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Universidad Juárez Autónoma de Tabasco

División Académica Multidisciplinaria de los Ríos


“Estudio en la duda. Acción en la Fe”

Licenciatura en
Enfermería

Alimentación en lactante menor y lactante mayor

Alumno:
Gabriela Gómez Córdova

Grado: 5 º semestre Grupo: EN5

Docente:
L.E. María del Lourdes de la Cruz de la Cruz

Villahermosa Tabasco a 10 de Enero del 2018


ÍNDICE

Introducción ............................................................................................................. 3
Objetivo general ...................................................................................................... 4
Objetivos específicos ........................................................................................... 4
Alimentación del lactante menor ............................................................................. 5
Alimentación del lactante mayor.............................................................................. 7
Conclusión............................................................................................................... 9
Bibliografías........................................................................................................... 10
Introducción

Es el niño que se encuentra en la primera fase de su vida extrauterina. Período que


va desde el nacimiento, hasta aproximadamente los 12 meses de edad, momento
en que adopta la posición erecta. Algunos autores la extienden hasta los 24 meses.
En esta fase de la vida el niño se alimenta, básicamente, de leche materna, o de
otros tipos de leches, además de muy distintos alimentos complementarios.

El período de Lactante se extiende desde los 28 días de vida hasta los 24 meses y
se subdivide en:
Lactante Menor: de los 28 días hasta los 12 meses.
Lactante Mayor: de los 12 meses hasta los 24 meses.
Este período se caracteriza por:

 Un acelerado ritmo del crecimiento y de la maduración de los principales


sistemas del organismo.
 Desarrollo de habilidades que le permiten al lactante responder al entorno.
 El perfeccionamiento de las capacidades motoras gruesas y finas.

La cifra estimada de muertes de niños debidas a la desnutrición es de 2,7 millones,


lo cual representa el 45% de todas las muertes de niños. La alimentación del
lactante y del niño pequeño es fundamental para mejorar la supervivencia infantil y
fomentar un crecimiento y desarrollo saludables. Los primeros dos años de la vida
del niño son especialmente importantes, puesto que la nutrición óptima durante este
periodo reduce la morbilidad y la mortalidad, así como el riesgo de enfermedades
crónicas, y mejora el desarrollo general, (OMS, Julio del 2017).
Objetivo general

 Orientar a los padres de familia sobre una adecuada alimentación en los


lactantes para su adecuado crecimiento y desarrollo.

Objetivos específicos

 Explicar la correcta alimentación en el lactante.


 Mencionar las causas y consecuencias de una mala alimentación.
 Sugerir a los padres de familia una lista de alimentos para mejorar la salud en
lactantes.
Alimentación del lactante menor

Una adecuada nutrición durante la infancia y niñez temprana es esencial para


asegurar que los niños alcancen todo su potencial en relación al crecimiento, salud
y desarrollo. La nutrición deficiente incrementa el riesgo de padecer enfermedades.
La nutrición inapropiada puede, también, provocar obesidad en la niñez, la cual es
un problema que se va incrementando en muchos países.

La leche materna contiene todos los nutrientes que necesita un lactante durante los
primeros seis meses de vida, incluyendo grasa, carbohidratos, proteínas, vitaminas,
minerales y agua. Se digiere fácilmente y se utiliza de manera eficiente. La leche
materna también contiene factores bioactivos que fortalecen el sistema
inmunológico inmaduro del lactante, brindándole protección contra la infección;
además posee otros factores que favorecen la digestión y absorción de los
nutrientes.

Después de los 6 meses de edad, para el lactante alimentado con el pecho materno,
se torna progresivamente más difícil cubrir sus requerimientos solamente con la
leche de su madre. Además, aproximadamente a los 6 meses, la mayoría de los
lactantes ha alcanzado el desarrollo suficiente que les permite recibir otros
alimentos.

La alimentación complementaria incluye alimentos sólidos o semisólidos (papillas o


purés), y también alimentos líquidos (agua). Desde el punto de vista de la lactancia,
en esta etapa se recomienda continuar con lactancia materna o con fórmula si ya la
estaba recibiendo. La segunda papilla se recomienda una vez completada la
primera, alrededor de los 8 meses.

Se recomienda papilla o puré suave, sin grumos, ni trozos de fibra que estimulen el
reflejo de extrusión. Cuando han erupcionado los incisivos superiores (8-9 meses),
la papilla puede tener la consistencia de puré más grueso y luego molido con
tenedor, momento relacionado a la erupción de los primeros molares (alrededor de
los 12 meses). Al inicio de la alimentación complementaria la papilla o puré mixto
se debe entregar en cantidades pequeñas, y se podrá ir aumentando conforme
avanza y acepta de buena forma la alimentación, consumiendo a los 8 meses
alrededor de 150 ml de comida (3/4 taza), más 100 ml (1/2 taza de fruta); y a los 9
meses 200 ml (1 taza) de papilla y 100 ml (1/2 taza) de fruta, en cada comida. Estas
cantidades son referenciales y pueden variar en distintas oportunidades.

Horario: debe acomodarse a las costumbres familiares y progresivamente el


niño(a) debe incorporarse a los momentos de comida familiar.
Alimentación del lactante mayor

La salud y el bienestar de los niños dependen de la alimentación. Los padres y


educadores deben transmitir al niño la idea de que con la alimentación no se juega
porque nuestra salud depende de ello y debemos darle a la comida la importancia
que se merece. Esto significa hacer una pausa al día para sentarnos a la mesa y
tomar protagonismo como comensales frente a los alimentos que vamos a tomar.

Un niño en la etapa del lactante mayor va desde los 24 meses hasta los 2 años y
11 meses. Esta etapa es muy complicada e importante para el niño y su
alimentación es fundamental. Continuar dando leche materna hasta los 2 años o
más. Dar tres comidas y dos meriendas al día.

A partir de esta edad, la niña/o debe comer de todo lo que coma la familia.

Es normal que tenga menos apetito que cuando era lactante; no hay que
angustiarse si está inapetente, sino más bien presentar el alimento y cocinarlo de
formas diferentes. Se deben ofrecer al niño cuatro comidas al día dando, con algún
alimento lácteo como refuerzo, procurando que se lave los dientes después todas
ellas. Estos son algunos menús posibles:

Desayuno Comida Merienda Cena

Puré de patatas, Crema de calabacín,


1 taza de leche con
pollo a la plancha merluza frita y fruta entera.
Opción 1 harinas instantáneas y 1 yogur con galletas
con ensalada y Un vaso de leche antes de
1 zumo de naranja
compota de fruta acostarse si quiere

1 rebanada de pan
Judías verdes con patatas y
con jamón, 1 yogur con Fideos con verdura 1 vaso de leche con
1 huevo revuelto. Un vaso de
Opción 2 una cucharadita de troceada, pescado y un trocito de pan y
leche antes de acostarse si
azúcar y 1 zumo de macedonia de fruta manzana al horno
quiere
fruta
RECOMENDACIONES PARA LA INTRODUCCION DE ALIMENTOS DIFERENTES
A LA LECHE SON:

 Selección

 1. El médico o nutriólogo indicará el tipo de alimento a introducir

 2. Seleccionar siempre el alimento de mejor calidad disponible

 3. Introducir un solo alimento a la vez, ofrecerlo durante dos o tres días


seguidos, lo que permite conocer su tolerancia. Se requiere el niño pruebe
del alimento de un mínimo de 8 a 10 veces para que pueda aprender a
disfrutarlo y se logra la mayor aceptación de 12 a 15 veces. La persona que
alimenta al niño necesita aprender a identificar los signos de saciedad.

 4. Evitar alimentos que el niño pueda aspirar como cacahuates, uvas,


pasitas.

 5. dar al niño agua simple

 6. limitar el uso de jugos de frutas y más sin son industrializados, ofrecerlos


hasta que el niño sea capaz de manejar la taza.

 7.- No mezclar los alimentos, para que el niño conozca, acepte y


posteriormente reconozca el sabor, textura, olor, y color de cada alimento.

 8.- Preparar los alimentos sin la adición de sal, azúcar, chile, miel o muchos
condimentos.

 9.- Utilizar licuadora para preparar las papillas sin colarlas o bien raspar con
una cuchara directamente el alimento al momento de estar alimentando al
niño.

 10. Los alimentos deben prepararse con extrema limpieza, lavarse las manos
antes, y después.

 11.- los jugos de frutas prepararlos sin cascara.

El alimentar a los lactantes es una responsabilidad de los padres, para su buen


crecimiento y desarrollo, para enfrentarse al entorno.
Conclusión

El período de lactante, es la etapa del ciclo vital en que el ser humano tiene los más
grandes logros de crecimiento y desarrollo. Esta situación determina en el niño,
mayor vulnerabilidad a los factores ambientales y requiere de la presencia de los
padres o cuidadores para que lo ayuden a satisfacer sus necesidades.

Consideramos que desde pequeños es importante crear un hábito alimenticio que


nos ayude a desarrollarnos sanamente, que aporte los nutrientes necesarios para
el organismo en la cantidad y calidad requerida. Siendo que al tener una dieta
balanceada evitaríamos muchas enfermedades generadas a la mala alimentación y
el sobrepeso. El lactante menor y mayor están en una etapa muy vulnerables,
dependiendo de solo el cuidado de su padre o su familiar que este a cargo, por ello
es importante informar o dar a conocer los alimentos adecuados para su edad.
Bibliografías

 http://www.fao.org/docrep/013/am283s/am283s05.pdf
 http://www.paho.org/hq/dmdocuments/2010/IYCF_model_SP_web.pdf
 http://www.sap.org.ar/docs/publicaciones/alim_0a2.pdf
 http://gwweb.jica.go.jp/km/ProjDoc233.nsf/VIEWJCSearchX/D51E7A1ED5CCA
E2849257F39002C51E2/$FILE/18-4.%20

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