La obra de Gordon impresiona por su amplio alcance, pero su lectura es un verdadero placer. Describe cmo la fontanera interior y los servicios municipales de agua corriente y alcantarillado tuvieron consecuencias irreversibles para los seres humanos. La electricidad, la pasteurizacin, el telfono y la penicilina, as como muchos otros inventos que hoy damos por sentados, cambiaron nuestra vida por completo. Sus descripciones no tienen nada de aburridas, porque, aparte de los criterios econmicos habituales, recurre a muchas otras fuentes y ancdotas para contar y enriquecer un apasionante relato que ana la innovacin, la historia y la economa.
Durante la mayor parte de la historia de la humanidad, el progreso econmico
fue increblemente lento; desde hace tres millones de aos hasta los comienzos de la Revolucin Industrial, el nivel de vida se multiplic por dos, con un crecimiento del 0,00002% cada ao. Entre 1800 y 1870 volvi a duplicarse, y entonces fue cuando despeg la economa mundial. La productividad creci a gran velocidad a partir del final del siglo XIX, alcanz su cima en 1950 y despus se fren. El autor cree que las innovaciones han sido ms lentas desde esa poca y que los beneficios de las mejoras tecnolgicas se han repartido peor. La primera afirmacin sorprender a muchos lectores, pero la segunda es bien conocida y muy cierta. En los 70 empezaron a aparecer vientos que sacudieron las empresas estadounidenses: la competencia de Japn, la subida de los precios del petrleo y el aumento de la desigualdad entre los ricos y los dems. La productividad pas de crecer un 2,8% entre 1920 y 1970 a slo un 1,62% desde ese ao hasta 2014. El envejecimiento de la poblacin, el aumento de los costes sanitarios y educativos y el malestar social han quedado muy patentes en la campaa presidencial actual. Gordon no tiene muy buena opinin de los tecnoutpicos, pero no todos los observadores estn de acuerdo con l en que la nueva economa de la tecnologa de la informacin sea un espejismo. No se detiene demasiado en la inteligencia artificial ni tampoco en que, gracias a la impresin en 3D y a Internet, la revolucin de la informacin est extendindose del mundo virtual al mundo fsico.