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Editorial editado que fue publicado en el diario "El Heraldo" de mayor circulación en la ciudad de Ambato - Ecuador - Sudamérica acerca de la importancia de lo que pensamos y cómo repercute en nuestra salud física y emocional.
Editorial editado que fue publicado en el diario "El Heraldo" de mayor circulación en la ciudad de Ambato - Ecuador - Sudamérica acerca de la importancia de lo que pensamos y cómo repercute en nuestra salud física y emocional.
Editorial editado que fue publicado en el diario "El Heraldo" de mayor circulación en la ciudad de Ambato - Ecuador - Sudamérica acerca de la importancia de lo que pensamos y cómo repercute en nuestra salud física y emocional.
MEDICO ACUPUNTURISTA Doctor en Medicina y Ciruga en la Universidad Central del Ecuador Especializacin de dos aos de postgrado en la Repblica de China en ACUPUNTURA Y MOXIBUSTIN
Yo soy lo que pienso
Salvando quienes padecen trastornos neuroqumicos debido a enfermedades psiquitricas severas, quien no tiene un propsito central en su vida cae presa fcil de preocupaciones banales, indecisiones, inseguridades, miedos, problemas, y auto-compasin, dirigindose, tan seguro como si lo buscara con intencin, al fracaso, la infelicidad, porque la debilidad no puede perdurar en un universo de poder. Si tomamos en cuenta que el propsito es procesado con nuestros pensamientos quedar claro que somos el resultado de lo que pensamos. Adems, es sabido que el cuerpo es tan solo el siervo de la mente, ya que obedece a las operaciones de sta, sean estos deliberados o automticos, entonces, si tenemos permanentemente ciertos pensamientos indebidos o txicos utilizando dainamente la imaginacin y la suposicin negativa, destructiva, el cuerpo rpidamente se hunde en la extenuacin y la enfermedad. Debemos saber que ms del el 90% de las cosas malas que nos imaginamos nunca suceden. En muchas ocasiones, la salud y la enfermedad, al igual que las circunstancias, tienen su raz en los pensamientos, si stos son enfermizos se expresarn a travs de un cuerpo enfermo. Frecuentemente, la gente que vive con temor a las enfermedades es la gente que las contrae. La ansiedad rpidamente debilita el cuerpo, y lo deja expuesto a la enfermedad; mientras haya pensamientos viciados, aunque no tengan un origen fsico, pronto destruirn el sistema nervioso. El cuerpo responde rpidamente a los pensamientos que lo dominan; los hbitos de pensamiento, sean estos buenos o malos, producirn sus efectos sobre l. Cuando decimos rumiar usualmente nos referimos a la costumbre alimenticia de los animales herbvoros de masticar por segunda vez el alimento, devolvindolo de la cavidad del estmago donde estuvo almacenado. Por analoga, decimos que una persona es rumiadora mental cuando piensa de manera reiterada y obsesiva la misma cuestin. Por lo general el pensamiento repetitivo se localiza de manera obstinada en los era de si hubiera porqu, los cmo y los qu de una emocin generalmente perturbadora, tratando intilmente de hallar una solucin o un aplacamiento al malestar. Se ha estudiado y se ha demostrado que el pensamiento reiterativo puede llegar a enfermar a la persona porque se perpeta un crculo vicioso que recicla la preocupacin, la ira o el resentimiento aumentando el problema emocional en base a la permanencia de los pensamientos negativos. El pensamiento es la fuente de toda accin, de la vida y su manifestacin; si deseamos bienestar fsico y renovar nuestro cuerpo, seamos selectivos con nuestra mente. Pensamientos de malicia, envidia, decepcin, desaliento, le arrebatan al cuerpo su gracia y salud. Una cara amarga no es cuestin de azar, sino de sobre pensar circunstancias de amargura. Vivir continuamente con pensamientos malvolos, cnicos y envidiosos, es confinarse en una prisin hecha por uno mismo. Un cambio de dieta no ayudar en nada a una persona que no cambia sus pensamientos. Mucho tendr que ver la actitud mental que tengamos ante las circunstancias, todos hemos visto arrugas que desfiguran y que estn hechas por la necedad y el orgullo; muchos hemos visto a alguna abuelita ochentona que todava conserva la inocente y luminosa cara de una nia. No nos obstinemos, la obsesin slo sirve para malgastar nuestras facultades. El pensamiento nos es til si lo ubicamos en su sitio, si no exageramos su uso. Realmente, el pensamiento reiterativo no es otra cosa ms que la manifestacin de la intranquilidad. Relajar nuestra mente y no pensar en nada, para nosotros los occidentales, nos resulta muy difcil, porque cuanto ms intentamos desechar un pensamiento, ms se fortalece. Es una de las tantas paradojas de la mente, frecuentemente, el no querer pensar en algo o alguien lleva a que pensemos ms. Cun importante es aprender a engaarle al cerebro, distraerlo, cambiarle de tema, hablar con alguien de un tema distinto, comprendiendo que el pensamiento reiterativo no es saludable. El infierno o el paraso no es un lugar sino una decisin de pensamiento, para esto, no slo debemos desafiar, sino tambin decidir en qu pensamos, sintindonos as dueos de los mismos. Tener la libertad de decir que no somos esclavos de nuestros pensamientos negativos o txicos, y que, si la frentica vida que llevamos actualmente los provoca, pues que estn bajo nuestro dominio. Cuanto ms nos entrampamos en lo que pudo haber sido o en el resentimiento sobre algo o alguien que nos lastim en el pasado, ms nos alejamos de la salud. Somonos libres en todos los aspectos, libres de pensamientos dainos, esto implica tambin dejar de ser esclavos de nuestras opiniones. Mahatma Gandhi deca no te apegues a nada, ni siquiera a tu opinin. Tuve un enemigo que segua mis pasos y aunque parezca extrao, yo no lo conoca. Mis planes, mis metas, todo desbarataba. Un da pude encontrarlo, le destap la cara y me encontr a m mismo, desde ese da todo se transform! aquel enemigo, mi amigo se volvi.