Año Paulino: ITINERARIO CATEQUÉTICO

PRESENTACIÓN DEL AÑO

PAULINO

CATEQUESIS PARA
NIÑOS

OBJETIVOS
 Conocer la figura de San Pablo.
 Descubrir el significado y el valor
del Año Paulino.
 Conocer las diferentes actividades que se van a realizar
con motivo del Año Paulino, para participar en ellas..

NECESITAMOS:
- La ficha.
- La vela, la espada y la Biblia para la oración.
- Una imagen de San Pablo para ponerla en medio
de la sala donde se desarrollará la catequesis.

DESARROLLO DE LA CATEQUESIS

+ Invocamos al Espíritu Santo para que nos asista en la

catequesis.

+ El catequista le presenta de forma narrativa la vida de Pablo

de Tarso.

“Hace 2000 años nació en una ciudad de Asía Menor llamada Tarso un
niño al que sus padres llamaron Saulo. Este vivió en el seno de una
familia acomodada económicamente y de una profunda vida religiosa
en la tradición de Israel. Fue educado en Jerusalén por uno de los
mejores maestros judíos de aquel entonces, un tal Gamaliel, que le
enseñó a cumplir las leyes de la religión judía de forma exigente.

Amaba tanto su fe judía que, cuando se enteró de que había un

grupo nuevo de fieles llamados cristianos, comenzó a perseguirlos
para acabar con ellos. Su odio hacía los discípulos de Jesús era tan
grande que lapidó a uno de los primeros seguidores llamado Esteban.
Los cristianos, al sentirse perseguidos por Saulo de Tarso, se
dispersaron y huyeron a otras ciudades, y entre ellas, muchos se
fueron a Damasco. Saulo, al enterarse, fue y pidió una autorización a
las autoridades para poder coger a los cristianos que se habían
marchado fuera de Israel, y así acabar con ellos.

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Mientras Saulo va de Jerusalén a Damasco para llevar hacia delante

su pretensión de eliminar a los cristianos, tiene una experiencia que
le transformará la vida para siempre. Una luz grande le ciega y cae al
suelo, y allí oye una vez que le dice: “Saulo, Saulo, ¿por qué me
persigues?. El dijo: y tú ¿quién eres?. La voz respondió: “yo soy Jesús
al que tu persigues”.

Saulo se había encontrado con Jesús y aquella luz tan intensa le había
dejado ciego. Lo llevaron a casa de un tal Ananías, que lo acogió,
aunque tanto él como los demás cristianos desconfiaban de Saulo.
Ananías le enseñó quien era Jesús de Nazaret y lo instruyó en la fe
cristiana con la catequesis. Posteriormente, Saulo se bautizó,
aceptando la fe y se comprometió a seguir a Jesús
y a entregarle su vida. Saulo, al bautizarse,
cambió el nombre de Saulo por el de Pablo.

Aquella experiencia de encuentro con Jesús en

el camino de Damasco y su posterior
formación en el cristianismo, hicieron que se
enamorara tanto de Jesús que se fue a
anunciarlo fuera del país de Israel para que
los paganos pudieran conocerlo, creyesen
en Él y lo siguieran. A ser misionero dedicó
desde entonces toda su vida Pablo. Fue por
los pueblos y ciudades de la cuenca del
mar Mediterráneo y les anunció a Jesús, su mensaje y su obra. Los
que creían por su palabra, se convertían y se bautizaban, y se
creaban así las comunidades de cristianos en cada ciudad o pueblo.
Cuando las creaba, se marchaba a otro lugar para seguir anunciando
el mensaje de Jesús y fundar otras comunidades cristianas. A estas
no las olvidaba, sino que les enviaba cartas y a algunas las volvía a
visitar. Esas cartas que Pablo enviaba a los cristianos de las
comunidades que había fundado, son las que están en el Nuevo
Testamento y las que leemos en la segunda lectura de la misa de los
domingos. Las cartas son: a los Romanos, 1ª y 2ª a los Corintios, a
los Gálatas, a los Efesios, a los Filipenses, a los Colosenses, 1ª y 2ª a
los Tesalonicenses, 1ª y 2ª a Timoteo y a Tito.

San Pablo, hizo tres viajes apostólicos y un cuarto de Jerusalén a

Roma, que era la capital del Imperio Romano donde, por ser seguidor
de Jesús y por anunciarlo a otros y por manifestar su felicidad de ser
cristiano, lo martirizaron cortándole la cabeza.”

+ Los cristianos de todos los tiempos lo han tenido como un fiel

amigo de Jesús, como un modelo de seguidor de Cristo, que fue un
insigne misionero y que vivió la fe de forma ejemplar. Nosotros a lo
largo de un año, desde el 28 de junio de 2008 al 29 de junio del 2009
queremos también recordarlo, reflexionar y aprender de él para que
imitándolo podamos vivir mejor nuestra vida cristiana, teniéndolo
como modelo.

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D
I
Á
L
O
G
O

- ¿Qué es lo que más os ha llamado la atención

sobre la vida de San Pablo?.
- De todo cuanto hizo, ¿en qué cosas podríamos
imitarlo nosotros en nuestra vida?.

A lo largo de este curso y hasta el 29 de junio de 2009, día en

que festejamos la fiesta de San Pedro y San Pablo, celebramos el Año
Paulino en el que recordaremos a San Pablo en los 2000 años de su
nacimiento. Nosotros vamos a realizar las siguientes actividades:

1.- Cada mes tendremos un cartel con un mensaje que hará

referencia a alguna faceta de la vida de nuestro Santo, para que nos
ayude imitarle en su vida misionera y de fe. Nosotros vamos a
comprometernos a vivir ese mensaje a lo largo de los 30 días y en las
catequesis semanales iremos revisando y compartiendo en grupo
cómo vamos haciendo ese mensaje realidad en nosotros.

2.- Veremos, a finales de noviembre, una presentación en

PowerPoint sobre la vocación de San Pablo y desde ella
reflexionaremos sobre la vocación a la que nos llama a nosotros el
Señor.

3.- En enero y para preparar la fiesta de la conversión de San

Pablo el día 25, dedicaremos dos catequesis tras la fiesta de la
Navidad, para mirar más profundamente la vida, la fe, la conversión,
los viajes y las cartas de nuestro Santo, de tal modo que nos ayude a
descubrir cómo debemos vivir nuestra vida como cristianos. Además,
el día de la conversión de San Pablo, tendremos una celebración junto
con todos los miembros de nuestra parroquia que están viviendo este
Año Paulino.

4.- Leeremos el cómic de San Pablo y jugaremos al “Trivial

Paulino”.

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+ Debemos animarnos a vivir con intensidad este Año Paulino,

ya que es una oportunidad que nos da el Señor para acercarnos más
a Él a través de la persona de Pablo de Tarso.

+ Se le entrega el Cómic “Pablo de Tarso, un cristiano

apasionado”.

ORACIÓN

Pondremos en medio de la sala de reunión:

Una luz encendida. (La fe que es como

una llama en el corazón del que la tiene, que da
calor, alumbra y transforma)

Una espada (Es el símbolo del que

lucha. Pablo fue un gran luchador para llevar la fe
por todos los lugares y dejar sembrada la semilla del Evangelio)

Una Biblia abierta. (Es la Palabra de Dios que San Pablo

transmitió).

Les explicamos el significado de los símbolos.

- Hacemos un momento de silencio y nos ponemos

en la presencia de Dios
- Juntos recitamos la siguiente oración:

Señor, te damos gracias por el Apóstol Pablo, evangelizador

incansable y profundamente enamorado de Jesucristo, por
quien entregó su vida y todo cuanto era.

Enséñanos a profundizar sobre su figura a lo largo de este año

dedicado a él, y a tener los deseos de realizar en nuestra
existencia lo que él hizo, seguir a Cristo, anunciarle con el
testimonio de su vida y vivir el mensaje de fe.

Nos ponemos en tus manos, y junto a todos los cristianos que

formamos la Iglesia, te pedimos que nos enriquezcas con
nuevas vocaciones como las del Apóstol de las Gentes, Pablo de
Tarso. Amen.

- Leemos y meditamos 1ª Tesalonicenses 4, 1-

2.9-12
- Silencio para hablar con Dios.
- Rezo del Padrenuestro.

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