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Según Juan Sebastián Contreras F. (2016): “La contratación estatal es el conjunto de normas
que regulan todos los procedimientos que se adelantan para que las entidades del Estado
puedan realizar sus procesos de abastecimiento cuando identifican una necesidad”.
Siendo esta una manera de dar solución a necesidades y siendo la forma a través de contratos
públicos; se entiende que el proceso debe de contar con una serie de etapas que involucran a
ambas partes, para este caso contratista y contratante, donde cada quien tiene unas tareas
específicas, con el fin de asegurar que el proceso se haga según lo establecido en el estatuto
de la contratación pública en Colombia (1993).
Seguidamente tenemos la fase de selección dónde podemos encontrar que el inicio del
proceso está determinado por un acto administrativo del proceso de selección una vez hecho
este se procede con la publicación del acto del pliego de condiciones y acto de inscripción
calificación y clasificación en el RUP, en este cabe resaltar que al día de hoy solo procede la
acción de nulidad.
Una vez analizados los oferentes se escoge la alternativa que represente mayor economía y
eficiencia para la entidad contratante, según sea el caso de la modalidad de contratación que
presida la selección, se continúa con la fase de perfeccionamiento dónde se reconoce por
medio de documento público el acto administrativo de adjudicación y de declaratoria de
desierto, entendiendo que en este último procede recurso de reposición, pero se puede
demandar en restablecimiento o nulidad.
Para finalizar es preciso señalar que la contratación estatal permite a las entidades realizar
procesos de contratación para garantizar el cumplimiento de derechos fundamentales
expuestos en la constitución política (1991), entendiendo que es función de las entidades
estatales asegurar los mismos. Por ello, se hace necesaria la realización de un debido proceso
que permita garantizar la satisfacción total o parcial de la necesidad, además de que es
también deber de los ciudadanos y demás entes competentes supervisar la correcta
realización de las obras para evitar desgastes del erario público en actos de corrupción o
incumplimiento.
BIBLIOGRAFÍA