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EVALUACIÓN DEL EFECTO DE TRES FERTILIZANTES ORGÁNICOS A TRES

DOSIS DIFERENTES SOBRE LA TASA DE CRECIMIENTO Y RENDIMIENTO DEL


FRIJOL (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, EN CONDICIONES DE AGRICULTURA
URBANA

ÁLVARO ANDRÉS ORTIZ ROJAS

TRABAJO DE GRADO

Presentado como requisito parcial

para optar el título de

BIÓLOGO

Neidy Clavijo Ponce

Directora

PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA

FACULTAD DE CIENCIAS

CARRERA DE BIOLOGÍA

BOGOTÁ D.C.

Junio de 2010
NOTA DE ADVERTENCIA

Artículo 23 de la Resolución N° 13 de Julio de 1946

“La Universidad no se hace responsable por los conceptos emitidos por sus alumnos en sus
trabajos de tesis. Sólo velará por qué no se publique nada contrario al dogma y la moral católica y
por que la tesis no contenga ataques personales contra persona alguna, antes bien se ves en ellas
el anhelo de buscar la verdad y la justicia”

 
Resumen

En la ciudad de Bogotá, se presenta una alternativa de producción de alimentos para


autoconsumo y comercialización denominada, agricultura urbana. Entre los alimentos más
cultivados bajo esta modalidad se encuentra el fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, que en
condiciones de fertilidad natural ostenta baja tasa de crecimiento y rendimiento. Una alternativa a
estos problemas de crecimiento y rendimiento en el cultivo de fríjol es la fertilización orgánica,
ya que suple necesidades nutricionales, aportando altos niveles de minerales esenciales para el
cultivo. Algunas veces se han utilizado dosis deficientes que conducen a problemas de
rendimiento y dosis excesivas que conducen a un desequilibrio mineral que afecta la tasa de
crecimiento. Es por esto que el presente estudio tuvo como objetivo evaluar la tasa de
crecimiento y rendimiento del cultivo de fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza en
condiciones de agricultura urbana, mediante el uso de tres fertilizantes orgánicos (Té de
Compost, Té de Humus de lombriz y Caldo Súper Cuatro) a tres dosis diferentes 100ml, 200ml,
300ml y un tratamiento control, formando 10 tratamientos en total con 6 repeticiones cada uno;
se realizó un diseño de bloques completamente al azar para observar cual fue el fertilizante que
tuvo mayor efecto sobre las variables evaluadas, y un diseño completamente al azar para saber
las diferencias entre la totalidad de los tratamientos evaluados, seguido de esto, se efectúo una
prueba de correlación de Spearman para observar si existe correlación entre la tasa de
crecimiento y rendimiento del fríjol. El análisis de varianza mostro diferencias significativas
entre los fertilizantes evaluados, arrojando al Té de Humus de lombriz como el fertilizante que
presentó un efecto superior sobre la tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol, seguido del
fertilizante té de compost y caldo súper cuatro respectivamente. De la misma manera se
presentaron diferencias significativas entre las plantas a las que se les aplicó fertilizantes
orgánicos y las plantas control, siendo los tratamientos de los fertilizantes orgánicos los que
obtuvieron los mejores resultados; en contraste, no se presentaron diferencias significativas entre
las dosis evaluadas de los fertilizantes orgánicos. Sin embargo se presento una alta correlación
entre las variables tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol. Razones por las cuales se
recomienda el uso del fertilizante té de humus de lombriz para el cultivo de fríjol ya que se
obtuvo un óptimo rendimiento en las plantas a las que se les aplicó este fertilizante.
Introducción

La agricultura urbana se desarrolla dentro de los límites o en los alrededores de la ciudad e


incluye los productos de las actividades agrícolas que se desarrollan en zonas urbanas y
periurbanas (FA0, 2002). Se caracteriza por ser una agricultura heterogénea practicada por
agentes locales o migrantes, es multicultural y está ajustada al estilo de vida urbano, así como a la
transformación ecológica de la ciudad y la reutilización productiva de residuos urbanos (Méndez
et al, 2005).

Algunas veces los cultivos agrícolas establecidos en la ciudad de Bogotá, presentan baja tasa de
crecimiento y rendimiento en condiciones típicas de cultivo1, causando que no sean auto
sostenibles para el autoconsumo o comercialización (Salazar, 2004). Según las investigaciones
realizadas por la Red de Agricultores Urbanos de Bogotá, se han utilizado dosis insuficientes de
fertilizantes orgánicos que producen problemas en la productividad de las cosechas, y en
ocasiones dosis excesivas que conducen a problemas ambientales como la perdida en la buena
parte de la biodinámica del sustrato, que consiste en un desequilibrio por exceso o deficiencia de
nutrientes absorbidos por la planta, afectando así la el uso del mismo sustrato para el
establecimiento de otros cultivos en el mismo lugar (Navarro, 2001).

Como respuesta a esta problemática, en la presente investigación se realizó la evaluación del


efecto de tres fertilizantes orgánicos a tres dosis diferentes sobre la tasa de crecimiento y
rendimiento del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, en condiciones de agricultura urbana.
Esta investigación aporta información acerca del uso de algunos fertilizantes orgánicos en
prácticas de agricultura urbana mediante la utilización de fertilizantes (Té de compost, Té de
humus de lombriz y Caldo súper cuatro); así mismo se genera información del uso adecuado en
las dosis de fertilizantes orgánicos en el cultivo de fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, en
condiciones de agricultura urbana en la ciudad de Bogotá, mediante la estandarización de las
dosis evaluadas en cada uno de los fertilizantes orgánicos utilizados en el estudio.

1. Condiciones típicas de cultivo: Son las plantas cultivadas por agricultores urbanos, que no
presentan aplicaciones de fertilizantes y ningún tipo de suplemento nutricional que aporta
nutrientes a la planta para su crecimiento y desarrollo.
El objetivo general de este trabajo es evaluar el efecto en la aplicación de tres fertilizantes
orgánicos a tres dosis diferentes sobre la tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol (Phaseolus
vulgaris) L. var. Cerinza, en condiciones de Agricultura urbana en la ciudad de Bogotá.

Para esto se estudió el efecto de la aplicación de tres fertilizantes orgánicos con tres dosis
diferentes en la tasa de crecimiento del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza. Así mismo se
estudio el efecto en la aplicación de tres fertilizantes orgánicos a tres dosis diferentes en el
rendimiento del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza. Y por último se evaluó la correlación
entre la tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, en
condiciones de agricultura urbana en la ciudad de Bogotá.

Justificación y planteamiento del problema

En América Latina existe una estrategia alimentaria de autoproducción, llamada


AGRICULTURA URBANA (Cabannes y Mougeot. 1999). La agricultura urbana según la
definición presentada por la RUAF fundation “es el cultivo de plantas y la cría de animales
dentro y alrededor de las ciudades”. Para la RUAF (2001) la agricultura urbana “se inserta en la
interacción con el ecosistema urbano; estos vínculos incluyen el uso de los residentes urbanos
como mano de obra, el uso de los recursos urbanos típicos (como los residuos orgánicos como
compost y las aguas residuales urbanas para el riego), ya que es hace parte integral del sistema
urbano”.

Dentro del sistema integral urbano del distrito capital, el uso de fertilizantes orgánicos en
prácticas de agricultura urbana no es muy frecuente, existe un vacío de información acerca del
uso y potencialidad de los fertilizantes orgánicos y así mismo un desconocimiento por parte de
los agricultores urbanos en la utilización de dosis adecuadas de estos fertilizantes (Salazar,
2004). En ocasiones los cultivos urbanos presentan baja tasa de crecimiento y rendimiento en
condiciones de fertilidad natural, causando que los cultivos no sean auto sostenibles para el
consumo propio o comercialización de los alimentos producidos (Salazar, 2004). Según las
investigaciones realizadas por la Red de Agricultores Urbanos de Bogotá, se han utilizado dosis
deficientes de fertilizantes orgánicos que conducen a bajas cosechas y en ocasiones dosis
excesivas que conducen a problemas ambientales como la perdida en la buena parte de la
biodinámica del sustrato, que consiste en un desequilibrio por exceso o deficiencia de nutrientes
absorbidos por la planta, afectando directamente el crecimiento y rendimiento (Navarro, 2001).

Así mismo en cada cosecha producida por los alimentos cultivados en agricultura urbana, se
extraen del sustrato altos volúmenes de elementos que hacen que este sea más pobre cuando se
cultiva; el sustrato bajo cultivos pierde buena parte de su biodinámica debido al uso de
agroquímicos; a las sales de los fertilizantes inorgánicos; a los altos volúmenes de agua de riego,
que provocan lixiviación y percolación profunda de elementos nutritivos y lavado de bases,
acidificando el terreno y causando toxicidad; todos estos factores contribuyen a la pérdida de la
fertilidad y por ende a problemas de producción en los cultivos (Red Águila, 2007).

Existen diversas alternativas para mejorar el rendimiento y crecimiento presentado por las plantas
en cultivos urbanos, una de estas es el uso apropiado de fertilizantes orgánicos siendo un sistema
que reúne los aspectos agronómicos, ecológicos, económicos y sociales; en esta agricultura se
integra el uso de insumos de origen orgánico, tales como estiércoles y residuos vegetales
(Gómez, 2005). El propósito del estudio de fertilización orgánica en un contexto de agricultura
urbana (AU) es alcanzar una mayor tasa de crecimiento y rendimiento del cultivo de fríjol
(Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, mediante el uso de fertilizantes orgánicos, optimizando el
estado nutricional y fisiológico de la planta, aportando a la disminución de la dependencia de los
agricultores a los agro-tóxicos comerciales.

Marco teórico

Agricultura Urbana

En Bogotá un número considerable de familias de escasos recursos económicos cultivan parte de


sus propios alimentos en su casa o en áreas aledañas, generando así una alternativa de sustento
alimentario llamada AGRICULTURA URBANA (AU) (Salazar, 2004). La Agricultura Urbana es
una herramienta muy valiosa dentro de los programas de seguridad alimentaria, y básicamente
está dirigida a mejorar la alimentación a través de la promoción, establecimiento y seguimiento
de huertas de producción agroecológica (Gliessman & Méndez, 2000).
Llamamos Agricultura Urbana a la práctica agrícola y pecuaria en las ciudades, que por iniciativa
de los productores desplazados muchas veces en los barrios marginales, o pueblos jóvenes y
periurbanos, colindantes a las ciudades; utilizan los mismos recursos locales, como mano de obra,
espacios, agua y desechos sólidos orgánicos y químicos, así como servicios, con el fin de generar
productos de autoconsumo y también destinados a la venta en el mercado” (Red Águila, 2007).

Las condiciones de producción de cultivos agrícolas urbanos en la ciudad de Bogotá se basan


principalmente en la generación y aplicabilidad de tecnologías limpias que permitan mejorar los
sistemas de cultivo y producción de especies vegetales de clima frío, por parte de la población del
Distrito Capital (Gómez, 2005). Entre estas condiciones de agricultura urbana se encuentran el
uso de pequeñas superficies (solares, huertos, márgenes, terrazas, recipientes) situadas dentro de
una ciudad y destinadas a la producción de cultivos, la optimización de estos espacios se hace a
través del empleo de contenedores como lo son canecas, botellas, guacales, bolsas plásticas, que
permitan el establecimiento de cultivos agrícolas en zonas urbanas (Red Águila, 2007)

De la misma manera otra condición importante en agricultura urbana es el uso de sustratos


orgánicos, como el compost-cascarilla, ya que es de fácil obtención y da un mayor rendimiento a
los cultivos, aportando altos niveles de macronutrientes esenciales como lo es el nitrógeno,
fósforo y potasio, aumentando la materia orgánica disponible en el suelo para la planta; lo que
hace que sea un sustrato elaborado para la generación de sistemas productivos sostenibles, con un
bajo costo de implementación, de fácil adaptación y apropiación por parte de la comunidad
(Alcaldía Mayor de Bogotá & Jardín Botánico José Celestino Mutis, 2007).

Nutrición Vegetal

La nutrición vegetal consiste en la elaboración y utilización de materia rica en energía (azúcares,


aceites, proteínas) a partir de los materiales absorbidos en el medio ambiente, asimilando
elementos nutritivos necesarios para las distintas funciones fisiológicas de la planta como lo es el
crecimiento, desarrollo y reproducción vegetal (Borrego, 2000).
La nutrición vegetal es el modo de asimilación de los nutrientes minerales por parte de las
plantas (Taiz & Zeiger, 2007), los nutrientes minerales son los elementos incorporados
principalmente en forma de iones inorgánicos, los altos rendimientos agrícolas dependen en gran
medida de la fertilización con nutrientes minerales, de hecho los rendimientos de la mayoría de
los cultivos aumentan linealmente con la cantidad de fertilizante que absorben (Coll & Gregorio,
2005). No obstante, los cultivos vegetales emplean menos de la mitad del fertilizante que se les
aplica; el resto de minerales se lixivian en las aguas superficiales o subterráneas, y se unen a las
partículas del suelo o contribuyen a la contaminación del aire (Miller, 2005).

Un elemento esencial se considera aquél cuya ausencia impide a la planta completar su ciclo de
vida (Miller, 2005) solo algunos elementos son considerados esenciales para el crecimiento
vegetal. Para Taiz & Zeiger (2007) los elementos esenciales se deben clasificar según su papel
biológico y su función fisiológica. Es por esto que se presenta la siguiente clasificación:

Para el primer grupo (Tabla 1), se encuentran los elementos que forman compuestos orgánicos
con carbono de la planta. Las plantas asimilan estos nutrientes en reacciones bioquímicas que
incluyen la carboxilación y la oxido-reducción. En el segundo grupo, radica la importancia en
reacciones de almacenamiento de energía o de mantenimiento de la integridad estructural; los
elementos de este grupo se presentan en su mayoría en tejidos vegetales en forma de fosfatos,
boratos y ésteres de silicato, en los que el grupo elemental está unido al grupo hidroxilo de una
molécula orgánica. En el tercer grupo, se presentan los tejidos vegetales como iones libres, o
como iones unidos a sustancias como ácidos pépticos presentes en la pared celular vegetal. Sus
funciones se encuentran como cofactores enzimáticos y en la regulación de los potenciales
osmóticos. El cuarto grupo, su funcionalidad se basa principalmente en reacciones que implican
una transferencia electrónica.
Tabla 1. Clasificación de los nutrientes minerales de las plantas de acuerdo con su función bioquímica.

Nutrición mineral Funciones


Grupo 1 Nutrientes que forman parte de compuesto orgánicos
Constituyente de aminoácidos, amidas, proteínas, ácidos nucleícos,
Nitrógeno (N) nucleótidos, coenzimas, hexoaminas, etc.,
Componente de cisteína, metionína y proteínas. Constituyente de ácido
Azufre (S) lipoico, coenzima A, entre otros.
Nutrientes importantes en almacenamiento de energía o integridad
Grupo 2 estructural
Componente de azúcares, fosfato, ácidos nucleícos, nucleótidos,
Fósforo (P) coenzimas, fosfolípidos, ácido fítico, etc.
Se deposita como silicio amorfo en las paredes celulares y contribuye a sus
Silicio (Si) propiedades mecánicas, incluidas la rigidez y elasticidad
Forma complejos con manitol, ácido polimanurónico y otros
constituyentes de las paredes celulares. Está implicado en la elongación
Boro (B) celular y en el metabolismo de los ácidos nucleícos.
Grupo 3 Nutrientes que permanecen en forma iónica
Es necesario como cofactor de más de 40 enzimas, Catión principal en el
establecimiento de la presión de turgencia celular y en el mantenimiento
Potasio (K) de la electroneutralidad celular.
Constituyente de la lámina media de las parees celulares. Es necesario
como cofactor de varias enzimas implicadas en la hidrólisis del ATP y
fosfolípidos. Actúa como segundo mensajero en regulación del
Calcio (Ca) metabolismo.
Es necesario para muchas enzimas implicadas en la transferencia de grupo
Magnesio (Mg) fosfato. Constituyente de la clorofila.
Cloro (Cl) Es necesario para las reacciones fotosintéticas que implican 02.
Es necesario para la actividad de algunas deshidrogenasas,
descarboxilasas, quinasas, oxidasas, y peroxidasas. Está implicado junto
con otros enzimas activadas por cationes, en la generación de 02
Manganeso (Mn) fotosintético.
Está implicado en la regeneración del fosfoenolpiruvato en las plantas C4
Sodio (Na) y CAM sustituye al potasio en algunas funciones
Grupo 4 Nutrientes implicados en reacciones redox
Constituyente de citocromos y proteínas sin grupo hemo implicadas en la
Hierro (Fe) fotosíntesis, la fijación del N2 y la respiración.
Constituyente de la alcohol deshidrogenasa, la glutamato deshidrogenasa,
Zinc (Zn) la anhidrasa carbónica, etc.
Componente de la ácido ascórbico oxidasa, la tirosinasa, la
monoaminooxidasa, la uricasa, la citocromo oxidasa, la fenolasa, la lacasa
Cobre (Cu) y la plastocianina.
Constituyente de la ureasa, en bacterias fijadoras de N2, es un
Níquel (Ni) constituyente de las hidrogenasas.
Constituyente de la nitrogenasa, la nitrato reductasa y la xantina
Molibdeno (Mo) deshidrogenasa.

Fuente (Taiz & Zeiger, 2007).

Fertilización

La falta de minerales esenciales que aporta el sustrato durante las etapas de floración, formación
y llenado de vainas afecta seriamente la tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol (Phaseolus
vulgaris) L. var. Cerinza.

Una alternativa a estos problemas de crecimiento y rendimiento, es la fertilización, que consiste


en suplementar a la planta necesidades nutricionales no satisfechas por el suelo en su condición
de fertilidad natural (Quinchoa et al, 2006). Se han generado alternativas para aumentar la tasa de
crecimiento y rendimiento en las especies vegetales cultivadas en agricultura urbana, entre estas
estrategias se encuentra la fertilización química y la fertilización orgánica.

La fertilización química presenta diversas características en cuanto abono y mejorador del suelo;
entre sus características favorables se encuentra la solubilidad de nutrientes que están más
rápidamente disponibles para la asimilación por parte de la planta, así mismo la elevada
concentración de nutrientes y la baja humedad en los fertilizantes químicos, se constituyen en una
de las fortalezas (FAO, 2002). Por otro lado tienen la desventaja que en condiciones de exceso de
agua en el suelo, gran cantidad de estos nutrientes pueden ser desaprovechados ya sea por su
erosión o lixiviación, contaminando a la vez las aguas superficiales; es por esto que si estos
fertilizantes son utilizados de manera discriminada e inadecuada, pueden constituirse en
poluentes del suelo y del agua (Navarro, 2001).

Por último los fertilizantes químicos no son considerados como mejoradores del suelo, sus
efectos en este sentido pueden ser indirectos a través del aumento de la producción de biomasa,
pero así mismo presentan efectos negativos a largo plazo, debido a que erosionan el suelo donde
se cultivan (Cubero & Vieira, 1999).

Como otra alternativa se encuentra la fertilización orgánica, que presenta diferentes fortalezas y
debilidades como abono y mejorador del suelo; se considera que la aplicación de abonos de
origen orgánico contribuye a restaurar la biodiversidad, la dinámica biológica y la fertilidad
perdida por el suelo bajo permanente explotación agropecuaria (Cubero & Vieira, 1999). Debido
a que los fertilizantes orgánicos son menos solubles, ponen los nutrientes a disposición de las
plantas de manera más gradual, de igual forma, al aumentar la materia orgánica en el suelo,
pueden mantener más nutrientes absorbidos, reduciéndose las pérdidas por lixiviación (Cubero &
Vieira, 1999).

Los fertilizantes orgánicos pueden ser catalogados como mejoradores del suelo ya que tienden a
mejorar su estructura, lo que adecua la infiltración del agua, facilita el crecimiento apical y
radicular, de igual forma posibilita una mejor aireación contribuyendo al control de la erosión
entre otros (FAO, 2002).

Es por esto que el uso de fertilizantes orgánicos es una alternativa agroecológica, que consiste en
emplear técnicas y sistemas que eviten que se presenten problemas de contaminación a través del
reciclaje de residuos para generar una producción amigable con el medio ambiente y libre de
tóxicos, que se pueden presentar en otros sistemas de cultivos (Norgaard, 1998).
Fertilizantes orgánicos

La fertilización orgánica consiste en la adición o mezcla de sustancias naturales utilizadas para


enriquecer el suelo y favorecer el crecimiento vegetal (Ramírez, 1998); los fertilizantes orgánicos
aportan nutrientes a través de la descomposición de residuos vegetales y animales en el suelo lo
que constituye un proceso biológico en el cual el carbono es reciclado a la atmósfera como
dióxido de carbono, el nitrógeno se vuelve disponible como amonio y como nitrato y otros
elementos como fósforo, azufre y algunos micronutrientes se presentan en las formas requeridas
por las plantas (Chaimsohn et al 2007).

Entre los fertilizantes orgánicos más usados en agricultura urbana en la ciudad de Bogotá se
encuentra el Compost, siendo un fertilizante de fácil acceso económico y de rápida producción
ecológica por parte de los agricultores (Gómez, 2005).

El Compost es uno de los mejores abonos orgánicos ya que permite mantener la fertilidad de los
suelos con excelentes resultados en el rendimiento de los cultivos (Labrador et al 2006). El
compost no solo presenta aportes altos de nutrientes para la planta según su composición química
(Tabla 3), sino que incide positivamente sobre la actividad microbiana del suelo, influye
indirectamente sobre los ciclos de movilización y ayuda a disminuir la inmovilización de macro
elementos minerales como el fósforo, azufre, nitrógeno, calcio y potasio, aumentando la
mineralización del suelo y reduciendo la inmovilización de nutrientes presentada en el fríjol bajo
condiciones normales de cultivo (Hirzel & Rodriguez, 2004).

Otro fertilizante orgánico utilizado en agricultura urbana, al que se le atribuyen excelentes


resultados en cultivos agrícolas urbanos es el Humus de lombriz roja californiana (Eisenia
foetida); gracias a la fácil producción de altos volúmenes de fertilizante con un bajo costo tanto
económico como de producción, presentando un desarrollo agroecológico sustentable
(Castiblanco, 2004). El Humus de lombriz roja californiana (Eisenia foetida) presenta un
contenido de minerales muy altos (Tabla 3), entre estos minerales esenciales se encuentra el
nitrógeno, fósforo y potasio, que libera lentamente, incrementando la disponibilidad de los
elementos ya existentes en el suelo para ser absorbidos por la planta (Canellas & Rocha 2004).
Debido a la riqueza en micro elementos el Humus de lombriz roja californiana es uno de los
fertilizantes más completos ya que mejora las condiciones del suelo, reteniendo la humedad y
aumentando la capacidad de retención de agua, propiciando y acelerando las etapas de
germinación, floración y llenado de vainas en leguminosas. (Perea et al 2000).

Por último, otro fertilizante orgánico comúnmente producido en prácticas agrícolas urbanas, es el
Caldo Súper cuatro, éste fertilizante es preparado por agricultores urbanos en la ciudad de
Bogotá, su utilidad radica en la venta a cultivos agrícolas rurales, pero de su uso se presentan
pocos registros que aseguren su dosificación y uso por parte de los agricultores urbanos
(Castiblanco, 2004).

El Caldo Súper 4, debido a su composición química (Tabla 3) que actúa directamente sobre los
elementos minerales del suelo, el caldo súper cuatro genera materia orgánica con contenidos
mínimos del 15%; aportando altos niveles de nitrógeno, potasio y fósforo, y altos contenidos de
azufre necesarios para todas las proteínas presentes en las legumbres; gracias a este aporte de
nutrientes a la planta el caldo súper cuatro presenta un efecto directo sobre la tasa de crecimiento
de la planta en sus primero días de desarrollo ya que actúa específicamente sobre los aminoácidos
específicos que requiere la planta en sus primeros días de desarrollo, donde genera un aumento en
la longitud. (Viterí et al 2008).

Tabla 4. Características físico-químicas Compost Biofort (Registro ICA Nº 6269).


Características físico-químicas Té de Humus de lombriz Californiana (Eisenia foetida).
Características físico-químicas Caldo Súper Cuatro.

Té de Humus de Caldo Súper


Té de Compost lombriz cuatro
NITROGENO
TOTAL 1.49%-1.8% 1.80%-2.2% 1.40%
FOSFORO
ASIMILABLE 0.91%-2.53% 0.75%-1.6% 1400 ppm
POTASIO 1.1%-2.98% 3.20%-5.6% 11 meq-g
CALCIO 1.42%-5.83% 2.60%-4.6% 6.7 meq-g
CARBONO 9.40%-
ORGÁNICO 11.70% 39.90% 0.50%
RELACIÓN C/N 8-10.2 13.7 1.4
CENIZAS 51% 80mg/Kg 2000 ppm
HUMEDAD
MÁXIMA 15% 0.64%-0.8% 19.5 meq-g
CAPACIDAD DE
INTERCAMBIO 44.40
CATIONICO meq/100g 165 mg/Kg 2000 ppm
CONDUCTIVIDAD
ELECTRICA 24.90 d s/m 67.5 mg/Kg 200 ppm
PH 7.4-9.51 Mn 400 mg/Kg Mn 10 ppm

Fuente (Elaboración propia con base en: Compost Biofort, Registro ICA Nº 6269; Canellas &
Rocha 2004 y Viterí et al 2008).

Fríjol. (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza.

Entre las especies cultivadas en agricultura urbana se encuentra el fríjol (Phaseolus vulgaris) L.
var. Cerinza, siendo una especie fundamental para combatir parte de la inseguridad alimentaria
(Alcaldía Mayor de Bogotá & Jardín Botánico José Celestino Mutis, 2007)

En el cultivo de fríjol la mayoría de los agricultores basan su fertilización en altas dosis debido al
desconocimiento de las concentraciones adecuadas, por lo que existe exceso en dosis de
nitrógeno y dosis variables de fósforo, descuidando otros nutrientes de igual importancia como lo
son el potasio, magnesio, calcio y azufre, llevando a un continuo desbalance de nutrientes que
perjudican la fertilidad del cultivo produciendo así una absorción desproporcionada de nutrientes
por parte de la planta (Arias et al 2007).

El fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, es una planta que presenta altos requerimientos
nutricionales para obtener un óptimo rendimiento; según Arias et al (2007), el fríjol debe
absorber cantidades altas de N, P y K y en menor cantidad S, Mg y Ca; como se observa en la
(Tabla 1), debido a los requerimientos esenciales por m2 de fríjoles de crecimiento determinado y
arbustivo.

Tabla 2. Exigencias nutricionales del fríjol.


Componentes g/m2
de la Cosecha N P K Ca Mg S
Vainas 32 4 22 4 4 10
Tallo 65 5 71 50 14 15
Total 96 9 93 54 18 25

Fuente (Arias et al 2007). Conversión de Kg/ha.

Según Flor (2000) el requerimiento mineral en cuanto a macro elementos que actúan
principalmente sobre la productividad del fríjol se observan en la (Tabla 2).

Tabla 3. Exigencias nutricionales del fríjol por planta.


Componentes g/planta
de la Cosecha N P K Ca Mg S
Vainas 0.53 0.07 0.36 0.07 0.066 0.166
Tallo 1.08 0.08 1.18 0.83 0.23 0.25
Total 1.6 0.15 1.55 0.9 0.3 0.416

Fuente (Flor, 2000). Conversión de Kg/ha.


El fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, presenta una gran adaptabilidad de siembra desde
1400 hasta 3000 msnm, requiere entre 300 a 400 mm de lluvia anual (Velásquez & Giraldo,
2005). Un suelo óptimo para el cultivo de fríjol tiene que ser profundo, fértil, preferiblemente de
origen volcánico con no menos de 1,5% de materia orgánica en la capa arable y de textura liviana
con no más de 40% de arcilla como los de textura franco, franco limosos y franco arcillosos ya
que el buen drenaje y la aireación son fundamentales para un buen rendimiento de este cultivo
(Lima, 1996). Se debe evitar sembrar en suelos ácidos, con contenidos altos en manganeso y
aluminio y bajos en elementos menores; El pH óptimo para fríjol está comprendido entre 5,0 y
7,5 aunque es tolerante a pH entre 4,5 y 8,2 (Lima, 1996).

Tasa de Crecimiento y Rendimiento.

La tasa de crecimiento se define como un aumento irreversible en volumen, el componente del


crecimiento vegetal es la expansión celular dirigida por la presión de turgencia (Taiz & Zeiger,
2008). Durante el proceso, las células aumentan en volumen varias veces, así mismo la tasa de
crecimiento se mide a medida de que una región del eje de la planta se mueve desde el ápice, su
tasa de crecimiento aumenta, hasta que se alcanza una constante limitante igual a la tasa de
extensión del órgano, siendo la tasa de crecimiento final la pendiente constante, final de la
trayectoria del crecimiento (Azcon & Coor, 2008).

El rendimiento se define en términos fisiológicos en el peso seco que presente la planta en sus
diferentes partes que lo componen, como lo es, tallo, hojas, brotes, flores, frutos (Taiz & Zeiger,
2008). Así mismo se expresa en las plantas como la parte utilizada ya sea, a nivel industrial o
alimenticio del cultivo, en el fríjol, el rendimiento se define en términos de peso seco de los
brotes que presente la planta, número de vainas, peso seco de vainas y peso seco de semillas
colectadas (Rosales et al, 2008).

Pregunta de investigación.

¿Cuál es el efecto en la aplicación de tres fertilizantes orgánicos a tres dosis diferentes sobre la
tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, en condiciones
de agricultura urbana en la ciudad de Bogotá?
Objetivos

General

• Evaluar el efecto en la aplicación de tres fertilizantes orgánicos a tres dosis diferentes


sobre la tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza,
en condiciones de Agricultura urbana en la ciudad de Bogotá.

Objetivos

Específicos

• Estudiar el efecto de la aplicación de tres fertilizantes orgánicos con tres dosis diferentes
en la tasa de crecimiento del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, en condiciones
de agricultura urbana en la ciudad de Bogotá.
• Estudiar el efecto en la aplicación de tres fertilizantes orgánicos a tres dosis diferentes en
el rendimiento del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, en condiciones de
agricultura urbana en la ciudad de Bogotá.
• Evaluar la correlación entre la tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol (Phaseolus
vulgaris) L. var. Cerinza, en condiciones de agricultura urbana en la ciudad de Bogotá.

Hipótesis.

• Las dosis de fertilizantes orgánicos con una alta concentración de macro elementos
incrementan la tasa de crecimiento y rendimiento del cultivo de fríjol (Phaseolus
vulgaris) L. var. Cerinza, en condiciones de agricultura urbana en la ciudad de Bogotá.
Metodología.

Ubicación

El presente estudio es una investigación de tipo analítico, que se realizó en la UICAU (Unidad
Integral Comunitaria de Agricultura Urbana); seccional salitre, dentro de las instalaciones del
Jardín Botánico José Celestino Mutis, en la ciudad de Bogotá (Figura 1). El área de estudio
presenta las siguientes coordenadas 4º 40´ 24" Latitud Norte y 74º 06´14.5" Longitud oeste; con
una precipitación media anual de 713 mm y una altura de 2.551 msnm (IDEAM).

Figura 1. Jardín Botánico José Celestino Mutis.

Procedimiento

El proceso de evaluación de tres fertilizantes orgánicos a tres dosis diferentes sobre la tasa de
crecimiento y productividad del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, se divide en tres
etapas principalmente:

Siembra.

El semillero se estableció inicialmente en 1 bandeja de 100 alveolos que tenía como sustrato 500g
de Turba proveniente del Jardín Botánico José Celestino Mutis, en donde se inició el proceso de
siembra de 60 semillas de fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, provenientes de Semicol. A
los 40 días las semillas presentaron un porcentaje de germinación y pureza del 90%, durante los
días de siembra se presentaron condiciones de clima lluvioso, por lo que no se realizo ningún
riego antes del trasplante a contenedores definitivos.

Simultáneamente al establecimiento del semillero, se inició la elaboración de los fertilizantes:

• La preparación del Té de Compost y del Té de humus de lombriz, se basaron en el


protocolo de Sanabria (2009); el Compost y el Humus de lombriz utilizado, provinieron
del Jardín Botánico José Celestino Mutis; la preparación de estos fertilizantes consistió en
tomar un recipiente plástico (Caneca100lt), llenar el recipiente con agua hasta 100lt,
seguido de esto, tomar una lona o un costal de fique, llenar la lona o costal con 5kg de
Compost o Humus de Lombriz dependiendo del fertilizante que se vaya a preparar (Té de
Compost o Té de Humus de Lombriz); Amarrar la lona o el costal con una pita.

Por último incorporar la lona o costal al recipiente con agua, tapar con una bolsa
plástica negra la boca de la caneca, se mezcló cada dos días durante 5 minutos por ocho
días y quedó preparado para ser utilizado. El modo de aplicación de estos fertilizantes
fue de forma líquida, utilizando un recipiente en el cual estuvieron marcadas cada una de
las dosis aplicadas (100ml, 200ml y 300ml); la frecuencia de aplicación fue cada 8 días
hasta el inicio de la cosecha.

• El fertilizante Caldo Súper Cuatro se obtuvo a través de la Red de Agricultores Urbanos


de Usme que se basan en el protocolo de Velosa et al, (2003) que consiste inicialmente
en la mezcla de Sulfatos (Sulfato de cobre, Sulfato de magnesio, Sulfato de zinc, Sulfato
de hierro, Sulfato de manganeso) seguido de esto, la adición de Estiércol fresco, melaza,
leche y boro.

Después de agregar el último insumo (en el orden propuesto) se agrega agua hasta
completar 180 litros, se tapa herméticamente el recipiente y se deja fermentar, por 15 días
en clima cálido ó 20ºC en clima frío.

Por último, el modo de preparación fue una dilución de 1lt de Caldo Súper Cuatro en 20 lt
de agua; seguido de esto se aplicaron las dosis en forma líquida para cada una de los
tratamientos evaluados según su dosificación (100ml, 200ml y 300ml); la frecuencia de
aplicación fue cada 8 días hasta el inicio de la cosecha. Debe tenerse la precaución de no
sobrepasar porque el caldo contiene elementos menores que aplicados excesivamente
causan toxicidad al cultivo.

Trasplante

A los cuarenta días de la siembra, se inició el proceso de llenado de contenedores, usando 60


canecas con una capacidad de 20 lit., en las cuales se agregó una mezcla de suelo que contenía 5
bultos de Compost Biofort de 50Kg cada uno, mezclados con 2 ½ de cascarilla quemada, siendo
la cantidad suficiente para llenar 60 canecas con una capacidad de 20lit.

Una vez llenadas las canecas se trasplantó el fríjol: 1 plántula por caneca por método de siembra
directa en donde se abrieron pequeños huecos de 5cm de profundidad para cada una de las 60
plántulas. El área que ocupan las 60 canecas es de 1m2 dentro de la UICAU (Unidad Integral
Comunitaria de Agricultura Urbana) en donde se inició el proceso de medición de variables.

Medición de variables

Las variables determinadas son tasa de crecimiento (Variable 1) y rendimiento (Variable2). Para
llevar a cabo la medición de variables, en la evaluación de los tres fertilizantes orgánicos a dosis
diferentes, se hicieron diez tratamientos correspondientes a:

¾ Tres niveles por tratamiento con fertilizante Té de Compost adecuado a los tratamientos
(T1-T2-T3).
¾ Tres niveles con fertilizante Té de Humus de lombriz (T4-T5-T6).
¾ Tres niveles con fertilizante Caldo Súper Cuatro (T7-T8-T9).
¾ Un nivel sin fertilizante. Tratamiento Control (T10).

Para cada fertilizante se utilizaron tres dosis de 100ml, 200ml y 300ml correspondiente a los tres
niveles pertenecientes a cada uno de los fertilizantes; todos los niveles de evaluación presentaron
repeticiones de 6 plántulas/tratamiento (Figura 2).
Para la tasa de crecimiento se realizaron mediciones en las variables número de foliolos (V 1.1)
y longitud aérea de la planta (V.1.2).

Para el rendimiento se realizaron mediciones en las variables de peso seco total de las vainas
(V2.1), peso seco final de las semillas de fríjol colectadas (V2.2) y número de vainas (V2.3).

El tiempo de medición de las variables se presenta en la Tabla 5.

Tabla 5. Medición de Variables.


Variables Frecuencia de medición
8 días después del trasplante a
V1.1 Número de foliolos contenedor caneca definitivo, con una
periodicidad de cada 15 días hasta el
V1.2 Longitud aérea inicio de la cosecha.
V2. 1 Peso seco total de
las vainas
V2.2 Peso seco Se realizaron las mediciones al final de la
final/semillas colectadas cosecha
Inicio del proceso de desarrollo de las
vainas, con una periodicidad de cada 15
V2.3 Número de Vainas días hasta el inicio de la cosecha
(Fuente: propia)

Durante la etapa de medición de variables en contenedor definitivo, las condiciones medio


ambientales fueron inicialmente para los primeros 60 días, temperaturas altas entre los 20° a
28°C (pie de página fuente); durante estos días se realizaron riegos (cantidad de agua
aproximada, como se hacía?)cada dos días durante las horas de la mañana. Después de esto, los
60 días siguientes se presentó un clima lluvioso con temperaturas bajas entre 10° y 12°C, por lo
que los riegos se realizaron cada 6 días durante las horas de la mañana.
Diseño Experimental

La fase de campo desde la siembra directa a contenedor definitivo duró 120 días desde el 19 de
noviembre de 2009 hasta el 19 de marzo de 2010, correspondiente al inicio de la cosecha. El
diseño experimental utilizado en el proceso de evaluación del estudio, es un ANOVA de dos vías,
formando un arreglo experimental de 3X3 (3 Fertilizantes X 3 Dosis); de la misma manera se
realizó un ANOVA de una vía para comparar los fertilizantes y el control, formando un arreglo
experimental de 4X1 (4 tratamientos correspondientes a 3 fertilizantes y el control X Dosis),
para cada una de las diferentes dosis establecidas; después de realizar el ANOVA de dos vías se
efectuó la prueba de Tukey para saber entre que fertilizantes se presentaron las diferencias
significativas, por último, se realizó la prueba de Spearman para medir la correlación entre la
variable tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol.

Figura 2. Diagrama de los tratamientos utilizados. (Fuente: propia)


Resultados y discusión.

Efecto de los fertilizantes sobre la tasa de crecimiento.

Para la medición de la tasa de crecimiento en el cultivo de fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var.


Cerinza, se tomaron datos del crecimiento expresados en número de foliolos y longitud aérea.
Los resultados arrojados de la aplicación de los fertilizantes orgánicos sobre el número de
foliolos se presentan en la tabla 6. El análisis de varianza mostró que existen diferencias
significativas entre los fertilizantes evaluados (1,8%), siendo las plantas pertenecientes al
fertilizante te de humus de lombriz, las que presentaron un número mayor de foliolos hacia el
final del muestreo, seguido de los tratamientos a los que se les aplicó el fertilizante caldo súper
cuatro y té de compost respectivamente.

Esto podría explicarse debido a que el fríjol es una planta que tiene altos requerimientos
nutricionales, principalmente necesita para su crecimiento y desarrollo altas cantidades de
nitrógeno potasio y fósforo y en menor cantidad de elementos como lo son calcio y magnesio
entre otros (Hernández, 2009). Al respecto, según el análisis físico-químico, el té de Humus de
lombriz, presentó un porcentaje mayor de nitrógeno (2,37%), potasio (155 p.p.m) y fósforo (14,9
%), en comparación con la composición química de los fertilizantes Té de Compost y Caldo
Súper Cuatro (figura 3); por lo que, la presencia de altas cantidades de elementos esenciales de
fácil traslocación en la planta de fríjol, pueden haber inducido un rápido y fácil transporte de
nutrientes, actuando sobre las primeras etapas de crecimiento; concordando con Canellas &
Facanha (2004) en que, el uso del humus de lombriz en cultivos agrícolas, hace que las plantas
tengan un elevado contenido de carbohidratos estructurales y materia orgánica que confiere una
mejor estructura a nivel de porosidad del sustrato, a su vez sirve de sostén para la planta, lo que
permite el intercambio de aire, facilita la absorción de agua favoreciendo la obtención de
nutrientes y en consecuencia, el crecimiento del fríjol.

Para las plantas a las que se les aplicó fertilizante orgánico y las que estuvieron en condiciones
típicas de cultivo (control), el análisis de varianza presentó una diferencia significativa (7,6%);
siendo el té de humus de lombriz el que obtuvo mayor número de foliolos (X=22.92), seguido del
fertilizante té de compost (X=17.33)y caldo súper cuatro (X=16.56) respectivamente, frente al
control que obtuvo (13); lo cual podría explicarse con lo planteado por Álvarez et al (2007)
quien menciona que los fertilizantes orgánicos son suplementos nutricionales que favorecen el
crecimiento y rendimiento de los cultivos agrícolas, a través de la disponibilidad de altos niveles
de nutrientes en el suelo que no son fácilmente asimilables por la planta en condiciones de
fertilidad natural. Sin embargo otro factor que puede haber influido en los resultados, es la
composición del sustrato que fue utilizado en el estudio, ya que según los análisis físico-químicos
realizados, el suelo presentó niveles muy bajos (0,79) de nitrógeno, causando un crecimiento bajo
en las plantas de fríjol a las que no se les aplicó fertilizante, este comportamiento coincide con lo
dicho por Richard (2004), quien dice que las plantas de fríjol que presentan deficiencia en
niveles de nitrógeno, presentan un menor crecimiento, causando síntomas de deficiencia en el
follaje y problemas de clorosis general, especialmente en las hojas más antiguas.

Otro elemento esencial que presentó bajos niveles en la composición del suelo fue el potasio
(14,58 meq/100g), causando a las plantas que no se les aplicó fertilizante, problemas en
estructuras como el tallo y las hojas, a través de la pérdida de su versatilidad por acción del
viento y la lluvia.

En contraste, no hubo diferencia significativa entre las dosis aplicadas para cada uno de los
fertilizantes utilizados sobre el número de foliolos de las plantas de fríjol, como se aprecia en la
figura 3. Esto podría explicarse ya que las diversas concentraciones de nutrientes en las dosis de
los fertilizantes, presentaron un rango similar en el aporte de nutrientes requerido por el fríjol, lo
que concuerda lo dicho por Salas & Ramírez (2001), quien señala que, cuando se presentan
diferentes dosificaciones en los fertilizantes orgánicos, inicialmente las plantas absorben
preferiblemente nutrientes esenciales para suplir los requerimientos mínimos del cultivo, lo que
conduce a un equilibrio nutricional, es por esto que al presentarse dosis mínimas de fertilizante, el
aprovechamiento máximo de estos se debe a la variabilidad de nutrientes que presente el
fertilizante orgánico, de la misma manera al exhibir dosis medias o altas de nutrientes, estos son
aprovechados de una forma similar, supliendo únicamente el requerimiento mínimo que
presenten las plantas, por lo que la variabilidad de nutrientes, es fundamental durante las
diferentes etapas de crecimiento y desarrollo en el que se encuentren las plantas.

A demás de esto, Scialabba & Hattam, (2003) , dice que el comportamiento de los fertilizantes
orgánicos en estado líquido, es homogéneo, debido a que existen muy pocas posibilidades de
ejercer un control sobre la dosificación, ya que los diversos nutrientes se distribuyen de una
manera equivalente debido a que el agua es un solvente que hace que las concentraciones de
elementos esenciales sean similares para el contenido total del fertilizante, por lo que éstas, están
a disponibilidad de ser absorbidas en la concentraciones que sean requeridas por la planta.

Otra razón quizá, puede obedecer a la textura del sustrato, siendo un (75,8% arenosa, 11%
arcillosa, 13,2% limosa); que al ser en su mayoría arenoso, es pobre en nutrientes minerales, con
una baja tasa de almacenamiento de agua y tampoco retiene bien los nutrientes minerales que
necesita las plantas, ya que la lluvia y el riego los lava de la zona de las raíces (Dourado, 2007),
es por esto que al presentarse estas características en el sustrato utilizado y de la misma manera al
aplicar fertilizantes de forma líquida sobre el sustrato, posiblemente afecto la diferencia del
efecto entre las dosis evaluadas de los fertilizantes orgánicos.

El comportamiento general del crecimiento representado por el aumento en el número de foliolos


para la totalidad de los tratamientos, fue sigmoidal (Taiz & Zeiger, 2007). Ya que presentó una
fase logarítmica en la que el número de foliolos aumentó de forma exponencial con una rapidez
media pero continua de crecimiento en los días 15 al 45; después siguió una fase lineal en la que
exhibió un aumento constante y una rapidez máxima en el número de foliolos para los días 60 al
105; por último se observó una etapa de senescencia en la que existió una velocidad decreciente
del número de foliolos a medida de que la planta alcanzó su etapa de madurez.

Tabla 6. Número de Foliolos del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza


Té de Humus de
Té de Compost Caldo Súper Cuatro Lombriz
Control
Días de T1 T2 T3
muestreo 100ml 200ml 300ml 100ml 200ml 300ml 100ml 200ml 300ml
15 1,00 0,83 1,66 1,00 0,83 0,66 2,33 2,00 2,66 1,00
30 3,00 3,16 2,66 2,83 3,16 3,33 3,66 4,00 3,66 2,83
45 4,33 4,00 4,50 4,33 5,50 6,66 6,16 6,66 6,00 3,66
60 7,00 5,00 7,00 6,00 7,00 9,00 8,00 10,00 10,00 5,00
75 9,66 7,00 9,00 7,33 8,83 11,16 11,50 14,66 12,16 6,83
90 12,16 8,83 10,16 8,50 9,00 11,50 11,00 14,50 12,00 7,00
105 15,66 12,33 16,33 13,50 15,83 14,66 18,50 22,50 20,83 12,16
120 16,17 13,50 16,83 14,33 16,66 15,33 19,16 23,33 22,16 13,00
135 18,00 15,00 19,00 15,45 17,77 16,45 20,56 25,20 23,00 13,00
(Fuente: propia)

30

25

20
Número de foliolos

15

10

0 20 40 60 80 100 120 140 160

Tiempo (días)
T1 (100mL) Te de compost
T1 (200mL) Te de compost
T1 (300mL) Te de compost
T2 (100mL) Caldo Súper Cuatro
T2 (200mL) Caldo Súper Cuatro
T2 (300mL) Caldo Súper Cuatro
T3 (100mL) Te de humus de lombriz
T3 (200 mL) Te de humus de lombriz
T3 (300mL) Te de humus de lombriz
Control

Figura 3. Número de foliolos del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, registrados en cada
tratamiento y a distintas dosis. (Fuente: propia)

Los resultados arrojados de la aplicación de los fertilizantes orgánicos sobre los tratamientos
evaluados y el comportamiento presentado para la variable longitud aérea, se observan en la
tabla 7. El análisis estadístico mostró que entre los tres fertilizantes evaluados existen diferencias
significativas (1,7%). Las plantas a las que se les aplico fertilizante té de humus de lombriz
alcanzaron una mayor longitud aérea en los tres tratamientos evaluados, superando la altura
alcanzada en los tratamientos a los que se les aplico los fertilizantes caldo súper cuatro y té de
compost. Esto se debe a que el humus de lombriz fue uno de los fertilizantes más completo a
nivel de elementos esenciales como el nitrógeno y el fosforo, los cuales son importantes para el
crecimiento de la planta; en el caso del nitrógeno, según Cortés et al, (2005) facilita el
crecimiento y estabilidad del tallo durante el ciclo de vida de la planta ; mientras que altas
cantidades de fósforo asimilable en el suelo pueden acelerar la madurez y provocar un
incremento en el crecimiento de la raíz y la parte aérea de la planta (Astudillo & Blair, 2008).

En los tratamientos a los que se les aplicó té de compost, té de humus de lombriz y caldo súper
cuatro respecto a los tratamientos que estuvieron en condiciones típicas de cultivo (control), no
se presentó diferencia significativa entre la longitud aérea de las plantas pertenecientes a estos
tratamientos; esto se puede explicar posiblemente debido a la variedad de fríjol que se manejo,
pues esta es de crecimiento secundario, arbustivo y determinado, lo que concuerda con lo dicho
por Rosales et al, (2008) quien dice, que en el fríjol de crecimiento secundario, la tasa de
crecimiento se representa en el número de ramificaciones que tiene en sus hojas compuestas, que
son trifoliadas, lo que indica que las diferencias del crecimiento en esta variedad radican
principalmente en la cantidad de ramificaciones de sus foliolos y no necesariamente en la
longitud aérea de la planta.

Según el análisis estadístico hecho a las dosis de cada uno de los fertilizantes, no se presentó
diferencia significativa, lo que indica que las dosis evaluadas en los fertilizantes tuvieron un
efecto similar sobre la longitud aérea de las plantas de fríjol, como se aprecia en la figura 4; este
comportamiento es similar al presentado por las dosis de los fertilizantes sobre el número de
foliolos, corroborando así, que el requerimiento nutricional de la planta en sus diferentes etapas
de crecimiento y desarrollo influye directamente sobre la absorción de diferentes cantidades de
nutrientes por parte del fríjol.

El comportamiento general de la totalidad de los tratamientos sobre la longitud aérea del fríjol,
fue un crecimiento sigmoidal (Taiz & Zeiger, 2007). Como se observa en la figura 4, se presentó
una fase logarítmica corta en las primeras etapas de crecimiento, aumentando la longitud aérea de
forma exponencial con una rapidez continua de crecimiento en los días 15 al 30; después siguió
la fase lineal en la que se presentó un aumento constante en la longitud aérea a una rapidez
mucho mayor que la inicial en los días 45 al 90; por último se observó una etapa de senescencia
larga debido a que la variedad de fríjol manejada presentó un crecimiento arbustivo determinado,
por lo que existió un comportamiento en la velocidad decreciente de la longitud aérea a medida
de que la planta alcanzó su madurez en los días 105 al 135.

Tabla 7. Longitud aérea (cm) del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza
Té de Humus de
Té de Compost Caldo Súper Cuatro Lombriz
Control
Días de T1 T2 T3
muestreo 100ml 200ml 300ml 100ml 200ml 300ml 100ml 200ml 300ml
15 10,31 8,53 7,61 8,71 8,53 7,98 7,1 7,61 6,56 6,9
30 12,28 12,73 13,7 13,4 15,15 13,85 13,43 15,43 12,46 13
45 16,8 14,58 14,83 15,58 15,8 13,93 14,83 17,3 15,18 11,2
60 18,3 16,5 15,9 17,6 18,3 17,6 18,4 21,2 20,5 16,9
75 20,83 18,16 17,66 20,16 21 22 22,33 25 26 21,33
90 21,9 19,9 18,8 21,8 22,6 23,6 24,3 26,8 27,6 23,2
105 22,7 21,5 19,6 22 23 24 25,8 27,9 28,9 23,9
120 24,3 22 20,7 21,3 22,6 23,7 26 28,4 29,5 24,7
135 25,2 23,1 21,5 22,5 23,4 24,9 27,3 29,4 30,6 25,7
(Fuente: propia) 
35

30
Tasa de crecimiento (cm)

25

20

15

10

5
0 20 40 60 80 100 120 140 160

Tiempo (días)
T1 (100mL) Te de compost
T1 (200mL) Te de compost
T1 (300mL) Te de compost
T2 (100mL) Caldo Súper Cuatro

T2 (200mL) Caldo Súper Cuatro


T2 (300mL) Caldo Súper Cuatro

T3 (100mL) Te de humus de lombriz


T3 (200mL) Te de humus de lombriz
T3 (300mL) Te de humus de lombriz
Control

Figura 4. Longitud aérea del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, registrados en cada
tratamiento y a distintas dosis de fertilizantes orgánicos. (Fuente propia)

Efecto de los fertilizantes sobre el rendimiento.

Para la medición del rendimiento en el cultivo de fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, se
tomaron datos de rendimiento expresados en peso seco total de vainas colectadas, peso seco final
de semillas colectadas y número de vainas. Los resultados arrojados de la aplicación de los
fertilizantes orgánicos sobre el peso seco total de vainas colectadas se presentan en la tabla 8. El
análisis de varianza mostró que existen diferencias significativas entre los fertilizantes
evaluados (1,3%), colocando al fertilizante té de humus de lombriz con un peso mayor de vainas
colectadas, seguido del fertilizante caldo súper cuatro y té de compost respectivamente; esto se
podría explicar en razón a que el fertilizante té de humus de lombriz presentó un mayor contenido
de fósforo (14,9%) elemento esencial en el potencial de rendimiento del fríjol, ya que al ser ésta
una planta fijadora de nitrógeno por excelencia, y tanto el fríjol como su Rhizobium simbiótico
necesitan este elemento; la fertilización con fósforo aumentaría el crecimiento radicular lo que
podría incrementar la captación de macro nutrientes, pues estos son comúnmente absorbidos
junto con micro nutrientes, favoreciendo así el rendimiento máximo del cultivo de fríjol (Roy et
al, 2006).

En los tratamientos a los que se les aplicó té humus de lombriz, té de compost y caldo súper
cuatro respecto a los tratamientos que estuvieron en condiciones típicas de cultivo (control), se
presentaron diferencias significativas entre el peso seco total de vainas colectadas de las plantas
de fríjol (figura 6); esto se debe principalmente a que los fertilizantes orgánicos actúan
directamente sobre el rendimiento del cultivo ya que aportan elementos esenciales que no se
encuentran comúnmente en el sustrato en condiciones típicas de cultivo, proporcionan un
contenido más variado de otros nutrientes, tendiendo a mejorar la estructura del suelo, evitando la
erosión, facilitando el crecimiento radical y contribuyendo a un mayor rendimiento del cultivo de
fríjol (Hollands, 2007).

Según el análisis estadístico hecho a los resultados obtenidos con las dosis de cada uno de los
fertilizantes, no se presentó diferencia significativa, debido a que las distintas dosis (100ml,
200ml, 300ml) tuvieron un efecto similar sobre el peso seco total de las vainas de fríjol (figura5).
Esto concuerda con los resultados obtenidos en la variable tasa de crecimiento, demostrando la
influencia que presenta el rango de requerimiento nutricional de la planta fríjol, sobre la
disponibilidad de nutrientes necesarios que se encuentran en los fertilizantes, llegando así, a una
absorción que llevé a un equilibro nutricional de la planta.
Tabla 8. Peso seco total de vainas colectadas del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var.
Cerinza

Té de Compost Caldo Súper Cuatro Té de Humus de Lombriz

Peso T1 T2 T3 Control
Seco
(g) 100ml 200ml 300ml 100ml 200ml 300ml 100ml 200ml 300ml

310,00 199,50 185,50 225,30 246,30 217,50 479,00 367,80 347,50 170,50

(Fuente: propia)

600

500

400
Peso seco (g)

300

200

100

0
Te de Compost 
Te de Compost Caldo     Caldo Súper 
Te de    Te de Humus       
Super Cuatro Humus de Lombriz     Control
3
                                         Cuatro           de lombriz 

Tratamientos
100 mL
200 mL
300 mL
Control

Figura 5. Peso seco total de las vainas del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, registrados
en cada tratamiento y a distintas dosis de fertilizantes orgánicos. (Fuente: propia)
Los resultados arrojados de la aplicación de los fertilizantes orgánicos sobre el peso seco final de
las semillas colectadas se presentan en la tabla 9. El análisis de varianza reveló que existen
diferencias significativas entre los fertilizantes evaluados (1,4%), colocando a las plantas que se
les aplicó el fertilizante té de humus de lombriz con un peso mayor de semillas colectadas, sobre
las plantas de los fertilizantes caldo súper cuatro y té de compost respectivamente. Esto podría
deberse a que el fertilizante té de humus de lombriz presentó un mayor contenido de nutrientes
minerales, entre los que se encuentra elementos importantes para el rendimiento del fríjol como
lo es nitrógeno (2,37%), fósforo (14,9%) y hierro (0,36 p.p.m). Al respecto, Montaño & Simosa.
(2002), aseguran que el humus de lombriz favorece el desarrollo radical en forma directa,
estimulando la producción de raíces y la absorción de nutrientes minerales en la planta del fríjol.
Esto mejora el movimiento del aire, el agua, y los nutrimentos; lo que permite incrementar el
crecimiento y la penetración radical, aumentando la capacidad de intercambio catiónico de los
suelos y asimilando de una forma más soluble los minerales que se encuentran en el sustrato.

Las concentraciones altas de nitrógeno en plantas de fríjol ayudan a que se presente un


desarrollo temprano de la planta, ya que es un compuesto esencial que está involucrado en el
desarrollo del fríjol (Keita, 2001). La presencia del fósforo en el fríjol aumenta el crecimiento
radicular lo que podría aumentar la captación de micronutrientes como hierro, pues este es
comúnmente absorbido junto con macro nutrientes entre los que se encuentra el nitrógeno
principalmente (Astudillo & Blair, 2008).

En los tratamientos a los que se les aplicó fertilizantes orgánicos respecto a los tratamientos que
estuvieron en condiciones típicas de cultivo (control), se presentaron diferencias significativas
(1,4%) entre el peso seco total de las semillas colectadas de las plantas de fríjol (figura 6); esto se
debe principalmente a que los fertilizantes orgánicos además de ser una fuente completa de
nutrientes para las plantas, aportan materia orgánica al sustrato, que para sustratos arenosos
como en el que se realizó el estudio, representa una mejora en las propiedades físicas, químicas y
biológicas; concordando con Calderón & Giraldo (2005), quienes afirman que el uso de
fertilizantes orgánicos, incrementan a través del aumento de los niveles de nutrientes minerales
disponibles para la planta, los niveles endógenos de giberelina, auxina y citocinina, lo cual genera
cambios en los procesos fisiológicos gobernados por estas fitohormonas; las mismas que
repercuten en una mayor floración, fructificación, tuberización y rebrote de hojas principalmente.

Según el análisis estadístico hecho a las dosis de cada uno de los fertilizantes, no se presentó
diferencia significativa entre las dosis aplicadas en cada uno de los fertilizantes utilizados, por lo
que las diferentes dosis 100ml, 200ml, 300ml, tuvieron un efecto similar sobre el peso seco final
de las semillas de fríjol. Esto concuerda el comportamiento presentado de las dosis para las
variables anteriores.

Tabla 9. Peso seco final semillas colectadas del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var.
Cerinza
Té de Humus de
Peso Té de Compost Caldo Súper Cuatro Lombriz
Control
Seco T1 T2 T3
(g) 100ml 200ml 300ml 100ml 200ml 300ml 100ml 200ml 300ml
243,00 105,60 100,10 143,70 159,80 120,60 394,00 280,90 263,80 89,40
(Fuente: propia)
350

300

250
Peso seco (g)

200

150

100

50

0
Te de Compost Caldo Super Cuatro Te de Humus de Lombriz 1
Te de Compost     Caldo Súper      Te de Humus       Control
                                         Cuatro           de lombriz

100mL Tratamientos
200mL
300mL
Control

Figura 6. Peso seco final/semillas colectadas del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza,
registrados en cada tratamiento y a distintas dosis de fertilizantes orgánicos. (Fuente: propia)

Los resultados arrojados de la aplicación de los fertilizantes orgánicos sobre el número de vainas
del frijol se presentan en la tabla 7. El análisis estadístico mostró que en los tres fertilizantes
evaluados existe una interacción entre los fertilizantes y sus dosis respectivas, dando así una
diferencia significativa del (3%); como se observa en la tabla 10, la dosis de 200ml del
fertilizante té de humus de lombriz alcanzó un mayor número de vainas, superando a la de 100ml
de té de compost (8,6) y la de 300ml de caldo súper cuatro (6,9), sin embargo todas las dosis
presentaron un número de vainas mayor al presentado por el control; lo que explica un
comportamiento multivariado entre las dosis de los fertilizantes, aunque se obtuvo una tendencia
similar del aumento en el número de vainas mayor que el presentado por el tratamiento control.

Se han presentado pocos registros que expliquen el comportamiento del número de vainas del
fríjol sobre su rendimiento, atribuyendo a la eficiencia de la planta para absorber y almacenar
nutrientes en la etapa media de desarrollo del fríjol, según Calderón & Giraldo (2005), elementos
como el nitrógeno, magnesio y fósforo aceleran el desarrollo de la planta y con él, la maduración,
lo que lleva a la formación temprana del número de vainas hasta la etapa de maduración final, es
importante aclarar que la formación del número vainas no indica necesariamente un llenado
similar de las mismas.

El comportamiento general de la totalidad de los tratamientos sobre el número de vainas del


fríjol, fue un crecimiento lineal prolongado figura 4; en el que se presentó una fase lineal
aumentando la longitud aérea de forma exponencial con un crecimiento constante en el número
de vainas en los días75 al 135, en el que se alcanzó la etapa de madurez del fríjol.

Tabla 10. Número de Vainas de fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza


Té de Humus de
Té de Compost Caldo Súper Cuatro Lombriz
Control
Días de T1 T2 T3
muestreo 100ml 200ml 300ml 100ml 200ml 300ml 100ml 200ml 300ml
75 0,83 0,83 2 1,33 1,33 2,83 1,33 2,33 0,83 1
90 2,33 1,33 2,66 1,33 1 2,83 2,33 4,16 1,16 2
105 3,5 3 3,66 2,16 3,5 3,83 2,66 5,33 2 2,3
120 7,16 4,16 4,33 2,83 4,5 5,83 4,83 7,5 2,66 2,33
135 8,4 5,3 5,6 3,75 5,7 6,9 5,9 9 3,7 3,2

(Fuente: propia)
10

8
Número de vainas

0
70 80 90 100 110 120 130 140

Tiempo (días)
T1 (100mL) Te de compost
T1 (200mL) Te de compost
T1 (300mL) Te de compost
T2 (100mL) Caldo Súper Cuatro
T2 (200mL) Caldo Súper Cuatro
T2 (300mL) Caldo Súper Cuatro
T3 (100mL) Te de humus de lombriz
T3 (200mL) Te de humus de lombriz
T3 (300mL) Te de humus de lombriz
Control

Figura 7. Número de Vainas del fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, registrados en cada
tratamiento y a distintas dosis de fertilizantes orgánicos. (Fuente: propia)

Los resultados finales del comportamiento de los tratamientos evaluados sobre las variables tasa
de crecimiento y rendimiento del fríjol Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza, se presentan en la
tabla 11. Estos resultados arrojaron la cuantificación del efecto presentado por cada uno de los
tratamientos evaluados, dando así como resultado al fertilizante té de Humus de lombriz, como el
fertilizante que presento un mayor efecto positivo sobre la tasa de crecimiento y rendimiento del
fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza; seguido del fertilizante té de compost, caldo súper
cuatro y el control respectivamente.
Por otra parte el análisis de correlación de Spearman arrojó que en los tratamientos evaluados
existe una correlación (1,62%) entre el comportamiento presentado en la variable tasa de
crecimiento (número de foliolos y longitud aérea) y la variable rendimiento (peso seco total de las
vainas, peso seco final semillas, numero de vainas) presentadas por el fríjol (Phaseolus vulgaris)
L. var. Cerinza. Esto podría deberse a que la tasa de crecimiento influye sobre el rendimiento
presentado por el fríjol, ya que si se presentan problemas en las etapas de crecimiento de la
planta, no se va a generar un buen desarrollo, lo que influye en el rendimiento del cultivo de
fríjol. Al respecto Rosales et al, (2008), afirman que los componentes morfológicos más
importantes en el rendimiento del cultivo de fríjol, son, el número de foliolos, número de vainas,
peso de las vainas y peso seco de las semillas; ya que son los mecanismos que presentan una
asociación significativa entre sus componentes que influyen en la expresión del comportamiento
que presenta el fríjol para su óptimo rendimiento.

Tabla 11. Comportamiento de los tratamientos sobre las variables evaluadas del fríjol.
Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza.
Té de
Té de Caldo súper
Variables evaluadas Humus de Control
Compost cuatro
lombriz
Número de
IM IM IA IB
Tasa de foliolos
crecimiento Longitud
IM IM IA IB
aérea
Peso seco
total de IM IM IA IB
vainas
Peso seco
Rendimiento final IM IM IA IB
semillas
Número de
IA IM IA IB
vainas

(Fuente: propia)
IA= Incidencia alta
IM= Incidencia
media
IB= Incidencia baja
Conclusiones.

El análisis e interpretación de los resultados de este estudio conducen a las siguientes


conclusiones:

Desde el punto de vista físico-químico, los tres biofertilizantes contienen una fuente variada de
elementos nutritivos esenciales para un equilibro nutricional de la planta, contribuyendo
positivamente a la tasa de crecimiento y rendimiento presentado por el fríjol (Phaseolus vulgaris)
L. var. Cerinza, pero se destaca principalmente el té de humus de lombriz el cual, por presentar
una alta concentración de macro elementos principalmente nitrógeno (N) y fósforo (P), ostentó el
mayor efecto positivo sobre la tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol.

Las tres dosis aplicadas en cada uno de los fertilizantes no afectaron el número de foliolos, la
longitud aérea, y el peso seco de las vainas en la planta de fríjol, sin embargo, se observó un
conducta multivariada entre las dosis de los fertilizantes, lo que originó que en los tres
fertilizantes evaluados existiera un comportamiento discontinuo en el efecto de las dosis sobre la
tasa de crecimiento y rendimiento del fríjol.

El fertilizante té de humus de lombriz representó una serie de ventajas, desde el punto de vista
físico, químico y biológico sobre el sustrato utilizado, aportando una serie de nutrientes
esenciales para un óptimo rendimiento del cultivo de fríjol, esto coincide, con el peso obtenido
en la variable peso seco final de semillas colectadas, donde se evidenció una diferencia 3 veces
mayor en el peso obtenido por las plantas a las que se les aplicó el tratamiento té de humus de
lombriz (X=312,9 gr), respecto a las plantas que estuvieron en condiciones típicas de cultivo
(89,40gr), lo que significa que el fertilizantes té de humus de lombriz puede ser una alternativa
auto sostenible que pueden implementar los agricultores urbanos en la ciudad de Bogotá.

Se presentó una correlación de 1,62% entre la tasa de crecimiento (número de foliolos y


longitud aérea) y el rendimiento (peso seco total de las vainas, peso seco final semillas, número
de vainas), lo que podría interpretarse como una interdependencia entre el comportamiento de las
variables evaluadas que presentaron las plantas de fríjol durante las etapas de crecimiento y
desarrollo.

Recomendaciones

El uso de fertilizantes orgánicos representa bondades físicas, químicas y biológicas sobre el


sustrato, debido a esto cada fertilizante puede utilizarse como suplemento en el aporte de
nutrientes para el cultivo de fríjol (Phaseolus vulgaris) L. var. Cerinza. Sin embargo con el fin de
aprovechar adecuadamente el potencial de estos biofertilizantes, se recomienda hacer estudios,
para asegurar una dosificación exacta que presente una mayor utilización de los nutrientes por
parte de las plantas a un menor costo de producción.

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