Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
En eso lo sorprendió
una niñita que vio
lo que hacía el malvado ladrón
y con ternura dijo al bribón:
“Santa, no te lleves todo.
Quiero jugar y así no hay modo.
Por fa, querido Santita,
te prometo ser buenita,
pero no tomes mi bota
ni mucho menos mi pelota”.
El Grinch inventó una razón
y la niña de buen corazón
le creyó a quien vio disfrazado
de Santa, el viejito adorado.