Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
La idea principal y los principios que nos expone el artículo en la revista de la CEPAL sobre la viejas y
nuevas forma de ciudadanía es que la realización de derechos económicos, sociales y culturales permite
avanzar hacia una mayor igualdad de oportunidades, tanto para acceder al bienestar como para la
afirmación de la diferencia en el campo de la identidad.
Este desarrollo en el ejercicio efectivo de derechos debe complementarse con nuevas formas de
ciudadanía, vinculadas con el acceso al intercambio mediático y la mayor participación en la sociedad del
conocimiento. Sólo por esta vía parece factible proporcionar un fundamento ético a políticas sociales y
de desarrollo que han sido despojadas de fundamento ideológico. En este escenario es preciso construir
una cultura política que trascienda el carácter meramente formal de los procedimientos y traduzca la
acción política en prácticas de comunicación entre actores diversos. La construcción cultural de la
ciudadanía democrática pasa por ese pacto o contrato, que debe dar cabida a las voces de una amplia
gama de actores sociales y tener capacidad real de prescribir formas de reciprocidad y reconocimiento,
tocando ámbitos tan diversos como el acceso a la justicia, a los servicios sociales, al debate político
informado y a emitir opiniones en los medios de comunicación.
Nos explica de manera muy clara que los ciudadanos difícilmente podemos pensar en una república
guiada por los ideales democráticos, y que los principios por sí mismos no nos llevan a ningún lado; es
básico que todos los ciudadanos tengamos conocimiento y libertad de ejercer los derechos a plenitud
según nuestros intereses, responsabilidades y formas de apropiarnos de los bienes culturales de la
sociedad a la que pertenecemos, en lo inmediato, aunque el discurso globalizador nos haga creer que
somos ciudadanos del mundo.
Universidad Nacional Abierta y a Distancia – UNAD Vicerrectoría Académica y de Investigación - VIACI
Escuela: Ciencias Sociales Artes y Humanidades
Curso: Ética y Ciudadanía (Pregrado) Código: 40002
Se creería que principalmente los responsables de inculcar los principios de ética ciudadana en los niños
y la juventud deberían ser nuestros maestros como representantes del sistema educativo nacional lo
cual que es bueno, básico y necesario para hacer énfasis en la educación y el desarrollo cultural de los
pueblos para proyectos y el futuro de las generaciones por venir.
El futuro está en los deseos, no en las acciones cotidianas, mientras nosotros participamos en estos
foros, cada día se incrementa el índice de pobreza, más niños pierden el entusiasmo por asistir a la
escuela y el narcotráfico gana mercados a punta de balazos en todo el continente americano.
Las reformas educativas que se proyectan desde el escritorio difícilmente pueden dar buenos resultados.
El reto está en lograr que todos los sectores de la sociedad y de las naciones se comprometan con
acciones concretas para elevar el nivel económico y la cultural de forma simultánea de los sectores más
vulnerables de la población.
El camino va del núcleo familiar a los medios de entretenimiento a la escuela a las instituciones de
gobierno y a la inversa.
Este artículo también postula que la realización de derechos económicos, sociales y culturales permite
avanzar hacia una mayor igualdad de oportunidades, tanto para acceder al bienestar como para la
afirmación de la diferencia en el campo de la identidad. Este desarrollo en el ejercicio efectivo de
derechos debe complementarse con nuevas formas de ciudadanía, vinculadas con el acceso al
intercambio mediático y la mayor participación en la sociedad del conocimiento.
Sólo por esta vía parece factible proporcionar un fundamento ético a políticas sociales y de desarrollo
que han sido despojadas de fundamento ideológico.
En este escenario es preciso construir una cultura política que trascienda el carácter meramente formal
de los procedimientos y traduzca la acción política en prácticas de comunicación entre actores diversos.
La construcción cultural de la ciudadanía democrática pasa por ese pacto o contrato, que debe dar
cabida a las voces de una amplia gama de actores sociales y tener capacidad real de prescribir formas de
reconocimiento, tocando ámbitos tan diversos como el acceso a la justicia, a los servicios sociales, al
debate político informado y a emitir opiniones en los medios de
comunicación.
Universidad Nacional Abierta y a Distancia – UNAD Vicerrectoría Académica y de Investigación - VIACI
Escuela: Ciencias Sociales Artes y Humanidades
Curso: Ética y Ciudadanía (Pregrado) Código: 40002
¿Cuáles ha sido posición de los gobiernos latinoamericanos ante la violación de los derechos
fundamentales de los ciudadanos?
¿Cómo deberían estar constituidos los derechos fundamentales de las sociedades tercermundistas ante
las políticas de las nuevas formas de ciudadanía si sabemos que la pobreza y la falta de oportunidades
van en crecimiento a causa de la corrupción y la falta de oportunidades?
¿Cuál sería la mejor manera de constituir las políticas y los esfuerzos de los gobiernos por tratar de
mejorar la calidad de la educación como pilar fundamental para el desarrollo social?
Universidad Nacional Abierta y a Distancia – UNAD Vicerrectoría Académica y de Investigación - VIACI
Escuela: Ciencias Sociales Artes y Humanidades
Curso: Ética y Ciudadanía (Pregrado) Código: 40002
La democracia nos remite al desarrollo de nuestras capacidades de diálogo, al cultivo por la diversidad y
a la disposición para aprender de los otros que siempre son, en mayor o menor grado, diferentes; a
nuestro gusto por la ética, es decir a aprender a saborear los valores, a nuestra habilidad para resolver
pacífica y constructivamente los conflictos que son constitutivos de nuestro ser; en fin, al desarrollo de
nuestra responsabilidad social en el ejercicio de nuestra libertad.
La educación nos debería preparar para el ejercicio de la democracia, prepararnos para ayudar a
fortalecer y recrear nuestras instituciones y leyes, para construir significados y referencias de
participación y convivencia en el espacio público y para construir nuestra ciudadanía crítica y activa. La
democracia nos debería garantizar nuestro derecho a gozar de nuestros derechos humanos, entre ellos,
el derecho a la educación.
Universidad Nacional Abierta y a Distancia – UNAD Vicerrectoría Académica y de Investigación - VIACI
Escuela: Ciencias Sociales Artes y Humanidades
Curso: Ética y Ciudadanía (Pregrado) Código: 40002
Savater compara la ciudadanía como una “legión” mencionada por la Biblia, queriendo decir que todos
los ciudadanos pueden ser padres, madres, hijos, discípulos, fanáticos del futbol de la fonética, ósea,
personas líderes que tenemos numerosas identidades y tenemos el derecho de participar en las leyes y
compartir en común unos con otros.
De una mera u otra él lo relaciona con la ética. Dice que la ética es la reflexión individual donde cada uno
de nosotros lleva a cabo su propia libertad. La ética no es instrumento que se maneja desde afuera en
contra de los demás, no es para formular acusaciones o reproches, sino más bien es una reflexión donde
cada uno de nosotros debe de hacer desde su propia libertad lo que entienda correcto. Porque nosotros
no podemos ver lo de dentro de los demás para determinar su buena o mala fe.
Continua diciendo que los individuos no son antisociales, sino que cada persona tiene que ser consiente
de cada uno de sus actos. Es una posibilidad de responsabilidad entre la sociedad, este no se aísla,
siempre está dispuesto ayudar y compartir en común con los demás.
La ética se ocupa del sentido de la libertad de la ciudadanía. Cada uno somos sujetos de acción con
nuestros derechos. La sabiduría ciudadana es aquella que orienta a los demás y no solamente razona,
sino también que se deja razonar por los demás.
Lo propio del ciudadano es buscar lo común, lo colectivo, no lo propio ni para sí solo. Es buscar aquello
donde se puede intercambiar en público y el mundo donde puede explicarse a los demás y participar
todos los ciudadanos teniendo el mismo derecho.
Según él, la ciudadanía es la relación entre los demás, es lo que nos ayuda a entender nuestro presente y
nuestro futuro. Es aquello que entra la democracia sin dejar sus raíces y poniéndola entre paréntesis
para compartir con los demás.
Universidad Nacional Abierta y a Distancia – UNAD Vicerrectoría Académica y de Investigación - VIACI
Escuela: Ciencias Sociales Artes y Humanidades
Curso: Ética y Ciudadanía (Pregrado) Código: 40002
La ética tiene mucho que ver con la ciudadanía. Cada uno de nosotros, cuando reflexiona sobre
cuestiones éticas, buscamos la forma mejor de ciudadanía.
Precisamente porque el mundo en su conjunto no es ético, es por lo que hay que preparar éticamente a
los jóvenes, precisamente porque el mundo no es como nos gustaría que fuese, tenemos que intentar
inculcar ideales de transformación y de reformas en los jóvenes, sino no tendría ningún sentido.
Desde el punto de vista de Fernando Savater la ética tiene mucho que ver con la ciudadanía, pues trata
de buscar la plenitud humana, lo que quiere decir el punto de vista individualista es que cada persona
tiene que ser consciente de su capacidad de acción, de su capacidad de intervención, de su
responsabilidad en el conjunto de los demás, que no puede simplemente ser un engranaje, que no es
simplemente una parte de un organismo general, sino que el individualismo es una posibilidad de
intervención social a partir de la responsabilidad de la persona, pero no una posibilidad de desligarse
totalmente y abandonar la sociedad, porque somos seres irremediablemente sociales.
Savater reconoce que la dignidad de las personas no se puede poner en juego, puesto que el color de
piel, su creencia religiosa, cultural, clase social, no deben ser juzgadas, sino que se debe asumir la
persona como ser humano. La dignidad es considerar a cada persona como alguien que se considera
proyectado hacia un futuro de libertades, sin condicionarlas a tradiciones y creencias.
Lo recomendable es analizar todas las ideas y comportamientos de todos aquellos que nos rodean.
Debemos ser más racionales, sabiendo que la persona racional sabe cómo tratar a los demás, que no se
aísla porque entienda que tiene esa facultad más desarrollada que los demás.
A veces debemos ponernos en el lugar del otro, para entenderlo y ser solidarios, amables, compasivos y
colaboradores con ellos. Esta es la mejor forma de dignificarnos como personas: cuando nosotros
mismos actuemos con responsabilidad, seriedad y respeto hacia nosotros y hacia los demás, al punto de
cuidar, también, la dignidad del otro como si fuéramos nosotros mismos. De esta manera actuaremos
como ciudadanos éticos.
Universidad Nacional Abierta y a Distancia – UNAD Vicerrectoría Académica y de Investigación - VIACI
Escuela: Ciencias Sociales Artes y Humanidades
Curso: Ética y Ciudadanía (Pregrado) Código: 40002
Objetivo:
En objetivo principal según el autor es que hay que formar la capacidad de autonomía. Ya que, vivimos
en un mundo muy complejo y no se puede crear personas que vivan constantemente, dependiendo de
autoridades que nos va a decir que debemos hacer, hay que crear personas capaces de autonomía, de
iniciativa propia, de responsabilizarse para bien o para mal de lo que hacen; esto me parece muy
interesante y tiene que ser transmitido en el momento en que aún se puede transmitir.
Uno de los aportes más importantes sobre la reflexión que hace Savater acerca de la ética es que
además de autonomía y cooperación, hace falta despertar la capacidad o la vocación de participar en la
vida pública. De entender la diferencia entre una democracia y un autoritarismo, que en la democracia
somos políticos todos
Bajo las afirmaciones anteriores, cuando la democracia es la protagonista de la vida social, se va creando
la autonomía de las personas, que es cuando se tienen pautas y objetivos propios. No obstante,
podemos tener derecho a equivocarnos por el hecho de ser ciudadanos con normas preestablecidas en
la sociedad. Por consiguiente, todo ser humano debe tener la capacidad de regir su vida de acuerdo a
pautas y objetivos propios.