Vous êtes sur la page 1sur 10

Comunicación simultánea:

un modelo para enfrentar los


déficit lingüísticos del niño
autista
Juan Martos
Anunciación Mayordomo
Socorro Puras
Centro «Leo Kanner» de A. P. N. A.

EL LENGUAJE EN EL NIÑO parte, entre los niños que hablan, el


AUTISTA lenguaje puede caracterizarse por una
«ecolalia» (inmediata o retardada) con uso
En la forma de desarrollar el lenguaje repetitivo, estereotipado y rígido de pala-
y en el uso del mismo, el niño autista es bras y frases. Asimismo, existiría una
claramente diferente a los niños norma- confusión en el uso de formas directas,
les y a otros niños con trastornos del así como un escaso control del tono,
lenguaje. Recogemos aquí resumidamen- volumen y entonación de la voz.
te las conclusiones más significativas su-
Para Rutter (1978), en casi todos los
geridas por algunos estudiosos del tema.
niños autistas se da un grave deterioro en
Kanner (1943) hacía referencia a las la comprensión del lenguaje; no entien-
peculiaridades del lenguaje en el niño den aquellas instrucciones que están
autista y las consideraba como esenciales fuera de contexto o que encierran la
para el diagnóstico del autismo. Existen combinación de dos o más ideas. Aproxi-
graves problemas de comprensión del madamente la mitad de los niños autistas,
lenguaje, que se ven incluso reflejados en y especialmente aquellos que además tie-
la escasa comprensión de la información nen un retraso mental, no llegan a
transmitida por gestos, mímica, expresión adquirir un lenguaje hablado provecho-
facial, posturas del cuerpo, etc.; por otra so, y en aquellos que lo adquieren se dan

Estudios de Psicología n.° 19-20 - 198f


Estudios
algunas anormalidades, como la existen- Recientemente se está dando importan-
cia de una ecolalia inmediata y repetición cia a los procedimientos que utilizan téc-
de frases estereotipadas durante el primer nicas de comunicación bimodal o simul-
período del desarrollo del lenguaje. El tánea (empleando al mismo tiempo pala-
lenguaje, en estos niños, no se usa en la bra y gesto). En este sentido, hemos
forma usual para la comunicación social: querido diseñar un programa de enseñan-
no existe la conversación alterna entre za del que se exponen algunos resultados
emisor-receptor. preliminares. Permítasenos, sin que ello
Otros autores, como Baltaxe y Sim- vaya a suponer un alargamiento excesivo,
mons (1975), Wing (1975), Ricks y Wing valorar las aportaciones de otros autores
(1975) y Baker y otros (1976), añaden a en este terreno.
las anomalías del lenguaje anteriormente
citadas la dificultad para la generalización
del significado de las palabras y del len- COMUNICACION SIMULTANEA
guaje abstracto (uso de preposiciones,
conjunciones, adverbios, etc.) y la dismi- «La comunicación simultánea y el "in-
nución de comunicación gestual o simbó- put" multisensorial mejoran el procesa-
lica. miento de la información, la organización
del pensamiento y experiencia y la con-
En general, para la mayor parte de los
ducta socioafectiva del niño autista». Esta
investigadores actuales el niño autista
hipótesis, planteada por Benaroya el.
tiene graves dificultades para seleccionar
(1979) y desarrollada a través del entrena-
las reglas pragmáticas del lenguaje (uso
miento de seis niños autistas con edades
del sistema); lo mismo acontecería respec-
comprendidas entre los cinco y doce arios,
to del uso inapropiado de los rasgos
llegó a resultados que indican que los
suprasegmentarios del lenguaje (entona-
niños manifestaban una consistente adqui-
ción, ritmo, tono, intensidad, etc.) y del
lenguaje no verbal (gestual) acompañante. sición del lenguaje de signos que en
algunos casos fue transferido a las habili-
Este inquietante panorama ha dado dades de comunicación verbal. Esta ad-
lugar a diferentes alternativas de enfren- quisición fue medida a través de la reali-
tar la tarea de entrenar la creación del zación de sesiones estructuradas, que re-
lenguaje (en aquellos sujetos en los que flejaron un aumento en las vocalizaciones,
no existe) o mejorar las capacidades lin- y la combinación de signos de frases y,
güísticas ya existentes. Lovaas (1 9 81) ha concretamente, el uso espontáneo de sig-
informado de resultados satisfactorios uti- nos en cuatro niños, dos de los cuales
lizando procedimientos de condiciona- eran funcionalmente mudos.
miento operante. Sin embargo, el aspecto
social y espontáneo del lenguaje parece Un trabajo de Fulwiler y Fouts (1976)
siempre quedar muy por debajo de lo que informa de que es posible la enseñanza
pudiera considerarse una norma en la del AMESLAN (lenguaje de signos ame-
comunicación real del niño «normal». ricano) en un niño autista con graves
Siguen persistiendo esquemas rígidos de perturbaciones de conducta. Estos auto-
interacción lingüística y, lo que es más res apuntan la idea de que, cuando fraca-
importante, la competencia adquirida pa- san las técnicas convencionales de modi-
rece depender directamente de factores ficación de conducta (de tipo lovaasiano) de
tales como el nivel de desarrollo global entrenamiento del lenguaje, el uso del
del sujeto y edad en que comienza el lenguaje gestual, presentando simultánea-
entrenamiento. mente palabra y signo, es apropiado para
el desarrollo de la comunicación del niño
En cualquier caso, parece claro que autista. Una observación interesante que
existen tremendas dificultades para esta- se desprende de este trabajo es la que
blecer lenguaje en niños autistas de nivel hace referencia a que el lenguaje de sig-
bajo. nos ayuda a aprender a entender las
Estudios de Psicología n.° 19-20 - 194
Estudios 6;
expresiones faciales y a mantener el con- lado, el programa facilitó la generaliza-
tacto ocular. Fulwiler y Fouts observaron ción de la conducta comunicativa, mante-
cómo, después de veinte horas de entre- niéndose las conductas adaptadas tres me-
namiento, el niño autista aprendió los ses después de la iniciación del programa.
signos, elegidos previamente por el tera- Del estudio de Casey se desprende que la
peuta, se produjo un incremento del ha- facilidad que los niños autistas presentan
bla vocal y se adquirió una sintaxis rudi- para la comprensión de gestos puede
mentaria. También observaron cómo el deberse al desarrollo más temprano en
uso espontáneo del AMESLAN se gene- tareas de discriminación visual que en
ralizó a otras situaciones y aumentó la tareas de discriminación auditiva.
interacción social. Finalmente existen un par de estudios
En esta misma dirección hay que seña- que comparan la efectividad de tres tipos
lar el trabajo de Bonvillian, Nelson y de tratamiento en el entrenamiento del
Rhine (1981), que, en una espléndida lenguaje del niño autista. Brady y Smouse
revisión sobre la enseñanza del lenguaje (1979) y Duverglas (1979). En ambos
de signos con niños autistas no hablantes, estudios se comparan tres métodos:
aportan datos de ioo niños indicando que
i. Verbalización o vocalización (en-
prácticamente todos pueden aprender a
trenamiento tradicional tipo lovaasiano).
usar los signos de forma comprensiva y
expresiva y hacer combinación de ellos. 2. Lenguaje de signos.
Concluyen que las habilidades relaciona-
3. Comunicación simultánea (que in-
das con el habla pueden ser desarrolladas
cluye el uso combinado de los dos trata-
a través de un entrenamiento simultáneo
mientos anteriores).
utilizando palabras y signos.
Los resultados de los dos estudios
A similares conclusiones llegan Kons- citados indican una sensible y efectiva
tantareas, Webster y Oxman (1979) en un superioridad del método de comunicación
estudio muy bien controlado, en el cual simultánea frente a los otros dos. Pode-
se entrena a cuatro niños autistas en un mos concluir, siguiendo a Duverglas, que:
programa de comunicación simultánea en
1. Existen diferentes interpretaciones
un período aproximado de ocho meses.
teóricas acerca de las causas e implicacio-
El estudio que analiza el número y tipo
nes de los déficits del lenguaje en el niño
de signos adquiridos evalúa los progresos
autista.
de los niños en tres categorías lingüísti-
cas: receptiva, reproductiva y elicitada; 2. Los problemas de lenguje son úni-
óbservándose cambios significativos en el cos en el niño autista y se extienden a
áprendizaje del niño y efectos positivos todo el lenguaje hablado.
sobre la interacción social evaluada en
una situación de juego libre. 3. Existe una enorme variabilidad en
las habilidades lingüísticas del niño autista.
Aunque son más infrecuentes los tra-
4. El empleo de métodos operantes
bajos que informan sobre la implicación
para entrenar el lenguaje espontáneo no
de los padres en la utilización de progra-
ha resultado siempre en un uso funcional
mas de signos con sus hijos autistas,
de lenguaje.
Casey (1978) ha elaborado un programa
para padres —entrenados en el uso de los 5. Parece que se obtienen mejores
signos durante 20 sesiones de cuarenta y resultados, en el aspecto espontáneo, con
cinco minutos—, aplicado por ellos mis- el empleo de lenguaje de signos.
mos en casa y completado con un entre-
6. Los datos empíricos avalan la su-
namiento en clase. Este programa consi-
perioridad del método de comunicación
guió un aumento de las conductas comu-
simultánea.
nicativas (se usó una línea base múltiple
como medida de contrastación). Por otro 7. La comunicación simultánea ayuda

Estudios de Psicología 19-20 - 198s


66 Estudios
a entender las expresiones faciales y el El niño (sujeto 2) presentaba también
mantenimiento del contacto ocular. un gran déficit a nivel cognitivo-verbal,
8. El entrenamiento en comunicación que se concretaría en un nivel de desarro-
simultánea puede generalizarse a otras llo aproximado de un ario, siendo ligera-
mente superior en el área motora y social
situaciones y favorecer la interacción so-
(tres arios). El comportamiento general
cial.
del niño se caracterizaba por cierta inflexi-
Animados por estas conclusiones, nos bilidad ‘afectiva, alteraciones perceptivas,
decidimos a poner en marcha un proceso ciertas .autroagresiones producidas por
de entrenamiento que detallamos a conti- emociones (mordiscos en las manos), mue-
nuación: cas corporales y estereotipias con los
dedos de la mano.

Método En ambos niños existe ausencia de


lenguaje expresivo, graves dificultades ar-
El estudio fue diseñado como experi- ticulatorias, dificultades de comprensión
mento y tratamiento para comprobar la y una gran dificultad para comprender y
eficacia del uso del lenguaje gestual en utilizar gestos. Con ambos niños se ha-
niños autistas. bían ensayado procedimientos tradiciona-
les de enseñanza del lenguaje, en su as-
pecto receptivo, no obteniéndose ningún
Sujetos y marco resultado concluyente.

El estudio fue realizado con dos niños


diagnosticados como autistas, escolariza- Procedimiento
dos en un centro dedicado al tratamiento
de niños autistas y con problemas de la El objetivo del estudio en su primera
comunicación. Cada uno de ellos pertene- fase consistió en entrenar a los niños en
ce a distinta clase, siendo el criterio de la comprensión de 24 órdenes sencillas
asignación a la misma el nivel de desarro- verbales acompañadas de gestos, utilizan-
llo así como la edad de ambos. Cada clase do como metodología básica las técnicas
está compuesta de un mínimo de tres y de comunicación bimodal que recoge
un máximo de cinco niños, estando al Marc Monfort en su libro Programa ele-
mental de comunicación bimodal. Hemos se-
frente de la misma una terapeuta.
leccionado algunos ejemplos gráficos de
estas órdenes:
Características de los sujetos Ambos niños poseían los requisitos
necesarios para el entrenamiento: contac-
Los sujetos eran un niño y una niña de to ocular, atención en tareas, buen nivel
8,o y de 11,2 arios, respectivamente. Am- de imitación y discriminación perceptiva.
bos poseen hermanos y el nivel económi- Cada niño fue entrenado por su tera-
co de la familia es de tipo medio. La niña peuta en sesiones individuales de media
(sujeto i) presentaba un gran déficit a hora de duración y durante un período de
nivel cognitivo-verbal, que, medido en
cuatro meses. Los pasos del programa
edad de desarrollo, correspondería a un fueron los siguientes:
ario, siendo su nivel de desarrollo en
otras áreas (motriz y social) de tres-cuatro . Período de línea base inicial: el
arios aproximadamente. La conducta de registro de la línea base consistió en
la niña se caracterizaba, en general, por computar durante tres días consecutivos
cierto rechazo al contacto con el adulto, el porcentaje de RRCC (respuestas correc-
invarianzas ambientales, estereotipias con tas) que el niño ejecutaba una vez que el
los dedos de la mano y utilización este- terapeuta emitía simultáneamente la orden
reotipada de objetos. verbal y su gesto correspondiente. Cada

Estudios de Psicología n.. 19-20 - /.98;


67
Estudios

FIGU RA 1

Estudios de Psicología a.. 19-20 - 198).



68 Estudios

CO RRER

FIGURA z

Estudios de Psicología tr. ,' 19-20 - 194


Estudios 69
orden se presentó dos veces y se tomó la sesión, quién la registró, las órdenes
como criterio de respuesta correcta el empleadas como estímulo discriminativo
cumplimiento de la orden en un período (E-a), así como las respuestas correctas
de tiempo no mayor de tres segundos. (RC), las respuestas incorrectas (RI) y las
Durante esta fase no se empleó ningún ayudas (Ay) o instigación física.
tipo de reforzamiento. Como respuesta correcta, consideramos
2. Período de entrenamiento: el pro- la ejecución de la orden emitida por el
grama de entrenamiento propiamente di- terapeuta en un período no mayor a tres
cho se inicia con la presentación de cinco segundos. La respuesta incorrecta fue
órdenes, cuya probabilidad de respuesta considerada como aquella en que el perío-
correcta era mayor que otras, puesto que do de latencia era mayor a tres segundos
el niño comprendía algunas de ellas (se o bien cuando el sujeto confundía la
utilizó como criterio de selección de las orden dada. La ayuda o instigación física
cinco órdenes el registro de la línea base consistió en que el terapeuta realizaba,
inicial); si el niño no efectuaba alguna de conjuntamente con el niño, la orden emi-
las mismas, se empleó un instigador físi- tida o cuando aquél señalaba el objeto del
co, que se iba reduciendo gradualmente cual se tenía que valer el niño para
hasta desaparecer. A continuación se in- ejecutar la orden.
troducen nuevas órdenes con las que se
seguía el mismo procedimiento. Una vez
adquiridas estas últimas, se rotaban con Resultados
las anteriores, es decir, se le presentaban
al niño, en una misma sesión, todas las
órdenes trabajadas hasta el momento. Así Los resultados del sujeto 1 vienen da-
se continuó hasta la finalización del pro- dos en 43 sesiones:
grama. En esta fase se administró recom- 3 de línea base.
pensa social y primaria después de cada 31 de entrenamiento.
una de las órdenes ejecutadas. 3 de línea base final con gesto.
3. Período de evaluación: como me- 3 de línea base final sin gesto.
didas de evaluación, al final del entrena- 3 de generalización.
miento, se realizaron: Los resultados del sujeto 2 vienen da-
dos en 59 sesiones:
a) Una línea base final con gesto
para comparar la eficacia o no del progra- — 3 de línea base.
ma de entrenamiento. — 45 de entrenamiento.
— 4 de línea base final con gesto.
b) Una línea base final sin gesto para — 4 de línea base final sin gesto.
observar el grado de dependencia que — 3 de generalización.
cada sujeto tenía del gesto.
Partimos, en ambos sujetos, de una
c) Para comprobar el nivel de gene- línea base; en el sujeto i con un porcen-
ralización, se introdujeron para ambos taje del 21,3 por loo de RRCC, y en el
sujetos cinco órdenes nuevas, aumentán- sujeto 2, con un porcentaje del 18 por
dose datos a lo largo de tres sesiones. oo de RRCC a las 24 órdenes. Nuestro
En esta fase no se administró ningún objetivo se consideraba logrado si los
tipo de reforzamiento. sujetos llegaban a alcanzar el porcentaje
de RRCC del 85 por ioo. Cada paso del
programa consistía en el entrenamiento
Registro de órdenes nuevas o de rotación de órde-
nes adquiridas, siendo también el criterio
Todas las sesiones eran registradas en para la introducción de un nuevo paso la
hojas estandarizadas en las que iban espe- realización de las órdenes en un 85 por
cificados el nombre del niño, la fecha de oo de los ensayos presentados, con una

Estudios de Psicología u.. 19-20 - 198;



70 Estudios

\—.......___
\

,
.›

..,

., ,. ..
;\
i -, ,- ,
li 1 1\11i i ' \u! -s. / s' i \
r -....; y,. 9 1,- .awal
VI I t . n x n':
A ..‘ 1 i» ›. » 1/

FIGU g A 3

ayuda máxima del io por ioo. El número liares para el sujeto debido a la naturaleza
de sesiones para cada paso variaba según de la tarea. Además, es de destacar que el
la dificultad que el niño encontraba para porcentaje de RRCC es más alto que en
llevar a cabo la orden presentada. el período posterior.
En el programa de entrenamiento se En el segundo período, posterior a
observan dos períodos: vacaciones, en el sujeto i el nivel de
1. Anterior a las vacaciones de vera- ayuda se mantuvo más estable, y se con-
no, constando de 19 sesiones en el suje- siguieron más órdenes en menos sesiones,
to i y de 22 sesiones en el sujeto 2.. En debido a que la niña llega a comprender
este período se llevaron a cabo los cuatro la tarea. En el sujeto 2, las ayudas aumen-
primeros pasos del programa. tan justo al volver a retomar el entrena-
miento y, además, la media de RRCC es
2. Posterior a las vacaciones, constan- ligeramente inferior al período anterior
do de 13 sesiones en el sujeto i y de 22 de vacaciones. Es de resaltar, a pesar de
sesiones en el sujeto 2. este resultado, que en este período el
En ambos sujetos hay que destacar sujeto conseguía las órdenes más rápida-
ciertas diferencias. En el caso del sujeto i, mente, aunque eran introducidas más den-
en el período anterior a vacaciones el tro de cada paso y no eran conocidas.
porcentaje de ayuda es superior. Esto Al final del entrenamiento se hicieron
puede ser debido a que el comienzo del dos líneas base, una con gesto y otra sin
entrenamiento tuvo cierta dificultad de gesto. En el caso del sujeto 1, la línea
comprensión de la tarea. En el caso del base con gesto se realizó durante tres
sujeto 2, sin embargo, se percibe que el días, y el porcentaje de RRCC fue del 95
porcentaje de ayuda era inferior en el por ioo. En el caso del sujeto 2, la línea
primer período de entrenamiento (antes base se realizó durante cuatro días, y el
de las vacaciones), y esto se puede expli- porcentaje de RRCC fue del 96 por ioo.
car por el hecho de que las órdenes la línea base del sujeto i sin gesto a lo
trabajadas en ese período eran más fami- largo de tres días arrojó un 90 por ioo de
Estudios de Psicología a.. 12-20 - 198f

Estudios 7
9.;
e.». 4 P40.15

Pes* G

Poso?
loo -
Tose 1 Pese 2 Pese 5

90

TO
O
e
so a
1..

50 t.
'II
et
40 1
..1 -N.
30
1 i
u '
zo } %
.1 . ít.
s.j •.4. / .I. .\
1.0
r• ..... i f, • X f's
4

x 1 t . \ , '-- \ I • .'''
1 1 1 1 I 1 11 1 f 1 1 1 Is-4,1•4...1,,,I.-1.-/ 1 1 11. 1 1/ 1 'I. 1 11 1 1; II ‘4.-t..-riL \t. 1 1 II 1 11 1 1
o ›,e4nvd,aeok.c0<fleae.NR,3,,,01.--,1061.•••.7<" n$,PUDh•-•-...5.119,1•1"li.21,91.-.91:12!_t2t1‘..tt"--.9119S911;...111P..211

FIGURA 4

RRCC, y en el caso del sujeto 2 a lo largo decrecen rápidamente en el transcurso del


de cuatro días arrojó un porcentaje de programa. La constatación de que, aun
RRCC del 65,75 por 000. cuando se retira el gesto, se mantiene un
Con respecto a la generalización, el nivel óptimo (del 90 por ioo en el sujeto
porcentaje de RRCC en el caso del sujeto o y del 65,75 por 000 en el sujeto 2) de
o fue de un 8o por ioo, y en el caso del ejecución, valida los procedimientos de
sujeto 2 el porcentaje de RRCC fue de un utilización de comunicación simultánea,
20 por 000.
al menos como soporte básico, fundamen-
tal y complementario para establecer un
mayor nivel de comprensión en el niño
autista. Las diferencias observadas en
Discusión
cuanto a dependencia del gesto en ambos
sujetos, parecen estar en relación, por un
Los resultados obtenidos confirman lado, con el nivel de discriminación per-
nuestros ánimos y están de acuerdo con ceptivo y, por otro, con la comprensión
las conclusiones a las que hacía referencia de la tarea a realizar. Desde este punto de
Duverglas. En ambos sujetos se ha ope- vista, y como veíamos antes, el gesto
rado una comprensión significativamente puede ayudar significativamente a una
mayor de las órdenes entrenadas si com- mejor ejecución de las tareas propuestas.
paramos el período de línea base inicial y
el período de evaluación final. La utiliza- Los datos que se aportan en el período
ción simultánea de palabra gesto ha re- de generalización son importantes y a
dundado en beneficio de ambos sujetos, tener en cuenta. Al menos en uno de los
fomentando de paso un mayor rendimien- sujetos se ha operado significativamente
to en tareas de atención e imitación. Una una buena comprensión de órdenes no
observación interesante y común a ambos entrenadas previamente.
sujetos es cómo, a medida que transcurría Quizá el aspecto más interesante, que
el entrenamiento, se constataba un mejor no refleja este artículo, pero que ha em-
aprendizaje de las órdenes, aunque en pezado a ocurrir con cierta frecuencia en
cada paso del programa se incluyera ma- uno de los sujetos, es la utilización de
yor cantidad de ellas. La instigación física gestos en situaciones funcionales como
o señales que se utilizaban como ayuda medio de comunicación con el terapeuta.
Estudios de Psicología n.. 19-20 - 1981
72 Estudios
Aquí juega, evidentemente, un papel muy simbólico. Este puede ser el primer paso
importante la imitación y, en concreto, la para que el niño autista establezca comu-
posibilidad de realizar imitación diferida nicación con el entorno que le rodea y
que presupone ya la existencia de imáge- salga del aislamiento al que su enferme-
nes mentales concretas con contenido dad le tiene sometido.

Referencias
BAKER, L.; CANTWELL, D.; RUTTER, M., y BARTAK, E.: «Language and Autism». En RITVO, E. (Eds.):
Autism: Diagnosis current research and management. Nueva York. Spectrum, 1976.
BAI.TAXE, A. M., y SIMMONS, J. A.: «Language in childhood psychosis: a review». Journal of speech and
hearing disorders, 1 975 , 40, 439.
BENAROYA, S.; WESI.EY, H.; OGILVIE, L. S.; KLEIN, y CLARKE, E.: «Sing language and Multisensory
input training of children with communication and related developmental disorders». Journal of atdism
and developmental disorders, vol. 9, núm. 2, 1979.
BONVILLIAM, J. D.; NELSON, R. E., y RHYNE, J. M.: «Sing language and autism». Journal of autism and
developmental disorders, vol. ji, núm. 1, 1981.
BRADY, D. O., y SMOUSE, A. D.: «A simultaneous comparison of three Methods for language training with
an autistic child: an experimental single case analysis». Journal of autism and childhood schizophrenia, vol. 8,
núm. 3, 1978.
CASEY, L. O.: «Development of communicative behavior in autistic children: a pavent program using
manual signs». Journal of autism and childhood schizophrenia, vol. 8, núm. 1, 1978.
DUVERGLAS, G.: «Comparison of three language trainig methods in mute autistic children». University of
Washington. Seatle, 1979.
FÜLWILER, R. L., y FOUTS, R. S.: «Acquisition of American sign language by a Noncommunicating autistic
child». Journal of autism and childhood schizophrenia, vol. 6, núm. 1, 1976.
KANNER, L.: «Autistic disturbances of affective contact». Nervous child. 1943, 2, 217-250.
KONSTANTAREAS, M. M.; NEBSTER, C. D., y OXMAN, J.: alternative to speech training: simultaneous
communication». Journal of child prychology and psychiatry, 1979.
LOVAAS, 0. I.: The autistic child. Irvington Publishers. Inc. 1979. Nueva York. Traducción castellana: El
niño autista. Edit. Debate, 1981. Madrid.
MONFORT, M.; ROJO, A., y JUÁREZ, A.: Programa elemental de comunicación bimodal. Ed. CEPF _, 19_R 2.
POLAINO, A.: Introducción al estudio científico del autismo infantil. Ed. Alhambra Universidad. Madrid, 1982.
RICKS, D. M.: «Vocal communication in pre-verbal normal and autistic children». En O'CONNOR, N. (ed.):
Language, cognitive deficits and retardation. Butterworths. Londres, 1975.
RIVIÉRE, A., y BELLINCHÓN, M.: «El lenguaje en el niño autista». Infancia" aprendizaje., vol. 13, julio 1981.
RUTTER, M.: «Language disorder and infantile autism». En Autism, M. R urrER y E. SCHOPLER (Ed.):
Plenun Press, 85-105, 1978.
WING, L.: «Study of language impairments in serely retarded children». En O'CONNOR, N. (Ed.): Language,
cognitive deficits and retardation. Butterworths. Londres, 1975.
WING, L.; EVERARD, M. P., y otros: Autismo infantil. Aspectos médicos, educativos. Ed. Aula XXI. Santillana.
Madrid, 1982.
WEBSTER, C. D.; MCPHERSON, H.; SLOMAN, L.; EVANS, M. A.; KUCHAR, E., y FRUCHTER, D.: «Gestures
as a means of communication with an autistic boy: a case study». Journal of autism and childhood
schizophrenia, 3 , 337 -46, 1973.

Resumen
El empleo de procedimientos de comunicación simultánea, en el tratamiento de los niños
autistas, es una de las vías más prometedoras para incrementar la competencia comunicativa de
estos niños. En este artículo se revisan los resultados del tratamiento de dos niños autistas con
métodos de comunicación simultánea y las implicaciones de este método para el tratamiento de los
niños autistas.

Summar'
The use of simultaneous communication methods for the treatment of autistit children is one
of the most promising ways for increasing the communicative competente of these cbildren. In tbis
paper, the results of the treatment of two autistic children with simultaneous communication
methods and its implications are revised.

Estudios de Psicología n. , 19-20 - 1981

Vous aimerez peut-être aussi