José Alejandro Bautista Peña

Unidad 1
Ciencias de la Salud 1
EAD091_0005
Diabetes mellitus II

Programa preventivo de la enfermedad de la diabetes mellitus II.

Referencia de la enfermedad.

Es una enfermedad que aparece cunado el organismo no es capaz de utilizar

adecuadamente el azúcar y el almidón (hidratos de carbono) de la alimentación,
debido a que el páncreas no produce la cantidad suficiente de la hormona insulina.
El azúcar se acumula en la sangre y en los tejidos y ello produce diversas
alteraciones orgánicas.
La enfermedad se conoce con el término de diabetes mellitas para distinguirla de
otra enfermedad extremadamente poco frecuente, la diabetes insípida.
Todas las variables de la diabetes pueden controlarse mediante dieta, medicación
vía oral o tratamiento insulínico de sustitución. Si el diabético colabora en la parte
que le corresponde en el tratamiento, podrá desarrollar una vida normal.

La diabetes mellitus 2, se va desarrollando gradualmente, las personas que tienen

sobrepeso y los ancianos corren mayor riesgo de padecerla así como también las
personas con antecedentes genéticos. Esta enfermedad hace que no funcione
bien el páncreas pues la acumulación del azúcar en la sangre es demasiada y la
insulina muy poca, lo que provoca que no pueda entrar el azúcar en la célula y se
acumule en la sangre afectando a otros órganos vitales como el hígado etc.

Síntomas:
• Sed poliuria (micción frecuente): el exceso de azúcar en la sangre motiva
que los riñones filtren cantidades excesivas de orina. Al perder liquido de
esta forma, el paciente siente mucha sed, que no se calma con la ingestión
abundante de líquidos.
• Perdida de peso, debido a la perdida de líquidos y a la incapacidad del
organismo para aprovechar los hidratos de carbono.
• Comezón en la vulva en las mujeres.
• Comezón del pene en los hombres.
• Cansancio e irritabilidad.
• Tendencia a padecer furúnculos, infecciones cutáneas e infecciones en la
vulva y del pene.
• Cese de menstruación en las mujeres.
• Trastornos de la visón, con dificultad para enfocar.
• Ulceras en los pies.
• Hormigueo y falta de sensibilidad en manos y pies.
Tratamiento en casa:
No se puede seguir ningún tratamiento doméstico mientras no se diagnostique la
diabetes. Una vez identificada, el paciente debe asumir su propia responsabilidad
en el tratamiento.

Prevención.
La diabetes no puede prevenirse (salvo quizá evitando la obesidad), pero con un
adecuado control de la enfermedad se pueden evitar las complicaciones.

Como vivir con diabetes:

• Lo mas importante es aprender todo lo posible acerca de la diabetes: como
el organismo los niveles sanguíneos de azúcar, los efectos de la insulina,
los alimentos recomendables y no recomendables, el ejercicio, la influencia
de otras enfermedades, etc.
• No deje que la enfermedad influya en su vida, si observa ciertas sencillas
reglas que el medico le indicara, serán muy pocas las actividades en las
que no pueda participar, incluido el ejercicio vigoroso.
• Asegúrese de que sus amigos comprendan que no puede unirse a ellos en
los grandes banquetes. Procurar sobre todo que los maestros, familiares y
amigos íntimos de un niño diabético conozcan lo que es desaconsejable
para él.
• El diabético sometido con insulina deberá evitar el manejo de automóviles o
el uso de maquinas peligrosas, a menos que haya comido algo en las dos
horas precedentes. Por este motivo, entre otros. Es importante adaptarse a
un riguroso control del horario de las comidas.
• Si se está dispuesto a la hipoglucemia puede ser conveniente llevar una
tarjeta o una pulsera en la que figure el diagnostico y las instrucciones para
emergencias. Resulta molesto y peligroso correr el riesgo de que confundan
ala paciente diabético hipoglucémico con un borracho, cuando lo único que
necesita es un poco de azúcar.
• El diabético de edad avanzada esta expuesto a padecer trastornos en los
pies debido a su mala circulación y a las lesiones nerviosas: resulta
fundamental el lavado diario de los pies y la utilización de calcetines limpios
y de calzado cómodo. Cualquier signo de alteraciones los pies, como un
callo o una uña enterrada, deberá comunicarse al medico o al pedicurista.
• Pueden surgir problemas durante los viajes largos de avión o a la hora de
enfrentarse con un menú de un país extraño. Las diversas asociaciones de
protección al diabético disponen de hojas de instrucciones destinadas a
quienes se disponen a viajar al extranjero.
• Acudir al medico con regularidad para someterse a análisis y chequeos.
• Observar la dieta que le aconseje el medico.
• Comer con regularidad sin omitir ninguna de las comidas.
• Tomar antidiabéticos orales o administrarse insulina.
• Someterse a análisis de orina y de sangre con regularidad para verificar si
mantiene los niveles adecuados de azúcar en la sangre.
• La familia del diabético debe estimularlo y apoyarlo a que lleve una vida
normal y percatándose de cualquier reacción no habitual al tratamiento.
 • Que puede hacer el medico:
• Tratar el caso por si mismo o enviar el caso a endocrinología.
• Todos lo diabéticos necesitan tratamiento médico adecuado, si el paciente
se descuida la enfermedad puede acabar con su vida, cegarlo o
incapacitarlo.
• Existen tres formas principales de tratamiento:

a) Dieta: para disminuir la cantidad de elementos azucarados en la

alimentación, como pan, pasteles, galletas, caramelos, azúcar y papas, y
permitir que el organismo soporte mejor la enfermedad. Los diabéticos
obesos deben reducir su peso, a veces esto basta para controlar la
enfermedad.
b) Antidiabéticos orales: útiles por lo general en diabéticos maduros.
c) Inyecciones de insulina: puede servir para remplazar la insulina que le falta
al paciente con una diabetes severa. A veces se puede controlar la
glucemia (azúcar en la sangre) con una sola inyección diaria pero con
frecuencia se necesitan dos, una en la mañana y una en la noche. En
ocasiones los pacientes en tratamiento con insulina experimentan síntomas
de hipoglucemia o bajo nivel de azúcar en la sangre (debido a un exceso de
insulina); estos síntomas son: nerviosismo, hambre, rubor facial,
sudoración, desequilibrio y trastornos del comportamiento. El mismo
paciente reconocerá los signos premonitorios y podrá evitar el ataque
hipoglucémico tomando un poco de azúcar. Si no lo hace su apariencia
será la de un borracho y correrá el riesgo de caer en coma.

Fuentes:
Consejero Medico Familiar, Selecciones del Reader´s Digest (Iberia) p. 133

http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/article/000313.htm