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INTRODUCCION

La otitis se define como una inflamación del canal auditivo; es una enfermedad común
en el perro. Para el tratamiento exitoso de la otitis, se debe intentar identificar los
factores desencadenantes y perpetuantes en cada caso.
Esta afección puede presentarse con o sin rotura de la membrana timpánica. Se debe
tener en cuenta que, durante el examen del oído, cuando esta membrana se encuentra
completamente sana aparece con un aspecto brillante, de color gris perla y es
translúcida, pero en ocasiones anormales puede aparecer inflamada, deformada, etc.
Existen numerosos tipos de otitis que pueden afectar a los perros, pero una de las más
frecuentes que se pueden encontrar, es la otitis por levaduras. Aunque las asociamos a
perros de orejas largas y caídas, como los basset hound, lo cierto es que pueden darse
en cualquier perro. A veces son difíciles de erradicar y necesitan mucha paciencia y
dedicación para controlarlas.

OBJETIVOS

 Conocer un poco más acerca de otitis en caninos.


 Detectar si la otitis que presenta el canino es ocasionada por levaduras a través
del examen microscópico realizado a partir del cerumen de las orejas infectadas
del canino.
METODOLOGIA
La práctica estuvo dirigida por el M.V Cristian Hobnn quien nos instruyó en cómo realizar
el aislamiento de las levaduras.
MARCO TEORICO
OTITIS EN CANINOS
La otitis infecciosa es una patología del oído debida a un proceso inflamatorio causada
por diferentes especies de patógenos y agentes injuriantes.
Dependiendo de la porción del conducto auditivo afectado, se distinguen tres clases de
otitis:
1. Otitis externa: afecta al conducto auditivo externo.
2. Otitis media: afecta al oído medio.
3. Otitis interna: afecta al oído interno.
ETIOPATOGENIA
Es una patología con etiología multifactorial originada por factores desencadenantes y
mantenida por factores perpetuantes. A su vez, se han descrito todo un conjunto de
factores predisponentes que proporcionan las condiciones necesarias para la
proliferación microbiana.
En numerosas ocasiones la otitis externa aparece como un síntoma más de un proceso
dermatológico (alérgico, seborreico, etc.).
1. FACTORES DESENCADENANTES
Son los responsables del inicio de la inflamación del conducto auditivo externo.
En perros se citan como más frecuentes las alergias, seguidas de lejos de los
cuerpos extraños y Otodectes cynotis.
 Procesos alérgicos. La mitad o más de los perros atópicos o con reacciones
adversas a los alimentos llegan a presentar otitis, usualmente bilateral, pudiendo
en ocasiones ser el signo principal o único de la alergia.
 Cuerpos extraños. En determinadas épocas del año es frecuente la aparición de
otitis externas por la penetración de espigas y semillas en el interior del conducto
en animales que frecuentan jardines o zonas rurales.
 Parásitos. El principal agente de otitis parasitarias es Otodectes cynotis. Es un
ácaro muy contagioso, que se extiende de forma rápida, afectando
principalmente a los animales más jóvenes. Cursa con una secreción de color
marrón-negruzco constituida por cerumen, sangre y exudados, siendo el prurito
variable. Otros ácaros que ocasionalmente pueden provocar otitis externa
don Demodex canis, Sarcoptes scabiei y Notoedres cati.
 Trastornos de la queratinización. Los perros que presentan trastornos
seborreicos suelen presentar una otitis externa ceruminosa. Esto incluye ciertas
endocrinopatías, como el hipotiroidismo, donde los trastornos seborreicos
asientan principalmente en las orejas con la aparición de otitis ceruminosas.
 Afecciones autoinmunes. Los lupus eritematosos, los pénfigos y la celulitis
juvenil pueden provocar otitis por extensión de la afectación del pabellón
auricular.
 Reacciones adversas a fármacos. A veces se pueden observar otitis en casos de
dermatitis por contacto, por sensibilización a componentes de los preparados
óticos.
 Traumatismos producidos por el propio animal, por un rascado excesivo o por
peleas.
 Neoplasias. Las neoplasias cursan como otitis crónicas que no responden al
tratamiento. En perros las más frecuentes son las de glándulas sebáceas,
histiocitomas y mastocitomas, mientras en gatos adultos son el carcinoma de
células escamosas y en jóvenes los pólipos de origen inflamatorio.

2. FACTORES PERPETUANTES
Son los que agravan la otitis externa impidiendo su resolución. En los casos
crónicos suele haber más de un factor, de manera que su identificación es
necesaria para el correcto reconocimiento de la otitis externa.
 Bacterias, tanto grampositivas como gramnegativas, se perpetúan en el
conducto auditivo externo complicando e impidiendo la curación. Las más
frecuentes, en perros, son Staphylococcus pseudintermedius (36-70%)
y Pseudomonas aeruginosa (3-18%) y, en menor medida, por debajo del 10%
cada una, Streptococcus spp, Proteus spp y E. coli.
 Levaduras, principalmente Malassezia pachydermatis, la cual está
estrechamente relacionada con otitis ceruminosas secundarias a procesos
alérgicos, y en casos de tratamientos inadecuados con soluciones antibióticas.
Con menor frecuencia se aislan otros microorganismos
como Candida, Aspergillus, Trichophyton y Microsporum.
 Las complicaciones derivadas de la cronicidad también pueden ser factores
perpetuantes de un cuadro de otitis. Algunas de estas alteraciones, como la
hiperplasia, hiperqueratosis y estenosis del conducto, calcificaciones del
cartílago, etc., pueden perpetuar una otitis aun cuando se haya identificado y
tratado la causa primaria y se haya identificado y tratado los agentes infecciosos
que están complicando el cuadro.
Cualquier anormalidad anatómica que asiente sobre las orejas y origine cambios
importantes en el microclima del conducto auditivo externo, predispone al
padecimiento de otitis externas. Así, las otitis externas son más frecuentes en animales
con orejas grandes y caídas, siendo más frecuente en razas como el cocker o el spaniel
bretón, debido a una escasa ventilación y al cúmulo de secreciones en la parte más
externa del conducto auditivo.
LEVADURAS IMPLICADAS EN OTITIS
Las levaduras son unos microorganismos que podríamos definir como un tipo concreto
de hongo, unicelular (formado por una sola célula). La principal implicada en la otitis por
levaduras en perros, es la Malassezia pachydermatis, que curiosamente vive de forma
natural en la piel de los perros. A esto se le denomina ser saprófita.
Se localiza sobre todo en la piel almohadillas, el mentón, los oídos, axilas e ingles,
aunque podemos hallarla repartida por todo el cuerpo. En condiciones normales, su
presencia es escasa y pasa totalmente desapercibida, estando su población controlada
por la flora normal de la piel del perro. Cuando las defensas naturales de la piel (lípidos,
ácidos grasos, bacterias de la flora normal...) se encuentran en equilibrio,
la Malassezia no puede ir más allá de una presencia testimonial.
Así, en el caso de que un perro tenga alergia ambiental al polen (por ejemplo, del ciprés),
al ácaro del polvo, o una reacción adversa a los alimentos, la piel se encuentra sin
centinelas y esta circunstancia es aprovechada por las levaduras para proliferar sin
control, dando lugar a las otitis por levaduras.
Como norma general, para terminar de complicar el cuadro, las levaduras no suelen ser
la únicas en crecer desaforadamente aprovechando la ocasión, también les acompañan
algunas bacterias como Staphylococcus spp. Por ello, podemos decir que las levaduras
son patógenos secundarios: aprovechan una brecha en las defensas normales de la piel
de un perro, para dar lugar a una otitis.
A veces, el uso de antibióticos para tratar alguna enfermedad en nuestro perro (aunque
no tenga que ver nada con la piel ) o un estrés prolongado, puede ser suficiente para
que las levaduras logren prosperar, sin nadie que regule su crecimiento. Cualquier
inmunosupresión, puede desencadenar estas otitis.
LEVADURAS IMPLICADAS EN OTITIS
Las levaduras son unos microorganismos que podríamos definir como un tipo concreto
de hongo, unicelular (formado por una sola célula). La principal implicada en la otitis por
levaduras en perros, es la Malassezia pachydermatis, que curiosamente vive de forma
natural en la piel de los perros. A esto se le denomina ser saprófita.
Se localiza sobre todo en la piel almohadillas, el mentón, los oídos, axilas e inglés,
aunque podemos hallarla repartida por todo el cuerpo. En condiciones normales, su
presencia es escasa y pasa totalmente desapercibida, estando su población controlada
por la flora normal de la piel del perro. Cuando las defensas naturales de la piel (lípidos,
ácidos grasos, bacterias de la flora normal...) se encuentran en equilibrio, la Malassezia
no puede ir más allá de una presencia testimonial.
SÍNTOMAS DE OTITIS POR LEVADURAS
Aunque no son exclusivos de otitis por levaduras, existen varios signos muy llamativos
que podemos encontrar en perros que sufren otitis:

 Secreción auricular pastosa, similar a cerumen concentrado, de color amarillo-


parduzco en uno o los dos oídos, y con un inconfundible olor a requesón (otros
indican olor a "pan tostado", o "jamón rancio").
 La piel de la cara interna de la oreja se cuartea y agrieta, es fácil ver lo que
algunos dueños definen como "piel de elefante".
 Si la otitis no se trata, podemos ver que no logramos encontrar la entrada al
conducto auditivo, entre pliegues cutáneos que sufren hiperqueratosis
(engrosamiento), dando el aspecto de coliflor.
 No siempre detectamos picor marcado o molestia, pero los perros suelen sacudir
la cabeza, rascarse, o a veces, aparece el inevitable otohematoma por rascado
intenso.
DIAGNÓSTICO
En general, el diagnóstico de una otitis es sencillo, realizándose en base a la historia y al
examen físico. Los pasos a seguir son: Exploración externa - Otoscopia - Estudio
microscópico del exudado.
a. Exploración externa del oído y del pabellón auricular, que permite detectar la
presencia de eritema, lesiones (úlceras, costras, etc.), exudados, lesiones
secundarias al rascado y a las sacudidas de la cabeza, obstrucción parcial o
completa del conducto auditivo externo, etc.
b. Realizar una otoscopia de ambos oídos, comenzando por el supuestamente sano
en el caso de sospechar una afección unilateral, debiéndose emplear un cono
limpio en cada oído.
c. Por otro lado, la observación en fresco permite la detección de ácaros, sin
embargo se debe realizar una tinción convencional para observar las células
(inflamatorias, epiteliales, neoplásicas) y microorganismos (cocos, bacilos,
levaduras) presentes.
Como es frecuente encontrar Malassezia pachydermatis en oídos sanos, se requiere un
número mínimo de 5 a 10 levaduras por campo microscópico de inmersión para
considerar que existe una infección o sobrecrecimiento.
TRATAMIENTO DE LAS OTITIS POR LEVADURAS
Las otitis por levaduras se pueden controlar con diversos productos, pero hasta que no
se encuentre la causa que provoca ese sobre crecimiento de las mismas, nuestro perro
volverá a recaer.
Por ejemplo, si la otitis por levaduras aparece debido a una alergia estacional (al polen),
lo más común es que nuestro perro las padezca dos o tres veces al año, coincidiendo
con la época de primavera-verano. Hasta determinar qué provoca las otitis por
levaduras, el tratamiento de estas otitis se basa en:

 Limpieza del canal auditivo con un limpiador con efecto secante a ser posible.
Existen productos que combinan ácido bórico y acético, algo irritantes, pero a
veces, necesarios. La limpieza previa de todas las secreciones de forma diaria es
básica para que el producto de tratamiento llegue adecuadamente. Si la
proliferación de levaduras es leve, este limpiador puede llegar a controlar él solo
el problema. Hay muchos otros limpiadores, a base de escualeno y otros aceites,
pero suelen resultar menos eficaces.
 Tras masajear la oreja para que el limpiador penetre y esperar unos 20 minutos
a que todas las secreciones sean eliminadas, los restos se retiran con una gasa y
se aplica el tratamiento, que suele combinar un antifúngico (enilconazol,
miconazol, clotrimazol) con algún antibiótico de amplio espectro, ya que como
se indica, estas levaduras suelen proliferar acompañadas de bacterias. También
puede llevar un corticoide para desinflamar la zona.
 El tiempo de tratamiento varía, entre 7 y 28 días, pudiendo ser preciso cambiar
a otro producto. Por lo general, necesitaremos tratar a nuestro perro dos veces
al día, pero pueden aconsejarnos cada 24 horas.
PROCEDIMIENTO
AISLAMIENTO DE LEVADURAS DEL CERUMEN DE UN CANINO
La muestra la tomamos con un hisopo previamente humedecido y la extendemos sobre
un portaobjetos.

1. Distribuimos la muestra uniformemente con la ayuda del hisopo y colocamos el


cubreobjetos para su observación al microscopio.

Resultado

-Se encontró una mínima cantidad de Candida spp ,


se considera entonces, que la esta infección está
producida por bacterias y no por la levadura
encontrada.
CONCLUSIONES

 La otitis es un problema complejo, es un signo de muchas enfermedades, no hay


un diagnóstico específico puesto que tiene varias causas. El sistema de
clasificación más adecuado determina que esta originada por factores
desencadenantes y mantenida por factores perpetuantes. En cada paciente, se
deben identificar todos los factores que sean posibles como contribuyentes a la
otitis. Los síntomas que presentan son evidentes: prurito auricular que origina
reacciones de rascado o movimientos de la cabeza, se puede observar dolor
intenso, suele aparecer un aumento de la secreción, con acumulación de
cerumen y exudados.
 la otitis que muestra el canino está derivada por una infección bacteriana mas
no por las levaduras halladas en el examen microscópico puesto que se
encuentran en una mínima proporción.
BIBLIOGRAFÍA

1. Carlotti D, Trenti D, Germain A, 2006, Otitis externa y limpieza auricular.


Allerderm revista de dermatología veterinaria. Nº17, Mayo pp 8 – 12.
2. Lorenzana S, Etiopatogenia, Diagnóstico Y Tratamiento De La Otitis Cronica.
Mexico.
3. Machicote G, 2005 Otitis: una revisión actualizada (II Parte). Allerderm revista de
dermatología veterinaria. Nº15 Mayo, pp 8 – 10.
4. Paterson S, 2001. Manual De Enfermedades De La Piel de Perros Y Gatos. 2da
Edicion

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