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1. Metodología
El buen manejo y aplicación de las técnicas de movilización depende de la tendencia de
mejoría del usuario y garantiza la calidad de atención brindada. Los profesionales en contacto
directo e indirecto del paciente deben reconocer y aplicar las técnicas para brindar la atención
acorde a las necesidades del usuario.
Acorde con las políticas de seguridad del paciente HTMC, la prevención de caídas debe
mantener un flujo que permita disminuir los riesgos de estancia al mínimo posible. El presente
protocolo consta de tres fases: medición de riesgo, visualización, prevención y notificación, y
finalmente la evaluación.
a) Edad
Pacientes menores de 6 años deben estar bajo supervisión en todas las áreas del hospital,
ya que pueden sufrir caídas tanto de la cama/cuna como de cualquier superficie. Además, los
pacientes adultos mayores de 65 años presentan este riesgo multifactorial.
b) Fisiología del envejecimiento
El envejecimiento conlleva alteraciones que propician el aumento del riesgo de caída, siendo
los trastornos de movilidad el mayor incidente. Véase tabla 1.
c) Enfermedades contribuyentes
Independientemente de edad y sexo, el paciente hospitalizado puede presentar
enfermedades que causen pérdida de equilibrio. Véase tabla 2.
Tabla 2. Enfermedades causantes de pérdida de equilibrio
Trastornos laberínticos (isquémicos, infecciosos,
traumáticos), accidente vascular cerebral,
enfermedad de Parkinson, demencia, alteraciones
musculares relacionadas con afectación de la
transmisión nerviosa, mielopatías, insuficiencia
vertebro basilar, alteraciones del cerebelo
degenerativas, alteraciones cognitivas, cuadros
Neurológicas confusionales, convulsiones, hematoma subdural
crónico, atrofia del cerebelo, hidrocefalia
normotensiva, parálisis supra nuclear progresiva,
neuropatía periférica, alteraciones mecano-
receptoras cervicales, síncopa e hipotensión
ortostática secundarios a reducción global y
transitoria de flujo cerebral acompañado de pérdida
de conciencia de corta duración.
Patología articular, deformidades de la columna
vertebral, artrosis y artritis en columna, cadera, rodillas
Músculo y pies que puedan producir dolor e inestabilidad,
esquelético fracturas no sospechadas, alteraciones de los pies,
osteoporosis, pérdida brusca del tono muscular de
extremidades inferiores, miopatías.
Los factores ambientales, del entorno arquitectónico o bien elementos de uso personal
son considerados extrínsecos. Estos contribuyen hasta 50% para que se produzcan caídas.
(Instituto Nacional de Rehabilitación, 2015). Los factores tales como infraestructura hospitalaria,
equipo y mobiliario, e inclusive el proceso en el que interactúan paciente y personal de salud
suelen aumentar el riesgo de una caída. Véase Tabla 3.
Tabla 3. Factores extrínsecos contribuyentes a una caída
intrahospitalaria
Interruptor de luz ausente
Escalones a la entrada o salida del baño
Ausencia de barras de sujeción en baños (ducha)
Infraestructura Área con piso deslizante y sin tapetes antideslizantes
hospitalaria Escaleras o rampas sin antideslizante
Escaleras con escalones irregulares
Lavabos y retretes muy bajos o altos
Pisos disparejos
Interruptor de luz descompuesto, focos fundidos dentro o
fuera de la habitación
Mobiliario fuera de lugar (silla, camilla, silla de ruedas, etc.)
Silla de baño (o desplegable) mojada, resbaladiza o ausente
Presencia de cables, cordones y obstáculos en general
Dispositivos para la deambulación (bastones, muletas y
Equipo y andaderas) ausentes o incompletos
Mobiliario
Utilización de sillas de ruedas, bombas de infusión o
cualquier otro equipo de rodamiento para la deambulación
Camas y camillas sin cinturones de seguridad, barandales
laterales o cabecera
Camas, camillas o sillas de ruedas en mal estado o no
funcionales
El equipo de radio frecuencia, interruptor de luz, artículos
personales fuera del alcance del paciente
Barandales de cama o camilla no subidos
No verificar el funcionamiento de los sistemas de seguridad:
como barandales de las camas, camillas y sillas de ruedas
Cambios bruscos de postura: incorporar al paciente de forma
rápida sobre todo si ha permanecido mucho tiempo en cama
De Proceso Movilización del paciente sin ayuda del personal o familiar
Faltas de normas de seguridad en la unidad hospitalaria
Falta de orientación al paciente y familiar de las medidas de
seguridad, (deambular con equipos de venoclisis, sondas,etc)
Falta de orientación en el uso de sillas de ruedas
Falta de delimitación del piso mojado al realizar la limpieza
Falta de sistema de reporte, mantenimiento preventivo y
correctivo
Un paciente con riesgo calificado basado en la escala de Morse puede ser administrado
medicamentos que alteren su estado previo. En caso de presentar esta variación, se requiere
realizar la evaluación nuevamente. Dentro de la siguiente tabla (Tabla 5), se presentan
diferentes fármacos y sus efectos más comunes en los pacientes hospitalizados.
1.2.1 Visualización
El riesgo de caída es diferente para cada paciente, pero utilizando la tabla de Morse se
clasifica a los pacientes en riesgo bajo de caídas, riesgo alto de caídas o sin riesgo. Todo
personal a cargo del cuidado directo o indirecto del paciente, debe estar consciente del riesgo
para tomar las precauciones debidas. Para identificar a los pacientes de forma oportuna, cada
cama cuenta con un acrílico en el que se puede insertar la señalética, indicando así el tipo de
riesgo. La herramienta a utilizar es una tarjeta color morado: el dibujo de un paciente en cama
puede ser de color verde (sin riesgo), amarillo (riesgo bajo), rojo (riesgo alto). Anexo 3.
Diariamente se realiza la correcta limpieza y desinfección de los acrílicos como del entorno
del paciente para evitar infecciones cruzadas.
1.2.2 Prevención
Todo factor extrínseco (Tabla 3) detectado por cualquier persona de la atención sanitaria debe
ser reportado a la enfermera de cuidado directo del paciente, quien debe elaborar un informe
breve a la/el responsable de enfermería.
La/el responsable de enfermería coordina con el personal pertinente que los factores
extrínsecos de proceso, infraestructura, equipos y mobiliaria no sean obstáculo en las buenas
prácticas asistenciales.
1.2.3 Notificación
Al presentarse una caída, se debe notificar ipso facto al personal de salud (médico,
enfermería, terapistas, etc.) más próximo al suceso, quien asistirá de forma oportuna al
paciente. Se notificará pertinentemente al personal médico encargado del paciente, quien
valorará las consecuencias de la caída y realizará el tratamiento necesario para el daño
presentado (exámenes de laboratorio, imágenes, medicación, etc.).
La ley según el Acuerdo Ministerial 00000767 del Ministerio de Salud Pública del Ecuador y
considerando:
Que, el artículo 53 de la constitución prescribe que las empresas, instituciones y organismos
que presten servicios públicos deberán incorporar sistemas de medición de satisfacción de las
personas usuarias y consumidoras, y poner en práctica sistemas de atención y reparación;
Que el artículo 54 Establece la responsabilidad de las personas o entidades que presten
servicios públicos, así como por la mala práctica en el ejercicio de su profesión, en especial
aquella que ponga en riesgo la integridad o la vida del paciente.
El Hospital Teodoro Maldonado Carbo registrará los eventos adversos, como las caídas
intrahospitalarias mediante el sistema de notificación. Se tomarán las medidas correctivas con el
objetivo de mejorar la atención brindada. Además, las notificaciones de caídas realizadas en el
momento más próximo al suceso y sus causas se podrán constatar posteriormente en el
expediente clínico del paciente; esto en virtud de salvaguardar la veracidad de lo sucedido y
actuar acorde a los factores contribuyentes del evento.
1.3.1 Documentación y registro de la caída
El objetivo de notificar, explicado anteriormente, es dar seguimiento y tomar medidas
correctivas que prevengan eventos similares en el futuro.
2. Bibliografía
Hospital Universitario Ramon y Cajal. (2007). Protocolo de caídas. Recuperado el 6 de julio de 2016, de
http://www.madrid.org/cs/Satellite?blobcol=urldata&blobheader=application%2Fpdf&blobkey=id&blobta
ble=MungoBlobs&blobwhere=1202756185662&ssbinary=true
Instituto Nacional de Rehabilitación. (junio de 2015). Protocolo de prevención de caídas. Recuperado el 5 de julio
de 2016, de http://iso9001.inr.gob.mx/Descargas/iso/doc/PRT-DQ-02.pdf
Joint Commission. (2015). Preventing falls and fall-related injuries in health care facilities. Sentinel Event Alert, 1-4.
Morse JM, B. C. (1989). A prospective study to identify the fall-prone patient. Medical Scientific Society.
Myers, H., & O'Connell, B. (2002). The sensitivity and specifity of the Morse Fall Scale in an accute care setting. J.
Clin. Nurs.
ALTO Mayor a 51
BAJO 25 a 50
SIN RIESGO 0 a 24
PROGRAMA DE SEGURIDAD DEL PACIENTE- UT Gestión Hospitalaria- Coord. Control de Calidad- HTMC
Fuente: Morse JM, Black C, Oberle K, et al. A prospective study to identify the fall-prone