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El Ecuador sigue los procesos democráticos formales como elecciones, pero el autor argumenta que en realidad es una democracia disfrazada de sistema autoritario. Los poderes del estado toman decisiones para sus propios intereses en lugar del interés público. El sistema político se ha convertido en botín de un solo partido que no respeta la división de poderes, la libertad de opinión o el estado de derecho.
El Ecuador sigue los procesos democráticos formales como elecciones, pero el autor argumenta que en realidad es una democracia disfrazada de sistema autoritario. Los poderes del estado toman decisiones para sus propios intereses en lugar del interés público. El sistema político se ha convertido en botín de un solo partido que no respeta la división de poderes, la libertad de opinión o el estado de derecho.
El Ecuador sigue los procesos democráticos formales como elecciones, pero el autor argumenta que en realidad es una democracia disfrazada de sistema autoritario. Los poderes del estado toman decisiones para sus propios intereses en lugar del interés público. El sistema político se ha convertido en botín de un solo partido que no respeta la división de poderes, la libertad de opinión o el estado de derecho.
Actualmente el Ecuador es 100 % democrático, desde el punto de vista se siguen todos
los procesos establecidos en la constitución, tales como elección de dignatarios,
representares de los poderes constituidos, se llevan a acabo veedurías ciudadanas y estas han avalados todas las elecciones. A mi parecer no goza de una verdadera democracia, sino más bien una democracia disfrazada en un sistema autoritario, no existe la igualdad ni la transparencia en los poderes del estado ecuatoriano, tanto el poder ejecutivo, legislativo, judicial y electoral, toman decisiones para favorecer sus intereses particulares, y todos los cambios posteriores hechos por los votos en la asamblea y por los plebiscitos que le dieron más libertad al gobierno, pero quien se ocupa del interés público?. Sin embargo, lo que hoy vivimos en nuestro país, es un proceso que poco a poco ha ido convirtiendo nuestro sistema político en botín de un solo partido y una sola visión de sociedad. No existe respeto por la división de poderes, no existe respeto por la libertad de opinión o pensamiento, no existe Estado de Derecho.