Motívate: Únete al Ciclo del Ánimo

Licda. Maribel Belaval

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La motivación es un impulso que se descubre en nuestro interior el cual guía y determina

una acción, especialmente para llenar una necesidad. Como somos sistemas abiertos, que
interactuamos con las situaciones externas, lo que pasa en nuestra sociedad nos
afecta mucho. Cuando son situaciones positivas nos sentimos más motivados pero, cuando son
negativas, estamos permitiendo que minen nuestro entusiasmo y aprecio por la vida misma.

Si nos unimos al hábito social de quejarnos, criticar y evaluar en absoluto negativo, nos
convertimos en víctimas de lo que no está funcionando. Peor aún, si justificamos y perpetuamos
nuestro estado de ánimo desmotivador, porque tenemos buenas “razones” para estar así. Nos
enganchamos en evaluaciones estériles negativas y bailamos todos juntos al ritmo de la
impotencia. Estos hábitos automáticos de desvalorización son el inicio del ciclo del desánimo.

Validemos la complejidad del escenario real que nos ha tocado vivir. Reconozcamos que
necesitamos desarrollar autonomía y auto manejo para que esas fuerzas externas no malogren
nuestros anhelos de vivir en una sociedad equilibrada. Escojamos con “urgencia” interna, como una
necesidad apremiante, motivarnos a movernos a otro estado de conciencia. ¡Basta ya!

¡Motívate! Vamos hacer algo diferente al buscar soluciones creativas, desde nuestro liderazgo
personal. La nuero-ciencia nos aclara que somos un sistema totalmente interconectado. La mente
reflexiva positiva es más efectiva en el proceso de hacer nuevas conexiones en el cerebro para un
aprendizaje efectivo de cómo manejar la problemática externa. La química que produce el estado
interno del bienestar propicia conectividad para la plasticidad del cerebro. Lo contrario ocurre
cuando estamos estresados, reactivos y desmotivados. Comencemos cambiando la reactividad
condicionada emocional y reflexionemos más, como estilo de vida superior. Busquemos en nuestro
interior el antídoto del desánimo.

Ya sabemos que el cerebro reduce su capacidad de concentración en estados agudos de estrés,

dolor, coraje. Al relajarse activamente aumenta su capacidad de reflexión menos lógica, más
intuitiva y creativa. Sobre todo, más auto-sugestiva. La realidad se percibe subjetivamente,
intuitivamente y creativamente. Es en este estado que se incrementa la capacidad de aprendizaje y
lucidez mental. Si queremos generar motivación intrínseca, autogenerada, es necesario crear
conscientemente estados reflexivos de empoderamiento personal. ¿Qué podemos hacer diferente?

Para cambiar nuestro enfoque de vida hay tres creencias básicas:

1. Alcanzar el objetivo es posible. (Posibilidad).
2. Somos capaces de alcanzarlo. (Capacidad).
3. Merecemos alcanzarlo. (Merecimiento)

Los cambios ocurren desde un nivel de conciencia superior a la emocional. Visualizar posibilidades,
capacitarnos con nuevo aprendizaje y defender el derecho de merecer una vida mejor. Dice el
psicólogo Carl Jung: “Los problemas no se resuelven en sí; se maduran desde otro estado de
conciencia diferente. Así los problemas pierden su “urgencia”. No se resuelven lógicamente sino
que se confrontan con un estilo de vida mejor que estimula, ánima y entusiasma”. Aquí
está nuestro gran reto, dónde enfocar nuestra energía mental y hacia dónde dirigirla. Busquemos
en nuestro interior un propósito ulterior que nos enfoque y guíe.
La auto motivación se vuelve un estado permanente cuando respondemos a la vida desde la
conciencia espiritual del amor. Se llama auto neuroplasticidad el fenómeno humano de evolución
consciente a la personalidad de éxito. Se producen en la conciencia superior momentos cumbres
de iluminación y discernimiento. Se crea un super-mapa de nuevas conexiones cognitivas
inesperadas que une muchas partes del cerebro. Impactan la percepción y las expectativas de
nosotros mismos, las posibilidades y el desempeño personal y comunitario. Sobre todo, el aprecio
incondicional a la vida, comenzando así el ciclo del ánimo. En este estado positivo nos enfocamos
en la “urgencia” de motivarnos a hacer cambios internos que impacten nuestra conducta.
Respondemos a la necesidad de crear un estilo de vida mejor para nosotros y para las próximas
generaciones.

¡Motívate! Te presento esta lluvia de ideas; añade las tuyas.

- Genera fortalezas internas, reflexiona en tiempo de dificultades.

- Acepta el reto de crecer y aprender lecciones.
- Desarrolla talentos y capacitaciones nuevas, re-invéntate.
- Sana la víctima, hazte justicia con el perdón y encuentra la paz.
- Vive tu presente con valentía, con sentido y propósito único.
- Transforma dolores dando servicio a otros, desde tu superación.

¡Motívate! … Únete al ciclo del ánimo; seamos líderes espirituales que influencian a otros por
su manera de Ser.