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CONTROL DE LECTURA

El Hombre Light
Una vida sin valores

Enrique Rojas

Este libro nos formula temas que de alguna manera en realidad están muy presentes en la vida
cotidiana actual. El asunto es que leyendo el libro, pienso que cada quien propiamente puede sacar
conclusiones diferentes respecto a lo que nos trata de interpretar, la importancia de conllevar una
vida con valores, y no solo eso, proyectarlos frecuentemente, por ello es bueno para meditar y
adentrarnos en la posmodernidad cotidiana de lo que estamos viendo hoy en día en nuestras
sociedades.

Para empezar, en los últimos años, y no hace tan poco en realidad, ya que el libro fue editado en 1992
y 2000, se menciona que ha surgido y ha ido surgiendo un nuevo tipo humano en la sociedad
occidental del bienestar y la comodidad: el llamado “Hombre light”. Se trata de un personaje que es
hedonista y materialista, cuya única meta en la vida consiste en alcanzar y mantener el éxito; un ser
humano al que sólo le interesa y percibe como lo más importante el dinero y el consumo, en es decir,
únicamente lo material. En definitiva, es un hombre que es infeliz e inseguro, vulnerable e
indiferente, que ha hecho de la permisividad su nuevo código ético y que va desde la tolerancia
ilimitada de sí mismo y lo que le rodea a la revolución sin finalidad.

Además, con este libro, el autor Enrique Rojas nos explica las claves psicológicas del hombre light (sus
características) y nos ayuda a conocer cuáles son las vías de salida para superar el gran vacío
existencial que produce la falta de valores e ideales.

Así pues, en tanto a quién es el sujeto denominado hombre light, este tipo de hombre se caracteriza
por una limpieza total en cuanto a ideales y metas, la libertad es para él el hedonismo consumista sin
importarle ningún tipo de desarrollo de conciencia, con lo cual pronto cae en el vacío espiritual, en la
falta de solidaridad, en el inconformismo sensorial y en el fracaso psicológico. Suele terminar siempre
de forma trágica una vida en la que no hay metas concretas ni objetivos, donde todo es subjetivo y
temporal, o también permanentes.

También toca temas como la sexualidad, que el hombre Light realiza por puro mecanicismo hedonista
sin ninguna valoración amorosa ya que el sexo y el amor los ha separado tanto que sólo se queda con
lo material del asunto. Para él la vida llega a carecer de sentido, se produce la ruptura con todo lo que
signifique espiritualidad y se termina por envejecer tan rápido que se entra pronto en la “muerte” en
vida.
Lo positivo del libro es que es muy interesante y fácil de interpretar, porque tiene un estilo accesible
de lectura que toca temas de psicología social con gran conocimiento y habilidades reflexivas además
de connotar realidades cotidianas de nuestro mundo actual.

Lo negativo es que, bajo mi punto de vista, enfoca los asuntos desde un punto de vista que a veces es
excesivamente conservador y hace crítica a veces exagerado hacia lo progresivo de la
actualidad social.

Hablando un poco más sobre qué nos lleva a comprender este auténtico libro es que describiendo
que el hombre Light es frío, no cree en casi nada, sus opiniones cambian rápidamente y ha desertado
de los valores trascendentes. Por eso se ha ido volviendo cada vez más vulnerable; por eso ha ido
cayendo en una cierta indefensión. De este modo, resulta más fácil manipularlo, llevarlo de acá para
allá, pero todo sin demasiada pasión. Se han hecho muchas concesiones sobre cuestiones esenciales,
y los retos y esfuerzos ya no apuntan hacia la formación de un individuo más humano, culto y
espiritual, sino hacia la búsqueda del placer y el bienestar a toda costa, además del dinero.

El hombre light es un individuo que conoce el mundo en el que vive, pero no está formado como
persona humana. Es un hombre que busca la utilidad práctica de todo y se preocupa por muchas
cosas pero no profundiza en ellas. Es una persona muy especializada, que conoce bien lo que le
corresponde, pero fuera de su campo, es una persona que puede dejarse llevar con facilidad y es
incapaz de tener opiniones propias acerca de cualquier tema de interés.

Tal y como vivimos en la sociedad actual, además de disfrutar de progresos científicos, técnicos,
políticos y humanos, también han surgido aspectos negativos como son:

El materialismo: Nos dice que es una persona con una buena cantidad de dinero es admirada y
envidiada por la sociedad. Interés primordial de muchas personas es el dinero.

El Hedonismo: Nos dice que mantiene un “Carpe Diem” pero a lo grande. Pasarlo bien y disfrutar lo
más que se pueda. Esto hace que las personas no tengan tiempo libre para comprometerse con los
demás ni consigo mismos.

La permisividad: Explica cómo se permiten hacer cosas sin limitaciones, se pierden los ideales y
tampoco se tiene una meta definida.

El Relativismo: Dice que todo es relativo, por lo tanto todo depende, todo es subjetivo.

El Consumismo: Aquí se compran todo tipo de cosas que no son necesarias, debido a la manipulación
de los medios de comunicación.

Este individuo no tiene entusiasmo por nada, y se dedica a cosas sin interés. Es un ser altamente
manipulable. No busca ser más humano, busca su bienestar a través del dinero.

El hombre light por tanto, busca poder, fama, buen nivel de vida. Esto le hace un ser completamente
superficial, que acaba perdiendo todo lo humano que le queda. No colabora; compite. Se convierte en
objeto que carece de compromiso. Su egoísmo provoca una cierta protección que evita su
sufrimiento, pero al mismo tiempo le hace más débil pero menos humano.

Así, los grandes dramas de la realidad social, se admiten sin más, como que no se puede luchar contra
ellos, esto es una pérdida de valores e ideales. De este modo, todo lo descrito anteriormente
constituye lo que es el hombre light.

El autor analiza muchos apartados del hombre Light y al final propone un análisis reflexivo y lo que él
cree que serían las soluciones aceptables para volver a reencontrarnos con el hombre humanista
premodernista que es, para él, una salida óptima para una sociedad donde al exceso de comunicación
y con el uso alienante que han hecho los consumistas de este hecho crea hombres bien informados
pero con escasa educación, muy pragmáticos pero tremendamente simples y superficiales.

Es curioso destacar que durante leía este libro, me lleve una sorpresa de que de hablar de la cultura
del materialismo se va a entablar el tema de “amor” algo completamente relativo al idealismo, tal vez
por eso mismo, ya que previamente se explicaba también que el idealismo hacia crecer más su idea
hacia el éxito, y es que si no hay ideales, o más bien, ilusiones, ¿de qué manera vamos a proyectar
planes concretos?

Otro aspecto importante que capté en la lectura fue que en relación a lo anteriormente puntualizado;
si el idealismo nos lleva a imaginar situaciones esperadas, mejor dicho, las llamadas “expectativas”,
¿por qué se menciona que también es capaz de manejar el hombre light afirmaciones como «Todo
vale», «Qué más da» o «Las cosas han cambiado»?, es decir, los idealismos y las especulaciones hacia
esperar el qué pasará no van muy encaminadas de la mano ya que la gran diferencia es que una
espera y la otra también, pero esta última permanece en la incógnita de qué más da si no sucediese.
Esto me lleva a una sola única conclusión más lógica y/o razonable que pueda yo contemplar al
respecto: “El hombre light” representado como un sujeto ejemplo de las personalidades actuales
llevadas a estos aspectos materialistas e idealistas, tiene una clara personalidad controversial, con
alto nivel de múltiple carácter oculto en una sola apariencia “visible” en el cual mantiene una vida en
contraste a dos aspectos básicamente, la vida que queremos y la vida que vivimos.

Como bien dice Enrique Rojas este es un libro de denuncia o mejor dicho “requerimiento”, cada uno
puede dar su propia interpretación de lo que crea que moralmente es bueno o malo, las acciones
pueden ser consideradas buenas o malas según se practiquen o no, el autor no se limita a lanzar
juicios de valor que nos digan cómo deberían ser las acciones humanas, más bien nos enfoca el texto
de manera que las acciones del hombre light contrasten con lo que consideramos éticamente
correcto, de este modo todos consideramos las acciones del hombre light perjudiciales para la
sociedad. El hecho de ser hombre ya marca en él una existencia que está enfocada dentro de una
realidad que necesariamente ha de colmar de valores para encontrar el significado de su existencia,
cada hombre es libre de cumplir lo dicho, pero hace que cualquiera que busque la felicidad es
necesario que busque un fundamento ético a sus valores como este libro se encarga de señalarnos, se
considera bueno todo lo que perfecciona al hombre.

El hedonismo o placer del hombre light va contra la ética de aquel que busca la felicidad como la meta
de su vida, encuentra el éxito o la fama como realización personal, recurren al consumismo como
símbolo de que todo lo que está a su alcance lo puede poseer, no se dan cuenta que los bienes que
hay en la tierra son para todos los hombres, y cuando poseemos un bien superfluo estamos quitando
a otro un bien necesario que puede ser alimento, vivienda, y esto cualquier persona coherente lo
puede entender. Pero bien, también es importante el entender que unos tienen el alcance de
conseguir o “ganarse a esfuerzo” dichos bienes, el punto es que de qué manera los utilizamos o los
repartimos si tenemos de más. Ahí radica el uso oportuno y correcto de los valores.

Nos impone que la permisividad es una especie de pasar indiferente ante las cosas, y esto como ya
estudiamos no denota un comportamiento inteligente, ya que si nos convertimos en personas
permisivas aceptaremos cualquier sumisión y acabaremos siendo manipulados, no pensaremos como
nosotros mismos, sino como un grupo de individuos lo desea ya sean gobiernos y políticos que son los
que manejan los medios de comunicación como la televisión. Al ser permisivos se nos crean unas
necesidades inútiles como es el caso de la publicidad.

Personalmente me gustó mucho esta frase que capté muy bien: “Ser uno mismo es ser siempre
fuertes, a pesar delas adversidades.” Me queda de ello que incluso teniendo altas y bajas, e
independientemente de qué manera apropiada se debería de actuar, tiene que intervenir en
cualquier momento la personalidad propia que nos distingue como personas y como ser humano en
específico.

Pero también, particularmente me ha gustado el análisis exhaustivo que ha dado al prototipo de


hombre light, que del que creo que todos hemos experimentado en momentos de depresión o
cuando algo nos ha salido mal, recurriendo a la televisión para dejar de dar vueltas a un fracaso
laboral o personal, o en otros casos recurriendo a la droga. Lo que está claro es que necesitamos de
alguien que nos ayude en nuestra elección de los valores alguien que nos dé unos referentes sobre los
que nos apoyemos para poder deducir que nos produce bien y que nos produce mal, yo
personalmente tengo probemos con la elección de valores, ya no porque tenga falta de comunicación
con la familia sino porque soy pesimista y poco entusiasta, esto hace que me venga abajo muchas
veces pero cada vez parece que lo supero mejor y me lleno de ganas de seguir adelante.

Esto, me lleva a concluir que podemos ver las características de este hombre light cuando percibimos
el individualismo y el egoísmo en las personas que nos rodean, cuando vemos que los padres están
ausentes en sus familias ¿qué significa todo esto?, ¿a dónde estamos dirigiendo nuestra naturaleza
humana? Un libro totalmente explicativo y significativo.

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