Introducción

Las bombas son dispositivos que se encargan de transferir la energía a

la corriente del fluido impulsándolo desde un nivel inferior hasta la parte
superior con mayor presión, se puede concluir que la mayor importancia de la
bomba es poder elevar el agua a un nivel más alto en donde se ubican los
tanques de almacenamiento y distribución para que luego el agua llegue por
gravedad a los distintos sectores de la comunidad.

Un sistema de bombeo no se mantiene sólo. Por lo que el

mantenimiento de estas es primordial. La frecuencia de mantenimiento no es la
misma para todas las bombas, sino que varía con las condiciones del servicio
debido a que las bombas representan una parte vital de las operaciones de un
proyecto y su adquisición constituye un proceso difícil y lento, hay que dedicar
atención especial a la operación y al cuidado de las bombas.

La finalidad del mantenimiento de equipos de bombeo es tratar de

obtener el máximo de eficiencia y el mínimo de reparaciones, Una inspección
periódica resulta económica en comparación con las apagadas forzosas
debidas a daños o fallas de las diferentes partes de la bomba. Las
inspecciones de la bomba deben hacerse bimestral o anualmente, según la
clase de servicio; mientras más pesado sea el servicio más frecuentemente
debe ser la inspección. La inspección debe ser completa y debe incluir un
chequeo cuidadoso de las tolerancias entre las partes giratorias y las
estacionarias, así como el estado en que se encuentran todas las partes
expuestas a roce o a daños causados por arenisca y/o corrosión.
 Fallas generadas en los equipos de bombeo:

Uno de los habituales problemas es el atascamiento, es decir, la

obstrucción de las ruedas de paletas de las bombas. Este inconveniente es
responsable de miles de horas de mantenimiento en las estaciones de bombeo.
La limpieza manual es una tarea costosa y desagradable que requiere un
equipo de mantenimiento e incluso en ocasiones el uso de una grúa. El sistema
anti atascamiento evita la obstrucción de las bombas y de las tuberías
mediante la puesta en marcha de una secuencia de avances y retrocesos en la
bomba, con el objetivo de limpiar la rueda de paletas. El rendimiento de
cualquier equipo de bombeo decae a lo largo de su vida útil por el desgaste y la
oxidación, estimándose este desgaste en hasta un 20 por ciento de forma
normal durante los dos primeros años de funcionamiento, en particular los
equipos de bombeo tienen un componente de vibración importante en la
frecuencia de paso de álabes.

Existen algunas recomendaciones que pueden ayudar a reducir al

máximo esta baja en el rendimiento de los equipos:

1. Revisar si la bomba que se utiliza es la más adecuada para realizar el

trabajo en cuestión.

2. Revisar si el montaje de la bomba fue el idóneo ya que si éste es inadecuado

el eje funcionará deficientemente.

3. Verificar si los diámetros de la tubería son los correctos para evitar el

fenómeno de la cavitación (aspiración al vacío).

4. Verificar que el aire se purga e forma adecuada ya que pequeñísimas

porciones de este puede afectar el funcionamiento.

5. Evitar el funcionamiento en seco.

6. Los sellos mecánicos, aros de desgaste y rodamientos se pueden desgastar

más rápidamente si la bomba opera con una presión alejada de su punto
óptimo de rendimiento (POR).

7. Los rodamientos se gastan más rápido si la grasa utilizada está contaminada

o sucia.
8. El aceite de lubricación debe cambiarse en los tiempos programados con
rigurosa exactitud. El peor enemigo del aceite es el agua.

9. Evite el contacto con las piezas giratorias.

10. Evite anular cualquier protector o dispositivo protector.

11. Evite la exposición cercana a maquinaria con altos niveles de ruido.

12. Sea cuidadoso en la manipulación, levantamiento, instalación, operación y

mantenimiento del equipo.

13. No modifique el equipo.

14. No sustituya las piezas de repuesto con otras que no sean del fabricante
del equipo.