Medición de corrosión por el método con pruebas

de pesos perdidos

1-introduccion:

Dentro de los diversos métodos y formas de ponderar la velocidad de corrosión, la

prueba de pesos perdidos son los más comunes y más sencillos. Una pieza de metal se
expone a un medio corrosivo por un tiempo luego se limpia para quitar los productos
de corrosión.

Con Los datos de pérdida de peso se calcula el rango de corrosión expresada como el
cociente de los gramos perdidos y el tiempo de duración de la prueba.

R=W/T, donde R=rango o velocidad de corrosión

W=pérdida de peso

T=duración de la prueba

2-objetivos:

Calcular la tasa de corrosión de material de acero en tuberías usadas en la industria del

petróleo.

3-materiales:

-vasos plásticos

-placas de acero y fierro

-petróleo

-agua y sal

-agua oxigenada, cloro

-balanza
4-procedimiento:

En vasos de plástico se vierte cantidades de petróleo, cloro, agua de formación, agua

oxigenada.se usaron 4 placas de acero y 4 placa de fierro que se pesaron antes de ser
colocadas

El peso de las placas de acero fue de 20 gramos y el peso de las placas de fierro fue de
15 gramos, según balanza electrónica. Luego se vierte una placa de acero y fierro por
cada vaso y se deja reposar por un determinado tiempo hasta que los metales
presenten índices de corrosión.

Las placas son limadas para quitar los productos de corrosión y se vuelven a pesar, se
hace el cálculo para encontrar el rango de corrosión.

5-resultados:

ACERO

Peso Peso Pérdida de Velocidad de

inicial(gr) final(gr) peso(mgr) corrosión(gr/año)

Agua y sal 20 19.980 20 7.3

cloro 20 19.990 10 3.65

Agua 20 19.950 50 18.25

oxigenada

Nota: la prueba se realizó con un periodo de tiempo de 1 día.

6-conclusiones:

 El agua salada acelera la corrosión por eso la corrosión de los metales es

frecuente cerca al mar.
 El vaso con aceite fue el único que no oxido porque el aceite evita que las
moléculas de agua que están en el medio reaccionen con la placa. Al sumergirla
en aceite no produce corrosión.
 El agua oxigenada es un agente corrosivo que puede ser muy similar al agua de
formación ante la presencia de gases corrosivos como dióxido de carbono,
sulfuro de hidrogeno y que dañan la tubería.