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El cine puede ser muy perturbador, y cuando no nos trastorna, al menos no en la manera en
la que esperamos ser trastornados, o conmovidos, segn sea el caso, se puede volver un
infierno, un infierno que vale la pena, porque trastoca tu perspectiva, ese es el cine que vale
la pena: no te complace, te provoca. Es curioso cmo en el cine de terror hay cierta
expectativa y ciertos lmites bien estudiados de qu se le puede ensear a la audiencia y
qu no. Despus est toda esta ecuacin en la que van resolviendo cmo quieren que
reaccione su audiencia. Esto de alguna manera ha generado una frmula que ha llevado al
gnero del horror a una decadencia tan barata como espantosa, y a pesar que The Killing
of a Sacred Deer no es propiamente una pelcula de horror, pocas veces se ve a una
audiencia salir as de perturbada de una sala de cine, tambin tenemos que tomar en
cuenta que es esta es una audiencia mucho ms difcil, que ha visto mucho ms, que gusta
de todo tipo de violencia. El cine de Yorgos Lanthimos raya en la ciencia ficcin, sin ser
ciencia ficcin del todo, coquetea entre el drama y un humor negro particular, retorcido, su
violencia es discreta, al principio...
(foto 1)
La voz de Kubrick tiene una resonancia en su trabajo por cmo maneja el tiempo, la tensin
y por su amor a los detalles, y a pesar de que esa lectura, de que esa perspectiva est
latente en la cinta, Lanthimos la lleva a otra parte completamente diferente en un ejercicio
aterrador de calibrada tensin, que aprieta y aprieta, como una serpiente, hasta casi
sofocarte. Lo primero que vemos a cuadro es un corazn expuesto que est siendo
operado, muy apenas, casi una instalacin de arte, las manos de un cirujano trabajan
indecisas aqu y all, hasta que finalmente vemos cmo el cirujano tira su bata, sus guantes
blancos con intervalos de sangre en un cuadro idntico, pero inerte, una alegora que nos
acompaa a lo largo de la pelcula, un pulso. As nos presentan al personaje de Colin
Farrell, un cardilogo exitoso que forma parte de una vida frvola, sinttica, ideal, su
esposa, interpretada por Nicole Kidman, as como sus hijos son de extraordinaria belleza,
viven su vida elegante que se resuelve sin esfuerzo a travs de esas sencillas ecuaciones
que han terminado por delimitar su rutina.
(foto dos)
(foto4)