Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Fuentes de presión
Páramo
Esta formación ecológica se ubica entre los 4,000 y 4,600 msnm, a ambas flancos de la vertiente,
formando una franja que se extiende hacia ambos flancos, incluyendo la proximidad del eje del río
que se prolonga hasta muy cerca de la naciente.6
El relieve topográfico es abrupto. El escenario edáfico presenta suelos superficiales de influencia
volcánica, no utilizables para el desarrollo agrícola, principalmente por las bajas temperaturas. Se
observa afloramientos rocosos con una vegetación constituida principalmente por gramíneas entre
las que se destacan los géneros Stipa, festuca Calamagrostis, y son aprovechadas exclusivamente
para el pastoreo de ganado lanar y vacuna.
Establecemos al páramo como objeto de conservación ya que, según el Mapa Nacional de
Cobertura Vegetal, éste viene sufriendo serios procesos de transformación y degradación,
principalmente por el cambio de uso de la tierra, mayormente por la actividad agropecuaria que
implica la quema de la cobertura vegetal original. La degradación de este ecosistema debido al
mal manejo conlleva a la pérdida de suelos, pérdida de la biodiversidad y afectación del flujo
normal del agua de escurrimiento.
Imagen 6. Páramo
Se pudieron identificar las siguientes fuentes de presión, de acuerdo a fuentes bibliográficas como
el Mapa Nacional de Cobertura Vegetal:
Fuente de Presión Impacto
Vertimiento de desechos sólidos Eliminación de microhábitats de la fauna y de
Tala de especies maderables sus fuentes de alimentación.
Bofedales
El bofedal es llamado también “oconal” o “turbera” (del quechua oqo que significa mojado),
constituye un ecosistema hidromórfico distribuido en la región alto-andina, a partir de los 3800 m.
s. n. m., principalmente en las zonas sur y central del país. Ocupa una superficie de 544 562 ha
que representa el 0,42 % del total nacional. 1
Este humedal alto andino se encuentra ubicado en los fondos de valle fluvio-glacial, conos
volcánicos, planicies lacustres, piedemonte y terrazas fluviales. Se alimentan del agua proveniente
del deshielo de los glaciares, del afloramiento de agua subterránea (puquial) y de la precipitación
pluvial. Los suelos permanecen inundados permanentemente con ligeras oscilaciones durante el
periodo seco y se han formado a partir de materiales parentales de origen fluvio-glacial, glacial,
aluvial y coluvioaluvial localizados en las depresiones de las superficies planas y ligeramente
inclinadas.2
La poca disponibilidad de oxígeno debido al drenaje pobre favorece la acumulación de un grueso
colchón orgánico proveniente de raíces muertas de las plantas y la materia orgánica en el sueño,
provoca un escaso drenaje del mismo ayudando así al mantenimiento de humedad.
Establecemos a los bofedales como objeto de conservación ya que, según el Mapa Nacional de
Cobertura vegetal, éstos son ecosistemas frágiles, porque ante un posible impacto negativo, son
muy difíciles que puedan regenerarse o volver a su estado natural.
La importancia ecológica de los bofedales se encuentra en la capacidad que tiene como almacén
natural de agua, así como verdaderos filtros naturales que mejoran la calidad del agua y son
además una importante fuente de forraje permanente para la actividad pecuaria alto andina basada
principalmente en camélidos sudamericanos y ovinos.
Fuentes de Presión