Dr. Rodríguez Gómez Profesor Titular de Universidad del Departamento de Patología Animal de la Universidad de Zaragoza Cirujano del Hospital Veterinario de Referencia Valencia Sur
En la electrocirugía se utilizan corrientes eléctricas de alta frecuencia con el fin de
cortar y/o coagular el tejido durante una cirugía. La electrocirugía ofrece numerosas ventajas como son: Ahorro de tiempo. Ausencia de sangrado. Buena asepsia. Fácil manipulación de los tejidos. La cicatrización tarda el mismo tiempo que las heridas quirúrgicas realizadas con bisturí.
La densidad de corriente o energía es un concepto fundamental que se debe
conocer y controlar para llevar a cabo una correcta técnica electroquirúrgica. Se define como la potencia total que llega al tejido por área de superficie. Esto quiere decir que, con una potencia determinada, la densidad de energía y el calor producido serán mayores cuanto menor sea el electrodo en contacto con el paciente. Por eso, cuanto menor sea la superficie de contacto entre el electrodo activo y el paciente, menor será la potencia necesaria para conseguir el calentamiento tisular. Así, para realizar incisiones debería elegir un electrodo fino, pero la placa de retorno debe ser amplia para dispersar la electricidad por su superficie, reduciendo la densidad de corriente y evitando el calentamiento tisular en ese punto.
En su equipo electroquirúrgico usted podrá elegir entre dos modos de
funcionamiento:, corte (“cut”) o coagulación (“coag”), con ello está seleccionando un tipo determinado de corriente eléctrica que produce una interacción específica con el tejido. No siempre que quiera cortar deberá accionar el pedal amarillo ni cuando quiera coagular el azul. Cuando usted elige el modo corte, el flujo de electrones (amperaje) aumenta, consiguiendo la rápida vaporización del agua intracelular. Si elije el modo coagulación se incrementa la fuerza (voltaje), por lo que la energía penetra más en el tejido desnaturalizando las proteínas. También es importante el contacto del electrodo con el paciente. Si no hay contacto íntimo se produce fulguración que libera mucha energía penetrando poco en el tejido. Si hay contacto la dispersión térmica es mayor, se produce la coagulación del tejido, incrementando la lesión tisular y la hemostasia. Cuando aplique el electrodo activo sobre otro instrumento, para realizar la coagulación en el tejido atrapado por el mismo, debe asegurarse de que dicho instrumento no contacta con otra parte del paciente para no producir lesiones secundarias no deseadas. Durante esta técnica es posible que el guante del cirujano se perfore como consecuencia del arco voltaico que se genera. Para evitar este riesgo lo primero que debe hacer es poner en contacto el electrodo activo con la pinza y después activar el generador. La potencia del equipo debe ajustarse al nivel en el que se consiga el efecto deseado con la mínima energía posible. La potencia dependerá del tamaño del paciente, del tipo de tejido y de su hidratación. Habrá que aumentar la potencia en animales grandes, tejidos con poca conductibilidad como la grasa y poco hidratados.
Las medidas de seguridad electroquirúrgica están enfocadas a minimizar los
posibles daños causados por la electricidad y otros peligros antes, durante y después del procedimiento en el que se utiliza energía de alta frecuencia. Puede haber combustión e incluso explosión si la chispa generada entra en contacto con sustancias inflamables como desinfectantes con base alcohólica o gases anestésicos. Puede producir graves quemaduras en la piel si la placa de retorno no está colocada correctamente y aumenta la densidad de energía. O también cuando la técnica no se realiza correctamente. El humo producido puede producir irritación ocular y/o respiratoria, e incluso trasmitir o inducir alguna patología. Es recomendable emplear mascarillas que filtren el humo así como aspiradores específicos. La activación inadvertida del generador puede provocar que el terminal activo produzca perforaciones de órganos huecos o hemorragia importante en órganos macizos o grandes vasos. Este riesgo es menor pero no nulo con los instrumentos bipolares.