Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Grado en Seguridad
Asignatura; Seguridad Física, Lógica, Electrónica y
de Personas
Todos estos procesos se pueden hoy controlar mediante el software aplicado, e incluso
utilizar las redes instaladas más comunes como las Ethernet, fibras ópticas e incluso la
red telefónica del edificio para transmitir las señales de vídeo.
Los sistemas de CCTV están conformados básicamente por una serie de cámaras de
tecnología CCD o ICCD fijas o con movimiento, ocultas o discretas y sus respectivos
monitores.
La función del conjunto formado por ópticas y cámaras consiste en generar la señal
eléctrica de vídeo, utilizable para su transmisión y visualización en los distintos
monitores. Para ello, es necesario que la escena, en el campo visual de la cámara, esté
suficientemente iluminada, ya sea natural o artificialmente, con lo que parte de la luz
[3]
incidente se reflejará hacia la óptica de la cámara. Ésta, a su vez, enfocará la luz hacia
un mosaico fotosensible, donde se convertirá en una señal eléctrica.
La señal eléctrica generada es enviada a través del sistema de transmisión hacia los
conmutadores de señal de vídeo que distribuyen dicha señal a los monitores. Entre éstos
y los conmutadores puede intercalarse el grabador de vídeo.
Es uno de los medios técnicos más empleados en los últimos tiempos en los Sistemas
de Seguridad más eficaces a nivel mundial.
Básicamente, los equipos de C.C.T.V. se componen de una ó más cámaras que captan
la imagen, la transforman en un tipo de energía para su transmisión (normalmente
eléctrica, aunque la señal se pueda transmitir en cualquier forma de energía conocida,
como fibra óptica, microondas etc.) y, una vez descodificada, se nos muestra en un
monitor donde un operador o vigilante observa perfectamente lo que ocurre, incluso a
varios kilómetros de distancia.
Los equipos de C.C.T.V, no son más que una prolongación de la vista del ser humano y,
como tal, debemos entenderlos y aprovecharlos.
Extensión del ojo humano: nos permite llegar a visualizar lugares que, por diversas
circunstancias o características, no pueden ser vistos o controlados con facilidad y
rapidez.
Ubicación en todo tipo de ambientes: su instalación puede llevarse a cabo en todo tipo
de ambientes.
[4]
Control de grandes zonas: ofrece, además, la posibilidad de que un único operador
pueda controlar simultáneamente enormes zonas, sin tener que desplazarse
físicamente.
2. Detección de presencia
C.C.T.V. con videosensor. Detecta, por un sencillo sistema de acotación de áreas dentro
de su campo visual, las variaciones de intensidad lumínica que se producen. Son
aparatos bastante fiables empleados en interiores, aunque no se deba desechar su uso
para exteriores.
[5]
Esta última opción queda desechada por la mayoría de los usuarios, debido a la fatiga
que crea en la persona el estar observando constantemente un monitor en el que,
además, “casi nunca pasa nada extraño”. Algunos Sistemas de Seguridad siguen este
método de visualización permanente, por parte del operador, empleando equipos de
varias personas y estableciendo turnos de media hora de vigilancia permanente y una
hora de descanso al menos. El gran problema que presenta es que se necesita una
plantilla enorme para trabajar con un solo equipo de seguridad. Hoy en día es un sistema
de trabajo cada vez menos utilizado, algo obsoleto, como veremos mas adelante.
3. Evaluación de alarmas
[6]
El dispositivo captador de imagen, hasta el año 1.985, consistía en un cilindro de cristal
en el que se había hecho el vacío, con un elemento calefactor en un extremo y en el otro
una superficie fotosensible de forma rectangular, escrutada mediante un haz de
electrones; según el diámetro del tubo se estandarizaron dos tipos:
Tubo Newicón, unas diez veces más sensible y mucho más resistente al grabado por
contrastes de luz (aconsejable para exteriores).
Tubo Ultricón, aún más sensible que el Newicón, pero con inferior resolución, extendía
su campo de visión al infrarrojo, permitiendo "ver sin ser visto" con ayuda de focos
adecuados.
Se fueron estandarizado sucesivamente tres formatos, cada uno de ellos con la mitad
de superficie sensible que el anterior, pero manteniendo la relación en sus lados de 4/3
(anchura/altura):
En general todos dan una buena resolución, con retículas de más de 500 x 500
elementos captadores de imagen (pixels), por lo que se está imponiendo el formato
pequeño, incluso para cámaras de alta resolución; su duración se considera
prácticamente ilimitada, su sensibilidad es muy alta, superior a la de los antiguos tubos
Ultricón, y algunas versiones permiten, como ellos, ver con luz infrarroja.
[7]
Con esta misma tecnología CCD aparecieron también cámaras en color para
aplicaciones en CCTV, con sensibilidades muy altas para ser de color (menos de 2 lux
en la escena, cuando las de tubo precisaban más de 200), que solucionan problemas
específicos en casinos, centros comerciales, vigilancia de procesos industriales en que
interviene el color, etc.
Así pues, la señal eléctrica suministrada por una cámara de TV. en circuito cerrado está
compuesta por la superposición de tres diferentes:
• Señal de vídeo
En Europa se emplea la norma CCIR, que implica trazar la imagen con 625 líneas y 25
veces por segundo; para color se usa el sistema PAL, con la misma base, de forma que
es compatible (pueden verse imágenes en blanco y negro provenientes de cámaras en
color).
Las cualidades operativas de la cámara CCD (Charge Couple Device), tales como su bajo
costo, facilidad de operación, durabilidad, tamaño, poco consumo de energía y alta
resolución, la han convertido en la cámara estándar para los sistemas de procesamiento
de imágenes y sistemas de visión.
Su misión consiste en reproducir sobre la pantalla del dispositivo captador, con la mayor
nitidez posible, las imágenes situadas frente a ella por medios exclusivamente ópticos,
exactamente igual que los objetivos de las cámaras fotográficas.
[8]
Todo objetivo viene determinado por tres parámetros:
Así, los objetivos con una distancia focal similar al formato de la cámara a la que están
acoplados abarcan un ángulo horizontal cercano al del ojo humano (30º) y se les
denomina normales (16 mm. en 2/3", 12 mm. en 1/2" y 8 mm. en 1/3"); los de distancia
focal inferior, que abarcan un ángulo mayor, se denominan gran angular, y los de
distancia focal superior, que amplían el tamaño del objeto, teleobjetivos.
La luminosidad, que nos indica la máxima cantidad de luz que puede transmitir un
objetivo, se expresa por un número adimensional que es el cociente entre su distancia
focal y el diámetro correspondiente a su apertura máxima; en Circuito Cerrado de TV.
son habituales los objetivos de luminosidad 1,4, e incluso los hay inferiores a 1.
De estos tres parámetros, el Formato y la Señal de Sincronismo Vertical son fijos, pero
la Distancia Focal puede variarse, como sucede en los objetivos de distancia focal
variable llamados zoom.
Ello nos introduce en otro tipo de parámetros, los dispositivos ajustables de un objetivo,
que son:
• Diafragma (o iris)
• Zoom
El foco: permite ajustar la distancia a la que se encuentra la figura que desea captarse,
a fin de que se reproduzca nítidamente en la pantalla del dispositivo captador;
habitualmente puede ajustarse desde 1 metro hasta el infinito.
[9]
El zoom: como ya hemos mencionado, permite variar la distancia focal de algunos
objetivos y con ello, modificar el ángulo abarcado; normalmente varían de un gran
angular (no muy potente) a un teleobjetivo, por ejemplo de 6 a 36 mm. (En el formato de
1/3"); considerar que en las distancias focales más largas el enfoque es bastante crítico.
Los otros dos parámetros, foco y zoom, requieren en muchos casos un ajuste constante,
por lo que suelen emplearse los objetivos zoom motorizados, que permiten controlarse
remotamente desde la Sala de Control.
Carcasas de protección
Cuando las cámaras de TV. tienen que aislarse de manipulaciones, o bien situarse en el
exterior o en locales de elevada temperatura o humedad, deben protegerse mediante las
adecuadas carcasas.
• Carcasa interior
• Carcasa antideflagrante
[10]
Pueden ser metálicas (generalmente de aluminio) o de diferentes materias plásticas,
aunque las de mayor resistencia se construyen de acero.
Las cámaras de vigilancia deben fijarse a paredes o techos, por lo que precisan de los
correspondientes soportes. Todo soporte de cámara o de carcasa dispone de una rótula
ajustable, de forma que una vez fijado a la pared pueda orientarla adecuadamente.
Cuando el campo que debe abarcar una cámara excede el que puede cubrir un objetivo
gran angular, o bien cuando debemos seguir al posible sujeto a vigilar, se hace necesario
disponer de un soporte móvil llamado posicionador, que puede ser de tres tipos.
Todo posicionador precisa a su vez un soporte, que en éste caso ya no será articulado,
aunque deberá tener mayor solidez para soportar el peso adicional; al aire libre puede
consistir en un poste anclado al suelo, con la correspondiente peana para atornillar la
base del posicionador, y para mucha altura se precisarán incluso torretas con tensores,
para una buena estabilidad.
Los elementos de un circuito cerrado de TV. que nos permiten reproducir las imágenes
captadas por las cámaras son los monitores.
[11]
Actualmente los monitores de tubo convencionales van desapareciendo dejando paso
a las pantallas TFT planas, Plasmas y L.E.D. al igual que lo hacen a nivel doméstico, las
cuales al disminuir su coste se van imponiendo, aunque describimos su funcionamiento
dado que existen muchas instalaciones donde aún están presentes los monitores de
TRC (Tubo de rayos catódicos)
Como las imágenes formadas en los monitores están constituidas por las mismas
líneas, es un error suponer que en un monitor mayor se verá mejor; el tamaño de pantalla
debe elegirse solamente en función de la distancia desde la cual se verán las imágenes.
No describiremos las pantallas TFT, led o plasmas dado que el funcionamiento interno
es complejo y nos distraería del objetivo principal, su aplicación en CCTV es similar.
La señal de vídeo que sale de la cámara debe llegar en las mejores condiciones posibles
al monitor o monitores correspondientes, para lo cual se emplean:
• Líneas de transmisión
• Amplificadores de línea
• Distribuidores de vídeo
Las líneas de transmisión deben ser capaces de transportar la señal de vídeo, que puede
alcanzar frecuencias de 8 MHz, con un mínimo de pérdidas, por lo que se utilizan
habitualmente cables de tipo coaxial, adaptados a la impedancia nominal del circuito
cerrado de TV. (75 ohmios).
[12]
Los amplificadores de línea se utilizan para elevar y compensar las pérdidas, sobre todo
en altas frecuencias, de la señal de vídeo, tanto para alimentar varios monitores "en
puente" (uno a continuación del otro), como para realizar transmisiones a mayor
distancia de la que permitiría la longitud de los cables coaxiales.
Por último, si una misma señal de vídeo debe dirigirse a varios receptores (monitores o
grabadores) y éstos se encuentran bastante alejados unos de otros, lo mejor es utilizar
distribuidores electrónicos de vídeo, con los cuales podemos obtener varias señales
iguales, manteniendo su máxima amplitud y sin las variaciones de impedancia que
inevitablemente se producen si los conectamos en puente; además, los distribuidores
pueden colocarse en el lugar más adecuado del edificio, lo que permite optimizar el
cableado.
Aunque debe tenerse en cuenta que para ello se precisan dispositivos tales como
conversores, transductores, módems o conjuntos emisor/receptor, adecuados a cada
caso.
Entre los medios utilizados destacan: red telefónica conmutada Standard, cable de
pares, líneas de alta tensión, etc.
[13]
Radiofrecuencia
Las bandas ELF, SLF, ULF y VLF se superponen al espectro de AF (audio frecuencia), que
se encuentra entre 20 y 20.000 Hz., aproximadamente. De todos modos, los sonidos se
mueven a la velocidad del sonido, en vez de moverse a la velocidad de la luz.
Los conectores eléctricos diseñados para trabajar con frecuencias de radio se conocen
como conectores RF. RF también es el nombre del conector estándar de audio/video,
también conocido como BNC (BayoNet Connector).
Elementos de control
Resulta evidente que con sólo los elementos captadores, transmisores y reproductores
ya podemos formar un circuito cerrado de TV., por ejemplo con una cámara, un cable y
un monitor; sin embargo, en la mayoría de los casos la instalación no es tan simple, y
son necesarios los elementos de control.
[14]
Pueden ser de dos tipos:
• Selectores de vídeo
Permiten seleccionar las imágenes provenientes de varias cámaras, tanto para dirigirlas
a un monitor determinado como a un grabador de vídeo. Estos selectores suelen dotarse
con dispositivos de conmutación automática, que reciben el nombre de secuenciales,
aunque siempre debe ser factible la selección manual.
Vídeo Switch
Los Swich actualmente se denominan también “QUAD” ya que van integrados en los
mismos para dividir la pantalla principal en cuadrantes. (De ahí su nombre) por lo que la
denominación al uso puede ser QUAD/SWICH.
[15]
3. Falta de atención al monitor o fatiga por parte del vigilante ocurre menos al
usarse un monitor simple.
Desventajas
3. Si hay alguna falla en el monitor simple ninguna toma podrá ser mostrada hasta
que sea reemplazado el mismo.
[16]
Para instalaciones muy complejas, o en aquellas en que se desee una gran flexibilidad
de explotación, son muy eficaces las matrices de conmutación de vídeo, que permiten
enviar la señal de cualquier cámara a cualquiera de sus salidas; son programables,
admiten selección por señales de alarma y en muchos casos ya incorporan dispositivos
para el telemando de las cámaras motorizadas; hay versiones que permiten su conexión
a teclados remotos, con la que se facilita la implantación de puestos de control
secundarios.
Videosensores
Una aplicación importante para vigilancia del circuito cerrado de TV. consiste en
incorporar al mismo los videosensores.
Si bien existen versiones muy simples (solo válidas para interiores) que procesan la
señal analógicamente, se están imponiendo los sistemas con procesado digital, que
permiten una precisión mucho mayor en el análisis de la señal; de estos existen
versiones para controlar interiores o exteriores de pequeño tamaño, y versiones de alto
nivel, que analizan más de 1000 puntos de la imagen y pueden vigilar perímetros de
grandes dimensiones, dentro del alcance visual de las cámaras.
Para obtener el máximo rendimiento es conveniente que las cámaras estén situadas en
cascada, es decir, que cada cámara abarque el ángulo muerto de la anterior, y que la
distancia entre ellas no exceda los 60 metros.
El mecanismo Tilt / Pan permite rotar e inclinar la cámara en una dirección especifica.
Esta plataforma electromecánica está disponible para cámaras con diferentes pesos,
para lugares internos o externos, etc. Están diseñados para operar en modo manual o
automático, usando una palanca de control remota montada en una consola de control.
[17]
Producen una copia de cualquier escena, ya sea que sé este tomando o que haya sido
grabada por el VCR, utilizando papel térmico u otro tipo de papel sintético. Este tipo de
copia (o fotografía) es muy requerido como evidencia en las cortes como una
herramienta para resolver casos de robos o cualquier hecho delictivo que se haya
cometido.
Hace más de 25 años que existen los sistemas de vigilancia por video, al principio su
sistema de funcionamiento era 100% analógico y poco a poco se han ido digitalizando
hasta el día de hoy, donde podemos comprobar que se ha avanzado mucho desde la
aparición de las primeras cámaras de tubo conectadas a un VCR.
Uno de los cambios en su evolución que has sufrido la video vigilancia, ha sido la
introducción del “video en red” el cual ha revolucionado en muchos aspectos estos
sistemas. La video vigilancia a través de IP ofrece importantes ventajas, como video
inteligente, mejor escalabilidad, una gestión de eventos completa y una calidad de
[18]
imagen muy superior, incluso en muchos casos un menor coste de propiedad. Aun así
sería demasiado apresurado afirmar que esta evolución de los sistemas haya dejado ya
completamente obsoletos e inutilizados los sistemas analógicos de circuito cerrado de
televisión.
Se puede pensar que este cambio tecnológico obliga a los Directores de Seguridad a
elegir apresuradamente entre ambos sistemas, CCTV por IP (digital) o CCTV analógico,
afirmar esto es un error. En realidad, ambos sistemas pueden combinarse entre sí,
pudiendo de este modo conservar y aprovechar las inversiones realizadas anteriormente
y disfrutar al mismo tiempo de los beneficios de los sistemas IP, dejando el sistema
preparado para futuras ampliaciones tecnológicas, la solución: Los servidores de video,
también llamados “codificadores de video”
SERVIDORES DE VIDEO.
Sin embargo, para aprovechar el potencial y beneficios de la IP, los requisitos mínimos
de un SV son elevados. Si en la elección del mismo acertamos, un Servidor de Video
puede conseguir que un sistema dotado de cámaras analógicas ofrezca muchas de las
características y funciones en un principio reservadas paras sistemas digitales bajo IP.
Un Servidor de video nos ofrece varias funcionalidades avanzadas, como puede ser la
detección de movimiento, gestión de eventos, audio integrado, alarma contra su
[19]
manipulación no autorizada. Pudiendo además ofrecernos la base de programación
para otras utilidades como el conteo de personas o reconocimiento de matrículas.
El alcance y las funcionalidades de los DVR han ido evolucionando con el tiempo. A
pesar de ello, sólo han llegado a ofrecer una pequeña parte de los beneficios que se
pueden obtener de los sistemas de vídeo en red en toda regla. Con los DVR, el vídeo aún
se almacén en equipos patentados, por lo que integración con el siempre creciente
mercado de las aplicaciones para la gestión de video y red se convierte en todo un reto.
Las funcionalidades de los DVR han evolucionado con el tiempo, aunque no han llegado
a ofrecer todos los beneficios que se pueden obtener de los mismos, en estos sistemas
de DVR el vídeo se almacena generalmente en sistemas operativos propios del
fabricante, por lo que la integración de los sistemas en un mercado creciente de
aplicaciones para la gestión de video en red se convierte en todo un reto difícil de
[20]
superar, obligando en muchos casos a cambiar más componentes del sistema de lo
realmente necesario.
Fuente: http://tucsegur.es/al
Fuente: http://tucsegur.es/al
[21]
Un sistema CCTV analógico usando un DVR (grabador de vídeo digital) es un sistema
analógico en el que integramos una grabación digital. En un DVR, la cinta de vídeo
desaparece sustituyéndose por un disco duro (HD) para el almacenamiento del video
grabado, por tanto, es necesario que el vídeo se digitalice y comprima para almacenar
la máxima cantidad de imágenes posibles de la jornada. Los primeros DVR tenían un
espacio de disco duro muy limitado, por tanto, o se utilizaba una velocidad de imagen
inferior o la duración de la grabación era muy corta.
[22]
Fuente: http://tucsegur.es/al
Algunos sistemas pueden monitorizar tanto vídeo grabado como en directo, mientras
otros sólo pueden monitorizar el vídeo grabado. Además, algunos sistemas exigen un
cliente Windows especial para monitorizar el vídeo, mientras que otros utilizan un
navegador web estándar, lo que flexibiliza la monitorización remota.
Hay sistemas que pueden monitorizar video grabado y video en directo al mismo tiempo,
otros solamente pueden monitorizar el video grabado. Respecto a los sistemas
utilizados para el visionado algunos exigen un cliente Windows especial para su
monitorización, aun se está imponiendo en la mayoría un navegador web estándar, lo
que facilita mucho la monitorización remota.
[23]
Este sistema añade las ventajas siguientes:
Fuente: http://tucsegur.es/al
Una cámara IP combina una cámara y un ordenador en una unidad, lo que incluye la
digitalización y la compresión del vídeo así como un conector de red. El vídeo se
transmite a través de una red IP, mediante los conmutadores de red y se graba en un PC
estándar con software de gestión de vídeo. Esto representa un verdadero sistema de
vídeo IP donde no se utilizan componentes analógicos.
Una cámara IP, es una combinación de una cámara y un pequeño ordenador dentro de
un mismo componente, por ello permite la digitalización, compresión del video y
disponer de un conector de red en una misma unidad. El video se transmite por la red IP
mediante los Switch de red y la grabación de realiza en un PC estándar dotado de un
Software específico para la gestión del video, en estés sistema ya no se utilizan
[24]
componentes analógicos, incluido el cable coaxial del que se prescinde dado que
solamente utilizaremos la Red.
Fuente: http://tucsegur.es/al
Este esquema muestra un sistema de vídeo IP. La información del vídeo se transmite a
través de una red IP, utilizando cámaras IP. Este proporciona una calidad de imagen
constante desde la cámara hasta la ubicación donde se encuentre el operador con el PC
dotado del software adecuado, incluso posibilita el acceso desde cualquier PC con las
credenciales adecuadas pre concedidas, aunque se desaconseja esta posibilidad para
evitar vulnerabilidades del sistema en según que instalaciones
6.- BIBLIOGRAFIA
AYMERICH LOBO, J. I., FERNÁNDEZ ISLA, G., GARCÍA ARANDA, M. y ITURMENDI MORALES, G.
Gerencia de riesgos y seguros en la empresa, Editorial MAPFRE, Madrid. 1998.
[25]
BECK, U, “Teoría de la sociedad del riesgo”, en Josexto Beriain (comp.), Las consecuencias
perversas de la modernidad. Modernidad, contingencia y riesgo, Anthropos,
Barcelona,1996,
BESTARD, J, “Prólogo”, en Mary Douglas, La aceptabilidad del riesgo según las ciencias sociales,
Paidós Studio, Barcelona, 1996.
CARDONA, O.D. “Estimación Holística del Riesgo Sísmico utilizando Sistemas Dinámicos
Complejos” Universidad Politécnica de Cataluña, Barcelona. 2001.
CASARES SAN JOSÉ-MARTÍ, I. “La necesidad del control interno en las empresas: gerencia de
riesgos”, La Gaceta de los Negocios, 22/05/07, Madrid. 2007.
DAMMERT, L. Ciudad y seguridad: más allá de la dicotomía entre prevención control. Actas del
congreso Ciudades, urbanismo y seguridad, 2007.
DOUGLAS, M, La aceptabilidad del riesgo según las ciencias sociales, Paidós Studio,
Barcelona.1996.
GARCÍA AÑÓN, J, BRADFORD, B, GARCÍA SÁEZ, J A, et. al. Identificación policial por étnico racial
en España. Informe sobre experiencias y actitudes en relación con las actuaciones
policiales. Valencia: Tirant lo Blanch, 2013.
GOMEZ MARTÍN, «Libertad, seguridad y sociedad del riesgo», en La política criminal en Europa,
(dir. MIR/CORCOY), Atelier, Madrid, 2004.
[26]
GONZALO JAR, Couselo, Modelos Comparados de Policía, Ministerio del Interior, Dykinson,
Madrid. 2000.
LANDROVE DÍAZ, G., «El Derecho penal de la seguridad», en Diario la Ley, 2003.
LUHMANN, N, “El concepto de riesgo”, en Josexto Beriain (comp.), Las consecuencias perversas
de la modernidad. Modernidad, contingencia y riesgo,Anthropos, Barcelona. 1996,
LÓPEZ-NIETO Y MALLO, F., Seguridad ciudadana y orden público, Ed. El Consultor de los
Ayuntamientos y de los Juzgados, Madrid, 1992.
[27]
MASKREY, A. “Comunidad y desastres en América Latina: estrategias de intervención”, Viviendo
en riesgo: comunidades vulnerables y prevención de desastres en América Latina, Allan
Lavell (Ed.), LA RED, Tercer Mundo Editores, Bogotá. 1994.
MASKREY, A (comp.), 1993, Los desastres no son naturales, LA RED-Tercer Mundo Editores,
Bogotá.
MEDINA ARIZA, J., «Discursos políticos sobre seguridad ciudadana en la historia reciente de
España», en: PÉREZ ÁLVAREZ, F. (Ed.). Serta. In memorian Alexandri Baratta, Universidad
de Salamanca, 2004.
NORMA ESPAÑOLA UNE-ISO 31000 (2009): Gestión del riesgo. Principios y Directrices. Traducido
por AENOR (Asociación Española de Normalización y Certificación.
PLA BARNIOL, C., «Orden y seguridad: una antología», Revista Cuadernos de Trabajo Social, nº 7,
1994.
PIRIS PERPÉN, J. «La prevención del delito y la seguridad ciudadana», en Revista Policial, nº 38,
1996.
PAREJO ALFONSO, L./DROMI, R., Seguridad pública y Derecho administrativo», Ed. Marcial Pons,
Madrid, 2001.
PUTTER Citado por Julio ARAGON RUIZ, "Origen y desarrollo de la institución policial",Ciencia
Policial, Ministerio del Interior, Madrid, número 11,
SANZ MULAS, N., «La actual política criminal en España», en Revista Politeia, Institu Superior de
Ciencias Policias e Segurança Interna, Año I, nº 1, Enero/Junio 2004.
STEVE PARDO J. E, Técnica, riesgo y Derecho. Tratamiento del riesgo tecnológico en el Derecho
Ambiental , Ariel, Barcelona, 1999,
[28]
STEVE PARDO J. E, «De la policía administrativa a la gestión de riesgos», Revista Española de
Derecho Administrativo, núm. 119, 2003,
WILCHES-CHAUX, G, “La vulnerabilidad global”,en Andrew Maskrey (comp.), Los desastres no son
naturales,LA RED-Tercer Mundo Editores, Bogotá, 1993
[29]