DEMOCRACIA

Sistema político que defiende la soberanía del pueblo y el derecho del pueblo a
elegir y controlar a sus gobernantes.

DEMOCRACIAS VS TOTALITARISMOS

Autocracia. Régimen político en el que una sola persona gobierna sin someterse a ningún tipo
de limitación y con la facultad de promulgar y modificar leyes a su voluntad.

ABSOLUTISMOS Y TOTALITARISMOS

El absolutismo y el totalitarismo son dos formas de gobierno muy similares entre sí

(No existe división de poderes), pero ubicadas en tiempos diferentes y con algunas
diferencias ideológicas y prácticas importantes.

- El absolutismo es propio de la época del Antiguo Régimen y se ha conocido

principalmente en los países europeos de España, Francia y Reino Unido. Según
el absolutismo el rey ha recibido su cargo por poder divino, por lo que su
posición y privilegios son incuestionables. El rey ejerce el poder judicial,
legislativo y ejecutivo en su persona, distribuyendo tareas únicamente a cargos
de la nobleza situados en un nivel social inferior al suyo. El rey no tiene
 ninguna obligación y todas las relaciones en el reino las realiza en función de
derechos.
- El totalitarismo también es una forma de gobierno en la que están
centralizados todos los poderes de un estado, pero esta vez en un único
partido político, normalmente dirigido por un líder. En este partido único sí
hay distintos niveles de autoridad, que se organizan jerárquicamente, si bien el
líder, presidente o similar mantiene tan pocas obligaciones como el rey del
absolutismo. Como características del totalitarismo encontramos movilizaciones
ideológicas de masas, para mantener a la sociedad sometida a las doctrinas del
estado, un uso desproporcionado e intensivo de la propaganda estatal y
mecanismos de control y represión activos constantemente. Los estados basados
en el totalitarismo más famosos han sido los liderados por Stalin (Unión
Soviética) y Hitler (Alemania).

ABSOLUTISMO (monarquías absolutistas) VS DESPOTISMO ILUSTRADO

Sabemos que el lema del Absolutismo (Luis XIV) fue “El Estado soy YO” y el del
Despotismo Ilustrado “Todo para el pueblo, pero sin el pueblo”.

- En el Absolutismo el poder estuvo concentrado en manos de una única persona,

el gobernante o monarca, y su poder era de origen divino, por lo que nadie era
capaz de revelarse; los mejores ejemplos fueron Luis XIV de Francia y Felipe V
de España.
- Por su parte, el Despotismo Ilustrado fue la actualización de la situación que se
vivió con el Absolutismo. Sus principales representantes fueron, entre otros,
Luis XVI de Francia, Carlos III en España, Federico II en Prusia y Catalina II en
Rusia.6

Finalmente, estos dos sistemas acabaron en un desastre; por un lado, murieron algunos
gobernantes del Absolutismo en manos del pueblo, y el Despotismo se volvió
insostenible cuando la burguesía reclamó protagonismo político y las clases populares
reclamaron justicia social en contra del sistema estamental, surgiendo un drástico
cambio… la Revolución.

MONARQUÍA VS REPÚBLICA

Los sistemas de gobierno siempre han generado debate y controversia. La república y

la monarquía son dos modelos políticos opuestos.

- Existen varios tipos de monarquías, pero en todas ellos el Jefe de Estado es un

Rey o Monarca, que ostenta su autoridad de forma hereditaria. Es decir, de
padre a hijo sin que intervenga la voluntad del pueblo. En la monarquía el
reinado es vitalicio a excepción de que el rey abdique por motivos personales.
- Por su parte, en las repúblicas no existe la figura del monarca como tal. Es una
forma de gobierno en la que las personas o sus representantes poseen el poder
supremo. Esto es, el Jefe de Estado es un Presidente que debe ser elegido
 democráticamente por el pueblo. En las repúblicas, los presidentes son electos
por un periodo determinado, que por lo general ronda los 4 o 6 años.

En las monarquías absolutistas, el rey controla los tres poderes: ejecutivo, legislativo y
judicial; sin embargo, en las repúblicas esos poderes son independientes. El ejecutivo y
legislativo son elegidos por votación popular, mientras que el poder judicial lo
establecen los miembros del gobierno.

La monarquía se diferenciaría de la tiranía y del despotismo, porque en estas dos formas

el poder sí está en manos de una persona pero lo ha adquirido de forma ilegal y lo
practica de manera arbitraria.

Francia, Estados Unidos o Rusia son países regidos por gobiernos republicanos,
mientras que Reino Unido o Emiratos Árabes se rigen por monarquías. España, por
ejemplo, cuenta en la actualidad con una monarquía parlamentaria en la que el rey
ejerce la función de Jefe de Estado bajo el control del parlamento y gobierno.

MONARQUÍA PARLAMENTARIA Y CONSTITUCIONAL

En una monarquía parlamentaria el rey realiza funciones de jefe de Estado, pero

bajo el control de los poderes legislativo (Parlamento) y Ejecutivo (Gobierno). Por
decirlo de alguna manera, el rey reina, pero no gobierna. Son los otros órganos
mencionados los que regulan el funcionamiento del territorio, definiendo e incluso
limitando, en caso necesario, las tareas del propio monarca.

Por aclarar, en las monarquías parlamentarias son los Gobiernos y las cámaras
quiénes tienen el poder. Es en éstos en los que se deposita la soberanía popular, si bien
el rey conserva un papel destacado y goza de algunos privilegios: mantenimiento
económico de él y de su familia, inmunidad jurídica, etc…

Aunque muchas veces se tiende pensar que una monarquía parlamentaria es lo

mismo que una monarquía constitucional, esto no es exactamente así, ya que en la
primera la autonomía y poderes del monarca están bastante más limitados.

La Monarquía Constitucional y la Monarquía Parlamentaria se parecen porque se dan

con sistemas constitucionales pero son distintas.

- La primera es propia de la Revolución Liberal. La soberanía se comparte entre la

nación y la Monarquía. La monarquía conserva el poder ejecutivo con un
gobierno. Para entendernos, la Monarquía de la Restauración era Constitucional
(Alfonso XII, Regente María Cristina y Alfonso XIII).
- En la Monarquía Parlamentaria, como la nuestra actual, el rey se limita a ejercer
un poder moderador y simbólico: no es cabeza del ejecutivo, ni es poseedora
de ningún tipo de soberanía histórica. En nuestro sistema sólo hay una
soberanía: la popular.