercio internacional y porque se os cree rodleados de inmensos yacimientos de combustibles fésiles) ela disputan a Pekin la propia Taiwan, Ma- Jasia, Vietnam, Filipinas y Bru ‘Trump no se ha limitado a hacer gestos equivocos, como sus predecesores, En di ciembre llamé por teléfono a la presiden- ta taiwanesa, pocas semanas después de ganar las elecciones estadounidenses, algo que no habia ocurrido desde 1979, Enenero afirmé que todoestaba pendien- te de negociacién con las autoridades co- munistas, incluida la politica que habia aceptado hasta ahora que Taiwan y China pertenecian al mismo paisy queno podian establecerse relaciones diplomaticas con Sy nl LAPELEA DE CHINA, Y TAIWAN EN ELMAR uasreclamadas O parchina i [Oy Aanas reclamadas por Taiwan 2 spe ws aes A? Océano invico a MALASIA Jos dos al mismo tiempo, Pocos as des- pues, elsecretario de stado, Rex illerson, yelportavoz de la Casa Blanca, Sean Spi cer, afirmaron que Estados Unidos no to leraria mas incursiones de la marina china en las islas en disputa. Para entender el viraje que quiere impo- ner Trump y el motivo por el que las au toridades del gigante asitico han protes- tado y deslizado sus primeras amenazas, hay quedar un paso atrésy recordar cémo surgié el consenso diplomético que esta cuestionando el estadounidense Politicas pro-Taiwan ‘Durante la primera década del reinadode ‘Mao, en los afios cincuenta, China y Esta- ists ae cron uneruen constnn tes friciones. Las tres grandes causas fueron la alianza entre Fen y la Unién ‘Soviética, el apoyo militar yeconémicode Mao a fuerzas enemigas de Washington ela guerra de Corea (1950-5) y eles paldo de la Casa Blanca y el Pentigono a Jas autoridades nacionalistas chinas del ‘Kuomintang desde que estas perdieron la guerra cv contra Mao en 1949 yse ex Heron en ila de Taiwan Bee respldo sehizo evident tanto excl caapo diflondcen come ene! parame te militar. Diplomaticamente, las autori- dades de Tapéireruvieron la representa tidn de Chinaen el Consejode Seguridad de Naciones Unidas hasta 1971. Militar mente, Washington acudié en ayuda del ey we COREA Mgr del Sur OcEANO PACIFICO Is. Diaoyu AN ds Ens FILIPINAS Is. Spratly “ARRIBA, Chiang Kai-shek, ide dela Chins nacional con undiglomstco yun poltcnestadounidenses.ABAUO, Esenhowerdevsaen Tipsien Kuomintang en las dos crisis del Estrecho de Taiwin que estallaron en los afios cin- cuenta, Enla primera deellas (1954-55), el presidente Dwight Eisenhower permi ‘6 que los nacionalistas invadieran unas {slas prdximas a las costas de China con- tinental con miles de tropas, firmé un tratado de defensa mutua con ellos e incluso lleg6 a amenazar al gigante asi tico con un ataque nuclear. En la segun- da, en 1958, ante la provocacién de Mao, Ja primera potencia mundial demostré con st ejército -protegiendo el espacio aéreo y compartiendo parte de su arma. ‘mento con los nacionalistas- que estaba dlispuesta a cumplirel tratado. Elenemigo comin El compromiso cerrado del Pentégono hacia Taiwan se debilité a principios de los setenta, el momento en el que Pekin y ‘Washington empezaron a alinearse en contra de la Unién Soviética. China leva- badécadas teniendo problemas con Mos ci, coneretamente desde que Nikita Jrus- cchov denunci6 las terribles précticas de Stalin en 1956 (las autoridades chinas calificaron, en 1961, el comunismo de su vecino del norte como el producto de unos “traidores revisionistas”).Los sesentafue- ron una década en la que los rusos boico tearon la industrializacién maoista del Gran Salto Adelante retiando a sus ase- PRIMERA PLANA sores de la noche ala mafana y en la que Jas tensiones escalaron, en 1969, hasta enfrentamientos de tropas a pequefiaes- calaen la frontera. Yaera oficial: Mosct y Pekin eran potencias enemigas. ‘Aqui es donde entran en escena las ma- niobras del presidente estadounidense Richard Nixon y Henry Kissinger, su con- sejero de Seguridad Nacional. Las confron- taciones ms 0 menos directas con el gi- gante asiético eran cosa del pasado, y ahora la gran prioridad era doblegar ala Unin Soviética. Kissinger realizé su his- t6rico viaje secreto a China en 1971, y, pocos meses después, Taiwan ya habia perdido su primera batalla: tendria que abandonar su sillén en el Consejo de Se- guridad de Naciones Unidas. Lasegunda derrotano tardariaen produ- cirse. En febrero de 1972, fue Nixon el que se desplaz6 a China. Firmé entonces el primer Comunicado de Shanghai, que abria formalmente las discusiones entre los dos sgobiernos sobre cuestiones como la inde- pendencia taiwanesa sin contar con la presencia de los nacionalistas. Menos de dos décadas después de amenazarloscon la devastacién muclear, los comunistas se convertian en interlocutores preferentes. Latercera derrota fue la que perfilé el mar- code elaciones queamenaza con destruir Trump. En 1979, e presidente estadouni dense Jimmy Carter acepté reconocer diplométicamente a China, establecié el ELPRESIDENTEestadounidense Non saludo alehino Moo Zedong el 23 fetrer de 1872. POCO DESPUES DE QUE KISSINGER VISITARA CHINA, TAIWAN PI principio por el que se consideraba que CChina y Taiwan son el mismo pais, finaliz6 las relaciones diplomaticas con Taiwan y anulé sin mésel ratado de defensa mutua. Loquedicen Trump y los miembros desu administracién es que se puede prescindir deese marco si las autoridades chinas no hacen concesiones comerciales. Este giro detimén tiene su origen en lo que empez6 a ocurtir desde el preciso instante en que Carter conereté aquella tercera dertota. Cambiaron las sensibilidades del Partido Republicano, cambiaron a visiény la na- turaleza del conflictoentre Chinay Taiwan yha cambiado, finalmente, el equilibtio de poder entre China y Estados Unidos. Grandes transformaciones Los republicanos, que habian apoyado sin entusiasmola politica exterior de Kissinger y Nixon, movilizaron con éxito al poder legislativo en 1979 para lenarel vacto que habia dejado el tratado de defensa mutua con Taiwvén. Se reemplazé con un compro miso que garantizaba la ayuda militar LUNSOLOADO tananés vila desde Kinmen sdatelatecra iss de Esvech, OSS, cestadounidensey conferia aladelegacién taiwanesa en Washington un rango casi ‘de embajada. Fin 1982, con Ronald Reagan cerila Casa Blanca, Estados Unidos asegu: +6 publica y oficalmente a sus amigos en ‘Taipéi, entre otras cosas, que su posicién sobre su soberania no habia cambiado. ‘También dejé claro que ni negociarfa con ‘China la posibilidad de dejar de vender armas a Taiwan ni habia determinado una fecha para interrumpir los envios. A principios de los noventa, el enfrenta miento de China y Taiwan eomenz6 a verse en Estados Unidos como una lucha centre tirania y libertad. El imperio sovié tico se hundia, revelando el desamparode su poblacién, y en el gigante asiatico se recrudecia la represién tras las protestas de Tiananmén de 1989. En Taiwan, en cambio, se suspendia la ley marcial y se abrian poco a poco las instituciones a la proteccién de los derechos humanos y a laparticipacion de la oposicién. Entre 1995 y 1996 tuvo lugar la tercera crisis del Estrecho, con el lanzamiento de ‘misiles chinos sobre las proximidades de Taiwan para condicionar el resultado de las elecciones locales. Bll Clinton ordené el mayor despliegue estadounidense en Asia desde la guerra de Vietnam. China salié derrotada porque no solo no pudo favorecer alos candidatos que consideraba afines, sino tampoco contener la culmina- cién de la democratizacién del pats y el ineremento del sentimiento independen- tista. En el afio 2000, el Kuomintang perdi6 pacfiamente y por primera ver. las elec- cones presidenciales frente a una forma: cin que no deseaba a reunificacin Elsiglo xxt ha desatado la tercera ola de cambios: la que ha alterado el equilibtio de poder mundial. El gigante asitico ha emergido como segunda potencia y rival natural de Washington tras la implosion soviética, ha arrebatado millones de em: pleos industriales alos paises desarrollados ha iniciado el establecimiento de su es- fera de influencia en el mar del Sur de China. En paralelo, Estados Unidos ha perdido millones de empleos industriales yse ha debiltado internacionalmente con sus guerrasen Irak y Afganistan, larecien tecrisisfinanciera global que estallé en su suelo y una reaccién de su gobierno fre- nada por la incapacidad de republicanos y demécratas para llegar a acuerdos Todo ello ayuda explicar por qué Donald ‘Trump ha decidido utilizar la baza de Tai wan para amenazar a China, No es una pasién irracional o una frivolidad: es una estrategia arriesgada para contener su expansién, amputarle parte de su poder comercial yrecordar a todo el planeta que Estados Unidas es capaz de reaccionar con rapidez y sigue siendo el amo del mundo. Trump no es una anomalia hist6rica, sino una respuesta a la historia reciente del declive de su pais frente a China. m EN BREVE Po UNA DE CUEVAS Y LADRONES Los arquedlogos descubren una nueva cueva de manuscritos del mar Muerto ‘asi unmillarderollosdepergamino, ide entrelosafios250a.C.y664.C., hallados a partir de la década de los cua renta del pasado siglo en una serie de cuevas de Qumran (Israel). Muchos de ellos son copia fragmentadas de ls libros del Antiguo Testamento, Hasta ahora se erefa que solo. gado estos roll, pero existe una duodé- cima, Acaba de encontrarla un equipo de arque6logos el Instituto Arqueolégicode a Universidad Hebrea de Jerusalén y de Ja Universidad Liberty de Virginia. No se han hallado rollos en los nichos de su interior, pero sf restos de pergami en preparacién parala escrtura, as{como fragmentos de los tarros de cerdmica en aque solian guardarse. Un par de cabezas de piqueta de los afios cincuenta, escon- didas cerca dela entrada para su uso pos- terior, han dado a entender que la cueva fue saqueada en esa época, mEnpaRevet | ‘os manuscritos del mar Muerto son ? Capsula nm del ees et ee ocr ey een pee ere Bae ae ce ee os ee trite, a frase tao on . peepee Try ee enim ier ws pe eee eres Seah pte oiee f tes ae sehr ge Sire es ora ae a Ladi 8 oe oie es eset Fi Ais ee te eR » ° «and the Wolf chewed up the children and spit out their bones .. But those were Foreign Children and it really didn't matter.” w7 ark “America first” ? Ongase ala cola... ELLEMA DE DONALD TRUMP NOS DEVUELVE AL AISLACIONISMO PREVIO A LA Il GUERRA MUNDIAL ECREYERON LOS nortearericanos al presidente FanklnD.Roosevet cuandoles do que no ican a combatic ala quera en Europs? El mandtarioutizaba la retérica pacifist, pero su aproximacién a la Gran ‘Bretahia de Churchill aciapresagiar cue, tarde o ternprang, ivolurariaa su pais en la lucha contra Hitler. Mientras tant, exis tia un sector de estadounidenses patios del astacionismo radical. Elcaricaturista Theodore Geisl, conocido ‘po el seudénimo Dt Seuss, areretiécon- tra los que se desentendian del fascismo. Enestavineta,una macreleea sushios un ‘cuento titlado “Adolf el Lobo’ en alusién directa al Fuhrer. La mujer explica que e! ‘temibleanimal se ha comida a unos nits, ‘escupiend sushuesos después, “peroeran ‘iflos extranjers,asfque noimportaba’ teslogan que luce en su vestido, America first “América primero”), simboliza sus ‘omiccones de tintes xenéfobos. Eldibujo de Theodore Geisel se public en «el periédco reayorquine PMel’ de octubre de 1941, Poco mas dedos meses después, el ataque japonés ala base americana de Pearl Harbor hizo insostenble el aislacio- rismo estadouridense. mi... Joya en el rastrillo No se ha podid confirmar an, perolos in cicios apuntan hacia John Braham. Paseaba José Antara Fernvez Malina por un me Calo de Milaga cuando suoje de perio y coleecionista recayé en una religula sorpren dente. Se trataba de un cascode piloto bri- tanico de a Il Guerra Mundial en perfecto estado pore que solo tuve que pagar 15 eu ros. Una vez en casa, Frrénder Moina en ‘contré en suinterior un documento doblado con las iniciales JR... y una elacion de las distinciones otorgadas al aviador. Sun vestigacién hallevado al perito espaol a creer que pueda tratarse de Brahar, uno de ls pilotos mas condecorados de a RAF Acasa, por favor 1 Museo Van Gogh de Amsterdam rincor poraeste mes a su colecign los dos cus 205 del pintorneerlandés que fueron ‘bados de sus istalactones en 2002, So lida de a iglesia de Nueren y Vista dela playa de Scheveningen, Una operacign de ia pola alana contra la Camara fa ma fia napaltana en la poblacién de Caste larmare dl Stabia dio casunmente con as cobras a finales del pasado ao, Coro parte de un acuerdo con el Museo Van Gogh, han estado exouestas hasta ahora enelMseo & Capocimonte de Népoles (abs) Lo quele faltaba Entre las multiples asunciones que se han hecho a olargo dela histriazobre su der tidad, personalidad y estado de énimo,fal- taba aribuirle una sis. Estaes la ltima teoria sobre La Giocona, pinta por Leo- ‘arde da Vinca principies de! siglo xa y ‘onservada en el Louvre. Un crtcobriténi- co dearte ha encontrado documentos que prueban que Lisa Gherardni compré “agua de carol entonces empleada para tratar enfermedades de transmisin sexual como lass. Aunque, recanace el crc, podria hhabera adquirdo para ota persona, EN BREVE | favorito e Hitler S.COSAS QUE TAL VEZ NO SABIAS DE KARL MAY ESTE MES se cur len 17S ahs de nac: miento de Karl May (18422912 elescrtor de novelas del Oeste co su fan, Te expicarros algunos este superventas. @ Ibe para maestro de escvel, per los 20 ylos 32 fos entry salié cle por robos y fraudes. Su inventiva quedé de ‘manifesto en las ocasiones en que se hizo pasar por pola o médica, @ En una delat sa de abibloteca, deci is esertor. Al @ May volié a sus excesos de fanta strauise un dotarado existent. @ Enirelos seudénimos que empl, se cree aque el de Capitén Rambn Diaz dela Escosura se nspcben Patricio de la Escosura (1807-78, rmltar y autor roméntico espafl que Fue cllomatico en Been en 1872 @ Los ectores de May se erpapaban tanto de sunaratva que ke escribion como sifue- se el protagonista de @ Encasiningin caso vsit6los lugares que describia en suslitros. Recuria ala imagina én, antiguos atlas y guias de vise. @ Aunque pueda haber alguna frase veato Fi contra varios grupos énicosen su rropuededecrse que May radalesoreligiosos. Hitler no tomé nota, @ Otro gan fan de May fue Albert Einstein, @ En 1990 se 15728 Karimay 26 un asteroide como su honor mE. VSN e A eT iconu ro iere(oXe(a Lm Uela(e-eCel ual Oe a oe eC oy Hasidoconstantementeparodia- de ec : eC sees i Poet eec sce Perea tcetta es i ee eT ere LCT: bad lel Regionalismo, corrien- tun coneurso del Art Institute de Chi: a por Bn ado del arte ee omer ee eee sy Priester Bees Meee earn Fi sror COMO ERALA POLONIA OCUPADA POR LOS NAZIS Descubre con nosotros, guiado por los mejores expertos, desde la realidad diaria del gueto de Varsovia hasta el horror del campo de Auschwitz, donde mas de un millén de personas perderian la vida. DEL 28 DE ABRIL AL 2 DE MAYO GENOCIDIO La persecucion del pueblo armenio por parte los otomanos fue el primer genocidio del siglo xx. El estado turco contintia negandolo. CCARLOS JORIC, HSTORIADOR YPERIODISTA ascifras hablan por s{solas:alre- dedor de un millén de armenios fueron exterminados por el go- bierno otomano en 1915. Las extraordinarias dimensiones de esta masaere fueron las que més tarde inspiraron aljursta Raphael Lemkin para acuiareltérmino “genocidio”. inembar- 0, pesar de las evidencias y el cada vez ‘mAsamplio teconocimiento internacional, ‘Turquia sigue negando que la persecucion ue sufi el pueblo armenio fueraun“ac- toperpetrado con laintencién de destruir, total parcialmente, aun grupo nacional, érnico, racial oreligioso”, Su postura oficial sigue inamovible: ue una tragedia ocurri- dadentro de un contexto de guerra, justi- ficada porla sublevacién de los armenios enalianza con los rusos, yen la que hubo victimas por ambas partes Dos brutales precedentes @Por qué se produjo este genocidio? Pa- ra entender las causas hay que remon- tarse a finales del siglo x1x. El Imperio ‘otomano, del que formaba parte Armenia, seestaba desintegrando. Tras su derrota ena guerra contra Rusia (1878), los tur- os perdieron gran parte de sus posesio nes balesinicas. Esta debilidad fue apro- vvechada por la diseriminada comunidad armenia (son cristianos y tienen su pro- pia lengua) para exigir reformas. Lasreclamaciones no fueron bien recbidas por el sultan Abdul Hamid Il. Temiendo tuna insurreccién y una alianza con Rusia, el monarca convoeé al Ejército y, entre 1894y 1896, perpetrd lasconocidas como “masacres hamidianas”, una campaiia de represién en la que fueron asesinados alrededor de doscientos mil armenios. Fue el primer aviso de lo que estaba por Iegar. El segundo Fue en 1909, cuando se reprodujeron estos ataques avivados por uncreciente clima nacionalistae islamis- ta entre a sociedad turca. La desastrosa entrada de los otomanos en la Primera Guerra Mundial, que se saldé con una hhumillante derrota ante los rusos, fue el detonante de la masacre. Marchas dela muerte El gobierno otomano, liderado por los Jévenes Tureos (el partido nacionalista que habia depuesto al sultén en 1909), acus6alos armeniosde apoyaralastropas elzar. Como represalia, puso en marcha un plan de limpieza émnica. Primero ex- puls6alos oldadasarmenios dl jército, confinandoles en campos de trabajo. Lue. goencarcelé yejecut6 alos iderespolit- cos yculturales. Y, por sltimo, comenz6 con la aniquilacién del resto de la pobla- cin. Centos de miles dearmenios fueron obligadosa abandonar sus casasen direc- cidn a los desiertos de Siria e Irak. Les forzaronairapie, sin apenas provisiones ysin ninguna proteccién frente a las agre- siones de bandas paramilitares, poblacién local y los propios gendarmes que los vi silaban, Aunque se le Ilamé “deportacién temporal’, en realidad fueron extenuan- tesmarchas en durisimasccondicionescon elfin de provocar la muerte. Lapersecucién de los armenios recibié la atencién de las potencias occidentales. Denunciaron los hechosyy, una vez termi nada la guerra, organizaron una campaiia deayuda alos supervivientes. Norteamé- rica, Francia y la Unién Soviética fueron Jos principales destinos de la diéspora armenia. También intentaron juzgar estos crimenes. Pero sin éxito. No llegaron aun acuerdo para establecer un tribunal inter- nacional, niconsiguieron que os otomanos Jjuzgaran convenientemente alos respon: sables (habfan huido, asi que solo pudie ron condenarles in absentia) Ante esto, los supervivientes decidieron tomarse la justicia por su mano. En solo tres aos, los principales responsables de Jamasacre fueron asesinados porpistoleros armenios. Mas adelante, en la década de Jos setenta, descendientes de estos super vivientes findaron el Ejécito Seereto para Ja Liberacin de Armenia (ASALA, por sus, siglasen inglés), un grupo armado de ideo- logia marxista cuyo objetivo era obligar al gobierno turco a reconocer el genocidio, indemnizar a las victimas y ceder parte del erritorio que histiricamente pertene- ciaia Armenia, Entre 1975 y 1991 come- tieron varios atentados (dos de ellos en Madrid), en los que asesinaron a diplo- Imaticos turcos y varios civles. La iltima, pelicula del director francés Robert Gué- diguian, Una historia de locos, de préximo estreno, se inspira en uno de los ataques, que en 1980 maté a dos personas hirié al periodista José Antonio Gurriaran. ‘Tras el fracaso de la lucha armada, los a- ‘menios siguen bregando por el reconoci- rmiento del genocidio a través de la via diplomatica. Alemania, que lo reconocié have unos meses, ha sido su tltimo éxito, E1 Estado espafiol elude la cuestién. a ANECDOTAS LA HISTORIA MAS INSOLITA CGLORIADAGANZO, HISTORIADORA TRIUNFOEN CUATRO FASES Peete Due ene eis ROMPETECHOS EN FRANCES Ne ee eed a - peerings “CL MALVADO DESCANSA ALGU ere erestirs § NAS VECES; EL NECIO, JAMAS”. Ecolcarveecemesirianmneuetgnl sé Ortega y Gasset (18851955), filésofo Seer ta ¥ escritor espafiol. ee ee Cee eee ete ere Piet eee ee et ee tetas El mejor amigo... «= DEL HOMBRE se dice que ese perro. La frase bien pudiera habérsela atribuido Gui- ermo de Orange (1533-84). Fueenlanoche del 11 al 12 de septiembre de 1572, en la ciudad belga de Mons, ctuando, de noche, lostercios asaltaron el campamento y pene traron ensu tienda. Elestatider estaba dor ‘ido, yno se habria percatadodelasituaciin de no ser porque su perra, una spaniel lla- ‘mada Kuntze, le despert6 con sus ladridos. Desde aquel dia amas se separé de ella.m LA CIFRA 4.862 bisontes aseguraba Buffalo Bill as46197) {que habia abatido en una sola temiporada de caza. iToma sinceridad! ELREY FRANCES LUIS XIV (1638-1715, abajo) escribié un madrigaly se lo doa leer aun cortesano, el mariscal de Gra- mont, sin deci quidn era su autor. Tras lero, el improvisado citico no tardéen excamar: “Sit, exe madrigals el més ero debo deciosquehe sido to”. Apurado, el mariscal intent6 arreglar el desaguisado: “;Ah Sire, cuanto lo siento. Dédmelo nuevamente, no he tenido tiempo de juzgarlo bien”. Pero el rey se negé: “De ninguna manera, Lo que importa es la primera impresién”. « LA Pan éVALIENTE? rea Ue ele ae alae les L a Peer tier aerate cae sitvieron una sopa que mis parecia un plato de agua caliente, Ventre ee oes Pondié: “Agradarme no sé si me agrada, pero es que es un Senne an ee a LUJO PARA UN HOMBRE HUMILDE ‘SUZHOU ES CONOCIDA comola Ve- necia china por ser ciudad de canales, pero también es ciudad dejardines: tiene rueve, todos en lalista de Patrimonio Mundial de la Unesco. El mayor de ells es este, que, pese a ser espectacular, leva el nomire de "Jardin del administrador humilde” Su creador, Wang Xiancheng, habia sido un alto furcionario con la dinastia Ming, pero, tras una carrera accidentada de ascensos 1 degradaciones a principios dl siglo x decidié retirarse a su ciudad natal y dedi- carse ala horticultura. Le lewé decisis afios completar esta maravill, cinco hec- téreas de plantas, rocas, estanques y pa- bellones. El resultado impresioné a su amigo, el famoso artista y poeta Wen Zhengming, que lo plasmé en més de ‘reinta pinturas, como la de aqui arriba, ALA FAMILIA NO LE DURO mucho eledén. El hijo de Wang lo perdié afios después a raiz de sus inmensas deudas de juego. Ellugar tuvo distintos duerios hasta pasar a manos del Estado con la instauraciéa de a Repiblica Popular China en 1849. mmper eer CARTAS PUEDES ESCRIBIRNOS a redaccionhyv@hi riayvida.com o aa siguiente direccién postal HISTORIA Y VIDA, av. Diagonel, 662- 664, 2" planta. 08034 Barcelona (Espaa).misTomia ¥ vba se reserva el derecho a editar las cartas recibidas. CORREO DELLECTOR sae OPINION VIDA PRIVADA, IMPACTO PUBLICO El romance entre lady Hamilton ye almirante Nelson (1 587] fue un secreto a voces. El marido de ella, sir William, to- Jeré la relacién. Su actitud suscité comentarios burlescos y una caricatura grafica, obra de James Gillray (1757-1815), el céle- bre dibujante, famoso por sus satiras politicas. Gillray mostré al arinécrata brténico mientras examsinaba un conjuno de antigiedades [arriba]. En el mangen superior zquirdo, un cuadrosobre Cleopatra alude,en realidad, a Emma, Asttlado, ‘un supuesto retrato de Marco Antonio (amante de la reina eetpcia) representa a Nelson, Mage Santos mBUSQUEDADERAZONES Con todo, tambin reconocié La participacién de cuatro mi- que dar el paso de incorporar- nistros anarquistas en el go- seal gabinete lefuemuy dificil biernodela Segunda Repiili-. “Tuo quewencer muchas dudas ca [Hv 587] hizo necesarias_ yangustias, porquela decision algunas acrobacias ideolégi- suponia romper con toda una cas, Para Solidaridad Obrera, vida de militancia contra las el diario dela CNT, aquellaestructuras estatales. intervencidn estaba plenamen- Gloria Blanco Tez tejusificada, Porque cl Estado habia dejado de ser un instr- ‘mento para la explotacién de Jos trabajadores. ¥ atin iba a ser menos opresor con los ce- netistas en los ministerios. Por su parte, Federica Montseny [en la imagen] planteé la ne- cesidad de que el movimiento libertario no quedara al mar- gende la direccidn de Espana. CONSULTAS, 1m COMO ES QUE FUENTEOVEJUNA, DE LOPE DE VEGA, TUVO TANTO EXITO EN LA URSS? Victor Font Por su tema. Fuenteovejuna habla de la lucha de un pueblo contra los abusos del poder. En 1919, dos aftos después de la revolucién comunista, el director Konstantin Mardjanov estre 1nd un montaje dela obra en el que restaba protagonismo al rey y realzaba el coraje popular contra la opresidn. Mas tarde, inajo el estalinismo, parecia peligroso adaptar de nuevo el clé- sico espafiol. ZY si se interpretaba como un alegato contra la dictadura? No obstante, en Leningrado convirtieron Fuenteo- vejuna enel ballet Laurencia, La censura no lo prohibié, aunque sf hizo suprimir escenas, Noah Martinez Annis Pre teed cone eheidb stan co House. Lice enn canneries ae or eearins '§ZES CIERTO QUE ISABEL CLARA EUGENIA PROMETIO NO CAMBIARSE DE ROPA INTERIOR? Victoria Bantex Hay historias que se repiten atribuidas a distintos personajes. ‘Acerca de Isabel la Catblica la leyenda asegura que prometio no cambiatse de camisa hasta que se conquistara Granada. No escierto, naturalmente. Como tampoco es verdad que su des cendiente a infanta Isabel Clara Eugenia (arriba), soberana de los Paises Bajos, afirmara su voluntad de hacer lo mismo mientras ls tecios no tomaran Ostende. Como no asunié el compromiso, evté pasar con ropa sucia los tres aos que duré elasedio de la ciudad, entre 1601 y 1604. Alonso Heredia Segura 1m CTIENE QUE VER LA CANCION OLD MAN TRUMP CON EL ACTUAL PRESIDENTE DE ESTADOS UNIDOS? Inés Torres Si esté edicada al empresario inmobilario Fred Trump (1905 99), padre del actual presidente norteamericano. Su autor fue ‘Woody Guthrie (1912-67), un mitico cantante folk que influyé «en figuras de la talla de Bob Dylan y Bruce Springsteen. Guthrie vivié dos afos de alquiler en uno de los inmuebles de Trump, {que se hizo famoso por su politica de negar ala poblacién negra el acceso a sus viviendas. Por eso, en su cancién le acusa de propagar el odio racial y de exclu a los afroamericanos. El Departamento de Justicia estadounidense debid de pensar igual, porque en 1973 demandé al magnate por violar los de rechos civiles con este tipo de discriminaciones. Tras dos afios de pugnas, se aleanzé un acuerdo. F millonario, pese a todo, continué aplicando su segregacionismo. Antoni Vives mZTIENE ALGUN PARENTESCO DALE CARNEGIE CON EL INDUSTRIAL? Roberto Lozano No. Dale Carnegie (1888-1951; abajo, ala dcha.) fue un famo: so escritor de autoayuda. Su apellido auténtico era Camegey, pero o cambié para que coincidiera con eldel magnate Andrew Carnegie (1835-1919), célebre industrial. Al vincular de esta forma sus teorfas con una figura de éxito se granjeé un consi derable efecto propagandistico. A través de sus libros y sus ‘cursos trataba de enseftar a hacer amigos, a influir en la gente ‘oahablaren piblico, Dentro del mundo empresarial sus obras tuvieron un importante eco, Antonio Rodriguez CARTA DEL MES Preece Ve) eRe ere eed need ats También por haber i et ee ac esr ie la pelicula Ciudadano Kane (1941). Pero en su larga hi eet een filmaron algunas escenas de Espartaco (1960), el clésico anley Kubrick sobre la revuelta de esclavos. Por su arte, la cantante Lady Gaga encontré en el castillo un localizacién para el videoclip de G. U. . (2013). cam rere ett ements cet nee ad ” Consigue con La Va EME Ree (learns M ome oa Ric) acre Corey 4 A, He -_ WE + Doctrinas filoséficas con ejemplos cotidianos y + Definiciones de términos filos6ficos Seeano’, + Anécdotas y curiosidades + Biografias de cada pensador «Los mejores divulgadores y especialistas a DOSSIER ee ae A reer Br Nescn ncn sa ce Pt AU) HOMBRE NTRAUNIMPERIO ~ tJ Nesp ane) eae) Py Utes ONTRA UN IMPERIO Bartolomé de Las Casas se encontré en América con un panorama estremecedor. Los indigenas vivian como esclavos de los colonos espafioles. Se dedicé a combatir el sistema hasta el fin de sus dias. ese a es Y DOSSIER iguracontrovertida como pocas, fray Bartolomé de Las Casas se ha convertido en nuestro imagi- nario en el defensor de los indios por antonomasia, Poresoes tno delos pocos personajes relacionados con la conquista de América que se conoce fuera del mundo de habla hispana. Sele admira por el ser el gran apéstol de la justicia, pero también se critican sus es critos por permitir que la pasién predo- mine sobre la objetividad ‘Aunque se han elaborado teorias descabe- lladas sobre su procedencia, no hay duda de quenaciéen Sevilla. En 1474, si segui ‘mos su primer bi6grafo, Antonio de Re- ‘mesal, un religioso del siglo xvu. En la actualidad, sin embargo, se retrasa esta fecha diez afios. Lo mas seguro es que el propio interesado no supiera datar su na cimiento, algo muy comin en la época. Fue hijo de un comerciante, Pedro de Las Casas, y, posiblemente, miembro de una familia de conversos, una realidad que en aquellos momentos convenia disim lar; los denominados “crstianos nuevos” no posefan el mismo prestigio que los “viejos”, puesto que se dudaba de la sin ceridad de sus creencias. Carecemos de pruebas de que este fuera el caso de Las Casas, pero st sabemos que, ya adulto, se permitié lanzar dudas sobre la pureza del lingje de sus adversarios. Eliman del Nuevo Mundo Su familia se involucréa fondo en laaven- tura de América, Con apenas ocho aitos tuvo ocasién de presenciar el regreso de Cristobal Coléna Espaia, acompaiiadode indios adornados con plumas. Uno de sus tfos, Francisco de Peftalosa, sirvié como capitén ene segundo viaje del descubridor. Su padre también se hallaba entre los ex- pedicionarios. Al regresar del Nuevo Mun- do, en 1499, le entregé como regalo un nifio antillano, El indio regres6 au tierra enseguida, en virtud de la voluntad de Isabel la Cat6lica, colérica ante el hecho dequese dispusieracon arbitrariedad del destino de unos indigenas que eran vasa los suyos. Peroesta convivencia,limitada a unos pocos dias, seguramente dio al futuro dominico una visin directa de la realidad al otro lado del tléntico. No obs- tante, tampoco hay que exagerar su im- portancia en su trayectoria posterior. GRISTOBAL COLON desembara en Amica, frescode Tio Sasenacasaratal de Bola, Tres aftos después, Las Casas se desplazé a Santo Domingo a la biisqueda de oro, convencido, como tantos otros, de que solo tenia que legar y recogerlo. Su ex- periencia resulté una decepcién comple- terse, Para vencer su resistencia y, al mis- ‘mo tiempo, conseguir mano de obra, los espafioles emprendieron operaciones militares en Xaragué y Haniguayagua. EL Joven Bartolomé intervino enestas expe- LAS CASAS FUE A LA BUSQUEDA DE ORO, CONVENCIDO DE QUE SOLO HABIA QUE LLEGAR Y RECOGERLO ta Losbuscadores de lasriquezasaurlfe- as, poco habituadosal trabajo duro yal provistos de alimentos, no tardaron en ‘morir porcentenas. Entre tanto, losindios de Santo Domingo se negaban a some- diciones de castigo, que més tarde des- cribiria en duros términos. Seguramente, Las Casas se ordlené sacer: dote en 1506, aunque no existe certeza sobre la fecha ni las circunstancias. Su condicién religiosa no le impidié en un primer momento vivir como un colono mis, beneficiado del trabajo de los indios {que dedicaba a a agricultura ya miner, Con la perspectiva del tiempo, él mismo ‘adimitiria que, en aquellos momentos, es taba tan “ciego” respecto a los nativos como el resto de espaitoles. El terremoto de Montesinos En 1511, un grupo de cuatro dominicos Iegé a la isla bajo el liderazgo de fray Pedro de Gérdoba. Estaban destinados a protagonizar una dura critica alas a- bitrariedades de la colonizacién, con un bagaje intelectual inspirado en la floso- fia de santo Tomas de Aquino. El pensa dor medieval propugnaba la existencia de un derecho natural idéntico para todos los hombres. ¥ de cardeter perma- nente, puesto que nadie podta cambiar Jo que venia directamente de Dios. En ‘manos de los religiosos, esta doctrina se convertiréen un arma para combatir la desigualdad entre nativos y colonos. Su eco puede percibirse en el impactante sermén con el que fray Antonio Monte- sinos se encaré con los propietarios de Indios, alos que reproché en términos muy severos su brutalidad. MONUMENTO fay Antonio Montesinos en Santo Daming, actual Replica Demniana LADISPUTA ENTRE LOS COLONOS Y MONTESINOS SE SOLVENTO CON LA PROMULGACION DE LAS LEYES DE BURGOS Bartolomé de Las Casas noestuvo presen: te, pero nos ha dejado una transcripcién del incendiario discurso: “Estos no son hombres? -No tienen nimasracionales?”. Los colonos supusieron que Montesinos se retractaria, pero este, a la semana si- ¢guiente, retomé el tema con la misma fuerza, Molestos, los dueitos de indios cenviaron a Espafta a un franciscano para ‘que defendiera sus intereses. La disputa se solventé con la promulga- ci6n, en 1512, de las leyes de Burgos, en las que, en principio, se buscaba proteger alos nativos. Se reconocia que eran hom- bres libres, pero también se regulaba la institucién de la encomienda, aplicada desde poco antes: consistia en asignar 0 encomendar tn mimero de indios a una figura, el encomendero, que podia obli- garles a trabajar. A cambio, debfa ense fharlesla religion crstiana y respetarcier- tas condiciones en materia de salario, alimentacién o vivienda. En la préctiea, DOSSIER CASTLLD Sin Atrio deleEnzencaen (Cuma, cindaden actual estas obligacionesestuvieron lejosde apl carse de forma estricta. No era realista pretender que los colonos cumplieran una normativa contra sus propios intereses. Cambio de vida de un colono L siempre hizo suyos los argu- rmentos de fray Antonio Montesinos sobre latiranfa delos espafioles. Su repugnan- hacia los métodos violentos se vio reforzada cuando tuvo que presenciar, en Cuba, la matanza de Caonao, un acto de crueldad gratuita que acabé con cen- tenares de indios indefensos. Su vida tomé un rumbo nuevo cuando, en 1514, renuncié a suspropiosindigenas. Crefa que esa era la tinica manera para gurar su salvacién como cristiano. Po- co después, al predicar un sermén, se dirigié al resto de colonos para exigirles que hicieran lo mismo, ante la sorpresa general de un pablico estupefacto. Ese mismo afio, los castellanos hicieron el primer intento de leer ante los indios elRequerimiento, un documento juridico por el que se les informaba de que reci- birfan la protecci6n del rey si acataban su autoridad. En caso contrario obten- drian un fuerte castigo. Como era de esperar, los natives no hicieron el menor caso del aviso, Las Casas encontraba tan ridjculo este formulismo que, en sus pa- Jabras, no sabia si reir o lorar Protector de los indios Para recabar apoyo en su cruzada a favor de los nativos, nuestro hombre consigui6 elrespaldo de Cisneros, regente hasta la legada de Carlos|, interesado en su pers- pectiva de la reforma de las colonias. El cardenal le pidié que pusiera por escrito sus ideas sobre la situacién de los indi- genas. Surgiéas{ el Memorial de abrilde 1516. Eldocumento se proponfa aleanzar lalibertad de los indios sin por ello con- EN LINEA CONEL UTOPISMO DE LAEPOCA, denar ala miseria alos espafoles, inca- paces, segtin Las Casas, de valerse por si rismos, porque no sabian més que dar 6rdenes a los nativos “y mantenerse de sus sudores y de su sangre”. En la linea del pensamiento ut6pico caracteristico de la época, se proyecté la constitucion de comunidades indigenas ideales, po- blados bajo el gobierno de sus propios Jefes y de religiosos honrados. La idea nunca se materializ6. Cisneros nombré a Las Casas “Procurador y Protector Universal de los Indios”. El ear go le concedia amplios poderes para rea- lizar el seguimiento del trato recibide por Jos nativos. Para cumplirsu funcién, tenia ue vigar por los territoriosultramarinos einformar ante los gobernadores de cuan- toestimara oportuno. Decidido a cumplir a rajatabla con su deber, se lanzé en los afios siguientes a una actuacién enérgica. Por desgracia, la muerte del cardenal, en 1517, ledejé sin un protector insusttuible Los colonos aprovecharon el eambio poli- tico para imponer sus intereses, ‘BARTOLOME DELAS CASAS ante lemperado Carls Ver el Consejo de Estado, TSE, rabado, sx. Las Casas acepté inicialmente el traslado ‘a América de esclavos negros; e parecié ‘unmétodo iti para aliviar alos indios del cexceso de trabajo. Se le ha culpado, con cevidente exageracién, de introducirlaes- clavitud afticanaen el Caribe. Con el tiem: po, él mismo se arrepintié de no haber sido més sensible en este tema, Lacruz sin la espada En 1521, el inquieto sacerdote alent un {ntento de evangelizacién pacifica que aca- 'bé en un completo desastre. En Cumand, ena actual Venezuela, un grupo de reli -giososse instalé en un convento-fortin. Los indios les onfundieron con conquistado- res yles masacraron. Poco después, Bar- tolomé toms los habitos dominicos, una cevolucién natural, por la mutua afinidad enelenfoque dela problematica india, Hacia 1533, su mediacién contribuyé a que el cacique Enriquillo, iminutivo por el que se le conocia desde su educacién conlos franciscanos, depusiera las armas. Llevaba afios al frente de un foco de rebe- lin en Santo Domingo, tas reciamar en vvano a la justicia espafiola: un encomen- dro le robé y trat de forzara su esposa ‘Tras alzarse, Enriquilloaplicétécticas de guerrilla, Segin Las Casas, su intervencién iplomatica consiguié dejarle “més firme enel servicio de Su Majestad’. Fortalecidocon su éxito, eldominico pasé dela préctica a la teoria en un tratado.en DOSSIER Pele ” latin, De Unico Vocationis Modo... (Del ini comodo de atraer a todos los pueblosala verdadera religién). El texto, lleno de re- ferencias eruditas, condena los métodos deevangeliz con notable Jos musulm: indios no habian tenido oportunidad a divina, Na por tanto, sinolaa mente, Su instruccion rei izarse a partirde argumen- ae! intelectoy de una suave exhortacién de la voluntad. Las leyes Nuevas En esos momentos, el Imperio espaol en América entraba en una nueva fase. Francisco Pizarro, en el Peri, conquis de riquezas inverost incas, pero tuvo tan mala suerte que el FRACASO SU PROYECTO DE EVANGELIZACION EN VARIOS TERRITORIOS; barco acabé en Nicaragua por la des- in de los pilotos, todavia mal fados a la navegacién en el pués, la promulgacién de las eyes Nuevas debié mucho a su dedicacién infatigable. En adelante, los indios no podrian ser reducidos Javitud ni siquiera en caso de hibi mn, Por otra parte, se pro- concesién de nuevas encomien: das y se decretaba la extincién de medida que solivianté a los afec (que esperaban transmitirlas a sus des- cendientes a perperuidad. En 1542, en un documento dirigido a Carlos V, nuestro dominico proponfa la LOS CONQUISTADORES esses durant ‘eupacion del Meso eteca entre 51912 LAS CASAS OPTO POR ALOS COLONOS CON INDIOS confiscacién del patrimonio de los veinte principales conquistadores de México. ‘También se expropiaria la mitad de las posesiones de los encomenderos. De esta forma, la Corona obtendria recursos pa- ra atraer a colonos que trataran alos in digenas como vasallos libres. Si no se hha a para corregir las injusticias, Dios castigaria a Espa Las Casas tenia un arma importante asu favor. Miembro del clero, podia utilizar la confesion paraimponer severas penitencias alosconquistadores. Les exigié que repa raran el dafio cometido, bien en vida oa través de sus testamentos. En el caso de quenoquedaran indios alos que compen socorrer a los pobres las rdenes religiosas. Eluso de la penitencia demostr ser efe tivo, Enel Pert se multiplicaron los casos de conquistadores que, en sus tiltimas voluntades, solicitaban perdén por sus acciones. Pero también fue all{ donde los CARLOS V(sentao adevechs)enuntanquctecon su familia. Cuaro de Absa Sénchex Cel 5.20. colonosse rebelaron contra a Corona, en protesta por la aplicacin de las leyes Nue bligé a Carlos V a moderar las inicia- efensa de lapoblacién india. Asi, cestablecié que las encomiendas atin esta: ran vigentes durante una “segunda vida’ ces decir, por una generacién més. Sobre qué sucederia después nada se dijo. Feligreses contra el obispo La hostilidad de los colonos hacia las po- Iiticas en pro de los nativos iba a experi- ‘mentarla Las Casas en sus propias carnes, tras ser designado obispo de Chiapas en 1543. Para sus feligres poco menos que el diablo. Su no contribuyé a calmar los dnimos: cuan- donegé la absolucién a los que hubieran cometido pecados contra los indigenas, estallé un motin que puso en peligro su vida. Sus decisiones amenazaban el fun- ‘damento de la economia local, basada por ‘completo en el trabajo de los nativos. Ahora, a diferencia de lo que sucedia en Espafa, sus enemigos no eran juristas, sino hombres de accién dispuestosa todo. Su propio clero, dividido, no le facilité las cosas. La situacién llega a tal extremo que, en octubre de 1545, escribe que se tra en un estado de opresién: Ia rebeldia de los dirigentes coloniales le DOSSIER ‘nese sePOLvEDA 1824 Alace deAnsrcainyrescortabeesent70.* seid EN EL DEBATE CON SEPULVEDA, AESTE SE LE SUELE CARICATURIZAR impide desempefiar su misién religiosa. Para esas autoridades, él habia desenca. denado el contflicto, al invadir el terreno de la jurisdiccién civil. Reducido a la impotencia, abandoné Chiapas para no regresar jamés, Presentaria su renuncia algunos afios después. Lagran polémica En os aos siguientes, Bartolomé de Las Casas ba aencontrar un rival asualtura intelectual. Humanista de gran calado, Juan Ginés de Sepillveda escribi6, entre otras obras, el Democrates secundus, un tratado en el que justificaba las guerras contra los indios por motivos cvilizado- res. Apartir de agosto de 1550, los dos hombres se enfrentarian en la célebre controversia de Valladolid, organizada segtin el modelo de los debates académi- cos medievales. Sepilveda abriéel fuego con una exposicin de tres horas. Le si- guid Las Casas, ue alargé suintervencién por espacio de cinco dias, Mientras el dominico suele aparecer como la figura més amable del enfrentamiento, a Sepiilveda se le caricaturiza como un conservador recaleitrante, acérrimo apo- logista del Imperio y contrario a la suer- te de los indios. En realidad, como ha sefialado su bidgrafo Santiago Mufioz Machado, era algo mas progresista deo que se acostumbra a imaginar, No en va- no, entre sus amistades se encontraban los seguidores del avanzado humanista yytedlogo holanés Frasmo de Rotterdam. Por otra parte, no era un simple lacayo del poder. Su Historia de Carlos Vcontie- ne criticas al emperador y noesté exenta de simpatia hacia losrebeldes comuneros. Sabemos que se sintié maltratado cuando, segiin sus propias palabras, Las Casas le presenté como un “fautor de tirantas” y “extirpador del género humano”. Estaba convencido de que, si se imponian sus tesis, os propios indigenas se contarian entre los beneficiados. Entre otras raz0- nes, porque pensaba que, antes de 1492, suestado habitual era una guerra conti- nua y brutal, en la que no era poco fre- cuente la préctica del canibalismo. Por el contrario, Las Casas crefa que nin- sgtin principe cristiano tenfa jurisdiccién para inmiscuirse en territorios goberna- dos porinfieles, porhorrends que fueran Jos erimenes allf cometidos. Practicas como los sacrificios humanos no legiti- ‘maban una intervencién militar externa. Para ilustrar esta postura, el dominico utiiz6 habilmente un argumento extrai- DEFENSA DE LOS INDIOS MEN 1552 APARECIO la Brevsi- ‘ma relaién dela destruccén de las Indias (abajo, su portada), un libro _que Bartolomé de Las Casas habia, ‘empezado a escribir una década _atrds con destino al principe Felipe, el futuro Felipe I al que deseaba ‘oncienciar dels atrocidades come- tidas en América. Por e50, se expre- 'sa.en los términos mas enérgicos ‘contra el comportamiento delos es- pafiles, alos que acusa de perpe- ‘rarinnumerables asesinatos solo por su absesin con el oro y el envi- {quecimiento répido. WA TRAVES DE SU MEMORIA personaly de os testimonios que le parecen fables, Las Casas pasa re- vista ala situacién en diversos te- rritoros, siempre con historias ‘escalofrantes. Cuenta, por ejemplo, ‘que en Cuba murieron siete mil nifos ‘bligados a trabajar en las minas, ala btisqueda de metals preciosos. ‘También afirma que, en la misma isla la crueldad de un espariol se tra- ‘duo en la ejecucion por ahorcamien- ‘to de més de doscientosindios. Este ‘no fue un easoaisado: "Perecié des- ‘ta manera infinita gente”. poF is is al boy BREVISSIMA RELACION DE. LA DESTAVICION Di Tn pel Oe reward DOSSIER LA CATASTROFE DEMOGRAFICA éFue uniforme el impacto de la conquista en la poblacién local? §LOS EFECTOS DEMOGRAFICOS: dela conguista han suscitado un amplio yy polémico debate, sobre todo, por sus _aspectos ideol6gicos. Asi entras unos. historiadores hacen hincapiéen la violen cia de Ia conquista, otros achacan el de- clive dela poblacién alas enfermedades ‘que llevaron los europeos. nla primera rita del siglo a escuela “bajsta” fue la predominante. nla segunda mitad, en ‘cambio, lahegemonia fue para la escuela “alista". Eso, ala hora de ofrecer cifras, concretas, significa pasar de menos de diez milones de muertos a mis de cien. "No obstante ni unos ni otros pueden ha- cer célculos definitivos, en vista de los ‘vacios de la documentacién. Lo que es -seguro, en cualquier caso, es quela con- ‘gusta produjo una catistrofe humana. MLO MAS PROBABLE ES QUE no ‘se pueda responsabiizar del desastre a un factor inco. Hay que distinguir, por ‘otra pate, entre los distintosteritorios. ‘den continente tan ampliocome Amé= rica. Como sefala el demégrafo Massimo Uv Bac lo que encontramas, seqin la ‘20na, es una destrucciin total, un largo decve dela poblacién oun shock iniial ‘seguido de una recuperacién pronta, ‘Abajo, nativos de Santiago Jamaica). do de la historia antigua: puesto que los habitantes de Espaiia habian sido biir- baros, gerefa Sepulveda que los romanos tenfan derecho a repartirselos, como ha- cian los espafioles con los indios? Ambos contendientes se proclamaron vencedores de a polémica. Los historia. dores suelen reconocer a Las Casas como el gran triunfador, aunque hay motivos para dudar del alcance de su victoria. Se acostumbra.a recordar que Septilveda no consiguié autorizacién para publicar su Democrates secundus, mientras que su ‘oponente, en cambio, si vio publicada la Brevisima relacién de a destruccién de las Indias. Pero también hay que tener pre sente que esta tiltima obra aparecié en 1552 sin el permiso de la censura, y que- dé prohibida en 1556. No se editaria Jegalmente en Espafia durante el resto dela Edad Moderna, aunque eso no im pidi6 que euviera un formidable impacto internacional, hasta el punto de oscute. cer el resto de las obras lascasianas, Luchador hasta el fin ‘Tras la abdicacién de Carlos V, su hijo, Felipe Il, tenfa unos criterios menos fa- MUERTE de Barto de as Casas 1566. Interpretan romantica els, vorables alos postulados de Las Casas. En 1571, una ordenanza real mands re coger os manuscritos del dominico, has taentonces en posesién del Colegio de San Gregorio de Valladolid, yentregarlos al Consejo de Indias. Estarian a dispos cién de sus cronistas oficiales, entre ellos, Antonio Herrera, que los utliz6 amplia mente sin citar su procedencia, Pesea ser un anciano, Las Casas no habia perdidoun pice de su energfa. En medio de su actividad incesante, tuvo fuerzas para declarar a favor de su amigo Barto- lomé de Carranza, arzobispo de Toledo, procesado por el Santo Oficio por haber pronunciado unas palabras supuestamen- te heréticas. Lejos de limitarse a una a titud defer 36 al Inqu sidor General, Hernando de Valdés, porque suponia, con razén, que estaba detrés de una conspiracién para desacreditar a Ca- rranza, Por desgracia, como se expres6 con su pasién acostumbrada, el tribunal desestimé sus palabras con la excusa de que era un intimo del acusado. Siempre vinculado alo que sucediaal otro lado del Atkintico, encontré también tiem- po para escribir un tratado en latin, De thesauris in Peru (Los tesoros del Peri), en el que denunciaba el expolio al que los espafioles sometian las tumbas incas, en busca de tesoros reales 0 supuestos. Cuando murié, en 1566, Bartolomé de Las Casas habia dedicado més de medio iglo a la defensa de los indios, mas de cincuenta afios en los que se alternaron los 0s. Por su tenacidad, iba a convertirse en un referente para los luchadores por la libertad y la justicia. Pero durante mucho tiempo fue, para otros, el principal responsable de la le yenda negra espaiiola en América, m PARA SABER aksicos *olomé de. Brevisima rel ci6n dela destruccion de las Indias Nac Fea Academia Espa, 2015 nana, Santiago. Sepilveds, cronista del Emperador. Barcelona: Ehasa, 202, 450 ANOS DE POLEMICA La posteridad traté a Bartolomé de Las Casas desde posturas encontradas. Hubo quien vio en sus escritos la raiz de la “leyenda negra” que iba FR claTi mays an cual Cea Mianreve Un he ca mess) Ol Cos) Keele cic M Slee KUM MM (enre Reel tee) Carle mele eM ELL UR MS CelN Oe CL consideré al dominico desde perspectivas opuestas: éfue un mentiroso, un exagerado, un ili eo MOE] (RRC sore FRANCISCO MARTINEZ HOYOS, DOCTORENHISTORIA ‘UNODDELOS GRABADOS de Theodor deBry dela Brevsimaqueimpulsronlaleyenda negra DOSSIER o sin contradicciones, la semi laque planté Bartolomé de Las Casas dio su fruto. La monar: quia podia censurarsus obras, pero también habian incorpo: rado algunos de sus postulados a su pric- tica politica, Se explica asf que Felipe IL llegaraa prohibir a utilizacién de la pala bra “conquista”. En adelante debera hi blarse de poblamiento. No se trataba de un simple cambio de terminologfa. Una ordenanzade 1573 restringiala presencia de tropas en los nuevos descubrimientos, al tiempo que limitaba los motivos para declarar la guerra allos indios. Se dio asf un caso inédito en la historia, antes y después: un imperio en expansién procedia a una autocritica, por momentos ‘muy severa, y se cuestionaba la legitimi dad de su dominio. En adelante, los Habs- bburgo se moverfan en una contradiceién nunca bien resulta: el deseo de garantizar el bienestar de sus vasallos indigenas frente a la necesidad econémica de uti lizarlos como mano de obra. PARA MONTAICNE, LOS CONQUISTADORES ERAN SALVAJES, Y LOS INDIOS LES SUPERABAN EN BONDAD, LEALTAD... No fueron pocas las ambigiiedades. En el Peri el virrey Francisco de Toledo (1569-81) se caracterizé por su oposicién acérrima a todo lo que tepresentaba el padre Las Casas. Hizo retirar sus libros delacirculacién y patrociné una historia dela conquista que legitimabael dominio de la monarquia espaitola. Cuestién de imagen Bartolomé de Las Casas dejé una huella erduzable en los auoreseuropensdelas Siguientes generaciones. No obstante, se ha tendidoa exagerar su influencia como si fuera el nico responsable de In deno trinada“leyendanegea”.Noesa la cuien tit, por cearpo, Michel de Monmaigne, sino a Francisco de Gomara ya Girolamo Benzoni, Ahora bien, hay que teneren cuenta que este timo, en su Mitoria del Mondo Nuovo (1565), se habia mostrado influido por el obispo de Chiapas. Podria FELIPE de spat, leo andnimo, xu. monarca mand poner a buenrecaudo bsobrasdeLas Casas. decitse, por tanto, que Las Casas influy en Montaigne a través de Benzoni. Para elensayista francés, el salvajismo de los conquistadores era peor que el de los canibales. Los indios, en cambio, supe- raban a sus dominadores en “devocién, obediencia de las eyes, bondad, libera- Jidad, lealtad, franqueza”. Laobra lascasiana iba convertirse en una herramienta propagandistica en manos delos enemigos de la monarqufa espatio- Ja. Para comprobarlo, solo hay que obser- var lahistoria de sus ediciones. En 1579 aparecié la primera versi6n francesa en Amberes con un titulo muy expresivo: Ti ramiasy crueldad de los espaiole perpetra ddas en las Indias Occidentales. Para servir de ejemplo a las diecisiete provincias de Jos Paises Bajos. En esos momentos, Ho- Janda se haba rebelado contra Felipe I. Lapropaganda antihispana queria remar- car que alos sublevados les esperaba el mismo destino que a los pobladores del Nuevo Mundo, victimas del salvajismo de losconquistadores. Noes de extrafar que elliderde larevuelta, Guillermo de Oran- ge, encontrara en Las Casas una fuente de inspiracién para escribirsu Apologia, uno delos textos clave de la leyenda negra Sin duda, la edicién masinfluyente dela Brevisima fue la publicada en Frankfurt en1597, laprepard un holandés, Theodor de Bry, con impactantes grabados que denunciaban las atrocidades contra los, indigenas. De hecho, las 17 representa- ciones resultaron mas decisivas para crear tuna imagen nefasta de la conquista de América que el texto de Las Casas. No obstante, hay que ircon cuidado antes de identificar, sin mas, est libro con un sen- timiento hispanéfobo. El volumen tam. bién contenia elogios a Carlos V, empe- rador de “feliz memoria’, y una condena alos intentos de denigrar al conjunto de los espafoles. Se afirmaba que otros, puestos en la misma situacién, habrian actuado con idéntico salvajismo. Enel siglo xvu, autores como Diego Saa- vecra y Fajardo o juan de Solérzano crti- caron duramente la Brevisima porque entendiian que difamaba a los conquista- dores. Durante ese period, el libro solo seedité una vez dentro de Espafia, Fueen 1646, en Catalufia, dela mano de un im- presor que se dedicaba a publicar panfle- tos revolucionarios. En medio de la rebe- lién contra Felipe 1V, convenia recordar ue los castellanos eran gentestirdnicas. Cuatro afios antes, un panfleto titulado Victoria que han alcangat les catalans con- tralosenganysde Gastellaabla entrada el Marques de Torrecusa los acusaba de pre- tender engafiar a los catalanes como ha- bian engatiado a los indios, alos que di rigian buenas palabras pero después trataban con inaudita crueldad. Pocosatios después en 1659, uncensorde Ja nquisicién, el jesuta Francisco Mingui- jn, dio susrazones para impedi la publi- cacién del esico lascasiano. Elautor decia cosas terribles sobre los soldados espaiio- Jes.A sujuicio, aunque todos os desfueros que relataba hubieran sido verdad, el do- PEDRODE ALVARADO ordenaasacar alos indns Grabado de Theodor deBry, 594, nan el Nuevo Mundo. El cientifico Jor- sgeJuan, en su trabajo sobre la situacion, delosreinos del Peni, lamenté quela obra de Las Casas huibiera servido para desa- creditara la nacién en su conjunto. Por su culpa, excesos “inevitables” se habian tomado por “generals”. JORGE JUAN LAMENTO QUE LA OBRA DE LAS CASAS HUBIERA SERVIDO PARA DESACREDITAR A LA NACION 1minico deberia haberse limitado a comu- nicarlos al rey, sin hacer puilicos unos abusos que las potenciasenemigas podian emplearen contra del pas. En el siglo xvm, durante la Ilustracién, diversos autores se dedicarona defender a Espafta de las eriticas extranjeras que Ja presentaban como un pais atrasado y fanético.Estalbor propagandistea abor- 46, entre otros temas, laactuacién hispa- El jesuitacataldn Juan Nui, asu vez, cri- tied a Las Casas por lo que juzgaba tergi- versacionesindiscutibles. spafia nohabia sido una potencia opresora, y sus victorias en América podian servirde modelo “alas, nacionesméscultas”. Para Nuix, secaiaen tun doble rasero intolerable cuandose des prestigiaba a los conquistadores de las, Indias yen cambio, se continuaban glori- ficando las hazafas de Alejandro Magno. DOSSIER Los indigenas, en realidad, habrian tenido suerte de ser conquistados por gentes como Cortés y Pizarro, y no por los ingleses. El jesuita reconocta que se habian comerido ‘desmanes, pero se trataba, en su opinién, deatrocidades puntuales perpetradas por hombres que se habian embrutecidoenun ambiente incivilizado, En todo caso, esos abusos se habrian corregido con rapidez. La visién desde América Aprincipios del siglo xr, los movimientos independentstas ue surgieron enla Amé- rica espaftola tomaron al dominico como fuente de inspiracin. En México, fray Ser vando Teresa ce Mier, conocico adalid del secesionismo, escribié unas palabras de hhomenaje para ia estatua que se le dedicé enla plaza del Zécalo della capital azteca: “Extranjero, si amas la virtud, detente y venera a este hombre. Es fray Bartolomé deLas Casas, padre de los indios”. La sim- ple existencia de este monumento resulta ‘mas que significativa en un pais que se esforz6 en borrar de los espacios piblicos elrastro dela dominacién hispana, ‘Simén Bolivar, el libertador por antono- asia, se expres en similares términos. En una carta a la publicacién jamaicana The Royal Gazette, en 1815, elvenezolano ‘mostraba su admiracién por el “gran fil sofoyfiintropo Las Casas, que viocon sus propios ojosesta nueva y hermosa porcién del globo poblada por sus nativos indios, regada después con la sangre de mas de veinte millones de victimas” Desde las independencias, a nuestro do- rminico se le apreciard mucho més en Amé- rica que en Espaha La historiadora Nuria Soriano lo muestra con un dato significa- tivo: al otro lado del Attintico, su nombre ha servido para bautizar calles de grandes ciudades como Lima, Trujillo, Quito oLa az. En Espaiia sin embargo, las urbes que han homenajeado al dominico son més bien de tamafiopequeitoomediano. Este hecho refleja una relacién conflictiva con lamemoria histdrica de un hombre al que ‘muchos contemplan como un enemigo, Las dos Espafias Asi, como un peligro potencial, lo percibia JaReal Academia de la Historia a principios delsiglo xix. Cuandolainstirucén no qu soplantearselaedicién de susobeas, sobre todo, por razones de oportunidad politica. SIMON BOLIVAR durante una batalla contalos safle poral mexicano Fernando Leal. Enun momento en que se extendia pore! imperio americano el sentimiento inde pendentista, no parecia conveniente dar conocer atin autor que sin duda propor- cionaria municin ideotbgicaal enemigo, alcuestionar el derecho de los espafioles ala conquista. Desde esta dptica, Bartolo mé de Las Casas era el artifice de una cri tica claramente desmesurada, Pero en esa época, como sefala Ricardo Garcia Cércel, los liberales, tanto en Espa- fia como en el resto de Europa, fueron conveneidos partidarios de Las Casas. En 1822, Juan Antonio Llorente publics sus ‘obras con una biografia introductoria, Pa rad), Las Casas habia sido un “héroe dela caridad” y“el defensor de la buena causa delalibertad”.Pocosafos después, Manuel José Quintana incluyé un estudio elogio. sosobre el dominico en su Vida de espari- lescélebres. Mas tarde, losrepublicanos se acercaron con simpatia al religioso rena- centista, Para Emilio Castelar fue un ada- lid de ls derechos humanos, mientras que Francisco Pi i Margall le consideraba in- dispensable para desmitificarla conquista de América, unconjunto de acontecimien- tos que, a su juicio, deshonraban por su brutaldad alos espaioles. En un principio, ii Margal creyé que Las Casas exageraba, Hasta que la lectura de los otros cronistas de Indias le convencié de lo contrario. De todos modos, la mayoria de los histo riadores hispanos decimonénicos fueron defensores de lo realizado durante la conquista y colonizacién de América. A menudo, ia critica contra Las Casas se tradujo incluso en descalificaciones per- sonales. Marcelino Menéndez Pelayo, por ejemplo, le retraté como un hombre iraseible y fandtico, responsable de “bru tales injurias” contra su patra. Una polémica sin fin Estallnea de ataques furibundos continua ria, en el siglo xx, con Julidn Juderias, el principal divulgador del concepto de “le yenda negra”. A su parecer, Las Casas ha bia lanzado “con mejor voluntad que for tuna la especie de la crueldad de nuestra colonizacién”. Sus datos no habrian sido rigurosos, sino simples fantasias sobre las que se tejieron historias irreales. No menos duro se mostré Rémulo D. Car- bia en su importante Historia de a leyenda negra hispano-americana. Est historiador argentino, orgullosode su “rancio abolen- go espatio taba de que su pais hubiera olvidado susraiceshispanas. Para defender el legado dela madre patr ésin piedad al obispo de Chiapas, al que consideré un peligroso falsificador histé- rico. Le acus6, por ejemplo, de haber adul- ado el diario de Cristébal Col6n. Tam- bién le atribuye levantar, por sistem: falsotestimonio para defendera losindic Cuando Las Casas afirma que ha visto un hecho determinado, el lector no debe to- ‘arse supalabraal pe cido de lajusticia de su causa, el religioso no habria dudado en tomarse libertades, con la documentacién: “Nose detiene an- tenada, ylo mismo mutila un texto o int polaen él pasajes raudulentos queagigan- ta pequefieces para generalizar, en un sofisma, fenémenos esporddicos de un ugar o de una zona”. Porello, segtin Car- 3, calificar al autor de la Brevisima de ata ‘desorbitado” no seria una exageracién, 10 locontrario, no decir “lo bastante”. Durante el franquismo, lapolémica Sepa veda-Las Casas se reavivé a partir de la oposicién franquismo-democracia. Los partiarios del régimen simpatizaron con Sepiilveda. Un erudito insigne, Ramén Menéndez Pidal, pblicé na biografia de las Casas en la que, segtin decia, iba a alejarse tanto de la leyenda durea como de la leyenda negra. El resultado nada tuvo que ver con a ecuanimidad. Aunque elautor explicite que no desea aparecer como antilascasista, no qu clusi6n, ala vista de un ataque tan apasio- nado y violent, una auténtica acta de acusacién donde el dominico aparece como un vanidoso, imbuido por completo de un complejo de superioridad moral e intelectual. “Fue el hombre mas admira- dor de sf mismo que ha existido”, senten cié Menéndez Pidal, que encontraba in- comprensible ue sus colegas no hubieran reparado en lo que él considera jactancia insoportable de su protagonista, lente) en aber (M;mosazode Juan O'Gorman. Las Casas se habria engrandecido en sus, escritos de manera sistematica con la mis rma inexactitud que demostraba al atribuir a los espafoles todo tipo de atrocidades. Para referirse a las exageraciones que le imputa, su bidgrafo, transmutado.en fiscal, empled un eurioso neologismo: “enormi- zacién”. Menéndez Pidal estaba con cido de que el rigor, en la obra lascasiana, brillaba porsu ausencia. Pero eso no habia impedido la fama internacional de un per- sonaje encumbrado no por sus méritos, intelectuales, sino por intereses politicos: Jos de aquellos que necesitaban despres- tigiar la colonizacién de América, Aunque aseguré no saber nada de psi quiatra, el erudito selanaé a diagnosticar una enfermedad mental en Las Casas como tinica explicacién posible de su comportamiento: padecia un delirio pa- ranoico. Este exceso interpretativo exp ‘que el gran maestro coruiés saliera perdiendo en la polémica quesuscité. Un ELFILOLOGO chistrado spel Ramdn Mende Pil fotocrafiadsensubiblatca, Madi, 16. EN PLENA DICTADURA, EL ANTIFRANQUISMO VEIA EN LAS CASAS UN PRECURSOR DELALUCHA POR LA DEMOCRACIA especialista cle renombre, Marcel Batai- lon, critics la parciatidad de sus fuentes. Manuel Giménez Fernandez, otro de los grandes bidgrafos de Las Casas, hizo lo mismo al reprocharle, entre otros aspec- tos, una excesiva confianza en Motolinia el franciscano Toribio de Benavente-, cenemigo declarado del dominico. Lacontroversiagiraba en romoaunacues- tidn histdrica que tenia, en aquellos mo: ‘mentos, una evidente significacién politi- ca Enplenadictadura, el antfranquismo vefa en Las Casas unprecursor de la lucha porlademocracia, Curiosamente, laReal Academia dela Historia reedité aobrade “Menéndez Pidalen 2012. Su director, Gon- zalo Anes, la presenté como un estudio desapasionado y vigente. Como hemos Visto, la realidad es que se trata de un libro por completo pasional y partdista. En los studios sobre América Latina, el interés por Las Casas ha sido tanto y tan fructifero que ha dado lugar a toda una especializacién académica, el “lascasis- mo”. Sucontrovertida personalidad alien- ta las interpretaciones més dispares, a derecha e izquierda, Entre susdefensores encontramos historiadores de prestigio como Ruggiero Romano, Pierre Chaunu © Marianne Mahn-Lot. Por desgracia, en muchas ocasiones, los investigadores se han dejado llevar en exceso por ideologias del presente, con Joque han distorsionado a su protagonis ta. Asi, desde elcristianismo izquierdista se le ha presentado como el héroe soita- rio en lucha desigual contra el poder. Pero, al acentuar su perfil revolucionario y su modemicdad, se pierde de vista que también era un hombre de su tiempo. Como resalta Bernat Hernandez, el au- téntico Las Casas también era partidario de las jerarquias sociales, defensor del absolutismo monarquico y nada toleran- teen cuestiones religiosas si tenia que hablar sobre el enemigo musulmén. Sele haelogiado también como precursor den supuesto anticolonialismo. Bernard Lavallé ha sefalado que, en realidad, fray Bartolomé, por mucho que criticara los métodos de os conquistadores,justificaba la presencia de Espafia en América en nombre de la evangelizacién, Desde posiciones indigenistas radicales se le ha criticado con dureza. Se ha le~ éUN TEOLOGO PARA EL SIGLO XXI? Las Casas, un héroe para lateologia de la liberaci6n. = PARA LOS CRISTIANOS progresistas, Bartolomé de Las Ca- 595 fue un referenteindgcutble por sulucha a favor delos derechos hu ‘manos. Esoes especialmente cierto encelcaso della tecloga de aber cién, una coriente de pensamiento ‘muy sensible alos problemas so- coeconémicas de América Latina El peruano Gustave Gutiérez, uno de os prnciales epresentantes de esta tendencia, fund, en 197%, un Instituto que levaba, Sqnificatva rmente, el nombre del obispo de Chiapas. Esta asocaci sin Simo de lucro se proponia contribuir al desarrollo humana desde la epcién preferencial por ls pobres. MEL CATALAN Peco Casaldai- 192, obispo emérito de S30 Félix do Araquais (Basi es otro acmirador de Las Casas. Astlo muestrael apa sionado soneto que le dedié, donde lo lama “santo Padre de América’ El apéstal de ls inci representa para 6a posbilidad de una lolesia de los bres, en contraposicién ala que se ‘mantene aloda de los poderosos. ¢gado a decir, paradéjicamente, por tra- tarse de un defensor tan enérgico de su causa, que usurp6 la voz de ls indios 0 incluso que promovié un genocidio cul- tural desde un supuesto imperialismo eclesiéstico. La acusacién, sin embargo, resulta particularmente extrafiareferida a un religioso que abogé por resarcir a las victimas de la conquista. = | PARA SABER MAS ane chee Rind. La Leyenda Negra. Historia y opnién Nod: Aion, 5. somo mite, Muro. Bartolomé de Las Casas, un espaol contra Espa. Veni: Irs fons el Magni, 201, ENTREVISTA BERNAT HERNANDEZ: “LAS CASAS GANO LA BATALLA DE LA OPINION PUBLICA” FRANCISCO MARTINEZ HOYOS, OOCTOREN HISTORIA Pra unos, Bartolomé deLasCasas fue un santo. Paratros, un loco. 2Es posible laobjetividad con una figura asi? En el caso de las biografias dedicadas a Bartolomé deLas Casas, antipatiasy sim- patias han quedado muy enfrentadas en Jasaproximaciones que reaizaron Ramén Menéndez dal Isacio Pérez Fernéndez, respectivamente, Fue mucho mésecuani- meen susjuicios Marcel Bataillon. Por mi parte, estoy convencido de que es posible acercarse ala objetividad del tratamiento del personaj atraws dela documentacién propia y de sus coeténeos, sometiéndola alandlsisdel contexto, esenmascarando lapparcialidad de juicios de propio perso- naje overtidos por observadores ajeno Como referia el poeta John Donne, “nin- guna persona es una isl”, La opeién de tuna biografia coral, mostrando los vineu- Josy relaciones de Las Casas y situdndolo tofesor de Historia Moderna de la UAB, Bernat Hernén- dex es especialsta en la Es- pafta del Siglo de Oro yen acolonizaciénde América. Gon Bartolomé de Las Gasas (Taurus, 2015) situé al dominico en el clima intelectual desu época, distanctndo- ‘sede tantos estudios que ensalzaban ‘odenigraban aun supuesto personaje solitario. El libro se publicé en la co- leccién “Espaiioles eminentes”, pro- ‘yeeto coordinado por Ricardo Garcia Gércel y Juan Pablo Fusi que desafia

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