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Portafolio Visual de Proyectos

Maestro: Arq. Edgar Iván Rodríguez Llerenas


Alumno: Ing. Pablo Peña Carrillo

Mapas Mentales

El término mapas mentales en


algunos países es una marca registrada,
sin embargo, el origen de la técnica de
mapas mentales, e incluso el término,
puede encontrarse en la literatura en
fechas bastante previas a su registro. El
trabajo de Tolman y posteriormente el
de Novak parece ser realmente el
origen de los mapas mentales. A estos
autores se debe la técnica y el nombre.

El término, es comúnmente usado para referirse un diagrama que establece relaciones semánticas,
simbólicas o conceptuales. Generalmente, el diagrama tiene un centro del cual salen líneas para
relacionar con otros conceptos.

El término, es una marca registrada por Tony Buzan. Es paradójico que algo que tiene sus orígenes en
otros autores, que puede usarse como herramienta educativa, que se le relaciona con técnicas
creativas, sea de uso reservado.

Si uno rastrea el origen, no sólo del témino "Mind Map" sino de la acción que implica hacer un mapa
mental, se encontrará con literatura que data de finales de los 40 y con auge en los 60. Mucho antes de
que alguien se apropiara del significado y de su uso.

Quizá Novak fue realmente el que llegó primero a desarrollar la técnica que actualmente es una "Marca
Registrada". Sin embargo, el trabajo de Ausubel, sobre aprendizaje significativo, fue una fuerte
influencia en Novak.
Aunque en otra dirección, pero altamente importante en cuanto al origen de los mapas mentales,
puede citarse la obra de Tolman. Tolman, en 1948 escribió un artículo llamado "Cognitive Maps in Rats
y Men". Este autor es probablemente el padre de la idea de mapa mental.

La mercantilización del término, ha contribuido a que se promuevan virtudes que difícilmente pueden
encontrarse en la técnica. Buzan usa para la promoción de "su" marca comercial, consideraciones sobre
el funcionamiento cerebral que no tienen respaldo científico. Por otro lado, una búsqueda en bases de
datos especializadas en investigación psicológica o educativa indica resultados más bien modestos
como técnica de aprendizaje. Esto no quiere decir que la técnica no tiene valor. Lo que se afirma es que
su promoción comercial usa información probablemente incorrecta.

A pesar de lo anterior, es importante destacar que toda herramienta que ayude a las facultades
cognoscitivas será siempre bienvenida. Así, usar los mapas mentales como herramienta para entender
o analizar información, tomar notas o facilitar lluvia de ideas, probablemente pueda traducirse en un
mejor desempeño cognitivo que ayude a las tareas de aprendizaje, al proceso creativo o en la vida
cotidiana. Ojalá nos acerquemos pronto a un conocimiento que nos permita saber cuándo realmente
funciona hacer un mapa mental, qué variables son importantes en su uso o como podemos utilizarlo
más eficientemente.

El mapa mental tiene características esenciales:

• El asunto o motivo de atención se cristaliza en una imagen central.

• Los principales temas del asunto irradian de la imagen central en forma ramificada.

• Las ramas comprenden una imagen o una palabra clave impresa sobre una línea asociada.

• Los puntos de menor importancia también están representados como ramas vinculadas con las
de nivel superior.

• Las ramas forman una estructura nodal conectada.


El mapa mental resulta una buena técnica o recurso para aprender, pero también es una buena
técnica de enseñanza, que puede ser utilizada en diferentes momentos de la clase: para la anticipación,
para la construcción del conocimiento o bien para la consolidación. Admite una elaboración de manera
individual o en grupo y puede servir al docente para abrir debates e intercambiar ideas respecto de un
tema específico.

Los mapas mentales facilitan el aprendizaje, puesto que permiten a los alumnos representar sus ideas
utilizando de manera armónica las funciones cognitivas de los hemisferios cerebrales. Podríamos
afirmar que es más fácil entender un concepto cuando lo “visualizamos” por medio de la imaginación.

Según los expertos, las conexiones cognitivas ocurren gracias a que la actividad lógica y racional
controlada por nuestro hemisferio izquierdo que se complementa con la capacidad creativa y la
disposición emocional hacia los objetos, reguladas por el hemisferio derecho.

Mediante estas conexiones, las neuronas se comunican entre sí formando una red de almacenamiento y
procesamiento de información. Cada vez que incorporamos datos nuevos por la vía perceptual o
reflexiva, las conexiones sinápticas forman “circuitos de enlace” por los que fluye la nueva información y
se conecta con la ya existente para poder ser “comprendida”. Por medio de esta red sináptica, el
cerebro asocia los nuevos contenidos mentales con todo el bagaje de conocimientos previos y logra la
asimilación de los datos más recientes a nuestros esquemas ya establecidos.

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