Vous êtes sur la page 1sur 9

ACTUALIZACIÓN

PUNTOS CLAVE

Feocromocitoma Concepto. El feocromocitoma es un tumor poco


frecuente, pero su malignidad funcional y su 10%
de malignidad histológica obligan a pensar en él.
F.J. Tébar Massóa y J.M. Rodríguez Gonzálezb
a
Debemos tener en cuenta que el 15-20% es de
Servicio de Endocrinología y Nutrición.
localización extraadrenal.
b
Unidad de Cirugía Endocrina. Hospital Universitario
Virgen de la Arrixaca. Murcia. Clínica. La clínica está marcada por la
hipertensión arterial, frecuentemente paroxística,
en la que puede haber graves complicaciones:
infarto de miocardio, accidente vascular cerebral,
etc. • Es imprescindible establecer el tratamiento
Concepto quirúrgico lo antes posible.

Preparación preoperatoria. El paciente debe


El feocromocitoma es un tumor que, de forma habitual, llegar a la cirugía con bloqueo alfa-adrenérgico.
asienta en la médula suprarrenal (80-85% de los casos) y más • El anestesista debe conocer el manejo de estos
raramente fuera de ella (15-20%), recibiendo en estos casos tumores, tanto para la inducción de la anestesia
el nombre de feocromocitoma extra-suprarrenal o paragan- como para solventar los problemas que surjan en
glioma. El 90% de estos tumores se presentan de forma es- el acto quirúrgico.
porádica, pero también pueden hacerlo de forma familiar,
frecuentemente asociados a los diagnósticos de neoplasia en- Tratamiento quirúrgico.El tratamiento de elección
docrina múltiple (MEN) tipos 2A y 2B, a la enfermedad de es la cirugía, que bien hecha comporta la
von Hippel Lindau (vHL), a la neurofibromatosis de von curación del proceso.
Recklinhausen tipo 1 (NF1) o en el contexto de un síndrome En el feocromocitoma maligno metastásico el uso
de paragangliomas hereditarios (PGH)1. de 131I-MIBG puede ser útil como coadyuvante de
Funcionalmente se caracterizan por producir y secretar la cirugía.
catecolaminas en cantidades muy superiores a la producción
de la médula suprarrenal normal, aunque una minoría no son
secretores en el momento del diagnóstico y se comportan
como incidentalomas suprarrenales. En la actualidad el feo-
cromocitoma se considera un tumor neuroendocrino2.
Las células de la médula adrenal forman parte del siste- MEN 2A hasta un 52% están asintomáticos en el momento
ma simpatocromafín, un característico prototipo de sistema de su diagnóstico, y sólo un 35% presentan HTA5. La malig-
neuroendocrino en el que sus células pueden secretar cate- nidad alcanza, incluso, un 10% de los casos.
colaminas, sustancias que funcionalmente tienen un compor-
tamiento tanto de neurotransmisor como hormonal. En el
sistema nervioso central (SNC) la adrenalina tendrá un efec- Etiología
to de neurotransmisor, al igual que la noradrenalina y la do-
pamina. En los tejidos periféricos la adrenalina, que se pro- Debemos considerar por separado la etiología del feocromo-
duce mayoritariamente en la médula adrenal, tiene un citoma familiar y la del esporádico.
comportamiento de hormona, mientras que la noradrenalina
fuera del SNC se comporta fundamentalmente como neuro-
transmisora, y escasamente como hormona. A la dopamina Feocromocitoma familiar
no se le reconocen funciones específicas fuera del SNC.
Su clínica está representada fundamentalmente por la hi- Tanto los feocromocitomas asociados a MEN como los aso-
pertensión arterial (HTA), considerándose que entre un 0,1 a ciados a vHL, NF1 y PGH se encuentran genéticamente
un 0,6% de los pacientes con HTA pueden presentar feocro- bien caracterizados. En los MEN tipo 2A y B el problema se
mocitoma3. Sin embargo, alrededor de un 5% de los inciden- origina en mutaciones del protooncogén RET del cromoso-
talomas suprarrenales son feocromocitomas, descubriéndose ma 10. En el MEN 2A la mutación RET se sitúa en la región
incluso un 25% de éstos en el transcurso de una exploración extracelular de la proteína RET afectando a los residuos de
morfológica de abdomen, o también como hallazgo casual en cisteína. En casi el 100% de los pacientes estudiados los exo-
una de cada 2.000 necropsias. En niños, hasta un 1% de los nes afectados son el 10 (codones 609, 611, 618 y 620) y el
casos de HTA es por feocromocitoma4. En los pacientes con 11 (codón 634); más raramente se encuentran en el exón 11

Medicine. 2008;10(15):997-1005 997


ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS (III)

(codón 630), en el 13 (codones 790


y 791) y en el 14 (codón 804). En el
MEN 2B la mutación más frecuen- L-Tirosina
te se localiza en el exón 16 (codón TH (O2 + BH4)
918) y con menos frecuencia en el
exón 15 (codón 883)6. Las muta- L-DOPA

ciones 634 (MEN 2A) y 918 (MEN AAD (vitamina B6)


2B) son las que asocian mayor nú-
Dopamina
mero de feocromocitomas. La fre- DBH (O2 ascorbato)
cuencia con la que se originan mu-
taciones RET de novo en línea Norepinefrina Epinefrina
germinal es diferente para MEN PNMT (S-adenosilmetionina
2A (50%) que para MEN 2B (5- COMT MAO
9%). Esto se relaciona con la dife- Normetanefrina y metanefrina Dopegal
rente expresión familiar: MEN 2A (3,4-dihihidroxifenil-glicol-aldehído)
tiene un mayor número de descen- MAO COMT ADR-ALR
dientes afectos que MEN 2B.
En los vHL, en donde la apari- 3-metoxi-4-hidroxifenil-glicol-aldehído 3-metoxi-4-hidroxifenil-glicol
ADH
ción de feocromocitoma se limita a AD
los subtipos 2a y b, la alteración se
centra en una mutación de un gen 3-metoxi-4-hidroxi-mandélico
supresor localizado en el cromoso- Ácido vanilmandélico
ma 3p25-26. Los feocromocitomas
de vHL son tanto adrenales como Fig. 1. Síntesis y metabolismo de catecolaminas. AAD: L-aminoácido aromático decarboxilasa; AD: aldehído-
paragangliomas6,7. deshidrogenasa; ADH: alcohol-deshidrogenasa; ADR-ALR: de la familia aldo-ceto-reductasa; BH4: tetrahi-
En NF1 la mutación genética dro-biopterina (cofactor); COMT: catecol-O-metil-transferasa; DBH: dopamina ␤ hidroxilasa; MAO: mono-
aminooxidasa; MEN: neoplasia endocrina múltiple; PNMT: feniletanolamina N-metil transferasa; TH: tirosín-
se sitúa en el cromosoma 17q11.2. hidroxilasa.
Aunque la presentación de feocro-
mocitoma en NF1 es baja (5%), es
la mutación del gen NF1, de estir-
pe supresora, la que da lugar a la aparición de este tumor7. tas mutaciones podrían inhibir genes supresores y favorecer
La alteración genética en los PGH se produce por muta- el desarrollo del tumor11. Junto a esto, hoy es bien conocido
ción del gen de la succinato-dehidrogenasa (SDH), que se que la angiogénesis desempeña un importante papel en la pa-
localiza en la rama corta del cromosoma 11. La mutación togenia de algunos tumores, y también ocurre en los feocro-
afecta al complejo mitocondrial II, que se diferencia en 4 mocitomas.
subunidades: A, B, C y D. La mutación del gen SDHD pre- En los tumores secretores de adrenalina es la enzima feni-
dispone a PGH1, las mutaciones de los genes de SDHB y letanolamina N-metiltransferasa, que cataliza la metilación de
SDHC predisponen a PGH4 y 3, respectivamente. No se ha noradrenalina a adrenalina, la que se encuentra sobreexpresa-
descrito la susceptibilidad genética para PGH2. La aparición da. También en feocromocitomas se ha detectado la existencia
de PGH es más frecuente para la mutación de SDHD y has- de polipéptido activador de la adenilato-ciclasa hipofisaria,
ta el 50% de los tumores podrían localizarse en el cuello8,9. que tiene la capacidad de inducir la expresión de enzimas que
intervienen en la síntesis de catecolaminas. Por último habría
que considerar que el feocromocitoma es diferente a la médu-
Feocromocitoma esporádico la adrenal normal en su potencial plurisecretor de péptidos,
que por su comportamiento hormonal o de otro tipo confie-
La etiología del feocromocitoma esporádico es mal conoci- ren significado a la expresión clínica del feocromocitoma7.
da. Datos recientes tras estudios genéticos indican que algu-
nos feocromocitomas clínicamente esporádicos presentan al-
teraciones genéticas. En el estudio de Neumann et al10, en Fisiopatología
pacientes con feocromocitoma no sindrómico, 66 de 271 su-
jetos (24%) presentaban mutaciones de las que 30 eran de El eje sobre el que gira la fisiopatología del feocromocitoma
vHL, 13 de RET, 11 de SDHD y 12 de SDHB. De los 66 es la hiperproducción de catecolaminas, en especial adrena-
sólo 21 tenían feocromocitomas múltiples y ninguno presen- lina y noradrenalina. Su producción no es exclusiva de la mé-
taba clínica asociada de MEN 2, vHL, NF1 o PGH. dula adrenal, pues también se encuentran estas sustancias en
En los feocromocitomas malignos se ha encontrado una el SNC, nervios simpáticos y células cromafines.
alta incidencia de mutaciones de p53. También algunos feo- Las catecolaminas se sintetizan en el citoplasma celular a
cromocitomas tienen receptores para somatostatina tipo 2 y partir del aminoácido L-tirosina, que procede de los alimen-
4, y este hecho se acompaña de una pérdida de heterocigosi- tos y de su síntesis en el hígado. Como se aprecia en la figu-
dad en el cromosoma 1p y, a veces, en el 3p, 17p y 23q; es- ra 1 la síntesis de adrenalina está precedida por la formación

998 Medicine. 2008;10(15):997-1005


FEOCROMOCITOMA

de una cascada de precursores regulados en su progresión feocromocitoma se le atribuya un tipo de HTA hiperquiné-
por enzimas específicas12. tica, vasoconstrictora e hipovolémica14,15.
Tras su producción las catecolaminas son almacenadas La posible asociación de feocromocitoma a fiebre y sig-
en gránulos de secreción bajo la acción de un transportador nos inflamatorios se debe a la producción de IL-6 por el tu-
de monoaminas a vesículas (VMAT)13. La secreción de cate- mor, citocina que también puede producir anemia, trombo-
colaminas por las células adrenomedulares se regula funda- citosis e hiperfibrinogenemia. Si el feocromocitoma es
mentalmente por fibras nerviosas de tipo colinérgico que li- productor de IL-1␤ puede cursar con colestasis intrahepáti-
beran acetilcolina, lo que termina por interferir con la ca. Con frecuencia en el feocromocitoma aparece hiperglu-
permeabilidad para Ca++ en la membrana y estimulando la cemia. Esto se debe a un efecto directo e indirecto de las ca-
exocitosis y liberación de catecolaminas. tecolaminas sobre el metabolismo de los hidratos de carbono
Parte de las catecolaminas son recaptadas por las neuro- (HC). Directamente las catecolaminas estimulan adrenorre-
nas, pero como se ve en la figura 1 el catabolismo hormonal ceptores situados en tejidos metabólicamente relacionados
conduce a la formación de ácido vanilmandélico por la ac- con los HC. Indirectamente lo hace a través de su acción so-
ción de diferentes enzimas. bre la producción hormonal del páncreas. En el hígado exis-
En la periferia las catecolaminas actúan uniéndose a re- ten receptores ␤-adrenérgicos, que tras ser estimulados por
ceptores adrenérgicos, de los que hay 2 tipos, ␣ y ␤ recepto- las catecolaminas dan lugar por un lado a un incremento de
res, cada uno subdividido en 2 subtipos (␣1 y ␣2; ␤1 y ␤2). la glucogenólisis, pero más importante es el aumento de la
En líneas generales la estimulación de los receptores ␣ indu- gluconeogénesis; ambas contribuyen a la aparición de hiper-
ce vasoconstricción, mientras que la de los receptores ␤ va- glucemia. Todavía más relevante es su efecto periférico dis-
sodilatación. La noradrenalina incrementa las resistencias minuyendo la captación de glucosa por los tejidos, especial-
vasculares periféricas aumentando la presión arterial, tanto mente el muscular. Este hecho se explica también por una
sistólica como diastólica, pero no modifica el flujo cardíaco; la estimulación ␤-adrenérgica. Indirectamente las catecolami-
frecuencia cardíaca disminuye o no se altera. Por su parte nas inducen una disminución de la producción de insulina
la adrenalina aumenta el flujo cardíaco y la tensión sistólica, por la célula ␤ del páncreas por un efecto de estimulación ␣-
pero no la diastólica, que incluso puede disminuir. La clíni- 2 adrenérgica, que es de más intensidad que el efecto esti-
ca del feocromocitoma dependerá de qué receptores adre- mulador de la secreción insulínica a través de la ␤-2 estimu-
nérgicos estén estimulados, pero también de la aparición y lación15.
efecto de numerosas sustancias que pueden ser secretadas
por el tumor: sustancia P, neuropéptido Y (NPY), encefali-
nas, somatostatina, hormona liberadora de corticotropina Clínica
ACTH [CRH], ACTH, péptido natriurético atrial (PNA),
polipéptido intestinal vasoactivo (VIP), parathormona Las manifestaciones clínicas del feocromocitoma estarán en
(PTH), interleucina (IL)-1 y 6, péptido relacionado con el función de sus condiciones asociadas, edad, benignidad o
gen de la calcitonina y cromogranina A, entre otros. malignidad, tiempo de evolución, esporádico o familiar, tipo
Todas las sustancias secretadas por el feocromocitoma predominante de catecolamina secretada y secreción asocia-
ejercen efectos intraadrenales y extraadrenales. De los pri- da de otras hormonas.
meros hay que destacar la posible producción de alteraciones
más puramente histológicas, como la hiperplasia corticosu-
prarrenal ipsilateral, hasta cuadros más complejos como el sín- Hipertensión arterial
drome de ACTH ectópica. Sin embargo, nos interesan más
los efectos extraadrenales del feocromocitoma, siendo el En cualquier caso, y dado que la HTA es el dato clínico más
más importante la aparición de HTA paroxística, frecuente- sugestivo de feocromocitoma, pensaremos en él ante la apa-
mente acompañada de cefalea, palidez o a veces sofoco con rición de HTA de tipo lábil resistente a tratamientos con-
enrojecimiento facial, hiperhidrosis y palpitaciones. La tría- vencionales; paroxismos de HTA acompañados de sofoco,
da cefalea, hiperhidrosis y taquicardia tiene una sensibilidad del cefalea, palidez, palpitaciones, dolor abdominal y a veces
90% y una especificidad del 93,8%14. sensación de muerte inminente; HTA en niños o jóvenes;
La HTA del feocromocitoma es el resultado de la acción HTA inducida por la anestesia, parto, cirugía o procedi-
de las catecolaminas circulantes sobre los receptores adre- mientos invasivos; HTA asociada a diabetes mellitus; hallaz-
nérgicos cardiovasculares, aunque no hay correlación entre go de masa adrenal en sujeto con HTA o HTA en un miem-
la cantidad de catecolaminas y la gravedad de la HTA. La bro de una familia MEN, vHL, NF1 o PGH. Si la HTA se
disminución de la HTA con la administración de clonidina, acompaña de cefalea, hiperhidrosis y palpitaciones la especi-
un ␣-2 antagonista adrenérgico, o del antagonista ␣-1 adre- ficidad para feocromocitoma es de un 94% y la sensibilidad
nérgico fentolamina, demuestra la relación de catecolaminas de un 91%.
e HTA. Por otro lado, el feocromocitoma puede secretar La HTA, la más consistente manifestación del feocro-
NPY, que en su acción, aunque no es vasoconstrictor, po- mocitoma, no aparece en todos los casos; algunos son asin-
tencia la acción presora de catecolaminas. En conjunto, adre- tomáticos y en otros predominan otras manifestaciones car-
nalina y noradrenalina aumentan la frecuencia cardíaca, in- diovasculares o no. Cuando existe HTA puede ser continua
crementan las resistencias periféricas y la contractilidad con o sin paroxismos, o ser el paciente habitualmente nor-
cardíaca y disminuyen el tono venoso. Todo ello hace que al motenso con aparición de paroxismos hipertensivos. Duran-

Medicine. 2008;10(15):997-1005 999


ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS (III)

pos de arritmias. En pacientes con se-


creción pura de adrenalina puede
aparecer un cuadro de hipotensión e
incluso de shock que a veces alterna
con las crisis hipertensivas.

Manifestaciones abdominales
El feocromocitoma es un tumor
Fig. 2. Necrosis distal de las extremidades en una paciente con un gran feocromocitoma.
que con frecuencia sufre necrosis he-
morrágica en mayor o menor grado. En ca-
sos importantes puede cursar con clínica de
te la noche el paciente suele quedar normotenso, pero al des- abdomen agudo. El cuadro inducido por la necrosis significa-
pertar e incorporarse de la cama puede aparecer un paroxis- tiva es grave, pues puede liberar grandes cantidades de cate-
mo. Hay que saber que estos paroxismos comportan diferen- colaminas que induzcan una crisis hipertensiva, que a veces se
te grado de gravedad, y que ocasionalmente pueden inducir sigue de hipotensión, shock y muerte19.
la muerte del paciente de forma súbita o por complicaciones En el aparato digestivo se ha descrito hasta en un 13% de
(infarto de miocardio, edema agudo de pulmón, etc.). los pacientes la existencia de estreñimiento crónico, en oca-
En el momento del diagnóstico, especialmente en los ca- siones acompañado de cuadros pseudoobstructivos. En casos
sos esporádicos, es frecuente que el paciente tenga retinopa- extremos se han descrito angor abdominal, enterocolitis is-
tía hipertensiva en diferentes grados, proteinuria y, a veces, quémica y hemorragia digestiva. Si el tumor es secretor de
datos de hiperaldosteronismo, en este caso secundario, que VIP puede cursar con diarreas acuosas e hipokaliemia20.
no nos debe plantear dudas entre el diagnóstico de feocro-
mocitoma e hiperaldosteronismo.
La HTA en niños es un dato muy valorable para el diag- Manifestaciones metabólicas
16
nóstico de feocromocitoma. Para unos la HTA del niño es
menos paroxística y más continua; sin embargo, para otros17 Las alteraciones metabólicas son clásicas en este tumor. La se-
la presentación clínica del feocromocitoma en el niño es si- creción crónica de catecolaminas incrementa los niveles de
milar a la del adulto. lactato, pudiendo desencadenar una acidosis láctica. También
el metabolismo de los HC se ve alterado con una situación hi-
perglucemiante, que puede llegar a franca diabetes mellitus.
Crisis catecolamínica Existe intolerancia al calor por aumento de la actividad meta-
bólica, que a veces cursa con fiebre. La hipercalcemia, infre-
El paroxismo severo, también conocido como crisis catecola- cuente pero posible en ausencia de hiperparatiroidismo, tam-
minérgica aguda, se debe a una liberación masiva de catecola- bién nos debe hacer pensar en una forma de MEN 2. La
minas y, a veces, de otras sustancias por el tumor. Su magnitud aparición de osteoporosis puede ser por causa de la acción de
y duración son variables, pero, en general, la crisis dura entre las catecolaminas o porque el tumor secrete algún factor que
15 a 30 interminables minutos, asociada sobre todo a cefalea y la induzca. También se ha descrito rabdomiólisis asociada a fe-
sensación de gravedad reconocida por el propio paciente. Las ocromocitoma que puede inducir insuficiencia renal.
cifras tensionales pueden alcanzar hasta 300 mmHg o más de
sistólica y 150 mmHg de diastólica. Con frecuencia el cuadro
se complica con angina de pecho o infarto de miocardio (IAM), Alteraciones hematológicas
que se acompaña a veces de bradicardia si la secreción domi-
nante es de noradrenalina, o de taquicardia si es de adrenalina. Con frecuencia se encuentra un aumento del hematocrito, que
El fenómeno de Raynaud, y a veces gangrena isquémica de ex- se corresponde con un contenido celular normal en un conti-
tremidades (fig. 2), pueden ocurrir durante una crisis. También nente reducido por la vasoconstricción crónica. Es importan-
está descrito el angor abdominal, a veces acompañado de ne- te tener este hecho en cuenta, pues tras la cirugía el descenso
crosis intestinal, y el accidente vascular cerebral (ACV). El del hematocrito es frecuente y puede inducir a un error diag-
75% de las muertes por feocromocitomas en pacientes no diag- nóstico y terapéutico de anemia o hemorragia. Es preciso que
nosticados o no tratados, son por crisis hipertensivas o hipo- pasen unas horas para que el volumen plasmático y el tono
tensivas graves, IAM o ACV18. vascular se regulen, desapareciendo la bajada de hematocrito.

Cardiopatía Plurisecreción hormonal


El corazón del paciente con feocromocitoma también se ve Aunque no sea frecuente, el potencial plurisecretor del feo-
afectado por otras patologías como la miocardiopatía dilata- cromocitoma puede hacer que el cuadro catecolaminérgico
da, el edema agudo de pulmón, la miocarditis o diferentes ti- se enmascare con otros síndromes variados según sean las

1000 Medicine. 2008;10(15):997-1005


FEOCROMOCITOMA

TABLA 1 Los feocromocitomas y PGH forman una entidad bien


Diferencias en el modo de presentación entre feocromocitomas
esporádicos y familiares conocida en la actualidad, en la que la mutación del gen de la
SDH da lugar a 4 subtipos PGH: 1,2, 3 y 4. El interés de co-
Esporádico (n = 23) MEN 2 A (n = 23) nocer la mutación viene dado por el diferente pronóstico, ya
Primera manifestación Número % Número % p que la mutación SDHB que se corresponde con el tipo 4 al-
HTA 14 60 3 13 < 0,001 canza casi un 50% de malignidad.
Estudio familiar 0 0 19 83 < 0,001 El feocromocitoma se asocia también a otras entidades
Hallazgo por ecografía 5 22 0 0 < 0,05 poco frecuentes, así como a algunas facomatosis, como la es-
de abdomen
clerosis tuberosa y el síndrome de Sturge-Weber, la ataxia-
Taquicardia 1 4 0 0 NS
teleangiectasia y algunos casos de complejo de Carney.
Masa abdominal 1 4 0 0 NS
Dolor abdominal 1 4 0 0 NS
Necropsia 1 4 1 4 NS
En el embarazo
5
Fuente: Pomares FJ, et al . HTA: hipertensión arterial; NS: no significativo.
La aparición de HTA en el embarazo siempre es un riesgo
para la madre y para el feto. Suele aparecer después de la vi-
gésima semana y con frecuencia desaparece a las 4-8 semanas
hormonas o citoquinas secretadas. Así, el síndrome de Cus- postparto. En casos graves evoluciona a una situación de
hing por ACTH ectópica, hiperparatiroidismo por PTH ec- eclampsia que precisa atención urgente. En cualquier caso,
tópica, diarrea acuosa e hipokaliemia por VIP, fiebre y pro- pero más si hay paroxismos, se debe descartar la existencia de
ceso inflamatorio por IL-6, hipotensión por taquiquininas o feocromocitoma, en especial por su gravedad durante el ter-
histamina son algunos de los cuadros descritos asociados al cer trimestre. No obstante, es raro con una prevalencia de 1
feocromocitoma. por cada 50.000 embarazos.
Como se demuestra en la tabla 15, el modo de presenta- La clínica suele ser la habitual, pero muchos de los sín-
ción es diferente según se trate de feocromocitoma familiar tomas usuales del feocromocitoma se superponen con los del
o esporádico. embarazo con HTA: la propia HTA, la cefalea, la fatiga, el
Por último, existen feocromocitomas asintomáticos cuyo dolor abdominal, los vómitos, las náuseas, los mareos, la hi-
diagnóstico se hace de forma casual en el transcurso de una potensión postural, etc. La HTA puede ser más precoz e in-
exploración abdominal o en una necropsia. tensa que en otros tipos de HTA gestacional, teniendo una
alta morbimortalidad. El crecimiento uterino, o los mismos
movimientos del feto, pueden desencadenar la crisis hiper-
Formas especiales de feocromocitoma tensiva. Además, si no se diagnostica durante el embarazo-
parto la HTA del feocromocitoma se mantiene durante el
Síndromes familiares postparto, hecho que habitualmente no ocurre con HTA li-
El feocromocitoma es uno de los tumores neuroendocrinos gada al embarazo. Ante la sospecha el estudio con catecola-
que más debemos contemplar en el entorno de presentación minas debe realizarse de la forma más precoz posible21. La
familiar. MEN 2 A y 2 B, vHL, NF1 o PGH, así como el pro- falta de diagnóstico puede llevar a la paciente a una cardio-
pio feocromocitoma en su forma hereditaria, han de tenerse miopatía y al riesgo de arritmias o, mucho peor, a la muerte
en cuenta en la valoración clínica de cualquiera de estos pro- súbita como es el caso “propósito” de una de nuestras fami-
cesos o en cualquier feocromocitoma recíprocamente. lias MEN 2 A que, estando sin diagnóstico, murió en el par-
En los MEN 2 el feocromocitoma acontece en el 40- to de muerte súbita por sus feocromocitomas.
50% de los casos. En una reciente evaluación de nuestros pa- Su tratamiento es más eficaz cuanto antes se realice. La
cientes, de 101 MEN 2 el diagnóstico de feocromocitoma se cirugía es la norma, previa preparación con bloqueadores
ha realizado en 37 pacientes. En la actualidad la evaluación alfa, preferentemente durante el primer o segundo trimestre.
periódica de los MEN hace que el feocromocitoma se detec- Si la madre está ya en el tercer trimestre se debe intentar
te en fase poco agresiva. Sin embargo, todavía se ven casos de conseguir un tiempo de embarazo ideal para hacer cesárea y
muerte súbita en pacientes con este tumor. cirugía del feocromocitoma en un mismo acto.
El feocromocitoma se presenta en el 14% de los casos de
vHL y nunca en el vHL tipo 1. En el VHL tipo 2 sí se pre- En el niño
senta, sobre todo en la forma 2C, donde sólo hay feocromo- El feocromocitoma tan sólo es la causa de un 1% de la HTA
citoma. Por este motivo es importante hacer el diagnóstico de los niños. En una reciente estadística Ludwing et al22 ana-
genético en todo caso de feocromocitoma familiar. En vHL lizan los datos de 15 niños con feocromocitoma diagnostica-
el feocromocitoma es productor de noradrenalina, pero no dos y tratados a lo largo de 34 años. La edad media de pre-
de adrenalina, con frecuencia es bilateral, raramente malig- sentación era de 11,8 años, siendo similar a otras series. La
no y a veces es multifocal con localizaciones extraadrenales clínica está representada por cefalea, HTA, náuseas e hiper-
en el abdomen y el tórax. hidrosis, muchas veces desencadenada por el ejercicio físico.
En la NF1 el feocromocitoma es raro, aproximadamente Dos casos fueron asintomáticos, uno con micro-feocromoci-
en un 1% de los casos. Sin embargo, en necropsias de pa- tomas descubiertos casualmente y otro perteneciente a fami-
cientes con NF1 se hallan feocromocitomas hasta en un lia vHL. Las metanefrinas proporcionaron un 100% de sen-
13%. Los tumores producen tanto adrenalina como nora- sibilidad. La exploración con metaiodobencilguanidina
drenalina. (MIBG) fue la que más rendimiento tuvo al localizar feocro-

Medicine. 2008;10(15):997-1005 1001


ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS (III)

mocitomas múltiples en el mismo paciente. La preparación a lógicos las metanefrinas se mostraron como el mejor indica-
la cirugía la hicieron con fenoxibenzamina y con metirosina, dor diagnóstico, seguidas por las catecolaminas, siendo el
un inhibidor de la síntesis de catecolaminas, con buenos re- peor indicador el AVM. Debido a que en tumores pequeños
sultados en ambos casos. Tras la cirugía la supervivencia fue podemos encontrarnos con estos falsos negativos, a todos
del 100%; sólo el 95% estaban libres de enfermedad a los 5 nuestros pacientes MEN 2 A les realizamos una primera to-
años, lo que indica la necesidad de seguir a estos pacientes mografía axial computarizada (TAC) abdominal a los 20
tras la cirugía. años, que ha servido para diagnosticar a 4 pacientes con es-
tudio bioquímico normal.
Feocromocitoma maligno También existen falsos positivos en las pruebas bioquí-
Aproximadamente el 10% de los feocromocitomas son ma- micas. Esto ocurre sobre todo en tres grupos de personas: a)
lignos, aunque la malignidad puede ser mayor o menor en muy estresadas; b) consumidoras de cafeína y c) que ingieren
función de la mutación genética que pueda existir. La única determinados fármacos y/o alimentos. El estrés es una causa
prueba evidente de malignidad es la existencia de metástasis de liberación de catecolaminas de los nervios simpáticos y de
a distancia. La infiltración del tumor sugiere malignidad, la médula adrenal. La extracción de sangre para la determi-
pero no siempre es así. La MIBG es la mejor opción para lo- nación de metanefrinas/catecolaminas debe hacerse en am-
calizar las metástasis tumorales, sirviendo además de marca- biente tranquilo, en reposo tras 12 horas de ayuno y previa
dor para posibles tratamientos con MIBG-131I. inserción intravenosa de una cánula tipo abbocath al menos 15
minutos antes de la extracción. El ácido cafeico se encuentra
no sólo en el café normal, sino también en el descafeinado, y
se metaboliza a ácido dihidrocafeico, que interfiere directa-
Diagnóstico mente con la determinación de catecolaminas y también con
la de metanefrinas. De los fármacos, hay una larga lista que
De laboratorio deben eliminarse antes de la recogida de muestras. Los de
uso más frecuente son: fenotiazinas, antidepresivos tricícli-
Para intentar paliar la falta de guías clínico-diagnósticas en cos, calcioantagonistas, inhibidores de la enzima de conver-
materia de feocromocitoma, en 2005 tuvo lugar en Nueva sión de la angiotensina, bromocriptina, cimetidina, bloquea-
York el primer simposio internacional sobre feocromocito- dores alfa, bloqueadores beta, labetalol, minoxidil y ácido
ma. En él se llegó a la conclusión de que el método de elección nalidíxico. De los alimentos deben evitarse los que conten-
para confirmar o excluir la presencia de un feocromocitoma es la gan cacao, vainilla o las frutas tropicales, como el plátano.
determinación plasmática o en orina de 24 horas de metanefrinas,
bien totales o, si se puede, fraccionadas (metanefrinas y normeta-
nefrinas). Esto no excluye que, de entrada, también se puedan Pruebas de imagen
medir catecolaminas totales o fraccionadas en plasma u ori-
na de 24 horas. La causa de elegir las metanefrinas es porque Una vez hecho el diagnóstico bioquímico se procede a la lo-
el feocromocitoma presenta la enzima catecol-O-metiltrans- calización del feocromocitoma. También nos sirve la imagen
ferasa (COMT), que cataliza el paso de catecolaminas a me- para el seguimiento de incidentalomas y para orientar si ese
tanefrinas en la célula tumoral. También se eligieron a las tumor puede depender de la corteza suprarrenal o de la mé-
metanefrinas porque su producción es continua en el tumor, dula por sus diferentes intensidades. Por otra parte, tal y
y son las que mejor reflejan la masa tumoral secretora15,23,24. como se ha comentado antes, en el feocromocitoma familiar
Las metanefrinas tienen la más alta sensibilidad y especi- no es infrecuente diagnosticar el tumor antes por la imagen
ficidad para el diagnóstico de feocromocitoma. En el meta- que por la alteración bioquímica. Excepto para niños, emba-
análisis realizado por Grossman23 a partir de 6 importantes razadas o personas con alergia a contrastes, hay un consenso
estudios de cohorte, la sensibilidad media obtenida es del en utilizar la TAC como método de inicio; la resonancia
98% y la especificidad del 87%, alcanzando en el estudio más magnética (RM) quedaría para los pacientes en los que la
numeroso de Lenders25, con 214 feocromocitomas, una sen- TAC está contraindicada.
sibilidad del 99% y una especificidad de 89%. En este traba-
jo sólo 2 de 76 pacientes con feocromocitoma hereditario y Tomografía axial computarizada
1 de 38 con feocromocitoma esporádico se mostraron como La TAC tiene una contrastada sensibilidad de un 90-95%
falsos negativos en la determinación de metanefrinas plas- para la localización del tumor. Feocromocitomas adrenales
máticas libres. Los dos pacientes con feocromocitoma here- de 1 cm o metástasis de 1 a 2 cm son fácilmente detectados.
ditario eran vHL con feocromocitomas < 1 cm y fueron un Además permite distinguir por densitometría, usando unida-
hallazgo casual durante la cirugía de carcinoma renal. Nues- des Hounsfiel (HU), si estamos ante adenomas adrenales u
tra experiencia en el manejo del feocromocitoma hereditario otros tumores, incluyendo el feocromocitoma, que se pre-
es similar. En 110 pacientes MEN 2 A hemos diagnosticado senta como tejido blando de unas 40-50 HU. También la
28 feocromocitomas, de los cuales 13 no eran sintomáticos y TAC permite encontrar lesiones de hemorragia o necrosis
15 sí. Las catecolaminas, metanefrinas y ácido vanilmandéli- intratumorales, frecuentes en el feocromocitoma23. Los mo-
co (AVM) en orina de 24 horas se midieron en todos los pa- dernos sistemas de TC permiten una reconstrucción 3D es-
cientes, siendo los niveles patológicos en 24 de ellos (85,7%) pecialmente útil en metástasis o paragangliomas. Asimismo
y normales en los 4 restantes (14,3%). Cuando fueron pato- hay que considerar el menor coste de la TAC frente a la RM.

1002 Medicine. 2008;10(15):997-1005


FEOCROMOCITOMA

Resonancia magnética así el paraganglioma parasimpático, que raramente es secre-


Esta última es igualmente útil para el estudio de imagen del tor de catecolaminas. En una reciente revisión del tema26 el
feocromocitoma, presentando similar sensibilidad que la diagnóstico por clínica adrenérgica se hizo en el 65% de los
TAC. Clásicamente se describe que el feocromocitoma tie- feocromocitomas, en el 44% de paragangliomas simpáticos
ne una mayor intensidad en T2, pero hay que tener en cuen- y curiosamente también en el 40% de los parasimpáticos.
ta que esa señal también pueden presentarla situaciones di- En ese sentido, el diagnóstico porcentual de clínica adre-
ferentes en las que haya hemorragia, hematoma o nérgica baja mucho cuando se diagnostican feocromocito-
carcinomas. La RM es de elección cuando se sospecha que mas del MEN 2 en la investigación rutinaria de este cuadro
el feocromocitoma puede localizarse en cavidades del cora- familiar, que nos lleva a diagnósticos bioquímicos o de ima-
zón o junto al corazón o a vasos principales. También será gen antes de que aparezca la clínica adrenérgica. Por el con-
de elección en niños, embarazadas o personas alérgicas al trario, el efecto masa está presente en el 100% de los para-
contraste. gangliomas parasimpáticos, bajando ya al 45% en los
simpáticos.
Gammagrafía con MIBG El diagnóstico de paragangliomas se realiza con frecuen-
La escintigrafía con MIBG marcada con 123I ó 131I nos permi- cia postcirugía, quizás por no ser remitidos todos los tumo-
te la exploración funcional y localización del tumor y, sobre res sospechosos a un Servicio especializado de Endocrinolo-
todo, la localización de metástasis cuando el feocromocitoma gía. La importancia estriba en la alta frecuencia de
es maligno. Su indicación principal es cuando existe un diag- malignidad de los paragangliomas, a menudo con metástasis
nóstico clínico-bioquímico muy importante y la TAC/RM que los médicos deben conocer antes de someter al paciente
son negativas. También se puede utilizar ante un incidentalo- a cirugía. Además, la aparición de uno de estos tumores en
ma. Antes de su realización se ha de bloquear el tiroides con un paciente “propósito” debe seguirse del estudio genético
yodo, acción que se inicia uno o dos días antes de dar la MIBG del mismo y de los familiares de primer grado cuando éste
y se mantiene hasta 7 días después. Las imágenes, posterior- sea positivo.
mente de dar una dosis de 3 a 10 mCi, se obtienen a las 24, 48
y 72 horas para el 131I o a las 6, 18, 24 y 48 horas para el 123I.
Tratamiento
Tomografía por emisión de positrones
La tomografía por emisión de positrones (PET) también es Por definición el tratamiento es quirúrgico, pero ante el ries-
útil. La más frecuentemente utilizada para detectar el feo- go de liberación masiva de catecolaminas durante el acto qui-
cromocitoma es la [18F]-fluordeoxiglucosa, pero no es un rúrgico el paciente debe ser preparado para la cirugía con
agente específico de este tipo de tumor, sino que puede com- bloqueo ␣-adrenérgico, que restablezca el volumen circulan-
partir diagnóstico con cualquier otro tumor que también te y evite los picos hipertensivos. La liberación de catecola-
tenga un alto gasto metabólico. Más específico es el uso de minas puede realizarse en la inducción de la anestesia, du-
otras moléculas, como: 6-[18F]-fluorodopamina, [18F]- dihi- rante la incisión abdominal o en el neumoperitoneo de la
droxifenilalanina, [11C]-hidroxiefedrina o [11C]-epinefrina. cirugía laparoscópica, o más frecuentemente en la manipula-
ción del tumor antes de ligar la vena suprarrenal.
Octreoscan
El feocromocitoma también expresa receptores de somatos-
tatina (SST) hasta en un 75% de los tumores, y en ese senti- Preparación para la cirugía
do la escintigrafía con octreoscan es útil para la localización
de feocromocitomas malignos y, sobre todo, de sus metásta- El tratamiento con fenoxibenzamina, quizá el más común, in-
sis. Comparada esta exploración con la MIBG, ésta es más duce un bloqueo ␣-adrenérgico. Se administra durante al me-
sensible, pero en algunos casos en los que el feocromocito- nos 10-15 días antes de la cirugía a dosis de 10-20 mg (3 ve-
ma maligno o sus metástasis han perdido los transportadores ces día) hasta que se controle la tensión arterial. Este fármaco
de noradrenalina de la membrana dan positividad para oc- es un bloqueador ␣1-adrenérgico postsináptico y ␣2-adrenér-
treoscan si tienen receptores de SST, lo que nos ayuda a lo- gico presináptico, por lo que puede producir hipotensión or-
calizar el tumor y además nos indica la posibilidad de uso de tostática y prolongar la hipotensión postoperatoria. Otro blo-
análogos de somatostatina en el tratamiento de feocromoci- queador ␣1 es: prazosín selectivo ␣-1, de acción más corta; se
tomas metastáticos. utiliza a dosis de 2-5 mg cada 12 horas y se puede aumentar
En definitiva, nuestro consejo es utilizar siempre que se hasta 20 mg. Los calcioantagonistas también se usan en el
pueda la TAC como técnica de primera línea, asociada o no manejo de la HTA1,27,28.
a MIBG. Si aparecen taquicardias o arritmias se deben utilizar blo-
queadores beta, pero nunca antes de instaurar el bloqueo ␣. El
fármaco de elección es propanolol a dosis de 10 mg/6-8 ho-
Diagnóstico diferencial entre feocromocitoma ras por vía oral los 3-5 días previos a la cirugía. Labetalol,
y paraganglioma bloqueador ␣1 y ␤ efectivo en el control de la HTA, puede
interferir con la captación del 131I-MIBG.
Las manifestaciones clínicas del paraganglioma simpático y De existir hiperglucemia se puede necesitar tratamiento
del feocromocitoma con frecuencia son muy parecidas. No insulínico preoperatorio.

Medicine. 2008;10(15):997-1005 1003


ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS (III)

Tratamiento quirúrgico efecto inhibitorio de las catecolaminas sobre la insulina. El


bloqueo ␤-adrenérgico dificulta la recuperación de la gluce-
mia. Hay que vigilar la acidosis metabólica por cúmulo de
Manejo intraoperatorio lactato. En suprarrenalectomía bilateral es imprescindible la
Se precisa una completa monitorización del paciente, que in- prevención y el tratamiento de la insuficiencia suprarrenal.
cluye vía venosa central y periférica, catéter arterial con mo-
nitorización de tensión, electrocardiograma y sonda vesical.
Algunos de los fármacos que pueden utilizarse en el acto Tratamiento posquirúrgico
anestésico, como los relajantes musculares, pueden ser peli-
grosos. Se recomienda vecuronio, ya que otros relajantes La disminución de los niveles de adrenalina y noradrenalina
pueden condicionar hipertensión. Para el tratamiento de las puede ser motivo de hipotensión durante algunos días, máxi-
crisis hipertensivas se emplea nitroprusiato sódico intraveno- me en pacientes que han sufrido bloqueo ␣. Si persiste la
so; fentolamina, otro potente hipotensor, no cesa tan rápida- HTA puede ser porque queda “feocromocitoma funcionan-
mente su efecto y esmolol a pequeñas dosis intermitentes te” o porque presenta asociadamente HTA vascular o de
puede ser también muy eficaz. En caso de arritmias puede otro tipo.
emplearse lidocaína o bloqueadores beta, dependiendo del
tipo de arritmia. Se debe evitar droperidol, estimulante de la
secreción de catecolaminas y de atropina, que induce taqui- Cirugía en situaciones especiales
cardia.
Una vez resecado el feocromocitoma el problema es la Paraganglioma
hipotensión, como consecuencia de la vasodilatación y por Desde el punto de vista quirúrgico hay que tener en cuenta
los efectos residuales de los bloqueadores alfa preoperato- que los paragangliomas suelen ser de localización abdominal,
rios. El tratamiento es reposición generosa, pero muy vigila- a veces múltiples y más frecuentemente malignos que en la
da de volumen. Los agentes vasopresores no son efectivos localización adrenal. Esto obliga a una perfecta localización
hasta la repleción vascular28. con técnicas de imagen para excluir multiplicidad y metásta-
sis. La vía de abordaje suele ser abdominal, bien por laparo-
Manejo quirúrgico tomía tradicional o por laparoscopia.
La resección quirúrgica del feocromocitoma debe ser com-
pleta, evitando la ruptura capsular y la diseminación celular Feocromocitoma familiar (MEN 2)
local. La manipulación tumoral debe ser mínima, con cierre El tipo óptimo de cirugía a realizar ha sido muy discutido. La
precoz de la vena suprarrenal para minimizar las crisis hiper- adrenalectomía bilateral, teóricamente de elección, condi-
tensivas. La fiabilidad de las exploraciones complementarias ciona entre el 10-30% de crisis addisonianas, habiéndose
preoperatorias permite una cirugía más dirigida, tanto abier- descrito incluso muertes. Hoy en día se prefiere la adrena-
ta como laparoscópica, sin necesidad de grandes disecciones. lectomía de la glándula afectada (valoración con TAC/RM y
La vía de abordaje de elección, como en toda patología escintigrafía con MIBG). La adrenalectomía unilateral pre-
suprarrenal, es laparoscópica, con mejores resultados con viene la insuficiencia suprarrenal, pero se estima que el 50%
respecto a la abierta en relación con el dolor, menor incisión, o más de pacientes con adrenalectomía unilateral van a
estancia media e incorporación laboral. Sin embargo, la la- desarrollar un feocromocitoma contralateral en los siguien-
paroscopia no estaría indicada ante sospecha de malignidad tes 10 años. Esto obliga a un estricto seguimiento.
de la lesión o ante tumores de gran tamaño. Aunque se han En pacientes con tumor bilateral el tratamiento estándar
resecado así tumores de hasta 12 cm, la indicación va a de- es la adrenalectomía bilateral. Sin embargo, algunos grupos
pender de la experiencia del cirujano, considerándose tumo- realizan adrenalectomía total de un lado y subcortical del
res grandes por encima de 8-10 cm. otro. Suele elegirse para la resección parcial la glándula con
La cirugía abierta, cuando se realiza, suele ser por lapa- el tumor más pequeño o de localización más periférica. Esta
rotomía media o por incisión subcostal bilateral. Se indica si técnica es difícil, no siempre técnicamente realizable y con
el cirujano tiene poca experiencia en laparoscopia, en pa- un índice de recidivas superior al 30%30.
cientes con adherencias por cirugía abdominal previa, en ca-
sos con sospecha de feocromocitoma maligno o en tumores Feocromocitoma maligno
de gran tamaño28-30. En estos casos debe intentarse la resección, aunque esto in-
cluya la cava, el riñón u otros órganos adyacentes. Puede es-
Postoperatorio inmediato tar también indicada la resección de metástasis a distancia. En
Los problemas son fundamentalmente dos: general se puede decir que la reducción de la masa tumoral
1. El primero es la hipotensión por hipovolemia, como se permite un mejor control de los síntomas derivados de la se-
ha descrito en las consideraciones intraoperatorias. El trata- creción tumoral y aumenta la eficacia de la terapia adyuvante.
miento es la reposición hídrica. Es importante evitar la he- La cirugía de las metástasis, si las hubiera, ha de ser lo
morragia postoperatoria, dada la gran vascularización del más radical posible, y si es necesario de repetición, seguida
feocromocitoma. de tratamiento isotópico; es lo más efectivo, aunque no cura-
2. En segundo lugar también pueden producirse hipo- tivo. La cirugía debe hacerse tanto en el tumor primitivo
glucemias graves por el hiperinsulinismo de rebote al cesar el como en sus metástasis, localizadas previamente. Tras la ci-

1004 Medicine. 2008;10(15):997-1005


FEOCROMOCITOMA

rugía se administran 200 mCi de MIBG-131I, que deben re- ✔


12. • Schulz C, Eisenhofer G, Lehnert H. Principles of catecholamine
biosynthesis, metabolism and release. En: Lehnert H, editor. Phe-
petirse entre los 4 y 6 meses. La escintigrafía después del 131I ochromocytoma. Pathophysiology and clinical management. Basel
nos informa de cuál es la situación. Si un nuevo rastreo con (Switzerland): KARGER; 2004. p. 1-25.
MIBG, RM o TAC a los 4 meses demuestra nuevos focos ac- ✔
13. • Mahata SK, Mahata M, Fischer-Colbrie R, Winkler H. Vesicle
monoamine transporters 1 and 2: Differential distribution and re-
cesibles para cirugía se debería plantear una nueva interven- gulation of their mRNAs in chromaffin and ganglion cells of rat
ción antes de seguir con el 131I. Si el tumor tiene receptores adrenal medulla. Neurosci Lett. 1993;156:70-2.

para somatostatina se puede probar el tratamiento con aná- ✔


14. • Bravo EL, Tagle R. Pheochromocytoma: State-of-the-art and fu-
ture prospects. Endocr Rev. 2003;24:539-53.
logos de somatostatina, conjuntamente con la cirugía y el ✔
15. • Zapanti E, Ilias I. Pheochromocytoma. Physiopathologic impli-
cations and diagnostic evaluation. Ann N Y Acad Sci. 2006;1088:
tratamiento isotópico. Es obligado utilizar la fenoxibenzami- 346-60.
na; en algunos casos es muy útil la ␣-metil-tirosina. ✔
16 • Stackpole RH, Melicow MM, Uson AC. Phaeochromocytoma in
children. Report of 9 cases and review of the first 100 published ca-
ses with follow-up studies. J Pediatr. 1963;63:315-30.

Bibliografía ✔
17. • Pham TH, Moir C, Thompson GB, Zarroug AE, Hamner CE,
Farley D, et al. Pheochromocytoma and paraganglioma in children:
a review of medical and surgical management at tertiary care cen-
ter. Pediatrics. 2006;118:1109-17.
• Importante •• Muy importante ✔
18. • Platts JK, Drew PJT, Harvey JN. Death from phaeochromocyto-
ma: lesson from a post-mortem survey. J R Coll Physicians Lond.
✔ Metaanálisis ✔ Artículo de revisión ✔
19. •
1995;29:299-306.

✔ ✔ Guía de práctica clínica


Kaltsas GA, Papadogias D, Grossman AB. The clinical presenta-
Ensayo clínico controlado tion (symptoms and sings) of sporadics and familial chromaffin cell

✔ Epidemiología tumours (phaechromocytomas and paragangliomas). En: Lehnert


H, editor. Pheochromocytoma. Pathophysiology and clinical mana-
gement. Basel (Switzerland): KARGER; 2004. p. 61-75.

20. • Bravo L. Phaeochromocytoma. Cardiol Rev. 2002;10:44-50.

1. • Pacak K, Linehan WM, Eisenhofer G, Walter MM, Goldstein
DS. Recents advances in genetics, diagnosis, localization, and treat-

21. • Kamari Y, Sharabi Y, Leiba A, Peleg E, Apter S, Grossman E. Pe-
ripartum hypertension from pheochromocytoma: a rare and cha-
ment of pheochromocytoma. Ann Inter Med. 2001;134:315-29. llenging entity. AJH. 2005;18:1306-12.

2. • Kaltsas GA, Besser GM, Grossman AB. The diagnosis and me-
dical management of advanced neuroendocrine tumors. Endocr

22. • Ludwing AD, Feig DI, Brandt ML, Hicks MJ, Fitch ME, Cass
DL. Recent advances in the diagnosis and treatment of pheochro-
Rev. 2004;25:485-511. mocytoma in children. Am J Surgery. 2007;194:792-7.

3. • Omura M, Saito J, Yamaguchi K, Kakuta Y, Nishikawa T. Pros-
pective study on the prevalence of secondary hypertension among

23. •• Grossman A, Pacak K, Sawka A, Lenders JWM, Harlander D,
Peaston RT, et al. Biochemical diagnosis and localization of pheoch-
hypertensive patients visiting a general outpatient clinic in Japan. romocytoma. Can we reach a consensus? Ann N Y Acad Sci.
Hypertens Res. 2004;27:193-202. 2006;1073:332-47.

4. • Barontini M, Levin G, Sanso G. Characteristics of pheochro-
mocytoma in 4- to 20-year-old population. Ann N Y Acad Sci.

24. • Manger WM. An overwiew of pheochromocytoma. History, cu-
rrent concepts, vagaries and diagnostic challenges. Ann N Y Acad Sci.
2006;1073:30-7. 2006;1073:1-20.

5. • Pomares FJ, Cañas R, Rodríguez JM, Hernández AM, Parrilla P,
Tébar FJ. Differences between sporadic and multiple endocrine ne-
25. • Lenders JWM, Pacak K, Walther MCM, Linehan WM, Manne-
lli M, Friberg P, et al. Biochemical diagnosis of pheochromocytoma.
oplasia type 2A phaeochromocytoma. Clin Endocrinol. Wich test is best? JAMA. 2002;287:1427-34.
1998;48:195-200. ✔
26. • Hervás Abad E, Páramo Fernández C, Casteras Román A, Luna

6. • Bernabé MJ, Carbonell P. Genética de MEN 2. Diagnóstico ge-
nético. En: Tébar FJ, Rodríguez JM, editores. Neoplasias Endocri-
Cano R, Encisa de Sa JM, García-Mayor R. Similitudes y discrepan-
cias en las características clinicopatológicas de feocromocitoma y
nas Múltiples. Barcelona: EDIKAMED; 2004. p. 132-8. parangangliomas. Endocrinol Nutr. 2007;54:519-24.

7. •• Kazumasa I, Kazuhiro T, Yasushi K, Toshiaki K. Pathogenesis
of pheochromocytoma. En: Lehnert H, editor. Pheochromocytoma.

27. • Ponce Marco JL. Tratamiento quirúrgico del feocromocitoma.
En: Tébar Massó FJ, Rodríguez González JM, editores. Neoplasias
Pathophysiology and clinical management. Basel (Switzerland): Endocrinas Múltiples. Barcelona: EDIKAMED; 2004. p. 165-9.
KARGER; 2004. p. 26-44. ✔
28. • Karangiannis A, Mikhailidis DP, Atrios VG, Harsoulis F. Phe-

8. • Boedeker CCH, Neumann HPH, Ridder GJ, Maier W, Schipper
J. Paragangliomas in patients with mutations of the SDHD gene.
ochromocitoma: an update on genetics and management. Endocr
Rel Cancer. 2007;14:935-56.
Otolaryngol Head Neck Surg. 2005;132:467-70. ✔
29. • Plaggemars HJ, Targarona EM, Couwelaar GV, D´Ambra M,

9. • Benn DA, Robinson BG. Genetic basis of phaeochromocytoma
and paraganglioma. Best Pract Res Clin Endocrinol Metab.
García A, Rebasa P, et al. ¿Qué ha cambiado en la adrenalectomía?
De la cirugía abierta a la laparoscópica. Cir Esp. 2005;77:132-8.
2006;20:435-50. ✔
30. • Walther MCM. New therapeutic and surgical approaches for

10. •• Neuman H, Bausch B, McWhinney SR, Bender BU, Gimm O,
Franke G, et al. Germ-line mutations in nonsyndromic pheochro-
sporadic and hereditary pheochromocytoma. Ann N Y Acad Sci.
2002;979:41-53.
mocytoma. N Engl J Med. 2002;346:1459-66.

11. • Benn DE, Dwight T, Richardson AL. Sporadic and familial phe-
ochromocytomas are asociated with loss of at least two discrete in- Páginas web
tervals on chromosome 1p. Cancer Res. 2000;60:7048-51. www.ncbi.nlm.nih.gov/sites/entrez?db=pubmed

Medicine. 2008;10(15):997-1005 1005

Vous aimerez peut-être aussi