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capítulo 7

• Analizar las palabras “ninguna condenación” y “en Cristo Jesús” (Ro 8:1).
(p 5)
Condenación es un término legal—un juicio que viene del tribunal del cielo
a los que practican el pecado.
Romanos 8:1 anuncia que ninguna condenación hay para los que están “en
Cristo”. El Espíritu Santo bautiza (nos coloca) “en Cristo” para que ahora
nosotros vivamos, habitemos y descansemos en unión con Jesucristo. Cuando
Jesús dijo: “Consumado es” Él borro la condenación y la culpa de nuestros
pecados pasados. La única manera de experimentar el no tener ninguna
condenación es estar “en
Cristo”—viviendo en comunión con nuestro Salvador y experimentando Su
justicia. (p 9)

• Interpretar 7 frases clave de Romanos 8:1-3. (p 13 a p 22) sermón el


error de pedro

“La ley del Espíritu de vida” (Ro 8:2) se refiere al poder y autoridad del
Espíritu Santo que nos libera del poder del pecado y de la muerte.
“La ley de la muerte” (Ro 8:2) se refiere al poder del pecado y de la muerte
para esclavizar a los humanos.
“Lo que era imposible que hiciera la ley” (Ro 8:3) indica que la ley de Moisés
sólo pudo revelar el pecado pero carecía del poder para liberarnos del
pecado y de romper el poder que el pecado tenía sobre nosotros. Nos
señalaba la dirección correcta, pero no tenía el poder de impartir vida.
“Débil por la carne” (Ro 8:3) indica que la ley nos señaló el camino
correcto, pero los deseos pecaminosos de la carne nos sacaron del camino.
La atracción de la carne fue más fuerte que el deseo de obedecer la ley.
“En semejanza de carne de pecado” (Ro 8:3) se refiere a que Jesús vino como
humano. Pablo tiene cuidado de señalar que Jesús era completamente
humano, pero no llegó a pecar—tal como Dios creó a Adán en el Edén.
Puesto que Jesús no cometió pecado, con Su muerte fue substituto de los
culpables.
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“A causa del pecado” (Ro 8:3). Como el Cordero de Dios sin pecado, Jesús se
dio a sí mismo como una ofrenda por nuestros pecados para que podamos ser
salvos por la gracia por medio de la fe.
“Él condenó al pecado en la carne [el hombre pecaminoso]” (Ro 8:3). Jesús,
ofreciéndose a sí mismo por nuestros pecados, condenó el poder del
pecado, por
lo que este no tiene control sobre los que aceptan a Jesús como su
salvador y Señor.

• Identificar 4 relaciones en Romanos 8:1-4.


1. La relación de los creyentes con Dios. “Ahora, pues, ninguna condenación
hay para los que están en Cristo Jesús” (Ro 8:1).
2. La relación de los creyentes con el pecado. El pecado está muerto para
nosotros y ya no tiene poder para controlarnos.
3. La relación de los creyentes con la ley. La ley no está por encima,
por debajo, o detrás de nosotros; está en nosotros.
4. La relación de los creyentes con el Espíritu Santo nos capacita para
obedecer la ley del amor.

• Analizar: La ley de Dios no está encima, ni debajo, ni detrás de


nosotros―está dentro de nosotros. (p 28, puntos del 1 al 4)

La ley no está sobre nosotros como un esposo, un amo, un juez, o un


Salvador. La ley fue una vez como un esposo para nosotros. Pero morimos a
esa relación y ahora estamos casados con Cristo. La ley no está bajo
nosotros para que podamos pisotear su autoridad moral.
La ley no está detrás de nosotros como algo que podamos ignorar. En
cambio de eso, está escrita ahora en nuestro corazón y mente.

• Explicar cómo podemos cumplir los requisitos justos de la ley (Ro 8:4).
(p 40)

Cuando vivimos “conforme al Espíritu” (Ro 8:4b) los requisitos justos de la


ley se cumplen en nosotros. El Espíritu santo nos capacita para amar a
Dios (Mr 12:30) y
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así guardar la primera parte de los diez mandamientos; y para amar a


nuestro prójimo (Mr 12:31) y así guardar los últimos seis.

• Contrastar los valores de los que son guiados por la carne con los de
los que son guiados por el Espíritu (Ro 8:5). (p 54, p 58)

Los que son guiados por los valores o los deseos de la carne, los valores
egoístas del mundo. Ellos valoran el, placer, el dinero, el poder, el
prestigio, el conocimiento, la comodidad y cosas como esas. Siguen los
deseos de la carne, de los ojos y la vanagloria de la vida. Ellos piensan
como el mundo piensa, se sirven a sí mismos en vez de servir a otros y a
Dios.
Los que son guiados por el Espíritu viven por los valores de Dios y
enfocan su mente en lo que el Espíritu desea. Valoran la Palabra de Dios,
la obediencia, la
oración, la adoración, la santidad, la comunión con Dios y con Sus hijos,
el perdón, la compasión, complacer a Dios y servir a otros.

• Contrastar el estado espiritual de los que son guiados por la carne con
el de los que son guiados por el Espíritu (Ro 8:6, 13). (p 67, 68)

Los que son guiados por la carne mueren espiritualmente. Los que son
guiados por el Espíritu tienen vida espiritual y paz. Los guiados por la
carne son enemigos de Dios. Los guiados por el Espíritu son familia de
Dios.

• Identificar las características de los enemigos de Dios y las de la


familia de Dios (Ro 8:7-17). (p 76,77)

Los enemigos de Dios son hostiles a Él y no le honran como Dios. Son


egoístas, rechazan la verdad, siguen la maldad, no conocen a Dios, no
obedecen el evangelio de Jesús. Son controlados por su naturaleza
pecaminosa.
Los de la familia de Dios no son controlados por la carne sino por el
Espíritu de Dios. Son guiados por Su Espíritu—hacen Su voluntad y le
obedecen a Él. Ellos
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tienen una relación estrecha con Dios y una seguridad de pertenecerle a


Él. La familia de Dios le da honra a Él y a Su nombre. Dios se agrada en
compartir las riquezas del cielo con ellos para siempre, como coherederos
con Cristo.

• Analizar el conflicto en los creyentes entre la carne y el Espíritu (Gá


5:13-18).
(p 81,82)
La carne y el Espíritu se oponen entre sí. La batalla no termina en el
nuevo nacimiento. La carne mantiene una fuerza dentro de nosotros, lista
a rebelarse contra el Espíritu en cualquier momento a lo largo de nuestra
vida en esta tierra en un cuerpo. La nueva presencia del Espíritu en
nuestra vida no destruye inmediatamente los antojos de la carne. Pero el
Espíritu ha hecho a nuestro espíritu vivo y activo. Él mora en nosotros
para ayudarnos a vencer las atracciones de la carne. Los creyentes no son
más prisioneros de la carne, pero tenemos aún que vencer las tentaciones
carnales.

• Explicar e ilustrar el fruto de la carne y sus resultados (Gá 5:19-21).


(p 83,84 contestar cuadro de los frutos de la carne)
Aunque Cristo nos hace libres de ser prisioneros de la carne, nosotros
podemos usar esa libertad para complacer a la carne. La carne nos guía
para servirnos
sólo a nosotros mismos y para ir en dirección opuesta al Espíritu. En
Gálatas Pablo enumera 15 frutos (pecados, tales como inmoralidad,
idolatría, ambición egoísta) de la carne, que traen una cosecha de
destrucción. Por ejemplo:
Los celos de Caín hicieron que él matara a su hermano.
Los homosexuales de Sodoma causaron la destrucción de la ciudad. Los que
son guiados por la carne no heredarán el reino de Dios.

• Explicar e ilustrar el fruto del Espíritu y sus resultados (Gá 5:22-


26).
(p 85,86,89, contestar cuadro de frutos)
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El fruto del Espíritu es la gracia que crece en la vida de un creyente


mientras es guiado por el Espíritu Santo y recibe Su poder. El fruto del
Espíritu es amor (que
viene en ocho manifestaciones). (Gá 5:22-23). [Observe que Pablo no dice
“los frutos son” sino que él dice “el fruto es”.] Dios derrama amor
en nuestro corazón, y el amor produce el fruto del Espíritu. Moisés fue
un hombre manso, sin embargo se convirtió en un gran líder para guiar a
los israelitas lejos de la esclavitud. El fruto del Espíritu es el
testimonio de que una persona es cristiana y guiada por el Espíritu.

• Describir el plan de Dios para un creyente “sorprendido” en un pecado


(Gá 6:1-5). (p 91, 92, 93)

Dios no quiere que un creyente que fracasa en su batalla con el pecado


sea abandonado por la iglesia. Los pecados varían según a quienes
afecten. El proceso de restauración debe ser tan privado o público como
lo fue el pecado. Si el pecado es contra Dios éste debe ser resuelto
entre Dios y el creyente. Si un cristiano le hace daño a otro, el proceso
de perdón debe ser manejado entre ellos. Solamente si la persona no se
arrepiente, el caso se debe informar a la iglesia. (Mt 18:15:22). Si la
ofensa se conoce en la iglesia, entonces los líderes (los espirituales)
deben restaurarlo con cuidado como un médico trata a un hueso fracturado,
de una manera que cause el menor sufrimiento. Y los líderes deben ser muy
cuidadosos de no caer también.

• Resumir e ilustrar la ley de Dios sobre la siega (Gá 6:7-10). (p 96)

Cosechamos lo que sembramos. Las acciones buenas y las malas son las
semillas que sembramos. Dios estableció las leyes para castigar o premiar
cada acción.
A veces la siembra y la cosecha son aplicadas por la ley natural, al
igual que la ley de la gravedad. Si sembramos para la carne, cosechamos
destrucción. Si sembramos para el Espíritu cosechamos vida eterna. Creer
que uno puede pecar sin consecuencias es como burlarse de Dios y
llamarlo mentiroso. Del mismo modo, decir que Dios no premia o no
premiará sus actos de justicia es burlarse de
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Él. La ley de Dios de la cosecha es verdadera.


• Resumir algunos versículos del Nuevo Testamento que vinculan el
sufrimiento con la gloria. Romanos 8:17-18 (p 106, cuadro de vinculación)

En el cristianismo, el sufrimiento debe llegar antes que la gloria, tan


cierto como la cruz precede a la corona.
Jesús sufrió para ser glorificado (Lc 24:25-26). Nos regocijamos en el
sufrimiento porque éste trae esperanza de la gloria de Dios (Ro 5:2-5).
Debemos participar en Su sufrimiento si deseamos participar en Su gloria
(Ro 8:17- 18). Lo que sufrimos por Cristo parecerá muy pequeño cuando
seamos glorificados en Jesús (1 P 1:6-7; 5:10).

• Hacer un contraste entre nuestras aflicciones presentes y nuestro


futuro glorioso (Ro 8:18). (p 108)

Los sufrimientos presentes y la gloria futura son tan diferentes que no


son comparables. Si dos objetos son similares en su peso, pueden pesarse
en una balanza.
Pero si uno es mucho más pesado que el otro, no vale la pena compararlos.
Romanos 8:18 nos dice que nuestro sufrimiento no es comparable con la
gloria futura que tendremos. Sin embargo, aquí en este mundo que
sufrimos; tenemos que esperar nuestra gloria futura. (p 111, llenar
cuadro)

• Explicar las 3 clases de gemidos que expresan esperanza (Ro 8:19-27).


(p 112)
1. La creación (el reino de la naturaleza) gime con la esperanza de la
liberación de la maldición. Una vez más la tierra será como el Edén con
una maravillosa relación entre los humanos y la tierra. Esto sucederá
cuando los hijos de Dios sean glorificados (Ro 8:19-22).
2. Los creyentes gemimos mientras soportamos con esperanza, aguardando
nuestra adopción completa como hijos (Ro 8:23:25). En momentos especiales
de oración experimentamos, al recibir las “primicias del Espíritu” un sabor de
la gloria que está por venir. Como un hijo que ha sido adoptado, pero no
lo han llevado a casa aún, nosotros gemimos con la esperanza esperando el
día cuando seremos llevados a la casa del Padre (Jn 14:2).
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3. El Espíritu Santo gime en oración por los creyentes (Ro 8:26-27).


Cuando los creyentes no saben cómo orar, el Espíritu santo ora por
nosotros y a través de nosotros con gemidos. Este gemido incluye hablar
en lenguas (1 Co 14:2), o el Espíritu puede estar orando directamente a
Dios, sin nuestra participación.

• Interpretar e ilustrar Romanos 8:28. (p 121, ilustrar, camiones)

“... todas las cosas” Dios está haciendo algo bueno por nosotros. Esto no
significa que todas las cosas sean buenas. Los pecados, las enfermedades,
los accidentes,
las tentaciones, y las pruebas no son buenos. Pero incluso cuando
sufrimos, Dios obra para un buen propósito en nuestra vida, sin importar
cuál sea el origen del problema.
Esto nos da una gran seguridad. Dios está obrando para bien sólo para “los
que lo aman a Él”. Vemos este principio ilustrado en la vida de José que fue
vendido
como esclavo por sus hermanos. Ellos obraron para mal, pero Dios lo
encaminó en bien.

• Explicar el propósito de Dios cuando todo obra para nuestro bien (Ro
8:29).

El propósito de Dios es transformarnos a la imagen de Jesús. En la


justificación recibimos la justicia imputada.
Pero en la regeneración (el comienzo de la santificación), Dios comienza
el proceso de hacernos justos—conformes a la imagen de Jesús. Dios desea
una familia que refleje más y más la naturaleza de Dios.

• Explicar 5 pasos en la secuencia de nuestra salvación (Ro 8:29-30).


( figura 7.20)
1. Dios conoce antes a los que creyeron en Jesús como salvador y Señor.
Conocer antes significa “saber algo antes de que suceda”. Dios es
omnisciente—lo sabe todo: el pasado, el presente y el futuro. Dios
permite que la gente decida qué escoger, pero Él conoce cuáles serán esas
decisiones.
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2. Dios predestina a los que escogen a Cristo para ser como Él. Predestinar
significa “planear un destino.”
Dios no fuerza a nadie a ir al cielo o al infierno. La predestinación en
las Escrituras tiene mucho más que ver con el plan de Dios para los que
aceptan a Cristo que con determinar quién creerá o quién no creerá en Él.
3. Dios llama a todos de muchas maneras diferentes.
Romanos 8:28-39 se refiere sólo a los creyentes. Romanos 8:28-30 describe
a los que responden “sí” cuando Dios llama. Estos son “los llamados”
en el sentido de que ellos responden y están de acuerdo con la
invitación, las condiciones y el Señorío de Dios.
4. Dios justifica. Llegamos a Dios como pecadores y ponemos nuestra
confianza en Cristo. En ese momento, Él nos justifica. Una persona
justificada es la que Dios declara justa; no porque lo hayamos ganado
sino porque creemos en Jesús.
5. Dios glorifica. En teología, la glorificación se refiere con más
frecuencia al evento de la segunda venida de Cristo, cuando seremos
arrebatados en el aire para encontrarnos con Él, y seremos transformados
para ser completamente como Él con nuevos cuerpos. Esta gloria futura es
tan segura que Él la declara en tiempo pasado— como ya cumplida. La
glorificación, como la adopción, tiene aspectos tanto de ahora como todavía
no.

• Explicar e ilustrar 4 razones por las que somos más que vencedores en
todo lo que enfrentamos (Ro 8:31-39). (p 139)

1. Porque Dios es por nosotros. Él ha perdonado nuestros pecados, nos ha


justificado en Cristo, y nos ha dado Su Espíritu. Aquellos contra los
cuales está Dios (Satanás, la sociedad pecaminosa de los días de Noé,
Faraón) conocieron la destrucción de Dios. Pero el Único que tiene todo
el poder y la autoridad es por nosotros. Nadie puede estar en contra de
nosotros.
2. Porque Dios no va a cambiar. Lo que ha comenzado lo completará (Fil
1:6). Ya que Dios nos ha dado la parte más grande que necesitamos para
nuestra salvación, ¿quedará alguna duda de que Dios nos dará las cosas
menores que necesitamos? Al igual que Abraham estaba dispuesto a
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sacrificar a su hijo Isaac para agradar a Dios, Dios estuvo dispuesto a


sacrificar a Su único Hijo en el
calvario—lo que es la parte más grande—para nuestra salvación. Él suplirá
para nuestras necesidades menores también.
3. Porque Dios es el Juez final. Si Dios ha declarado que no somos
condenados, ¿por qué nos preocupamos? Satanás, los demonios y los humanos
con frecuencia nos acusan, pero Dios, el único Juez del universo, ya nos
ha justificado en Cristo. Al igual que con Josué el sumo sacerdote en
Zacarías 3:1-7, no necesitamos defendernos contra las acusaciones
malvadas. El Señor mismo reprenderá a los que nos acusan.
4. Porque nada puede separarnos del amor de Dios que es Cristo Jesús
nuestro Señor. En el Antiguo Testamento, a excepción de Job, el pueblo de
Dios sufrió más que todo por la desobediencia. Pero en el Nuevo
Testamento, el pueblo de Dios sufrió por hacer lo correcto. Pablo había
pasado por la mayoría de sufrimientos que él mencionó en estos versículos
y todavía podía testificar con autoridad que somos más que vencedores por
medio de Cristo, porque nada puede separarnos del amor de Dios.
No. Dios quiere dar gracia a todos. La clave para encontrara en buscar a
Dios y creer en el evangelio.

capítulo 8

• Resumir y aplicar la actitud de Pablo hacia los judíos (Ro 9:1-5).


(Figura 8.4)
Pablo afirma su amor por los judíos; y llora por la incredulidad de
ellos. Él está dispuesto a ser separado de Cristo, si eso pudiera salvar
a los judíos. Su actitud muestra la compasión de Cristo por todos los
perdidos. Nosotros debemos tratar de mostrar la misma compasión—incluso a
los hostiles, a los arrogantes y a los obstinados.

• Contestar y explicar: ¿La palabra (promesa) de Dios a Abraham y a


Israel falló? (Ro 9:6-13)

La Palabra de Dios no ha fallado. Pero la gente sí ha fallado en vivir


por la Palabra de Dios. Dios ha hecho como lo planeó al escoger a Abraham
para ser el padre
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de una nación. Y por medio de esa nación, Dios envió al Salvador de todo
el que decide vivir por fe en Dios. El plan de Dios desde el comienzo fue
que tanto judíos como gentiles encuentren la salvación por Cristo.

• Explicar e ilustrar: Los privilegios no garantizan la salvación


personal (Ro 9:4-5).
(p 14)
Aunque los judíos fueron los primeros hijos adoptivos de Dios, ni
siquiera el privilegio de adopción garantiza la salvación. Las ramas
judías fueron desgajadas de la vid por la incredulidad de ellos, y los
gentiles podían ser cortados por la incredulidad. Debemos ser buenos
administradores de nuestros privilegios tales como escuchar el evangelio
por la predicación, la enseñanza y la música de alabanza. Los privilegios
aseguran el rendir cuentas, pero no garantizan la salvación. Sólo los que
se arrepienten y llevan buen fruto son aceptables a Dios.

• Interpretar y aplicar: No todos los que descienden de Israel son


israelitas (Ro 9:6b). (p 17)

Hay un pequeño grupo de “verdaderos israelitas” dentro de la gran


nación de Israel. Los verdaderos israelitas son los que nacieron por la
fe en las promesas
de Dios. El linaje humano no determinó necesariamente la adopción.
Asimismo, los cristianos no dan a luz a otros cristianos. Solamente los
que aceptan a Cristo por fe por sí mismos, son verdaderos cristianos.

• Explicar 4 principios sobre la elección para el servicio. (p 21,22,23)

1. La elección para el servicio es pública. Se relaciona con los planes


de Dios para la tierra. Dios escogió a Abraham, Isaac y Jacob para ser
antepasados (patriarcas
de la nación), a través de la cual vendría el Salvador del mundo.
2. La elección para el servicio se basa en el conocimiento previo y la
sabiduría de Dios. Las decisiones de Dios no son por casualidad, ni son
arbitrarias; son lógicas y bien fundamentadas. Por ejemplo, la elección
de Jacob y no de Esaú, fue basada en el hecho de que Jacob era más
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adecuado para Su propósito. Jacob miró hacia adelante, y él tenía hambre


de las cosas espirituales.
Él no era más digno que Esaú. Él fue elegido porque sus cualidades eran
más apropiadas para la tarea a realizar.
3. La elección para el servicio es temporal. Dios escogió a Ciro para
servir como rey de Persia, y a Faraón para servir como el líder de
Egipto. Pero ellos murieron
y su poder terminó. En nuestros días, algunos sirven como pastores,
misioneros, o maestros de la Biblia. En un sentido todos los creyentes
deben servir. Pero, toda
elección es por unos pocos años en la tierra.
4. La elección para el servicio no determina la elección para la
salvación. Aunque la nación de Israel fue elegida por Dios para bendecir
a todas las naciones al
enviar al Mesías, solamente un remanente de israelitas fue salvo. Doce
fueron escogidos como apóstoles, pero uno se perdió. Pablo conservó su
elección personal de la salvación para que después de servir a otros, él
no se perdiera.

• Resumir 2 principios sobre la elección para la salvación. (p 29)

1. La respuesta a la elección para la salvación es privada y personal—una


libre decisión. La voluntad de Dios es que ninguno perezca, sino que
todos se arrepientan.
El diablo busca nuestra destrucción y condenación eterna.
Pero, nosotros somos libres de escoger el camino de Dios y tomar nuestra
decisión para la salvación eterna.
2. La elección para la salvación es eterna. Tenemos almas eternas y
viviremos o moriremos para siempre en algún lugar. Nuestra elección para
la salvación es eterna.

• Explicar e ilustrar: Los humanos y Dios tienen la libertad de elegir.


(p 31)
Dios le dio al hombre el don del libre albedrío, y Él nunca lo viola. Él
nunca obliga a nadie a escoger el bien o el mal. Si escogemos hacer lo
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incorrecto, Él nos permitirá hacer esa elección, pero sufriremos las


consecuencias.
También Dios tiene el derecho y la libertad de elegir.
Sus decisiones no son hechas sin un estándar, pero están basadas en Su
santidad y justicia. Dios escoge tener misericordia de los que se
relacionan con Él con humildad, arrepentimiento, fe y obediencia.

• Explicar e ilustrar: Dios es paciente con los que se rebelan contra Él


(Ro 9:22-29). (p 32)

Dios se deleita en mostrar misericordia, paciencia y amor. La ira no es


Su primera decisión. Pablo habla de “los vasos de la ira preparados para
destrucción” (Ro
9:22). Esto no significa “predestinar”. Más bien, esto muestra que los
rebeldes como Faraón están equipados y formados para recibir la ira de
Dios. Es su propia rebelión la que les ocasiona recibir la ira de Dios.
Su misericordia es demostrada en Su paciencia con Israel en la profecía
de Oseas. Pablo afirma que fue sólo por la misericordia de Dios que ellos
no fueron destruidos como Sodoma y Gomorra.

• Responder a las preguntas clave de Romanos 9:30–10:21 (Figura 8.8).


(cuadri o nfigura 8:8)
1. ¿Por qué Israel no logró obtener la justicia? Ellos tropezaron con
Cristo porque él era como la piedra angular de un nuevo templo sin los
sacrificios de la ley
del Antiguo Testamento. Y ellos buscaban la justicia por sus propias
obras, en vez de buscarla por la fe en Cristo.
2. ¿Cuáles cinco pasos hacen posible la salvación? ( figura 8:11)
a) Dios envía creyentes para predicar las buenas nuevas.
b) Los pecadores escuchan las buenas nuevas cuando los creyentes
predican.
c) Los pecadores creen en Cristo.
d) Los pecadores invocan a Cristo cuando creen en Él.
e) Dios salva a todo el que le invoca.
3. ¿Israel no oyó el mensaje de Dios? Todo Israel oyó el mensaje de Dios.
Así como la creación da testimonio de que hay un Creador, los profetas
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del Antiguo Testamento y los apóstoles de Nuevo Testamento les dieron a


los judíos testimonio de que Jesús era su Salvador.
4. ¿Israel no entendió el mensaje de Dios? Puesto que los gentiles con
una comprensión limitada de Dios entendieron y creyeron en el evangelio,
Israel con su conocimiento del Antiguo Testamento era capaz de entender
el mensaje de Dios. El problema estaba en que sus corazones eran
obstinados y desobedientes.

• Explicar e ilustrar 3 razones por las que algunos no encuentran


justicia.

1. Algunos tropiezan en Cristo. Los judíos centraban su adoración en el


templo. Jesús era una piedra de tropiezo en su camino hacia el templo.
Jesús es como la piedra angular de un nuevo templo. Él era extraño,
inesperado y confuso para ellos. [Los judíos en el tiempo de Jesús
buscaban un líder que los liberara de la opresión romana.
Cuando Jesús llegó como el Mesías en sufrimiento (Is 53), ellos
tropezaron con el Mesías crucificado.]
2. Algunos buscan establecer su propia justicia. Ellos intentan ganarse
el favor de Dios obedeciendo la ley, que nunca fue parte del plan de
Dios. Ellos quieren presumir de lo que han hecho por Dios, en vez de
confiar en lo que Dios ha hecho por ellos. El justo vive por fe en Dios—
no por fe en él mismo.
3. Los que intentan establecer su propia justicia tienen celo sin ciencia
(Ro 10:2-3). El celo no es un substituto del conocimiento. Pablo tuvo
celo y persiguió a los cristianos antes de que él encontrara a Cristo.
Ninguna cantidad de celo compensará el ir en contra del camino de Dios.

• Identificar 6 pasajes que muestran cómo cualquier persona puede


encontrar una relación correcta con Dios (Ro 9:30–10:13).

1. Romanos 9:30. Los que buscan la justicia por la fe, la encuentran.


2. Romanos 9:33. Si confiamos en Cristo, la piedra de tropiezo en Sión,
nunca seremos avergonzados.
3. Romanos 10:4. Jesús cumplió la ley. No es lo que nosotros hacemos por
Él, sino lo que Él hace en nosotros.
14

4. Romanos 10:6-10 enfatiza que no es difícil creer en Cristo. Nosotros


confesamos que Él es nuestro Salvador y Señor.
5. Romanos 10:11. El evangelio en una frase corta.
Él énfasis está en “creyere” en tiempo presente.
6. Romanos 10:12-13. Todo el que le invoque a Él, será salvo.

• Repasar los 5 pasos que llevan a la salvación, e ilustrar los fracasos


y éxitos de cada paso.

1. Dios envía (Ro 10:15). Muchos han predicado el evangelio a los judíos.
Los predicadores tendrán éxito si son llamados, preparados, y ungidos por
el Espíritu Santo.
los creyentes se asocien con Dios para enviar a esos predicadores a los
perdidos. Si nosotros no vamos o no enviamos, los perdidos nunca
escucharán el mensaje.
2. Los pecadores oyen (Ro 10:14). Los judíos han escuchado el evangelio.
Pero los pecadores tal vez “con los oídos oyeron pesadamente” (Hch 28:27)
debido a su
ignorancia espiritual o a sus corazones obstinados. Es posible escuchar y
no dar el siguiente paso. Todos tienen que tomar una decisión acerca de
lo que scuchan. Somos responsables de nuestras elecciones.
3. Los pecadores creen (Ro 10:14). Este es el paso crítico en el proceso
que conduce a la salvación; creer o rechazar. La fe llega a la gente
cuando escucha el mensaje y le permiten al Espíritu revelar a Cristo.
Pero algunos judíos se negaron a creer. Pablo cita de Isaías 53:1, “Señor,
¿quién ha creído a nuestro anuncio” (Ro 10:16).
4. Los pecadores invocan (Ro 10:14) a Cristo cuando creen en Él. Ellos no
pueden invocarlo sin antes creer en Él. Cuando nuestra respuesta es la de
la fe, empezamos a llegar a Él invocándolo.
5. Dios salva (Ro 10:13). Cuando invocamos a Jesús por fe, Su promesa es
que seremos salvos. Tenemos que creer que él nos ha recibido y perdonado.
Cuando lo hacemos, nos ponemos en marcha hacia una nueva vida con Él.

• Responder a las preguntas clave de Romanos 11 (Figura 8.12).


(p 54)
15

1. ¿Dios desechó a Su pueblo? No, Dios siempre ha escogido un remanente


de judíos por la gracia (Ro 11:1-6).
2. ¿Israel tropezó y cayó sin posibilidad de recuperación? En ninguna
manera (Ro 11:11). Su fracaso hizo posible que los gentiles fueran
salvos, pero Dios
tiene un plan para restaurar a Israel.
3. ¿Quién entendió la mente del Señor? ¿Quién fue su consejero? ¿Quién le
dio a Él primero para que le fuese recompensado? Nadie le puede dar
consejo a Dios. Él no comete errores en sus decisiones. Dios no le debe
nada a nadie, pero nosotros le debemos todo a Él. Y Dios está dispuesto a
restaurar al pecador que se acerca a Él.

• Explicar e ilustrar: Encontramos gracia cuando buscamos donde Dios nos


dice que busquemos (Ro 11:1-10).

La gracia está en Dios. Es parte de Su naturaleza divina. Así que si


nosotros deseamos Su gracia, tenemos que buscar Su carácter como se
revela en la Biblia. Dios no esconde la gracia a la gente. Él quiere
darle gracia a todos, pero tenemos que buscarlo a Él. Noé encontró la
gracia porque él caminó con Dios cuando los demás de su generación
estaban siguiendo el mal.
• Analizar el lugar que ocupan los celos en llevar a los perdidos a
Cristo (Ro 11:11-16).

El evangelio llegó primero a los judíos, y muchos lo recibieron. Sin


embargo muchos judíos no creyeron. Esta incredulidad abrió la puerta del
evangelio a los gentiles.
Las bendiciones espirituales de Dios para los gentiles en Cristo,
atrajeron a los judíos al Salvador. Dios desea bendecir a Sus hijos para
que otros quieran participar de las mismas bendiciones. Dios atrae a los
perdidos a Él a través de la gracia que ellos ven en los creyentes.

• Explicar 5 verdades que Pablo enseña en relación con el olivo (Ro


11:16b-25). (figura 8.16, p. 64)
1. Algunas ramas judías fueron desgajadas por la incredulidad (Ro
11:17a). Cristo llegó primero a los judíos. Aunque muchos creyeron, la
16

totalidad de judíos no creyeron en Él. Ellos llegaron a ser las ramas


desgajadas por la incredulidad.
2. Algunas ramas gentiles fueron injertadas por fe (Ro 11:17b). Después
de presentar primero el evangelio a los judíos, los apóstoles fueron
entonces a los gentiles con las buenas nuevas. Los gentiles las
recibieron por fe y fueron “injertados” al árbol. El árbol de olivo era
un tipo del Israel espiritual.
3. Las raíces judías sustentan el árbol, la iglesia (Ro 11:18). A los
gentiles se les recordó que su fe se basa en las raíces judías. Si no
fuera por un Mesías judío y por las promesas a Abraham, ellos no habrían
recibido las buenas nuevas.
4. Algunos ramas gentiles pueden ser cortadas por la incredulidad y el
orgullo (Ro 11:22). Dios no perdonó a las ramas naturales, los judíos que
no creyeron. Tampoco perdonaría a los gentiles si se levantaran con
orgullo e incredulidad.
5. Algunas ramas judías caídas serán injertadas por la fe (Ro 11:23).
Cuando vieron los judíos incrédulos las bendiciones de Dios sobre los
gentiles, ellos sintieron envidia y regresaron a su fe en Cristo. Una vez
más, se convertirían en parte del Israel espiritual.

• Resumir la gloriosa conclusión de Pablo en Romanos 9–11.

La doxología de Pablo (himno de alabanza a Dios) es totalmente centrada


en Dios. Pablo está asombrado por la sabiduría y el conocimiento de Dios
para traer tanto a judíos como a gentiles a las bendiciones de la fe en
Cristo.
Guiado por el Espíritu para ver el alcance del plan de Dios desde el
Antiguo Testamento hasta el Nuevo testamento, Pablo se maravilla por los
juicios y caminos de Dios que condujeron a las bendiciones de la
salvación. Él ve cómo
Dios cumplió Su promesa a Abraham de hacer de él una gran nación, y de
bendecir a todas las naciones de la tierra a través de él. Pablo se da
cuenta de que no hay nadie como nuestro Dios que se complace dando
gracia. Nadie puede entender a Dios, pero nosotros podemos conocerlo a Él
personalmente como nuestro Señor y Salvador.
17

• Poner en contraste el sacrificio que se exige en Romanos 12:1 con los


sacrificios del Antiguo Testamento.

Bajo el antiguo pacto, los sacerdotes mediaban entre los hombres y Dios.
Había un sacrificio de muerte. Bajo el nuevo pacto tenemos acceso directo
con Dios por la muerte de Jesús en la cruz. Nuestra relación con Dios es
más estrecha y más personal. Tenemos que presentar nuestros cuerpos en
sacrificio vivo—no un sacrificio de muerte una vez al año, sino en vida
la sumisión permanente a la voluntad de Dios mientras adoramos
diariamente a Dios y permitimos que Su Espíritu viva en nosotros.

• Explicar e ilustrar cómo nuestra respuesta a la misericordia de Dios es


personal, lógica y espiritual. (p3)

Es personal porque no necesitamos acercarnos a través de intermediarios


como el sacerdote. Debemos presentar personalmente nuestros cuerpos a Él.
También es personal porque disfrutamos directo compañerismo y comunión
con Él.
Nuestra respuesta lógica a la misericordia de Dios es ofrecer nuestro
cuerpo en sacrificio vivo—santo y agradable a Él. Él perdonó todos
nuestros pecados. Por lo
tanto, la única respuesta que se ajusta a la acción de Dios es una
reacción de nuestra parte que nos compromete completamente a Él.
Presentar nuestro cuerpo a Dios es espiritual en contraste con las formas
carnales en que algunos ofrecen sus cuerpos para servir al pecado. “La
adoración espiritual
es un camino en el cual vivimos—una manera de vivir, no solamente una
intersección llamada iglesia”.

• Explicar los lados negativos y positivos de nuestra respuesta a la


misericordia de Dios (Ro 12:2). (p15)

El lado negativo de nuestra respuesta a la misericordia de Dios es: “No


os conforméis a este siglo” (Ro 12:2a). No debemos permitir que el mundo nos
introduzca en su manera de pensar y actuar. El punto de vista del mundo
es
18

yo, mi, mío, y yo mismo. En cambio, la voluntad de Dios es que nosotros


nos preocupemos por los demás.
El lado positivo de nuestra respuesta a la misericordia de Dios es:
“transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento” (Ro 12:2b). Como
seguidores
de Cristo, debemos aprender a pensar de otra manera. El pensamiento
renovado empieza con un acontecimiento, el nuevo nacimiento. Pero este
pensamiento es también un proceso para toda la vida mientras maduramos y
crecemos en Dios.

• Identificar el resultado de presentar nuestro cuerpo como sacrificio


vivo a Cristo (Ro 12:1-2). (p21)

Presentar nuestro cuerpo como sacrificio vivo nos capacita para discernir
y hacer la voluntad de Dios.
Cuando nos apartamos de las actitudes y acciones del mundo, dejamos de
servirnos a nosotros mismos para servirle a Dios y a otros. Cuando somos
transformados por una mente renovada, podemos ver claramente cuál es la
voluntad de Dios para nosotros—para ser completamente conformados a la
imagen de Su Hijo. Ya no tenemos que ceder a la manera de vivir del
mundo.
Más bien, diariamente cedemos a Dios el proceso de vivir de la manera en
que le agrada a Él.

• Poner en contraste la voluntad general y la voluntad específica de Dios


para los creyentes. (p23,24)

La voluntad general de Dios es que todos los creyentes tengan un


maravilloso destino de llegar a ser más y más como Jesús. Esto se
convierte en una realidad cuando presentamos nuestro cuerpo como
sacrificio vivo, apartándonos del mundo y siendo transformados a través
de una mente renovada. También podemos decir que la voluntad general de
Dios para todos los creyentes es
tener la gloria de Dios, perdida por el pecado de Adán, completamente
restaurada, para que podamos ser eficaces en ganar el mundo para Cristo.
19

La voluntad específica de Dios para nosotros los creyentes es que


cumplamos con nuestro papel en el cuerpo de Cristo (Ro 12:3-8). El
cristianismo es relaciones. Los
creyentes son parte de una familia. En ese cuerpo, cada creyente tiene
una tarea especial para hacer exitoso el cuerpo. Al someternos al
Espíritu y renovar nuestra mente todos los días, descubriremos la
voluntad específica de Dios para nuestra vida.

• Explicar 3 factores que nos ayudan a medirnos con precisión. (p 26)

1. Gracia: Debemos recordar que lo que tenemos viene por medio de la


gracia que Dios nos da. Puesto que todos los dones espirituales vienen
por gracia, ninguno de nosotros puede jactarse sobre los dones que tiene.
“teniendo diferentes dones según la gracia que nos es dada” (Ro 12:6).
2. Fe: Dios da la gracia y Dios da la fe. Pablo habla de “la medida de fe
que Dios repartió a cada uno” (Ro 12:3). Esto se refiere a la fuente de
nuestra fe, más que a
la cantidad de nuestra fe. Cualquier fe que tengamos, Dios nos la dio.
3. Un cuerpo: En un cuerpo, los miembros se necesitan y se pertenecen uno
al otro. Por lo tanto, tengamos una actitud humilde, apreciando a otros y
a nosotros mismos.
Cuando cada uno de nosotros encuentra su lugar en el cuerpo de Cristo,
habrá diversidad. Pero también unidad.

• Analizar e ilustrar 7 ejemplos de dones espirituales en Romanos 12:3-8.


(p32)
1. La profecía es el don número uno que Pablo enfatiza. La profecía es un
mensaje repentino, sobrenatural del Espíritu de Dios por medio de un
creyente. Pocos son profetas, pero todos pueden profetizar (1 Co 14:31).
Los propósitos de la profecía son fortalecer, exhortar, consolar, o
instruir. La profecía puede venir en tres formas:
• Predecir es una revelación sobre el futuro. (La profecía de Agabo de
que habría una gran hambre en toda la tierra)
• Proclamar es declarar las condiciones y promesas de estar en una
relación de pacto con Dios. (La predicación de Pedro en Pentecostés que
20

hizo que los que escuchaban se “compungieran de corazón” y preguntaran:


“Varones hermanos,
¿qué haremos?”)
• Hablar al corazón es cuando los secretos delcorazón son revelados a
través de los ojos del profeta. (La revelación de Natán a David de su
adulterio y asesinato a Urías)
2. Servir es la traducción de la palabra griega diakonia, que es un papel
del ministerio de apoyo. La palabra diácono está basada en esa palabra
griega. Servir puede ser ampliamente definido como ayudar a otros. Por lo
general pensamos de esto como satisfacer las necesidades de la gente por
medio de buenas obras. Un ejemplo puede ser que Dorcas cosía vestidos
para las viudas.
3. La enseñanza como el servicio, es un don para cada creyente. Enseñar
es ayudar a alguien a aprender más sobre Dios, Su voluntad, Sus caminos,
y a vivir como Él desea que lo hagamos. Algunos que tienen el don de
enseñanza ocupan cargos oficiales como maestros de grupos en una iglesia,
o en una escuela. La gran comisión les ordena a todos los creyentes que
enseñen. Cada creyente debería ayudar a discipular a alguien tal como
todos los padres tienen que enseñar a sus hijos.
4. Exhortar incluye animar a los desalentados, y motivar a otros para
cumplir el llamado de Dios para sus vidas. Bernabé, “hijo de
consolación”, ayudó a Saulo para que fuera aceptado por la iglesia de
Jerusalén y después lo apoyó en el comienzo de su ministerio. Los
exhortadores saben cómo mencionar los versículos adecuados para ayudar a
otros. Todos los creyentes pueden ejercer este don por medio de una buena
acción o una palabra adecuada.
5. Dar es definido en Romanos 12:8 como “el que reparte, con liberalidad”.
También se aplica a la ayuda de la iglesia local y las misiones. Aunque
este don se aplica
a todos los creyentes, algunos son más conocidos por su generosidad, tal
como José de Arimatea, un hombre rico que dio su tumba para Jesús.
Tenemos que recordar que hasta las donaciones más pequeñas como la
ofrenda de la viuda, el almuerzo del muchacho, incluso un vaso de agua
fría, serán recompensadas por Dios. Nuestra actitud hacia las posesiones
materiales refleja nuestra relación con Dios.
21

6. El liderazgo identifica al líder o guardián responsable de los que


están bajo su cuidado. Los padres son líderes. También lo son los
pastores y diáconos, y otros que son “líderes menores” en la iglesia.
Los líderes son responsables de proteger, guiar, y alimentar
espiritualmente a los que ellos guían.
7. Misericordia es dar a la gente lo que necesita y no lo que merece.
Todos los creyentes deben poner en práctica el uso del don de
misericordia. Éste implica perdonar a quienes nos hacen daño,
compadecernos de los que nos desprecian, y amar a los que son menos
afortunados que nosotros.

• Resumir e ilustrar la naturaleza moral del amor ágape (Ro 12:9).


(p54)
Así como la columna vertebral sostiene el cuerpo, la moral es la columna
vertebral del amor ágape.
Reconocemos el amor bíblico por su naturaleza moral— el amor odia lo malo
y se aferra a lo bueno; rechaza la oscuridad y ama la luz; desprecia lo
incorrecto y se une a lo correcto. El ágape se enoja con la maldad. Tiene
celo por lo que es bueno, y contra lo que es malo. Toma una postura en
contra de la maldad donde sea, cuando sea, o como sea, que aparezca.
Jesús demostró el amor furioso por la casa de Dios cuando Él limpió el
templo. Así como Cristo está comprometido con la iglesia, el amor también
abraza fuertemente y se aferra a la justicia.

• Explicar los principios sobre cómo el amor se relaciona con los demás,
hasta con los extraños (Ro 12:10, 13). (figura 9.10. p60)
El amor de Dios nos capacita e inspira para apartar la mirada del espejo
que refleja nuestras propias necesidades y nos conduce a mirar por la
ventana de las necesidades de otros. El amor nos libera de amarnos sólo a
nosotros mismos. El amor comienza en casa con la familia, pero también
incluye a los creyentes que conocemos. Debemos tener un profundo respeto
y consideración por los que
conocemos.
Hospitalidad es compartir lo que tenemos con otros, incluso con los
extraños. Dar y compartir debe empezar con “los de la familia de la fe” (Gá
6:10), pero no debe
22

detenerse ahí. Hebreos 13:2 nos insta a hospedar a extraños.

• Aclarar cómo es que renovamos y reabastecemos nuestro amor (Ro 12:11).


(p63,64)
El amor proporciona combustible para su fuego de la fuente que es el
Espíritu Santo. Para reabastecerlo debemos permanecer cerca de la fuente
del amor.
1. Recuerde la misericordia de Dios para nosotros diariamente. Nunca
debemos olvidar Su amor derramado en nuestro corazón.
2. Evite ser conformado al mundo. La influencia pecaminosa del mundo mata
el amor a Dios de las personas.
3. Sea lleno con el Espíritu diariamente. Disfrute de la presencia de
Dios en oración, adoración y estudio de la Biblia. Cuando el Espíritu de
Dios nos llena, tenemos los recursos del cielo para vivir en la tierra.

• Analizar algunos de los aspectos que fortalecen la firmeza del amor (Ro
12:12).
(p66)
El amor motivado por el fervor produce una fe que “sigue marchando” a
través de dificultades y pruebas.
1. Gozo en la esperanza. La esperanza hace que nuestra fe siempre se
enfoque hacia adelante. Nuestra victoria es tan segura como la cruz y la
resurrección de
Cristo. La bendita esperanza de la segunda venida de Cristo nos llena de
gozo. Podemos cantar sobre las cosas que no se ven.
2. Romanos 8:25 declara: “Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo
aguardamos.” El amor firme es paciente en la aflicción. No cede ni se da
por vencido.
Los primeros creyentes perdieron mucho por su fe—aún sus vidas. El amor
los ayudó a soportar. La paciencia y la resistencia son cualidades del
amor.
3. El amor es constante en la oración. Cuando amamos a alguien, deseamos
hablarle y estar cerca de esa persona. Nuestro amor por Dios, y Su amor
por nosotros, nos acerca hacia Él. Debe haber momentos de oración privada
cuando estamos a solas con Dios, pero nuestra vida también debe ser una
23

oración constante mientras caminamos con Él. [La oración y el amor son un
círculo
bendecido. Cuanto más amamos a Dios más oramos.
Cuanto más oramos más amamos lo que Dios otorga.]

• Ilustrar las maneras en que el amor siente empatía (Ro 12:15).


(p70)
El amor ríe y llora con otros. Sin embargo, a veces es más fácil llorar
con los que lloran que regocijarse con las bendiciones de otros, por la
envidia. La simpatía se
siente por otro amigo o creyente. La empatía se siente con ellos. La
iglesia primitiva tenía “en común todas las cosas” (Hch 2:44). Esto significa
que no sólo compartían sus bendiciones materiales, ellos compartían unos
con otros, alegrías, tristezas, victorias y pruebas. Esta empatía se hace
evidente en su unidad y cuidados de los unos por los otros. Otros
ejemplos de empatía en la Biblia son: Los amigos de Job se lamentaron en
silencio con él por siete días; los amigos de Noemí se regocijaron con
ella en el nacimiento de su nieto.

• Dar ejemplos para mostrar que el amor cruza las barreras sociales (Ro
12:16).
(p73)
El amor se extiende más allá de las barreras. Llega a hacerse amigo de
los que tienen menos educación o menos dinero. El amor se da la mano con
los que están
más allá de los límites étnicos o tribales. Cuando el amor gobierna, los
judíos y los gentiles, los ricos y los pobres, los empleados y los
patrones, los de todo color se sientan uno al lado del otro en la misma
mesa.
Jesús le habló a la mujer en el pozo, sin tener en cuenta ni los
prejuicios raciales ni los de género que había en Su tiempo. Pedro
entendió la visión de Dios al referirse a que él iba a compartir el
evangelio con el líder militar romano y su familia. Pablo se dio cuenta
de que Dios había llamado a los gentiles a la fe en Jesucristo. [Hace
aproximadamente 50 años, nuestra misionología (cómo se hace la obra
misionera) cambió. Nos dimos cuenta de que nosotros no éramos enviados a
24

otras culturas para adaptar a la gente a nuestros patrones culturales,


sino para
presentarles a Jesús en su vida.]

• Ilustrar las maneras en que el amor a veces es pasivo y otras veces es


activo (Ro 12:17-19, 21). (p76)

El amor es pasivo—nunca toma represalia, sino le deja la venganza a Dios.


Cuando alguien nos ofende, nos sentimos tentados a devolver mal por mal.
Nuestra primera reacción a menudo es motivada por la carne. Si la
seguimos arruinamos nuestro testimonio de Cristo y de la iglesia.
El amor es activo—vence a los enemigos con buenas obras. Amando
pacientemente a nuestros enemigos podemos convertirlos en amigos. Cuando
el amor es pasivo, negándose a devolver el golpe, gana solamente la mitad
de la victoria. La meta del amor debe ser vencer el mal con el bien. Como
creyentes, rociamos las llamas del mal con el agua de la bondad.

• Resumir por lo menos tres actitudes hacia el gobierno en los días de


Pablo.

1. El imperio romano era malo y represivo, y fue derrocado. Los zelotes


conspiraron para derrocar el gobierno romano en Judea. Ellos mataron a
romanos, e incluso a judíos que no compartían sus creencias.
2. La gente se opuso pacíficamente al gobierno romano negándose a pagar
impuestos. Anteriormente, Claudio había ordenado a todos los judíos que
salieran
de Roma, declarando que ellos habían provocado un disturbio. Muchos
creyentes estaban asistiendo a iglesias en casas en Roma. Ellos pudieron
verse tentados a no pagar impuestos o a quejarse por estos.
3. Algunos creyentes se sentía súper espirituales.
Pablo escribió “No os conforméis a este siglo” (Ro 12:2).
Algunos pudieron haber usado esto como una razón para rebelarse contra
los líderes, o como una excusa para evitar pagar impuestos. Algunos
25

sentían que puesto que el gobierno era malo, debían someterse pero no
obedecerlo cuando ordenaba lo contrario a la ley de Dios.

• Explicar 4 razones por las que los creyentes deben someterse al


gobierno (Ro 13:1-5). (p10)

1. Debemos someternos a las autoridades porque Dios es quien establece


toda autoridad (Ro 13:1). Ha habido diferentes formas de gobierno a
través de los siglos. Pablo enseña que Dios las establece, las ordena y
las nombra a todas. Dios es la fuente de toda autoridad, en el cielo y en
la tierra.
2. Debemos someternos a las autoridades porque quien se rebela contra la
autoridad se rebela contra Dios, y será castigado (Ro 13:2). El juicio de
Dios y del gobierno vendrá sobre los rebeldes. Las personas sabias se
someten a la autoridad y no serán castigadas.
3. Debemos someternos a las autoridades y así tendremos una conciencia
libre de culpa y un corazón libre del temor (Ro 13:3, 5).
4. Debemos someternos a las autoridades porque ellos son siervos de Dios
para nuestro bien. Los gobiernos pueden proporcionarnos muchas
bendiciones de orden y seguridad.

• Resumir 7 razones por las que Dios puede permitir un gobierno malvado.
(figura para contestar 10.2)
1. A veces Dios permite un gobernador que representa los malos deseos de
la mayoría de gente—la mayoría inmoral. Dios abandona a los que le
abandonan a Él y permite que las personas malvadas tengan gobernadores
malvados.
2. Dios puede establecer un mal gobierno para mandar juicio sobre otra
nación o país. Dios levantó a Babilonia para vencer a Judá porque ellos
le desobedecieron.
3. Dios puede levantar líderes malvados para poder juzgarlos, y
glorificarse. Él hizo esto con Faraón, mostrando Su poder al derrotarlo.
4. Algunas veces Dios puede permitir un gobierno malvado para revelar el
verdadero carácter del mal. Cuando el mal gobierna, reconocemos cuan vil
es el
26

pecado. Por ejemplo, cuando Hitler asesinó a seis millones de judíos en


el siglo pasado, la mayoría de los teólogos liberales dejaron de soñar
con un humano que traería la paz mundial. El mal desfilará con toda su
iniquidad hasta
que Cristo establezca Su reino milenario.
5. Dios puede permitir la exaltación de un mal gobierno para cumplir con
Sus propósitos. Él levanto el malvado reino griego que unió gran parte
del mundo en
un solo idioma, lo cual hizo más fácil la predicación. El gobierno romano
construyó carreteras que contribuyeron al esparcimiento del evangelio.
6. Dios puede usar gobernadores malvados para glorificar y mostrar
nuestra lealtad a Él. Él usó a Satanás para revelar la lealtad de Job a
Dios. Él uso el reino de Nabucodonosor para demostrar la lealtad de
Daniel en el foso de los leones.
7. Dios puede instituir un gobierno malvado para recordarle a la gente
que sólo Él reino en el trono del universo. Israel vio Su poder cuando
Dios los sacó de la
esclavitud de Egipto. Dios usó a un rey pagano de Persia, Ciro, para la
reconstrucción del Templo de Jerusalén.

• Identificar algunas deudas que los creyentes tienen como ciudadanos (Ro
13:1-7). (p17)

Debemos pagar nuestros impuestos puesto que disfrutamos de los beneficios


que el gobierno proporciona; protección, educación, y servicios. Debemos
honrar a
nuestros padres, a nuestros líderes espirituales, ancianos, maestros, y a
los que están en autoridad. Tenemos una deuda con aquellos a quienes les
pedimos prestado y a quienes les hacemos promesas. La falla de los
creyentes para mantener sus promesas de pagar sus deudas es una piedra de
tropiezo para los incrédulos.

• Explicar e ilustrar: El creyente siempre está en deuda (Ro 13:8-10).


(p21-23)
Por un lado, ser cristiano es gratis. Jesús pagó el precio para que
pudiéramos ser perdonados. Pero por otro lado, seguir a Jesús significa
27

estar en una deuda que pagaremos por toda nuestra vida. Debido a que
Cristo murió por nosotros, le debemos a Él todo lo que somos y todo lo
poseemos. Nosotros pagamos nuestra deuda de amor a Jesús, compartiendo
con los “más pequeños” (Mt 25:40).

• Explicar e ilustrar 3 aspectos de andar en amor (Ro 13:11-14).


(p 29)
1. Levantémonos. La noche representa este tiempo presente de pecado y
rebelión. El día representa el tiempo que viene cuando Jesús vuelva por
nosotros. Necesitamos estar despiertos—alerta y listos para encontrarnos
con Jesús cuando él venga. El día de Su venida está cercano.
2. Desechemos las tinieblas. Necesitamos desechar las obras de las
tinieblas quitándonos todo lo que es pecaminoso. Debemos comportarnos
decentemente como a la luz del día cuando todo puede verse fácilmente.
3. Vistámonos. Pablo nos dice que nos vistamos del Señor Jesús. No les
prestaremos atención a los deseos pecaminosos de la carne, sino que
viviremos vestidos con las cualidades, actitudes y valores de Jesús. No
pensaremos en las tentaciones de la carne, sino que nos centraremos en
disfrutar de la vida en el Espíritu.

• Resumir el trasfondo de Romanos 14:1–15:13.

Los enfrentamientos relativos a la aceptación de Jesús como el Mesías


habían causado malestar entre las sinagogas judías. Claudio ordenó a
todos los judíos salir de Roma en el año 49 d.C. En el año 54 d.C., Nerón
les permitió regresar. Pablo mostró una gran preocupación por los judíos
que volvían a integrarse a las iglesias romanas.
El contenido de esta porción de la Escritura cae bajo el círculo 2 de la
Figura 10.8: Los asuntos debatibles de la fe. Estos no son asuntos
esenciales del cristianismo;
sino asuntos en los que los verdaderos creyentes tienen diferentes
opiniones. Los asuntos específicos en cuestión eran: Comer carne de
varias fuentes, beber vino,
considerar el día de reposo y los días de fiesta como más santos que
otros días.
28

• Identificar 3 clases de asuntos que los creyentes enfrentan (Figura


10.8, Ro 14:1–15:13).

1. Creencias básicas de la fe—áreas en las que no podemos ceder. Son


asuntos absolutamente esenciales para la salvación, incluyendo la
encarnación de Jesús,
vida sin pecado, la expiación por nuestra salvación, y la resurrección.
2. Asuntos debatibles de la fe—asuntos que una denominación enseña y otra
no, pero que no son esenciales para la salvación. Algunos ejemplos son:
las lenguas
como evidencia inicial de la llenura del Espíritu Santo, el bautismo por
inmersión, y si el rapto precede o sigue a la tribulación. [En todo esto
las Asambleas de Dios tienen una posición fuerte, pero no creemos que
otros cristianos deben estar de acuerdo con nosotros para ir al cielo.]
3. Temas que se salen del ámbito de la fe—la tecnología y la política son
temas que se salen del ámbito de la fe y por lo tanto irrelevantes para
nuestra salvación.

• Explicar la razón por la que los creyentes deben aceptarse y no


juzgarse los unos a los otros (Ro 14:1-12; 15:7). (p 55)

Dios es el juez de todos los creyentes, y Él nos ha aceptado a todos (Ro


14:3). Puesto que Él nos ha aceptado, nosotros debemos aceptarnos
mutuamente sin discutir sobre los temas debatibles. No debemos intentar
hacer
que los creyentes débiles adopten nuestras libertades.
Hacer esto podría hacer tropezar o ponerle trampa a un creyente, violando
su conciencia y convicciones. Los creyentes más fuertes deben estar
dispuestos a abstenerse de cualquier cosa que cause tropiezo a otro
creyente. Los hermanos más débiles no deben condenar a otro creyente en
ningún asunto. Cuando se siguen estas actitudes adicionales, una iglesia
local puede tener unidad y paz y
ser eficaz en el evangelismo y discipulado de su prójimo.

• Describir 4 clases de personas en la iglesia o alrededor de ella


(Figura 10.9).
29

(figura 10.9)
1. El libertino cree que no hay nada ilegal o prohibido para los
creyentes. Él trata de cubrir el pecado con la gracia. Está en peligro
del juicio eterno.
2. El creyente fuerte tiene un equilibrio entre la libertad, la santidad
y el amor. Sin embargo, está en peligro de orgullo, ridiculizando al
hermano débil y abusando de la libertad.
3. El creyente débil suele ser el nuevo convertido o inmaduro.
Frecuentemente sufre de falsa culpabilidad. Él también está en peligro
del orgullo por lo que él “no hace” y criticar a los que no comparten
la misma convicción.
4. El legalista intenta obtener la santidad guardando muchas reglas y
regulaciones. Por lo general, ellos tienen santidad sin gozo y están en
peligro de confiar en su legalismo en vez de confiar en el sacrificio de
Cristo.

• Explicar cómo el amor evita hacer tropezar o tenderle trampa a un


hermano (Ro 14:13-23). Dar ilustraciones. (p67,69)
Pablo nos recuerda que hay muchas cosas que podemos disfrutar y que no
son pecaminosas. Sin embargo, no vivimos para nosotros mismos. Debemos
tener cuidado de que nuestro ejemplo de libertad no haga que un hermano
o hermana débil desobedezca a su conciencia. Por amor, debemos
abstenernos de cualquier cosa que pueda causar que un hermano o una
hermana caiga (Ro 14:21). El amor impide hacer tropezar a otro creyente e
impide poner una piedra de tropiezo en el camino que lo haga caer; por
ejemplo al no pagar una deuda contraída con otro creyente. El amor
también impide ponerle trampa a otro creyente con las cosas que nuestra
conciencia nos permite hacer, si la fe de él es débil en este aspecto. Su
alma eterna podría estar en riesgo. ¿Soy tan egoísta como para beber una
copa de vino, aunque esto lleve a mi hermano a convertirse en un
borracho?

• Dar ejemplos de cómo un creyente fuerte puede llevar las debilidades de


un hermano (Ro 15:1-6).
30

1. No debemos vivir para agradarnos sólo a nosotros mismos, sino que


debemos sobrellevar las flaquezas de los débiles. Debemos estar listos
para ofrecer el perdón.
2. Debemos vivir para agradar a nuestro prójimo por su bien, con el
propósito de edificarlos en la fe.
3. Debemos ayudar a llevar las cargas que otros creyentes están llevando.
Una mano ayudadora y la oración a su favor son esenciales.

• Resumir el resultado de cuando los creyentes se aceptan, se aman y


llevan las cargas unos de los otros (Ro 15:6).
Con una mente y una voz glorificamos a Dios y Padre de Nuestro Señor
Jesucristo. Vivimos juntos en amor como pueblo de Dios, experimentando la
justicia, el gozo, y la paz mientras vivimos en unidad. ¡La iglesia es
saludable!
Hay libertad para que cada miembro contribuya con sus talentos. Y el
Espíritu Santo nos da el poder para rebosar de esperanza, incluso ahora,
con la expectativa de la eternidad en la familia de Dios.

• Dar la evidencia en Romanos que muestra que Pablo era sensible a los
demás.

Romanos 12–15 revela su preocupación por las relaciones correctas entre


los débiles y los fuertes. Pablo frecuentemente usa preguntas como
diciendo: “¿Cómo se siente al respecto?” Él podía hacer cumplidos
positivos a sus lectores como lo hizo en Romanos 15:14: “... vosotros mismos
estáis llenos de bondad, llenos de todo
conocimiento, de tal manera que podéis amonestaros los
unos a los otros.”

• Resumir el ministerio de Pablo como sacerdote y aplicar esto a


nosotros.

Pablo atesoraba su llamado como un sacerdote para ganar y discipular a


los perdidos—especialmente a los que no habían escuchado el evangelio.
Pablo
31

anhelaba poder presentar el fruto de sus esfuerzos (vidas cambiadas por


la fe en Cristo y madurar a través de la obra del Espíritu) como una
ofrenda agradable a Dios.
Pablo vivía para ganar a los perdidos para Cristo y para discipularlos;
nuestra pasión y latido del corazón deben ser iguales.

• Explicar e ilustrar: “Pablo era cristocéntrico”.

Pablo enfocaba todo su ministerio en Jesucristo. Él no llamaba la


atención sobre sí mismo, ni buscaba recibir la honra, aunque él tenía
mucho por lo que podría haber
presumido. Él sabía que Dios tiene que recibir la gloria por lo que Él
hacía por medio de Pablo. Su tema favorito era: “Porque no osaría hablar sino
de lo que Cristo ha hecho por medio de mí para la obediencia de los gentiles, con la
palabra y con las obras” (Ro 15:17-18).

• Ilustrar el hecho de que Pablo dependía del Espíritu Santo para su


ministerio.

Pablo declaró en Romanos 15:19a que su ministerio había sido “con potencia
de señales y prodigios, en el poder del Espíritu de Dios”. Él sabía que esas señales y
prodigios confirmaban el poder del evangelio que él predicaba. Las
señales deben seguir a los creyentes.
Las señales y prodigios convencen a los incrédulos de la verdad del
evangelio. Pablo quería que la fe de los corintios no estuviera “fundada
en la sabiduría de los
hombres, sino en el poder de Dios” (1 Co 2:5).

• Explicar e ilustrar lo que Pablo opinaba del duro trabajo.

Pablo sabía que el Espíritu no sustituye la necesidad del arduo trabajo


en el ministerio. El ministerio de Pablo cubría una amplia región, que
requería viajes extenuantes durante varios años. Él plantó iglesias en
todas las ciudades
clave de la región. Él luchó contra la enfermedad, subió montañas, cruzó
los mares, y sufrió mucha persecución.
32

Por el poder del Espíritu, con sangre, sudor y lágrimas, Pablo condujo a
los gentiles a Cristo.

• Dar ejemplos que muestran que Pablo valoraba el planear para el futuro
con esperanza.
Pablo vivía con una agenda, un mapa y una lista de objetivos. Fue
intencionalmente que Pablo predicó en todas las ciudades principales
desde Jerusalén a Ilírico.
Cuando les escribió a los romanos desde Corinto, él les compartió su plan
de ese momento. Esperaba, que con la voluntad de Dios iría a Jerusalén a
entregar una ofrenda para los santos pobres. Esta ofrenda era el
resultado de un plan que había seguido durante varios años. Incluso al
llegar a Roma, Pablo tenía planes. Él quería predicar en España y
confiaba en que los romanos lo apoyaran con
una ofrenda y con compañeros de viaje.

• Resumir las dos peticiones de oración de Pablo en Romanos 16.

1. Pablo pidió oración para que él pudiera ser rescatado de los no


creyentes de Judea. Estos incrédulos eran sus enemigos, y habían tratado
de matarlo (Hch 9:29- 30). El viaje de Pablo a Jerusalén era un asunto de
vida o muerte.
2. Pablo pidió oración para que su servicio en Jerusalén fuera recibido
por los santos. Él estaba dando una ofrenda de los creyentes gentiles a
los creyentes
judíos pobres. Algunos creyentes judíos se resintieron por el ministerio
de Pablo a los gentiles. Su petición era que Dios trajera unidad y que
los judíos estuvieran dispuestos a recibir el regalo.

• Resumir la importancia de la oración en el ministerio de usted.

Debemos orar: “Hágase tu voluntad” (Mt 6:10).


También tenemos la promesa: “que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él
nos oye” (1 Jn 5:14). Por lo tanto un aspecto importante de la oración es
descubrir
cuál es la voluntad de Dios en cada situación de la vida.
33

No sólo debemos orar para que Dios bendiga nuestros planes, sino que
debemos pedirle que nos muestre los planes de bendición que Él tiene.

• Identificar 4 maneras en las que Pablo usa citas del Antiguo Testamento
en Romanos.

Pablo usó citas históricas para mostrar lo que les pasó a los rebeldes en el
Antiguo Testamento. Estas han sido escritas como advertencia para
nosotros. Él empleó
la verificación para mostrar que él no estaba rechazando el Antiguo
Testamento, sino que estaba revelando el cumplimiento del plan de Dios de
enviar un Mesías para liberar a la gente de sus pecados. Él utilizó la
comparación para Ilustrar las verdades del nuevo pacto. Y usó la aplicación
para mostrar cómo debemos vivir y la forma como el Antiguo Testamento y
el Nuevo Testamento están de acuerdo en el código moral de Dios—y en que
el amor cumple la ley.

• Resumir una lección que podemos aprender de la lista de los saludos de


Pablo en Romanos 16.

La larga lista de nombres en Romanos 16 enfatiza que cada creyente es


parte de una familia eterna. Nosotros los creyentes no somos eternos,
pero la familia es eterna, porque el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo
son eternos.
Los creyentes somos todos hijos de Dios, adoptados en Su gran familia.
Todos estamos “en Él”.

• Explicar la historia eterna vinculada con Romanos 16:20 y la


advertencia inmediatamente previa a ésta.

Antes de la creación del mundo, el Altísimo hizo planes para que el Hijo
se sacrificara para ofrecer la salvación a la humanidad caída. Desde la
declaración de Dios después de la caída del hombre en el Edén, de que la
simiente de la mujer aplastaría la cabeza de la serpiente, hasta la
segunda venida de Cristo, Dios está llevando a cabo la historia de la
redención. Por la fe en Cristo y la obediencia al Espíritu participamos
34

en la victoria de Dios sobre Satanás. Sin embargo, no veremos a Dios


cuando “aplastará … a Satanás bajo [nuestros] pies” si no tenemos cuidado de
los falsos maestros que engañan a las personas ingenuas partándolas del
bien y de la verdad. Pablo nos advierte que seamos sabios sobre lo que es
bueno e inocentes para el mal para que podamos participar en Su victoria.

• Parafrasear la doxología de Romanos 16:25-27.

Sólo a Dios pertenece la alabanza y la gloria. Él puede establecer


creyentes e iglesias por la predicación del evangelio. El mensaje que
escribieron los profetas de la antigüedad, estuvo oculto por un largo
tiempo de nuestra comprensión. Pero ese mismo mensaje es revelado ahora
en Jesucristo. Tanto los profetas del Antiguo Testamento como los
apóstoles del Nuevo Testamento están de acuerdo
en que todas las naciones pueden creer y obedecer. Puesto que sólo Dios
es sabio para implementar el plan para nuestra salvación, debemos
obedecer Su voluntad y vivir para alabanza y gloria de Dios a través de
Jesucristo. ¡Que
así sea!__

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