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Alfredo Eidelsztein Las estructuras clinicas a partir de Lacan Vo.umen T Intervalo y holofrase, locura, psicosis, psicosomattica y debilidad mental Leia Skies ] Lasestroctaas clinics partrde Lacan, [Volumen 1} . ~2° ed Buenos Ares: Letra Viva, 2008 Indice Bi ps2dx locm, ISBN 978 950-649-003-1 mernopuCCION - 7 1. Pecos Lito COB 150.195 ‘CAPITULO 1: Ua abordse logics de tas ectructurascinias.. n os ‘2 Elsujetode in ence an n B Ciencias saber Fa Propidaies del saber entific. an 4. Propiedads del sjoto dea cicnsia - 25 ¢ Sujeta divididoe intentonde la ciencia de vlurasio 28 E Les nocion “sujet” con a que opera bn cieocia “a2 f ncompletcly vera : ee I Peicanaliis con Wigiea ee 35 i Coerovien y partiulardad 38 CAPITULO 2: Bibs einer: eeclnca “mle ede” 45 Chica 7 “ —s b Extructura. 2 gs i rr di ob ch 58 asp) : ee Laclinica del “mia ald del pore 7 64 { Bxtracion det ebjet a Interaloyholfiase 8 Lan tabla das estrcturae | CAPITULO sta cura. . 89 = Lalacuray las extracuras dnicas 88 | bE agntstio heptane 87 € Ladetsina dol ocura de Lacan = 92 (© 2008, Letra Vins, Ubrerfay Ea | iain: samtionameneenetta ie Coren Dit 8%, Benn, Arr | CAPYTULO-4: Interval hobofrase (1), 3 cm: etrnbadedeana corn Una cuetion pretiminar nS ug bs Peigustran médicns y medicamentas i : ¢ Laestrocsura normaliraia awe Ques hecho depo que mara fey 12.72 3 Tae sible dea react doar pd —189 lempreso en l Argetina = rink in Argentina } ) bases firmes como para.er utilizado on peicoandlicis, debe ser sostenide sabre un fandamento de lenguaje. Para al fin se propone consideraralindveuropeo comola base lingiistica def que se dencmina cultura occidental, sn alvidar FC, pareerpla ER. Dadds, Los griegeay lo inecinal Alina, Madrid, 154), en donde t ateaece Ins deren das foraacaoea del mosaacate begin el orden sunt. {Rath Fadel, Aquion an din quiere detrutr anes fo endoqonce Desnastial, 197, dome ‘Se atica ef desconccinloato de lon paisanatates de los fatare Restéice- cultural €0 ‘Sus endiss del wajeto horas, 13 \ ‘Aurespo Buenecrens ‘que la misma implica, adems, a la tradicién judeo-cristiana como la fuente religineay ala ciencia moderna como la modilidad de-elaboracin del saber. El indoeuropeo es un lenguaje perdido, vive hace alrededor de 4,000 ‘atios, del cual se origind una gran familia de lenguas, muchas de ellas hoy muertas. Entre las muchas ce estas ‘itimas se haltan: el hitita, el griego -antiguo, el latin, el galo-y o gético; do las lenguas vivas originadas en el indoeuropeo, se hallan las lenguas romances, el iranio, lengua de la India moderna, el armenio, el griego moderno, el alemén, el inglés, todas las lenguas eccandinavas, cl ruso, ol polaco, ot holandés, etc. El indveuropeo, ademis de ser el origen de tal oonjuntedelenguas, se caracteriza, a pesar de los siglos transeurridosy de la:inmensa superficie del mundo que compren- de, por una sorprendente conservacién del vocabulario correspondiente al parentesco. Tal vocabulario de las relaciones familiares bastaria para demostrar el tronco comtin del que derivan todas estas lenguas. En todo el mundo cultural del indoeuropeo se conserva una estructura familiar originada en un padre mitico y transmitida por filiacién paterna?. En los, préximos capitules se haré.gran uso de laa propiedades del inéoeuropeo para resolver cuestiones planteadas tantoen el émbito dela préctica como de Ia teorfa psiooanalitica. ‘Settipitica ala sociedad occidental moderna como “sociedad cientifica” El ‘hacerloimplica costener que todos los otros adjetives quella pucde recibir y que seguramente sele asignan correctamente, para el psicoaniisis, quedan, determinades o subsumids por In designacion de sociedad cientifiea. La presenciadella ciencia y sus efectos es elevada ala categoriadedeterminante fundamental en la tipficacién de la sociedad moderna. Los sujetos.de una sociedad asidefinida serén, consocuentemente, “sujetas deta ciencia” —Aguf se plantea un problema, ya que, dada esta alirmacién, se hace necesario aceplar la nocién de “sujeto de la ciencia", lo que contradice ‘algo que frecnentemente es afirmado en efreulos lacanianos. Si se acepta Ja nocién de sociedad cientifica, los sujetos de esa sociedad serdn sujetos de laciencia, pero cierias autores lacanianosafirman que “Ia ciencia forcluye al sujeto” y, dado que la forclusidn es una forma de plantear que algo es suprimide de tal manera que no puede retornar en el mismo campo del |. que fue excluido, se deberia conclair que no hay sujeto dela eiencia. ~ Sastener que el sujeto de Ia ciencia esta forehuido-es un prejuicio que entorpoce enormemente la posibilidad de entender las funciones especificas dol psicoanalisis asicamo muchos de los problemas clinicos fundamentales ‘que:se plantean al psicoanalista. ‘Es cierto que en algunos textos Locan sostione que la ciencia forcluye: al sujeto, asi como en nuchos-otras opera con la nocidn de “sujeto de La 3. Gialenasinte bree Emite Braveniste Wicabularisdelos insiturione indoearopess, “Tooray, Madd, 1958 14 Las eormvcrunas cutacas 4 pum Lacax (Vous T) céencia”. Lo que convienc discutir no es ci afirmé tantas vooes e2o y tants otras lo contrario sino sila enseitanza de Lacan requiere 0 no la nociéa. do sujeto de la ciencia. La propuesta es intentar resolver légicamente: si correspond ¥ conviene laborar en el psicosnslisis orientado en las ense- fanzas de Freud y de Lacan, con la noci6n de sujeto de la ciencia. Para empezar a pensar este dificil problema y poder tarnar partido enla polémica, se proponen algunes ejemplos “occidentales” que pueden servir para hacer més evidente la mecesidad de la nocién de sujeto de la ciencia. ‘Todas ellos son conocidac. EI primeroves del prefacio de las Memorias de Schreber!, donde 6! sostiene: “Cuando comencé este trabajo, no tenia intenciones de publicarle. La idea de su publicacién five cobrando formaa medida que avanzaba. Por cierto que tuve presenie las exigencios que parecian. ser un obstéculo ora su publioacién, sobre todo la preacupacién de novofender a ciertas personas atin en vida. Pero-estoy plenamente couvencide que tanto para 2a ciencia como parcel reconocimiento de las verdadesreligiosas, seria ‘itil que mientras yo viva, ias outoridades campetentes puedan venir a ‘hacer las veriicacianes necesarias en mi propio cuerpo y comprobar las vicisitudes que he sufrido. Tal consideracién debe prevalecer por sobre toxto eserdputo de orden. personal.” Es de destacar que para Schreber, el testimonio de su malestar y del tipo de sufrimiento especifice padecido en su cuerpo, tiene como prinetpal interlocutor vilido a la ciencia. Y par eso les propone a los cientificos y en especial a los médieos, hacerle las verificaciones que correspondan. _ El dirigirsea a ciencia ya implica una modalidad muy pocutiar de rela- cin del sujeto eon ef Oro- Evidentement, es muy distinte dirigiree un ‘Otro cancebido, por ejemplo, como tn Dios tinice ¥ personificado © como tuna cieneia impersonal y andnima, La posicién del sujetoes evidentemente ddistinta segiin una u otra modalidad del Otro. El segundo ejemplo es mas indirecto pero interesante también. Na se trata de la psicosis sino de la histerin. Es.de Bl Nacimiento de la Clinica ‘de Michel Foucault, también de su prefacie?. Dive asi: “Este libro trata det espacio, del lenguaje y de la muerte; trata de la mirada. © hacin:medindos del siglo XVIIT, Pomme euidé y curd a una histéri- ca haciéndola tomar ‘bafios de diez a.doce horas por dia, durante diez meses completos’, “Al término de esta-ctera contre: el desecamiento del sistema nervioso y el calor que do alimentaba, Pooume via “porciones membranosas, pare 6 ‘Auresoo Eimessorene cidasa fragmentos de pergamino empapado... desprenderse con ligeros dolores y salir diariamente con ta orina, desollarse a ta-vex el uniter dal lado derecho salirentero por la misma via”. Lomteme osurrié “con los itestinas que, en otro mamento, se despojaron de su tinica iaterna, la 4que vimos salir por el reete. EI eabfago, la tréquea y la lengua se habian desoliacoa.su vez; y1a.enferma habia arrojado diferentes piezas, wa por et wéimito, ya por la expectoracisn™* Se destaca este hecho, al menos tan sorprendente como elocuente: el natimienta de 1a elinica médica mosierna.cs mareado por Foweault, que es un especialista inigualable en el tema, por el tratamiento médica de la histeria. Que £1 Nacimientode/a Clinica comience por un tratamiento mé- ‘dico de una histérica se asocia al hecho de que ellcamienzo del psicoanalisis también consistié.en ol tratamiento médica deuna histeria, Quien atendi6 ‘la histérica de referencia, la que estuvo en el arigen del psicoandlisi, Berta Papenheim alias “Anna 0.”, fre un médica, el Dr. dasef Breuer, y no ‘el primer psicoanalista, que fue Sigmund Freud Eliltimo ejemplo que se va a aportar es de neurosis obsesiva, del primer ‘caso importante publicado de neurosis absesiva,elevado a la categoria de paradigma: El Hombre de las Ratas. Tal como esté indicado por Froud, +e trata de un sujeto que decide consultar luego de haber lefdo una obra eeddada caps fe aber dew ad > colon ai, ue 2 ‘eupane que sube; por el otza, no se sabe qué quiere la ciencia, 0 sea, no se ‘evitar lanesciencia, que se vincula siempre al deseo. El cientifin ea fapar de saber qué puede hacer y hasta qué puede llegar a saber, pero queda Gividido por un panto de neseiencia, ya que no puede saber quéquiere como CGentifico y qué quiere la iencia on i misma. Muchos de los problemas de ln ‘actual discasién sobre la ética del procoder cientifco, se derivan del hecho dde que Ia eioncia, como los Gentifics, no saben lo que desean. e. Sujeto dividido™ ¢ intentos dela ciencia de suturarlo Hay respuestas de Ia ciencia para contrarrestar el efecto antinémico _que se viene describiendo, o sea, el sujeto dividido-y su correlato: et Otro incompleto. Son fundamentalmente dos, muy dispares entre si, aunque articuladas en un punto: la Végica simbdlica moderna y la. pefoologta'®. {i Bs importa pura las cosieracioes psicoanaitica eta mndalitad de concer as tho, yee, vil sabio we autorsaligicamente ls estonia de anastas Shay “suet Supt sabe” como nici de festatce del rnetarnca en. prueba ‘altura opera el supoesta de que hay quien pose enor com ch. 11, Para Lobe el ands ba relacionentte desea y Genin es de cogesal importanca, [Pe gor para la partir det Reosczsentn el deseo Ue saber we ref ug justamente en Is Zoe tonderoa OC El Seninaria, Libro 1, La dca del pricoonalist, pags $85-386, hs, 4s, 198 11, cin de suelo vid dete ser itingsida de a de ofoninis, tng, cpa o es -Taericato el sujete Estas ltinaeserdn arrlladas ex capitnln pesterores, per ‘Ge abrmar obura que "sujetodivits" exequivalenie a “suelo de enevaie™.ye apis ‘tedasujtts homaoc hablasie mientrasque"desragecimienlo del zat” elo ee reere. Gato etetndel Sen determninnds daléchen oa cS. qut puede operar 00,3, eSioncns, Sore splice» toe jet humane bablatie. La divest es ura propiedad tds suet Formace hablante,micnlens quel fading ola afGniss cls cerecpander a cerns x50 en carts monenton 18, Lestas dense les podria agregar labia ls opsteecogi, ectendda por algunas camo “Snicrmscopia ental” (Ct, por ojala, Geonges Canguilhess, Bufes Phistire ct de pht~ Iaaphe des sence concernant fr vivant ea ie, Wis, Pris, 199), 8 ‘Las memucrumas cibacis a puerat oe Lacae(Voexaan I) Deade la perspectiva del psicoanlisis, la igica simbélica es una de las smodlidades fundamentales de Ia ciencia de suturar al sujeto dividido. {Qué es suturar al sujeto dividide? Sutura designa la maniobra de hacer ‘penser de dos, uno. Donde estd el intervalo, la hiancia, la abertura, se jntenta una sulura. Que la légica sea una de las principales formas de satura desarrollada por la ciencia se articula perfectamente.con lo que s= ‘afirranré més adelante respecto a in esencia Kigica del inconsciente, del ssajeto ¥ del objeto a. Légica serd la principal via del intento de suttira; ‘igica también sera la via por Ia que el psicoandlisis tendrd una chance de ‘mantener operante la apertura. Elotra recurso de la ciencia para contra srestar el efecto contrario que os cl sujato divide, ela psicalogia, o sea, a ciencia del hombre. Entonces, la ciencia moderna tiene dos maniobras. para suturar al $: la logicn simbética moderna y la psicologia. En el contexte de estas elaboraciones se consideraréa Ia légica de dos aodas distintos: 1) Como disciplina, In que comenzando con Aristételea, pero conociendo antecedentes méis antiguos, termina convirtiéndose en Ia Kigica simbélica ratemética. Para varias delos extudiasns dela filsafia dela bigicaes dudose ‘que exista un “cardcter esencial” para la definicién de la légica, aunque para la gran mayoria de Ios Kigins modernas, la Iigica es el estudio y el estableci- ‘micnto de los prineipios o cinones de la angumentacién valida, ade la valides dela inferencia. En este sentida, puede deciroe que una reflexién ligica se ‘cracteriza por partir de propasicones consideradas verdaderas sin requerir domectracién, todas las restantes proposiciones son derivacas dels iniciales| sfinalmente, el proceso de derivacién debe sor realizado sin dar par supaestos tras proposiciones. sea, la ligca como disciplina se ocupa de laa relaciones de consecaencia entre las premisasy lasconchsianesde una argumentacién, cucrecta. Deade esta posiciin son muchos los autores que ven en la kigica a In ciencia de las ciencias, ya que indicarfa ol correcto razonamienta da toda, inferencia centifica, més allé de cualquier contenile ‘Asi definida, se hace necesarie artieularlay distinguirta de la psicologia, ado que ésta seria, al menos en una perspectiva, laciencia que estudiaria, ‘1 correcto funcionamiento del pensamiento y sus fallas. Este punto de ‘confluencia entre ligica simbélica y psicnlogia, se veelaramente, por ejem- blo, en el titulo de la obra de Boole, “Las leyes del pensamiento”, y en la definicion de lbgica de Frege como “un lengugjessimbélicodel pensamiento aro”. El haber planteada a la bigiea simbolica y la psicologia como las dos odalidades de la eiencia moderna de suturar a sn efecto sujeto, guarda colierencia con el hecho de que efectivamente, desde el eammpo de la misma Jogica, se produce Ia asociscién con la psicologia. Desde esta perspectiva, cabo destacar que, deste que hay lenguaje ‘y seres hablantes, y no hay lo uno sin los otros, hay, necesariamente, 29 a Aurexpo Esoraseres en forma intea e intersubjetiva, disputa, discusién y refutacion. Desde fl mismo erigen, los seres hablantes levaron a cabo inferencias y so- ‘etieron a eritica tanto las propias como las ajenas. Esto sigue siendo ‘asi, obviamente, en la actualidad, Pore el surgimiento de a logica como ‘disciplina en el mundo griego, se produce a partir de cierta agotamiento de la religiosidad mitica como forma de concebir lo sobrenaturat. La mitologia fue una modalided del pensamiento religivsn que carecia, por ft misma estructura, de la posibilidad de critica racional interna. La teligidn con ambicién de racionalidad surge justamentecon la confiuen ‘ia de la fe monoteista hebrea y Ia racionalidad helénica levada a cabo por el cristianismo. En esta tradicién, y no pada ser en otra, surgen la Ciencia moderna y Ia logica simbtica 2) Gomo-un razonamiente sostenido en argumentas explicitos, com ecoherencia entre si, cuya valider surge de esa misma articulacién y no el uso por parte de las to6ricos profesionales-de La légica 0 de sus le- ‘yee. La formnlacién del razonamiento deberd tener uns forma tal que Permita el planteamiento de Ia pregunta elave sobre s{ mismo: “spor ‘qué afirma lo que afirma?”. A su vez, la modalidad de Ia respuesta ‘deberd posibilitar a su ves la critica racional. En psicoanslisis estos “prineipios” argumentatives deben ser considerados, porque'son recla- esde la posicién que ce ha denominado “sujeto de ciencia”. En Ta experiencia peicvanalitiea, esta dimensién logica: que ol sujeto diga “Zpor qué?”, es la que anuda Ia légica con Ia posicién ética, ya que el decir “por qué” introduce la dimensién de responsabilidad acentuada por el ineonseiente. ‘En peicoanilisis, en relacién con Ia Logica simbélica moderna como la disciplina arriba deseripta, no se aceptarén. muchas de sus leyes funda- ‘nentalee. A partir de Freud, se postula que el inconsciante esti regide ‘por una Kigica que no respeta los prineipios de no contradiccién, teroero excluide e identidad. Desde et mismo campo de la légica simbélica mo- derna, so pastula hoy dia Ia existencia de ligicas vilidas desde la propia diseiplina, que tampoco respetan tales principiag, como, por ejemplo, Las légicas plurivalentes, informales y paraconsistentes. ‘Cabe destacar, ademés, que también en el mismo campo de Ia. légiea simbélica, se ha introducido: 1) el problema del no-todo (a través de las investigaciones de Alonzo Church}, 2) el descubrimiento de las paradajes internas de los sistemas de Cantor y Frege y 3) la critica de Brower a la luniversalidad del principio del tercero excluide, Eatos desarrellos han rni- nado, en el campo de la légica simbélica Ia ilusién del todo completo, del tuniverso sin fallas. ‘Desde Lacan y para el psicoandlisis, se rechaza la validex de la aplica- iin de las nociones de universo de discurso (Augustus De Morgan) y de 30 Las poravevinas cunveas a resrin be Lac (Vou I) " getalenguaje (Alfred Tarski). En psicoaniliss se sostiene le contrario: tno hay metalenguaje”, en el sentido de un lenguaje que, par ser superior ‘sun lenguaje “natural” o “lenguaje objeto” supere los efectos estructura “ese todo lenguaie, o sea, no hay melalenguaje que pueda ser hablado" No hay universa de diseurso”*, coma conjunto universal, come un Otro a oe Seite tod elas caracteristicas de esta lgica simbética, impartan crn ae ee oem tyson ssyjeto bablante la verdad tiene un valor dindmico eminonte, implica una faorzadialéctica. O sea, la verdad como motor del movimientoes totalmente borreda de! campo de ia Iégica, donde pasa a ser sélo un cuadro inerte. yeast uo ge nbn sostiene princinins qua niggan la dit (gina ‘Otm_ Cabe, a esta altura, inciuir entre los argumentos referidos a ta in- completud del Otro, el que afirma que todo orden simbélioo so muestra inoampleto a la hora de justificar formalmente los axiomas sobre los que ‘se fundalo que es obvio con silo recordar lo que “axioma” quiere decir. Es Ig que merece ser crefdo a considerado digno”, y en los sistemas formales ee aquella proposicién primera considerada evidente e indemostrable. La otra dimensidn que propone la ciencia para wir; dividido ea produce, es el desustollade la iene det hombre pang on, figs omio ceneia moderna, oe fanda en la mszniobra gos Sey ‘chjeto do estudio, un objeto de conocimiento cientifi. De esta manera, la _psicologia tiende a cerrar el efecto sujeto, suturarlo, mediante la objetivacién. Ludi esel nombre del sujeto convertidoen objeto”: el hombre. Entances, como jeto de estudio, et sujeta es tomado en una aparente unidad del hombre. El sujete dividide al convertirse en objeto de estudio, pierde toda po- “sbilidad de condicién particular, ya que, lo que se pueda decir de él eome ‘objeto de estudio, serd vélido para lo inmensa mayoria. de los mismos, ‘consideradas como unificades, equiparables y normales. Esta es la maniobra objetivante mas grande y prestigiosa que jamis ‘haya existido, dado cl reconocimiento que la ciencia pasce en la actualidad, Sea. rete Sesonsione “saeralizacion de la ciencia™, las implicancias subjetivas del desarrailade las concepciones ‘de la légica simbélica y Ia. psicologia, hay otro efecto de In presencia de Jaciencia en la subjetividad moderna, una verdadera usina de malestar: Sn ener rele ciencia, se considera a todos los 0 por igual asi las diferencias particulares propi ‘codiidn subjetia Elquelacleni tome ede por igael wean or ‘WGl px me, Subvernin del aio 3 dite de dene nel iconscinte Bacritas 2, pig. 793, Siglo XXI, Bs. As, 1992. “ —= 16.0 peje Senin iro 1 La cn dl ntti, n, ec dl BOOST aL Aurmpo Ewecrran [Las estaocrumas cunecas a pasmia De Laci (Vousnass 9) ‘en esto caco de Ia teoria matemitica de los juegns de estrategias y ‘propiedadesantes reseitadas, producen en la subjetividad moderna efectos, a _ ™ fonucta econémica, desarrollada por J. von Neumann y O. Morgenstern de malestar muy especiales. Entre ellos, por ejemplo, segdn la designacién de Freud: “el narcisisino a ella seopera con una nocién muy especifica de sujeto. de las pequefias diferencias” y la politica de segregacién que esto produce, ‘Losjuegos de estrategia no deben ser confundidos con cualquier “juego innegablemente son consecueneia, respuesta, a que la ciencia postula a de salon" 0 “juego de azar”. El ajedrer esun juegode estrategia, la ruleta todos por igual. Loe sores humanos modernos, ls de fin de este sigho se tio, no hay nada de estrategia en ella. Hay-juegos que son de puro azar, hay ‘tratande de hallar la diferencia que fundamente su identidad juogos que con de pura estrategin y hay juegos mixtes. En el ajedrez no ‘yla manera més frecuente e initil de hacerlo es segregando al de al lada. Jhay nada de azar. Hay juegos que son mezcla de azar y estrategia, como, El nazismo podria ser considerade come el ejempla mas sobresatiente. por ejemplo, los juegos de cartas como el bridge (depende de qué cartas ‘Tembin parece innogable que elincremento dees fanatismas religicsos toquen y qué estrategia se elija para utilizarlas. es otro efectade la presencia de Ia ciencia. Elinerementode bs fanatismos ‘Gabe destocar quelos juegosde estrategias como el ajedrez y los mixtox ‘eliginsos es un efecto de la precencia de la ciencia, porque esa forma de ‘como ol bridge, estn muy presentes en las consideraciones psicoanaliti- ‘religioeidad os un retorao ao irracional, que fuera erradicado progresiy cas. Al menos se debe tener en cuenta que la metéfora fundamental del mente por la racionalidad cientifica. Pero dado que contempla Ta funcidn despliegue de un andlisis para Freud, su creador, es el juego de ajedrer, de a verdad subjetiva, estina opeiéa que cautiva aun inmenso nimera de y que Lacan, también aporta Ia suya: ol anélisis como wna partida de sujetos. La ciencia impane por doquier un discurso rational que forcluye inidge. Algo equivalentesucede en la lingUfstica. También F deSaussure la verdad. Los fanatismos relgiooos rointroducen Ia verdad pero sobre la compara y articula la estructura de la lengua con el juego de ajedrez base de la discriminaci6n y la irracionalidad de Las explicaciones. ‘Todo indica que la teoria matematica de los juegos de estrategia y su ‘Se verifica que a mas desarrolll y extensién de los efectos de la presencia eoncepcién del sujeto, debe ser articulada a lo que en psicoandlisis se dela ciencia, les corresponde mas religién, mas mistica y ms magia. Al J eneibe como el sujeto, contrario de lo que muchos creyeron durante varias décadas del comiento, ‘Guslesson las propiedades asignadas al sujeto delosjuegos de estrate- aeactes. gia por el andlisis matematico? Que el sujeto: 1) quiere ganar (sabelo que ‘Dentro de-este cuadro, el psicoandlisis oomo respuesta terapéutica al | quiere y quiere su bien), 2} conove todas las reglas, 3) mientras uega no malestar en la cultura moderna, esté destinado a ofertarse para la recupe- olvida nada del juego. Es importante tener en cuenta que para esta rama witjén de la condicidn particular de cada sujeto (eato es incluir su verdad | do las matematicas, el sujeto debe tomar decisiones, ya sea en un juego yy su deseo, sin la exclusin del projima), quo atempere el sufrimiento en comoen una empresa 9 negocio (de ati la “conducta econémica”), 0 sea, Zxceso, dentra de un discurso racianaly que sea formalmente communicable. | 5 enfrenta a elecciones responsables. Es por eso que la propuestade trabajo entorno delas estructuras clinicas, Esta eoncepcidn del sujeto, clevada a la categoria de “la concepeién ientifica del sujeto”, proviene del hecho de que la ciencia olvida que el ‘orden simbélieo no es completo. ¥ si al arden simbélico se lo supone com: pleto, entonces: se pueden saber tadas las roglas y no se olvida ninguna maniobra. El sujeto dela ciencia, esl sujeto quese eoardina con un orden es realizada sobre la base de un diseurso racional. £ La nocién “sujeto" oon la que opera la cienci simbélico completa. Laciencia, ademis de intentar suturar al sujeto que engendra, opera ella No sélo desde el campo del peicoandlisis se objeta a la concepcién que tambien, conta nocién de sueto, O sea, el cuuero es complejo. Dada una | hacedeun orden simbélico un todo completo, Basterocordar eldesarrallo maniobra sobre el saber, se produce un efecto de sujeto dividido, Este efecte enel mismo seno de lo mas prestigioso del mundo de Las ciencias exactas Sujet, dado queesantinémicoalaciencia,justamente por ser dividido,es | modernas, el teorema dela incompletud de la aritmética de Kurt Godel: ‘atacado en su divisién mediante un intento desutura, a través dela légice las ecuaciones de incertidumbre que Heisemberg demostré para la fisica, la paicologia. Pero, ademas de intentar sutararlo, eonviene perentairse ¥ las invectigaciones de A. Church on torno a Ia. oplicacién del teorema que la ciencia también opera con una nocién de sujeto, loquehace desistir de Godel a la légica simbélica moderna. Como se afirmé mas arriba, las definitivamente de la idea de que la ciencia forcluye al sujeto. ‘concepciones psicoanaliticas en torno a la incompletud del Otro, se ven El uso, por parte de la ciencia, de la nocién sujeto, se puede establecer, por ofempio, en torno del andlisis del sujeto del céleulo deestrategins. St |) 36 Tica of Gance ond Eooomic Beenie, Prinexta University Press, 1844. 32 Aurmso0 Eisesseres avaladas por ciertas desarvollos de incnestionado valor cientifico en ma- temitica, Fisica y Vien. g: Incompletud y verdad El sujeto tal como lo concibe el psicoandlisis y sobre el que practica, no tiene por correlato un orden simbélico completo, al sujete dividido (8) le ‘corresponde un orden significante incompleto (A). Pero la ciencia tiende alhacer caso omisodée que el orden simbélica no es'completo. Ineompletud ‘camo la que recién se afirmd, puode-ser demostrada en los mismos términos de la ciencia. Bs desde ella misma que puede afirmarse que no existe un ‘arden simbsilico canspleto, al eual le corresponderia, un susjeto como el del ‘célculo de estrategia, un sujeto unificads, Se trata de una ilusién, quiz ‘a mis importante ihusi6n de la ciencia moderna. Elsujetoesdivididoy estoce manifiesta fundamentalmente en el émbito de la verdad. Es por eso que la.ciencia forcluye la verdad. La incompletwd dal Otro, del orden simblico, seregistra esencialmente como un problema de verdad: no se puede saber la verdad de Ia verdad. Otra forma de decirio es. que no hay garantfa respocto de Ia verdad, “no hay un Otro que garan- tice la verdad del Otro”. ¥ lo que la ciencia forcluye es esta dimensiém: Ia nexistencia de la verdad dela verdad. ‘Como demectrar que:no hay verdad de la verdad? Primeramente, si se acepta que la verdades una dimensisn introducida en lo real por la palabra, hay que aceptar qoe toda palabra verdadera es mentirosa debido a que siendo- queella parece referirse a loreal, no hace otra cosa que opanerse y entrain secon otras palabras. Secundariamente, toda palabra es mentirasa entanto, que toda palabra verdadera, para postularse como verdatiera, debe decir de si misma que noes mentirosa, lomismo que toda palabra mentirosa. Una. palabra mantirosa para mentir dice de si misma que no es mentirasa, hace exactamente lo mismo que hace Ia palabra verdadera. Este es el problema: ‘como Ia verdad es una dimensién intreducida en lo real por Ia palabra, es la palabra mismala que debe garantizarla verdad, adiferenciade la exactitud que se garantiza por su adecuacién a loreal. ¥ In palabra para gerantirarse como verdadera, debe decir de sf misma que no es mentiresa, lo que Ia hace {déntiea.ala palabra mentirose, Con lo cual no hay palabra que pueda evitar los efectos de la falta de verdad de la verdad, Siendo quoe! Otros incompleto, ee pusdesafirmar en el mise sent, que no hay Otroque garantico la verdad. Lo.que se acaba de decir contra dice, en otro sentido que el antes expuesto, la frase de Binstein: “Dios no ‘engafia”, ya que de eso no hay garantia. Las esmuvcronis exbocas 4 mura be Lous (Voune Psicoanslisis con bigica _Sien coon on argument bajo formas no caerents, com frases das o6lo por el prestigiode-sus autores, sin la validacién de wna argu- Be atrial coabesotcecve + duterucier dolar etre veqries “ios efectoade la presencia dela ciencia en elmalestar en la cultura, coma ‘a magia y la religiGn. Cada psicoanalista esté destinada a encarnar la respuesta racional, cientifica y particularizada a las demandas eausodas porel malestar en la cultura, cuya modatided actual esta connatada por Jos efectos dle la presencia dela ciencia moderna. El tratamiento que se realizara del tema de las estructuras dinieas no consistird exclusivamente en un comentario de textos; lo quese afirme no se van sostener necesariamente con citasde autores que tengan prestigio. _yreconocimiento en la actualidad, que hagan tener confianza en aquello. _que se dice, como por ejemplo Freud y Lacan. El motivo de ello es que él ee que dard continuidad a toda la claboracién es una légiea; se intentar fundamentar lo que se afirme con una elaboracién sostenida por una ar- tacién racional. Sin embargo, el abordaje mas frecuente de estos problemas es el que ‘eonsiste en concebir la nocidn de estructura elinica como un cuadro sdinico. El término “cuadro” es muy elocuente del problema del que se ‘rata; muchas veces pareceria que la estructura misma de lo que es, por ‘emplo, una.neurosis obsesiva o una histeria, se establece en depondencia dela habilidad o genialicad en delinear “trazos" o“rasgos" tal como un ‘artista aplica pinceladas sobre un lienzo, © sea, se podria decir lo-que ‘asi todo el mundo dice: que el conociméento de las ectructuras clinieas ‘que legaron Freud y Lacan se debid a que ellos eran “grandes elinicos”. ‘Nose niega que hayan sido magnificos clinicas, sino que se parte de una ‘supesicién contraria: lo que ellos legaron como ensefianza se basa en Juna articulacién ldgica, que les permitié a ellos misioos desarrollar las eoordenadas de una prictica en la cual Ins estructuras clinicas hallan ‘lugar, y que esa légica es.comunicable y aplicable sin ser necesario el rasgo de genialidad. No se tratard, entonces, de sostener exclusivamente el tratamiento de las estructuras elinicas mediante lo que Freud y Lacan dicen que son, dato que ellos fneron magnifcos clinieos. Lo que se propone es que loque sesabe y se puede llegar a saber sobre lasestracturas clinieas, reposa so- breuna elaboracién eonooptual que es Logica y que lo que Freud y Lacan lsgaron fue justamente la ligica de la claboracién de coos concepts. La, Propuesta es establocer los términos y las articulaciones de-esa ligiea que, {ser permiten entender yjustifieretasfreudianas acaniana de 2¢ modo, favorecer nuevos desarrollos evitando repeticiones: oe repeticiones dogmaticas 35 ‘Aurespo Emeuserms (Con reepecto a las estructuras clinieas es especialmente importante la claboracién racional en sustitucién de la mera repeticién debido a que es un campo donde pululan Ios prejticios. Come ya oe dijo, es comin ‘que las estructuras elinicas sean concebidas come un cuatro. Sin una angumentaciéin fundada, los casos famosos, tales como “el Hombre de las Ratas”, "Dora" y “el pequefio Hans”, legan a funcionar como “los euadros originales", as verdaderas obras de arte de los genios del psiooandlisis. A partir de allf todo es analogia. Desarrollar una légica que permita soste- nner un discurse racional y eaherente sobre las estructuras elinicas ¥,a.su ‘yee, atacar los projuieios y paralelismos, es quiz uno de ls trabajos mas perentorios en el campo psicoanaliticn, donde reinan las obsesivas y las hhistéricas "de libro”. ‘Sélo una claboracién légica restituird el valor racional de los con- ‘ceptos psicoanaliticos. Pero, cqué relacién guardan ellos mismos con Ja logica?

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