_Buwwaso Mass no sujeo a a influeneca humana. Den lado, porque su cvidenteimparcalidad hacta que un determinado resultado por Sorteo fuera mis aceptable para las fcciones en conflicto. De otro, porque dejar la decisign fuera de su aleance evcaba los efectos, {vsoros dela competicin abiera ener las faciones. La précticn del sorte propiamente dicho y da institucién de la pode pe- denser vistas, por lo tanto, como vataciones de un mismo tema el potencial pacificador de lo externo. En cualquier caso, el que la utlzacién del sorto comenzase a ser considerada como una solu cin al problema de as facciones(fuese © no introducido por ee roti) queda corroborado por el siguiente comentario de Leo- znardo Bruni sobrelaineroduccin del sortco ene siglo Iv en Flo rencia: «La experiencia nos ha ensefado que exta prictca (la de seleceionar mapistados por sorto es il para elimina las luchas ‘que con tana frecuencia ealan enue los ciudadanos que compi- fen en las clecciones..»™. Bruni prosigue, en el mismo passe de su Historia del pueblo florentin (1415-21), evticando el uso del sorteo, yx que los ciudadanos cuando tenen que competi en las elecciones y wponcn su reputacién abiertamente en juegos, tienen tun incenivo para portazse bien. Por supuesto, el incentivo ya no tiste cuando se elige por sortco quienes ocupen los cargos. ¥ Bruni lamenta la ausencia de dicho estimulo, Pero su oposicion defniiva al empleo del soreo sieve para subrayar el principal mérito que reconoce en su prctca En a pensamiento republicao ialian, la busqueda de mec nismos neutrals y externos para la designacién de los vculares de catgos parece una caractristica constante. Otra insstencia en esa ‘busqueda puede hallarse en el Discon di Lagrogno de Francesco Guicciatdini (1512). En esta reflex sobre el gobierno de Floren- cia, Guicciardini popone amplia el niimero de miembros del Gran Consejo (6rgano elector de los magistrados) aun mayor mimero de iudadanos (en comparacién con el nimero de miembros que en % iad a on M. Nsom (1982): Corporati an Con i etn la al ons 12801400, chapel Hl, Unive of Nxt Catalina Pes 3089 2 [Los PaiNCiI0s Det GOBIERNO RETRESEATATIVO «50s momentos tenfa el gran conseo florentino) Ef contenido con- creo de la propuesta de Guieciardini y su jusifiacién merece una reseha especial. Propone, de hecho, ampliar la pertenencia al Gran Consejo 4 ciudadanos no clegibles para cargos: estos ciudadanos, razona, se consticurlan en arbitros imparciales cuyo juicio no podtia verse infludo por sus ambiciones personales. Sein Guic- ciardini, las clecciones producen divsiones y cuando los lectores pueden ser también clegidos, prevalece el incerés dels facciones, ya ‘que ls jueces son también pares ineresadas. Con el fin de promo- vere bien comin, Guicciardini aduce, los ciudadanos, o al menos tuna parte de ellos, no deben tener intereses personales ni directos en los resultados de las contiendas elecorales: deben s6lojuagas, desde al exerior los mézitos compacativos de los homabres que se presen- ten como candidatos. Como Bruni, Guicciadini no estaba a favor del sorteo; ambin preferia las eecciones. Su propuesta se ditige precisamente a combinar los efectos benéicos de ls elecciones con Ia imparialidad de un érgano externo , por ello, neutal. La pro- puesta de Guieciardni es notable por su més bien inesperada (pero con gran alcance potencial)justificacién dela exensién del derecho de voo, pero, y esto es més importante, por su bisqueda de institu clones neutrals que pudiesen mitigar los efecto dela dvisién de la competicién por el cargo. En est problemiticacenwal dela politica, cultural de las ciudades-repblica italiana, el sorteo aparece como ‘un aparato externo y neusral, Florencia La historia constitucional lorentina revela con mayor precisién las diferentes dimensiones del uso del sorteo*. Los florentinos 2% De modo dota elgoero popolr (0.1512) (ae tera e camamene lnmado» Diced lapegan) en Caen, Dist e ds det Regiment Prone ojos dson de R Places Ba Later 1931, p. 24-5. 3 Sle Florenaa ese N Rabin prima ana del Consign Nagin ene (14961399) en doe pas en el Adhivio Sono Hand, 1954 ndmero