A nuestro cerebro llegan continuamente numerosas informaciones que no pueden
ser procesadas de modo simultáneo, por lo que es necesario que exista un proceso de selección y filtro que establezca un orden de prioridades, y secuencie temporalmente las respuestas más adecuadas para cada ocasión.
La atención es la encargada de realizar el proceso de selección de la información
dentro del sistema nervioso, siendo el elemento fundamental que articula los procesos cognitivos.
La atención no es un proceso unitario, sino un sistema funcional complejo,
dinámico y multimodal, que facilita el procesamiento de la información, seleccionando los estímulos pertinentes para realizar una determinada actividad sensorial, cognitiva o motora. Consiste en la focalización selectiva hacia un determinado estímulo, filtrando, desechando e inhibiendo las informaciones no deseadas.
Dentro de la infinidad de los aspectos teóricos respecto a la funcionalidad del
procesamiento de la atención una de las teorías con las bases más fuertes es el modelo de Posner y Peterson, la cual explica cómo se produce el proceso atencional y como las bases neurofisiológicas juegan un papel fundamental dentro de la propia función como sistema regulador; estos autores establecieron un sistema modular compuesto por tres redes neuronales organizadas en sistemas:
4.1 Sistema de alerta o de vigilancia (arousal)
El sistema de alerta, es un sistema poco específico y multimodal, ubicado en las
conexiones del mesencéfalo que recibe información visual, auditiva, somestésica, etc. de diferentes aferencias. Estas vías tienen conexiones ascendentes (SARA) al tálamo y al córtex, así como descendentes y está asociado a la actividad cognitiva de focalización hacia un estímulo. Entra en funcionamiento cuando el sujeto debe estar alerta ante la aparición de un posible estímulo objetivo, durante este periodo parecen producirse una serie de cambios funcionales en el sistema atencional que preparan el cerebro para la detección rápida del posible objetivo
4.2 Sistema atencional posterior
Conformado por el lóbulo parietal posterior, ciertas áreas talámicas (núcleo
pulvinar) y los colículo superior. El sistema atencional posterior parece estar relacionado con todo lo referente al control del procesamiento espacial (Posner & Raichle, 1994), y sería el encargado de centrar la atención en la posición del campo visual donde está situado el estímulo objetivo. Para ello realiza las operaciones de desenganche de la atención del objeto en el que estaba centrado, movimiento por el campo visual hasta la nueva posición y enganche de la atención en el estímulo designado como objetivo actual.
4.3 Sistema atencional anterior
Una vez la atención ha cambiado a la nueva localización y el contenido visual de
esta zona ha sido transmitido, el sistema atencional anterior entra en juego; la principal función de este mecanismo parece ser la detección de objetos y el reconocimiento de su identidad. El sistema atencional anterior sería un mecanismo ejecutivo, que haría conscientes el objeto atendido y sus propiedades, y velaría por el cumplimiento de las metas establecidas.
Este mecanismo está formado anatómicamente por varias áreas cerebrales,
principalmente el cíngulo anterior, los ganglios de la base y el córtex dorsolateral prefrontal, es decir, las áreas que forman parte del circuito del ejecutivo central (Funahashi, 2001).
Estructuras cerebrales implicadas
4.2.4 El tálamo
El tálamo (especialmente el núcleo pulvinar) tendría la misión de «amplificar» la
información a la que el sujeto pretende o debe atender, independientemente de las áreas visuales primarias (Posner y Raichle, 1994). Su principal función es filtrar la información hacia estructuras corticales
4.2.5 Colículos superiores
Se encarga de control de los movimientos oculares y lleva los estímulos externos
al campo visual. Atención de la modalidad visual
4.2.6 Colículos inferiores
Cumple la función de la orientación con la información auditiva
4.2.7 El lóbulo parietal
Presenta diferentes funciones en la atención dando los aspectos espaciales de la
atención, un mapa que orienta y dirige a la atención hacia los estímulos que intenta localizar, y finalmente permite las relaciones espaciales del cuerpo y el espacio en el que se mueve.
Los daños al área posterior afectan al “desenganche”. Impiden dirigir el foco
atencional hacia un estímulo nuevo, negligencia de estímulos auditivos, negligencia de estímulos somato-sensitivos
4.2.8 Los lóbulos frontales
Trabajo más especializado de la atención, el papel fundamental se encuentra en el
control voluntario de la atención, la selección atencional visual-espacial. Las conexiones entre regiones frontales, parietales y del cíngulo participan en la atención dirigida. Inhibición o demora de respuestas que provienen de estructuras como el hipotálamo.
4.2.9 El cerebelo
Cumple con la función reguladora del tono y los movimientos. Implicado en el
aprendizaje de tareas motoras y no motoras. Interviene en procesos cognitivos como el lenguaje, la memoria de trabajo, el razonamiento viso espacial y la atención selectiva; y es el director y regulador del foco atencional en relación con el variable tiempo.
4.2.10 Ganglios basales
La función principal de los ganglios basales es el ser el mecanismo de atención y
de vigilancia. Un fallo en esta estructura redundaría en la capacidad de identificación induciendo probablemente conductas (visuales o motoras) de repetición o comprobación. Ya que se describe actualmente una vía directa entre la circunvolución del cíngulo y el estriado, ayudando a optimizar la atención
4.2.11 Corteza cingulada
Implicada en el control de la atención selectiva. Petrides (2000) indica que sus
funciones implican selección activa, comparación y juicios sobre la información que se mantiene en la memoria operativa y en la memoria a largo plazo. Constituiría un segundo componente de control ejecutivo, en relación muy estrecha en el mantenimiento de información activa en la corteza frontal dorsolateral y la corteza cingulada estaría más relacionada con procesos de supervisión 4.2.12 Sistema endócrino
Este sistema coordina varias hormonas, en relación con la atención libera
DOPAMINA Y NORADRENALINA, juegan un importante papel en la atención y la concentración. La SEROTONINA inhibe y disminuye nuestro estado de alerta.