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Una de las consecuencias más peligrosas de estar pegados a los dispositivos, son
los desórdenes alimenticios que se pueden generar. Facildigital.com habló con un
médico especialista, quien comparte algunos consejos prácticos.
El doctor Germán Piñeres, director científico del programa Peso Saludable, explica
en primer término que los niños y jóvenes que ‘viven pegados’ al computador o a
cualquier dispositivo móvil no cumplen ni horarios, ni hábitos, correctos al
momento de alimentarse.
“Lo usual es que mientras comen, usan aparatos tecnológicos, por lo que el
cerebro no se concentra en el proceso digestivo y no genera la sensación de
saciedad”, explica el Doctor Piñeres.
Además, el cerebro genera costumbres. Así que, si el joven come al tiempo que
está conectado, el cuerpo sentirá necesidad de comer mientras estÉ realizando
esta actividad.
La tecnología es parte de la vida, y tampoco hay que satanizar su uso. Lo que hay
que entender es que tienen sus momentos y horarios adecuados para utilizarlo. Es
recomendable que le proponga a sus hijos actividades adicionales, que lo alejen
de los dispositivos.
Todos los miembros de la familia deben tener claro los horarios del desayuno, el
almuerzo y la cena, y lo más importante hay que intentar que se cumplan en la
medida de lo posible. Esto permite prevenir desordenes alimenticios y malas
costumbres.
La alimentación debe tener una zona específica en la casa. Claro, es una labor
difícil reunirlos a todos ahí. Lo importante es que desligue la alimentación del uso
al tiempo de aparatos tecnológicos, esto es vital para mejorar los hábitos
alimenticios.
El metabolismo del cuerpo utiliza las horas de descanso para recuperarse de todo
lo realizado durante el día, entre esto la digestión. Dormir bien (por lo menos las
horas suficientes) es una buena forma de ayudar con una alimentación más sana.