Vous êtes sur la page 1sur 5

Will

Introducción a la teoría etnológica, Ángel Palerm (1967)*.

EXÁMEN CRÍTICO DE LA HISTORIA DE LA TEORÍA ETNOLÓGICA.

Objetivo: Analizar las principales aportaciones de los principales precursores de la

teoría etnológica, así como su impacto en autores de su misma época y

posteriores.

El primer posible precursor de la teoría etnológica es Tito Lucrecio Caro, poeta

y filósofo romano, quien en su obra Sobre la naturaleza de las cosas explica el

origen del mundo, plantas y animales sin intervención sobrenatural alguna. Explica

la situación de los primeros seres humanos entendiéndolos como bestias salvajes,

cuando aún no sabían usar el fuego ni las pieles animales; seguidamente explica

los cambios dados una vez que se comienzan a usar estos y otros implementos en

la vida del hombre hasta que se fundan las primeras ciudades. La invención de la

propiedad y el descubrimiento del cobre, oro y hierro lleva al desarrollo de las

herramientas y armas, los cuales facilitaron el uso y el trabajo del medio ambiente

a conveniencia; una vez que los hombres vivían haciendo uso de fortificaciones,

leyes, vestido y cultivos, fue cuando se comenzó a registrar la historia. Lucrecio

nos dice que toda cultura ha sido inventada y aprendida por el hombre y que una

idea detrás de otra toma forma en la mente humana hasta escalar las cumbres

más altas, dicho autor incluye la idea del progreso en su obra.

José de Acosta (1540, jesuita, antropólogo y naturalista español), mejor

conocido como el padre Acosta fue otro precursor que buscó explicaciones de
acuerdo a la razón, orden y estilo de las cosas humanas, lo cual se ve reflejado en

su principal trabajo: Historia natural y moral de las indias. Propone que los

hombres migraron de Europa, Asia ó África hacia América (200 años que se

descubriera el estrecho de Bering), y ataca las ideas que buscaban en la Atlántida

ó en las tribus perdidas de Israel el origen del indio americano. Esto último lo hace

comparando las costumbres y tradiciones históricas de los hebreos con las

costumbres y tradiciones de los nativos americanos, sus discusiones las basa en

hechos conocidos y en deducciones e hipótesis bien formuladas y fundamentadas

que también le sirven para defender la racionalidad y cultura del indio americano.

Los tratadistas españoles de la época añadieron al interés por la evolución

histórica el interés por la diversidad de las culturas y de las sociedades humanas


(1).

El filósofo napolitano Juan Bautista Vico (1668) fue quien se dio a la tarea de

sintetizar las ideas de la tradición del evolucionismo-progreso y la tradición

etnográfica de los siglos de oro hispanos, su esfuerzo se plasma en el trabajo

Principios de una ciencia nueva en torno a la naturaleza común de las naciones

(1725). Siendo sus principales influencias Lucrecio, Francisco Suárez y Francis

Bacon, Vico quiso aplicar al mundo civil y humano los mismos métodos que Bacon

propone para las cosas naturales, estudiando los fenómenos “conforme a la razón,

orden y estilo de las cosas humanas”. Para Vico la idea de Rene Descartes de que

la base del conocimiento cierto está dada por ideas claras y distintas es errónea

ya que es la actividad humana y el quehacer (la verdad como resultado del hacer)

lo que constituye la evidencia. La Ciencia Nueva de Vico es vital para entender a


autores como Hegel y su escuela, los estudios de derecho comparado, los

eruditos de la antigüedad clásica y muchos portavoces de la ilustración francesa

que también recibieron parte de su influencia. Vico expresa que para el mundo

histórico y social se puede y debe descubrir los principios en las modificaciones de

la inteligencia del hombre. Se puede conocer el mundo creado por el hombre

utilizando el método que los científicos naturales emplean, pero analizando el

pensamiento humano de acuerdo a las necesidades y exigencias de la vida social;

este análisis se complementa con su teoría que nos dice que lo verdadero

(conocimiento cierto) es aquello que se convierte en hecho hay que llevar a la

práctica nuestro conocimiento para probarlo. Vico usa la filología como una

herramienta de la investigación histórica y etnográfica y pretende usar los mitos y

leyendas como fuentes históricas, tomándolos como una expresión de ideas,

creencias y actitudes. Sostiene la historicidad del derecho, estudia

comparativamente los pueblos y da preferencia al estudio de vestigios materiales

sobre las fuentes escritas. La esencia del paralelismo cultural y el relativismo

cultural se dejan entrever en sus afirmaciones. La idea central del principio

dialéctico que más tarde se desarrollaría, está en la ciencia nueva, como cuando

afirma que: “Las rivalidades que, en las ciudades se oponen entre sí a los

diversos ordenes con vistas a al obtención de la igualdad de derechos, son para

los republicas el más potente motor de desarrollo” (1). Aborda la historia como el

estudio de un proceso de desarrollo de las instituciones sociales, cuyos ciclos se

dan en niveles superiores a los anteriores (en “espiral”) y dividide la evolución total

de la humanidad en prehistoria e historia.


El principio que mueve y dinamiza el proceso evolutivo determina que los

procesos deben explicarse por causas que se encontrarían dentro de la estructura

misma y en el funcionamiento de las sociedades, dicho principio fue elaborado por

Georg Wilhelm Friedrich Hegel. Este filósofo alemán, repite de Vico que la verdad

es aquello que puede convertirse en hecho pero añadiendo que esta verdad ya

está contenida en el hecho mismo existente, pero como la negación de él y esta

negación se convierte en un hecho real mediante el proceso dialéctico. Hegel

observa a la evolución como un duro y enojoso trabajo contra si mismo, y a la

historia universal como el progreso en las conciencia de la libertad. El proceso

dialéctico de la evolución reside en la oposición del hombre y la naturaleza y en

los conflictos dentro de la sociedad y la cultura, los cuales llevarán a la realización

progresiva y concreta de la libertad.

Conclusiones: Se resalta la importancia de las aportaciones de Vico para el

posterior desarrollo de la dialéctica.

(1)Palerm, 1967. Introducción a la teoría etnológica.

*Ángel Palerm Vich (1917-1980) fue un antropólogo, profesor e

investigador español, profesor de científicos sociales críticos, comprometidos con

su propia realidad. Cursó la licenciatura en antropología y también la licenciatura

en Historia en la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) del Instituto

Nacional de Antropología e Historia. Publicó dos obras básicas para la


comprensión de la materia de su especialidad: Introducción a la teoría etnológica e

Historia de la Etnología.

Vous aimerez peut-être aussi